-^_^- Bueno, sigo aquí con vosotros, al pie del cañón... pero los que más al pie del cañón se encuentran son Bra y Kaishi, ya que ellas han estado leyendo mi historia desde el principio
^-^ Os lo agradezco...
BRA^^: xDDD Si, al final le maté . soy muy mala... Bueno, mujer... no fue nada... es que tenía ilusión por dedicártelo, ya que fuiste tú la que me dio montonazo de ideas O_O ¿Qué escribo bien? ¿¡Entonces cómo escribes tú?! Te recuerdo que tú llevas más años que yo escribiendo, y tu escritura no tiene ni punto de comparación con la mía... Tú escribes el doble de bien que yo... ¿Si salen los de 02? Mmmm... Aún no lo se. Aún no he terminado de escribir la historia, y pensé al menos que salieran Ken y Davis, pero no lo veo por ahora como parte de la historia... Ya veré si las ideas se encajan, aún quedan 6... por ahora... Mis capítulos no son número seguro n_nu ...Muchas gracias mujer^-^ Me alegra que quieras ayudarme y no tardaré en pedirte ayuda si la necesito ^//^ Gracias...
Ah... Me gusta que me dejen reviews, así que... si hay alguien que esta leyendo mi historia y no ha dejado ninguno... please... déjelo, necesito opiniones y criticas constructivas!!! (Sobre todo críticas n_nu)
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_ _ _ _ _ _ _ Mi batalla y mi futuro_ _ _ _ _ _ _
Capítulo 5. Estrellas que caen del cielo
Después del presentimiento de que Deemon era el causante de todo lo que pasaba, Ryo se volvió a acostar, miró la hora el reloj iluminado de su mesa de noche. Apenas eran las dos de la madrugada.
Se volvió a dormir, pero con el miedo de volver a vivir todo aquello... Sin embargo, no recordó nada más... O más bien, no logró dormirse. El presentimiento y el miedo de volver a ver en su mente, delante de él, la muerte de su mejor amigo y la conversión de su hermano en Digimon Emperador, era más fuerte que el cansancio.
- ¿Pero porqué no logro dormirme?
Dio vueltas y más vueltas, y cerró los ojos para intentar dormirse, pero el miedo se lo impedía.
Desistió en el empeño de volver a dormirse, así que se levantó aún con la ropa de la calle, y se fue al lavabo. Abrió el grifo de agua fría esperó un momento, absorto en sus pensamientos, luego, sin pensárselo más, metió la cabeza debajo del chorro de agua helada.
Cuando cerró el grifo fue a coger al pañuelo que siempre llevaba al cuello, pero al palpar el borde de la camiseta y su propia piel recordó que se lo había dado a Henry el día anterior. Levantó la cabeza, aún mojada, y dirigió la vista hacia delante. Se encontró con su reflejo, el reflejo de un chico que ni siquiera sabía quién era... No sabía absolutamente nada de su pasado, y eso le hacía perder la cabeza...
Despertó de entre las sombras... Un pitido sonaba desde su habitación.
Volvió por donde había ido, entró en su habitación y descubrió que lo que sonaba no era otra cosa que su D-Power que, aunque roto, seguía realizando todas sus funciones. Era la señal de emergencia, la señal que sólo usaba Henry cuando se hallaban en un apuro... Algo iba mal, y no era una casualidad que ocurriera justamente después de esas pesadillas que nunca había tenido.
Salió de su habitación corriendo, mientras metía en sus bolsillos el dispositivo y las cartas. De encima de su cama cogió también el jersey rojo, dejó una nota a su padre y se precipitó por las escaleras.
Corrió por las calles desiertas de Shinjuku hasta llegar al parque de la ciudad, allí encontró a Takato y los demás.
- ¿Qué pasa?- preguntó al llegar
Yamaki también estaba con el grupo, y él fue el que respondió, muy aprisa y con desesperación.
- ¡Ryo, tenemos un problema! Se está realizando un salvaje en este mismo parque... ¡La barrera ha flaqueado!
- ¿¡Qué!? ¡Eso es imposible!
El parque estaba oscuro, pero el cielo desprendía luz por entre las ramas menos densas de los árboles. Se podía ver perfectamente una Luna en estado creciente y era esa luz la que les permitía ver entre las sombras de la noche.
Yamaki había cogido su mechero y hablaba nervioso a la par que lo abría y cerraba inconscientemente...
- Ya está aquí... Chicos, no sé cómo lo haréis, pero sea como sea, os deseo mucha suerte... Yo volveré a Hypnos antes de que aparezcan más salvajes.
Yamaki fue corriendo, y en efecto, a la par que él empezaba a desaparecer entre las ramas bajas, un campo digital aparecía delante de ellos... Una nube adelantó a la Luna y se interpuso delante de ella... la tensión se cernía en el ambiente... Ellos estaban indefensos, puesto que no tenían a su lado sus compañeros digimons.
Sin previo viso, el campo digital desapareció... De entre las espesas brumas apareció un digimon enorme. Un dragón demonio, de color negro. Sus cuatro ojos rojos miraban con fiereza a los niños. Sus dientes afilados sobresalían de la boca y sus garras escarlata arañaban el suelo que pisaba. Tenía dos pares de alas grises y una cola que terminaba en una especie de pinza.
- Devidramon, digimon dragón demonio, tipo virus. Su ataque se llama Garra carmesí...
El Devidramon levantó la cabeza, rugió hacia el cielo... las nubes empezaban a tapar todo el cielo...
* * * * *
Ryo conocía a ese digimon... había luchado contra él...
- ¡Devidramon, acaba con él!
- ¡No, Ken! ¿Qué haces?
- Mi nombre no es Ken... Mi nombre es Digimon Emperador...
- ¡GARRA CARMESÍ!
El fiero digimon lanzó su ataque contra Ryo, éste se movió rápidamente, pero no lo suficiente, el ataque le pasó rozando el brazo derecho...
* * * * *
- ¡Ahhh!
El chico moreno sentía el tacto caliente del ataque en su propio brazo... Subió la manga del jersey para ver qué era lo que le producía tal dolor incandescente... ¡Tenía marcada la cicatriz del ataque!
- ¿Por qué me haces esto?
El dragón dirigió sus cuatro ojos hacia los dos de Ryo... Sus compañeros también le miraban.
- ¡Ryo, ¿qué...!
- ¡Lo reconozco! ¡Fue culpa mía! ¡Yo te dejé morir! ¡Yo dejé que te convirtieras en el Kaiser! ¡Fue culpa mía...! ¡¿Qué más he hecho?!
Ryo no escuchó la pregunta que le había hecho Takato... Únicamente gritaba mientras apretaba con la otra mano, la herida del brazo derecho.
Los demás le miraban escandalizados. Ryo no solía comportarse así, y mucho menos en una lucha... Ellos no tenían ni idea de qué hacía, de qué le pasaba, de cómo se sentía... se sentía incapaz de hacer nada... nada le respondía... Ellos no daban crédito... Ryo no solía gritar de esa manera...
El dragón no tenía sentimientos, veía al grupo de niños como sus enemigos... nada más que eso, así que batió sus alas y voló hasta ellos...
- Si Devidramon se pudo realizar eso significa... ¡que nuestros digimons también deberían de poder!- dijo Henry yendo a pensar en el peor momento
- ... ¡Guilmon, ayúdame!
- ... Si puede transportarnos a nosotros también debería...
- ... ¡Claro!- dijo Henry adivinando los pensamientos de Rika
El irreconocible Ryo había recuperado gran parte de su conciencia, y ahora vivía en el mundo donde también vivían Takato, Henry y Rika...
- Funcionará... Pero para ello habrá que tener fe... ¡Levantad vuestros D-Powers!
Todos hicieron caso a Ryo y levantaron las pantallas iluminadas de los dispositivos hacia el cielo nublado.
- ¡La fe todo lo puede!
Todos los niños cerraron los ojos y sus pantallas brillaron fuertemente. Cuatro luces se alzaron en la noche... Devidramon retrocedió... Las luces llegaron hasta el cielo, traspasaron las nubes... Éstas desaparecieron dejando una amplia estela. Las luces volvieron a sus respectivas pantallas, pero diez estrellas se iluminaron en el firmamento.
Cuatro de aquellas estrellas descendieron en picado, pero las otras seis se lanzaron en distintas direcciones...
Devidramon retrocedió cuando una luz cayó sobre los brazos de cada entrenador que veía... En donde antes habían sólo luces, aparecieron digimons...
- ¡Guilmon!
- ¡Terriermon!
- ¡Renamon!
- ¡Monodramon!
El digimon se armó de valor y dejó de retroceder... Se lanzó a la batalla...
- ¡Adelante!- gritaron todos a la vez
Todos los digimons se lanzaron a batallar... Takato, Henry y Rika pasaron una carta de digievolución por sus D-Powers, pero Ryo seguía inmóvil, con el dispositivo entre sus dedos...
***********************************************************************
Ryo volvió a recordar sobre su pasado, pero ésta vez de un modo inexplicable... ¿Por qué la cicatriz del ataque volvió a ser visible en su brazo? Ryo se siente culpable de lo que le pasó a Osamu... Por su culpa, por su tonto e idiota enfado, Osamu murió... y su hermano, su mejor amigo, se convirtió en algo horrible... en el Kaiser... porque él no estuvo a su lado cuando le necesitó... ¿Qué estará pasando?...
*Nireya Mareakane Takaishi de Akiyama*
***********************************************************************
Por cierto, que el Ryo que utilizo yo en mis historias es el mismo de 02, osea, que conoció a los hermanos Ichijouji, y (para mí) Ryo no le pasa más de dos años a Ken. En este fanfic tiene 15, así que Ken tendrá unos 13 o 14, más o menos.
A esperar con paciencia la continuación, y siento que sean tan cortos los capítulos, aunque ya serán todos más largos...
¿Las parejas de este fanfic? Henry/Rika ¿A qué no lo parece? El Ryo/Ruki no me desagrada, pero para este fanfic lo necesitaba así... Además de que me gusta más la primera pareja^-^
¡¡¡Dejen reviews!!! O mándenme un e-mail a mi correo nireya_takaishi@hotmail.com
^-^ Os lo agradezco...
BRA^^: xDDD Si, al final le maté . soy muy mala... Bueno, mujer... no fue nada... es que tenía ilusión por dedicártelo, ya que fuiste tú la que me dio montonazo de ideas O_O ¿Qué escribo bien? ¿¡Entonces cómo escribes tú?! Te recuerdo que tú llevas más años que yo escribiendo, y tu escritura no tiene ni punto de comparación con la mía... Tú escribes el doble de bien que yo... ¿Si salen los de 02? Mmmm... Aún no lo se. Aún no he terminado de escribir la historia, y pensé al menos que salieran Ken y Davis, pero no lo veo por ahora como parte de la historia... Ya veré si las ideas se encajan, aún quedan 6... por ahora... Mis capítulos no son número seguro n_nu ...Muchas gracias mujer^-^ Me alegra que quieras ayudarme y no tardaré en pedirte ayuda si la necesito ^//^ Gracias...
Ah... Me gusta que me dejen reviews, así que... si hay alguien que esta leyendo mi historia y no ha dejado ninguno... please... déjelo, necesito opiniones y criticas constructivas!!! (Sobre todo críticas n_nu)
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_ _ _ _ _ _ _ Mi batalla y mi futuro_ _ _ _ _ _ _
Capítulo 5. Estrellas que caen del cielo
Después del presentimiento de que Deemon era el causante de todo lo que pasaba, Ryo se volvió a acostar, miró la hora el reloj iluminado de su mesa de noche. Apenas eran las dos de la madrugada.
Se volvió a dormir, pero con el miedo de volver a vivir todo aquello... Sin embargo, no recordó nada más... O más bien, no logró dormirse. El presentimiento y el miedo de volver a ver en su mente, delante de él, la muerte de su mejor amigo y la conversión de su hermano en Digimon Emperador, era más fuerte que el cansancio.
- ¿Pero porqué no logro dormirme?
Dio vueltas y más vueltas, y cerró los ojos para intentar dormirse, pero el miedo se lo impedía.
Desistió en el empeño de volver a dormirse, así que se levantó aún con la ropa de la calle, y se fue al lavabo. Abrió el grifo de agua fría esperó un momento, absorto en sus pensamientos, luego, sin pensárselo más, metió la cabeza debajo del chorro de agua helada.
Cuando cerró el grifo fue a coger al pañuelo que siempre llevaba al cuello, pero al palpar el borde de la camiseta y su propia piel recordó que se lo había dado a Henry el día anterior. Levantó la cabeza, aún mojada, y dirigió la vista hacia delante. Se encontró con su reflejo, el reflejo de un chico que ni siquiera sabía quién era... No sabía absolutamente nada de su pasado, y eso le hacía perder la cabeza...
Despertó de entre las sombras... Un pitido sonaba desde su habitación.
Volvió por donde había ido, entró en su habitación y descubrió que lo que sonaba no era otra cosa que su D-Power que, aunque roto, seguía realizando todas sus funciones. Era la señal de emergencia, la señal que sólo usaba Henry cuando se hallaban en un apuro... Algo iba mal, y no era una casualidad que ocurriera justamente después de esas pesadillas que nunca había tenido.
Salió de su habitación corriendo, mientras metía en sus bolsillos el dispositivo y las cartas. De encima de su cama cogió también el jersey rojo, dejó una nota a su padre y se precipitó por las escaleras.
Corrió por las calles desiertas de Shinjuku hasta llegar al parque de la ciudad, allí encontró a Takato y los demás.
- ¿Qué pasa?- preguntó al llegar
Yamaki también estaba con el grupo, y él fue el que respondió, muy aprisa y con desesperación.
- ¡Ryo, tenemos un problema! Se está realizando un salvaje en este mismo parque... ¡La barrera ha flaqueado!
- ¿¡Qué!? ¡Eso es imposible!
El parque estaba oscuro, pero el cielo desprendía luz por entre las ramas menos densas de los árboles. Se podía ver perfectamente una Luna en estado creciente y era esa luz la que les permitía ver entre las sombras de la noche.
Yamaki había cogido su mechero y hablaba nervioso a la par que lo abría y cerraba inconscientemente...
- Ya está aquí... Chicos, no sé cómo lo haréis, pero sea como sea, os deseo mucha suerte... Yo volveré a Hypnos antes de que aparezcan más salvajes.
Yamaki fue corriendo, y en efecto, a la par que él empezaba a desaparecer entre las ramas bajas, un campo digital aparecía delante de ellos... Una nube adelantó a la Luna y se interpuso delante de ella... la tensión se cernía en el ambiente... Ellos estaban indefensos, puesto que no tenían a su lado sus compañeros digimons.
Sin previo viso, el campo digital desapareció... De entre las espesas brumas apareció un digimon enorme. Un dragón demonio, de color negro. Sus cuatro ojos rojos miraban con fiereza a los niños. Sus dientes afilados sobresalían de la boca y sus garras escarlata arañaban el suelo que pisaba. Tenía dos pares de alas grises y una cola que terminaba en una especie de pinza.
- Devidramon, digimon dragón demonio, tipo virus. Su ataque se llama Garra carmesí...
El Devidramon levantó la cabeza, rugió hacia el cielo... las nubes empezaban a tapar todo el cielo...
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Ryo conocía a ese digimon... había luchado contra él...
- ¡Devidramon, acaba con él!
- ¡No, Ken! ¿Qué haces?
- Mi nombre no es Ken... Mi nombre es Digimon Emperador...
- ¡GARRA CARMESÍ!
El fiero digimon lanzó su ataque contra Ryo, éste se movió rápidamente, pero no lo suficiente, el ataque le pasó rozando el brazo derecho...
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- ¡Ahhh!
El chico moreno sentía el tacto caliente del ataque en su propio brazo... Subió la manga del jersey para ver qué era lo que le producía tal dolor incandescente... ¡Tenía marcada la cicatriz del ataque!
- ¿Por qué me haces esto?
El dragón dirigió sus cuatro ojos hacia los dos de Ryo... Sus compañeros también le miraban.
- ¡Ryo, ¿qué...!
- ¡Lo reconozco! ¡Fue culpa mía! ¡Yo te dejé morir! ¡Yo dejé que te convirtieras en el Kaiser! ¡Fue culpa mía...! ¡¿Qué más he hecho?!
Ryo no escuchó la pregunta que le había hecho Takato... Únicamente gritaba mientras apretaba con la otra mano, la herida del brazo derecho.
Los demás le miraban escandalizados. Ryo no solía comportarse así, y mucho menos en una lucha... Ellos no tenían ni idea de qué hacía, de qué le pasaba, de cómo se sentía... se sentía incapaz de hacer nada... nada le respondía... Ellos no daban crédito... Ryo no solía gritar de esa manera...
El dragón no tenía sentimientos, veía al grupo de niños como sus enemigos... nada más que eso, así que batió sus alas y voló hasta ellos...
- Si Devidramon se pudo realizar eso significa... ¡que nuestros digimons también deberían de poder!- dijo Henry yendo a pensar en el peor momento
- ... ¡Guilmon, ayúdame!
- ... Si puede transportarnos a nosotros también debería...
- ... ¡Claro!- dijo Henry adivinando los pensamientos de Rika
El irreconocible Ryo había recuperado gran parte de su conciencia, y ahora vivía en el mundo donde también vivían Takato, Henry y Rika...
- Funcionará... Pero para ello habrá que tener fe... ¡Levantad vuestros D-Powers!
Todos hicieron caso a Ryo y levantaron las pantallas iluminadas de los dispositivos hacia el cielo nublado.
- ¡La fe todo lo puede!
Todos los niños cerraron los ojos y sus pantallas brillaron fuertemente. Cuatro luces se alzaron en la noche... Devidramon retrocedió... Las luces llegaron hasta el cielo, traspasaron las nubes... Éstas desaparecieron dejando una amplia estela. Las luces volvieron a sus respectivas pantallas, pero diez estrellas se iluminaron en el firmamento.
Cuatro de aquellas estrellas descendieron en picado, pero las otras seis se lanzaron en distintas direcciones...
Devidramon retrocedió cuando una luz cayó sobre los brazos de cada entrenador que veía... En donde antes habían sólo luces, aparecieron digimons...
- ¡Guilmon!
- ¡Terriermon!
- ¡Renamon!
- ¡Monodramon!
El digimon se armó de valor y dejó de retroceder... Se lanzó a la batalla...
- ¡Adelante!- gritaron todos a la vez
Todos los digimons se lanzaron a batallar... Takato, Henry y Rika pasaron una carta de digievolución por sus D-Powers, pero Ryo seguía inmóvil, con el dispositivo entre sus dedos...
***********************************************************************
Ryo volvió a recordar sobre su pasado, pero ésta vez de un modo inexplicable... ¿Por qué la cicatriz del ataque volvió a ser visible en su brazo? Ryo se siente culpable de lo que le pasó a Osamu... Por su culpa, por su tonto e idiota enfado, Osamu murió... y su hermano, su mejor amigo, se convirtió en algo horrible... en el Kaiser... porque él no estuvo a su lado cuando le necesitó... ¿Qué estará pasando?...
*Nireya Mareakane Takaishi de Akiyama*
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Por cierto, que el Ryo que utilizo yo en mis historias es el mismo de 02, osea, que conoció a los hermanos Ichijouji, y (para mí) Ryo no le pasa más de dos años a Ken. En este fanfic tiene 15, así que Ken tendrá unos 13 o 14, más o menos.
A esperar con paciencia la continuación, y siento que sean tan cortos los capítulos, aunque ya serán todos más largos...
¿Las parejas de este fanfic? Henry/Rika ¿A qué no lo parece? El Ryo/Ruki no me desagrada, pero para este fanfic lo necesitaba así... Además de que me gusta más la primera pareja^-^
¡¡¡Dejen reviews!!! O mándenme un e-mail a mi correo nireya_takaishi@hotmail.com