I know something about love…

Por: Ariadna.

Primera Semana: Día 7: Iori.

¡Es el colmo!

Hace una hora que Ken anunció que nos habíamos perdido... ¿cómo podía ser eso?

Ya debe haber pasado la medianoche, y Takeru y los demás han de estar preocupados buscando... ninguno de ellos sabe dónde está la cueva...

Y todos aquí no paran de discutir.

-aún no puedo entender, - exclamó Taichi. - ¿¿cómo rayos nos llegamos a perder?? ¡Se supone que conocías la cueva, Ken!

-les dije hasta que punto mi familia había llegado, - replicó Ken con voz irritada. - ustedes, o más bien, tú y Daisuke fueron los que sugirieron la idea de seguir adelante.

-hey, no me metan en su discusión, - exigió Daisuke. - yo no he dicho nada.

-pues deberías, ¿no? – interrumpió Michael. - ¡Es tú culpa!

-¿MI culpa? ¡Eres tú él que se puso a pelear con Taichi y nos distrajo en el camino!

Yo suelto un respingo. No es mi naturaleza involucrarme en peleas, pero Daisuke tiene razón, ES culpa de Michael.

-dejen todos de mirarme así. – insistió el americano, lanzando un suspiro. – ni siquiera tenía ganas de venir...

-pero viniste. – hice notar yo. – atente a las consecuencias.

-hey, ¿qué es esto? ¿"Hora de culpar al extranjero"? Vine, y tuve mis razones, ¡pero no fue mi culpa!

-si es culpa de alguien es de Ken y Taichi, ¿no? – agregó Wallace. – ellos llevan las linternas...

-¿y eso a que viene?

-¡nos estaban guiando!

Podría haber visto la cara roja de Taichi si no fuera por la oscuridad que nos rodea. Habíamos apagado las linternas hasta tener claro que hacer... y eso no se veía como una solución pronta...

-pero fuiste tú el que comenzó a sacar temas distractivos mencionando mi relación con Sora, Wallace.

-¡fuiste tú el que sacó al tema MI relación con Miyako, Taichi! – contraatacó Michael.

Un momento...

-¡¿desde cuando Miyako y tú están en una relación?! – salté.

-¡y a ti qué te importa? – fue su respuesta. - ¡tú estás con Takeru!

Me sonrojé.

Rayos... Takeru.

Claro, yo estoy con Takeru. Miyako es sólo una amiga...

Pero...

-claro, así como van todos ninguna relación aquí va a durar... – murmuró Wallace.

-¿qué quieres decir con eso, americano? – ahora saltó Taichi. - ¡Sora y yo estamos muy bien!

Se escuchó un duro respingo de parte de Ken.

Todos nos giramos a él, Taichi ya furioso.

-¿tienes algo que decir, Ken?

-nada, que como dicen los demás, si estuvieras tan feliz con Sora, no hubiesen pasado toda la semana apartados.

-no pasamos toda la semana apartados. – replicó Taichi, ahora girándose a los demás. nadie lo quiso mirar a los ojos. - ¡no es así!

-claaaaro, - soltó Michael sarcástico. - tal cual como Iori se siente tan cómodo con Takeru que salta como animal celoso cada vez que alguien menciona el nombre de Miyako...

-no te metas en cosas que no sabes. – respondí, tan furioso como Taichi.

¡Se pasó de la raya!

-hey, ¿a qué vino eso? – intervino Daisuke, con expresión preocupada. – si estás con Takeru, no puedes pensar en alguien más, ¡mucho menos una chica!

-¿y qué tanto sabes tú? – le repliqué, ya harto. - Ni siquiera has estado en una relación antes.

-porque si llego a estar en alguna sería con alguien que quiero, no para olvidar a alguien más.

Ouch.

Eso dolió...

Pero, no es que intente olvidar a Miyako con Takeru, no...

Logré captar las miradas de culpabilidad en Taichi y Ken justo al momento en que Daisuke les quitó una de las linternas y la encendió.

-ahora, si me disculpan. – dijo, con voz superior y seria. – YO voy a buscar una salida de este lugar.

Wallace le siguió el paso de inmediato, mientras los cuatro restantes nos quedamos un momento más para asimilar lo ocurrido recién.

Si llegábamos a salir de la cueva, muchas cosas podrían cambiar...

Miyako y Takeru... a Miyako la quiero mucho, siempre ha tenido un rincón especial en mi corazón, puede que esté dejando mucho de lado a Takeru por ella...

Argh, darle la razón a Daisuke es bastante desagradable. Las expresiones de los cuatro dicen lo mismo.

Michael es el primero que veo recuperar la compostura y seguir al dúo de la linterna. Ken y Taichi intercambiaron miradas, y sentí que estaba interrumpiendo algo, así que me decidí a seguir a Michael.

Él me miró con una expresión distinta a la anterior llena de mal humor y sarcasmo. Pero no me urgía tanto hablar con él por el momento, me importaba más hablar con el cargador de la linterna adelante.

Wallace disminuyó el ritmo de sus pasos para nivelarse con Michael, y yo me adelanté para alcanzar a Daisuke. Él no me miró cuando me acerqué, pero si pude sentir como se le erizaba la piel al sentirme cerca.

-perdón. – le dije.

-¿por qué? – replicó molesto.

-por... no lo sé. Pero tú tienes razón. – bajé la vista. – no deberíamos estar con alguien si pensamos en otras personas, y no deberíamos pensar en otras personas si ya estamos con alguien.

-¿y qué harás al respecto?

-lo correcto, te lo prometo.

Él asintió.

La siguiente hora nos la pasamos en silencio. Era un silencio aún incómodo, pero todos estabamos pensando en nuestros propios problemas...

Al rato después Daisuke encontró las marcas que la familia Ichijouji había dejado en el punto hasta donde habían llegado la última vez. Desde ahí los ánimos mejoraron y Ken pudo llevarnos a la salida.

Agotados y hambrientos finalmente llegamos a la cabaña a eso de las tres de la mañana. Está claro que no me embarcaré en una aventura como esa en mucho, mucho tiempo...

Al entrar al lugar Mimi y Koushirou estaban sentados en el living con expresión de ansiedad. Al vernos Mimi se lanzó sobre nosotros de inmediato, golpeándonos a cada uno en la cabeza luego de abrazarnos.

-¡¿dónde diablos se habían metido?! – nos gritó.

Al escuchar el grito los demás emergieron por distintos lados. Yamato, Sora, Miyako y Jou habían salido a buscarnos por los alrededores y Hikari y Takeru estaban en esos momentos en una de las habitaciones. Todos nos bombardearon con preguntas y abrazos y me sorprendió ver un exceso de muestras de afecto entre mis amigos que antes no suponía que estuvieran ahí...

Pero nada me importó… al ver la cara de Takeru y sentir su abrazo, sonreí.

Fin del séptimo Archivo.

Notas:

Um si, ya sé que no expliqué muy bien los sentimientos de Iori respecto a Takeru y Miyako, pero es que de eso me encargaré en los próximos caps, ya que los siguientes narradores son justamente Takeru y Miyako. Respecto a lo ocurrido en la cueva… realmente no me esperaba que fuera Daisuke finalmente la voz de la razón, sólo salió así ^^U sin embargo, me ayudó a mí a arreglar algunos de los líos amorosos, o más bien todos, porque cuando uno se arregla, uf, ¡todos se arreglan! (Lo digo para aquellos que todavía no se dan cuenta que esto no consiste en triángulos amorosos sino ¡una enorme cadena amorosa entre catorce personajes!).