Sueños al rojo vivo.
3. Juegos y engaños.

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Warning: Amigos y amigas! He aqui lo que estaban esperando! ^^ La primera parte Yaoi del fic! *^^*... bueno, no sabría bien si catalogarla como yaoi o shonen ai... pero de que hay relación la hay! así que a los homofóbicos, les recomiendo que se alejen de la ultima parte ^^.

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El detective peliazul se sentía claramente amenazando, el sudor que caía sobre su frente parecía escocerle la piel mientras observaba el semblante de su hermana, que derramaba lagrimas silenciosas esperando su muerte.

"¿Qué es lo que quieres?" dijo a voz seca después de unos minutos (que mas que eso, parecieron eternidad) de silencio.

"Me alegra que comience a cooperar detective..." dijo con su ahora característico tono burlón, sin bajar el arma con la que amenazaba-...pues, por principio, baje esa arma, no me gusta que me amenacen.

"¡Hermano! ¡No le hagas caso! ¡Yo es..." la peliazul fue callada al observar como el hombre de ojos dorados cargaba el arma y la apuntaba directamente a la boca de la chica.

Al ver la clara amenaza, Horohoro se limitó a tirar el arma con resignación, sin cambiar su mirada de malas pulgas al chico.

El amenazante sonrió con malicia.

"¡Vaya! El detective mas famoso de la ciudad cumpliendo las peticiones de un vil ladrón... no es divertido?" decía al peliazul con burla "¿Qué? ¿Acaso no lo es?"

"Si, si lo es..." dijo secamente, con un nudo en la garganta y mirando fijamente al atacante.

"¡Entonces ríete!" dijo levantando la voz y apuntando con la pistola a los pies del detective.

"Ja... ja... ja..." en tono sarcástico, pero bien cumplió el joven.

El chico de ojos dorados miraba divertido la actitud del detective, la forma en que lo manipulaba fácilmente con tan solo apuntar un arma a su hermana.

Lo hacia bailar, cantar, imitar animales, cualquier tipo de cosas que lo harían poner en ridículo frente a toda la ciudad en donde era famoso.

"Ahora, imita a una vaca..." dijo Ren entre carcajadas malévolas. Estas estallaron al observar al peliazul posarse sobre cuatro patas sobre el húmedo y frío suelo, mugiendo como el animal que el amenazante había ordenado.

Basto tan solo un instante cuando, por detrás, llego un grupo armado de unas 6 personas. El primero en entrar, de largos cabellos castaños, sujetaba con fuerza el cuello y manos del asaltante, ocasionando que el arma cayera y Ren mostrara un semblante de enojo.

"¡Horo! ¡Levántate de ahí!" dijo Hao con claro enojo (y un tanto de diversión) en su mirada.

El peliazul se levanto rápidamente mientras sacaba un par de esposas y las amarraba a las manos del hombre de cabellos morados, recién atrapado.

Hao se dirigió, al momento de que Horo tuviera bien asegurado al asaltante, a liberar a la peliazul. Las marcas en sus manos y pies lucían graves, a pesar de no llevar un largo tiempo atrapada, las cadenas que amarraban a la joven se marcaron notoriamente.

"¡Rápido! ¡Llame a una ambulancia!" anuncio Hao a uno de los policías que se encontraba en la entrada, quien atendió rápidamente las ordenes de su jefe y corrió a buscar lo que solicitaba.

Hao se quitó su saco y lo puso encima de la joven, quien agradeció enormemente y salió de las frías alcantarillas recargada en el fuerte brazo del jefe, seguidos por mas de media docena de policías y el detective junto con su agresor, ahora capturado.

"Créeme, esto apenas comienza Horohoro" dijo Ren en voz baja, a tono en el que solo el policía que lo detenia pudiese entenderlo.

Simplemente se hizo el sordo.

Las cenizas y escombros provocados por la explosión aún cubrían el centro de la ciudad, aunque la visibilidad era más clara que antes.

Los primeros en salir del café (ya destruido) fueron Hao y Pirika, quién aún era protegida por el saco y el brazo del jefe de policía.

Después de caminar unas dos cuadras encontraron a la ambulancia que llevaría a la chica al hospital, a pesar de los intentos inútiles para que el jefe no tuviese tantas molestias.

"Joven Asakura, por favor" decía la peliazul mientras miraba la ambulancia a pocos metros de distancia-no es necesaria tanta amabilidad, realmente estoy bien.

"Es mi deber como policía ayudarte Pirika" dijo mientras ayudaba a subir a la ambulancia a la joven-si es que puedo dirigirme a ti de esa manera.

La chica asintió con la cabeza mostrando una grata sonrisa mientras las puertas de la ambulancia se cerraban detrás de los dos y comenzaba a moverse rumbo al hospital.

"Pirika... no se te ofrece algo?" dijo Hao, acercándose discretamente, pero lo suficiente, hacia donde se encontraba la chica

"Le he dicho que estoy bien Joven Asakura" interrumpió con algo de resignación "no es necesaria tanta molestia"

"Por favor, dime Hao" dijo el pelicastaño mientras tocaba suavemente la mano de la chica. El contacto no paso desapercibido.

"De acuerdo jo... Hao!" dijo con una sonrisa y un leve sonroje en sus mejillas. Desde pequeña había convivido con un sin fin de amigos de los cuales gozaba su hermano, pero jamás había recibido una caricia tan tierna como aquella por nadie... que ella quisiera.

Continuaron platicando en camino hacia el hospital de un sin fin de cosas sin sentido, generalmente evitando el contacto de miradas entre los dos. En dos o tres ocasiones que se logró, no pudieron evitar sentir como la sangre subía estrepitosamente a su cabeza e intentaban negarlo desviando la mirada una de otro.

Por primera vez... Hao Asakura realmente se estaba enamorando

El chino fue prácticamente azotado por el policía que lo sostenía a la celda, mientras un grupo de tres lo escoltaba.

"Saben, conozco mis derechos de prisionero, y merezco un mejor trato que este" dijo con sarcasmo y mirando la espantosa celda.

Se notaba que hacia años no la habían usado, estaba mohosa y en muy mal estado. La litera que se encontraba ahí carecía de una pata delantera y del colchón saltaban unos cuantos resortes, los cuales no podían ser ocultados por la manta (si es que así se le podía llamar al saco de naranjas mal tejido que estaba ahí) que se encontraba sobre el.

"Te hubieras salido con la tuya su el detective Horohoro no nos hubiera llamado" comento uno de los policías, mas robustos, de la escolta.

"¡Un buen acto obviamente!" comentó otro, a lo que el chino hizo una mueca de asco.

"Pasarás la noche aquí hasta mañana que esperes tu juicio" dijo un policía secamente mientras las botas de los otros resonaban anunciando su salida "y créeme, no te saldrá el coco por ahí".

Las carcajadas de los cuatro hombres resonaron mientras salían de la pequeña prisión subterránea mientras el prisionero fulminaba con la mirada el camino que habían seguido los policías mientras susurraba algo como "y el chiste fue...?"

Después de varias horas, el joven comenzó a golpear con pequeñas rocas la pared en tono de aburrimiento, intento ir al baño para perderse un instante en sus pensamientos, pero el estado en que se encontraba el retrete le quitaba el animo a cualquiera.

Observó la ventana engarrotada que se encontraba a un costado de el, bastante alta provocando que una idea se le viniera a la cabeza.

Se trepo en el lavabo quedando a suficiente altura para que sus brazos alcanzaran los barrotes. Comenzó a sacudir de forma suave, cada vez aumentando más la velocidad y la fuerza provocando que su cabello se despeinara y terminara completamente cansado.

"¿Intentando escapar?" se escuchó detrás de el.

Ubico a Horohoro en la entrada de la celda.

"¡No! ¡Ejercitando los biceps!" dijo con sarcasmo, para dar un golpe y quedar de frente al detective.

"¿Se puede saber que te proponías con mi hermana?" dijo el detective conservando el semblante con el que había entrado, serio y frío.

"Eso es algo que no le concierne detective..." comenzó a hablar con su tono burlón.

"¡Me concierne como policía y hermano de la amenazada!" gritó eufórico "Mas te vale que me contestes o si no..."

"Ya... ya... no es necesaria tanta amenaza. Si quiere saberlo, se lo diré" interrumpió el chino, mientras miraba con sus penetrantes ojos dorados al policía.

Parecía hipnotizarlo con su mirada fija y penetrante. Lentamente, como imantados, se fueron acercando.

La ardiente respiración del chino se sentía escocer en la cara del peliazul, quien al intentar reaccionar, fue tomado por sorpresa por el atacante y besado brutalmente.

Pasaron un par de minutos así, a pesar de los inútiles intentos por el policía de soltarse, los fuertes brazos del ladrón eran demasiado fuerte y lo pegaban a los barrotes de la celda provocando una cárcel entre ellas y sus brazos.

Lentamente fue recorriendo su manos dentro del saco que protegía, o por lo menos debiera, al detective provocando que la piel de este se erizara y un sin fin de sensaciones cruzaran por todo su cuerpo.

Lentamente, hasta que al encarcelado se le dio la gana, se separaron.

"Bueno... eso tenia pensado hacer... mas claro no pude ser detective" dijo el hombre con el mismo tono burlón, no solo en su voz, también en su fría mirada.

"¡Cínico! ¡Anormal!" gritó Horohoro, después de un largo rato en que no había reaccionado.

Se retiro rápidamente del lugar maldiciendo a toda criatura habida y por haber y azotó la puerta de la entrada con claro enojo (y un poco de confusión).

"Si... seré lo que me diga detective" dijo el hombre al asegurarse que este había salido-Pero mas astuto que usted, no me cabe la menor duda.

El sonido de unas llaves resonaron en la pequeña y fría prisión, mientras se veía al enjaulado jugueteando con ellas.



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Notas de Juri-chan.
Wiiii! capitulo tres señores!! y un poquito de yaôi para acompañar... ya se los debía, ne? ^^ Pero bueh! Espero que les haya gustado ^^.

Espero me comprendan si tardo un poco en continuar mis fics. Ultimamente tengo muchisisimas ideas de estos... pero la escuela me trae muerta! TxT además, se acercan los examenes y tendré que estudiar =P, así que no esperen muchos capitulos de mis fics en las proximas dos semanas =.=.

Ahmm... creo que es todo lo que debo de decir... continuemos con los reviews! ^o^

Nakuru Tsukishiro: Quiza sea por el espantoso título que le he puesto xD, pero me alegra que lo estes leyendo y no pierda una lectora más ^^. Aquí la continuación con un poquito de yaôi ^^

Kaori Koneko: Siiiii! me consta que mi niño (en este fic... el de Ren T_T) merece una recompensa... de por si hacerlo actuar como vaca es suficiente atentado contra su dignidad para que se quede sin paga alguna ù.u. Aqui esta el proximo capitulo ^^.

katemi: Si... se descubrió pronto porque era gran parte de la historia (a menos que quisieras que atrasara el yaôi xP) Pero... no es el único misterio del fic katemi-chan! aun faltan varias cosas por descubrir ;3.

maomaomadecoruaki: Vaya trabajo que me ha costado escribir tu nombre! @_x bastante original! x3 aqui esta la continuación.

Kisuka: Wa! no te mueras! queda musho por leer en este fic! @_x aaahm... vere si te consigo un lugarsito con Horo-sama... pero te advierto que es mio! (TxT bueno... de Ren... sera dificil acostumbrarme a eso xP)

Nanaka: Pues... creo que Ren continuara comportandose así (omitiendo un poco lo del pervertido xD) durante proximos capitulos... pero aqui ta el yaoi! soportalo aunque sea por el momento! TxT

shamahoro: Tercera vez? o.ô woa! hasta yo me sorprendo de mi poder! (eso que? xD) aqui esta una pequeña parte yaôi de la historia... entretente con ello en lo que termino x3.

Eleone: Nu te quejes mujer, porque tu también eres así con los reviews! ù_u (xD) He aqui una aparición de Hao-kun... con Pirika! *^^* Se lo musho que te va a encantar xDD. Pues... si, aparecerán Yoh y Anna, pero (como ya te dije) solo sera un papel pequeño y sin mucha importancia ^^U. Nos vemos en el msn!

(+**Anna/Asakura**+): Woa! tambien cuesta trabajo escribir tu nick! Me alegra que te guste como va quedando... si... Ren se esta comportando algo hentai... pero no me negaras que es divertido.. ¿o si? o.o En fin, sigue leyendo y poniendo reviews pa que yo continue! x3

Mushas gracias a ellos y a los que leen el fic sin dejar su review, pero recuerden que entre mas dejen, mas rapido continuo ^^.

Si u leita

Juri
mashi@otakumail.com