Cap.17 Verdades del corazón
Inuyasha miro su imagen en el espejo desde que le había propuesto casamiento a Kikio no había podido estar tranquilo, la imagen de Él con Kaome lo atormentaba, no era justo lo que había hecho con ella por más culpable que ella sea no merecía estar pasando por lo que le había hecho, desgraciadamente comprendió demasiado tarde que la había amado toda la vida y que nada cambiaría ese hecho, si estuviera en su poder resarcir el daño que le había causado lo haría.
Pero debía ser justo con Kikio que había sacrificado tanto por El.
Penso en Kaome en su dulce sonrisa y en la amistad que le había ofrecido cuando El solo era un humano y se encontraba pasando por un mal momento, sus manos se cerraron en un puño mientras inclinaba la cabeza para cerrar con fuerza sus ojos, Ella debía odiarlo por su comportamiento pero no lo hacia, su amor por Él era demasiado grande, tanto que le perdonaba todo lo que había hecho, No! No era justo para Ella. Tomo un suspiro y decidió que era hora de hacer lo correcto, haría lo que le dictaba su consciencia la dejaría ir aun cuando ya la había marcado como su pareja, se limitaría a brindar a Kikio todo lo que estuviera a su alcance para hacerla feliz pero nunca podría amarla, su corazón y alma pertenecían a Kaome.
Él sufriría toda su vida al alejarla de si mismo pero era el precio que tenia que pagar por haber perdido el control con Ella esa noche. Se encamino en dirección al cuarto de Kaome resuelto a comunicarle que la dejaría marcharse pero lo que vio en el corredor lo paralizo.
Mika estaba al lado de Kaome pasando un brazo sobre sus hombros y los dos reían alegremente de algo que Mika había dicho. Inuyasha se aproximo y pudo notar que el olor de Mika era como a flores frescas y silvestres, era un aroma muy cálido y dulce, era un ser de luz, estaba seguro de ello, pero que hacia tan cerca de su amada Kaome?
Al ver que se aproximaba Mika, camino hacia Él "Soy Michael, ángel protector de Kaome y si sabes lo que te conviene no la harás sufrir mas"
"Pero como te atreves a darme ordenes en mi propia casa"
"No tienes poder sobre mi Inuyasha, será mejor que trates de llevarte bien conmigo por el bien de ambos"
"No sabes lo que dices, desgraciado quita tus sucias manos de Kaome" Saco su espada para atacarlo, gracias a Dios que se había vuelto una costumbre llevar su espada desde que había recordado quien era Él, su hermano Sesshoumaro se la había entregado en el momento que también le entrego el manejo de una parte de sus empresas, a donde se encontraba su hermano ahora, Inuyasha no lo sabia pero tampoco le importaba ya tenia demasiados problemas en su vida como para querer meterse en la de Sesshoumaru.
La espada abandono su funda pero no se transformo en lo absoluto
"Maldita sea" Dijo tirando la espada lejos y preparo sus garras cuando quiso atacar a Mika no pudo hacerlo algo mas fuerte que Él lo sostenía impidiéndole que se acercara a su adversario, era como si una fuerza invisible lo protegiera. Ante la impotencia de no poder hacer nada descargo su puño contra la pared.
Mika se acerco a Él "Mejor dile la razón por la que viniste a verla Inuyasha"
"¿Que sabes tú de eso?"
"Todo, pero si no se lo dices tú lo haré yo"
"Ja! Haz lo que quieras" Se cruzo de brazos mirando molesto al extraño que acababa de conocer.
"Veras Kaome, Inuyasha que esta muy arrepentido por lo sucedido ha decidido dejar que te vayas"
Ante las palabras de Mika Kaome abrió grande los ojos ¿Acaso la dejaría irse?
"Como sabes tú lo que sucedió entre nosotros" Dijo Inuyasha sintiendo como su ira iba en aumento (Ese ángel sabia que ella era su pareja y se habia atrevido a tocarla) Miro a Kaome y nuevamente hacia Mika.
Kaome noto que Inuyasha comenzaba a molestarse nuevamente y se adelanto a decir algo con la esperanza de calmarlo " Yo no le dije nada Inuyasha el ya lo sabia todo cuando lo conocí"
Inuyasha miro con detenimiento a Mika camino hacia él y comenzó a dar vueltas a su alrededor finalmente se paro enfrente de Él con una mano en su barbilla "Así que un ángel protector de Kaome, muy irónico que vengas a salvarla de un demonio como yo, no te parece que ya es un poco tarde"
"No es tarde, al menos no todavía pero debes dejar de tratarla tan mal ¿No te das cuenta del sufrimiento que le has causado?"
Inuyasha se sintió culpable de aquella acusación y bajo sus ojos "No quiero hacerle mas daño créeme" Dijo ya en un tono más suave.
La actitud de Mika con Inuyasha cambio "No eres malo, tu corazón aun es bueno Inuyasha, pero debes saber que tienes que pagar por tus acciones"
" Haría cualquier cosa para mitigar la pena que cause en el corazón de Kaome, desde esta mañana cuando mis pensamientos me dijeron lo que había en mi corazón, no he dejado de lamentar lo que hice" Dijo mirando el suelo incapaz de mirarla a Ella a los ojos.
"Inuyasha…" Dijo Kaome
El continuo hablando "Yo intente mantenerme alejado, trate…pero.." Un ruido los interrumpió.
Era Kikio que andaba por el lugar
"Cariño aquí estas, te busque por toda la casa"
"Estaba conversando con Michael"
"Quien es el amor"
"Mi invitado, se quedara con nosotros por unos días" Mika y Kaome se miraron ante el cambio de Inuyasha que actuaba tan condescendiente, sabían que era por el remordimiento de sus acciones.
"Te daremos un cuarto para ti Michael y Kaome tu te quedaras en el cuarto de Huéspedes"
"Debes estar bromeando" dijo Kikio exasperada "Ella es mi asistente a sus instalaciones las decido yo"
"Tu asistente, como dices trabaja para mí, y de ahora en adelante no tendrá mas que ver contigo será una invitada de la casa al igual que Michael"
"Si claro" Se apresuro a decir Kikio no quería que se molestase o provocar que se enojara cuando estaba cerca la fecha de la boda.
Algo le había pasado a Inuyasha y tenia que ver con ese extraño que había aparecido y se mostraba tan familiar con Kaome, la noche anterior habría jurado que había visto una luz roja descender sobre la casa y brillar todos los cuartos con una luz blanca, desde que se había levantado ese día había notado actuar a todos de manera extraña, quienes antes eran sombríos se veían muy alegres y contentos como si hubieran sido purificados por aquella luz.
Hasta el mismo Inuyasha parecía estar afectado por ello, pero como era posible para un yukai de El no quedaba nada humano o Sí? No le gustaba para nada este cambio de acontecimientos, no era conveniente que ese hombre siguiera allí, sus planes corrían peligro, necesitaba deshacerse de Él y pronto. Se marcho dejándolos solos
"¿Que dicen, aceptan quedarse?" Inuyasha Miro con ojos suplicantes a Kaome
Acaso debía aceptar y quedarse o después de todo podría marcharse y seguir con su vida aun sabiendo que jamas volvería a ver al amor de su vida, ella estaba enamorada de Él. En ningún momento había pensado que ya estaba en condiciones de irse, además El se veía tan arrepentido pero debía ser realista acaso se quedaría a ver como el se casaba con Kikio.
"Pueden irse cuando quieran" Continuo Inuyasha esperando convencerlos.
Mika respondió por ambos para asombro de Kaome "Esta bien, no se diga mas aceptamos pero solo si dejas a Miroku y Sango vivir aquí con nosotros hasta que nos marchemos"
"Miroku y Sango" Dijo Kaome sorprendida
"Están en la puerta esperando que les abran" No pudo terminar la frase y Kaome habia salido corriendo en dirección de la puerta de entrada dejando a Mika y Inuyasha solos.
"Inuyasha será mejor que cuides bien de Kaome" Dijo acercándose por detrás de Él
Inuyasha se dio vuelta para responder pero El ya no estaba.
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Li and crystal:
Hemos decidido poner este nuevo capitulo porque no sabemos bien cuando podremos volver a actualizar, gracias por sus opiniones y comentarios.
Nemesis gracias por tus palabras te contestaremos mas detalladamente por mail ; )
