Cap. 9. Nuevos Compromisos
Mikki no podía pedir que las cosas salieran mejor de lo que ya estaban, desde aquella sesión con el señor Prat. Ella había recordado su vida pasada con precisión y era muy consciente de ello pero de todas las maneras que había imaginado y planeado encontrarse con Kosuke jamas imagino que este fuera a buscarla a ella.
Aquella mañana había decidido a llevar a cabo su plan, fingiría un suicidio delante de Kosuke para despertar su compasión, pero no tuvo la necesidad de hacerlo, Él fue a verla a su casa, le pidió que se comprometieran y que fuera a vivir con él, la felicidad que sentía no podía describirse en palabras, él le había contado todo lo que le había sucedido últimamente y ella le había confesado (a medias, jamas le diría la verdad) que ella también lo recordaba, el la había mirado intensamente como una mártir en la hoguera, eso no la incomodo porque siempre sacaría provecho de ello, mientras el pensara que era ella quien había muerto al salvar su vida.
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Kagome miro la hora de su reloj en el restaurante que siempre solía almorzar con Kosuke, esta seria la tercer semana desde la ultima vez que lo había visto, se había esfumado de repente, primero penso que estaba trabajando en algún proyecto importante y tenia poco tiempo para los conocidos pero después comenzó a preocuparse de que algo malo le hubiera pasado, después de todo ni siquiera recibió un llamado de su parte.
Suspiro y saco la carta que Saiko le había mandado desde las Vegas en América.
Querida Kagome:
Sé que para esta altura debería haber vuelto, pero adivina lo que paso:
Me he casado, por favor no te enojes conmigo, sé que fue una locura precipitarme así, pero con Hiroshi no sirven mucho los razonamientos lógicos, lo amo y estoy tan feliz, lo único que lamento es no poder compartir mi felicidad contigo, nos iremos de luna de miel a Egipto puedes creerlo? No sabia que El tenia una gran fortuna, hasta después de casarme que fue cuando me lo dijo, el te manda saludos y me dice que no te acerques a su amigo si por algún motivo trata de hablar contigo, bueno querida amiga eso es todo lo que tengo para decirte, no se bien cuando regrese pero te avisare.
Cariños Saiko.
Kagome doblo la hoja de la carta sonriendo, era feliz por la suerte que le había tocado a su amiga, que había encontrado al príncipe azul que siempre estaba buscado, aunque ella lo consideraba un poco atrevido con las mujeres, tal vez a Saiko no le importaba y seguramente lograría reformarlo.
Sus pensamientos volvieron a Kosuke que le había sucedido? Acaso se había molestado con ella? Había dicho o hecho algo indebido para molestarlo?
Sus preguntas se congelaron cuando vio al otro lado de la calle un hombre con un traje elegante que parecía mirarla directamente a los ojos, aunque desde esa distancia eso era imposible, su aspecto era el mismo de Kosuke al menos eso parecía por lo menos tenia el cabello negro igual que su amigo, aunque algo en él la inquietaba, la hacia sentirse incomoda, estaba tan concentrada en esa imagen que se salto cuando alguien toco su hombro, se dio vuelta para ver unos ojos dorados que la miraban intensamente, era El pero como podía ser? Si estaba enfrente del restaurante a punto de cruzar la calle? (No se puede estar en dos lugares al mismo tiempo) se dio vuelta rápidamente para comprobar si aun estaba allí pero la figura había desaparecido, en cambio estaba ahora mirándola directamente a los ojos en silencio, había demasiada frialdad en sus ojos, ya no llevaba sus lentes que lo hacían parecer dócil y humano, debía averiguar que le estaba ocurriendo a Kosuke, ya sabia ella que los científicos eran extraños pero nunca había imaginado que era para tanto, " Que ocurre Kosuke, casi me matas del susto"
El aun no le respondía y seguía mirándola intensamente. " Acaso ha sucedido algo, puedes confiar en mi, sabes que soy tu amiga"
Inuyasha sonrío sarcásticamente, que nervios tenia esta mujer para seguir jugando frente suyo, " He descubierto tu juego Kagome, será mejor que dejes de actuar, jugar a la inocente no te sienta bien"
" Pero…que…No sé que hablas" ( Que estaba sucediendo)
" Sabes muy bien quien soy verdad? Te aprovechaste de que no recordase nada, tienes una idea de cuanto sufrimiento has causado? Personas como tu no merecen la pena" Dijo con desprecio.
" No sé que tanto estas diciendo, yo no sé que hablas"
El se había acercado a su lado y tiro de su cabello obligándola a quedar a la altura de su cara estaba muy cerca de sus labios cuando dijo" Si no recuerdas, mejor para ti, pero yo me encargare de que lo hagas, tengo el poder para eso y lo usare, pero primero veré como te derrumbas a mis pies y suplicas; bruja" La soltó empujándola aunque no con demasiada fuerza, hacia atrás de su asiento.
Kagome trato de recuperar la dignidad que le quedaba mientras se reponía de aquel asalto, cuando miro para contestarle Kosuke había desaparecido. Que rayos estaba sucediendo? Porque se comportaba así con ella, se había vuelto loco? El sujeto era peligroso lo sentía de alguna manera, algo le decía que se apartase del camino de ese hombre y eso era lo que haría, se olvidaría de Él y continuaría con su vida, la ciudad era demasiado grande y no tenían porque volver a verse, sus ojos contuvieron las lagrimas que parecían querer traicionar toda la calma que fingía experimentar, se levanto y salió como pudo de aquel lugar.
Jamas volvería a verlo…. No sabia porque eso le dolía mas que todas las cosas horribles que le había dicho. Una lagrima rebelde escapo de sus ojos. ( Hasta nunca, Kosuke espero que seas feliz, a pesar de lo que piensas de mí)
