Ladies and Gentlemen!

¿Qué pasaría si les dijera que ya estamos entrando en los últimos capítulos de esta magnífica serie? Pues así como todos están leyendo, estamos entrando a la última parte de este arco. Con mucha sinceridad, les menciono que no se deben de perder los capítulos, serán interesantes, serán magníficos, provocará que explote sus cerebros. ¡Así que no se pierdan ninguno de ellos porque comprenderán muchas de las cosas que he escrito en estas cuatro series que he escrito!

¿Están listos para seguir leyendo?

It's time to read!

It's showtime!

Aclaración: Yu-Gi-Oh! VRAINS no me pertenece. Es propiedad de Kazuki Takahashi. Yo solamente pido prestado sus personajes para poder escribir mis historias que se podrán leer a continuación.

Aclaración: Con estas historias no estoy cobrando por ninguna ganancia o regalía. Solo escribo para el entretenimiento de todo público pidiendo permisos al autor. Cualquier aclaración, pueden escribir en los comentarios su opinión al respecto.

Dojun Kengo no pudo evitar sentirse un tanto nervioso mientras conducía y golpeaba en varias ocasiones el volante del mismo con uno de sus dedos a donde Vladimir Hinosuke le había mandado a reunirse, era raro que vieran al hacker de esa manera pero lo que no se imaginaban era por la persona que se encontraba así, la única persona que le provocaba aquellas emociones que le hacían un gran revoltijo en su estomago que no sería capaz de soportar todo ese nerviosismo sin antes fumarse todas sus cajetillas de cigarros, estaba seguro que tenía unas cuantas cajas extra en el carro y estaba más que seguro que saliendo de ese lugar, iría a comprar unas cuantas más, solo por si las dudas. Al voltear por el retrovisor, se encontró con aquellos ojos esmeraldas que se encargaban de mirar algo por el celular. Un gran bufido de molestia salió de él, algo que fue demasiado obvio que llamo la atención de su pasajero.

Poner algo de música en ese momento era realmente absurdo, aunque el silencio era aterrador, preferían inundarse en sus propios asuntos.

-No me mires de esa manera Kengo -Comentaba Fujiki Yusaku al alzar la vista, dejar su celular a un lado y cruzarse de piernas.- Sabíamos que este día llegaría, si tengo que ir y disimular que no sé nada para terminar con esto lo más pronto posible, lo hare

-Para la próxima, antes de decidir puedes discutir de esto con Revolver antes de querer ser el conejillo de indias que irá a una misión a ciegas -Comento un tanto irritado.- Quiero evitar mi muerte temprana, esa mirada que me dirigió al saber que irías sola, si no regresas sana y salva estoy seguro que primero ira por mi cadáver

-Lo sé -La chica subió su mano a su cabeza.- Pero uno ya no puede esconderse más, si puedo conseguir algo más por parte de Vladimir Hinosuke, me arriesgare a lo que se ponga enfrente -Soltó un pesado suspiro, dejo caer sus brazos a un lado de ella.- ¿Crees que le hará algo a Zaizen por haber mentido sobre mi?

-No tengo idea -Comento Kengo, alzo los hombros con pesar.- Pero sé que algo hará, Vladimir no se quedara con los brazos cruzados, es un hombre de temer o eso es lo que me han contado, muy pocas veces me lo he topado, es un sujeto educado por la vieja escuela -Una vez más miro por el retrovisor, la veía golpear su pie con el piso del coche.- ¿Estás nerviosa?

-Mentiría si dijera que no -Se fijo por la ventana. Cada vez se veía más cerca aquel cuartel de las fuerzas especiales. Para su gusto, estaba lejos, demasiado lejos de la ciudad, podrían hacer lo que quieran con ellos y nadie se daría cuenta. Era lo que le aterraba más que se abrazo con fuerza.- Ai quiso aplazar esta reunión con ellos pero con Tetsuya Kaiou en nuestro camino, era prácticamente imposible, si ellos saben de mi verdadera identidad o si encuentran algo que les llame la atención, estaré muerta -Negó.- A partir de este punto, mi vida ya se encuentra en juego ¿Como estaremos seguros que realmente saldré con vida?

Un pequeño silencio se formo. Tocar aquel tema, era demasiado sensible para todos que simplemente dejaban todo eso para otra ocasión, saber que perderían a la persona que los habían unido con tanto esmero, era aterrador. Kengo volvió a soltar un suspiro mientras trataba de concentrarse en el último tramo del recorrido. Esa misma mañana, había recibido una llamada de Vladimir Hinosuke pidiendo la inmediata presencia de Fujiki Yusaku, el hacker iba a seguir el juego de Zaizen de que aquel "chico" ya no se encontraba en SOL pero fue este quien se le adelanto.

-Dile al estúpido de Zaizen que no caeré en sus trampas -Comentaba Vladimir del otro lado de la línea completamente molesto.- No comprendo el porqué protegió a la chica pero ahora sé que es a esa chica que vi en la oficina, así que tienes que hacer bien tu trabajo y traer a Fujiki Yusaku a la oficina central, es una orden

Y colgó.

Kengo no pudo evitar maldecir en ese momento, alistarse y salir lo más rápido posible para hablar sobre lo que estaba pasando. Una llamada fue más que suficiente para reunirse en SOL, algunos presentes y otros más mediante video llamadas. Yusaku no pudo evitar abrir los ojos en el momento que le comento sobre aquel encuentro con Vladimir Hinosuke y que su presencia era demasiado importante. Se quedó en silencio mientras posaba su mano en su mentón, estaba analizando todos los posibles escenarios.

-No irá -Ryoken fue el primero en negarse y romper aquel silencio.- No sabemos a lo que nos enfrentaremos con ese hombre, no me arriesgare a que le hagan algo -Su tono de desesperación era bastante notable y entendible. Nadie se atrevía a mencionar algo.- Si puedo evitar ese futuro, realmente lo hare, no me importa las consecuencias que tenga, llegare al fondo de todo esto y lo detendré

-Entiende Revolver -Hablo Kengo para hacer entender al líder de Hanoi.- Yo no tomo las decisiones, si queremos salir de la mira de Vladimir Hinosuke, tenemos que hacer lo que nos diga -Subió su mano a sus lentes para quitárselos y mirarle directamente a los ojos.- En este momento, todos estamos en la mira de este hombre, si podemos conseguir un poco de información, será más que suficiente -Se cruzo de brazos.- Levantara más sospechas ahora que sabe que Zaizen la encubrio

-¡No lo permitiré! -Ryoken golpeo con fuerza el escritorio de Akira.-- ¡No permitiré que la usen como un conejillo de indias!

-Nadie lo quiere -Le interrumpió Kengo subiendo más de tono su voz. Si las miradas mataran en ese momento, alguno de los dos ya hubiera caído.- Llegados a este punto, nadie quiere esto pero si tomamos esta oportunidad, no sabremos cuando llegara algo como esto otra vez

-¿Cómo demonios vas a entender que si va la perderemos para siempre?

Un gran silencio se formo ante aquellas palabras angustiantes. Fueron varios minutos donde el silencio estaba presente y la furia de Ryoken aumentaba. Sentían que en algún punto, se encargaría de jalar los mechones de su cabello por no poder encontrar alguna buena solución. Era demasiado evidente que si él la perdía, no sabía que hacer. ¿En qué momento se convirtió en la persona más importante de su vida?

-Si no voy, se verá muy sospechoso y empezarían a dudar, son capaces de regresar a SOL y venir por mí a la fuerza, incluso serían capaces de amenazar a mis padres o utilizar a mi hermano como cebo, tener a Kengo de nuestro lado en este momento, creo que es lo que más me tranquiliza, porque será él quien se encargue de llevarme y traerme, sana y salva -Fueron aquellas palabras que Fujiki Yusaku menciono sin morderse la lengua, Ryoken le miro con enojo, la chica de ojos esmeraldas le devolvió la mirada pesada.- Si voy, es probable que esto pase rápido, solo son suposiciones que Tetsuya Kaiou implanto en esa persona pero si soy capaz de hacerle entender que yo no tengo nada que ver en todo esto, entonces tengo que ir, no pierdo nada con ir

-¡Yusaku! -Gritaba enojado el líder de Hanoi.- ¿Por qué siempre quieres sacarme la contraria?

-Es nuestra única oportunidad Ryoken -La usuaria de Playmaker miro a su pareja.- Si puedo conseguir un poco de información o puedo lograr que desvíen su mirada de mi y de todos nosotros, entonces lo hare, no permitiré que ustedes salgan heridos por mi culpa, no permitiré que Aiko sea involucrada en una guerra sin sentido -Subió su mano a su pecho.- Al menos hasta que podamos ingresar a esa puerta y terminar con todo esto, les comprare un poco de tiempo antes de que ellos se den cuenta de lo que está pasando, si pueden investigar más, háganlo porque aunque no lo quisiera admitir -Miro al piso.- Nos estamos quedando sin tiempo

-¿Y si no es así y pasa algo más? -Comento Ryoken inseguro, el sudor resbalaba de su frente.- ¿Y si pasa algo más y no podremos ayudarte? ¿Qué es lo que pasará?

-Pensare en un nuevo plan en el acto, se me ocurrirá algo más, lo prometo -Sonrió un tanto insegura, tomo la mano de Revolver para tranquilizarlo.- Estaré bien, se que todos estarán monitoreando nuestros movimientos hasta ese lugar, si algo me pasa, estará Kengo a mi lado para sacarme de ese lugar lo más pronto posible -Su otra mano la poso en la mejilla del duelista.- Tienes todo el derecho de preocuparte pero quiero que me dejes esto, se que podre hacer algo más, por favor, necesito saber que confías en mi

-Haz lo que quieras -Comento Revolver irritado. Mirando a Kengo.- Asegurate de traerla con vida

-Gracias por entender -Sonrió la duelista antes de tomar sus cosas y salir acompañada de Kengo.- Por favor, cuiden de Aiko y Ryoken en mi ausencia -Hizo una pequeña reverencia a todos que solo miraron en silencio como ella daba media vuelta y salía de aquel lugar.

Un pequeño dolor de cabeza empezaba a tener Kengo en ese momento que detuvo el carro, habían llegado a su destino. Antes de salir del carro tomo una gran bocanada de aire, era momento de actuar. Abrió la puerta del lado del conductor para salir y se dirigió en la puerta trasera para abrir la puerta. Yusaku bajo en ese momento, mirando con atención todo el lugar hasta mirar con atención los grandes ventanales de aquel edificio de las fuerzas de seguridad pública. Alzo un poco más la vista para encontrarse en ese momento con aquellos ojos grises. Vladimir Hinosuke la miraba con atención, quería hacerla sentir débil e indefensa pero eso no sería suficiente para ella que estaba acostumbrada a ello. Acomodo su corto cabello azul y empezó a caminar a donde Kengo le guiaría a donde sería interrogada.

.o.

Una sala de interrogatorios siempre era deprimente, aquellos colores grises que era capaz de enloquecer a todo aquel que tocara aquel lugar. No era capaz de tener una ventana ante aquellas tres paredes que rodeaban a uno. Aquellas lámparas tan molestas arriba de uno que simplemente, era capaz de golpear con su dedo la mesa frente a ella y tomar un poco de agua de aquel vaso que le ofrecieron. Miraba todo con atención, incluso aquel cristal frente a ella. Si cerraba los ojos por un momento, era capaz de sentir y escuchar las voces de las personas que se encontrasen en ese lugar.

Agudizar sus sentidos, era como le había enseñado Kengo cuando vivía con él. Dejar a un lado el molesto sonido de su corazón golpeando con desesperación su pecho y concentrarse en lo que los rodeaba. Aparentar aquella tranquilidad y evitar que sus emociones se mostrarán en su rostro. No mostrar debilidad, no mostrar nada que pudieran utilizar en su contra.

Como Playmaker estaba acostumbrada pero como Fujiki Yusaku, estaba preparada para ello.

El sonido de la puerta abierta interrumpió su concentración. Al abrir los ojos se encontró con Vladimir Hinosuke con varias carpetas entre sus brazos. Una vez que se sentó en la silla frente a la mesa, dejo caer los documentos para empezar a organizarse. Aquel policía alzo los ojos para encontrarse con la chica que no dejaba de golpear la mesa con bastante nerviosismo.

-¿Te encuentras bien? -Pregunto un tanto inseguro.

-Si le soy sincera, no -Ella sonrió pero inmediatamente borro aquel gesto.- Si ha leído mi expediente, podrá comprender algunas de mis fobias a las habitaciones pequeñas y al contacto humano, entre otras más que ahí están escritas -Se cruzo de brazos para mirar frente a ella aquel gran vidrio polarizado.- Sin decir que estar en la mira de tantas personas, puede provocar que entre en pánico

-Si lo leí, disculpa por leerlo sin tu consentimiento -Comento Vladimir con una sonrisa. Sacarle información a esa chica, seria fácil, leyendo sus debilidades, seria fácil para él ¿No?.- ¿Cómo es que puedes vivir de esta manera?

-Supongo que uno se acostumbra al entorno con el que va creciendo -Yusaku se encogió de hombros.- Por más que uno quiera vivir con tranquilidad, en lo más profundo de uno, sabe que es imposible -Tomo un pequeño sorbo de aquel vaso de agua.- Dejo que no me afecte aunque por dentro, hay algo que aun me sigue destruyendo

-Suena a que es muy difícil vivir de esa manera -Vladimir se rasco el cabello, hizo una pequeña reverencia en señal de disculpa.- Lamento haberte traído a este lugar pero si contestas lo más pronto posible, podremos terminar con esto rápido -Tomo un poco de aire y se acomodo en su asiento.- ¿Cuál es tu relación con Akira Zaizen y porque mintió sobre tu identidad?

-Zaizen Akira no tiene la culpa, nos conocemos desde hace algún tiempo, soy la amiga de su hermana menor, cuando buscaba un trabajo a medio tiempo que me otorgara oportunidades de servicio a la carrera que estoy estudiando en la Universidad, Zaizen-san me ofreció un puesto en su compañía mientras estudiaba, mi lugar está asegurado en SOL al momento que me gradué o eso fue lo que me prometió -Le miro con atención.- Como sabrá, mi información está protegida y limitada a todo aquel que quiera consultarla, fue el trato que le dieron a mis padres en el momento de mi rescate y lo que decidieron hacer ellos para protegerme, aun estoy en el programa de protección de victimas, así que él no sabía nada, además, es fácil que se confundan por mi nombre, normalmente es un nombre de chico por eso pido que me llamen de un nombre más corto -Explicaba con tranquilidad.- Por eso hay varias personas que suelen olvidar mi nombre, no tengo problemas con ello

-Ya veo -Comprendió Vladimir.- Siendo una víctima del caso Lost, es lo más lógico ¿Tienes algún contacto con las demás victimas?

-No lo sé -Sonrió.- Puede que fueron mis compañeros de clases o personas que me encontré en la calle, se supone que nadie debe de saber y si un día, decidieramos encontrarnos, supongo que fue un gran paso que decidimos tomar

-Se supone pero resulta que hay duelistas en Vrains que aseguran que son de ese hecho, incluso los Ignis que los acompañaban, solo eran compatibles con los mismos, se dice que aquellas IA's serían capaces de reconocer a su usuario cuando se encuentren de nuevo, suena un tanto misterioso, ¿No es así?

-Me aleje de los duelos al mismo tiempo que me rescataron de aquel lugar, personas como ustedes nunca sabrán a las torturas que uno sufrió en esa habitación, ni siquiera el mundo es capaz de ver lo que uno sufrió porque en el mismo instante en que nos liberaron, SOL y la policía hicieron un trato con nuestros padres para que una noticia que haría mucho escándalo, no se diera a conocer, es algo misterioso ¿No lo cree? -Sonrió con malicia, Vladimir tomo postura ante aquellas palabras. Observo como la chica subía su mano a su brazo donde mostro varias cicatrices, aquel oficial las miro con atención.- No ganar nada, ni siquiera la comida, día y noche despiertos porque no sabíamos que sería de nosotros cuando todo esto terminara, cuando todo esto termino, uno no tenía ganas de seguir viviendo, el dolor que sentíamos y los miedos que se apreciaban de nuestros ojos, aquella soledad que éramos capaces de sentir, el corazón es fuerte pero cuando le enseñaron a ser débil, no tiene de otra, eso fue lo que se aprendió en aquel lugar -Sonrió con nostalgia.- ¿Sabe que Ignis me hubiera representado? Siempre tuve esa curiosidad

-¿No lo sabes tú?

Yusaku negó. Vladimir vio en aquellos ojos esmeraldas, tan hermosos como la piedra misma, tan llamativos como la belleza de la chica pero algo dentro de ellos eran capaces de decirle que estaba ocultando algo más, tenía que seguir preguntando si quería saber más. El oficial solo suspiro mientras seguía buscando entre aquellos documentos.

-¿Sabías que Kogami Kiyoshi, tiene un hijo?

-Si no mal recuerdo -Hizo una pequeña pausa.- Era Revolver, ¿no? Recuerdo que aquellos periodistas que estuvieron en la construcción de la Torre de Hanoi mencionaron algo al respecto -Sonrió ante aquella mirada confundida de Vladimir.- Aunque ya no sea una duelista eso no quiere decir que siga viendo de manera interesante los duelos, me encantaron desde que era pequeña, había ingresado a varios torneos pero con lo que me sucedió, no puedo soportar tener un disco de duelos en mis manos

-Supongo que tu duelista favorito es Playmaker

-No, en realidad -Yusaku acomodo su corto cabello azul.- Puede que Playmaker sea una "creadora de jugadas" como indica su nombre pero Revolver tiene estilo en cada jugada, no sabe rendirse y muestra fortaleza como demás jugadas importantes que nadie sería capaz de ver, podría decir que es mi duelista favorito, claro, desde el punto de vista de una duelista que era una promesa en los duelos -Soltó una risita, Vladimir observo como sus mejillas se pintaban suavemente de rojo. Esos sentimientos eran reales.- Aunque también podría opinar de Soulburner, Blue Angel y demás duelistas que seguirán apareciendo por la red -Alzo los hombros con diversión.- Mientras el tiempo siga avanzando, los duelistas seguirán apareciendo y sin duda, será más divertido apostar quien será el mejor de entre todos ellos

Aquella sonrisa tan tranquila o quizá, enigmática en aquel rostro femenino, era capaz de darle cierto dolor de cabeza. Era molesta, aunque sea capaz de responder todas sus preguntas, las respuestas parecían que simplemente le daba vueltas al asunto, no le decía mucho de la chica. Vladimir cambio su postura, se le había ocurrido algo más.

-¿Cómo es que conoces a Tetsuya Kaiou?

Ante aquella pregunta, Yusaku no dudo en ponerse sería. Su rostro se ensombreció, la sonrisa se había borrado de su rostro. Tomo el último sorbo de su vaso de agua, subió sus manos a la mesa y le miro con atención. El líder de las fuerzas de seguridad pudo notar como aquellos ojos esmeraldas que anteriormente habían brillado, se apagaban hasta convertirse en un verde demasiado oscuro. Una postura completamente diferente de la chica que se había encargado de burlarse de cada una de sus preguntas. Un gesto triste y desesperado apareció en ella, conocía aquel rostro, era el mismo que siempre aparecía en él, totalmente cansado, pidiendo que alguien le ayude pero no era así.

-Veo que usted conoce a ese bastardo, ahora lo comprendo, ambos somos sus peones en este juego, ¿No es así? -Vladimir brinco en su asiento ante aquella tranquilidad que mostraba. No sabía que era peor, si aquella sonrisa tan enigmática o aquella tranquilidad que le otorgaba escalofríos. Aquella fría voz, aquellos ojos vacíos. - Primero, conocí a ese bastardo un día en la Universidad, se presento ante mí con bastante interés, quería que lo ayudara con un programa del que yo no tenía el mínimo interés pero él se encontraba ahí, detrás de mí, era tan molesto e insistente que se atrevió a hacer algo mucho peor -Respiro un poco, se recargo en el respaldo de la silla.- ¿Sabía que el accidente automovilístico que sucedió hace unos meses fue por su culpa? Mis padres y mi hermano estaban involucrados en dicho accidente

-Puedo haber sido causado por otra cosa, tus padres solo pudieron estar involucrados porque ellos se encontraban ahí -Menciono Vladimir tratando de encontrar un poco de lógica.- En el lugar y momento equivocado, es así como suceden los accidentes ¿No es así?

-Puede ser pero lo que me pasó el mes pasado, no era mera coincidencia -Se cruzo de brazos.- Segundo, fueron unos días después cuando yo sufrí un atentado en mi propia casa, alguien me ataco que estuve varias semanas en un hospital, puede verlo en mi historial, estaba internada en ese lugar que hasta hace poco recobre la consciencia y pude recordar que su rostro fue lo último que vi

-¿Por qué no lo denunciaste ante nosotros?

-¿En serio me hubieran escuchado? Ese bastardo estoy segura que se ha salido con las suyas varias veces en el pasado y nadie es capaz de detenerlo -Una dura pregunta que escucho Vladimir, hasta él lo hubiera dudado, con la protección que tiene ese tipo, ella no lo estuviera contando, fue una decisión muy estúpida pero era gracias a ellos que ella estaba con vida.- Tercero, quizá la razón por la que me encuentre en este lugar se deba a algo que él asegura que yo hice o que yo tenga, yo no he hecho nada malo, sigo las reglas y siempre me cuido a pesar de lo que me sucedió, así que hay que ir al grano Vladimir Hinosuke-san ¿De qué es lo que este tipo me está acusando?

Vladimir tomo un poco de tiempo para hablar. Al final, se relajo en su asiento, se cruzo de brazos y la miro con atención. Creo que ya no era tan necesario el ocultar sus verdaderas intenciones de aquel interrogatorio. Si ella se dio cuenta demasiado rápido, lo mejor de todo era saber la verdad de una vez. Era mucho más inteligente de lo que aparentaba, aquella lengua tan filosa que era capaz de decir únicamente la verdad y burlarse de su adversario con palabras directas. ¿Cómo es que nadie se ha dado cuenta de una chica como esa?

Pero le decía algo más, algo que ocultaba, podía sentirlo. Tenia que tener cuidado con lo que fuera a decir.

-Tenemos entendido que uno de los niños del caso Lost conoce o esconde algo que solo el profesor Kogami Kiyoshi decidió llevarse a la tumba, sin embargo, Tetsuya Kaiou te señalo a ti, Fujiki Yusaku -Tomo una bocanada de aire, era momento de preguntar directamente y dejarse de tonterías.- ¿Qué sabes sobre el séptimo niño y el séptimo Ignis conocido como Zero?

-¿Zero? -Yusaku alzo la ceja, subió su mano a su mentón con total desconcierto.- ¿Séptimo niño? Se supone que cada uno de nosotros, representa un elemento del duelo de monstruos, Luz, Tierra, Fuego, Agua, Viento y Oscuridad, ¿Correcto? -Vladimir asintió aunque también se sorprendió de que ella estaba confundida con lo mencionado, tal vez Tetsuya Kaiou se había equivocado.- Si se me está diciendo que hay un séptimo niño ¿Qué elemento representaría? y ¿Por qué este niño no apareció junto con nosotros cuando fuimos rescatados? Se debe de encontrar un reporte donde indica señales de un séptimo -Lo miraba directamente a los ojos, no había mentiras en los mismos pero también había molestia, enojo, alguien la estaba culpando sin razón aparente.- Además, cuales son las pruebas que le asegura Tetsuya Kaiou de que yo tenga la información correspondiente a esto, es la primera vez que escucho de esto que realmente, puede ser cualquiera ¿Qué tan cierta es esta información? Si ustedes no tienen conocimientos de lo que Kogami Kiyoshi hizo, entonces no son capaces de tener pruebas para esto -Se cruzo de brazos.- Es una acusación sin fundamentos, me temo que tienen a la persona equivocada

Vladimir sabía que la chica tenía razón. Solo seguía ordenes de ese bastardo, solo estaba haciendo eso por que se lo había ordenado. Si la chica frente a él no sabía nada ¿Qué es lo que tenía que hacer? Simplemente tenía que dejarla ir, no podía mantenerla por mucho tiempo en ese lugar cuando no había nada de lo que se le acusara. El oficial suspiro, dejo caer su cuerpo totalmente cansado.

-Tienes razón -Comento el mismo, subió su mano a su cabello y lo revolvió.- Investigare más al fondo porque este chico te está acusando, solo espero que no te vuelvas a esconder en el momento que vuelva a requerir de tu visita -La chica frente a él asintió.- ¿Quisieras meter una denuncia en su contra?

-Me encantaría pero no esta vez, tengo que seguir cuidando a mis padres que aun siguen recuperándose del accidente que tuvieron, ahora que yo estoy a cargo de ellos, debo hacer muchas cosas -Yusaku se levanto, hizo una pequeña reverencia y camino hacia la salida, antes de que abrieran la puerta, ella volteo a sus espaldas.- Ambos somos peones de este mundo, somos peones que caminamos en la mano de Tetsuya Kaiou, si alguien fuera lo suficientemente valiente como para detenerlo, como para hacer algo contra él, sería usted, solo espero que toda pesadilla con respecto a él, se termine de una vez -Sonrió la chica, hizo otra reverencia.- Si encuentro algo al respecto le estaré informando a mi superior para que le dé un informe, que tenga un buen día Vladimir Hinosuke-san

Vladimir Hinosuke observo como la chica caminaba para alejarse de aquellos pasillos. Inmediatamente, uno de los oficiales que había escuchado del otro lado del vidrio se atrevió a entrar a la sala de interrogatorios. Miro con un tanto de nerviosismo a su superior que no se atrevía a decir algo más. Se quedaba estático, estaba pensando, estaba analizando todo lo que había pasado.

-¿La va a dejar ir de esa manera? -Pregunto un tanto temeroso.

-¿Te parecía que estaba ocultando algo?

-Si le soy sincero, no -Comento aquel otro oficial.- No sé si es una persona honesta o una gran mentirosa

-Sonaba que intentaba aparentar algo, solo le daba vuelta a las preguntas, me sorprendió que tenía respuesta a todo lo que preguntaba, al final, fue capaz de descubrir el motivo de que la reuniera en este lugar, aunque puedo estar seguro que había algo más, una mentira, algo que ocultaba, lo podía sentir, aquellos ojos en el momento que hablamos de él, cambiaron para mostrar algo más de ella -Se levanto de su asiento, tomo los documentos y empezó a caminar para alejarse de aquella sala. El otro oficial intentaba seguirle el paso.- Pero de algún modo, no me puedo quitar de la cabeza que Tetsuya Kaiou está muy interesado en ella, ¿Qué tendrá de importancia la misma? ¿Por qué esta la obsesión de King por ella? ¿Acaso ella tiene algo de lo que no se ha dado cuenta pero este bastardo sabe y nos lo esta ocultando?

-¿Señor?

Ambos hombres se detuvieron, mirando por aquellos grandes ventanales.

-¿Qué importa más, una vida o millones de vidas? Si me equivoco, aceptare mi culpa pero si no, todas las personas de Den, no, de todo el país, inclusive del mundo, estarán perdidas por las decisiones de este momento -Vladimir estaba desesperado, por primera vez, no sabía que camino tomar.- ¿Una guerra sin sentido? Esa la hemos estado viviendo desde hace tiempo pero ¿Qué sorpresas nos traerá esta vez?

-¿Eso es una señal? Ellos están esperando a sus ordenes

Un corto silencio se formo. Si fallaba, sería el fin de su carrera pero si acertaba, estaría salvando a todo el mundo. Las últimas palabras que le dijo aquella chica aun rondaban por su cabeza, él era el único capaz de detener a ese bastardo pero al final se dejo rendir ante aquella orden que había recibido, solo asintió sin siquiera mirar al mismo. El subordinado a su lado hablo por el pequeño audífono de su oreja ante la afirmación que había dicho su superior. Cerró los ojos en ese momento que pareció eterno, solo serían unos segundos, unos cuantos minutos que le daría el mal sabor de boca para toda la vida, cerró sus puños con fuerza esperando a que llegara ese momento pero al final, no se escucho nada. ¿Qué es lo que estaba pasando? Abrió los ojos y busco aquella silenciosa respuesta de su subordinado. Completamente asustado e indefenso ante aquella poderosa mirada, simplemente se encogió.

-No pudieron dispararle -Comento el otro completamente nervioso, era demasiado obvio el temblor en su cuerpo.- Dojun Kengo llego en el momento indicado y se han marchado ya

Vladimir Hinosuke arrugo la frente, dejando caer todos los documentos que se encontraban entre sus brazos. Miro con furia afuera de los grandes ventanales. Había fallado.

¿Qué camino le faltaba por recorrer? El de la verdad y la justicia, al final, los buenos siempre ganaban. Ya no importaba lo que fuera hacer en el futuro, él, quería terminar las cosas de una buena vez sin lastimar a más personas pero al ver que tomaron otro camino, ya no podía dudar más.

-No me importa lo que hagas pero asegúrate de que Dojun Kengo traiga su trasero a la oficina lo más pronto posible -Su subordinado tembló un poco y se agacho para recoger aquello que había tirado.- Si Fujiki Yusaku resulta que es realmente nuestra enemiga, hare que se lamente toda su vida de esto

Aun si fuera lo último que hiciera, no dejaría que Tetsuya Kaiou lleve al mundo a la destrucción. Era momento de hacer su movida.

.o.

Yusaku abrió los ojos sorprendida en el momento que vio a Ryoken en aquella banca que estaba en el jardín. El sol estaba a punto de ocultarse y él, simplemente se encontraba ahí con una botella y un vaso lleno a su lado. Soltó un suspiro y dejo todas sus cosas en el sillón, metió un objeto a la bolsa de su falda y lanzo las llaves hacia algún punto de la sala. Miro con una sonrisa como Aiko estaba atenta a los movimientos de su querida "abuela" Taki para darle de comer su papilla favorita. La menor había volteado a verla, aquellos ojitos le miraron con atención antes de sonreirle, saludar con su pequeña manita y meter a su boquita un pedazo pequeño de manzana que había tomado de su platito.

Ambas mujeres no pudieron evitar soltar risitas para que al final, Yusa se despidiera de la pequeña y seguir su camino a su pareja.

Un tanto curiosa, abrió la puerta que daba al jardín, aquel ruido provocó que el de cabellos blancos mirara a su dirección. Con una pequeña sonrisa cerró la puerta y cerró los ojos al sentir el viento.

-¿Disfrutando de la puesta de sol? -Pregunto la chica con curiosidad para sentarse a su lado. Inmediatamente señalo el vaso y la botella.- ¿Cuántas has bebido?

-Ni siquiera soy capaz de tomar un sorbo -Comento completamente molesto y asqueado. Ni siquiera sus miradas eran capaces de encontrarse. Sabia que Ryoken estaba enfadado.- ¿Cómo es que pueden soportar este asqueroso sabor Homura y tú?

-Te acostumbras con el tiempo -Yusaku alzo los hombros con total desinterés, le quito el vaso de las manos y en un solo sorbo, se acabo con el contenido.- ¿No me vas a regañar por haber ido a ese lugar sin ti?

-Estoy acostumbrado a que hagas cosas a mis espaldas -Comento un tanto ofendido pero con cierta verdad.- ¿Cómo te fue?

-No sabe nada, solo son suposiciones que Tetsuya metió a su cabeza, no tiene idea para que quiere esta información -Sirvió en su vaso un poco más de ese liquido de fuerte sabor y una vez más de un solo sorbo, se encargo de terminar con el contenido que raspaba un poco su garganta.- Hizo preguntas tontas, solo le daba respuestas que quería escuchar, como Playmaker tuve que aparentar emociones y este fue el caso, tenía que actuar para que no me descubrieran, al final me comento que me habían señalado como la persona que sabía de Zero y el séptimo niño pero solo eso, ni siquiera menciono nada de la puerta o de otra cosa más, no saben lo que se está haciendo en la red -Soltó un gran suspiro.- Hasta el momento nosotros vamos un paso delante de ellos, hay que tomar esta oportunidad

-Que bueno

Aquella respuesta seca provoco que lo mirara de reojo. La duelista no dudo en suspirar y apretar un poco más en sus manos aquel vaso y mirar hacia el piso debajo de ellos.

-Se que estas enojado y con razón deberías estarlo, se que tienes miedo pero no olvides que no eres el único -Se encogió un poco en su lugar.- Yo también tenía miedo, ir a ese lugar completo de las miradas de los oficiales, aquella mirada de Vladimir Hinosuke que quería hacerme sentir indefensa, estar encerrada en aquel pequeño cuarto de interrogatorios, yo también tenía miedo Ryoken, tengo miedo de lo que vaya a pasar a partir de ese momento -Hizo una mueca.- Es como si volviera a revivir lo que me dijo Ai, me sorprendió salir de ese lugar con vida pero quizá, esta es una segunda oportunidad que la vida me otorgo para hacer las cosas correctas, ahora más que nada, se que no debo desaprovechar esto

Un fuerte temblor apareció en el cuerpo de la duelista, la manera en que se abrazaba a sí misma y que ni siquiera era capaz de mirar hacia él. Ryoken sabía que ella tenía razón, odiaba admitirlo pero ella tenía toda la razón, si ella no hubiera ido, probablemente estaría siendo perseguida como una criminal, haber ido a ese lugar fue peligroso pero lo hubiera sido más si ella no hubiera insistido, en ese momento realmente le alegraba que él hubiera no existiera pero ese no era el único problema, todo ese tiempo había estado enfadado con la misma porque hacia las cosas por si sola que no era capaz de pedir su ayuda pero nunca se dio cuenta que ella también tenía miedo, la manera en que ella también pedía ayuda, no lo mencionaba porque tenia un orgullo que proteger pero era fácil notar. Aquellos ojos, aquel fuerte temblor, lo había comprendido cuando la conoció mejor pero siempre olvidaba aquellos detalles.

La manera en que se había distanciado y que la mayoría del tiempo se la pasaba tan distraída, tan escondida en su propio mundo, había sido porque ella no quería mostrar esa debilidad, no quería mostrar aquel miedo que no la dejaba en paz. Ella tuvo que aprender de esa manera, esconder lo que sentía para que el mundo no se burlara de ella, aparentar ser fuerte cuando por dentro, se muere del miedo. Sentía que había sido muy dura con ella aunque de alguna manera, la misma se lo había ganado.

¿Qué iba a ganar con ese coraje e ira que se guardaba en el pecho? Nada, realmente. Estaba enojado porque nunca escuchaba, porque no sabía que hacer.

-Pero parecieras que no tuvieras miedo -El líder de Hanoi al fin soltó un gran suspiro.- Eres capaz de lanzarte al peligro sin siquiera pensar en las posibles consecuencias que puedes tener, al final, no entiendo cómo es que sales victoriosa

-Si te soy sincera, hay veces en las que ni yo entiendo -Soltó una pequeña risita aunque inmediatamente borro de su rostro aquella risa.- Pero sabes que tenía que hacerlo, no lo hice solo por mí, lo hice por todos ustedes, si puedo otorgarles una oportunidad de sacarlos de la mira de aquel oficial, lo hare sin dudar -Tomo una vez más aquella botella y lleno su vaso, otra vez, se bebió todo de un sorbo.- Tenía que hacerlo, si hubiera faltado a su interrogatorio, estoy más que segura que estaría sospechando al ocultar algo de suma importancia y directamente hubiera ido por mi cabeza -Tomo un poco de aire, alzo la mirada.- Quiero alejar a ese tipo lo más que pueda de mi, de mis amigos, de mi familia, de ti y de Aiko, aunque ahora tenemos tres diferentes futuros en nuestras manos, no queremos que aquella tragedia que Ai vio, se haga realidad, ahora que tenemos muchas oportunidades y estamos a un paso adelante, debemos encontrar lo que nos falta para llegar a los mismos

Un gran silencio se formo en ese momento. Las palabras dichas, eran lo que sentían en ese momento. Ambos admiraban aquel sol que terminaba por ocultarse y el cielo nocturno estaba sobre ellos. El tranquilo aire que revolvía sus cabellos, sentían que habían avanzado un poco al dejar al descubierto aquella furia aunque era más, aquel miedo de perderse.

-Yo sé que no debo de ser el único que tiene el derecho de sentir miedo pero pensar siquiera en la posibilidad de perderte -Tomo un poco de aire el hijo de Kiyoshi.- Es algo que ni siquiera soy capaz de imaginar, perdón, siempre soy el ultimo en darse cuenta que la vida no solo se trata de mi -Soltó una leve risita para al fin mirarla.- Perder a alguien más, eso me destroza más, perdí a mi padre y lo permiti pero perder a la mujer que amo, es algo que no aceptare

-No te disculpes, la que debería de hacerlo, soy yo -Sonrió. Le miro con tranquilidad.- Soy yo la que le hace daño a los que ama sin que me dé cuenta pero cuando lo hago, sé que no puedo arreglar las cosas a como estaban pero me esfuerzo porque las cosas sigan bien, a pesar de que lo tengo en cuenta, soy capaz de hacer las mismas estupideces -Una vez más volvió a servirse de la botella a su vaso y tomar todo de un sorbo. Carraspeo un poco al sentir que quemaba su garganta.- Lo siento, realmente me disculpo por todo lo que hago, por lo que hice en el pasado y por lo que haré en el futuro, seguiré cometiendo estupideces pero, se que podre arreglarlas

-Creo que estamos a mano, porque al igual que me ayudas a cargar con él pecado de mi padre, yo me encargare de ayudarte a cargar con él peso de tus estupideces -Ryoken por primera vez soltó una risita. Al ver que ella quería servirse de aquella bebida embriagante, se la quito de las manos. Un leve puchero apareció en ella al igual que un fuerte sonrojo en sus mejillas.- ¿Por qué estas bebiendo tanto?

-Para agarrar un poco de valor -Sonrió la chica, metió su mano a su bolsa y sacar algo de la misma.- Atrápalo

Ryoken atrapo con un poco de torpeza aquel objeto que le había lanzado. Un objeto pequeño que al momento de verlo, no pudo evitar abrir los ojos sorprendido. Aquel anillo que le había sido entregado a la chica hasta hace un año y que la misma había dejado en el momento que huyo para ir detrás de Ai, se encontraba en ese momento en sus manos. Al momento que el líder de Hanoi volteo a ver a la chica, se encontró con un fuerte sonrojo en el rostro de la misma que era capaz de llegar hasta sus orejas como pequeñas lagrimas que salían de sus ojos. Estaba seguro que ella no estaba lo suficientemente ebria pero pareciera que era la vergüenza que en ese momento estaba sintiendo.

-¿Por qué lo tienes tú?

-Bueno, en teoría es mío -Soltó una carcajada.- Pero decidí huir y dejar todo a un lado, dejar todo atrás por intentar cambiar mi futuro -Soltó un suspiro, subió sus manos a sus ojos para quitarse las lagrimas pero era imposible cuando las mismas no dejaban de bajar.- Lo encontré entre mis cosas mientras buscaba algo, me di cuenta que le faltaba brillo así que lo lleve a que lo limpiaran, todo este tiempo lo has estado guardando

-Claro que si -Sonrió Ryoken con nostalgia, se acerco a la mujer a su lado para tomar su mano mientras que su otra mano se encargaba de limpiar un poco sus mejillas húmedas.- Tú misma lo dijiste, es tuyo este anillo solo que el verlo, era un tanto doloroso

-Me imagino -Tomo un poco de aire.- Hace un año decidí huir sin siquiera mirar atrás, creo que fue la mayor estupidez que he hecho en mi vida, alejarme de todos, esconderme de ti, ni siquiera ser capaz de visitar a Aiko pensando en que le leerías todas mis cartas pero lo que sucedió con mi regreso, es algo que me merezco -Comento la chica al ver aquel semblante triste de la persona a su lado. Ambos habían cometido tonterías, tal vez era el Karma que se burlaba de ellos pero de eso se trataba la vida.- Todo es tan doloroso ¿Qué tan idiota tengo que ser para darme cuenta que lo perdí todo? Que no puedo regresar el tiempo y evitar todo esto, perdí todo y a todos por una tontería

-No lo perdiste, aun no has perdido todo porque aquí estoy yo a tu lado como siempre ha sido, no eres la única idiota en esta vida, los dos somos unos idiotas -Abrazo con cariño ese pequeño cuerpo que temblaba. Sin dudarlo, Yusaku se escondió en su pecho. Sin poderlo evitar, de los ojos de Ryoken bajaban pequeñas lágrimas. - Estaba tan enojado contigo que decidí no contarle a Aiko, es mi culpa que ella no te reconozca, que no sea capaz de recordar que siempre estuviste a su lado cuando yo decidí irme y dejarte sola con una gran responsabilidad, ambos tenemos la culpa de ser tan idiotas -Ambos soltaron risitas.- No tengo idea de cómo Aiko crecerá con dos padres idiotas pero se que nos tendremos al otro, así que no podemos perderlo todo cuando podemos volver a intentar

Un tierno beso en la frente de la chica, un cálido abrazo, de aquellos que ayudaban a juntar todas las piezas de su herido corazón.

-Pero -Se separo un poco de él.- Creo que es momento de que este anillo ocupe su lugar de nuevo

Ryoken abrió los ojos sorprendido, se quedo sin aliento en el momento que vio aquellos ojos esmeraldas brillar, aquella gran sonrisa que aparecía en su rostro como el bonito sonrojo que mantuvo en el momento que alzo su mano izquierda. La abrazo con mucha fuerza que más lágrimas aparecieron, esta vez, no era de tristeza, eran de felicidad. Un tanto nervioso como emocionado, es que puso aquel anillo en el lugar que siempre debió estar. Pequeñas risas como de dos adolescentes enamorados y emocionados eran capaces de escucharse en aquella casa. Los tiernos abrazos como los pequeños besos que eran capaces de otorgarse, solo ponían aun más nerviosos a sus corazones.

Sentir que con aquel toque podían desaparecer, es que decidieron abrazarse con un poco más de fuerza para evitar que aquella felicidad se alejase de ellos.

Una mañana tranquila quería tener Kogami Ryoken al sentir a ese pequeño cuerpo abrazado al suyo y sus manos unidas donde era capaz de sentir ese pequeño anillo que había guardado en ese tiempo. Su pecho inflado de felicidad que era capaz de suspirar y despertar a cada rato para fijarse que la chica seguía entre sus brazos. No quería saber que se tratara de una simple ilusión, aquellos pellizcos que se daba para darse cuenta que era una hermosa realidad. Un pequeño toque en su mano sintió como un gran temblor a ese pequeño cuerpo que un tanto curioso abrió los ojos, algo en ese momento le asusto.

El sudor que era capaz de resbalar por el cuerpo de la mujer entre sus brazos, aquel fuerte temblor que tenía y que provocaba que sus dientes castañearan. Al final, es que ella fue quien soltó su mano para tomar su cabeza y empezar a soltar gritos adoloridos mientras se removía en la cama con desesperación.

¿Qué era lo que estaba pasando ahora?

¡Muchas gracias por leer!

¿Que es aquello que molesta a nuestra querida Yusaku? Si son capaces de imaginar ¡No olviden dejar su comentario! En el siguiente episodio me encargare de responderles.

No olviden seguirme en mi página de Facebook: Anzuzu Dragneel. Estaré dando muchas noticias al respecto del futuro de mis historias.

El Link de mi página, como el demás redes sociales, la encuentran en mi perfil de Fanfiction. Hay algunos que no se pueden ligar a la página pero por eso pongo el nombre de la red y de mi perfil para que ustedes puedan visitarlo.

Por cada comentario el escritor desvelado tendrá una gran sonrisa en su rostro y más energías al seguir escribiendo.

Nota importante: El sitio de Wattpad, es usado como medida de precaución ante el anterior robo de historias que se sufre. Por favor, de apoyar a su escritor favorito, nunca intenten copiar las historias en otros sitios y usarlos como suyos, recibirán grandes sanciones por parte de la comunidad como la falta de respeto que se podrían ganar. Solo obligan a que nosotros como escritores, ya no confiar en ustedes, dejar de escribir y en caso mucho más grave, eliminar nuestras historias.

¡Nos vemos a la próxima!

Atte.: AnZuZu Dragneel

Fecha: Lunes 7 de Noviembre de 2022