Lágrimas
*knock* *knock* Dos golpes en la puerta interrumpieron la lectura de Malfoy.
"¿Quién es?"
"La vieja Inés que te pateará el trasero" le contestó una voz juguetona.
"¿Qué quieres?" le preguntó de malas ganas.
"¿Podrías por favor, abrirme... es muy incómodo hablarle a la puerta"
Cuando ella entró se quedó mirando todo el cuarto. "Sabes, necesita retoques... es muy... ordenado"
"¿Y qué querías encontrar? ¿Un cuchitril como, de seguro, hay en donde vives?"
"Dracky" ella empezó poniendo sus manos en los hombros de Draco "Te agradecería mucho si dejas de agredir a las personas con las que vivo" No le contestó, sólo se dio media vuelta y se sentó en su cama, abriendo el libro como si quisiera retomar la lectura.
Ella se sentó a su lado y le quitó el libro. "No me has dirigido la palabra desde que llegué Dracky" le dijo mirándolo a los ojos "Tenemos que hablar, realmente lo necesitamos"
"¿Hablar?... ¿De qué? No veo ninguna necesidad" le contestó fríamente y volteó sus ojos "Si eso era lo que querías decirme..."
"¿Podrías ser más agradable?... No me extrañaría si no tuvieras amigos, sabes?" él regresó su mirada a ella, casi con furia. Pero ella permanecía inmutable "En primer lugar... perdón Dracky, perdóname por haberte dejado solo en esta cárcel... pero compréndeme... sólo tenía 17 y tú 10... yo era tan irresponsable e impulsiva(que no quiere decir que no lo sea ahora) y tú tan pequeño" Luego ella parecía evocar recuerdos...
"Por suerte pude acabar Hogwarts, nunca fui buena en las materias, sólo lo era en cuidado de criaturas mágicas... y en D.A.O. Además ya era mayor de edad, y quería empezar algo nuevo... pero era tan indecisa que no sabía qué quería. Pero fuera lo que fuera, tendría que ser lejos, muy lejos de aquí. La verdad, Hogwarts fue como mi verdadero hogar, aquí me sentía completamente extraña y fuera de lugar. Simplemente todo este lujo y esta tranquilidad monótona no era para mí."
"Fue entonces cuando seguí mi destino, la más sentida en todo esto fue mamá. En cuanto a nuestro padre, no le importó mucho que digamos... total, años atrás que ya no le importaba. Al principio era la chica más feliz del mundo: era libre. Pero después todo se me vino encima, de pronto me encontré sola y desprotegida, sin nadie a mi lado, ningún apoyo. No podía regresar, papá me lo advirtió al cruzar la puerta de la casa"
"No obstante, estuve a punto de hacerlo varias veces... en primer lugar por que te extrañaba, y quería saber lo que papá hacía contigo... pero tuve el alivio que entraras a Hogwarts y estarías lejos de esta casa. Él no es un hombre modelo que digamos..."
"No hables así de mi padre" le interrumpió Draco "Todo lo que haya hecho, lo hizo por nosotros"
"Ja!... No seas iluso Dracky. ¿Qué clase de padre obligaría a su hija a...?" pero se quedó callada por un momento... miró hacia abajo y luego agregó lentamente "Esta es la verdadera razón por la que dejé esta casa"
Y se descubrió el brazo izquierdo y se lo enseñó a Draco
"¿Una sucia quemadura de dragón?" le preguntó extrañado.
"Lo de encima si es una quemadura, e hice a propósito que un ridgeback noruego lo hiciera. Pero si ves o tratas de ver profundamente... ¿no notas algo más?"
Al cabo de un rato, los ojos de Draco se expandieron al ver lo que ocultaba la quemadura de dragón "Tu también eres... también eres mortífaga"
"¡Claro que no!" le dijo ella alarmada "No soy una mortífaga... papá me hizo el tatuaje, pero quien-tu-sabes nunca lo llegó a tocar... porque yo no quería y además porque me alejé lo más que pude... de todos. Por más que intento borrarla, no puedo... por eso prefiero llevar la quemadura de dragón encima. Sólo espero que papá no haya tratado de hacer lo mismo contigo, eso me tenía muy preocupada. La mitad de mi vida la pasé pensando en ti y preguntándome cómo estabas"
"Mentira... si de verdad te preocupara, nunca te hubieras ido"
"Entiende por favor que no tenía otra salida... si hubiera estado aquí un día más; esto habría sido diferente..."
"¡Claro que lo hubiera sido! ¡Tú no habrías de sentirte sola, ni yo tampoco!" al decir esto, Draco volteó la mirada.
"¿Entonces, no te hubiera importado tener por hermana una cruel asesina, con una horrible marca en el brazo, y sirviente de la peor lacra viviente en el mundo?" terminó por decir ella, no soportando más y derramando una lágrima. Draco murmuró algo como
Entonces, ella abrazó a Draco con todas sus fuerzas, y siguió llorando. Él, completamente torpe, le dio unas cuantas palmadas en la espalda.
"Ya no llores..." le dijo en un tono normal, ella lo miró, él entonces cambió de tono de voz y disimuló "¡Me ensuciarás la túnica!" él espetó, ella sonrió.
"Qué lindo eres Dracky!" le dijo entre lágrimas
"No me llames así!"
Pero ella lo volvió a abrazar antes de poder detenerla. Él hacía inútiles intentos por zafarse.
A/N: Si hay algo que no puedo evitar es la cursilería. va conmigo, es como el chicle que se pega en el zapato. simplemente no puedo evitarlo, ya se darán cuenta de ello... Bueno, cualquier comentario, lo espero con los brazos abiertos.
*knock* *knock* Dos golpes en la puerta interrumpieron la lectura de Malfoy.
"¿Quién es?"
"La vieja Inés que te pateará el trasero" le contestó una voz juguetona.
"¿Qué quieres?" le preguntó de malas ganas.
"¿Podrías por favor, abrirme... es muy incómodo hablarle a la puerta"
Cuando ella entró se quedó mirando todo el cuarto. "Sabes, necesita retoques... es muy... ordenado"
"¿Y qué querías encontrar? ¿Un cuchitril como, de seguro, hay en donde vives?"
"Dracky" ella empezó poniendo sus manos en los hombros de Draco "Te agradecería mucho si dejas de agredir a las personas con las que vivo" No le contestó, sólo se dio media vuelta y se sentó en su cama, abriendo el libro como si quisiera retomar la lectura.
Ella se sentó a su lado y le quitó el libro. "No me has dirigido la palabra desde que llegué Dracky" le dijo mirándolo a los ojos "Tenemos que hablar, realmente lo necesitamos"
"¿Hablar?... ¿De qué? No veo ninguna necesidad" le contestó fríamente y volteó sus ojos "Si eso era lo que querías decirme..."
"¿Podrías ser más agradable?... No me extrañaría si no tuvieras amigos, sabes?" él regresó su mirada a ella, casi con furia. Pero ella permanecía inmutable "En primer lugar... perdón Dracky, perdóname por haberte dejado solo en esta cárcel... pero compréndeme... sólo tenía 17 y tú 10... yo era tan irresponsable e impulsiva(que no quiere decir que no lo sea ahora) y tú tan pequeño" Luego ella parecía evocar recuerdos...
"Por suerte pude acabar Hogwarts, nunca fui buena en las materias, sólo lo era en cuidado de criaturas mágicas... y en D.A.O. Además ya era mayor de edad, y quería empezar algo nuevo... pero era tan indecisa que no sabía qué quería. Pero fuera lo que fuera, tendría que ser lejos, muy lejos de aquí. La verdad, Hogwarts fue como mi verdadero hogar, aquí me sentía completamente extraña y fuera de lugar. Simplemente todo este lujo y esta tranquilidad monótona no era para mí."
"Fue entonces cuando seguí mi destino, la más sentida en todo esto fue mamá. En cuanto a nuestro padre, no le importó mucho que digamos... total, años atrás que ya no le importaba. Al principio era la chica más feliz del mundo: era libre. Pero después todo se me vino encima, de pronto me encontré sola y desprotegida, sin nadie a mi lado, ningún apoyo. No podía regresar, papá me lo advirtió al cruzar la puerta de la casa"
"No obstante, estuve a punto de hacerlo varias veces... en primer lugar por que te extrañaba, y quería saber lo que papá hacía contigo... pero tuve el alivio que entraras a Hogwarts y estarías lejos de esta casa. Él no es un hombre modelo que digamos..."
"No hables así de mi padre" le interrumpió Draco "Todo lo que haya hecho, lo hizo por nosotros"
"Ja!... No seas iluso Dracky. ¿Qué clase de padre obligaría a su hija a...?" pero se quedó callada por un momento... miró hacia abajo y luego agregó lentamente "Esta es la verdadera razón por la que dejé esta casa"
Y se descubrió el brazo izquierdo y se lo enseñó a Draco
"¿Una sucia quemadura de dragón?" le preguntó extrañado.
"Lo de encima si es una quemadura, e hice a propósito que un ridgeback noruego lo hiciera. Pero si ves o tratas de ver profundamente... ¿no notas algo más?"
Al cabo de un rato, los ojos de Draco se expandieron al ver lo que ocultaba la quemadura de dragón "Tu también eres... también eres mortífaga"
"¡Claro que no!" le dijo ella alarmada "No soy una mortífaga... papá me hizo el tatuaje, pero quien-tu-sabes nunca lo llegó a tocar... porque yo no quería y además porque me alejé lo más que pude... de todos. Por más que intento borrarla, no puedo... por eso prefiero llevar la quemadura de dragón encima. Sólo espero que papá no haya tratado de hacer lo mismo contigo, eso me tenía muy preocupada. La mitad de mi vida la pasé pensando en ti y preguntándome cómo estabas"
"Mentira... si de verdad te preocupara, nunca te hubieras ido"
"Entiende por favor que no tenía otra salida... si hubiera estado aquí un día más; esto habría sido diferente..."
"¡Claro que lo hubiera sido! ¡Tú no habrías de sentirte sola, ni yo tampoco!" al decir esto, Draco volteó la mirada.
"¿Entonces, no te hubiera importado tener por hermana una cruel asesina, con una horrible marca en el brazo, y sirviente de la peor lacra viviente en el mundo?" terminó por decir ella, no soportando más y derramando una lágrima. Draco murmuró algo como
Entonces, ella abrazó a Draco con todas sus fuerzas, y siguió llorando. Él, completamente torpe, le dio unas cuantas palmadas en la espalda.
"Ya no llores..." le dijo en un tono normal, ella lo miró, él entonces cambió de tono de voz y disimuló "¡Me ensuciarás la túnica!" él espetó, ella sonrió.
"Qué lindo eres Dracky!" le dijo entre lágrimas
"No me llames así!"
Pero ella lo volvió a abrazar antes de poder detenerla. Él hacía inútiles intentos por zafarse.
A/N: Si hay algo que no puedo evitar es la cursilería. va conmigo, es como el chicle que se pega en el zapato. simplemente no puedo evitarlo, ya se darán cuenta de ello... Bueno, cualquier comentario, lo espero con los brazos abiertos.
