Capitulo II

Mi mundo.

- Quisiera quedarme aletargada en mi cama... poner un pie en el suelo... significa iniciar con mi línea de problemas... no quiero enfrentarme a ellos... no hoy... -

"¡¡¡Arriba Granger!!! .- acompañado de un grito colectivo por parte de las chicas, Harry abrió las cortinas de la recamara de su amiga, quien solo se limito a verla con unas profundas ojeras que denotaban el insomnio de aquella noche-. Increíble... te vez fatal".

"No todo el tiempo puedo ser bella... – se incorporo pesadamente, para después derrumbarse de nueva cuenta en su comoda cama.

"No hay tiempo para descansar Hermione... – Harry tiro de ella y la cargo hacia el baño-. Hoy tienes un duelo en menos de media hora".

"¿Un duelo?.- ni siquiera se inmuto de que Harry la había metido a la tina y que lavaba sus cabellos-. ¿Con quien?"

"Ron... – Harry noto que las chicas ingresaban con cara de muy pocos amigos-. Lo retaste ayer antes de toparte con Malfoy".

"¿Malfoy?.- parecía en el limbo-. Es verdad... el... el...¡¡¡KYA!!!"

"¿Qué te pasa?.- se fue de espaldas, provocando el rostro iracundo de Hermione-. ¿Esta fría el agua?"

"¡¡Fuera!! .- grito terminante y con una rapidez increíble, Harry se vio en la entrada de la habitación.

"¿Qué rayos le pasa?.- limpio su tunica de los restos de jabon.

"¿Y Hermione?.- Dean apareció en aquel lugar-. Espero que no haya decidido retractarse del duelo."

"No lo creo... – descendieron juntos las escaleras, solo para toparse a un Ronald Weasly completamente nervioso.

"Duelo... – tomaba sorbo de su desayuno como si se tratara del ultimo-. Duelo... hoy... Hermione".

"Lo hizo retroceder a su estado post natal .- rió Seamus al ingresar al gran comedor-. No quisiera estar en sus zapatos".

"Nadie quisiera estar en su lugar.- respondió Dean-. Se enfrentara a la prefecta... y la mejor de todos las materias".

"La única persona que podría vencerla... – miraron de reojo a Harry, quien negó aquella declaración.

"No podría .- se cruzo de brazos-. Ella conoce tantos hechizos que seria imposible desarmarla".

"Bueno... pues entonces resignémonos a ver morir con honor a un valiente .- finalizo Dean con tono solemne, mientras que el aludido se volvía a verlos.

"¿Un valiente?.- se incorporo, tropezando con uno de sus pies y apoyándose en la mesa para no tener una caida por demás vergonzosa-. Querras decir un tonto".

En los campos de Hogwarts, una tenue ventisca jugaba con los cabellos de Hermione, quien esperaba con absoluta tranquilidad a su rival.

"¡¡¡Tu puedes Hermione!! .- las chicas de la casa apoyaban a su mas poderosa integrante-. ¡¡¡No dejes que ese Weasly te derrote!!!"

"¡¡¡Sal con vida Ron!! .- le gritaron algunos de los varones de la casa-. ¡¡Aun me debes una revancha de ajedrez  mágico!!"

"Llegaste tarde... – la chica abrió los ojos, topándose con el rostro nervioso de Ron-. Empecemos de una buena vez que tengo cosas que hacer".

"¿Tu segundo?.- balbuceo, provocando que se sobresaltara un poco.

"No había pensado en uno... – se quedo pensativa por unos segundos-. Pero no es tarde para elegir..."

"Yo seré su segundo... – de entre la multitud salió Draco Malfoy, colocándose al lado de la confundida Hermione.

"¡¡¿Qué haces aquí, Malfoy?!!.- Harry corrió al lado de Ron, dando a entender a los demás que seria el segundo del asustado Gryffindor.

"¡¡Inicien!! .- Lavender provoco que de su varita salieran algunas chispas, dando por iniciado aquel duelo.

"¡¡¡Expelliarmus!! .- Hermione extendió su varita y de la misma forma, Ron surco el aire para caer varios metros después.

"¡¡¡Eso es Hermione!! .- celebraron las chicas.

"¡¡¡Accio!! .- apunto hacia la varita de Ron, llegando rato después a sus manos.

"¡¡Ron!! .- Harry corrió en su auxilio, solo para encontrarlo con un enorme chichón que sobresalía de entre su pelirrojo cabello.

"Espero que con eso te grabes el no andar molestando tanto... – Hermione guardo ambas varitas en su tunica, y sin mas que decir se alejo del campo de duelo.

"Solo un hechizo... – murmuraba Ron-. Solo con uno me dejo fuera de combate".

"¿Imaginaste que te arrojaria alguna maldición?.- lo ayudo a ponerse en pie-. Hermione no es capaz de ello... y te derroto con un hechizo por demás simple".

"¿Mi varita?.- buscaba con la mirada aquel preciado objeto.

"Se la llevo Hermione .- le sacudió el polvo de la tunica-. Y tal vez te haga sufrir antes de querer regresártela".

"Eres de lo mas patético Weasly .- Draco aprovecho que los alumnos se andaban retirando para burlarse de aquella singular pareja-. Vencido por una hija de muggles... no cabe duda que tu familia mancha el honor de los que aun podemos llamarnos Sangre limpia".

"No molestes Malfoy... – Harry sujeto a su amigo, quien estuvo a punto de aventársele a golpes al rubio Slytherin.

"Últimamente me he percatado de que Granger puede ser una sangre sucia... – hablo con la mas absoluta de las calmas-. Pero vale mas que la mayoría de los magos que tengo a mi alrededor".

"Si piensas que ella se unira a Voldemort... – mascullo Ron-. ¡¡¡Olvídalo!!!"

"¿Voldemort?... – parpadeo-. Por si no te lo dijo Potter, El señor tenebroso sucumbió ante la famosa Orden del Fénix... – su tono de sorna se acentuaba a cada minuto-. Lo que nos deja en la pequeña conclusión de que la comunidad mágica se encuentra en paz".

"¿Es verdad eso?.- Ron se volvió a ver a su amigo, quien asintió levemente.

"Me lo menciono el profesor Dumbledore hace unas horas .- tenia su mirada fija en Draco, quien se limitaba a burlarse de la ignorancia del joven Weasly.

"¿Eso explica tu apoyo a Hermione?.- Ron no estaba dispuesto a que Malfoy lo siguiera humillando.

"No... – rió-. Es solo que quise ver contra quien competía .- le dirigió una rápida mirada a Harry, antes de partir de vuelta al castillo.

"¿Su rival?.- Ron quedo demasiado confundido-. ¿De que?"

"No lo se... – Harry no perdía de vista la figura de Draco.

Hermione se encontraba en su recamara... con las cortinas corridas... y con aquel sobre en sus manos, intentando repasar el por que de aquella jugarreta.

- Si tuviera que morir... seria hoy mismo... volar libre... como un pajaro... sin presiones o angustia... limpia de toda inmundicia... -

"¿ Hermione?.- Harry ingreso en la habitación-. ¿Estas despierta?"

"Si.... – corrió las cortinas-. ¿Qué se te ofrece?"

"¿Seria demasiado el pedirte la varita de Ron?.- pregunto un tanto inseguro.

"Creo que si... – lo invito a sentarse-. Necesito darle un buen castigo para que me deje de molestar".

"Ya veo... – suspiro resignado-. En fin... aprovechare tu humor para platicar... ¿Te parece?"

"Por supuesto... – guardo la carta entre sus libros-. ¿De que quieres hablar?"

"No lo se... – rió un tanto apenado-. Hace tiempo que no estamos en esta situación... es decir... Voldemort siempre nos mantenía en comunicación constante... y ahora que nos hemos librado de el... se me han agotado los temas de conversación".

"¿Quieres hablar de Quidditch?.- Hermione lo conocía menor que nadie, y sabia que ese tema era el mas fácil de tratar.

"No por el día de hoy... – se encogió de hombros-. Terminaría hablando de Viktor Krum... del baile de navidad... y muchas situaciones por demás comprometedoras".

"Como ahora... – le dirigió una sonrisa comprensiva, mientras que el chico reparaba en su error-. Anda... pregunta directamente lo que quieras"

"¿Por qué no te interesa Ron?.- aquella pregunta la tomo por sorpresa, por lo que tuvo que evitar aquellos verdes ojos

"Mira Harry... – suspiro-. Ron es un buen amigo... molesto... pero no mas... es como ver a un hermano... además... – se sonrojo levemente-. A mi me gusta otra persona".

"Lo mismo que a mi... – se sintió en confianza-. Y créeme que después de todos estos años... aun no me siento con el valor para decirle  que me gusta".

"Pues deberías... – Hermione sabia muy bien de que persona se trataba-. Por que podrían adelantársete y quitarte del camino".

"Eres una gran amiga Hermione .- Harry le dio un beso en la mejilla-. No cabe duda de que quien conquiste tu corazón, será por demás afortunado".

¿Lo crees?.- aquel beso lo sintió tan distante, que pensó en la necesidad de buscar la mas gruesa de las colchas para aminorar su enfriamiento -. Por que bien creo que me quedare como una hermosa y solitaria hechicera".

"Ya lo veras.- Harry acaricio las mejilla de la joven-. Cuando te encuentres frente al altar... te acordaras de mis palabras".

"Mejor seria que tu estuvieras a mi lado...- murmuro cuando lo vio irse, cerrando de nueva cuenta las cortinas y repasando las lineas de aquella carta.

"Tu amiga es el papel al que solo tengo derecho... – cerro los ojos-. No mas..."

Aquella angustia, y la proxima graduación, provocaban en la hechicera terribles confusiones... logrando que poco a poco, se apartara de sus dos amigos... ¿Por qué martirizarse con ilusiones imposibles?... ¿Para que mendigar algo que no parecía corresponderle?... Con que cara evitar que se dieran cuenta de sus sentimientos...

"Artimancia...- una enorme pila de libros le cubrían de las miradas curiosas-. Pociones".

"¿Necesitas ayuda?.- los libros comenzaron a tambalearse y con rostro molesto, Hermione fulmino a quien la había interrumpido.

"No, gracias... – se dio que cuenta de que se trataba de Draco Malfoy.

"Últimamente siempre te encuentras aquí... – tomo asiento-. ¿Te peleaste con tus amigos?"

"No... – continuo con su lectura, mientras que curiosos miraban hacia aquella mesa-. Solo tengo demasiado trabajo que hacer".

"¿Qué has decidido?.- Draco la interrumpió de nueva cuenta-. ¿Has tomado alguna decisión?"

"Si... – cerro el libro y lo miro directamente a los ojos-. Y decidí agradecerte por tus sentimientos... pero no me inspiras nada..."

"¿Segura?.- Draco se encontraba de lo mas tranquilo.

"A mi me gusta alguien mas .- volvió a su lectura-. Y tengo pensado decírselo lo antes posible":

"¿Potter?.- Draco hizo acopio de todo su  orgullo-. El mestizo... el popular del colegio... el que anda detrás de Cho Chang".

"Así es... – le dirigió una fría mirada.

"Vaya... – se puso en pie-. ¿Y estas segura de que el siente algo por ti?".

"No... – se irguio digna-. Pero eso es algo que me tiene sin cuidado..."

- Yo misma se que no soy mas que la amiga con la que siempre podrá contar... Hermione... la prefecta de Gryffindor... la mejor cuando es momento de dar opiniones... la que mejor le conoce... pero también, la única que no expresa abiertamente sus sentimientos por el... 

El tenerle tan cerca siempre me ha perturbado... sentir su aliento y el aroma que desprende... la única que puede limpiar el sudor que perla su frente después de algún partido... no mas... nadie puede usurpar ese lugar... ni siquiera si tuviera novia... nadie podría evitar que yo siguiera cumpliendo con lo que considero... mi deber –

"Nadie podría ocupar mi lugar .- la hermosa joven intentaba prestar atención en los entrenamientos de Quidditch-. Estoy segura de que el no lo permitiría".

"¡¡¡Mira esto Hermione!!! .- algunos chicos intentaban llamar su atención, pero aquellos ojos marrones se mantenian fijos en un solo lugar...

Harry se encontraba dando las ultimas instrucciones del día, cada gesto era grabado por la mente de Hermione, el mas mínimo detalle... no importara que fuera...

"¡¡Bien, con eso terminamos el día de hoy!! .- grito Harry, descendiendo al campo junto con los demás miembros del equipo.

"Buen trabajo Harry .- algunas chicas habían ido a verle en la practica-. Seguro que la copa de Quidditch se quedara en Gryffindor".

"Gracias por sus buenos deseos... – Harry se había rendido, pues por mas que gritara, o incluso, se escondiera, aquel grupo de chicas no iban a dejarlo en paz-. ¡¡Hermione!!"

El joven de ojos verdes corrió hacia la apartada chica, quien como siempre, le coloco la toalla en la cabeza y comenzó a limpiar el sudor de su amigo.

"Fue una gran practica .- Hermione frotaba la sien de Harry, quien solo se limitaba a observarla con agradecimiento-. No hay duda de que le has sacado provecho a todos estos años de capitan".

"Me ayudo mucho el libro que me prestaste .- se dirigieron a los vestidores-. Hermione... es una suerte contar con tu ayuda todo el tiempo".

"Es lo mínimo que puedo hacer .- se quedo en la entrada y con un gesto triste, deposito la toalla en una silla, retirándose de aquel lugar... era imposible aspirar a mas.

-Cada día es como un nuevo reto... una angustiante competencia... ¿De que?... yo se que ese grupo de chicas jamás podrá desplazarme del corazón de Harry... yo estoy segura de que si me alejo de el... no se percatara en lo mas mínimo...

Ya no quiero sufrir... no mas... el esta demasiado lejos de mi alcance... por que para el, no soy mas que Hermione Granger... la misma chica de primer curso...-

"¿Y que has decidido?.- Draco se encontraba con ella en la biblioteca, por alguna extraña razón, esas visitas se habían convertido como una especie de rito entre ambos-. Tu misma te has percatado que no existiras en su mundo de la forma en que quieres".

"Alejarme de el... – apoyo su rostro en sus manos-. Arrancarme del alma misma lo que me inspira".

"Seria lo mejor... – la pila de libros los protegia de los curiosos-. Así podrías ver que Potter no es el único que existe en el mundo... y aunque no sea yo... se que otra persona lograra que te olvides por completo de el".

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"Y así comenzó todo... – Hermione limpiaba sus lagrimas frente al gran lago, sentada en la fresca hierba... bajo el protector manto de estrellas-. Mi plan de arrancarmelo del corazón... no importara que yo misma me derrumbara".

- Cada mañana despierto mas temprano de lo normal, desayuno aprisa y cuando voy saliendo del gran comedor, me topo con Ron y Harry... evito sus mirada... y su compañía en clases... a la hora de comer lo hago lejos de ellos... y mas que nada... las practicas y partidos de Quidditch siempre los paso en la biblioteca...-

"Suave como la nube misma... – leía algunos libros de los ya tantos que adornaban su mesa-. Frágil como el cristal mismo".

"¿Recitando poesia?.- Draco se reunió con ella.

"No... – rió de manera casi imperceptible-. Leyendo ingredientes de pociones... – le mostró el libro.

"Vaya... – Hermione se sorprendió de lo distinto que era ese Draco al de antaño-. Y yo que creía que habias decidido volverte una sufrida poeta".

"Me vendría muy bien el papel .- aparto su cabello-. Soy completamente una sufrida".

"Llueve otra vez .- los truenos y el manto de lluvia que se apreciaba a través de la ventana llamaron la atención del rubio-. No ha habido un solo día en que deje de hacerlo".

"¿Quiere intentar un juego muggle?.- Hermione lo miro fijamente.

"¿Juegos muggles?.- hizo cara de asco-. ¿Yo?"

"No... – se levanto-. Le hablo seguramente al torpe de Goyle".

"Anda pues... – se levanto de mala gana-. Prefiero cumplirte ese capricho, a tener que soportar tus comentarios sarcásticos".

Los dos jóvenes descendieron a la entrada principal, Draco estaba a punto de tomar su capa, cuando Hermione  corrió hacia los jardines.

"¿Estas loca?.- le grito desde la puerta-. ¡¡¡Vas a enfermarte!!!"

"Ese es el chiste... – lo invito a ir con ella, mientras que extendia los brazos y giraba en el mismo sitio.

Muy contra su voluntad, Draco se dirigió hacia ella, notando con desagrado que su perfecto cabello perdía su forma y caía sobre sus hombros.

"¿Y que se supone que hacemos?.- Draco se cruzo de brazos.

"Ven... – lo tomo de las manos y comenzaron a dar vueltas-. ¿Jamás te habias mojado en la lluvia?"

"Lo tenia prohibido.- después de un rato, Draco sintió la sensación de libertad en su cuerpo-. Mi madre era muy estricta con respecto de mi salud."

"Yo lo hacia cada que podía... – Draco detuvo el juego al percatarse de que Hermione estaba llorando-. Antes de saber que poseía magia".

"Granger... – no sabia que pensar, pues aunque sus ojos lloraban, una sonrisa se mantenía impresa en el rostro de la chica-. Seria mejor que regresaramos al castillo".

"Solo un poco mas... – murmuro-. Esto me hace sentirme en casa... al lado de mi madre y con toda la atención de mi papá".

Entendiendo lo difícil que habían sido esos días, Draco la dejo cumplir su deseo un rato mas... conciente de que esa era la forma en que Hermione descargaba toda su ira, frustración y tristeza... y también, de que solo así, podría aguantar el encarar a sus antiguos amigos.

"¡¡¡Achuuu!!!  .- al día siguiente, Hermione se encontraba en cama, con la mas terrible de las gripes que Hogwarts hubiera conocido.

"Eso te pasa por andarte mojando.- le regaño Lavender, cambiándole el lienzo de la cabeza-. Con suerte estarás bien para la proxima visita a Hogsmeade".

"¿Crees?.- su nariz estaba por demás roja-. Seria una lastima perdérmela".

"Mejor duerme... – Parvati le acomodo las sabanas y ambas salieron del dormitorio.

"Se que esta mal... – rió para si-. Pero hace tiempo que no me divertía tanto".

Notas de la Autora:

-Que sea de su agrado -