CAPITULO XII

Ese Verano

Ese verano fue en especial un periodo bastante duro para ambos; Severus decidió castigarlo y no dejarlo ir a ninguna de las invitaciones en casa de Chapman y Galbraith; así que Damián pasaba horas aburrido en casa sin hablarle Nunca se imaginó que ese Verano fuera tan intenso por las cosas que pasaron días después. Un día Damián se dedico a pasear por el jardín mientras Severus acompañaba a  Mandi en la cocina. Wooky su hijo la había  venido a visitarla... Severus consiguió que lo emplearan en una panadería mágica y gracias a eso no tuvo que volver a comprar pan.... Wooky venia en ocasiones a saludar a su madre y volvía a donde sus amos...

Wooky traía Delicosos biscochos de panadería como regalo a Severus y Damián quienes lo habían acompañado en sus primeros años. Severus comió  algunos de los biscochos que el elfo traía y después de eso decidió subir al segundo piso y tomar una siesta ... cuando subió vio que el cuarto de Damián estaba con la puerta abierta y sintió algo de curiosidad ...

¿qué guardaría el muchacho en su cuarto? ... hace tanto tiempo que no le hablaba y él en realidad estaba interesado en saber sobre su vida... así que entro con precaución... el cuarto estaba ordenado y había  una serie de objetos que adornaban las paredes. En la mesa de noche el tenia bien puesto un libro titulado "Seres mágicos y maravillosos del África"... tomo el libro entre sus manos y se dispuso a ojearlo... sin embargo al alzarlo salio de dentro de las hojas un papel que callo al suelo ... Severus se agacho para recogerlo y al acercarse pudo ver de que se trataba ...

Severus palideció, la primera frase de la carta decía: Señor y Señora Snape .... ¡Dios  era la carta de Florence!... ¿que hace la carta de Florence aquí?... Severus pensó que la había  guardado ...  En ese momento Severus tuvo que sentarse para no caerse ¡Que demonios hace esa carta aquí!? Se preguntaba una y otra vez... volvió a recorrer las líneas... y se dio cuenta que el muchacho ya estaba enterado del "secreto"; salio de allí a su propia habitación y se encerró con llave ... y ya ahí  pudo darse cuenta que sus manos temblaban, el corazón lo tenia a mil por hora y no podía pensar bien... ¡que hace esa carta en el libro de Damián?!, volvía a repetirse ...

Se paso sus manos sudorosas por su rostro de forma ansiosa ... no podía creer lo que estaba pasando ... seguramente el chico encontró la carta y gracias a eso es que se encuentra tan molesto.... ¡eso quiere decir que lo sabe ... que esta enterado de todo!..., tanto tiempo ocultando esa información! y ¿para qué?....solo para darse cuenta que el muchacho ya lo sabia. En ese momento Severus revivió ese miedo... el temor a la perdida... por eso había  perdido a la mujer! y ahora estaba perdiendo a su hijo... ¡Dios que hacer! ... no podía ocultar el sol con las manos... era evidente que el chico había  leído la carta; él había  esculcado  el armario  y  había  encontrado la carta...

Pudo entender el porque sabia "lo de mortífago"... pensó que tal vez el chico se había  enterado por otros medios; pero definitivamente no era así...

Comenzó a sentirse mal... como enfermo; odiaba sentirse así... y solo faltaban dos días para el aniversario de muerte de Florence... quería acostarse en su cama y no volver a moverse.

*****

Fragmento de Diario.  Junio 15  año del Fénix

Estaba paseando por el jardín y tirando piedras al lago ...cuando llegue a la casa encontré a Wooky que siempre anda lleno de harina y me ofreció un biscocho delicioso... al poco rato llego Mandi con rostro de preocupación ...

- ¿Qué pasa Mandí? Porque esa cara?

- Humm amo Damián ... el amo señor Snape esta enfermo ...

- ¿enfermo? ¿qué tiene? – pregunte algo asombrado Severus pocas veces se enferma.

- No se, mi amo Damián, pero el amo Severus esta muy pálido ... hum Mandí hará caldo para el "gentilísimo" señor Snape para que se mejore Hummm...

La elfina  siguió gimiendo y quejándose; así que decidí ir por mi mismo a verlo... hace tanto que no hablo con el porque a cada tanto me regaña y me castiga ... la verdad creí que tampoco quería hablar con migo pero me equivoque ... entre a la habitación y lo encontré acostado en su cama mas pálido de lo normal, aún tenia puesta su ropa de diario y le pregunte que le pasaba ...

- ¿qué te pasa Sev ..erus? (deje de llamarle Sev desde hace mucho tiempo)

- nada – me contesto con voz triste, sentí que me miraba de forma extraña, como si tratara de decirme algo y no se atreviera...

- Como que nada! ¿quieres que llame al medico? Estas muy pálido ...

- No, estoy bien... he .. he Damián ..? – pregunto inseguro

- Si? ¿quieres que te traiga tu pijama?

- He ... bueno

Fui hacia la cómoda y saque la pijama de uno de los cajones y se la entregue ..

- Damián ... siento mucho lo de la otra noche... cuando llegaste tarde... yo...

- Huy de verdad Severus debes estar enfermo para decirme eso! ...- dije asombrado dado que rara vez pedía disculpas por lo que hacia, pero yo también le debía una disculpa y dado que el comenzó le dije – Severus ... yo también lo siento ... no debí haberte insultado...- sin embargo seguía sintiendo que me miraba de forma extraña...

- Bueno.. –  suspiro – por lo menos aceptas que hiciste mal ... – su tono todavía era de tristeza.

Después de eso se quito sus ropa de diario y se puso la pijama .... fue en ese momento en que estaba distraído que observe algo familiar en la mesa junto a la cama ... mi rostro fijo la mirada en ese pedazo de papel y sentí que mi sangre subía a mi cabeza rápidamente; creo que palidecí o hice un gesto nervioso porque Severus se dio cuenta de mi expresión; y me dirigió una mirada cuestionadora ... miro a su lado rápidamente y vio el motivo de mi semblante ... Dios! Intercambiamos miradas por unos segundos que se me hicieron eternos... no supe que decir y salí del cuarto dejándolo solo.

Fin del Fragmento...

*******

En la pequeña cabaña al lado de ninguna parte, se vivía un ambiente de tensión. Era como un aire de confusión y preguntas sin responder ... el adulto y el niño caminaban meditabundos por la cabaña sin dirigirse la palabra ... Severus aun conservaba su tónica de tristeza y melancolía muda que lo hacían ver como un fantasma en pena ... en su cabeza pasaron muchos recuerdos, preguntas y miedos que parecía retumbar en el horizonte de la mente y que sin lugar a dudas estaban causando una herida en su corazón.

Cansado de las culpas, de los sentimientos y de las fallas tomo su caña de pescar y bajo la mirada atenta del muchacho se fue solo al lago. Se sentó en la hierva lateral al lago y  recostándose en el árbol lanzó el hilo al agua. En otra ocasión hubiera invitado a Damián a pescar con él ... pero ahora lo único que no quería era verle su rostro lleno de preguntas.  Le sorprendió la reacción del chico ... repasó el rostro del joven extrañado y mas pálido de lo normal cuando fijando su mirada en la carta enmudeció y huyó al instante.

La conducta de aquel era una muestra de su conocimiento y de su certeza de que aquel que conoció como su hermano en realidad era su padre...

Severus al observar el agua tranquila y sin la presión de la casa dio vía libre a sus emociones y comenzó a llorar... de sus ojos salían limpias lagrimas que recorrían su rostro y caían libremente en el suelo y ropa como si fueran gotas de roció de la mañana. Si solamente Florence estuviera con vida el no se hubiera visto en la obligación de ocultar su identidad ... si solamente ella no hubiese deseado que el pequeño no conociera a su padre, él no hubiera tenido que vivir un engaño ... Dios sabe que en su interior el siempre deseo a ese hijo, desde que supo de su existencia, cuando aun yacía en el vientre de su madre busco la alternativa de verlo crecer junto a ella; pero el destino los había  separado y ahora cuando  no se lo esperaba, vuelve el destino y se lo entrega... pero las condiciones por las cuales se lo da niegan la posibilidad de que el lo conozca una realidad inexpugnable ... la realidad que explica su real vinculo de sangre.

Pero... ¿por qué  la vida le hace esto? ¿es que acaso el no tiene el derecho de ser feliz?; solamente Dumbemore en su inmensa sabiduría creía que el tenia el derecho a un mundo diferente, que el podía transformar su pasado en algo totalmente diferente y  buscar un futuro radiante que no diera cabida a errores ... pero Severus no creía que tuviera el poder para cambiar las cosas ... la vida se había  encargado de que él ni siquiera creyera en si mismo; parecía como si el pasado aun estuviera cobrando con creses sus errores y ahora, que estaba cuidando lo único que quedaba de Florence en su vida esto se estuviera desintegrando.

Le dolía profundamente que el muchacho se comportara tan mal... como si estuviera repitiendo su vida, su trágica vida ... el señor tenebroso aunque estaba desaparecido aun estaba cobrando la deuda que marcaba su brazo ... era como si su fantasma estuviera influyendo en la vida de su hijo ... del muchacho al que también le  había  quitado su madre... si el supiera todo lo que ella sufrió a manos de ese impune asesino ...  ¡Dios si solamente supiera! ....

Y el ahora que el conoce la verdad ¿qué pasara? ¿seria rechazado? ¿vivirá en constante pelea con él? ... No podía dejar de pensar en la posibilidad de que el lo culpara ... de que pensara que el la asesino ... ¿será que la noche que lo llamo asesino fue por esa causa?... El quería que comprendiera que el la amaba ... la amaba mucho y que hubiera dado su vida por evitar su muerte.

Seguía llorando mientras pensaba esto ... no le gustaba pensar que era un cobarde; que sintiera tanto temor de enfrentarlo ... fue en ese momento que cerro los ojos y seco sus lagrimas; trato de blanquear su mente y pensar solo en la pesca ...estaba cansado y enfermo de tanto pensar ... trato de solo sentir los sonidos del ambiente, los pájaros, el viento y el agua ... fue en ese momento que escucho el crujir de algunas ramas e instantáneamente volteo como un reflejo a ver el origen de tal ruido. Damián estaba parado detrás de él.

Lo miro como tratando de decirle algo pero de su boca no salio ningún sonido ... el chico se encontraba allí también como tratando de sacar valor para hablarle. Severus volvió a mirar el lago fijamente y sintió que el muchacho se había  sentado en silencio a su lado,  quedaron así por unos veinte minutos... sin hablar, sin decir o hacer nada, hasta que Severus no aguanto mas la presión y mirándolo al rostro saco algo que guardaba en su túnica y se lo entrego.

La foto bien cuidada de una mujer sonriente yacía en las manos del joven; Damián miro la foto y pronuncio una sola palabra: ¿Florence?

Severus reacciono de forma nerviosa... no podía creer pronunciara su nombre como si la conociera... mas sin embargo pensó un poco y lo relaciono con la carta... lógicamente el ya sabia el nombre de su madre. Miro un segundo como el muchacho tomaba como un regalo la foto que con tanto ahínco guardaba .... miro la escena y en ese momento se le estremeció el corazón ... ¡cuánto hubiera dado para que su hijo no hubiera tenido que conocer a su madre por medio de una foto sino en persona! ... se dio cuenta que el tenia derecho a saber... tenia derecho a conocer lo maravillosa que era .... él era su hijo y no podía negarle saber sobre su madre.

Fue entonces que después de darle la foto comenzó a hablar con la voz algo entrecortada por los nervios y la tristeza:

- Si Damián ... su nombre era Florence; ella ... – hizo una pausa como tratando de buscar fuerzas para continuar – era hermosa, muy hermosa ... e inteligente, y yo ... – hizo de nuevo la pausa como tratando de guardar la compostura - .bueno yo la amaba mucho; tenia una hermoso sonrisa y unos ojos miel muy expresivos, la nariz y los oídos eran como los tuyos ...era amable, muy tierna y segura ... sabia utilizar las palabras, era terca como tú y le gustaba reírse de la gente ... y tu te pareces mucho a ella en eso...

Damián lo miraba de forma tranquila, lo escuchaba en una disposición que le asombro a Severus quien pensó que lo iba a llenar de preguntas... pero no era así... el muchacho estaba ahí dispuesto a escucharlo.. así que el continuo:

- Nos conocimos en el colegio,... Hogwarts en ese entonces era muy diferente de lo que es ahora..., eran otros tiempos ... Florence era de Ravenclaw y como digna representante de su casa siempre tenia la palabra perfecta en el momento perfecto y ... yo bueno me enamore de ella perdidamente; – decía esto con un poco de cautela... era difícil hablar de sentimientos cuando el siempre se mostraba tan racional, pero al decirlo esbozaba una sonrisa-  yo en realidad me metí en algunos problemas por estar con ella y... bueno – y mirando a Damián al rostro prosiguió – nosotros queríamos casarnos ... planeábamos hacerlo después de la graduación pero por cosas del destino no pudimos ... ella viajo fuera del país y yo me quede en Inglaterra... años después ella volvió y nos reencontramos...

Severus cambio su rostro de añoranza de tiempos mejores a uno mas turbio y oscuro. Miro de nuevo al chico quien seguía viéndolo atentamente ... ahora tenia que contarle el final de esa historia, sintió un calor frio en su frente que expresaba ese miedo al rechazo y de la reacción del muchacho al saber la verdad. ¿cómo lo tomaría?... no lo sabia... pero aun así prosiguió:

- Recuerdas la marca que hay en mi brazo?

- La marca tenebrosa ...verdad? – dijo el en tono bajo

- Sí ... – expreso con reserva- Damián recuerdas que te dije cuando te diste cuenta de su existencia?

- Que en ocasiones las personas hacían cosas malas que les cambiaban la vida ...

- Bueno, creo que para ti no es ningún secreto que yo fui un mortifago ... pero no asesino como me dijiste la ultima vez... yo nunca mate a nadie ¡nunca!; cuando me hice un hombre tenebroso pensaba que estaba haciéndole un bien a la sociedad, aunque estaba equivocado yo pensaba que estaba haciendo algo correcto...; fue en ese momento que apareció tu madre y cuando se dio cuenta de mis actividades subversivas, me abandono sin pensarlo dos veces ... yo la busque incluso cuando supe que venias en camino; pero la deje en paz en el momento en que me dijo que ...- entonces cambio el tono de sus voz, y como pensándolo mejor  dijo- bueno, tu sabes  tu madre pensó que era mejor que yo no me enterara de que habías nacido vivo y bueno ... yo abandone mi tarea de reconquistarla...

- Y... Severus ¿como murió ella?

Sintió un temblor como una corriente que recorría todo su cuerpo... ¿qué le diría?... fue en ese momento que se le transformo el rostro, miro directamente hacia el agua tratando de que no se le escurrieran las lagrimas... Damián se dio cuenta que al preguntarle eso el había  cambiado su actitud ...

- Damián ... yo ... solo quiero que sepas que yo no sabia, yo – se le cuarteo la voz-  amaba a Florence y no sabia que él la iba a matar ...

- ¿quién? – pregunto de forma inocente

- El señor tenebroso...

- El que-no-debe-ser-nombrado… ?

- Sí – no pudo evitar que de sus ojos salieran unas amargas lagrimas -... el mato a tu madre ... y yo... no supe que hacer ... no lo sabia ... lo juro.

- Sé que la querías.

- ¿cómo que lo sabes?- le cambio el tono de la voz por el asombro.

- Bueno... solo lo sé .... no se como explicarme ... hay muchas cosas... muchos detalles; yo hace poco – y al decir esto hablo con algo de vergüenza – revise tu escritorio y encontré la carta... y, bueno ... sé que te va a sonar raro ... pero yo ya lo sabia ....

Severus quedo paralizado. ¿Qué era lo que estaba oyendo?...  sus oídos parecían no entender el mensaje ... miraba al chico a los ojos y solo podía ver que el muchacho evidentemente decía la verdad. Lo miro con miles de preguntas en su cabeza pero no supo decirle nada... de su boca no salio ni el más mínimo sonido.

- Sev ... escúchame ...,  – el muchacho lo miro al rostro y comprendió que tendría que explicarse; sabia la sorpresa que le causaba esa afirmación y vio el rostro pálido y deseoso de respuestas del que hasta hace poco trataba como hermano – se que esto te va ha sorprender pero la verdad es que yo ya lo sabia, o por lo menos lo sospechaba ... fueron muchas cosas... muchas!... yo no soy estupido sabes! ... – y tras intercambiar una mirada con Severus continuo: - Cuando yo era pequeño me di cuenta que tanto papá como mamá eran ancianos ... yo escuchaba los rumores de los vecinos y de otras personas que no comprendían mi existencia ... todo lo explicaban con magia... todo!... tu sabes que nací con ciertas habilidades y todos decían que yo era producto de magia negra y la gente me tenia miedo ... era muy difícil adaptarme al pueblo, a las personas y sobre todo a mi padre ... tu sabes como me odiaba ... nunca comprendí las razones de mamá al decirme que la razón de mi nacimiento era que ambos deseaban desesperadamente otro hijo cuando en realidad mi padre me trataba tan mal  y me llamaba "bastardo" ..., fue dos días antes de la muerte de ellos que estando en la cocina papá entro furioso y tras ver que yo estaba ahí me saco por el cuello haciéndome daño, yo no pude evitar ponerme a llorar ante al presión que ejercía su mano en mi cuello  y de forma defensiva le di un puntapié y salí a correr ... mientras huía el me grito "Maldito bastardo... si no fueras hijo de Severus te irías de mi casa ahora mismo ... ¡quien se cree ese mal nacido!" ... esa frase me llamo mucho la atención... además siempre me decía que lo de "perdedor" y otras cosas lo tenia de "herencia" ... después comprendí el porque lo decía ... fue después de que me trajiste con tigo que  comencé a comprender muchas cosas y empecé a armar ese rompecabezas ... bueno lo de la carta... Severus – dijo avergonzado – yo ya la había  leído ... desde tercer año la encontré en tu repisa y la guarde todo este tiempo, tú pareciste nunca darte cuenta y yo... bueno ... desde ese entonces ...

- ¿y porque no dijiste nada?

- Y para qué! ... tu estabas haciendo un gran esfuerzo para que las cosas no se supieran y yo tampoco vi necesario decir nada... eso no cambiaria nada entre tu y yo ¿verdad?... además yo siempre me di cuenta que ese tema era sagrado para ti y no quería angustiarte ... fue solo hasta ayer que me di cuenta que "tu ya sabias que yo sabia" ... y no supe que hacer ... y además ...¡últimamente ni siquiera me hablas! Y para serte sincero yo tampoco quiero hablarte ... tú dejaste que me dejaran en ese sitio de locos por un mes y no hiciste nada para impedirlo... y tampoco me dijeron que solo era una suspensión ... pensé que me quedaría en ese sitio de por vida ... – dijo en tono de reproche

- Era eso ó la expulsión Damián ... ¿no lo comprendes?; no quería que arruinaras tu vida como ...

- "yo" – Damián completo la frase  haciendo que Severus lo mirara con algo de extrañeza "definitivamente el muchacho no era ningún tonto".

- Si, como lo  hice "yo" Damián ... – respondió con seguridad el adulto- Sí "yo" no me hubiera metido en problemas tal vez todo hubiera sido diferente – Severus se quedo pensando en medio de la frase... como decirle que talvez hubiera conocido a su madre en persona, vivirían juntos y todos lo conocerían como "su hijo" y no como el hermano menor del profesor de pociones -. Tu no comprendes que "todo lo que hagas tiene un precio" ... pareces pensar que todo es fácil y que puedes conseguir todo infringiendo reglas ...

- ¡Demonios Severus porque le das tanta importancia a las reglas! ... todo el tiempo hablas de ellas, en el colegio, en la casa ..!todo el tiempo!

- Damián ¡porque todos los grandes magos tienen que tener reglas! ¡todos! ... si yo no supiera que no tienes potencialidades no te exigiría que las cumplieras ... las reglas evitan que te vallas por un camino equivocado ... como lo hice yo ... los grandes magos deben cumplir las reglas para no confundir el camino ... sabes... cuando era mas joven había  tres muchachos de Griffindor que odiaba; ellos todo el tiempo irrumpían las reglas ¿y sabes donde están ahora? ... uno esta en la cárcel, el otro vive en la pobreza y el otro "esta muerto"... y yo no quiero esto para ti ... ¡nunca!... tu tienes que ser mejor que yo... que ellos...!TU eres especial!...

- Severus eso no es cierto ...

- ¡Si es cierto! – dijo con vehemencia – y sabes porqué .. porqué TU eres mi hijo!

Era la primera vez que lo llamaba así... era la primera vez en que le hablaba de esa manera ... en los últimos años ambos habían jugado a engañarse y ahora ese juego se había  descubierto... Padre e hijo se abrazaron a la orilla del lago; parecía que ya las palabras se habían agotado sobre la realidad inminente.