Harry no podía creérselo. Había estado tan preocupado. Y ahí estaba, parecía más delgado, incluso en su forma perruna, su pelo largo no brillaba mucho, al contrario que sus ojos que lo miraban alegre. Se acercó a él meneando el rabo y le lamió una mano.
– Harry, tengo que decirte algo antes de bajar al comedor. –le dijo Dumbeldore.– Tengo que asistir a la selección y según creo, dentro de unos cinco minutos estarán llegando los nuevos alumnos. Ante todo que sepas que Sirius está bien y de una pieza, por lo que ves. Se quedará este curso a tu lado, en esta forma, de esa manera, podrá pasar como tu mascota y acompañarte a todas partes. Creo que el año pasado te había dado un nombre, ¿no?
– Hocicos. (NdlA: a partir de ahora a Sirius lo llamaré Hocicos cuando sea un perro y Sirius en forma humana)
– Sí, me parece correcto que si alguien te pregunta digas que ese es su nombre. Bajo ningún concepto, excepto un máximo peligro, no deberá recuperar su forma, ni siquiera cuando estéis solos o encerados, puede entrar un fantasma o peor Peeves. Y muy importante no hables de quién es realmente tampoco.¿Entendido?
A Harry le molestaba un poco aquello, si bajaban ahora y Sirius no podía recuperar su forma, entonces tampoco sabría que le había pasado. Tampoco podría comentárselo a Ron y Hermione para indagar, aunque ellos reconocerían a Sirius.
De todas maneras, estaba muy contento de poder tener a Sirius cerca ese año, le acompañaría y aunque le costase admitirlo le daba cierta seguridad.
– De acuerdo –dijo al fin.
– Bueno, ahora a esperar que no se cele tu lechuza.–dijo Dumbeldore con una sonrisa– Deberíamos bajar, no pueden celebrar esa ceremonia sin mí, y creo que tu tienes hambre.
Al llegar al comedor Harry se tuvo que sentar en uno de los pocos bancos vacíos que estaban cerca de la mesa de los profesores y que quedaban para los nuevos alumnos. Mientras cruzaba la sala vio al grupo de niños de pié, entre los que estaban los hermanos Woods. Buscó a Ron y Hermione, pero por alguna razón no estaban ninguno de los dos. Cerca de donde terminó sentándose, estaban los hermanos Creevey y Neville. Colin lo saludó alegremente en cuanto se sentó en la mesa.
– ¡Hola Harry! ¿Sabes que este año mi hermano y yo vamos a intentar entrar en el equipo? ¿Qué tal el verano? ¿Dónde están Ron y Hermione? ¿Y Ginny? ¿De quién es ese perro?
– Este es Hocicos, mi eeerrrr… ¿nueva mascota?
Hocicos dio un suave ladrido de afirmación. Y se sentó a los pies de Harry mientras daba comienzo la selección.
La canción del sombrero seleccionador silenció a Colin, algo que Harry agradeció. Esta fue más larga que la del año anterior, al finalizar todos aplaudieron. Mientras seleccionaban a los primeros chicos Harry se fijó que las mesas de los alumnos eran más pequeñas, excepto la de Slytherin, que era horriblemente igual de grande que siempre. En la mesa de profesores, estaba sentada la profesora Hutchinson. Curiosamente, esa mesa también era más pequeña, según se fijó, no estaban ni Hagrid ni, para alegría de Harry, Snape. También faltaban algunos profesores de asignaturas que desconocía, pero de los que conocía sus caras en la mesa, como el profesor Horner de Estudios Muggles un hombre algo nervioso, que según le había contado Hermione, debía de tener grandes conocimientos del mundo muggle visto desde los magos, pero visto desde los muggles podía parecer un completo cateto.
Entonces apareció Ginny, se sentó enfrente de Harry. Venía jadeando, como si hubiese estado corriendo.
– ¿Dónde están Ron y Hermione?
– Al llegar al vestíbulo la vimos, y entonces salió corriendo. Ron y yo la seguimos, pero los perdí en el segundo piso.
– ¿Adónde fueron?
– No lo sé. Después me vine para aquí, quiero ver la selección de Sally. Espero que sea una Gryfindor. –dijo con una media sonrisa que no ocultaba su preocupación.
– Eso espero, ¿y su hermano?
– ¿Edward? No sé, es un poco seco, pero según me contó es un buen estudiante y trabajador, supongo que acabará en Ravenclaw o Hufelpuff.
– ¿Cuántos años tiene?
– Quince, creo. Va a ir a quinto.
– ¿Sólo quince?
– Sí ¿por?
– No, nada.
Harry desvió la mirada hacia el grupo de chicos que todavía esperaban ser seleccionados. Edward era alto y parecía tener por lo menos dos años más que Harry, su cara era más alargada, y el gesto serio de su mirada le envejecía. Incluso se podía vislumbrar la pelusilla que algún día sería barba. En cambio Harry todavía tenía la piel suave y lisa. Incluso Ron tenía aquella pelusilla por la zona del bigote. De repente se sintió acomplejado, él era el chico bajito, delgado y poca cosa, siempre lo había sido, pero ahora además era el niño entre los chicos.
– ¿Qué piensas? –le preguntó Ginny.
– Nada en especial.
– Mentiroso, se te ve en la cara. –le dijo con una sonrisa.
– ¿De verdad?
– Sí. No te preocupes. Ya crecerás. A Bill le pasó lo mismo, dio el estirón a los diecisiete, y ahora ya lo ves.
– ¿En serio?
– En serio, además, a mí me gustas más así.
Sintió como se ruborizaba. Ginny siempre se cortaba hablando con él, pero desde el año pasado le hablaba más. Pero nunca se hubiese imaginado que llegase a decirle algo así directamente.
Intentó seguir hablando para que no se le notase.
– ¡Pero si pareces tú mayor que yo!
– Jaja. ¡Anda! ¿Y ese perro?
Se refería a Hocicos, que había posado la cabeza en la mesa. Según pensó Harry, debió de hacerle gracia la conversación. No se había dado cuenta que estaba allí.
– Se llama Hocicos.
– ¡Edward Woods! –dijo en alto la profesora McGonagall.
Se habían pasado el tiempo hablando, y la selección había llegado ya casi al final, Sally sería la última.
Al contrario que a los niños pequeños a Edward el sombrero no le quedaba grande y se podía ver su nariz y boca. Harry se fijó en que parecía estar murmurando algo. A lo mejor estaba hablando con el sombrero como había hecho él en su selección. Pasó hasta diez minutos hablando con el sombrero hasta que este por fin gritó:
– ¡¡SLYTHERIN!!
Ni Harry ni Ginny podían creérselo. Tras quitarse el sombrero el chico seguía tan inmutable como siempre. Lo posó lentamente en el taburete y se dirigió a la abarrotada mesa de Slytherin. Todos en ella le miraban con una mezcla de asombro y miedo.
– ¡Sally Woods!
La muchacha se acercó dando saltitos y se puso con cuidado el sombrero. Ella también parecía estar murmurando algo con el sombrero, pero éste tardó sólo tres minutos con ella antes de enviarla a:
– ¡¡SLYTHERIN!!
Con una extraña expresión de sorpresa, Sally se quitó el raído sombrero con mayor lentitud que su hermano y se dirigió lentamente a sentarse a su lado.
Después de la cena, empezó a hablar Dumbeldore desde la mesa de los profesores.
– He de anunciaros varias cosas para este curso. La primera es que dado el descenso del número de alumnos, las clases las darán juntas todas las casas de un mismo curso sin separarse. Esto lleva a que haya menos profesores, algunos de ellos impartirán ahora varias asignaturas.
Sobre ese anuncio hubo varias reacciones diferentes. La principal en la que pensó Harry era que tendría todas las clases con Malfoy.
– La segunda es la llegada de nuestra nueva profesora, la señorita Mary Hutchinson, que en un principio iba a ser profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras, también impartirá Estudios Muggles.
Muchos alumnos aplaudieron desde sus mesas. Ginny parecía muy contenta y Mary parecía que se ruborizaba.
– Espero que os llevéis bien con ella. Y la tercera, dado a los últimos acontecimientos del curso pasado, se suspenderán las visitas a Hosmeade.
A este punto sí que hubo un murmullo de queja. A todo el mundo le gustaban las salidas a Hosmeade. No poder hacerlas era como estar encerrado en la escuela.
Cuando todo el mundo estuvo cayado siguió hablando.
– Bueno, es hora de irse a la cama, que mañana empiezan las clases. Prefectos acompañen a los alumnos a sus habitaciones. Buenas noches a todos, y descansad bien.
Harry se dirigió con sus compañeros de Gryfindor hacia su torre. Pero era empujado por la masa, porque no entendía nada. ¿Realmente esos chicos eran unos Slytherin? Bueno, ya lo vería más adelante en el curso.
De repente se dio cuenta de que ya estaba en la sala común y que Hocicos le estaba tirando de la túnica para que subiese a su cuarto
– ¿Quieres que me acueste temprano? Mmm, ya veo, vas a convertirme en un niño bueno.
Hocicos le soltó y meneó la cola en sentido de afirmación. Harry suspiró, en realidad tenía sueño, pero era la primera "orden paternal" que recibía en su vida, y le costó hacerle caso. Hasta ahora había hecho las cosas a la fuerza lo que los Dursley le mandaban, mandado por un profesor (o Hermione más bien) los deberes o había hecho lo que había querido. Siempre actuaba hacia conseguir algo mejor o no conseguir algo malo (un castigo) o por simple diversión, pero era la primera vez que actuaba para no decepcionar o hacer que se enfadase alguien que le tenía cariño, así que se sentía muy raro.
Subió a su habitación y vio a Seamus y Dean hablando juntos sobre lo que habían hecho en el verano, Neville estaba sentado en su cama con el pijama ya puesto. Parecía estar pensando. Pero Ron no estaba. Harry esperó que llegase pronto o le castigarían por andar fuera de la habitación.
A todos les sorprendió Hocicos por ser tan grande, pero se encariñaron con él. Cuando por fin dejaron a Harry acostarse, el perro se echó a sus pies sobre las mantas echo un ovillo de pelo negro. Le calentaba los pies al muchacho, que poco antes de dormirse miró por última vez la cama vacía de Ron.
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Hacía frío. ¿Dónde estaba? Vio una figura encapuchada, larguirucha. A su lado otra más bajita y ancha. En frete de ellas estaba otras dos medio agachadas.
– ¿Así que están en Hogwarts? –habló la persona delgada con una voz silbilante que Harry no tardó en reconocer como la de Voldemort.– no ¿Zabini?
– Así es, mi hija Blaise me escribió esta noche para contármelo. Todos están en la escuela.
– Baddoock, ¿tú tienes la misma noticia?
– Exacto, esta noche mi hijo Malcolm me escribió para decirme todas las novedades. En cuanto leí la carta no dudé ni un segundo en que la información le sería de gran utilidad.
– No está mal. Los dos lo habéis hecho bien. Ahora podéis volver, que no se note que no estáis.
Sabini y Baddock hicieron una reverencia y se desaparecieron. Voldemort se llevó la mano al mentón de forma pensativa y dio unos pasos.
– Mi señor. –dijo la voz de Colagusano– eso estropea sus planes ¿no?
– ¿Estropearlos? Yo diría que me los hace más fáciles. –se rió por lo bajo– Fíjate, ahora voy a matar varios pájaros de un solo movimiento de varita. Tenemos a todos nuestros objetivos localizados en el mismo sitio. Un sitio protegido, pero que ya pensábamos atacar desde un principio, por lo que el plan ya estaba preparado. Sólo que ahora, nos servirá para más.
– Ella también está allí. ¿Cree que nos será fiel a pesar de todo?
– Ante todo este verano he descubierto que es una magnífica actriz. Pero creo que todavía nos es fiel. A aprendido muchas cosas este verano, y a pesar de su juventud ya conocía muchas de ellas. El único problema es que está muy unida a él, y creo que él es de menos confianza, demasiado orgulloso como para unirse a nosotros, una pena, alguien tan poderoso, nos vendría muy bien. –dirigió una mirada a Colagusano– ahora sólo me quedan mis vasallos menos poderosos y necesito sangre nueva, limpia y joven. Y ella es perfecta para ayudarme a liderar a un posible nuevo grupo, tiene dotes de líder.
Harry se despertó sudando. Hocicos le estaba lamiendo la cara para despertarlo. Rumió algo y dio gracias a que estuviese con él.
– No te preocupes –dijo en la voz más baja que pudo pronunciar– Mañana iré a ver a Dumbeldore en cuanto pueda para contárselo.
Al volver a acomodarse entre las sábanas se fijó en la cama de al lado. Ron ya estaba en ella. Tenía un gesto de enfado, pero estaba profundamente dormido.
Harry volvió a dormirse.
CONTINUARÁ.....
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Bueno, espero que os guste…
Se pone interesante :D bien, poco a poco se irán poniendo las cartas sobre la mesa, y os aseguro que de los comentarios que he recivido sobre la gente que ya ha leído todo lo que tengo, planificado y escrito no saca la verdad, hasta que yo se la digo y se quedan a cuadros :P (menos una, usagi-hk te lo dejé muy fácil la verdad)
Pero tengo planificado hasta un 6º curso y ya estoy preparando el 7º y el fin a mi manera :)
Por cierto, es posible que los personajes nuevos tengan algo más de protagonismo del esperado, porque les he ido cogiendo cariño y les he dado historia, pero prometo que para el futuro Harry tendrá más protagonismo.
Bueno ¡¡¡dejad reviews pleas!!! Son mi fuente de energía vital de escritora :(
Nios leemos
Bkñs
Tiz