Capítulo 9 | Seguimos confundiéndonos

Rompe tus planes y lánzate a lo desconocido.

Sakura

Tengo que dejarme llevar, como todos los últimos días, así que me dejo llevar por él, por Sasuke y su cálido contacto contra mi cuerpo aun cuando el ambiente a nuestro alrededor es completamente frío, me dejo llevar por las risas de mis amigos que acompañan ese momento, por el calor que el ambiente me produce, por el divertido momento que tienen todos mientras sueltan barcos de papel sobre el agua casi congelada que se hunden con rapidez, me olvido de todo lo que me acompleja por un momento, como si todo a mi alrededor fuera magia, consigo sentirme realmente bien en todos los aspectos, porque aun con métodos extraños, Sasuke siempre consigue hacerme sentir mejor, siempre tiene las palabras correctas para darme ánimos, siempre sabe que es lo que debe decir. Él no aparta su mirada de mí ni un solo minuto, como si estuviera completamente concentrado en mí -aunque debo estar imaginando todo- y solo me pone de nervios, pero no es del todo desagradable, incluso creo que me gusta, que él me mira, y él, y mucho más de lo que debería, y es por eso por lo que me pone tan de nervios, me pone de los nervios que comienzo a sentir cosas que no debería.

—Debes tener frio— Murmura, dándome un abrigo que seguro debe pertenecerle y revolviendo un poco mi cabello ¡Espabílate, Sakura! Me repito constantemente cuando él hace ese tipo de acciones, desde que lo conozco él es así, siempre está ahí, como si procurara mi bien, como si únicamente existiera para que mi dignidad e integridad estén a salvo, y eso que esa es una tarea realmente difícil, porque parece ser que soy algo así como un imán de problemas, así que sin más él se ha cargado con el problema de cuidar de mí, sin que parezca molestarle en lo absoluto.

Quiero hablar con él, mi cerebro se está consumiendo con la idea de que debo decirle todo aquello que estoy empezando a sentir, porque por alguna extraña razón, creo que debo ser honesta con él en eso, para tener todas las cartas sobre la mesa y poder jugar correctamente, pero soy interrumpida en mi camino hacia él por Hinata, quien sin decir mucho me toma de la mano y me arrastra hacía un lugar donde nadie puede ni vernos ni oírnos ¿Es que me matará? Ella luce realmente nerviosa, es decir, ella tiene ese semblante casi siempre, sin embargo hoy parece mucho más nerviosa de lo normal ¿Cómo es que no me di cuenta antes? Más bien ¿Estaba así desde antes? Sea como sea mi instinto me dice que aquello que se viene a continuación no es nada bueno, y que las alarmas que anuncian emergencia comenzaran a sonar en cualquier momento, justo después de que el fuego se extienda rápidamente.

—Sakura-chan, ¿Sabes que tú y Tenten-chan son mis mejores amigas verdad? —Pregunta, mientras mira por la ventana en dirección a donde nos encontrábamos antes, yo solo respondo afirmativamente sin entender las palabras a medias ni el por qué ha sacado tan de repente el tema de las amigas ¿Debería asustarme por eso? No ¡Tengo que asustarme! Ella se ha quedado completamente seria e inmóvil un par de segundos mientras me analiza para poco después continuar — Hay algo que quiero decir, pero es algo que por ningún motivo debe saber nadie, ni Tenten y mucho menos Ino— Sentencia, yo asiento, sobre todo por lo último, ella sabe bien que entre Ino y yo no hay secretos -o al menos eso es lo que se supone- entonces que diga eso me dice casi a gritos que esto es peligroso, porque encima no lo puede saber Tenten, lo que significa que tampoco Neji ¿Es tan grave? —Creo que quizá puedas contarle a Sasuke, no soy fan de los secretos entre pareja, pero tienes que asegurarme que él tampoco dirá nada ¿Estamos? —Asiento con las justas una vez más, son demasiadas advertencias, y demasiado misterio que me matan las ansias y el nervio, ella suspira, relaja su cuerpo y luego me mira con sus ojitos brillosos, como si estuviera a nada de ponerse a llorar —Creo que estoy embaraza ¿Qué debería hacer Sakura-chan? —Suelta sin más, un golpe en mi estomago habría dolido menos que eso, una información tan repentina que mi cerebro tarda en procesar pues pasa unos segundos en blanco, que alguien me pellizque para que pueda despertar ¿Oí mal cierto? Sí, seguro que oí mal, porque me ha sonado una frase de lo más horrible

—No te engañes Sakura— Me repite varias veces la voz en mi cabeza ¿Embarazada? Ellos tendrán un bebé, y digo, no es como si no supiera que algún día pasaría, a fin de cuentas se casaran pronto y son dos adultos, pero es demasiado pronto ¿Por qué? ¿Por qué me lo tuvo que decir a mí? Aun no estaba del todo preparada para esto, aunque haya nuevos sentimientos naciendo, mi corazón aun duele de vez en cuando al recordar que ellos se casaran y ahora… solo quiero regresar a casa, esconderme y no ver la luz del sol nunca más.

—Quiero que me acompañes a un laboratorio para hacerme una prueba confiable en cuanto lleguemos a la ciudad— Exclama, yo solo asiento repetidas veces intentando reaccionar, no puedo ser tan egoísta, no puedo solo pensar en cómo yo me siento, ella debe encontrarse hecha un mar de emociones por dentro, puedo ver que esta asustada, es natural, solo tiene veinte años, y muchas cosas por hacer, pero también puedo ver en sus rostro esa pizca de felicidad que solo alguien lleno de amor tendría en el rostro aun contra lo difícil que todo se volverá, debería decirle algo, pero no sé qué sería bueno, hay tantas emociones en sus ojos que pienso que lo mejor es quedarme en silencio escuchándola, aunque por alguna extraña razón repentinamente me da la impresión de que yo parezco mucho más asustada que ella con toda la situación temblando cual gelatina, pero es que, no puedo evitar por más que quiero el sentirme golpeada emocionalmente, me preocupan mis amigos, y el cómo podrían reaccionar sus familias, y no quiero ni imaginarme el escándalo tamaño mundial que se armaría sí no fuera porque están a nada de casarse.

Naruto llega poco después, haciendo que Hinata se obligue a parecer bastante relajada, mientras yo estoy incómodamente asustada, lo siento, pero no puedo evitar que mi pecho se sienta estrujarse un poco, y que la presión en el aire comience a cortar mi respiración, me duele, soy un humano con sentimientos confusos, así que cuando puedo me escapo casi corriendo, cuando consigo que las piernas me respondan y dejen de hacerme ver como una gelatina.

En cuanto llego a la habitación me dejo caer de bruces sobre la cama, mi piernas aun tiembla un poco, y la sensación de frio recorre mi cuerpo, mi mente está mucho más confundida que al principio, ¿Por qué? Tonta, tonta Sakura que aun quiere aferrarse a esos sentimientos dentro de su pecho aunque sabe que no debería, esa misma tonta que aún sigue dejándose enredar en su tonta mentira de un mundo perfecto que es totalmente ilusorio. Quiero detener el tiempo, congelar todo tal y como está, ya no quiero sentir nada de todo lo mucho que siento, ya no quiero que esas lágrimas sin sentido resbalen por mis mejillas en cuanto les dé la gana, porque se me escapan sin permiso, sin que pueda detenerlas, sin que entienda del todo porque, haciéndome ver como la tonta más grande del mundo.

Sasuke entra en la habitación varios minutos después, jodida la persona a la que se le ocurrió que deberíamos estar compartiendo habitaciones, ahora tengo que limpiarme las lágrimas y comenzar a poner orden en mi cabeza y corazón. Él me observa detenidamente, otra vez sus ojos están puestos en mí como si no existiera nada más ¿Por qué? ¿Por qué repentinamente todo duele tanto si es que estaba tan segura de que comenzaba a tener sentimientos por Sasuke? ¿También me estaba engañando con eso? —¿Estás bien? —Pregunta, yo niego rápidamente, porque nada está bien, porque no conseguí que mi vida dejara de girar en un círculo vicioso que ahora no tiene fin alguno ¿Por qué? ¿Por qué justo ahora? Él me pega a su cuerpo, y me permite llorar como si fuera una niña pequeña, acción que solo logra poner todavía más patas hacia arriba a mi corazón ¿Por qué de repente me duele más pensar en que no puedo aclarar todo lo que siento por Sasuke? ¿Por qué duele más pensar en que quizá no puedo sentir algo por él? ¿Por qué duele más creer que él puede alejarse?

—Hinata cree que está embarazada —Digo en cuanto mis lagrimas han parado un poco, quiero ser sincera con él, quiero decirle todo, lo que siento respecto a eso, y respecto a él, no quiero guardar nada para mí, no quiero tener más verdades a medias, quiero que, tal como hace siempre me ayude a entender por qué de momento me duele más pensar en perderlo a él, mas, él no dice nada, solo acaricia mi cabello con afecto y un tacto dulce, hasta que mis lagrimas se detienen por completo, cuando me siento lista para seguir hablando, él simplemente me aleja y sin decir mucho sale de la habitación.

Hay algo en esa actitud suya, tan repentina, tan fría, tan diferente, eso, que aun no entiendo que es, duele, y duele mucho más que el posible embarazo de Hinata, porque me siento extrañamente sola, mucho más de lo que he estado antes, en una fría habitación, como si me acabaran de quitar algo, pero creo que de nuevo, nadie me ha quitado nada, porque una vez más, ese algo nunca fue mío, evidentemente me deje envolver en mis propios engaños, a que sí, los sentimientos que tengo hacia Naruto no se han ido, porque nada en esta vida desaparece de un día para otro, porque no es magia, acabo de comprender que mi corazón había encontrado un lugar de paz, algo que nunca antes había sentido ¿Pero qué fue lo que paso? No lo entiendo, nunca puedo entender nada si es que se trata de Sasuke, en ocasiones siento que debo quedarme e intentar, y otras muchas que mejor debería correr ¿Es porque no estoy del todo segura de lo que siento? ¿O simplemente todo esto es porque me engañe intentando creer que él podría encontrarse igual que yo.

A estas alturas, ya ni siquiera comprendo por qué estoy sufriendo…

[...]

La hora de la cena sí que se ha convertido en el infierno mismo, Sasuke se encuentra sentado lo más lejos que puede de mí, dejándome claro que quiere evitarme, pues ingiere sus alimentos sin siquiera mirarme ni una sola vez ¿Qué es lo que hice mal? Él fue quien se marchó sin más dejándome con las palabras a la mitad ¿O es que siempre ha sido así? ¿Por qué justo cuando creí que me acostumbraba a su atención e insistencia? Vamos a ser sinceros, aunque no lo quiera sigo siendo una simple humana que disfruta de ser el centro de atención de alguien, me hacía sentir diferente, e importante, y no solo porque venía de alguien tan mono como él, pero no me mira, ni siquiera creo que tenga intenciones de hacerlo, en mi cabeza una vez más hay muchas preguntas y pocas respuestas, pero nada es del todo coherente para su repentino cambio de actitud, no puedo estar tan mal como para haberme imaginado todas esas atenciones, eso es seguro, mi cabeza se siente tan mareada.

—¿Sakura te sientes bien? —Pregunta Temari a media cena, todos tienen sus ojos puestos sobre mí, todos excepto él, la única persona a quien estoy mirando. Gaara señala mi plato de comida intacto regresándome a la realidad, por Dios que hasta Gaara parece de la nada enfadado conmigo por ese feo plato. Sasuke solo me mira una fracción de segundos, pero antes de que yo pueda decir o hacer algo, él se va de nuevo, sin que yo le importe mucho más.

—Todo está bien— Respondo dándole una sonrisa a Temari, pero ella ya ha puesto su cara de preocupación, es evidente que ya se ha dado cuenta que muchas cosas no están bien, pero no quiero ser vista cual perrito bajo la lluvia, así que fuerzo un poco más mi sonrisa, y obligo a mi comida a pasar a prisa por mi garganta.

El ambiente se ha puesto bastante extraño en lo que resta de la cena y después de esta, me siento de repente tan ajena a todo, y tan arrepentida de haber venido a este lugar. Sai ha puesto una de las tontas películas que ha traído consigo, son tan malas que resultan aburridas, son tan viejas que aun puedes ver los malos efectos especiales para intentar generar miedo ¿Qué pasó con apreciar lo buena que es la tecnología de nuestra generación? Esto es tan incomodo en todos los aspectos, por la jodida mala película y porque estoy tan abandonada como un chicle pegado debajo de una mesa, mientras mis amigos comparten bonitos momentos de parejas, soy un tercero, y eso siempre, pero siempre es incómodo, no puedo evitar preguntarme ¿Es por esto por lo que querré tener a Sasuke cerca, para no sentir este tipo de soledad? —No—Me responde la astuta voz de mi cabeza, sé bien que si quisiera llenar ese espacio en mi solitaria vida estaría bien con cualquier persona, pero de solo imaginarme a otra persona cerca puedo sentir los escalofríos que me recorren, no soy fan de la cercanía con otras personas, sin embargo Sasuke, es solo Sasuke y eso me es suficiente para sentirme confiada con él cerca.

Siempre he estado sola, y nunca he necesitado a nadie tanto como siento que necesito de él.

Aunque me frustra un poco su actitud reciente, quizá está enfadado porque termine en llanto, aun cuando me ha regañado tanto por tragarme lo que siento, él siempre es bastante impredecible, por lo que ir y enfrentarme a él me asusta mucho, pero tampoco me resigno a quedarme en la sala siendo un estorbo para todos mis amigos, así que arrastro mis pies con el mayor de los cuidados para que nadie me escuche hasta la habitación. Cuando llego a la habitación me encuentro con Sasuke tendido sobre la cama, con la mirada hacia el techo, pero pretendiendo rápidamente que duerme, si tan solo no lo hubiera visto cerrar los ojos en cuanto entre por completo, le creería por completo lo del sujeto que duerme tranquilamente, me siento en el espacio vacío que ha dejado a un lado de la cama ¿En qué momento se les ocurrió que sería buena idea poner solo una cama por habitación? ¿Habrá otra habitación libre en la casa? Esto es tan incomodo.

—Sasuke-kun— Le llamo cuando termino de divagar, pero no hay respuesta, o se ha dormido de verdad o me está ignorando con todo el descaro posible, sin importar que sea, creo que solo hay una cosa que debo hacer, no puedo, no quiero seguir quedándome con las palabras en mi garganta, me enferman, ni todas esas cosas en la cabeza, me están volviendo loca —Perdón por haber terminado llorando hoy, sé que quizá debes pensar que soy una tonta, por que has insistido tanto en que debo aclarar todo con ellos, o por fin olvidar todo, y porque soy una niña que dice una cosa y hace otra, créeme que también estoy decepcionada de mí misma, pero sigo siendo una persona con sentimientos, estaba, consternada, repentinamente asustada, ellos dos, tendrán un bebé, y no los percibo como personas preparadas para eso, todo está sucediendo tan rápido para mí, que todos los sentimientos en mi corazón se hicieron un huracán —Hago una pausa para tomar aire, él sigue sin decir ni una sola palabra, pero al menos ahora siento que me está mirando, puedo sentir su mirada sobre mí, aunque no puedo pretender que tengo el valor de mirarlo a los ojos, no, porque necesito que todas las cosas queden completamente claras al menos de mi parte —Sabes, mi cerebro es demasiado lento, aún no había terminado de procesar que de un día para otro descubro que se casan, y que encima tendrán un bebé, además, debo sumarle que no sé ni siquiera donde estoy parada porque siento que también me enrede en mi mentira, no entiendo que es lo que pasa contigo, no puedo entender porque me asusta tanto pensar que cuando el tiempo pasé también te irás, no entiendo que es lo que le pasa a mí corazón cuando se trata de ti, no soy ninguna clase de máquina que pueda clasificar, ordenar y desechar sentimientos solo porque sí, sí, soy patética, siento demasiado —Termino, sin evitar que las lágrimas comiencen a escaparse acompañadas de una sonrisa que me sabe sarcástica por lo tremendamente tonto que suena todo lo que he dicho, porque no creo haber aclarado ni un diez por ciento de las cosas, creo que solo me enrede mucho más como es mi costumbre.

—Perdóname —Murmura, siento como se incorpora en la cama, mientras sus brazos un tanto fríos me abrazan por encima de los hombros, él se aferra a mí de una forma en que creo que perderé el equilibrio y caeré en cualquier momento, no lo entiendo, juro que no lo entiendo para nada, yo solo deseo saber si es realmente bueno mintiendo o sí es que ambos hemos caído enredados en las ramas de nuestro juego, quiero entender muchas cosas, pero de momento, no creo que sea prioridad, porque ahora él se encuentra conmigo y mi corazón se siente repentinamente en paz, eso sí que es importante. He sido una tonta que ha guardado sentimientos por alguien que nunca me ha querido, pero desde que Sasuke está cerca cada día que pasa me convenzo más de que puedo olvidar todos esos sentimientos que me hacen tan infeliz, para abrirme a nuevas posibilidades, solo tengo veinte años, estoy en una de las mejores etapas de mi vida para sanar de un corazón roto, y tengo que dejar que eso sucede algunas cuantas veces más, es parte de la experiencia de vida, no me molestaría para nada que fuera Sasuke quien lo haga, mucho menos me molestaría sí todo eso fuera reciproco y cuidara de mis sentimientos, porque él realmente me gusta, no pretendo usarlo para olvidar a nadie, ni para pretender ser algo que no soy, claro que no, él me gusta, y eso me quedo completamente claro -mucho más que antes- justo ahora con sus manos alrededor de mi cuerpo, cuando mi corazón se sintió en casa, cuando mi cuerpo encontró paz, porque con él siempre me siento aceptada, apreciada, sin importar si estamos con los demás, o solo nosotros como en este momento, quiero seguir sintiéndome así con él, quiero seguir experimentando esas emociones desconocidas.

Quiero continuar hablando, quiero decirle que quiero que todo esté bien, también quiero hacer preguntas, y obtener respuestas, pero cuando reúno la valentía para mirarlo frente y me reacomodo me doy cuenta de que nuestros rostros se encuentran demasiado cerca, tanto que creo que siento su respiración chocar con la mía, de nuevo sus ojos están puestos en mí, su cabello cae sobre su rostro y sus mejillas están tan rojas que repentinamente siento que las mías también arden, él está tan cerca de mí, y encima pareciera que intenta reducir la distancia que nos separa ¿Qué es lo que está intentando? ¿Sasuke será mi primer beso? Porque aunque suene tonto, en mis veinte años no he besado a ni un perro siquiera.

Sé que parezco sosa y aburrida, pero en mi vida he puesto muchas otras cosas como prioridad antes que los sentimientos, antes que los chicos, siempre ha habido cosas mucho más importantes, pero no pienso poner resistencia alguna sí es que eso es lo que intenta, no me desagrada el hecho de que sea él, más bien, dentro de mi corazón deseo que sea él, porque sí bien no sí pueda enamorarme por completo, vale la completa pena intentarlo. Él tiene tantas cualidades que lo hacen parecer tan irreal, tanto que es posible que Dios me envíe al infierno solo por dejarme llevar, pero no importa. Quiero que reduzca esa mínima distancia entre los dos.

—Ou— Escucho murmurar a mis espaldas, haciendo que un escalofrío me recorra, corto torpemente el contacto visual con Sasuke y me alejo para prestar atención a quien sea que este detrás de mí —L-lo sentimos— Balbucea Hinata, tanto ella como Naruto están en el umbral de la habitación, mirándonos fijamente, acto que segundos más tarde dejan de hacer y pasan a mirarse entre ellos con el rostro completamente rojo, hay unos cuentos segundo de incómodo silencio antes de que ellos dos cierren la puerta frente a ellos provocando un estruendo, claro, huyan par de metiches ¡Por amor a todos los Dioses! ¿Por qué me tiene que pasar esto a mí? Sasuke y yo seguimos demasiado cerca el de uno el otro, pero aquel momento que parecía sacado de un cuento ya se ha roto, y justo ahora lo único que puedo sentir es que mi cara arde, mientras él suelta mi mano que había comenzado a sujetar en algún momento imperceptible para mí, para luego alejarse por completo.

—Perdón, simplemente me deje llevar —Murmura demasiado despacio como si intentará tener un excesivo cuidado con sus palabras— Sé que no debería dejar que lo que pueda sentir me haga actuar impulsivamente, nosotros no… —Lo interrumpo con un suave movimiento antes de que termine su frase, me parece que está muy nervioso, y puedo ver sus mejillas sonrojadas, además, sé perfectamente que es lo que me quiere decir, y no quiero oírlo, mi decisión está completamente tomada, quiero correr con todas mis fuerzas detrás de él, quiero estar a su lado, no con esa tonta mentira, no como amigos, realmente quiero estar al lado de él, porque no quiero que escape más de mis manos por decir palabras a medias o por malentendidos.

—No sigas con negativas, todo puede pasar Sasuke-kun— Exclamo sin muchos más rodeos, le sonrío para poco después salir huyendo de la habitación en busca de aquel par de metiches, cuando los encuentro ambos se disculpan varias veces por haber entrado sin preguntar, pero se escudan diciendo que estaban un tanto preocupados por nuestros comportamientos durante la cena, los tres estamos sentados en los taburetes de la cocina, intentando alejarnos lo más que podamos de aquel momento, hablando de todo y nada, Sasuke aparece un par de minutos después, con esa sonrisa de medio lado en su rostro tan común en él cuando esta de buenas.

Según Hinata e Izumi él es incapaz de decir mentiras o de pretender, no tiene espacio para eso en su vida, va por la vida con una cara de completa verdad para todos, que sí, es menudo arrogante, pero según ellas, él es demasiado fácil de interpretar, ellas que lo conocen desde hace tiempo atrás siempre dicen que no podría fingir, razón por la que he terminado de poner toda mi confianza en él, es por eso que decidí que debía poner mi corazón en sus manos, no para que lo sane, mi corazón sana por sí solo, está casi reparado de aquel golpe, tampoco quiero que lo cuide, aquellas ideas del amor romántico no me sientan del todo bien, lo he puesto en sus manos, como sincera prueba de que mis sentimientos son mucho más sinceros a cada minuto que pasa, que sin importar el pasado, a partir de este momento es él quien está en mi cabeza todo el tiempo, de que me enrede en mis propias ramas, pero está bien solo porque se trata de él

Naruto comienza a molestar a Sasuke, mientras este se defiende golpeándolo en diversas partes del cuerpo en repetidas ocasiones, acompañado de varios insultos, incluso Hinata parece divertirse con la situación a pesar de que la victima de tantos golpes no es otro que su adorado Naruto —Creí que estarían enojados por más tiempo— Dice Hinata en medio del alboroto, cosa que hace que Sasuke detenga sus golpes a Naruto y pase a observar a la chica, él niega con la cabeza, y se sienta en el taburete a mi lado que ha estado desocupado todo este tiempo, tenerlo tan cerca me hace sentir demasiado nerviosa, tanto que él evidentemente se ha dado cuenta, su sonrisa un tanto arrogante y esa mirada suya me hace saber que todo esto es algo que está disfrutando. Él va a decir algo, más es interrumpido por el bullicio que se forma cuando los demás miembros del grupo entran a la cocina.

—Hagamos una fogata junto a la laguna, tengo malvaviscos —Grita Ino, todos asienten ante su propuesta un tanto infantil, así que sin más nos dirigimos afuera a mitad de la fría noche, para sentarnos en un círculo bastante cerca del fuego, hablando de todo y de nada a la vez, todo es bastante tranquilo, agradable, pero tristemente a más de la mitad de mis amigos no les gustan las cosas tranquilas, son de los que prefieren las emociones demasiado extremas, por lo que sin más deciden empezar a jugar ese tonto juego de la botella. Cuando uno de los extremos de la botella me señala a mí y el otro a Ino mi instinto me dice que debería correr y esconderme o estaré perdida.

—Sakura ¿Cómo fue tu primer beso? —Pregunta, ahí lo tienen, esa bomba que tarde que temprano tendría que explotar, porque así es Ino, ella bien que sabe llegar a los rincones más profundos de la mente, es como si supiera que ese tema me está atormentando, me quedo en silencio no puedo responderle, porque simplemente no hay mucho que pueda intentar decir ante esa pregunta, además la forma en que todos me miran con evidente confusión me pone todavía más de los nervios —¿No estarás intentando decir que nunca has dado un beso verdad? Tienes como novio a un tipo demasiado guapo y me dices que tú nunca ¡Ay por amor de Dios Sakura! ¿Tienes dos años acaso? —Se queja, tal como si me regañara, hay un sentimiento de vergüenza que se apodera de mi cuerpo, por las palabras de la rubia, por la mirada de todos los presentes y por el hecho de que Sasuke ha terminado por desviar la mirada —Sakura, harás que Sasuke termine por aburrirse de ti —Dice sin más, Ino es mi mejor amiga desde que tengo memoria, nos conocemos desde los pañales, y la quiero mucho, por todo eso es que ella se cree con el derecho de soltar su lengua sin pensar siquiera en sí es cruel o no conmigo, porque es por demás cruel y ni siquiera parece estar intentándolo.

Permanezco sentada en la misma posición, con las manos sujetando mis piernas, y la cabeza gacha, quiero ponerme a llorar ahí mismo, y algo me dice que eso no pasa desapercibido para algunos, pues Temari se suelta a regañar a Ino por ser tan cruel, mientras Hinata y Matsuri se apresuran a murmurarme varias veces que todo está bien.

—Ven —Pide Sasuke, mientras toma mi mano, para hacer que me levante del sitio donde me encuentro sentada y caminar en dirección a dentro de la casa, alejándonos por completo de todos —¿Estás bien? — Pregunta, asiento, pero la verdad es que no puedo evitarlo más y termino llorando como si fuera una tonta niña pequeña, él me abraza, sus abrazos son demasiado cálidos, la verdad es que las palabras de Ino aunque no quiera han llegado a lo profundo de mi corazón y han terminado lastimándolo, sé que es bastante posible que ella tenga razón, sé que quizá cuando Sasuke me conozca mejor solo se vea obligado a soportarme por el tiempo en que habíamos planeado todo esto, y no más, porque se dará cuenta de que soy demasiado sosa para alguien que es a todas luces tan fabuloso como él.

—Sakura-chan ¿Estás bien? —Pregunta Hinata, quien se encuentra parada a un lado de nosotros, aun con su presencia Sasuke no relaja su abrazo ni un poco, comienzo a sorber de mi nariz, para así poder responderle a Hinata —No le tomes mucha importancia a lo que dijo Ino-chan, seguro que no lo hizo con mala intención, además creo que Sasuke no es ese tipo de personas —Murmura antes de que pueda responder, sus palabras calman un poco a mi corazón, sus palabras dulces y bastante sinceras, eso que la hace ser quien ella es, eso me calma un poco. Sasuke le agradece en mi lugar, y luego le pide que nos deje solos por un rato, así que en cuanto ella se marcha él me lleva hasta la habitación que por esas cosas del destino nos ha tocado compartir.

—No tienes que oír a Ino cuando dice ese tipo de cosas tontas, creo que nadie en el mundo podría aburrirse de alguien como tú —Dice, mientras deja un suave y delicado beso sobre mi cabeza, las lágrimas comienzan a brotar de nuevo, pero esta vez se debe a un sentimiento que es completamente diferente porque sus palabras me hacen sentir mejor que cualquier otra cosa en este mundo, le dan mucha tranquilidad a mi corazón que se encuentra bastante agitado en estos días. Me dejo caer en la cama presa del cansancio, estoy demasiado agotada como para intentar seguir en pie, respiro un par de veces para calmar por completo mi agitada respiración, su perfume me alcanza cada vez más cuando respiro, se siente tan bien que cierro los ojos para poder sentirlo mejor, él está a mi lado y acaricia mi cabello, y ya no importa nada más, no puede importarme otra cosa que no sea el momento que estoy compartiendo con él, nada me molesta ni puede hacerme daño, ni las palabras de Ino, ni el posible embarazo de Hinata, nada me hace daño mientras él esté a mi lado.