Continuación del pasado no perdona:

VINCULO DE SANGRE:

Por Sybill

"La vida es como una serpiente... una serpiente que se muerde la cola"

Fragmento de Diario.  Mayo 23 del año del Dragón.

Era un día de verano, hacia calor y me dispuse como todos los días a ir al último día de escuela;  próximamente cumpliría once e iría a estudiar a una escuela de magia; yo siempre supe que era mago, siempre, desde el primer instante en que abrí los ojos y pude entender el mundo sabía que tenia poderes. Mis padres estaban preocupados por que según ellos decían que yo mostraba ciertas habilidades que no eran propias de un niño de mi edad. Decían que debía estar enfermo, o algo así. Mi madre en especial estaba muy afanada por mi, decía que mis poderes se manifestaban con mucha facilidad, y eso le preocupaba; a mi padre sin embargo poco le importaba que fuera diferente, el siempre veía las cosas mas negativas en mi; hasta el momento de hoy estoy seguro de que me odiaba; no se porque razón pero así era. Quisiera decir que papá me quería, de verdad quisiera creerlo, mas sin embargo su forma de ser con migo siempre me decía lo contrario; muchas veces me pegaba, me pegaba fuerte y yo le tenia miedo. Mamá sin embargo era una cosa aparte, ella me quería, a veces me miraba con sus ojos como si viera a otra persona; no se si solo era mi impresión. Tanto papá como mamá eran viejos, mucha gente se sorprendía al conocerme y le preguntaban a ella como había hecho para engendrarme; ella decía que aunque a su edad era estéril deseaba tanto tener un hijo que entre mi padre y ella hicieron algún tipo de invocación para que yo naciera; a muchos esto les parecía raro; mis padres eran prácticamente unos ancianos, no eran del todo viejos, pero aún así no tenían edad para tener un hijo; sin embargo no podían negar que era de la familia,  yo me parecía a mi padre; mi mamá en ocasiones me decía que todos los Snape tenían esos ojos oscuros y penetrantes que eran muy característicos de nuestro linaje, también decía que me parecía a mi hermano mayor, a quien nunca había conocido; él se había ido de la casa desde muy joven; mi padre decía que el era un perdedor pero mamá lo recordaba con cariño; no se porque pero nunca recibimos una carta suya.

Yo no soy un chico con muchos amigos, la verdad casi no tengo; mi único amigo no es humano, en realidad es un cuervo y su nombre es "Vender". Me gustan los cuervos son animales muy inteligentes, como yo.  todas las personas adultas que conozco dicen que soy  "perspicaz",  y los cuervos son animales con una inteligencia que asombran; por eso me gustan; y además es que no se pero puedo comunicarme con ellos; no quiero decir que "converse con ellos", no, lo que pasa es que cuando "silbo" los llamo, y vienen a mi una cantidad sorprendente. Esa es una de las razones por las que mamá esta preocupada, dice que no es normal que atraiga a ese tipo de animales; pero en realidad a mi no me importa; es bueno tener a un cuervo como amigo.

 Los chicos de la escuela dicen que soy raro,  lo dicen porque casi no hablo y  no tengo amigos. La razón por la que no hablo es porque ningún chico me parece que sea lo suficientemente inteligente para hablar con migo, todos salen con unas bobadas que a veces me sorprenden, además tampoco ellos me hablan a mí. A veces pienso que la gente me tiene miedo,  bueno en realidad sé que me temen, no se como explicarlo pero es algo que hay en mi, es como un séptimo sentido, en ocasiones me doy cuenta solo con acercarme a alguien  si la persona esta triste, feliz o angustiada. Siento que la gente me trata con reserva, y saben no me incomoda para nada que me tengan miedo, en cierta forma me gusta.

Hay algunos chicos que me tienen rabia, en otras palabras no les gusto, no se porque...,   han tratado de golpearme varias veces y no han podido salir airosos. Yo soy un chico pequeño, soy flaco y parezco débil, pero eso es solo en apariencia; una de las razones por las cuales mis padres se alarman es que parece que tengo mucha fuerza y además pego duro. Tengo que confesar que  una de las razones por las que me tienen miedo es porque a mas de uno le he dado una paliza; pero no quiero que me malinterpreten, yo no soy de la clase de niños que les gusta pelear por todo, y ganarse las cosas a través de los golpes; lo que pasa es que no soporto que algunos bribones  pretendan  intimidar y conseguir las cosas por las malas; tampoco soporto que me insulten o me hagan daño. Mis padres, (y en especial mi padre) dice estar muy decepcionado de mi, porque  mensualmente reciben muchas quejas de las escuela, diciendo que yo tengo un serio problema de adaptación; esto dio pie a que papá me tratara de "inadaptado social", como si fuera algún tipo de delincuente.

Papá siempre me trata así, es doloroso para mí que siempre me trate mal, cuando no me grita o me pega, usualmente siempre me hiere con sus palabras. Yo puedo ser muy duro con los desconocidos que me hacen daño, pero con mi padre lo único que puedo hacer es llorar. Mamá dice que tengo tierno el corazón y que por eso lloro tanto. Mi papá dice que soy un maricón; y que eso debe estar en mis genes; bueno en fin, la cuestión es que se me escurren las lagrimas con mucha facilidad, pero solo con las personas que quiero y a las que debo respeto; con el resto de las personas mas vale que me tengan cuidado.

Mamá trata de hacer lo que puede para defenderme, pero lo que pasa es que mamá ha estado enferma; no es nada grave, por lo menos eso dice el medimago; pero aún así ahora descansa mucho, y mientras ella trata de dormir la siesta, a mí me toca enfrentarme con mi padre. Ella sabe como él me trata, y en algunas ocasiones no dice ni hace nada al respecto. Uno de los elfos domésticos de la cocina me dijo que papá era así también con mi hermano, pero que mi madre en ese entonces controlaba más su ira; sin embargo ahora que ha estado enferma las cosas han cambiado.

Yo no quisiera quejarme, la verdad es que llevo una buena vida, nunca me ha faltado nada, y usualmente tengo todo lo que necesito y hasta un poquito mas; mis padres han pensado en llevarme a estudiar al extranjero, después del verano iré a estudiar a Beauxbatons a Durmstrang; papá prefiere la segunda dice que allá la educación es excelente, mi madre por su parte piensa que Beauxbatons es la mejor, por que quiere que aprenda francés... bueno independientemente a donde valla se que me va tocar aprender otro idioma, ambos colegios quedan fuera de Inglaterra, y algunos quedan muy lejos. Pero creo que lo mas seguro es que valla a Durmstrang pues papá dice que de ahí salen los mejores magos.

Sin embargo hay una cosa segura; no estudiare en el mejor colegio de magia de Inglaterra "Hogwarts"; mis padres están de acuerdo de que por ninguna razón iré a estudiar allá, cuando trato el tema son tan tajantes al decirme "no"; que ya me resigne a la idea de irme del país. No se porque no quieren que estudié allá, me parece un poco extraño, tanto mi madre como mi padre aprendieron todo lo referente a la magia en Hogwarts, y personalmente no pienso que sea un mal sitio para aprender... pero bueno yo no tengo ninguna autoridad para decidir; además apenas llego la carta de Hogwarts diciendo que me había aceptado para comenzar mis estudios, mi padre mando una lechuza diciendo que agradecía la oportunidad, pero que yo ya tenia cupo en otra escuela.

Es interesante como las cosas se dan en la vida, yo soy de los que piensan de que existe el destino, es decir que existe cierto camino que inevitablemente a todos nos toca vivir, y ese destino (en mi opinión), comienza desde que ha uno le asignan un nombre: Mi nombre es Damián; he investigado mucho acerca de los significados de los nombres, y el mío particularmente tiene muchos significados, por una parte sé que es de origen griego, los cristianos asocian mi nombre a "aquel que surgió del pueblo", en realidad no entiendo mucho este concepto, además yo no me identifico tanto con los cristianos dado en casa no tenemos una creencia religiosa definida (papá es de los que cree que la religión entorpece el obrar mágico). Sin embargo hay otros conceptos que me llaman mas la atención; uno de ellos dice que mi nombre no tiene un origen conocido, y que es asociado a la diosa Damia, que es una deidad llena de fortaleza y famosa por dominar animales; es así que mi nombre significa "domador ó el que doma".  Me encanta esta definición, en realidad me gusta mucho; aunque para serles sincero no se en que se relaciona con mi persona.

Así como el nombre se relaciona con nuestro destino hay muchas otras cosas que la vida nos da y que nos indican nuestro futuro, desafortunadamente para mi, en este momento de mi vida no tengo ni la mas remota idea de lo que me valla a pasar, lo único que sé por el momento es que hoy iré a la escuela primaria por ultima vez, y que luego me iré a estudiar al extranjero.

Fin del Fragmento.

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Era un día común en Hogwarts; estaba comenzando el calor propio del comienzo del verano; todos los profesores y alumnos se preparaban para finalizar el año académico; por los corredores se oían risas y voces de cientos de afanados jóvenes que se encontraban en la hora del descanso. Sin embargo el barullo del exterior se oía como un débil sonido en la parte baja del castillo.

Atravesando una serie de pasillos entrecruzados y bajando algunas escaleras se llegaba a la sección del castillo más oscura. Hace mucho tiempo esta parte era utilizada como prisión para malhechores; pero después de la fundación del colegio toda esta parte fue adaptada para que sirviera como aulas.

Cerca de allí, en una oficina ubicada en la mitad de un gran pasillo, un hombre con aspecto recio calificaba algunos trabajos; leía ensimismado una pequeña torre de pergaminos que tenia al lado derecho y con una  pluma se disponía a tachar y hacer anotaciones en los mismos. Mientras leía se observaba que hacia una pequeña mueca de desaprobación mientras pensaba en lo mal que podían contestar algunos alumnos:

 "Ja... tenia que imaginarme que contestaría algo así ese insulso niño de Huffelpuf", "Debí haber imaginado que no sabría la respuesta", "bueno por lo menos  este escribió lo que era"; "aceptable, pero no esta del todo bueno, se merece un 4", "Este chico de Griffindor tendrá que hacer un gran esfuerzo en el examen practico para aprobar"

Los pensamientos seguían unos tras otros; usualmente siempre aprovechaba los descansos para calificar los trabajos que les dejaba a sus alumnos. Era un buen sistema el dejarles bastante tarea, dado que así  les tocaría obligatoriamente investigar (cosa que pocas veces hacían por si solos). Había algunos buenos alumnos, pero la mayoría eran demasiado regulares y mediocres al preparar pociones; él sabia que no era una labor para todos; había que tener cierta habilidad y vocación para prepararlas; recordaba en algunas ocasiones las palabras sabias de su antiguo colega el señor Browse "la mayoría de los magos son unos completos incompetentes para preparar pociones", cada día se daba cuenta de que tan cierta era esa afirmación; por mas que el se esforzara había algunos alumnos que simplemente no tenían la habilidad, o no les gustaba prepararlas (aunque fueran inteligentes).

Habían pasado solo algunos años desde que el profesor Dumbledore le había invitado a acompañarlo como profesor en Hogwarts; sin embargo una cosa era segura; Severus Snape  estaba en Hogwarts para enseñar pociones no para hacer amigos. La mayoría de los alumnos le odiaban, y los profesores... bueno... trataban de tener buenas relaciones con él. Muy en su interior a Severus le gustaba su trabajo: era jefe de Slytherin y el dar clase le daba cierta concepción de poder; en cierta forma le gustaba dominar a sus alumnos y disfrutaba cuando los corregía de forma hiriente (especialmente cuando eran chicos de otras casa diferentes a Slytherin); el enseñar le daba una nueva concepción de la vida, transmitía conocimientos y podía decirse que al final de los años académicos solía estar muy satisfecho, porque aunque sus clases tenían fama de "terribles" no había duda que el ser tan estricto y dejar tanta tarea hacia que sus alumnos de una u otra manera aprendieran las lecciones.

Sabia que tenia muchas mas cosas que transmitir; por eso desde el primer momento quiso tomar la asignatura de defensa contra las artes oscuras, se dio cuenta que los profesores de esas materias no les enseñaban lo suficiente a los alumnos, el sabia lo importante que había sido para él saber de artes oscuras en diferentes momentos de la vida, y tenia la seguridad que él sabia mucho mas del tema que muchos de sus colegas, pero sin embargo aunque en varias ocasiones se lo había planteado abiertamente al profesor Dumbledore el nunca le había entregado la asignatura; Severus no conocía exactamente las razones... pero Dumbledore se había negado en todas las ocasiones; explicando que necesitaba mas un buen profesor de pociones.

Severus sabia que era apto para el puesto, hace unos años el debió utilizar todos sus conocimientos en artes oscuras para permanecer desapercibido entre los mortífagos, y el mismo Lord Voldemort. Sabia lo importante que era tener un buen profesor en defensa contra las artes oscuras, y sin embargo parecía ser que todos los profesores que pasaban por la materia ninguno, en concepción de Severus cumplían con los requisitos básicos para dictar la materia... unos profesores eran peores que otros... pero una cosa era rara... ninguna persona duraba mucho en el cargo... era extraño, pero parecía no haber profesor que aguantara mas de dos años académicos máximo en la asignatura. Por ejemplo este año se marchaba el profesor Font después de renunciar supuestamente por que se encontraba enfermo... sin embargo a Severus no le complacía esa explicación, el siempre creyó que Font era un completo inepto al cual le había quedado grande la materia.

Severus era aún joven, sin embargo su aspecto rígido lo hacían ver como un hombre mucho mayor. A él poco le importaba lo que pensaran sus alumnos u otros profesores sobre él, algunos sabían su pasado como mortífago, y eso hacia que le tuvieran algo de respeto; el a su vez trataba de llevar relaciones armoniosas con el resto de los docentes, aunque no podía evitar cierta rivalidad con los jefes de las otras casas. Con la profesora McGonagall aunque llevaban una relación de mutuo respeto,  había una rivalidad encubierta. Lógicamente ella como jefe de Gryffindor apoyaba a su casa un 100% y Severus Snape quien era un orgulloso Slytheriano  no podía evitar en  conversaciones informales (en las comidas o en la sala de profesores)  mencionar algún comentario con respecto a la copa Quidditch. Todos los años los partidos Slytherin- Gryffindor eran muy disputados y tenían un gran valor no solo para los jefes de las casa sino para los alumnos que se tenían una obvia y clara rivalidad. Y este año  afortunadamente para Slytherin habían tenido un rendimiento implacable y además de ganar la copa deportiva, iban en el primer lugar para ganar la copa de las casas.

Esto a Severus le complacía, ni siquiera cuando el estaba estudiando había tenido tantos éxitos... se sentía tan orgulloso. La profesora McGonagall por su parte no le gusto para nada la idea de que Gryffindor quedara en segundo lugar, y tampoco quería mostrarle mucha importancia a Severus, dado que no había cosa que a el le gustara mas que ver la sensación de derrota en sus colegas. Sin embargo había ocasiones en que los profesores no podían evitar sentirse notablemente desilusionados.

- RINNNNNN

Un sonido distrajo a Severus de su labor... dejo los pergaminos a un lado de su escritorio; miro su reloj y se dio cuenta que en cinco minutos comenzaría la clase con los de Ravenclaw y Hufflepuff de segundo año. Suspiro al darse cuenta que tendría que regresar a  clase, hoy estaba un poco cansado. Salio de su oficina y la cerro con un hechizo, y al salir se dio cuenta que ya lo esperaban un grupo de bulliciosos jóvenes, el abrió bruscamente la puerta y los hizo pasar a clase. Esta era la última clase del día, después podría ir a descansar en su habitación.

Después de clase salio de mal humor, no soportaba a los alumnos incompetentes. Se podía decir que en todos los años había uno que en especial hacia desastres; hoy le había quitado  25 puntos a Hufflepuff y 20 a Ravenclaw por algunas situaciones desagradables, pero bueno ya había terminado. Tenía hambre pero no quería ir hoy al comedor, así que se dirigió directamente a la cocina.

Cuando llego un conjunto de elfos domésticos lo recibieron cordialmente.

- Señor profesor Snape ¿desea comer algo?

- Sí gracias, yo....

Y antes de que el pudiera terminar la frase los elfos rápidamente le llevaron  mucha comida

Severus pensó que necesitaría ayuda para comer todo eso- acompañada con cerveza de mantequilla. Dio las gracias y se dispuso a comer. De un momento a otro escucho la voz familiar de alguien cercano a él.

- Ho Severus con que tu también preferiste venir a la cocina  ...

Severus sabia que el lugar que mas prefería el profesor Dumbledore entre todos los sitios del castillo, era la cocina. Usualmente cuando se quería encontrar al profesor, y no se sabia donde localizarlo, el 70% de las ocasiones estaba en la cocina comiendo golosinas. Severus sabia que desde hace algún tiempo Dumbledore decidió no decirle a nadie que estaba en la cocina dado que la enfermera Pomfrey le había dicho que tenia que bajar de peso... y que un hombre de su edad debería cuidarse de  los azucares, pero al profesor Dumbemore poco le importaba su salud si tenia que dejar de comer golosinas; así que había optado por escurrirse a la cocina como un niño travieso al cual se le ha negado un dulce.

- Si profesor... y veo que usted también decidió comer aquí...

- No me culpes Severus – y lo miro con picardía – tu sabes que no puedo seguir la dieta de Poppy...! esa mujer me quiere matar de hambre! ... además – y volvió a mirar a Severus de forma jocosa- hoy han hecho un pastel delicioso de chocolate ¿lo quieres probar?

- No profesor no creo que pueda – dijo esto mirando su plato al que parecía no caberle ningún alimento.

- Hay no seas aguafiestas Severus ...Trino tráele al profesor también una tajada de pastel ...- Severus lo miro con sorpresa y Dumbledore  se sentó  feliz como siempre a su lado.

El elfo trajo rápidamente dos pedazos de pastel de delicioso chocolate. Parecía ser como si todos los elfos supieran que el profesor estaba haciendo trampa con su dieta, porque de forma encubridora le traían las golosinas con una extraña sonrisa en la cara. Severus miraba con horror el pedazo de pastel .. se veía delicioso pero temía no poder comérselo.

- Y como te termino de ir hoy?

- Bien, supongo....- contesto Severus – y? ... el profesor Font es verdad que se va?

- Si Severus, parece que tiene alguna complicación de salud- dijo Dumbledore como sabiendo por donde iba la cosa ...

- Y ya pensó quien podría remplazarlo?- Dijo Severus esperanzado

- En realidad sí- dijo Dumbledore quien noto inmediatamente la expresión de Severus- Hable el otro día con Eduart  Blunt, un viejo amigo mío y creo que va aceptar el puesto ...

- Pero profesor yo

- Severus- expreso Dumbledore en un tono entre cariñoso y firme- ya te he dicho que prefiero que dictes pociones, eres muy bueno para eso... a veces hay que conformarse con lo que tienes

Dumbledore parecía no entender; Severus Snape es un Slytherin y como todo miembro digno de su casa en ocasiones desea mas de lo que tiene... la palabra conformarse no era una de sus características. Sin embargo Severus apreciaba mucho al director, lo quería mas que a su propio padre, dado que en ciertos momento el fue eso... como un padre para él; sabia que Albus era una persona que confiaba en él y que en cierta forma se preocupaba por él. Severus sabia que aunque en muchas ocasiones le llamaba la atención y que en otras no aceptaba sus prejuicios, el profesor Dumbledore no podría traicionar su confianza. El sabía cosas que el resto de personas desconocían sobre él, y de forma muy respetuosa nunca revelo ninguno de sus secretos.

Severus se quedo callado; en cierta forma sabia que el profesor iba a responderle algo así, ya estaba acostumbrado.

- y que vas hacer de Vacaciones?

- Pues – contesto Severus sin darle mucha importancia - supongo que iré a mi casa... como siempre, una semana después de terminadas las clases como es usual.

- Si tu casa,  es hermosa sabes?, la ultima vez que fui me di cuenta – dijo Albus en tono amigable – todavía vive allí esa elfina ¿Cómo era que se llamaba?

- Mandi?, sí ella aún vive ahí, me tiene el jardín hecho un museo, desde que la deje allí no pensé que fuera hacer tan buen trabajo, aunque bueno se le dificultan algunas tareas al no tener un ojo, pero trabaja muy bien ...

- Si ella debe estar muy agradecida ...- dijo Dumbledore observando como Severus asentía con la cabeza, parecía como si su animo hubiera cambiado, de un momento a otro se vio una expresión de tristeza en su rostro, como si recordara algo ...

- Bueno ... yo  creo que me voy a la cama- y diciendo eso se levanto de la mesa y toco el hombro de Severus con su mano de forma amistosa- Buenas noches ...- y se marcho.

Severus se quedo ahí un buen rato observando su plato repleto de comida, comió un poco mas y luego cuando estaba para reventar, le pidió a un elfo que envolviera el pastel para que el se lo pusiera llevar y comerlo mas tarde. Algo decaído fue a su cama y se quedo dormido.