6 de noviembre de 2003: Advierto que este capítulo va a estar un poquitín confuso, ya que voy a hacer un revoltijo (alias Crossover) que da gusto y además sigan tomando en cuenta que este fic es un universo alterno (AU) ¿de acuerdo? (prometo que es la última vez que lo digo ^^U).
Me disculpo de antemano con los conocedores de todo lo que implica la franquicia Digimon, ya que sólo tomé los elementos que más me funcionaban para hacer este fic coherente, por lo que si encuentran alguna imprecisión me lo pueden hacer saber con toda confianza y yo se los agradeceré muchísimo.
Espero que les guste ^^
Capítulo 7: Ryo
Daisuke y Takeru estaban tan pegados al escritorio de Yameshi que faltaba poco para que lo atravesaran. V-mon y Patamon miraban desde los brazos y cabeza de su camarada (respectivamente) al recién llegado, con una expresión entre defensiva y de inmensa sorpresa.
- "¿T... Taichi?"- finalmente Takeru rompió el silencio con esta tímida pregunta. Daisuke, por otro lado, miró al mayor desafiante.
- "¿Qué significa eso?"
- "Han estado metiendo la nariz en donde no les corresponde"- comentó Taichi pasando de lado a los preadolescentes para sentarse en el escritorio de Yameshi- "Tratamos de ignorarlos, pero las cosas han llegado demasiado lejos"
- "¿Tratamos?"
- "El señor Yameshi y yo por supuesto"- respondió fríamente Yagami. Takeru sintió un escalofrío al comparar a este severo adolescente con el despreocupado chico que conoció cuando tenía 7 años.
Ahora que lo miraba con detenimiento, Nishida se dió cuenta de que hacía mucho tiempo que no veía a Taichi reir o jugar como el resto de sus compañeros. Con el tiempo se había vuelto serio y reservado, aunque trataba de aparentar que aún era el mismo de antes.
¿A qué se debía ese cambio? ¿Acaso su presencia en aquel instante tenía que ver con ello?
- "¿Yameshi?"- Daisuke golpeó con fuerza el escritorio- "¿Acaso eres socio de Yameshi?"
- "Bueno... podría decirse que sí..."
- "¡Entonces sabes de todo esto!"- esta vez incluso Takeru levantó la voz- "¡Sabías que los digimon del programa eran reales y que estaban siendo explotados por Yameshi! ¡Sabías de su sufrimiento y no hiciste nada por detenerlo!"
- "¡Cierra la boca Takeru!"- Taichi se puso de pié y tomó a Takeru de la camiseta. Patamon inmediatamente se enfureció.
- "Espera... Patamon"- susurró Takeru para tranquilizar a su amigo, mirando de lado a Daisuke, que estaba más que listo para tirarle un golpe a Yagami.
El mayor pareció calmarse y soltó a Takeru, retornando a su asiento. El rubio lo imitó.
- "Tú no tienes derecho a decir algo así, Takeru"- murmuró Taichi con rabia- "No sabes cómo son las cosas en verdad, así que mejor cállate"
- "No nos pensamos callar hasta que nos digas la verdad, Taichi"- respondió Daisuke con el rostro colorado, pero finalmente sentándose al lado de Takeru.
- "Muy bien, para eso estoy aquí"- Taichi se acomodó en el sillón de cuero que generalmente ocupaba Yameshi y miró a los dos menores.- "Supongo que se preguntarán desde cuándo me involucré en esto, ¿verdad?"
Takeru y Daisuke asintieron.
- "Todo empezó hace 3 años aproximadamente, cuando terminamos de grabar la película de Diaboromon justo al concluir la primera temporada y salimos de vacaciones. Supongo que lo recuerdas bien, ¿verdad Takeru?"
- "Sí"
- "Lo que no has de recordar, es que habían planes para comenzar a grabar nuestra segunda temporada casi inmediatamente. Nos darían dos meses de descanso y luego nos llamarían para iniciar la segunda temporada. Incluso Yameshi tenía parte del guión escrito"
- "Recuerdo que grabamos la película pero... ¿por qué no volvimos para la segunda temporada?"- preguntó Takeru genuinamente intrigado- "Ni siquiera sabía que existían planes... ¿Yamato sabía de eso?"
- "No, Takeru"- Taichi miró hacia el techo- "La verdad es que me enteré de la segunda temporada hasta que terminamos de filmar esa película con Diaboramon..."
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Taichi Yagami, con 11 años recién cumplidos, se estaba colocando la chamarra para irse a casa luego de una larga jornada de trabajo en el Estudio, donde terminó de filmar, junto con sus compañeros, las últimas escenas de su primera película que se estrenaría la primavera siguiente en la pantalla grande. Trabajar para el cine era distinto que para la televisión, pero al fin y al cabo era igual de cansado.
Mirando hacia su derecha, se topó con una chiquilla de vestido rosado que dormitaba en un sillón: Era su hermanita Hikari, quien a pesar de haber terminado sus breves apariciones en la película varios días atrás había sido llamada aquel día junto con el resto de sus compañeros para grabar una última secuencia en la que volvían al Digimundo para reencontrarse con sus camaradas digitales y renunciar al poder de sus emblemas para restaurar el sello que protegía a este mundo alterno. Taichi no comprendía la relación de esa escena con lo que habían grabado los otros días, una batalla en su propio mundo contra un villano de nombre Diaboromon, pero con el tiempo había aprendido que el señor Yameshi siempre ocultaba un as bajo la manga.
Y precisamente lo descubriría ese día.
- "¿Qué vas a hacer ahora Taichi?"- preguntó Yamato mientras cerraba su mochila y trataba de sostener a su cansado hermano de 8 años, quien prácticamente babeaba de sueño sobre el brazo del mayor y se tallaba los ojitos con su nuevo gorrito blanco (el cual se había visto forzado a usar desde que unos admiradores del programa habían ingresado al foro y robado gran parte del vestuario de los niños, mismo que no se pudo reponer a tiempo para la película).
- "No sé... supongo que tener vacaciones como un niño normal. ¿Y tú?"
- "Takeru y yo vamos a ir a visitar a nuestros abuelos a su granja. Ellos también son veterinarios, pero prefieren vivir en el campo"
- "¡Genial!"
- "Sí, es bastante divertido"- comentó el rubio- "¿Por qué no vienes con nosotros?"
- "No sé... creo que papá y mamá pensaban llevarnos de vacaciones a la playa"
- "¡Eso también es genial Taichi!"
- "Sí... pero me voy a sentir raro de no estar con ustedes..."- murmuró el castaño- "De no estar aquí..."
Yamato asintió: Era verdad que en los últimos 15 meses el foro se había convertido en un segundo hogar para los 8 niños actores y sus familiares. Habían pasado varios cumpleaños, días festivos y eventos similares juntos y alternando el trabajo y la diversión. Taichi consideraba a sus compañeros como sus mejores amigos y sería muy raro volver a la realidad aquel otoño, a una escuela normal y no volver a ver con la misma frecuencia a sus amigos.
- "No vivimos lejos"- murmuró Yamato- "Nos podemos visitar, ¿verdad?"
- "¡Por supuesto!"- respondió Taichi tratando de fingir un entusiasmo que no sentía, ya que de pronto lo había invadido la tristeza: Sintió en carne propia lo que debió sentir su personaje Tai cuando se despidió del Digimundo y de Agumon.
Al fin y al cabo, era como si Taichi también fuera a regresar al Mundo Real.
- "Takeru, Yamato"- la señora Nishida llamó a sus hijos desde la entrada del foro- "Es hora de irnos"
- "Sí, mami..."- murmuró Takeru como un sonámbulo dirigiéndose a su madre. Yamato sonrió con tristeza.
- "Nos veremos pronto, Taichi"
- "Hasta luego Yamato"
Taichi miró como sus amigos se marchaban, al igual que el resto del elenco. Pronto, sólo quedaban él y su hermanita, quien estaba siendo tomada en brazos por su madre: Había llegado el momento en que él también se marcharía.
- "Vamos a casa Taichi"- susurró la señora Yagami, pero fue detenida por el propio Yameshi, quien acababa de salir de su oficina.
- "Señora Yagami, disculpe mi imprudencia"- murmuró el productor mirando con picardía al niño- "Sé que ha sido un día muy largo y que usted desea volver a su casa inmediatamente pero... me gustaría hablar un rato con Taichi si usted me lo permite"
- "Bueno..."- respondió la señora con timidez- "Supongo que sí, pero Hikari está cansada y..."
- "No hay problema, mi señora"- comentó Yameshi con amabilidad- "Usted puede volver con la pequeña a su casa y yo prometo llevarle a Taichi antes de las 9"
- "Pero..."- la madre de Taichi miró con inseguridad a su hijo- "¿Te quieres quedar Taich¡?"
El niño no lo tuvo que pensar dos veces- "¡Por supuesto mamá!"
- "Está bien"- suspiró ella, sabiendo que había perdido una batalla- "Pórtate bien con el señor Yameshi y no vayas a olvidar tu mochila, ¿de acuerdo?"
- "Lo prometo mamá"
- "De acuerdo... hasta luego y gracias señor Yameshi"
- "Gracias a usted, señora Yagami"
El productor y el niño miraron como la dama y su hijita salían del foro y no fue hasta que se cerró la puerta que se voltearon a ver.
- "Ven conmigo, Taichi"
Taichi y Yameshi entraron al despacho: Un cuarto amplio lleno de libreros con cintas grabadas y las carpetas de diseño de personajes. El adulto se sentó detrás de su escritorio y Taichi, como siempre que visitaba al productor, se sentó en una de las sillas verdes destinadas a las visitas.
- "Te preguntarás el por qué deseaba hablar contigo, ¿verdad?"
- "Este... sí..."- respondió Taichi mirando con curiosidad a su alrededor para luego posar su mirada castaña sobre el mayor quien sonreía como si acabara de cometer una travesura.
- "Te llamé porque deseaba que tú fueras el primero en saber esta noticia: Hablé con los directivos del canal y me acaban de autorizar una segunda temporada de Digimon"
- "¿En serio?"- Taichi brincó de su asiento con alegría- "¡Genial! ¡Genial! ¡Espere a que lo sepan los demás!"
- "Lo sé... pero en lo que afino los detalles me gustaría que esto fuera un secreto entre tú y yo, ¿de acuerdo?"- a Taichi no le agrababa la idea de ocultar una noticia así a su hermana y amigos así que miró con duda al productor.
- "¿Por qué?"
- "Porque no me gusta hablar de mis proyectos hasta que tengo todo planeado"
- "Pero... ¿por qué me lo dijo a mí?"
- "Porque deseo que me ayudes a planear todo"
- "¿Yo? ¿Planear?"- Taichi miraba sorprendido a Yameshi- "Pero señor Yamsehi, yo no sé mucho de hacer tele y..."
- "No quiero que me ayudes en esos detalles, Taichi"- comentó el productor con calma- "Sólo deseo que entrenes a un par de personas para actuar con la pantalla verde en lo que termino de escribir el guión"
- "¿A quiénes?"
Y como si hubiera sido algo planeado, en ese mismo instante se escucharon unos golpes en la puerta.
- "Adelante"- ordenó Yameshi y la puerta del despacho se abrió, dejando entrar a dos niños que pasaron con timidez y se detuvieron justo al lado de Taichi.
El primero era alto, de aproximadamente la misma edad de Taichi y con el pelo castaño, la tez apiñonada y los ojos azules. El otro era pequeño, tal vez de la misma edad de Hikari y Takeru o puede que ligeramente mayor, con tez muy clara, pelo azul profundo y una dulce mirada azul celeste.
- "Taichi, permíteme presentarte a Ryo Akiyama y Kenji Ichivan"
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- "¿Qué?"- Daisuke exclamó con sorpresa genuina- "¿Kenji? ¿El mismo Kenji que trabaja con nosotros todos los días?"
- "Así es"- respondió Taichi con tranquilidad, sonriendo para sus adentro al ver la expresión de los menores, tal y como él lo esperaba.- "A mí también me sorprendió conocer de esa forma a quiénes serían nuestros nuevos compañeros"
- "No puedo creer que Kenji nunca nos halla contado de esto, Takeru"- murmuró Daisuke negando con la cabeza.
- "Tal vez no se los ha contado porque Yameshi se lo pidió"- comentó Taichi
- "¿Quieres decir que Kenji también está involucrado en esto de los Digimon cautivos?"
- "No"- negó secamente el mayor- "Él no sabe nada de esto, sólo era un niño pequeño que había sido contratado para una segunda temporada de Digimon"
- "¿Y cómo es que los contrataron?"- preguntó Daisuke- "No hubo convocatorias ni nada por el estilo"
- "Yameshi me comentó, que conoció a Kenji porque él y su hermano Osamu jugaban en el jardín que daba al frente de su edificio desde antes de que iniciara la primera temporada. Kenji siempre le pareció un chico muy tierno y bondadoso, cosa que comprobó cuando finalmente le ganó la curiosidad y se acercó a él uno de esos días..."
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- "Hola pequeño"- Yameshi, productor cuya carrera iba en ascenso gracias a su primera serie para la televisión, Digimon, se acercó a un niño de escasos 8 años que jugaba en el jardín con un plato lleno de jabón y una pajilla.- "¿Qué vas a hacer?"
- "Burbujas"- respondió el niño mojando la pajilla en su platito y comenzando a soplar: Inmediatamente salieron de la punta una serie de burbujas grandes y redondas, cuya superficie mostraba distintos colores dependiendo de dónde les daba la luz del sol.
- "Ya veo... ¿tú hiciste el jabón?"
- "No, lo hizo mi hermanito"
- "Es un jabón muy bueno, salen burbujas muy bonitas"
- "Sí, pero Osamu dice que es porque yo soplo suavecito"- Kenji miró al productor con esa mirada azul e inocente y sonrió- "¿Quiére hacer burbujas?"
- "¿Yo? Bueno... es que hace tiempo que no hago esto..."
- "Es fácil"- comentó el pequeño con una risita- "Sólo tiene que soplar con esto"
Kenji le dió al productor su pajilla, quién la tomó con cuidado, metiéndo la punta en la solución jabonosa y soplando a través de ella: Unas burbujas pequeñas y frágiles salieron de la punta, pero duraban lo suficiente para que Kenji saltara y tratara de atraparlas.
- "¡Bien! ¡Muy bien!"- comentó el chiquillo
- "Gracias, pequeño"- el productor le iba a devolver su pajilla, pero Kenji negó con la cabeza.
- "Osamu me puede hacer otra pajilla y usted nunca sopla burbujas, se la regalo"
Yameshi sonrió satisfecho y le dió una palmada en la cabeza al pequeño.
- "Eres un pequeño muy bondadoso, ¿lo sabías?"
Kenji sólo rió y se marchó corriendo a su casa, posiblemente dispuesto a contarle a su madre todo lo que había pasado. Yameshi, por su lado, se propuso que esa no sería la última vez que platicaría con ese niño.
Y lo cumplió
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- "Vaya"- dijo Takeru sonriendo- "Supongo que ahí es dónde surgió el emblema de la bondad"
- "Y la escena de las burbujas en el capítulo que Yameshi dedicó al perosnaje de Kenji"- agregó Daisuke.
- "Debo decir que el niño que contrataron para hacerla se parece muchísimo al Kenji que conocí ese día"- dijo Taichi acomodándose en el asiento- "Aunque el resto de las escenas las filmó el propio Kenji unos meses después de conocerlo"
- "Supongo que en la época en que tú lo entrenaste junto con el otro chico... ¿cómo se llama?"
- "Ryo Akiyama"- murmuró Taichi con tristeza.
- "El nombre se me hace muy familiar"- comentó Daisuke ajustándose los googles y sosteniendo a un muy pensativo V-mon, que hasta entonces había permanecido en silencio al igual que Patamon.
- "Debe ser porque tú lo conociste, Dai"- respondió Taichi seriamente y mirando fijamente los ojos sorprendidos del menor- "Ryo fue contratado como premio por ganar el primer campeonato de digicartas"
- "¿El primer campeonato?"- Daisuke golpeó el escritorio- "¿Ese es Ryo Akiyama? ¿El Rey de las Digicartas?"
- "Efectivamente"
- "Vaya... precisamente el chico que me hizo quedar en ridículo aquella vez en semifinales"- murmuró Daisuke con una sonrisa irónica.
- "Oye Dai, lo hiciste bien para tener sólo 8 años"- comentó Takeru sonrojándose al recordar lo malo que era él para las cartas.
- "Sí... pero de haber sabido que al ganar hubiera entrado al programa me hubiera esforzado más"
- "La verdad Daisuke"- susurró Taichi contemplando su camiseta anaranjada- "Es que lo que finalmente te pasó es lo mejor... debes estar agradecido"
- "Ehh..."
- "Al fin y al cabo entraste al programa, ¿no?"- agregó Takeru con una sonrisa- "Y no sólo porque seas un extraordinario jugador sino porque tienes todo lo necesario para el papel de Davis"
- "Y no tuviste que sufrir lo que le pasó a Ryo"- comentó Taichi con amargura. Daisuke y Takeru miraron fijamente al mayor, quien parecía tener una lucha interior para no mostrar el dolor que el recuerdo de Ryo Akiyama le hacía sentir.
- "¿A qué te refieres?"- preguntó Daisuke en voz baja- "¿Qué le pasó a Ryo?"
- "Creo que no hay razón para ocultarles lo que pasó después..."
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- "¡Muy bien Kenji! ¡Así se hace!"- exclamó Taichi al pequeño de pelo azulado que había logrado dominar la técnica de platicar con un ser inexistente.
- "Kenji tiene facilidad para estas cosas, ¿verdad Taichi?"- preguntó Ryo estirando los brazos.
- "¡Vaya que sí! Lograr eso me tomó fácil un par de semanas y muchos gritos del director"- comentó Yagami con una sonrisa traviesa- "Estoy seguro de que cuando Kenji se incorpore a la serie lo hará muy bien"
Habían pasado dos días desde que Taichi había conocido a Ryo y Kenji, sus futuros compañeros en la serie. Fue difícil inventar una buena excusa para que su madre y hermana no sospecharan de la nueva temporada y al mismo tiempo ir a los foros para ensayar con sus nuevos amigos, pero gracias a Yameshi había surgido la historia de que Kenji y Ryo eran sobrinos del productor y Taichi les estaba haciendo compañía durante su visita a la ciudad.
Yameshi los había llamado al día siguiente para contarles a groso modo los planes que tenía: La nueva temporada se titularía Digimon 02: Tag Tamers e incluiría el concepto de que tanto niño como Digimon lucharan juntos en lugar de que el humano fuera un simple expectador (además de las cuestiones mercadotécnicas que implicaba incorporar el concepto de las digicartas a la serie).
La historia sería más o menos la siguiente: Meses después de la gran aventura de los niños elegidos de Odaiba, un chico llamado Ryo Ankiyuma y su vecino Ken Ichijouji, mientras jugaban en la computadora recibirían un digivice que los haría conocer el digimundo y vivir una pequeña aventura que se filmaría como un especial previo a la segunda temporada. Durante su aventura, Ken conocería a Wormmon, su camarada y Ryo se toparía con un V-mon, quien aunque no era su verdadero camarada le ayudaría a vencer a un enemigo llamado Milleniumon.
Justo cuando creían haberlo vencido, Milleniumon arrojaría un objeto con la intención de lastimar a Ryo pero Ken (el eterno bondadoso) se pondría en su camino y él sería infectado por una semilla de la oscuridad. Poco después, ambos compañeros regresarían a su hogar y ahí concluiría el programa especial.
La serie en sí arrancaría con el resurgimiento de Milleniumon y su deseo de venganza tanto de Ryo y Kenji como de los niños elegidos. Usando sus poderes resucitaría a los peores enemigos de estos chicos y los iría secuetrando uno a uno sin que se dieran cuenta y los encerraría en prisiones fuertemente resguardadas. Sólo uno de esos secuestros tendría una falla: Cuando intentaban secuestrar a Taichi y su Agumon, este último escaparía y enviaría una llamada de auxilio al mundo de real. Es ahí donde Ryo entraría en acción nuevamente.
Ryo, el elegido sin digimon, se toparía con Agumon y formarían un equipo, con el objetivo de rescatar a los niños elegidos y sus digimon. La primera parte de la nueva temporada transcurriría en esta aventura, liberando poco a poco al equipo original, que se iría aliando con Ryo para vencer a los cada vez más fuertes enemigos hasta rescatar a Taichi y vencer a Milleniumon.
Justo cuando creían que todo había terminado iniciaría la segunda parte de la temporada, donde Ken Ichikouji desaparecería a una zona prohibida del Digimundo gracias a la semilla de la oscuridad y la tristeza que sentía por la súbita desaparición de su amigo Ryo.
Yameshi aún no desarrollaba las ideas para esta segunda parte, pero el informarles lo que tenía hizo que tanto Taichi como los nuevos se emocionaran mucho y dedicaran empeño a ensayar todas las escenas que se comenzarían a grabar inmediatamente.
Pronto llegó el día en el que iniciaron las grabaciones del especial y para transformaron el set en un enorme desierto al cubrir el suelo con arena, tal y cómo lo habían hecho durante la primera temporada. Como bien se sabe, las escenas se suelen grabar en desorden, tomando en cuenta aspectos como el costo, la complejidad y los personajes que se tienen disponibles.
Ignorando cuáles eran los motivos de Yameshi, las primeras (y únicas) escenas que se grabaron fueron precisamente las finales, durante la batalla con Milleniumon y el ataque de éste a Ryo y que termina recibiendo Ken. Fueron días muy arduos para los nuevos actores, quienes siendo motivados por Taichi sacaron adelante su primera labor. Posteriormente grabaron una sencilla escena en la que Ryo está tecleando en una computadora, la cual sería integrada a la película que Taichi acababa de filmar (como un pequeño indicio de lo que estaba por llegar).
Justo cuando iban a grabar más escenas, los ejecutivos del canal llamaron a Yameshi para discutir el asunto de los presupuestos para su segunda temporada, lo cual hizo que se postergara la grabación. Kenji se fue de vacaciones con sus padres y hermanoen ese par de semanas y Ryo y Taichi siguieron asistiendo a los foros para ensayar (y más que nada jugar).
Y fue en ese par de semanas cuando la vida de Taichi Yagami cambió para siempre.
Una tarde de agosto, Taichi y Ryo entraron al despacho de Yameshi para poder jugar con las digicartas tranquilamente. El estudio estaba siendo reparado y adecuado para las siguientes grabaciones, por lo que los niños no podían ni ensayar ni jugar tranquilamente, así que pidieron permiso al productor para jugar sobre su escritorio.
Ambos niños se habían vuelto muy amigos en las semanas que habían convivido y Taichi no podía esperar a que sus amigos volvieran de sus respectivos viajes para que conocieran a Ryo (y por supuesto, a Kenji). Ryo había pasado varias tardes confíandole a Taichi sus mejores estrategias con las cartas, las mismas que le habían llevado a ganar el torneo meses atrás.
- "¡Digievolución activada!"- exclamó Taichi mientras colocaba su carta sobre la mesa- "Ahora tu V-mon no podrá hacer nada contra mi Greymon, Ryo"
- "¿Ah sí?"- contestó Ryo con una sonrisa maliciosa al tiempo que colocaba otra carta sobre la mesa- "¡El escudo de MagnaAngemon! ¡Ahora tus ataques no podrán hacerme daño!"
- "¡Rayos!"
- "Y mi siguiente carta será... ¡Digievolución activada!"
- "¡Eres un tramposo!"
- "¡Lo que pasa es que tú no te fijas!... ahí tienes una carta de velocidad para hacer dos cosas por turnos y no la empleas"
- "¿Estás viendo mi mano?"
- "No la vería si la tuvieras contigo y no boca arriba"
- "¡Ah! ¡Rayos!"- Taichi se puso de pie- "Deja voy por mi otra baraja"
Yagami se dirigió al librero, donde había colocado descuidadamente su mochila y al quitarla tiró algunos libros, revelando un pequeño botón rojo.
- "¿Y eso?"
- "¡Es un botón! ¡Tal vez sea la entrada a un pasadizo secreto!"
- "Sí, claro Taichi. Justo en una estación de televisión"
- "¿Y por qué no?"
- "Debe ser sólo una alarma Taichi, vamos a jugar"
Taichi suspiró- "Tienes razón... pero ahora jugaremos sóccer en el parque"
- "De acuerdo, pero espero no ganarte por mucho"
- "¡Presumido! ¡Ni sabes con quién te metes!"- exclamó Taichi con una risa y un brinco que lo hizo tropezar- "¡Ayy!"
- "¡Taichi!"- Ryo corrió para evitar que su amigo callera, pero el propio Yagami se sostuvo del librero... accidentalmente presionando el botón.
- "¡Ay no!"
- "Ahora la alarma va a sonar y nos meteremos en problemas"
Pero para su sorpresa ninguna alarma sonó... sino que un agujero en el suelo se abrió.
- "Vaya... ¡Sí es un pasadizo secreto después de todo!"- exclamó Taichi sorprendido.
- "¿Qué hacemos ahora?"
- "¡Vamos a explorar!"- Taichi bajó los escalones seguido de Ryo, quien gustaba meterse en problemas tanto como Yagami.
Y no pudieron contener una exclamación al ver lo que les esperaba.
- "¿QUÉ ES ESO?"
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- "Así que Ryo y tú encontraron la bodega llena de Digimon"- murmuró Takeru- "¿Y qué pasó después?"
- "Bueno, realmente nos pasó algo muy similar a lo que ustedes dos experimentaron en la bodega"
- "¿A qué te refieres?"- preguntó Daisuke palideciendo y en parte adivinando lo que el mayor estaba por responder.
Taichi sonrió y metió la mano en su bolsillo, sacando un aparato triangular con pantalla redonda, una ranura en el costado y de color anaranjado intenso: Un digivice.
- "Eso quiere decir... ¿que tú también eres un Tamer?"- preguntó Takeru lívido. Taichi asintió.
- "Al encontrar a Agumon en su pequeña prisión sentí el mismo coraje que ustedes, el mismo deseo de liberarlo y darle un merecido a Yameshi por lo que le estaba haciendo a mi digimon, a quien había aprendido a querer en el último año. Fue en ese preciso instante que mi antiguo digivice se transformó en este D-Power y desde entonces Agumon y yo somos camaradas"
- "No... ¡No puedo creerlo!"- Takeru estaba impactado- "¿Cómo es posible que seas un tamer desde hace 3 años sin que nadie, ni siquiera tu hermana se haya dado cuenta?"
- "Eso se lo debo a Yameshi, Takeru"- respondió Taichi serenamente- "Verás, Ryo y yo también decidimos hablar con él lo antes posible"
- "Espera Taichi, ya van varias veces que dices que ustedes hicieron las mismas cosas que nosotros como si en verdad supieras nuestra historia"
Taichi se puso de pie.
- "Síganme"- murmuró mientras presionaba el botón rojo que estaba oculto en el librero y se abría la entrada subterránea. Los 3 jóvenes y los 2 digimon bajaron a través de la escalera.
En cuanto se cerró la puerta tras ellos, Taichi señaló una cámara que estaba justo en una de las esquinas de la bodega- "Yameshi y yo los vimos entrar junto con los dos tamers y sus camaradas. Vimos como se convertían en tamers y liberaban a sus digimon"
- "¿Yameshi sabe de esto?"- preguntó Takeru más para sí mismo que esperando una obvia respuesta- "¿Y cómo es que no hizo nada para detenernos?"
- "Tratamos de ser lo más discretos posibles"- respondió el mayor- "Y supusimos que ustedes dos tratarían de hablar con Yameshi del mismo modo que Ryo y yo lo hicimos. Y como verán, teníamos razón"
- "¿Y qué fue lo que te dijo Yameshi entonces? ¿Cuál fue su explicación?"
- "Verás..."
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Taichi Yagami, antiguo actor con el papel del líder de los niños elegidos "Tai Kamiya", había dado un paso hacia la ficción: Frente a él estaba un Agumon en carne y hueso, el mismo Agumon que lo había "acompañado" durante "sus aventuras" todo el año anterior. El mismo por el que había despertado un cariño inusual a pesar de ser "inexistente" y por el que había soñado tantas veces con conocerlo.
- "¡Taichi! ¡Eres tú mi tamer!"- exclamó el pequeño dinosaurio anaranjado lanzándose al niño y abrazándolo con fuerza. Taichi respondió al gesto tratando de aguantas las ganas de llorar, apretando con fuerza su recién cambiado digivice y repitiéndo para sí la frase "¡Esto es real! ¡Esto es real!".
Ryo por su parte, miraba intrigado su DPower, que había aparecido de la nada mientras conversaba con su V-mon, quien aún permanecía en su prisión, indicando que aunque Ryo era un tamer, el digital azulado no era su camarada.
- "Ya encontrarás a tu camarada, Ryo"- comentó V-mon con una sonrisa triste- "Yo estoy esperando al mío"
- "¿Tú tienes un camarada?"- el V-mon asintió.
- "Sí, y está muy cerca, pero creo que aún no es momento de que nos conozcamos. Pero si mientras puedo estar contigo Ryo, me sentiré muy honrado"
- "¿Qué vamos a hacer ahora Taichi?"- preguntó el chico al castaño alborotado que todavía sostenía con emoción a su Agumon.
- "No lo sé... pero Yameshi me va a escuchar"- dijo severamente- "¿Cómo puede tener a estos Digimon encerrados y condenados a sufrir?"
- "Sufrimiento es lo que experimentarían afuera, Taichi"- una voz de adulto muy conocida para ellos se escuchó a sus espaldas. Al girar, vieron ni más ni menos que a Hiro Yameshi en persona.
- "S... señor Yameshi"
- "Me sorprende que este secretito haya permanecido oculto tanto tiempo... pero a fin de cuentas algún día tenía que salir a la luz, ¿no lo crees Taichi?"- comentó casualmente el productor mientras se paseaba entre las jaulas llenas de Digimon cautivo. La frialdad del adulto hizo enfurecer a Taichi.
- "¿Cómo se atrevió a hacer esto? ¡Estoy asqueado! Tantos meses participando en esto... siendo cómplice de esto... divirtiéndome a costas de Agumon y los demás... ¡Yo ya no quiero participar en esto!"
- "¿Y qué piensas hacer Taichi?"- Yameshi tomó con fuerza al niño de los hombros- "¿Vas a llamar a la policía? ¿A tus padres? ¿Dejar que el mundo se entere de que los Digimon son reales y que hay cientos debajo de la tierra?"
- "Ehh..."
- "Hazlo si así lo deseas niño... pero te advierto que no pasarán ni 24 horas antes de que todos ellos, incluído tu Agumon caigan en manos del gobierno y sean destruidos"
- "Des... ¿destruídos? ¿El gobierno?"- Taichi preguntó sin comprender nada. Ryo estaba al lado de su amigo, sin dar crédito a lo que pasaba.
- "Los Digimon son reales, punto."- Yameshi volvió a dar una vuelta a través de la bodega- "Durante años han estado apareciendo en el mundo real, invadiéndolo poco a poco"
- "Pero có..."
- "Eso no importa Taichi, el caso es que aquí están"- lo cortó Yameshi- "Y como podrás imaginar, un digital con la fuerza y tamaño de un Greymon no puede estar suelto en la ciudad, ya que provocaría múltiples destrozos... es por eso que el gobierno desde hace varios años tiene agentes encubiertos que capturan a estas criaturas y las destruyen"
Taichi y Ryo se apartaron, sus rostros palideciendo. El productor continuó.
- "Es por eso que desde que descubrí a los Digimon, los he estado capturando y escondiendo en esta bodega, empleando programas que impiden su escape. No son libres, es cierto, pero al mismo tiempo están a salvo del gobierno. Me he encargado de ocultar esta bodega con un firewall tan poderoso que ni los satélites del gobierno pueden detectarla"
- "Pero entonces... ¿por qué los hace trabajar? ¡Ellos debe sufrir entonces!"
- "Los Digimon no sufren Taichi, por algo existen los efectos especiales"- dijo el productor con una sonrisa torcida- "Es cierto que trabajan y que los hago evolucionar artificialmente con un dispositivo que he diseñado para ello"
- "¿Pero cómo le hizo para...?"
- "Sé mucho más de lo que te imaginas, Ryo"- murmuró el productor cortando el tema.- "Pero como decía, ellos no sufren. El programa surgió en parte como un deseo personal, en parte como un medio de obtener fondos para mantener a los Digimon y finalmente, para distraer a la gente y el gobierno de la existencia de estas criaturas"
- "¿Pero qué tiene que ver el programa con eso?"
- "Bien dicen que si quieres ocultar algo, lo mejor que puedes hacer es ponerlo frente a las narices de la gente: Me propuse hacer a los Digimon tan populares, que los vieran en tantos sitios y que todos supieran tanto de ellos, que no pudieran distinguir a uno real cuando lo tuvieran enfrente... ironías de la vida"
Ryo sonrió nerviosamente y Taichi miró a Agumon con tristeza.
- "Cierto... todo este tiempo tuve a Agumon casi frente a mí y nunca me dí cuenta"
- "Supuse que algún día alguien me descubriría, pero nunca creí que serían ustedes... o que en verdad los tamers existieran"- comentó el productor tomando el digivice de Taichi entre sus manos- "Esto cambia las cosas completamente..."
- "¿Qué quiere decir?"
- "Nada... sólo que me sorprende que estos programitas simples como son las cartas en verdad sean capaces de modificar la estructura de un Digimon"
Sin entender lo que Yameshi quería decir, Taichi y Ryo guardaron silencio.
- "Como sea, necesito que me prometan que jamás dirán una palabra de esto"- Yameshi miró a Taichi con frialdad- "Ni a tu hermana ni a tus amigos... a NADIE"
- "Pero..."
- "Te prometo que Agumon ya no será prisionero y podrás visitarlo cuando quieras, ¿es un trato?"
Yameshi estiró la mano y miró con dureza al chico. Taichi sintió deseos de gritar que no lo haría, que no podía ocultar algo así o mentirles de esa forma a sus amigos y familia.
- "Si realmente deseas que Agumon y los demás estén a salvo, aceptarías"- Taichi sintió un escalofrío al escuchar esa frase y fue entonces que levantó el brazo y tomó la mano del productor.
- "De acuerdo... será un secreto..."
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- "Le cumplí a Yameshi al pie de la letra"- Taichi se dirigió al fondo de la bodega y abrió una puerta, de donde salió el tierno Agumon.
- "¡Taichi! ¡Qué gusto!"- Taichi asintió y miró a sus amigos- "Takeru, Daisuke... les presento a Agumon"
Los dos chicos y sus digimon se acercaron al dinosaurio anaranjado y lo saludaron con alegría.
- "Finalmente te conozco Agumon"- lo saludó Takeru y luego señaló a Patamon- "Supongo que ustedes ya se conocen"
- "Así es, Takeru"- respondió Patamon estirando sus alitas- "Pero no sabía que Agumon había encontrado a su camarada"
- "Eso es porque con excepción de las veces en que salen de sus jaulas o están cerca de sus camaradas, los digimon permanecen todo el tiempo dormidos"- comentó Taichi- "No me agrada esa jugada de Yameshi, pero dice que si estuvieran despiertos todo el tiempo se pondrían agresivos o harían el suficiente ruido para que alguien los descubriera"
- "Eso quiere decir que sólo hasta que Takeru entró a la bodega, Patamon despertó de su sueño en la jaula... muy curioso"- comentó Daisuke mirando de reojo a su V-mon- "Supongo que te pasó lo mismo"
- "Creo que sí"- respondió el azulado.
- "Aquí es donde vive Agumon la mayor parte del tiempo, cuando no salimos a buscar a los salvajes"
- "¿Salvajes? ¿Digimon salvajes?"
- "Así es. Cuando mi D-Power detecta la señal de un digimon en la ciudad, Agumon y yo salimos a detenerlo para llevarlo a esta bodega"- Taichi frunció el ceño- "Sin embargo, si el Digimon se pone muy agresivo o nos es imposible traerlo... nos vemos en la necesidad de eliminarlo... es algo que duele, pero por lo menos nos quedamos con la idea de que estamos salvando a los otros"
- "¿Y cómo es que te convertiste en "cazador de Digimon", Taichi?"
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Luego del forzado trato que Taichi y Ryo hicieron con Yameshi, los dos niños tuvieron libre acceso a la bodega para contemplar a los digimon que dormían casi todo el día o pasar el rato con Agumon y V-mon (quien al estar "prestado" con Ryo podía permanecer despierto, más no salir de la jaula excepto cuando Yameshi lo permitía).
Pronto les gano la curiosidad y comenzaron a practicar con las digicartas... pero esta vez empleando los D-Powers. Su sitio de "juego": El parque de Odaiba durante las noches.
- "¡Muy bien Agumon!"- gritó Taichi mientras pasaba una tarjeta por su D-Power- "¡Velocidad activada!"
El pequeño dinosaurio corrió con una rapidez impresionante alrededor de la fuente donde se encontraban en ese instante.
- "Bien, Taichi. Vas progresando"
Fue en ese momento que escucharon un rugido a pocos metros de donde estaban y los 3 chicos corrieron hacia donde les indicaba el sonido: Casi se van de espaldas cuando se toparon con un Tyranomon real rugiendo y destruyendo los arbustos que tenía cerca.
- "Si no lo agarramos, el gobierno lo podría capturar y destruirlo como dice el señor Yameshi"- comentó Taichi. Ryo asintio y contempló al V-mon.
- "Creo que tendremos que involucrarnos, ¿verdad V-mon?"
- "¡Listo cuando tú lo digas Ryo!"
- "¡Vamos Agumon!"
Taichi y Ryo deslizaron unas cartas por sus DPowers y la batalla inició: Agumon y V-mon atacaron con sus llama bebé y topetazos respectivos, aturdiendo un poco al enorme dinosaurio, pero quedando lejos de noquearlo.
- "Creo que tendremos que utilizar más fuerza"- comentó Ryo fríamente mientras sacaba una carta de su cinturón y la pasaba por su DPower- "¡Cambio de carta! ¡Armor Evolution: Digiegg del Valor activado!"
Empleando cartas que Taichi jamás había visto, Ryo logró que V-mon alcanzara una evolución alterna, transformándose en Flamedramon.
- "¡Genial! ¿Cómo sabías eso?"
- "Los Digimon como V-mon son legendarios, Taichi"- comentó Ryo con una sonrisa satisfecha mientras Flamedramon atacaba al Tyranommon- "Ellos pueden usar los digieggs para alcanzar distintas formas con características particulares"
- "¡Increíble!"
Aunque Flamedramon estaba dando una buena batalla, Taichi se dió cuenta de que era hora de que Agumon adquiriera un poco de poder.
- "¡Cambio de carta! ¡Digievolución activada!"- gritó, esperando con emoción la aparición de un Greymon de carne y hueso frente a sus propios ojos.
Sin embargo, la evolución tomó un camino distinto...
- "¿Pero qué es ESO?"- exclamó el chico con los ojos como platos. Ryo sonrió y miró divertido a su amigo.
- "Eso, Taichi, es un Veedramon"
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- "Por alguna razón, al estar conmigo y empleando la carta de Digievolución para que alcance su nivel Adulto, Agumon se transforma en un Veedramon"- comentó Taichi con una sonrisa- "Ryo dice que una evolución tan extraña como esta me hubiera impedido ingresar al torneo de digicartas, ya que supuestamente no es oficial"
- "¿Y a qué se debe eso?"
- "No lo sé"- respondió Taichi alzándose de hombros- "Cuando Yameshi emplea su máquina para hacer digievolucionar a Agumon, él se logra transformar en Greymon. Incluso he metido esos códigos especiales en una carta y en ocasiones lo he logrado transformar en Greymon durante mis misiones. Sin embargo, me gusta más que sea Veedramon"
Agumon sonrió amistosamente ante el comentario de Taichi.
- "En fin... con Veedramon y Flamedramon vencimos al Tyranomon y llamamos al señor Yameshi para que se lo llevara a la bodega. Desde ese día, Ryo y yo nos volvimos parte del equipo de Yameshi y rastreábamos a los digimon salvajes durante las noches empleando nuestros D-Power. Yameshi obtuvo el código de nuestros D-Power y lo convirtió en un programa para su computadora e incluso le pasó una copia con una pequeña mentira a Koushiro meses después para que nos ayudara"
- "Ese es el extraño programa que descubrimos en su computadora el otro día"- comentó Daisuke
- "Así es, y realmente puedo decirles que las últimas semanas de aquel verano fueron sensacionales e incluso no me molestó que siempre no pudiéramos salir a la playa... pero algo tuvo que ocurrir..."
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Ryo y Taichi estaban en Shibuya, siguiendo el rastro de un digimon salvaje que estaba aparentemente mezclado entre la gente. Agumon y V-mon hacían bien su papel de muñecos, aunque eso implicaba que los dos niños tuvieran que cargarlos, haciendo más lento su recorrido.
- "Parece que está en ese callejón"- susurró Ryo señalando a una callejuela oscura y desierta que estaba entre dos tiendas de deportes.
- "Vamos entonces..."
Los dos tamers se adentraron en el oscuro camino, guardando silencio y esperando el momento en que se toparían con aquel salvaje.
- "¡Ahí está!"- gritó Ryo, señalando hacia una figura oscura que los esperaba al fondo, con una fría y sádica sonrisa que mostraba sus afilados colmillos.
Devimon los estaba esperando.
Taichi dudó al descubrir el digimon que tenían que vencer, ya que aunque no quisiera, los argumentos del programa vinieron a su mente: De acuerdo con Yameshi, Devimon era un digimon oscuro y peligroso, capaz de destruir todo lo que tenía enfrente. Después de todo, incluso había destruido a un Angemon.
- "¡Listos!"- susurró Taichi mientras tomaba una carta de su bolsillo. Ryo le siguió.
No tardaron en aparecer frente al digimon demonio las imponentes figuras de Veedramon y el curioso XV-mon rojo (producto de los efectos de Ryo al hacer evolucionar a V-mon), listos para hacerle frente: Sólo era cuestión de noquearlo y la batalla habría terminado.
Taichi sintió la espesa niebla que rodeaba las batallas a su alrededor... su cuerpo se tensó debido a la adrenalina de aquel instante.
La batalla fue feroz, con ambos Tamers empleando lo mejor que tenían de su repertorio de cartas y estrategias. Con el paso de las semanas y los consejos de Ryo, Taichi había mejorado bastante y era impresionante lo que junto con Veedramon podía hacer.
- "¡Cambio de carta! ¡El martillo de Zunomon!"- gritó con fuerza Yagami esperando darle un último golpe a Devimon, pero fue entonces que las cosas comenzaron a salir mal: Un portal extraño se abrió justo al lado de Ryo, jalándolo hacia su interior junto con XV-mon y el propio Devimon.
- "¡NO! ¡RYO!"- gritó Taichi tratando de detener a su amigo, pero fue demasiado tarde: El portal se había cerrado.
Taichi y Veedramon se quedaron solos...
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- "Nunca más volví a ver a Ryo Akiyama"- susurró con tristeza el mayor, sus ojos llenarse de lágrimas.- "Yameshi y yo lo rastreamos por todas partes... casi casi buscamos en cada centímetro de la ciudad pero fue inútil: Ryo había desaparecido para siempre"
- "Lo lamento mucho, Taichi"- murmuró Takeru sin saber cómo consolar a Yagami.
- "Como podrán imaginar, Yameshi canceló la segunda temporada. Simplemente tomó el teléfono y avisó a los padres de Kenji que siempre no se haría el programa para luego disculparse y dar el asunto como olvidado"
- "Ya veo..."
- "Yameshi no volvió a ser el mismo... Ryo era alguien fundamental en nuestro equipo y ese verano lo habíamos pasado juntos casi en su totalidad. Perder a Ryo fue un dolor terrible para nosotros. Sus padres pensaron que se trataba de un secuestro y nos dolió no poder decirles la verdad"
- "¿Pero qué pasó después?"- Daisuke murmuró- "¿Cómo es que siempre si se hizo esta temporada?"
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Pasaron 3 años desde aquel verano. Taichi siguió frecuentando el ahora abandonado foro y acompañando a Yameshi y Agumon. A pesar de todo, no podían dejar de lado la misión fundamental, que era mantener a salvo a los Digimon pasara lo que pasara.
Taichi siguió recorriendo la ciudad y capturando a los salvajes, teniendo en estas misiones algunos encuentros sorpresivos con los agentes del gobierno que estaban decididos a acabar con los Digimon. Yagami sabía que el líder del equipo Hypno, Mitsuo Yamaki, lo tenía plenamente identificado, pero eso no hizo que desistiera en su labor. Lo haría por sus amigos y especialmente por Ryo Akiyama, el Rey de los Digimon.
Al cumplir los 14 años, Taichi distaba mucho del alegre niño de 11 que alguna vez fue: Su trabajo lo había vuelto duro y frío, el tener que matar a los cada vez más peligrosos Digimon para recolectar su información y salvarla del gobierno fue mermando su inocencia. Lo único que no lo hacía perder completamente su escencia eran su familia, sus amigos, Agumon y su reciente novia Sora.
Finalmente, la presencia de los Digimon se volvió cada vez más peligrosa y evidente para la sociedad y Yameshi se dió cuenta de que debía volver a tomar cartas en el asunto: Si lanzaba una segunda temporada en ese momento, coincidiendo con las apariciones, podría hacer creer a la gente que los monstruos que se dejaban ver ocasionalmente eran parte del nuevo programa.
Así que se puso a trabajar, tomó parte del guión que tenía escrito y comenzó a modificarlo a partir de la problemática que implicaba el que sus actores ya habían crecido y la aparición de la competencia. Taichi propuso incluir el concepto de la Armor Evolución como un pequeño homenaje a Ryo.
De ese modo, se hicieron las audiciones e ingresaron Daisuke, Miyako, Iori y para la gran sorpresa del productor un muy cambiado Kenji Ichivan que nunca comprendió la verdadera razón de la cancelación y el que nunca volviera a saber de Ryo. Taichi habló con el chico y le contó lo del supuesto secuestro de Ryo, cosa que dejó afectado al menor pero finalmente lo asimiló y prometió guardarlo en secreto "para no alterar a sus compañeros".
Faltando poco para que iniciara la temporada, el productor logró capturar a un V-mon, que lo hizo sentir emoción pensando que se trataba del camarada de Ryo... desafortunadamente, la criatura no pareció reconocer el lugar y al tratar de evolucionarlo de convirtió en un simple XV-mon azul.
Yameshi utilizó parte de las escenas que Kenji había grabado 3 años atrás para la serie, y así comenzó una nueva historia para el productor.
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- "Bueno, creo que les he explicado todo ya"- Taichi se dirigió a la salida de la bodega y sin voltear a ver a Takeru y Daisuke- quienes lo estaban siguiendo- continuó- "Y como podrán imaginar, les pediré que guarden esto en secreto... no se lo pueden decir a NADIE... tal vez sólo a los otros chicos tamers, pero nada más"
- "¡Es increíble que nos pidas eso! ¿Acaso nos vas a forzar como lo hizo Yameshi contigo?"
- "Para nada, pero lo cierto es que los agentes del gobierno están cada vez más cerca de nuestra pista, en especial luego de lo ocurrido anoche cerca de los cines"
- "¡Es cierto!"- exclamó Takeru recordando de pronto a su hermano- "Tú estuviste anoche con Yamato y los demás en el cine... ¿Ellos vieron al digimon?"
- "Así es... afortunadamente la policía difundió el rumor de que se trataba de un grupo terrorista que lanzaron una bomba como una broma muy pesada y la gran mayoría lo creyó, incluyendo tu hermano"
- "Eso sí que es irónico"- dijo Takeru riéndose al recordar la trama de la primera temporada.
- "Invité a Yamato a dormir a mi casa, para que no pudiera ir a tu casa y que tú le contaras lo ocurrido"- Taichi bajó la mirada- "Odio engañar así a mi mejor amigo, pero no deseo involucrarlo ahora que las cosas se están poniendo pesadas... ese digimon legendario fue una verdadera lata"
- "Un momento... ¿tú viste la batalla?"- preguntó Daisuke frenándose.
- "Así es... de hecho estuve ahí Daisuke, sólo que estabas tan ocupado con V-mon que no me viste cuando te dejé un regalito..."
- "La carta... ¡Era tuya!"- Daisuke miró asombrado- "Y supongo que la de Takato también"
- "Me hubiera gustado ayudarles... pero no lo creí prudente"
- "Descuida, porque vaya que lo hiciste, Taichi... ¡Muchas gracias!"
- "Mira Taichi... creo que nos has ayudado mucho hoy"- murmuró Takeru- "Y lo mínimo que podríamos hacer es prometerte eso. Yo no diré nada a mi hermano por ahora"
- "Cuenta conmigo para eso también"- agregó Daisuke
- "Gracias"- Taichi sonrió- "La verdad es que es agradable ya no estar solo en esto"
- "¡Por supuesto!"- dijo Daisuke con entusiasmo- "Necesitas conocer a Takato, Rika y Henry. ¡Les dará mucho gusto!"
- "Me encantaría"
- "Nosotros vamos a verlos en la tarde, ¿verdad Takeru?"
- "Así es, ¿nos acompañas Taichi?"
- "Por supuesto... díganme donde se van a ver y los alcanzaré con Agumon"
- "Nos veremos en la tarde en el parque"- respondió Takeru
- "De acuerdo, nos veremos entonces"- Taichi miró el reloj- "Ya son las 11, la hora en que les dije a sus compañeros que iniciaría la grabación. Yameshi no se encuentra ahora en la ciudad, por eso acudí yo porque supuse que vendrían a buscarlo"
- "De acuerdo, pero eso no significa que no hablaremos con Yameshi cuando regrese"
- "Lo sé..."
- "¡MATIYA! ¡NISHIDA! ¡AL FORO!"- gritó el malhumorado director. Los chicos se miraron entre sí y corrieron hacia el foro, dejando a sus Digimon en la bodega hasta que terminaran las labores de aquel día.
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Esa noche, Taichi Yagami se dirigía al parque acompañado de su fiel Agumon. EL joven de 14 años reflexionaba acerca de todo lo que había recordado durante la conversación con sus amigos. Aún sentía en él el dolor por haber perdido a Ryo, pero a pesar de todo, aún tenía esperanzas de encontrarlo de nuevo.
Curiosamente, eso es algo que el propio Takeru (poseído por su personaje aparentemente) le comentó antes de irse a trabajar al foro.
Y tenía razón: Más ahora que tendría a 5 camaradas que lo ayudarían. Taichi esperaba que juntos formaran un equipo invencible que descubriera de una vez por todas el origen de los DIgimon... eso era algo que Yameshi nunca le confió.
Taichi se adentró en el parque y no había dado ni cinco pasos cuando sintió que alguien le tomaba del hombro.
- "Te tengo Yagami... te tengo con las manos en la masa, acompañado de tu Digimon"- Taichi volteó asustado y se topó con un agente del gobierno, que le apuntaba con una pistola- "Siento tener que amenazarte de esta forma, pero sólo así vendrás conmigo"
Se trataba de Mitsuo Yamaki
CONTINUARÁ
