Capítulo 13 Sueños

-¿Dónde habéis estado?-pregunto Ron.

-¿Por qué no nos habéis despertado? -preguntó Hermione.

-¿Qué es esto un interrogatorio? -preguntó Ginny.

-Nos hemos despertado muy pronto, y hemos ido a caminar porque no podíamos dormir. Si os hubiesemos despertado tan pronto os hubierais mosqueado -mintió Harry.

-¿Tan pronto os habéis despertado? -preguntó Ron.

-Bueno, a las siete de la mañana -volvió a mentir Harry. Sabía que si les decía que se habían despertado tan pronto era lógico que no les hubiera despertado.

-Vale, tú, Harry, te has despertado a las siete de la mañana, y no nos has despertado a nosotros ¿pero sí le has despertado a Ginny? -preguntó Hermione.

-No exactamente, yo me he despertado, me he vestido y cuando he abierto la puerta Ginny se ha despertado por la luz y el ruído -volvió a mentir Harry.

-Ya sabes que yo tengo el sueño muy ligero, Ron -dijo Ginny.

-Bueno, vayamos a comer, me muero de hambre, no he desayunado -dijo Ron.

-Tú siempre pensando en comida Ron. Bueno, ahora que lo pienso yo también tengo hambre, nosotros tampoco hemos desayunado. Tengo una idea -dijo Harry antes de que nadie le preguntara por qué no habían desayunado si llevaban despiertos desde las siete de la mañana -¿Por qué no vamos a saludar a Dobby y de paso comemos algo en las cocinas?

-OK, yo estoy de acuerdo -dijo rápidamente Ron.

-Vale, vayamos -dijeron Hermione y Ginny.

Fueron a las cocinas. Le hicieron cosquillas a la pera y entraron en la cocina. Nada más entrar un montón de elfos se dieron la vuelta y comenzaron a ofrecerles comida. Ron aceptó encantado y probó de todo. Por el contrario, Ginny, Harry y Hermione comieron discretamente.

-Estaba todo riquísimo. ¿Nos podrías decir dónde está el elfo Dobby? -preguntó Harry una vez habían acabado de comer.

-Dobby no se encuentra en este momento, tardará un tiempo en llegar, por lo menos hasta la tarde. Si quieren pueden irse a la torre de Griffindor y en cuanto el elfo Dobby llegue le diremos que le ha llamado -dijo un elfo. Harry y los demás se extrañaron un poco por el vocabulario que tenía este elfo. Normalmente, o eso pensaba Harry, los elfos hablaban de una forma menos "culta".

-Vale, pues cuando llegue Dobby le dice por favor que queremos verle, de parte de Harry Potter y sus amigos -dijo Harry.

-No se supone que los elfos son un poco incultos con respecto al vocabulario -dijo Harry en cuanto salieron de la cocina y doblaron la esquina. Eligió las palabras muy cuidadosamente para que Hermione no le dijera nada.

-Es que vosotros nunca vais a leer la historia de Howarts -dijeron a la vez Ginny y Hermione. Ambas se echaron a reír, aunque Harry y Ron más bien se quedaron un poco asombrados, porque no sabían que Ginny también había leído ese libro.

-¿Tú también Ginny? -preguntó Ron.

-Pues claro, fue lo primero que hice cuando llegué al colegio -dijo Ginny como si fuese lo más obvio del mundo.

-Bueno, ¿nos vais a decir por qué ese elfo hablaba tan bien o nos vais a dejar con las ganas? -preguntó Harry.

Ginny y Hermione se miraron.

-Os vamos a dejar con las ganas -dijeron al unísono. De nuevo y como si de gemelas se tratara ambas empezaron a reír. A Ron y a Harry se les puso cara de pocos amigos, así que pronto dejaron de reír.

-Que es broma no os pongáis así. Bueno, como estaba diciendo, en el libro de la historia de Howarts, pone que en las cocinas hay siempre diez elfos que fueron a una escuela -comenzó a explicar Hermione

-Y que adquirieron modales exquisitos por si tuvieran -siguió Ginny

-Que atender a unos invitados muy especiales o cualquier cosa -concluyó Hermione.

-Y supongo que ese elfo era uno de esos diez -dijo Ron.

-Por la insignia que llevaba en la chaqueta ese debería de ser el jefe de todos los elfos -dijo Hermione.

-Bueno, y ahora que hacemos, la comida es dentro de una hora y media, aunque con todo lo que hemos comido, sobre todo Ron, creo que no vamos a poder comer -dijo Hermione.

-Yo quiero dormir un rato -dijo Harry.

-Sí, yo también quiero dormir un poquito -dijo Ginny.

Todos fueron a la sala común, aunque sólo Ginny y Harry se fueron a dormir, el resto se quedaron jugando a un snap explosivo.

-Gracias por no haberles dicho nada, no quiero preocuparles

-Bueno, yo te dije que no les diría nada a menos que me preguntaran directamente, y decir que tengo el suelo ligero no es mentir, Ron lo sabe, me despierto a la mínima -dijo Ginny.

-De todas formas gracias -dijo Harry mientras le daba un beso en la mejilla a Ginny.

Ambos se quedaron parados mirándose a pocos centímetros de distancia. Poco a poco se fueron acercandose hasta que sus labios se juntaron. Nunca supieron cuanto tiempo habían estado besándose, muy despacio se fueron separándose. Ninguno dijo nada por un rato, se limitaron a mirarse el uno al otro disfrutando de la felicidad del momento. Al cabo de diez minutos Harry habló:

-Me parece que ahora me va a ser imposible dormirme

-Te entiendo, a mí también se me ha quitado el sueño de un plumazo, aunque si lo miras por el lado bueno, ahora nadie nos va a molestar, y podemos hablar o hacer lo que queramos durante por lo menos una hora, bueno mejor dicho dos porque con la cara que tienes me parece que te van a dejar dormir más tiempo -ser rió.

-Bueno, no sé como decirte esto pero, me preguntaba ...

-¿Sí Harry? -preguntó Ginny

-Mepreguntabasiquequequeríasserminovia -dijo todo seguido y tartamudeando.

-¿Qué? -preguntó Ginny

-Bueno, ya me imaginaba que no ibas a querer, pero tenía que preguntartelo -dijo Harry.

-¿Te imaginabas que no quería ser el qué?, no te entendido, por favor dilo más despacio y vocaliza -dijo Ginny muy dulcemente.

-¿Quieres salir conmigo? -dijo Harry mirando al suelo como si fuese la cosa más emocionante del mundo.

Ginny se acercó y lo besó. Harry rápidamente se separó para preguntarle:

-Eso es un sí, ¿no?

-Pues claro tonto.

Volvieron a besarse. Mientras se besaban se tumbaron en la cama y siguieron besándose hasta que el sueño se apoderó de ambos y se quedaron dormidos uno abrazando al otro.

Extrañamente Harry mientras dormía no tuvo pesadillas, soñó con sus padres, aunque el sueño era bastante extraño. Al principio vio a sus padres e instintivamente fue a abrazarlos, su madre le besó en la frente de forma protectora, y su padre se limitó a abrazarlo como si no dejaría que se escapara de sus brazos. Cuando Harry abrió los ojos se encontró que todavía estaba abrazado a sus padres, aunque ahora la habitación había cambiado. En ella se encontraba una familia muy feliz, había muchos juguetes repartidos por el suelo, un niño en medio y dos adultos jugando con los juguetes y el niño. El niño reía, aunque su cara de felicidad no se podía comparar a la de los dos adultos que estaban a su lado, parecían más infantiles que el bebé, no se hacían más que burlas el uno al otro. De pronto aparecieron dos mujeres hablando muy animadamente. Ambas se sentaron a cada lado de un adulto. Inmediatamente los dos dejaron de actuar como críos, aunque ya era demasiado tarde, las mujeres les habían visto. Estuvieron un buen rato riendo. Al final la risa se extendió al resto, incluso el bebé reía y reía.

Harry veía la escena realmente conmovido. No le había costado mucho reconocerse como el bebé, y menos aún reconocer a su padre, a Sirius, a Bella y, como no, a su madre. Sintió una ira incontrolable dentro de su ser. Como una persona había podido privarles de la felicidad que tenían, como podía haber roto el amor que flotaba en el aire. Las lágrimas corrían por la cara de Harry igual de rápido que una cascada. Se volvió y vio como sus padres también lloraban al recordar la escena. Se acercó a ellos y los abrazó.

-¿Por qué? -preguntó en un susurro, -¿Por qué? -su tono de voz se elevó un poco más, -¿Por qué? -esta vez casi lo había dicho gritando. Sus padres le miraron a los ojos intentando tranquilizarlo, aunque no tuvieron ningún efécto -¿POR QUÉ? -grito. Volvió a abrazarlos con fuerza -No es justo -dijo llorando.

-HARRY, HARRY, DESPIERTA- oyó que le gritaban intentando despertarlo.

-Tienes que irte, te queremos, recuerdalo -dijo su madre.

-¿Volveré a veros? -dijo Harry.

-Sí, volverás a vernos en tus sueños, ahora ve, te quiero -dijo James.

Cuando Harry despertó notó que tenía toda la cara mojada, llena de lágrimas. Hermione, Ron y Ginny le miraban inquisitivamente, aunque ninguno se atrevía a preguntarle que pasaba. Los miró a los tres por un momento y luego dijo:

-Lo siento, os quiero, sobre todo a ti Ginny, adios -y sin decir ni una palabra más despareció, para volver a aparecer en la casa de Godric Griffindor. Se sentó en el sofá a pensar. Al final llegó a la conclusión de que lo mejor, o por lo menos lo que más le apetecía, era volver a dormir para poder hablar con sus padres. Aunque cuando despertó no fue eso lo que encontró....

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Lo sé, lo sé. Ya lo siento por tardar tanto en escribir el capítulo, pero he empezado el curso, me he cambiado de instituto y me he metido al internacional (es un bachillerato, en mi caso científico aunque también hay de letras y todo eso, bastante más difícil que el normal, aunque también se aprende más), y al principio me ha costado adaptarme. Además, eso de levantarse a las siete de la mañana no iba conmigo, el día anterior al primer día de clase que tuve me levanté a las doce y media, así que durante las dos primeras semanas lo único que hacía cuando llegaba a casa era dormir. Bueno dejo de daros el coñazo. Intentaré subir el siguiente capítulo dentro de poco.

Bueno, aquí va la pregunta que os voy a hacer de ahora en adelante al final de todos los capítulos; ¿Qué creéis que es lo que ve Harry en sueños?, o lo que es lo mismo, ¿A quien ve?

Espero vuestros reviews por favor, y a ver si alguien adivina.....