Slayers

Este fic se ambienta después de vencer a Fabricio, y antes de la aparición de Filia, en la época que se separa el grupo menos Rina y Gaudi.

-Estamos cual como empezamos, Rina.

-Mh sí.

El viento sopló entre los árboles, moviendo el ramaje bajo el cual se cobijaban del calor del mediodía. Ella se inclinó para no verle los ojos.

-Gaudi.

-Si Rina.

-¿De veras no puedes recordar lo que vivimos… allá arriba?

Gaudi se mostró sorprendido con la pregunta. Sentía como si lo supiera, pero no lo podía recordar. Su maestro siempre que ocurría esto se enfadaba y era a menudo. Miro hacia Rina, tenía la barbilla entre las rodillas, abrazadas con un brazo, mientras que con el otro jugaba con el pasto. Sintió una oleada de ternura.

-No, Rina- Dijo suavemente. Algo le decía que para Rina había sido algo importante.

-¡Hola amigos, cómo están!- Saludé sin esperar respuesta, lancé la pregunta- ¿Les gustaría saber qué pasó?

-¡Ceros!- Dijeron a un tiempo.

-Bueno y que me dicen.

-Esteee… Yoo…

-tomaré eso como un sí.

Subí mis brazos, y luego los estiré hacia delante, se hizo luz, y en mi bastón se formo una esfera de cristal donde se comenzó a ver a Rina alejarse, y las súplicas de Gaudi. En cierto momento noté molestia en los ojos de Rina, luego rubor, y pena. Ella estaba sentada sobre sus talones, y Gaudi se fue para atrás en la escena donde se besaban. Aquí se veía incluso donde se pelearon.

-Bien, y que les pareció.

-¡Ceros! Haces esto para engañarnos!

-Aclaro que no, Rina querida.-Y desaparecí. Bueno, la verdad, sólo me hice invisible.

-Siempre hace lo mismo- Se fastidió Gaudi- Ese Ceros.

Hubo un gran silencio. Paso una hoja volando con el viento, moviéndoles la ropa, y el pelo.

-GA Gaudi…

-Dime Rina.

-Tú… ¿Tú crees que lo que Ceros nos mostró sea verdad?

-No lo sé Rina.

Con timidez los ojos de Rina y Gaudi se encontraron. Por gracia divina, Gaudi intuyó lo que pasaba con su mente y su cuerpo. Decidí guiarlo un poquito, sin que se diera cuenta.

-Pero sabes algo, Rinita, creo que ése demonio intuyó algo.

-Ah, sí, qué es.-Rina otra vez normal.

-Lo que yo deseaba que pasara, Rina.

"Bien", pensé, "Se lo dijo directo a los ojos".

Rina otra vez desarmada, sólo pudo murmurar un "yo también".

-Siempre deseé protegerte, pero a veces tú no me dejabas. Siempre quise abrazarte, pero pensaba que tú lo considerabas una debilidad, además, me golpearías porque creerías que intentaba abusar de ti ante cualquier acercamiento.

La mente de Rina, me la puedo imaginar en esos instantes. Un caos. Algo asi como Que diablos esta hablando este tipo, porque me dice esto ahora, justo ahora que estamos solos, que diablos intentara demonios, que hago que hago!!

Una fría brisa corrió, y ambos la sintieron. Sus labios se acercaron, y sin planearlo, se besaron.

-Bueno- El Gaudi natural otra vez- creo que debemos avanzar al pueblo si queremos dormir en una cama decente hoy.

-Sí, ¡Vamos!- gritó Rina. Las cosas eran otra vez como SIEMPRE. De la rabia, hice que Rina se cayera, y se torciera un pie. –AYYY!!

-Rina, ¿Te lastimaste?- (oye, pero que tiene en la cabeza este tipo, eso si es que tiene algo)

-Mi tobillo (dialogo magistral)

Gaudi quito su bota, y lo halló hinchado. Lo dio media vuelta, tal como le enseño su padre, crujió un poco, y volvió a su estado normal.

-Gracias Gaudi.

-Espera, no deberás pisar.

-Entonces iré al pueblo volando.

-No puedes, allí no quieren hechiceros. Espera, te llevaré en brazos.

Gaudi la tomó en brazos, y asi la llevo el resto del camino al pueblo. Por la cara de Rina, estaba sintiendo el calor de Gaudi. Al entrar al pueblo, susurró: Hazte la dormida.

Ella cerró los ojos.

En la posada, a Gaudi le exigieron que pagara por adelantado. Como llevaba a Rina en brazos, subió una pierna para dejar una mano libre, apoyando a Rina entre el mostrador y su cuerpo. Ella sintió aquello contra su "aquello".

-Ahh, sólo me alcanza para una habitación!!

-Es la única habitación libre que tenemos, señor, y esta es la unica posada en el pueblo.

-Mm., está bien. – Tomó a Rina normalmente,- Va a matarme, susurró.

Llegaron a la habitación, él la dejó sobre la cama.

-¿Estás bien, Rina?

Ella abrió los ojos. Si, Gaudi, suspiró.

-Me alegro. Sonrieron.

Se quitaron las capas y los artilugios mágicos. Así parecían dos chiquillos normales. Gaudi estaba de espaldas a ella preguntándose porque Rina se estaría comportando tan extraño tanto tiempo. Ni siquiera se había enfadado…

Ella fue a lavarse un poco las manos, y le dolía caminar. Cuando volvió a sentarse sobre la cama, Gaudi saco un ungüento que siempre traía y le froto con el pie.

-Oye, Rina, discúlpame, pero es que tendremos que compartir habitación.

-Si, ya me di cuenta. No había opción. Además, que tanto, siempre hemos dormido cerca.

"vaya, vaya" pensé, "Es tiempo de que les de una mano". De mí saqué dos geniecillos, uno al cuerpo deGaudi, uno al de Rina. Los demonios como yo podemos hacer ese tipo de cosas.

Bueno, hora de la nota de la autora!!

Este fic es tan largo que decidí dividirlo en capítulos por motivos de consideración al pobre lector que se tiene que mamar tanta letra, y en este no hay lemon. JAJA! Y si no cachan de que parte de a serie hablo, pues veanla! Yo no estoy para resumir la serie. Si quieren insultarme, escribirme, o lamerme el culo (prefiero lo último) escriban a mi mail, que lo va a poner mi web-master, que significa "Maestra en el webeo"