4.- JUEGOS EN LA OSCURIDAD.
Kaoru y Kim habían pasado su segundo día juntos en la casa... la lluvia había estado cayendo sin cesar desde la madrugada y ellos no habían podido salir, aprovecharon entonces a descansar lo que no habían dormido la noche anterior, Kaoru se acostó en el cuarto de Mai mientras que Kim después de cubrirse con una playera grande de color verde pasto y un pants rojo, se recostó en un sofá de la sala, era el día libre de Hikaru, así que cuando Kaoru sintió hambre.... encontró la cocina vacía... pero eso no era problema para ella, quien en un 2 por 3 se adueñó del refrigerador!, Kim se despertó debido al delicioso aroma que salía de la cocina, miró la hora, eran casi las 6 de la tarde, se levantó del sofá lentamente, estirando sus brazos y piernas y saltando un poco para reanimar sus tensados músculos, caminó lentamente a la cocina mientras decía:
-Ese aroma no es de la comida de Hikaru
Se encontró con Kaoru, vestida de un pants rojo con rayas a los lados y una playera negra con figuras de Zelda, estaba cocinando unos rollitos de pan rellenos de verduras, carne de diferentes tipo y varios quesos... se veían tal como olían... Kim entonces sintió como su estómago le indicaba que la hora de la comida había llegado... ^^ le sonrió a Kaoru de la más encantadora forma que podía y después señaló la comida... la chica lanzó la carcajada mientras le decía:
-no comerás de lo mío
Kim puso entonces ojos de súplica y le volvió a sonreír otra vez a lo que ella contestó:
-no me convences.
-si me das nadamás 5?
-son muchos.
-4?
-No.
-2?
-nyah
-1?
-y di que vas en avión- le respondió ella dándole un rollito en un plato enorme, Kim entonces la miró agradecido y luego... de un solo bocado se comió todo. A Kaoru le cayó una gotita mientras veía como Kim se atragantaba, entonces mientras se llevaba una charola llena de rollitos con un tazón de salsa de soya y especias le dijo a Kim guiñándole el ojo:
-quieres más?
-por favor! Están deliciosos!- contestó él ayudándole con la charola
-mas te vale que digas eso.-dijo ella traviesa mientras lo seguía con el tazón de la salsa
comieron en una absoluta tranquilidad y se pusieron a platicar mientras aseaban la cocina
-Kim, estoy muy confundida- inició ella quien estaba lavando los trastes mientras Kim los secaba
-porqué?- contestó extrañado él
-yo... - prosiguió la chica sonrojándose
-tu...- le dijo él acercándose un poco más a ella
-yo no soy... - se veía que a Kaoru se le hacía muy difícil decir estas palabras
-si?- respondió el sexy taekwandoke acercando la cara más a ella dispuesto a besarla
-yo no soy de esas chicas fáciles...- murmuró ella sintiendo muy cerca de Kim, quien al escuchar esto se puso bastante serio y se incorporó nuevamente tomando otro plato del lavadero y comenzando a secarlo rápidamente, tan rápido, que se le resbaló de las manos - yo... lo siento... pero si solo tienes intenciones de pasar el rato conmigo... yo no... quiero que me beses otra vez... - finalizó Kaoru viendo a Kim
-siento mucho que mis acciones te hayan dado a entender cosas equivocadas de mis sentimientos- casi murmuró él mientras recogía los fragmentos de cristal en los que se había convertido el plato
-es que... es muy raro... nos acabamos de conocer ayer y... no lo sé, no soy de las chicas que esperan cualquier oportunidad para besarse con el primer hombre sexy que encuentren...- se defendió ella, Kim al escuchar tal descripción solo sonrió mientras decía:
-yo tampoco soy un hombre fácil, mi hermana te lo tuvo que haber dicho ne?
-algo me comentó acerca de tu falta de citas
-no es la falta de citas, evito salir con chicas que solo me miran como "hombre sexy con dinero"
-yo... no quise llamarte así- dijo ella casi gritando, angustiada porque sus palabras se entendieron mal
-no digo que seas de esas personas, si lo sintiera nunca te hubiera besado, Jhun me enseñó a conocer a las personas con solo mirar sus ojos. No se si aprendí bien, pero si lo hice, eres alguien sincero y de buenos sentimientos, y, juzgando por como te trata Mai, eres muy especial interiormente
-no entiendo- dijo ella muy confundida
-bueno, te lo diré en pocas palabras: no cualquiera puede ser amiga de Mai, al menos no tanto como para invitarla a la casa siquiera a comer, y a ti te dejó una semana sola conmigo, así que puedo confiar en que no eres alguien oportunista o hipócrita.- dijo Kim mirándola y agachando su cabeza, pero a pesar de eso, ella pudo ver que se estaba sonrojando bastante - si te besé fue porque... me atraes mucho... no me preguntes porqué... pero siento que tu y yo podemos ser algo más que buenos amigos... aunque solo nos hallamos conocido ayer.
- yo siento lo mismo- dijo ella acercándose a él, Kim estaba sorprendido porque ella tomara la iniciativa del beso, pero sonrió y se acercó también, eso quería decir que ella también correspondía a sus sentimientos... eso lo tenía que saber su mejor amigo... tenía que hablarle a Jhun.
-Pasemos a la casa- propuso Jhun mientras retiraba su musculoso brazo de Mai y caminaba hacia el coche y sacaba las maletas
-dónde nos quedaremos?- preguntó ella mientras lo seguía
-tienes todas las construcciones para elegir- contestó el - pero haremos una regla, tu entrenamiento aquí es tanto físico como espiritual y mental, tienes que crear un vínculo con el lugar en el que reposas así que... recorramos primero la casa, con el cuarto que te sientas más identificada, en ese te quedas y, la regla es que después de haberlo elegido, ya no puedes cambiar de ubicación.
-ese es el entrenamiento maniático que mencionaba Kim...- murmuró ella
-si, a Kim no le agradó para nada esto- dijo Jhun sonriendo
-porqué?
-fácil, es como si el cuarto te eligiera para estar en él, sientes vibraciones que te indican que ese es tu lugar de meditación, y para Kim eso era muy extraño... pero se identificó enseguida con el lugar y eso hizo más fácil su entrenamiento físico
-eh?- dijo ella confundida
-bueno, es sencillo, en ese lugar mientras meditas y sacas todos tus problemas, sentirás paz interna, lo que te permitirá que tu entrenamiento físico rinda al máximo, solo sacando lo que pese a tu alma te sentirás libre para pelear con honor.
-bien.- contestó ella suspirando fuertemente - eso no será fácil
-lo se... para mí tampoco- murmuró para sí Jhun
-que dices?- le preguntó Mai quien solo había visto que los labios de Jhun se movían pero no escuchó las palabras.
-nada- dijo Jhun dejando las maletas en el recibidor y diciéndole a Mai que lo siguiera, comenzaron a recorrer la casa Luego de un breve recorrido y varias habitaciones que no significaron nada para la bella chica, llegaron a una habitación con piso de madera y varios pergaminos colgando de la pared, tenía un hermoso ventanal que daba al jardín de las sakuras, Mai entonces sintió escalofríos que le causaron que sus vellos de los brazos se erizaran
-bien- dijo Jhun sonriendo - creo que aquí te quedas
-creo que si - dijo ella sonriendo
Jhun entonces salió de la habitación y siguió recorriendo la casa, hasta llegar al otro extremo en una habitación con una ventana muy grande que le mostraba todo el acantilado y con decoraciones muy japonesas a rojo y negro, se sintió satisfecho con este cuarto y fue a buscar a Mai.
-Bien pequeña, será necesario que te pongas ropas de entrenamiento- le dijo él
-no hay problema
-entonces nos vemos en 10 minutos en el dojo ok?
-oky doky - contestó ella guiñándole un ojo y levantando su pulgar mientras empezaba a desempacar.
Se encontraron en menos de el tiempo acordado en el dojo, bella construcción hecha de paredes de bambú y piso de madera delgada, kanjis perfectamente trazados en pergaminos enormes colgaban de la pared, Mai supuso que eran obra de Jhun, ah! Como lo admiraba!!! No solo era atractivo, sexy, con un cuerpo y caras hermosos, sino que era inteligente, filosófico, sensible, era tan...
-Mai en que piensas?- le interrumpió él, quien vestía de un traje igual al de Kim, pero en color rojo ardiente con bordes blancos. Se veía tan... bien...
-eh?- dijo ella saliendo de su trance- en nada!
-que bien te queda ese color- señaló Jhun haciendo que Mai se pusiera casi tan roja como su traje.
-gracias...- murmuró ella, quien vestía de un traje de taekwandoke color lila.
-bien, empecemos- dijo él.
Primero calentaron, saltando un poco y ensayando algunas patadas de baja intensidad, Jhun pasó a patear el saco de arena, lo hizo unos 5 minutos mientras Mai lanzaba patadas hacia arriba abriendo completamente el compás, él entonces dejó de golpear el saco para observarla, estaba peinada de una coleta alta que hacía caer una cascada de ébano hacia abajo de su cintura y sus 2 mechones morados se movían rítmicamente al compás que sus movimientos le marcaban, era hermosa, y se veía tan adorable, tan concentrada, estaba tomando en serio el entrenamiento y eso era algo que él empezaba a admirar de Mai, no obstante se había sincerado con Kaoru acerca de sus sentimientos y lo difícil que iba a ser para ella estar aquí con él, la chica estaba poniendo todo su empeño en el entrenamiento...
-bien Mai, es suficiente- dijo Jhun con firmeza
Esa voz le indicaba a Mai que el entrenamiento había comenzado, ya no era Jhun el mejor amigo de su hermano y el chico que era tan cariñoso con ella, sino era Jhun Hoon-sama, su sensei, ella dejó de calentar y entonces se dirigió hacia él y cuando estuvo lo suficientemente cerca, se inclinó en un respetuoso saludo que indicaba que lo aceptaba como maestro y Jhun sonrió satisfecho haciendo un movimiento de cabeza, así la aceptaba como alumna, él comenzó haciendo que Mai ensayara movimientos básicos y bloqueos de ataques, la chica solo tuvo problemas en 2 o 3 movimientos que tuvieron que repetir más de 20 veces, pero los resultados al final fueron excelentes, al atardecer, cuando ambos sintieron hambre, Jhun paró el entrenamiento
-lo físico ha sido suficiente por el momento- dijo él
-ok- contestó ella soltándose el cabello, dejando caer su cascada negra por sus hombros, mezclándose con lo morado de sus mechones - quiero comer
-yo también- dijo él sonriendo y secando el sudor de su frente con una toalla
-pero antes quiero asearme- dijo ella sonriendo
-yo también- asintió él -sabes que estaría bien?, que fuéramos a las termales
-siii!!!!- dijo ella
-bueno, te veo allá en unos minutos- contestó él tranquilamente
-te... veo... allá.... - murmuró ella viendo como se alejaba el chico.
Eso no era nuevo para ella, pues, cuando habían ido a entrenar los 3, todos se metían en el termal que había al fondo de la casa, obvio es que en ese tipo de baños en los que el agua está a más de 40º Celsius se tenían que turnar en una cortina para quitarse la toalla, y la verdad el termal estaba lo suficientemente grande como para que ella, Kim y Jhun ni siquiera se rozaran los dedos de los pies... pero... en esta ocasión solo estaban ellos 2... y... era justo ahora cuando el amor por Jhun casi era una obsesión!, esto estaba mal y ella lo sabía, pero no podía demostrarlo... no podía...
Jhun caminaba mientras pensaba, porqué había dicho esas palabras?, nos vemos en unos minutos????, estaba mal... pero... siempre que entrenaban iban todos juntos, mientras se desnudaba en su cuarto pensaba en lo raro que era todo esto... jamás había estado solo con la pequeña, y... no estaba seguro de poder estar con ella así... después de todo lo que su corazón había descubierto el día de ayer...
Mai por mientras caminaba enrollada en una larga toalla hacia el termal, sus cabellos caían sobre sus hombros y se movían al compás de sus pasos, se encontró con Jhun en el pasillo, el musculoso taekwandoke tenía envuelta de su cintura una toalla también, su pecho estaba desnudo, el ver a la persona que más quería en tan poca ropa sintió que su corazón se aceleraba, dando paso a un rubor muy extenso en sus mejillas, la chica solo caminó rápidamente al termal y corrió la cortina... aquí venía la parte más difícil para ambos... Jhun miró por el reflejo de la luz la silueta de la chica despojándose de su toalla y sintió escalofríos... porqué si nunca antes le había pasado?, había visto muchas mujeres en peores situaciones y jamás había experimentado esos escalofríos que recorrían toda su espina dorsal... qué era lo que esa chica había hecho con él??? Cuando la figura se sumergió en el agua se dirigió hacia el termal y aún por fuera de la cortina se despojó de su toalla, sumergiéndose rápidamente en el baño, quedando ambos dentro de la cortina, sonrojados y viendo la cara del otro con cierta vergüenza, el agua era de un color azul oscuro y el vapor nublaba el ambiente, así que nadie podía ver el cuerpo del otro bajo el agua por más que quisiera, permanecieron así por varios minutos, tal vez media hora, hasta que, Jhun decidió moverse por el shampoo para el cuerpo que estaba tras de Mai, se levantó, el agua aún cubría muy por encima de su cintura y caminó lentamente hacia ella, quien no se movió, solo se limitó a ver hacia otro lado, pero, cuando sintió muy cerca de Jhun no pudo evitar mirarlo, extendiendo su brazo para alcanzar el shampoo, tan cerca de ella físicamente, tan lejos de la forma en que a ella le gustaría tenerlo, dios, como lo amaba, Jhun tomó el shampoo lo más rápidamente que pudo y regresó a su lugar, cuando terminó de usarlo, lo lanzó a Mai, quien interiormente agradeció que no se acercara más, Jhun fue el primero que salió, corriendo la cortina nuevamente y enrollándose en su toalla, Mai solo vio la silueta caminar lentamente hacia la salida y suspiró... era totalmente inalcanzable y era justo ahora que se estaba dando cuenta de ello...
-Que raro, no contesta nadie- murmuraba preocupado Kim mientras colgaba el teléfono de su estudio
-no te preocupes - gritaba Kaoru desde la sala - seguramente están entrenando fuera.
-con este clima?- reparó Kim señalando la horrible ventisca que corría por toda Osaka
-puede ser... - dijo ella sonriendo y llegando junto a él
-que tienes?- preguntó él reparando en la preocupación de los ojos de Kaoru
-estaba pensando en cómo lo va a tomar tu hermana
-como va a tomar qué?- dijo él levantándose y abrazándola
-cuando sepa que nosotros nos hemos besado, lo que siento por ti... va a decir que es demasiada coincidencia tanto en tan poco tiempo
-no va a decir nada, no tiene porqué decirlo, cada quien tiene derecho a ser feliz de la manera en que lo crea conveniente, yo siento que soy feliz contigo.
-y yo contigo- repuso ella sonriendo
-entonces? No creo que mi hermanita se oponga, si ella es la que me presiona para que yo salga con chicas...
-bueno, es que no te quiere ver solo...
-ya no lo estoy- dijo él mientras se acercaba para besarla nuevamente, pero, antes de que sus labios se unieran un apagón en toda la ciudad hizo que se quedaran en la más absoluta oscuridad...
-genial- murmuró Kim mientras tentaba a su alrededor para ver donde podía encontrar algo que alumbrara... revisó el cajón de su escritorio peor no encontró nada más que 2 cosas redondas...
-que demo...- inició él cuando de pronto recordó que eran... - las Lucy bolas de Mai! Eso es..- murmuró
-Kim, me estás asustando...- dijo Kaoru no entendiendo nada
-es que encontré 2 juguetes de Mai, se los quité hace unos meses y nunca se los devolví, me rompió un jarrón enorme jugando con Jhun...
-con Jhun?- casi gritó Kaoru
-si, ellos se llevan muy bien, yo también hubiese estado jugando pero recuerdo que tenía que revisar algunas cuentas de la casa, así que solo jugaban ellos 2, los regañé y se las quité, jamás se las devolví
-ellos 2 se llevan muy bien, que doloroso para ella- murmuraba Kaoru
-porqué?- cuestionó Kim intrigado
-por nada, solo que es extraño que alguien que no es de la familia se lleve así con ella
-él siempre la ha querido mucho, no se porqué, pero desde que íbamos en secundaria decía que se iba a casar con Mai
-eh???- ahora si gritó ella
-eran juegos de niños, con el paso del tiempo, empezó a estar mucho con ella y luego, decía que era nuestro hermano, cuando nuestros padres murieron, él siempre estuvo con nosotros, sus padres también fallecieron poco después, así que juntos nosotros 3 formamos una familia
-ojalá todos se vieran como parte de la familia- murmuró tan bajito Kaoru que Kim no la escuchó
-oye- dijo él tocándola en el hombro
-si dime?
-jugamos?
-a que?- dijo ella soltando una carcajada, la faceta de Kim que acababa de conocer era encantadora y debía decir que le fascinaba ver a ese sexy hombre de negocios, que practicaba Tae Kwan Do profesional y que tenía a su cargo a su hermana, tratando de jugar como un niño de 12 años
-bueno, tu te escondes en la planta baja y yo cuento hasta 20, entonces cada uno saldrá de donde está rebotando las pelotas
-aja, si, nos guiamos por el sonido que hacen al rebotar?- se burló Kaoru
-ne, ne, ne- respondió Kim- estas pelotas cuando rebotan se encienden- y al finalizar de decir esto rebotó una la cual lanzó una luz azul bastante fuerte
-oye, suena divertido!- repuso ella arrebatándole una al chico y corriendo hacia la sala
-1, 2, 3...- comenzó Kim gritando en voz alta, hace cuánto tiempo que no se había divertido así?, no d esta manera, no con otra persona que no fuera su hermana o Jhun, y es que con Kaoru era diferente, él sabía que era una mujer muy especial... sabía que era la persona que había estado esperando por mucho tiempo, y tenía que encontrar el momento propicio para decírselo, aunque no tenía ni 48 horas de haberla conocido, ya sabía que quería pasar el resto de sus horas acompañado por ella...- 19, 20!!!!- terminó de contar y se fue a buscarla mientras rebotaba su pelota, y ella salió muy lejos de donde él estaba rebotando la suya, pasaron largo rato así, hasta que él la logró atrapar, si varias personas hubieran estado fuera observando lo que hacían, hubieran visto 2 luces recorriendo toda la planta baja de la mansión y oirían carcajadas provenir de la casa, si varias personas hubieran estado allí, segura pensarían que la casa estaba embrujada....
NOTAS: Buey....... que ondas conmigo?? Ah...... (suspiro) a poco no se antojaría estar con Jhun así???, bueno, si ne? yo digo... y Kim??? Esa forma de acercarse a Kaoru.... dios... a mi me daría un infarto...jijiji crea que a Kaoru también.... estoy pensando en hacer muchas diabladas en el próximo capítulo y ustedes que piensan?? Eh, eh?
Sayounara
By Sheik
Kaoru y Kim habían pasado su segundo día juntos en la casa... la lluvia había estado cayendo sin cesar desde la madrugada y ellos no habían podido salir, aprovecharon entonces a descansar lo que no habían dormido la noche anterior, Kaoru se acostó en el cuarto de Mai mientras que Kim después de cubrirse con una playera grande de color verde pasto y un pants rojo, se recostó en un sofá de la sala, era el día libre de Hikaru, así que cuando Kaoru sintió hambre.... encontró la cocina vacía... pero eso no era problema para ella, quien en un 2 por 3 se adueñó del refrigerador!, Kim se despertó debido al delicioso aroma que salía de la cocina, miró la hora, eran casi las 6 de la tarde, se levantó del sofá lentamente, estirando sus brazos y piernas y saltando un poco para reanimar sus tensados músculos, caminó lentamente a la cocina mientras decía:
-Ese aroma no es de la comida de Hikaru
Se encontró con Kaoru, vestida de un pants rojo con rayas a los lados y una playera negra con figuras de Zelda, estaba cocinando unos rollitos de pan rellenos de verduras, carne de diferentes tipo y varios quesos... se veían tal como olían... Kim entonces sintió como su estómago le indicaba que la hora de la comida había llegado... ^^ le sonrió a Kaoru de la más encantadora forma que podía y después señaló la comida... la chica lanzó la carcajada mientras le decía:
-no comerás de lo mío
Kim puso entonces ojos de súplica y le volvió a sonreír otra vez a lo que ella contestó:
-no me convences.
-si me das nadamás 5?
-son muchos.
-4?
-No.
-2?
-nyah
-1?
-y di que vas en avión- le respondió ella dándole un rollito en un plato enorme, Kim entonces la miró agradecido y luego... de un solo bocado se comió todo. A Kaoru le cayó una gotita mientras veía como Kim se atragantaba, entonces mientras se llevaba una charola llena de rollitos con un tazón de salsa de soya y especias le dijo a Kim guiñándole el ojo:
-quieres más?
-por favor! Están deliciosos!- contestó él ayudándole con la charola
-mas te vale que digas eso.-dijo ella traviesa mientras lo seguía con el tazón de la salsa
comieron en una absoluta tranquilidad y se pusieron a platicar mientras aseaban la cocina
-Kim, estoy muy confundida- inició ella quien estaba lavando los trastes mientras Kim los secaba
-porqué?- contestó extrañado él
-yo... - prosiguió la chica sonrojándose
-tu...- le dijo él acercándose un poco más a ella
-yo no soy... - se veía que a Kaoru se le hacía muy difícil decir estas palabras
-si?- respondió el sexy taekwandoke acercando la cara más a ella dispuesto a besarla
-yo no soy de esas chicas fáciles...- murmuró ella sintiendo muy cerca de Kim, quien al escuchar esto se puso bastante serio y se incorporó nuevamente tomando otro plato del lavadero y comenzando a secarlo rápidamente, tan rápido, que se le resbaló de las manos - yo... lo siento... pero si solo tienes intenciones de pasar el rato conmigo... yo no... quiero que me beses otra vez... - finalizó Kaoru viendo a Kim
-siento mucho que mis acciones te hayan dado a entender cosas equivocadas de mis sentimientos- casi murmuró él mientras recogía los fragmentos de cristal en los que se había convertido el plato
-es que... es muy raro... nos acabamos de conocer ayer y... no lo sé, no soy de las chicas que esperan cualquier oportunidad para besarse con el primer hombre sexy que encuentren...- se defendió ella, Kim al escuchar tal descripción solo sonrió mientras decía:
-yo tampoco soy un hombre fácil, mi hermana te lo tuvo que haber dicho ne?
-algo me comentó acerca de tu falta de citas
-no es la falta de citas, evito salir con chicas que solo me miran como "hombre sexy con dinero"
-yo... no quise llamarte así- dijo ella casi gritando, angustiada porque sus palabras se entendieron mal
-no digo que seas de esas personas, si lo sintiera nunca te hubiera besado, Jhun me enseñó a conocer a las personas con solo mirar sus ojos. No se si aprendí bien, pero si lo hice, eres alguien sincero y de buenos sentimientos, y, juzgando por como te trata Mai, eres muy especial interiormente
-no entiendo- dijo ella muy confundida
-bueno, te lo diré en pocas palabras: no cualquiera puede ser amiga de Mai, al menos no tanto como para invitarla a la casa siquiera a comer, y a ti te dejó una semana sola conmigo, así que puedo confiar en que no eres alguien oportunista o hipócrita.- dijo Kim mirándola y agachando su cabeza, pero a pesar de eso, ella pudo ver que se estaba sonrojando bastante - si te besé fue porque... me atraes mucho... no me preguntes porqué... pero siento que tu y yo podemos ser algo más que buenos amigos... aunque solo nos hallamos conocido ayer.
- yo siento lo mismo- dijo ella acercándose a él, Kim estaba sorprendido porque ella tomara la iniciativa del beso, pero sonrió y se acercó también, eso quería decir que ella también correspondía a sus sentimientos... eso lo tenía que saber su mejor amigo... tenía que hablarle a Jhun.
-Pasemos a la casa- propuso Jhun mientras retiraba su musculoso brazo de Mai y caminaba hacia el coche y sacaba las maletas
-dónde nos quedaremos?- preguntó ella mientras lo seguía
-tienes todas las construcciones para elegir- contestó el - pero haremos una regla, tu entrenamiento aquí es tanto físico como espiritual y mental, tienes que crear un vínculo con el lugar en el que reposas así que... recorramos primero la casa, con el cuarto que te sientas más identificada, en ese te quedas y, la regla es que después de haberlo elegido, ya no puedes cambiar de ubicación.
-ese es el entrenamiento maniático que mencionaba Kim...- murmuró ella
-si, a Kim no le agradó para nada esto- dijo Jhun sonriendo
-porqué?
-fácil, es como si el cuarto te eligiera para estar en él, sientes vibraciones que te indican que ese es tu lugar de meditación, y para Kim eso era muy extraño... pero se identificó enseguida con el lugar y eso hizo más fácil su entrenamiento físico
-eh?- dijo ella confundida
-bueno, es sencillo, en ese lugar mientras meditas y sacas todos tus problemas, sentirás paz interna, lo que te permitirá que tu entrenamiento físico rinda al máximo, solo sacando lo que pese a tu alma te sentirás libre para pelear con honor.
-bien.- contestó ella suspirando fuertemente - eso no será fácil
-lo se... para mí tampoco- murmuró para sí Jhun
-que dices?- le preguntó Mai quien solo había visto que los labios de Jhun se movían pero no escuchó las palabras.
-nada- dijo Jhun dejando las maletas en el recibidor y diciéndole a Mai que lo siguiera, comenzaron a recorrer la casa Luego de un breve recorrido y varias habitaciones que no significaron nada para la bella chica, llegaron a una habitación con piso de madera y varios pergaminos colgando de la pared, tenía un hermoso ventanal que daba al jardín de las sakuras, Mai entonces sintió escalofríos que le causaron que sus vellos de los brazos se erizaran
-bien- dijo Jhun sonriendo - creo que aquí te quedas
-creo que si - dijo ella sonriendo
Jhun entonces salió de la habitación y siguió recorriendo la casa, hasta llegar al otro extremo en una habitación con una ventana muy grande que le mostraba todo el acantilado y con decoraciones muy japonesas a rojo y negro, se sintió satisfecho con este cuarto y fue a buscar a Mai.
-Bien pequeña, será necesario que te pongas ropas de entrenamiento- le dijo él
-no hay problema
-entonces nos vemos en 10 minutos en el dojo ok?
-oky doky - contestó ella guiñándole un ojo y levantando su pulgar mientras empezaba a desempacar.
Se encontraron en menos de el tiempo acordado en el dojo, bella construcción hecha de paredes de bambú y piso de madera delgada, kanjis perfectamente trazados en pergaminos enormes colgaban de la pared, Mai supuso que eran obra de Jhun, ah! Como lo admiraba!!! No solo era atractivo, sexy, con un cuerpo y caras hermosos, sino que era inteligente, filosófico, sensible, era tan...
-Mai en que piensas?- le interrumpió él, quien vestía de un traje igual al de Kim, pero en color rojo ardiente con bordes blancos. Se veía tan... bien...
-eh?- dijo ella saliendo de su trance- en nada!
-que bien te queda ese color- señaló Jhun haciendo que Mai se pusiera casi tan roja como su traje.
-gracias...- murmuró ella, quien vestía de un traje de taekwandoke color lila.
-bien, empecemos- dijo él.
Primero calentaron, saltando un poco y ensayando algunas patadas de baja intensidad, Jhun pasó a patear el saco de arena, lo hizo unos 5 minutos mientras Mai lanzaba patadas hacia arriba abriendo completamente el compás, él entonces dejó de golpear el saco para observarla, estaba peinada de una coleta alta que hacía caer una cascada de ébano hacia abajo de su cintura y sus 2 mechones morados se movían rítmicamente al compás que sus movimientos le marcaban, era hermosa, y se veía tan adorable, tan concentrada, estaba tomando en serio el entrenamiento y eso era algo que él empezaba a admirar de Mai, no obstante se había sincerado con Kaoru acerca de sus sentimientos y lo difícil que iba a ser para ella estar aquí con él, la chica estaba poniendo todo su empeño en el entrenamiento...
-bien Mai, es suficiente- dijo Jhun con firmeza
Esa voz le indicaba a Mai que el entrenamiento había comenzado, ya no era Jhun el mejor amigo de su hermano y el chico que era tan cariñoso con ella, sino era Jhun Hoon-sama, su sensei, ella dejó de calentar y entonces se dirigió hacia él y cuando estuvo lo suficientemente cerca, se inclinó en un respetuoso saludo que indicaba que lo aceptaba como maestro y Jhun sonrió satisfecho haciendo un movimiento de cabeza, así la aceptaba como alumna, él comenzó haciendo que Mai ensayara movimientos básicos y bloqueos de ataques, la chica solo tuvo problemas en 2 o 3 movimientos que tuvieron que repetir más de 20 veces, pero los resultados al final fueron excelentes, al atardecer, cuando ambos sintieron hambre, Jhun paró el entrenamiento
-lo físico ha sido suficiente por el momento- dijo él
-ok- contestó ella soltándose el cabello, dejando caer su cascada negra por sus hombros, mezclándose con lo morado de sus mechones - quiero comer
-yo también- dijo él sonriendo y secando el sudor de su frente con una toalla
-pero antes quiero asearme- dijo ella sonriendo
-yo también- asintió él -sabes que estaría bien?, que fuéramos a las termales
-siii!!!!- dijo ella
-bueno, te veo allá en unos minutos- contestó él tranquilamente
-te... veo... allá.... - murmuró ella viendo como se alejaba el chico.
Eso no era nuevo para ella, pues, cuando habían ido a entrenar los 3, todos se metían en el termal que había al fondo de la casa, obvio es que en ese tipo de baños en los que el agua está a más de 40º Celsius se tenían que turnar en una cortina para quitarse la toalla, y la verdad el termal estaba lo suficientemente grande como para que ella, Kim y Jhun ni siquiera se rozaran los dedos de los pies... pero... en esta ocasión solo estaban ellos 2... y... era justo ahora cuando el amor por Jhun casi era una obsesión!, esto estaba mal y ella lo sabía, pero no podía demostrarlo... no podía...
Jhun caminaba mientras pensaba, porqué había dicho esas palabras?, nos vemos en unos minutos????, estaba mal... pero... siempre que entrenaban iban todos juntos, mientras se desnudaba en su cuarto pensaba en lo raro que era todo esto... jamás había estado solo con la pequeña, y... no estaba seguro de poder estar con ella así... después de todo lo que su corazón había descubierto el día de ayer...
Mai por mientras caminaba enrollada en una larga toalla hacia el termal, sus cabellos caían sobre sus hombros y se movían al compás de sus pasos, se encontró con Jhun en el pasillo, el musculoso taekwandoke tenía envuelta de su cintura una toalla también, su pecho estaba desnudo, el ver a la persona que más quería en tan poca ropa sintió que su corazón se aceleraba, dando paso a un rubor muy extenso en sus mejillas, la chica solo caminó rápidamente al termal y corrió la cortina... aquí venía la parte más difícil para ambos... Jhun miró por el reflejo de la luz la silueta de la chica despojándose de su toalla y sintió escalofríos... porqué si nunca antes le había pasado?, había visto muchas mujeres en peores situaciones y jamás había experimentado esos escalofríos que recorrían toda su espina dorsal... qué era lo que esa chica había hecho con él??? Cuando la figura se sumergió en el agua se dirigió hacia el termal y aún por fuera de la cortina se despojó de su toalla, sumergiéndose rápidamente en el baño, quedando ambos dentro de la cortina, sonrojados y viendo la cara del otro con cierta vergüenza, el agua era de un color azul oscuro y el vapor nublaba el ambiente, así que nadie podía ver el cuerpo del otro bajo el agua por más que quisiera, permanecieron así por varios minutos, tal vez media hora, hasta que, Jhun decidió moverse por el shampoo para el cuerpo que estaba tras de Mai, se levantó, el agua aún cubría muy por encima de su cintura y caminó lentamente hacia ella, quien no se movió, solo se limitó a ver hacia otro lado, pero, cuando sintió muy cerca de Jhun no pudo evitar mirarlo, extendiendo su brazo para alcanzar el shampoo, tan cerca de ella físicamente, tan lejos de la forma en que a ella le gustaría tenerlo, dios, como lo amaba, Jhun tomó el shampoo lo más rápidamente que pudo y regresó a su lugar, cuando terminó de usarlo, lo lanzó a Mai, quien interiormente agradeció que no se acercara más, Jhun fue el primero que salió, corriendo la cortina nuevamente y enrollándose en su toalla, Mai solo vio la silueta caminar lentamente hacia la salida y suspiró... era totalmente inalcanzable y era justo ahora que se estaba dando cuenta de ello...
-Que raro, no contesta nadie- murmuraba preocupado Kim mientras colgaba el teléfono de su estudio
-no te preocupes - gritaba Kaoru desde la sala - seguramente están entrenando fuera.
-con este clima?- reparó Kim señalando la horrible ventisca que corría por toda Osaka
-puede ser... - dijo ella sonriendo y llegando junto a él
-que tienes?- preguntó él reparando en la preocupación de los ojos de Kaoru
-estaba pensando en cómo lo va a tomar tu hermana
-como va a tomar qué?- dijo él levantándose y abrazándola
-cuando sepa que nosotros nos hemos besado, lo que siento por ti... va a decir que es demasiada coincidencia tanto en tan poco tiempo
-no va a decir nada, no tiene porqué decirlo, cada quien tiene derecho a ser feliz de la manera en que lo crea conveniente, yo siento que soy feliz contigo.
-y yo contigo- repuso ella sonriendo
-entonces? No creo que mi hermanita se oponga, si ella es la que me presiona para que yo salga con chicas...
-bueno, es que no te quiere ver solo...
-ya no lo estoy- dijo él mientras se acercaba para besarla nuevamente, pero, antes de que sus labios se unieran un apagón en toda la ciudad hizo que se quedaran en la más absoluta oscuridad...
-genial- murmuró Kim mientras tentaba a su alrededor para ver donde podía encontrar algo que alumbrara... revisó el cajón de su escritorio peor no encontró nada más que 2 cosas redondas...
-que demo...- inició él cuando de pronto recordó que eran... - las Lucy bolas de Mai! Eso es..- murmuró
-Kim, me estás asustando...- dijo Kaoru no entendiendo nada
-es que encontré 2 juguetes de Mai, se los quité hace unos meses y nunca se los devolví, me rompió un jarrón enorme jugando con Jhun...
-con Jhun?- casi gritó Kaoru
-si, ellos se llevan muy bien, yo también hubiese estado jugando pero recuerdo que tenía que revisar algunas cuentas de la casa, así que solo jugaban ellos 2, los regañé y se las quité, jamás se las devolví
-ellos 2 se llevan muy bien, que doloroso para ella- murmuraba Kaoru
-porqué?- cuestionó Kim intrigado
-por nada, solo que es extraño que alguien que no es de la familia se lleve así con ella
-él siempre la ha querido mucho, no se porqué, pero desde que íbamos en secundaria decía que se iba a casar con Mai
-eh???- ahora si gritó ella
-eran juegos de niños, con el paso del tiempo, empezó a estar mucho con ella y luego, decía que era nuestro hermano, cuando nuestros padres murieron, él siempre estuvo con nosotros, sus padres también fallecieron poco después, así que juntos nosotros 3 formamos una familia
-ojalá todos se vieran como parte de la familia- murmuró tan bajito Kaoru que Kim no la escuchó
-oye- dijo él tocándola en el hombro
-si dime?
-jugamos?
-a que?- dijo ella soltando una carcajada, la faceta de Kim que acababa de conocer era encantadora y debía decir que le fascinaba ver a ese sexy hombre de negocios, que practicaba Tae Kwan Do profesional y que tenía a su cargo a su hermana, tratando de jugar como un niño de 12 años
-bueno, tu te escondes en la planta baja y yo cuento hasta 20, entonces cada uno saldrá de donde está rebotando las pelotas
-aja, si, nos guiamos por el sonido que hacen al rebotar?- se burló Kaoru
-ne, ne, ne- respondió Kim- estas pelotas cuando rebotan se encienden- y al finalizar de decir esto rebotó una la cual lanzó una luz azul bastante fuerte
-oye, suena divertido!- repuso ella arrebatándole una al chico y corriendo hacia la sala
-1, 2, 3...- comenzó Kim gritando en voz alta, hace cuánto tiempo que no se había divertido así?, no d esta manera, no con otra persona que no fuera su hermana o Jhun, y es que con Kaoru era diferente, él sabía que era una mujer muy especial... sabía que era la persona que había estado esperando por mucho tiempo, y tenía que encontrar el momento propicio para decírselo, aunque no tenía ni 48 horas de haberla conocido, ya sabía que quería pasar el resto de sus horas acompañado por ella...- 19, 20!!!!- terminó de contar y se fue a buscarla mientras rebotaba su pelota, y ella salió muy lejos de donde él estaba rebotando la suya, pasaron largo rato así, hasta que él la logró atrapar, si varias personas hubieran estado fuera observando lo que hacían, hubieran visto 2 luces recorriendo toda la planta baja de la mansión y oirían carcajadas provenir de la casa, si varias personas hubieran estado allí, segura pensarían que la casa estaba embrujada....
NOTAS: Buey....... que ondas conmigo?? Ah...... (suspiro) a poco no se antojaría estar con Jhun así???, bueno, si ne? yo digo... y Kim??? Esa forma de acercarse a Kaoru.... dios... a mi me daría un infarto...jijiji crea que a Kaoru también.... estoy pensando en hacer muchas diabladas en el próximo capítulo y ustedes que piensan?? Eh, eh?
Sayounara
By Sheik
