Capitulo IV

Hola, aquí me tienen denuevo, con las ideas revueltas, en realidad no tenía idea de con que continuar, el final que tenía para antes era súper triste, se que más de alguien me hubiese matado, de hecho, yo misma quería matarme cuando le releí. Pero igual ahora hay cambios y gracias a una conversación con mi buena amiga Kalita fui viendo que podía poner. Gracias Kalita por todas las ideas, de corazón me ayudaste muchísimo y sobre toda las cosas por darme tu tiempo, revisar mis escritos y darme tantos ánimos.

Al fin ya estoy más segura de que hacer, sobre todo por que este capitulo me ayudo una gran amiga del colegio, Yui... (pero me tenía nerviosa, pues no e dejaba retractarme de nada de lo que decía U.U). Espero les guste este capitulo que ya es el cuarto (y yo que juraba que iban a ser solo tres capítulos, jeje :P)

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CAPITULO CUATRO

Kagome había accedido, Kikyou puso uno se sus largos y fríos dedos sobre el pecho de la joven, así con lentitud, la joven Miko sintió como poco a poco una calidez que venía de su pecho se iba dispersando, pasando a través de este contacto al cuerpo de Kikyou, ambas muchachas cerraron sus ojos, una por su parte en este gesto tomaba por definitiva la decisión de entregar su vida, la otra por su parte absorbiendo cual vampiro la vida de la otra.

Poco a poco Kagome sentía como su vida se le iba, con tristeza y algo de melancolía fue recordando hechos que habían marcado su existir, con una suave brisa llegaron a ella aquellos momentos, recordó aquel día en que llego a esa época, ese día en que había conocido al joven hanyou que le había robado el corazón, fueron llegando a ella también recuerdos de sus amigos, como los fue conociendo a cada uno de ellos, como todos tenían un triste pasar a causa de Naraku y la perla, fue entonces cuando también vinieron a su mente los recuerdos de Inuyasha, su mirada triste por Kikyou, el beso entre ambos que ella tuvo que presenciar, como el hanyou había elegido a Kikyou, fue entonces cuando también recordó sus propias palabras, aquel día en que le había pedido permanecer junto a él, pues en sus pensamientos lo único que deseaba era ver a su querido hanyou feliz... y aún lo hacía, comprendió por que estaba tomando esa determinación, lo hacía por que ella sabía que su amado hanyou jamás sería feliz sin Kikyou. Su rostro sin darse cuenta tomo una expresión más triste de lo esperado... aún así ella estaba decidida a continuar lo que hacía, todo por la felicidad de Inuyasha.

Kikyo por su parte no había dejado de sonreír desde que Kagome había aceptado, ella triunfaría en sus planes, saldría victoriosa en esa venganza que el despecho le había provocado realizar. Quería acabar con la miko, esa miko que le logro robar el corazón de Inuyasha, esa mujer la cual era su reencarnación, fue por eso que sabía que el único lugar posible donde encerrar las almas de esta, para que por ningún motivo esta volviese a existir era su propio cuerpo. En realidad, nunca las necesito, solo era parte de lo planeado, Inuyasha las pagaría caro el haberla olvidado por esa mocosa y como ella había dicho, si el hanyou no le amaba a ella, entonces no tendría a nadie a quien amar, además el plan era perfecto, lo haría sufrir, nadie la rechazaba y salía impune, es decir, que mejor que el hanyou pierda a su amada, por que este se sacrifique para darle la supuesta felicidad a él?. Inuyasha se arrepentiría, de eso estaba segura y eso para ella era el mejor castigo que podía darle.

Kagome fue sintiendo como las escasas fuerzas que tenía ya desaparecían, era una manera lenta de morir, pero ella estaba feliz, aunque fuera estúpido, ella estaba feliz de los motivos por los cuales moría... aunque no podría cumplir su promesa... "no podré permanecer a tu lado", pensó la joven, "pero esto es aún más importante que mi promesa para ti, se trata de Kikyou, tu felicidad... tu linda y amada Kikyou". Con esos pensamientos sintió que una lagrima había escapado fugazmente por su mejilla, resbalando con lentitud por su rostro, al mismo instante en que Kikyou finalmente le quitaba todo, ya no le quedaba más que entregar, ambas abrieron sus ojos, Kikyou con una gran sonrisa, Kagome su última vez, con una mirada sin brillo escasa en vida.

Al mismo tiempo en que esto se producía, Inuyasha llegaba al sitio en compañía de sus amigos, se sentía una gran energía en el lugar en que había dejado a ambas mujeres, las vio que estaban de pie, con ojos cerrados sin mirarse... estaban prácticamente inmóviles, pero... ¿qué hacían?.

-Inuyasha!!.. Detenga a la señorita kagome!:- grito el monje quien al ver a las jóvenes había comprendido en lo que estaban.

Inuyasha le quedo mirando sin entender tanto alboroto.

-Pero que pasa su excelencia?:- pregunto Sango, quien al igual que todos los presentes (menos Miroku), no entendía nada de lo que ocurría.

-Deténganlas antes que sea tarde!:- volvió a gritar Miroku:- La señorita Kagome le esta entregando sus almas, si continua morirá!.

Inuyasha se detuvo en seco, sintiendo que el frío le recorría el cuerpo sin compasión, su ser se sentía invadido de pesar, ¿Kagome que? ¿Qué haría?... su pequeña y dulce niña pensaba sacrificarse?!?, pero no era posible, ¿Por qué?. -Inuyasha, vamos pronto debemos ayudarla:- Dijo Sango quien ya corría a ver a su amiga. Pero Inuyasha seguía de pie inmóvil- Inuyasha!:- Sango le miro de manera inquisitiva, no se explicaba que siendo que el hanyou dijese que amaba a Kagome ahora no reaccionara para ir y ayudarle.

Al no ver respuesta corrió seguida por Miroku. (solo ellos pues el pequeño kitsune se había quedado junto con Kirara)

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Kagome se separaba de Kikyou, conocedora de que ya no había nada más que hacer, fue entonces cuando sintió como esta le arrebataba el collar en el que llevaba los kakeras, algo le hizo estremecer, ¿tenía miedo acaso de que Inuyasha se enfadara por que le habían quitado los kakeras?, que pensamiento más tonto, se reprocho a sí misma, Inuyasha no te dirá nada, quizás ni siquiera alcances a volverle a ver. Fue entonces que en aquella bruma que se había formado por sobre de ella pudo vislumbrar la figura de su muy querida amiga Sango, justo en el mismo momento en que Kagome dejaba ya de luchar, pues sus fuerzas mínimas ya no le permitían mantenerse en pie. Sango le atrapo, cayendo arrodillada con su amiga en el regazo.

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Miroku quien llego tras de ellas, miro amenazante a Kikyou, pero en seguida se dirigió con la joven Sango, debía ver cual era la gravedad de la Miko.

-Su excelencia... como esta ella?:- pregunto Sango, con los ojos llorosos. Miroku la vio entristecido, por el estado en que se encontraba era de seguro que moriría pronto, más bien era un milagro que continuase con vida, las palabras no fueron necesarias, Sango comprendió al instante, poniéndose de pie, recostando dulcemente a su amiga. Con una mirada fría se dirigió a Kikyou.

-Tu maldita!!!, como te atreves!:- espeto Sango al tiempo que preparaba su Hiraikotsu para atacarla.

-No me mires así... fue ella quien decidió su destino:- respondió Kikyou de manera calma, causando aun más enojo en la exterminadora, quien lanzó su ataque, pero fue esquivada por Kikyou, quien seguía aun con su sonrisa.

-Con ese ataque planeas herirme?:- pregunto burlona- Basta de tonterías, tengo mejores cosas que hacer. Sango hervía de la rabia, preparando nuevamente su arma para esta vez si herirla, cuando la voz de Kagome le detuvo.

-Sango, espera... no lo hagas:- murmuro la joven Miko, casi como una suplica, dejando a Sango aun más entristecida. El corazón de Kagome era enorme, eso lo tenía claro, aun cuando estaba delirando ella estaba dispuesta a defender a todos, sin importar que entre esos todos estuviera quien le había herido, quizás no físicamente, pero si el corazón, hacía mucho que el corazón de Kagome estaba herido por culpa de esa mujer. Aunque Sango hubiese preferido no hacer caso, lo hizo, se dirigió hacía su amiga, al tiempo que Kikyou escapaba.

-Sango... Gracias:- murmuro la joven Miko cuando la vio frente a ella, luego de eso los ojos de la miko se dirigieron al moje, brindándole una hermosa sonrisa, para luego ver hacía un lugar más lejano, donde sin ella saberlo encontró al hanyou, de pie aún, caminando hacía el lugar, con la cabeza gacha. Al verlo llegar, Sango le vio con cierto odio, pero Miroku, le tomo la mano y negó, para desaprobar cualquier reproche. No... no era el momento.

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Ahí parado frente a ella, solo pudo dirigirle una triste mirada, no había sido capas de defenderla, no por que se tratará de Kikyou, si no que en el mismo momento que oyó que ella quizás moriría su vida se había deshecho, se había paralizado al mundo. Ahora la contemplaba aún con vida, pero sabiendo que era un tiempo prestado. El hanyou no pregunto nada, tomo a la joven Miko entre sus brazos y sin decir palabra se encamino a la aldea.

Al tiempo que iba cargada entre sus brazos Kagome sentía que su vida se estaba esfumando, aún así trato de sonreír, pero extrañamente entre más se esforzaba, más triste era la expresión del hanyou, ¿acaso estaba desmoronándose ahí junto con ella?, pero..¿por qué?, no creyó que fuese ella la razón, hacía mucho perdió la fe... en ser el motivo de vida de Inuyasha, le dolió aún más la causa que se había colado en su mente ¿querría el ir tras de Kikyou?...¿por culpa de ella no pudo ir tras de su amada?, la sonrisa se esfumo del rostro de la joven al tiempo que llegaban a la aldea, Inuyasha le deposito en la cabaña, mientras la joven trataba de no mirarlo, evitar a toda costa sus ojos.

-Puedes ir tras de ella..:- murmuro la joven Miko. Inuyasha abrió los ojos despavorido... sintió que miles de lagrimas se agolpaban el sus párpados, salió rápidamente del lugar, sin dar respuesta, no quería que todos le viesen así, no quería que le visen derrumbarse... Se detuvo ya fuera de la cabaña, dejando que sus emociones salieran a la luz, llorando como un pequeño niño.

-No fuiste capas de defenderla!!!!!:- le grito Sango, llena de una rabia incontenible- Eres un maldito, No le defendiste....- repitió la joven entre sollozos. Miroku le abrazo levemente.

ve adentro Sango, ayude a Kaede... yo hablare con el:- dijo en un tono tranquilizador el monje, quien era el único que había podido "mantener" la calma (Shippo se mantenía ayudando a la anciana Kaede).

-Yo...:-trato de decir el hanyou, pero Miroku le detuvo, poniendo su mano sobre el hombro del Hanyou.

-Vamos Inuyasha, no me expliques, creo que entiendo lo que te ocurre:- le dijo el monje- debe ser doloroso para ti ver que Kagome se encuentra así...

-Todo fue mi culpa:- agrego el hanyou manteniendo la mirada baja, al tiempo que las lagrimas corrían por su rostro, Miroku vio estas, de verás su amigo sufría, pero su orgullo le impedía dejar que le viesen.

En estos casos el orgullo debe dejarse de lado... no crees?.. dile a la señorita Kagome lo que sientes, no valla a ser que cuando decidas decírselo sea demasiado...

CALLATE... ella estará bien... ¿no es así Miroku?:- pregunto el hanyou, aún más deprimido, sumido en un dolor que punzante le destrozaba el alma...

-No lo se... resiste con lo poco que le queda... pero sin todas sus almas... morirá:- dijo el monje tratando de mantener su tono, peor rompiéndolo al terminar, también el sufría de ver que aquella señorita tan buena y dulce estaba quedando sin vida.

-Que puedo hacer Miroku... que puedo hacer?:- pregunto desesperado el hanyou... sabiendo que seguramente Miroku sabría algo.

La verdad, he oído sobre esto, pero has de estar seguro...:- dijo Miroku, el hanyou asintió al instante- Solo Kikyou puede devolvernos la vida de la señorita Kagome... debe devolverte las almas que ella se llevó... pero es difícil que acceda así como así... debes saber... que si lo hace, Kikyou morirá... - Inuyasha le miro detenidamente, no quería que Kikyou muriese, pero... no podía dejar que Kagome lo hiciera, sus prioridades estaban claras ahora, Kagome estaba por sobre todo...

-Partiré cuanto antes...¿Cuánto tiempo tengo?- Preguntó el hanyou lleno de determinación

-Cuanto antes... no lo se, la señorita Kagome es fuerte, pero no resistirá mucho.. solo hazlo:- Termino por decir el monje. Cuando Shippo salió llorando a golpear a Inuyasha.

-Tontooooo:- Grito. Inuyasha le miró sobresaltado, ¿acaso ya no había tiempo?

-Shippo... Ocurrió algo???:- pregunto lleno de temor el hanyou.

Algo más?... - pregunto Sango- Esta dormida- Dijo en un tono algo más tranquilo, había escuchado parte de la conversación del monje con el hanyou, entendía ahora que aunque tenía razón para actuar así, quizás había sido algo dura. Inuyasha respiró "algo" más tranquilo.

Iré a verla entonces... para partir cuanto antes:- acotó el hanyou al tiempo que se dirigía a la cabaña.

-Pero esta...dor:- Sango fue detenida por el monje.

-Déjalo... Sango, quizás no pueda cumplir su cometido y le pierda... déjalo que por lo menos pueda verla quizás una última vez:- termino por decir el monje con sus ojos algo llorosos.

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Inuyasha se acercó lentamente a el lugar donde se hallaba dormida Kagome, la contempló con dulzura, pero también con cierto dudar...¿ que la había llevado a hacer eso por Kikyou?... ¿Tendría el culpa en eso?... decidió no atormentarse más con eso, para poder verla mejor, para poder fijarse más en esa niña, mujer hermosa que le había robado el alma, que tanto le costaba reconocer que amaba, pero que ahora que veía en ese estado, lleno de angustia se recriminaba el no haberlo hecho antes, de pronto una pregunta aún más terrible le surco la mente ¿y si jamás podía decírselo?... ¿ y si al regresar ella ya no estaba para él?..¿ si ella moría, antes de el poder hacer algo?, sintió que un frío escalofriante llenaba el lugar, se acerco a ella, acariciando con mano temblorosa el rostro de la joven, deteniendo su mano ahí, en sus mejillas, que suave era la piel de esta, que bello era su rostro, su vida sin ella no tendría un sentido, ¿por qué había sido tan tonto como para no entender todo eso antes... para decirlo en cuanto lo entendió?. Se puso de pie de improviso, se dirigió a la salida para emprender su viaje, deteniéndose ahí para voltear a verla nuevamente.

"Esta no será la última vez que te vea, no amada mía, como quisiera que abrieras tus ojos, me dejaras verme en ellos, como quisiera besar tus labios, llenarme de felicidad... pero todo es mi culpa, todo culpa de mi confusión, mi corazón... mi confuso corazón... pero no te dejaré irte sin mí... estarás conmigo, te diré como te amo... ya sea en vida, o en el otro reino... te seguiré hasta la muerte"...:- TE AMO:- pronunció suavemente el hanyou, al tiempo que una brisa se colaba por la entrada, desordenando levemente el hermoso cabello de la joven, haciéndola a vista del hanyou un ángel.

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He aquí nuestro capitulo compartido, es una alegría tener conmigo a mi amiga Yui, quien escribe, mientras yo le dicto...

Yui:- ya me tiene chata!, me duelen las manitos... Dark (Miaka):- No reclames!!, se bonita, además escribes muy rápido!!...No me gusta que me pongas así... yo solo soy DARK!! Yui:- vamos, no reclames, si yo escribo tu aguantas el nick!! Miaka:- Que me pongas Dark!! T.T, déjame escribir a mí entonces! Yui:- No, No :P... Sabían ustedes que mientras esta con sus ideas piensa en borrarlas todas... es estresante.. pero yo Yui las puse todas!! Miaka(Dark):- Que mall, que vergüenza!!, no me gusta poner todas las cosas que digo!!, a nadie le va a gustar Yui! Yui:- A mi si... además así queda más natural, jeje ;P, que no te acuerdas que antes siempre íbamos más seguras?? Miaka(Dark):.- habla por ti... ya deja de poner nuestros diálogos!! Yui:- Bien como digas Me presento, soy Yui.. no perdón, soy Carla, amiga de infancia de Cam, compañera de juegos, pero ahora quien le ayuda un poquito, después de todo, he puesto mis granitos de arena en este capitulo... (por algo sale más largo) *Yui siendo ahorcada. Bueno, espero que le guste como queda así, con nosotras juntas. Pero ustedes nos dirán, si no, igual meteré mi cuchara, por que ahora que estoy más libre Cam(Dark), me tendrá seguido en su casita.

Dark:- ahora sí, quería agradecer profundamente a mi queridísima ídola Kalita(que no te de plancha!!:P)quién me dio muchas ideas que trate de seguir, esperó que te guste como esta quedando... ahí veremos que pasa, estoy confusa, además que Yui no me da mucho tiempo para decidir, si digo algo ya lo esta poniendo O.O T.T.

Por ahora me despido, con un gran beso Dark

Nos despedimos!! Yui y Miaka(Dark), Contenta así!! Será!!U.U T.T.:P

PD.:- espero que tengas razón Kala y este capitulo guste... (.

Nailai:- Como es eso de que terminaste tu fic...T.T.... cuando, donde... parece que me atrase y no entendí algo, jeje, me explicas si.?... Gracias por dejarme review... espero que te guste como va ahora el fic, en fin, ... de ahí me cuentas si??n.n Me despido por ahora.... Besos Dark

goldenmoonlight13:- siempre ocurre lo mismo, parece que le tengo tanta mala a Kikyou que después escribo puras cosas malas de ella.. perdonen los que les gusta Kikyou si...n.n (pero es que a mi me cae re mal, no se por que...:P) Gracias por dejarme review mi niña (se que tu también tienes bastante mala al personaje de Kikyou :P) Espero te guste este capitulo...y en todo caso... ni tan nuevo este fic, solo que no se por que no le actualizo nunca....;P Me despido por ahora besos Dark-. Belén:- yap, ahí veremos que pasa...gracias por tu review!!, muchas muchas gracias.... y bueno me despido por ahora niña... cuídate yap. Besos Dark :P

Me dejan review porfis??, para ver que opinan...yap? Besos a todos Dark.