Todos los personajes pertenecen a Tolkien
CONSUELO DE HERMANO
Aquella imagen le partía el corazón. Le dolía ver esa mirada de tristeza y las lágrimas bañándole el rostro.
- Arwen, hermana, ¿qué te ocurre?
- Oh, Elladan, soy tan desdichada.
El elfo se sentó es la cama al lado de su hermana y cogió una de sus delicadas manos entre las suyas tratando de tranquilizarla.
- ¿Por qué dices eso? Por favor, no llores más. Sabes que no soporto verte así.
Arwen respiró profundamente tratande de controlar su llanto. Sabía que la preocupación de su hermano por ella era grande y no quería hacerle sufrir. Levantó la cabeza para mirar a su hermano a los ojos.
- Elladan, hermano mío. Una gran tristeza aflora en mi corazón pues grande es mi amor por Estel y el suyo por mí, mas nuestro padre se opone a nuestro compromiso.
- ¿Tú y Estel estáis comprometidos?- dijo Elladan abriendo los ojos sin poder ocultar su sorpresa.
- Sí. Ayer por la noche él me confesó su deseo de pasar el resto de su vida a mi lado y yo acepté. Pero papá no lo entiende, cree que no es más que un capricho. Sigue pensando que sólo soy una niña incapaz de tomar mis propias decisiones.
- Pero Arwen, él es mortal. Deberías renunciar a la inmortalidad para estar a su lado. Es una decisión muy importante.
- ¿Crees que no lo sé?¿Que no lo he pensado? Pero sería capaz de renunciar a ella por Aragorn.
Más lágrimas volvían a aparecer en sus hermosos ojos grises.
Elladan retiró los oscuros mechones de la cara de su hermana y le acarició la blanca mejilla suavemente. Una mirada de ternura asomó a sus ojos.
- Grande debe ser tu amor por el mortal se realmente eres capaz de renunciar al Crepúsculo por él.
- Haría cualquier cosa por él. Él lo es todo para mí. Oh, Elladan, ¿qué voy a hacer?
Arwen se llevó las manos a la cara y comenzó a llorar desconsoladamente y su hermano le abrazó y la apretó contra su pecho. Nada más podía hacer. Sufría viendo el dolor de su hemana pero era difícil hacer que su padre cambiara de opinión.
La elfa pasó los brazos por la espalda de su hermano y apoyó la cabeza en su hombro. Siempre encontraba consuelo así. Allí estaba segura, aunque no podía contener las lágrimas.
Finalmente se quedó dormida bajo las consoladoras caricias de su hermano y Elladan la recostó en la cama con cuidado tratando de no despertarla. Se la veía realmente hermosa a la luz de Isil. No era de extrañar que Aragorn se hubiera enamorado de ella.
Salió silenciosamente de la habtación, pero cuando se dio la vuelta para cerrar la puerta se chocó con alguien. Sus ojos no tardaron en acostumbrarse a la oscuridad y cuando lo hicieron se encontró de frente con su propia imagen.
- Elrohir, deberías mirar mejor por dónde andas.
- Lo siento Elladan. Estaba sumido en mis pensamientos.- Se llevó una mano a la cabeza- Realmente me has asustado. Está todo muy oscuro y silencioso.
Elladan tuvo que contener la risa para no despertar a su hermana. Resultaba muy gracioso imaginarse a tan valiente guerrero, como era su hermano, asustado por la oscuridad.
- Y bien, ¿qué haces aquí?¿Te dirigías al cuarto de Arwen?
- Sí, quería preguntarle una cosa. ¿Está dentro?
- Sí, pero está dormida. Ha tenido un día duro.
Elrohir vio una sombra de tristeza en los ojos de su hermano y mostró cara de preocupación, pues al igual que él no soportaba que su hermana lo pasara mal. Tenía un gran instinto de protección y, qué iba a hacer, su hermana era su debilidad.
- ¿Qué le ha pasado?
- Ha estado toda la tarde llorando. Parece ser que ella y Estel se aman y desean compartir su futuro juntos, mas nuestro padre se opone a ello.
- Ah, entonces eso lo explica todo.
- ¿Qué es lo que explica, Elrohir?
- Pues que nuestro padre ha ordenado que Estel partiera de Rivendel y permaneciera alejado por un tiempo.
- ¡¿Qué?!
- Así es. Ha salido esta misma tarde. Y yo venía a preguntarle a nuestra hermana si sabía el motivo. Pero creo que mejor no le digo nada, tal vez mañana más tranquilamente.
- Sí, es lo mejor. Ahora sólo lograríamos aumentar su tristeza. Vayamos a descansar, tengo la impresión de que mañana será un día difícil.
Sin más que decir, los hermanos se dirigieron a sus habitaciones sigilosamente, sumidos cada uno en sus pensamientos, pero con un nombre en común: Arwen.
No podía imaginar Elladan cuánta verdad contenían sus últimas palabras.
**********
Gracias por los reviews. Son poquitos, pero algo es algo ^_^
Gracias Lothluin, me alegraste la tarde. En cuanto a lo de describir más, tomo nota. Soy principiante en esto, pero espero mejorar con el tiempo (¿será mucho pedir? ¬¬)
Seguid dejando vuestras opiniones, me serían de mucha ayuda.
CONSUELO DE HERMANO
Aquella imagen le partía el corazón. Le dolía ver esa mirada de tristeza y las lágrimas bañándole el rostro.
- Arwen, hermana, ¿qué te ocurre?
- Oh, Elladan, soy tan desdichada.
El elfo se sentó es la cama al lado de su hermana y cogió una de sus delicadas manos entre las suyas tratando de tranquilizarla.
- ¿Por qué dices eso? Por favor, no llores más. Sabes que no soporto verte así.
Arwen respiró profundamente tratande de controlar su llanto. Sabía que la preocupación de su hermano por ella era grande y no quería hacerle sufrir. Levantó la cabeza para mirar a su hermano a los ojos.
- Elladan, hermano mío. Una gran tristeza aflora en mi corazón pues grande es mi amor por Estel y el suyo por mí, mas nuestro padre se opone a nuestro compromiso.
- ¿Tú y Estel estáis comprometidos?- dijo Elladan abriendo los ojos sin poder ocultar su sorpresa.
- Sí. Ayer por la noche él me confesó su deseo de pasar el resto de su vida a mi lado y yo acepté. Pero papá no lo entiende, cree que no es más que un capricho. Sigue pensando que sólo soy una niña incapaz de tomar mis propias decisiones.
- Pero Arwen, él es mortal. Deberías renunciar a la inmortalidad para estar a su lado. Es una decisión muy importante.
- ¿Crees que no lo sé?¿Que no lo he pensado? Pero sería capaz de renunciar a ella por Aragorn.
Más lágrimas volvían a aparecer en sus hermosos ojos grises.
Elladan retiró los oscuros mechones de la cara de su hermana y le acarició la blanca mejilla suavemente. Una mirada de ternura asomó a sus ojos.
- Grande debe ser tu amor por el mortal se realmente eres capaz de renunciar al Crepúsculo por él.
- Haría cualquier cosa por él. Él lo es todo para mí. Oh, Elladan, ¿qué voy a hacer?
Arwen se llevó las manos a la cara y comenzó a llorar desconsoladamente y su hermano le abrazó y la apretó contra su pecho. Nada más podía hacer. Sufría viendo el dolor de su hemana pero era difícil hacer que su padre cambiara de opinión.
La elfa pasó los brazos por la espalda de su hermano y apoyó la cabeza en su hombro. Siempre encontraba consuelo así. Allí estaba segura, aunque no podía contener las lágrimas.
Finalmente se quedó dormida bajo las consoladoras caricias de su hermano y Elladan la recostó en la cama con cuidado tratando de no despertarla. Se la veía realmente hermosa a la luz de Isil. No era de extrañar que Aragorn se hubiera enamorado de ella.
Salió silenciosamente de la habtación, pero cuando se dio la vuelta para cerrar la puerta se chocó con alguien. Sus ojos no tardaron en acostumbrarse a la oscuridad y cuando lo hicieron se encontró de frente con su propia imagen.
- Elrohir, deberías mirar mejor por dónde andas.
- Lo siento Elladan. Estaba sumido en mis pensamientos.- Se llevó una mano a la cabeza- Realmente me has asustado. Está todo muy oscuro y silencioso.
Elladan tuvo que contener la risa para no despertar a su hermana. Resultaba muy gracioso imaginarse a tan valiente guerrero, como era su hermano, asustado por la oscuridad.
- Y bien, ¿qué haces aquí?¿Te dirigías al cuarto de Arwen?
- Sí, quería preguntarle una cosa. ¿Está dentro?
- Sí, pero está dormida. Ha tenido un día duro.
Elrohir vio una sombra de tristeza en los ojos de su hermano y mostró cara de preocupación, pues al igual que él no soportaba que su hermana lo pasara mal. Tenía un gran instinto de protección y, qué iba a hacer, su hermana era su debilidad.
- ¿Qué le ha pasado?
- Ha estado toda la tarde llorando. Parece ser que ella y Estel se aman y desean compartir su futuro juntos, mas nuestro padre se opone a ello.
- Ah, entonces eso lo explica todo.
- ¿Qué es lo que explica, Elrohir?
- Pues que nuestro padre ha ordenado que Estel partiera de Rivendel y permaneciera alejado por un tiempo.
- ¡¿Qué?!
- Así es. Ha salido esta misma tarde. Y yo venía a preguntarle a nuestra hermana si sabía el motivo. Pero creo que mejor no le digo nada, tal vez mañana más tranquilamente.
- Sí, es lo mejor. Ahora sólo lograríamos aumentar su tristeza. Vayamos a descansar, tengo la impresión de que mañana será un día difícil.
Sin más que decir, los hermanos se dirigieron a sus habitaciones sigilosamente, sumidos cada uno en sus pensamientos, pero con un nombre en común: Arwen.
No podía imaginar Elladan cuánta verdad contenían sus últimas palabras.
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Gracias por los reviews. Son poquitos, pero algo es algo ^_^
Gracias Lothluin, me alegraste la tarde. En cuanto a lo de describir más, tomo nota. Soy principiante en esto, pero espero mejorar con el tiempo (¿será mucho pedir? ¬¬)
Seguid dejando vuestras opiniones, me serían de mucha ayuda.