Se movio despacio para no despertarala, se levanto y miro hacia la cama de su amigo, ya no se encontraba dentro. Se dio una ducha rapida y bajo a la cocina, harry estaba alli sentado tomándose un café.

- Buenos dias –le dijo Ron mientras cogia una tostada – ¿has hecho tu el desayuno?

- No fue ginny, cuando me levante se iba ya a buscar a tu madre. Menuda resaca tenia.

- No me extraña. Cuando terminemos de desayunar podemos preparar las cosas e ir ya para tu casa.

- Si, estaria bien, asi podria mirar a ver si todo esta preparado para mañana.

- Ya puede estar todo listo o a mi madre le dara un ataque – Harry se rio ante las palabras de su amigo – no te rias hablo en serio, como a ti no te grita.

- Vamos Ron que tu madre es un encanto, lo que pasa es que se le va su niña de casa y esta emocionada.

- Cuando se casaron Billy y Charlie no se puso asi.

- No es lo mismo Ron lo deberias entender, Ginny es la unica chica a tu madre le afecta mas.

- Mi madre esta loca, mira sino lo de Hermione no me dejo en paz hasta que la fui a buscar, no me paraba de gritar que Ginny no se casaria si Hermione no estaba aquí durante un mes entero la tuve que aguantar.

-  ¿sigue dormida? – le pregunto Harry.

- Si, la dejare dormir un poco mas y cuando termine de desayunar la despertare.

- No hace falta – dijo una voz desde las escaleras – ya estoy despierta – se sento junto a Ron que le daba un café.

- ¿cómo estas? – le pregunto mientras le ofrecia una tostada.

- Me duele la cabeza mas que en toda mi vida.

- Eso para que la proxima vez no bebas – le contesto el riéndose.

- No tengo humor para chistes faciles Ron.

- Bueno pues cuando termines, nos iremos, preparada tu malfeta.

- Maleta Ron – le corrigió ella – maleta.

- Lo que sea.

- ¿Dónde vamos?

- A casa de harry, mañana es la boda y hay que mirar a ver como van los preparativos y pasaremos alli la noche – termino diciendo viendo como su amigo se levantaba de la mesa hacia las escaleras.

- Ha vuelto a dejar de hablarme. Es mejor asi.

- Sois un par de idiotas. No se como os soporto. Si os decidierais a decirlos lo que sentis, lo solucionariais todo, pero no es mas facil hacerlo todo al reves.

- Ron no estoy para sermones.

- Ni te lo pienso echar, ya sois mayorcitos los dos y tengo poca paciencia para aguantar estas tonterías.

Cuando llegaron a la casa de harry, hermione se quedo estupefacta, era una gran casa de dos pisos, tenia un jardín muy grande y una piscina, al entrar en ella se quedo con la boca abierta, todo estaba perfectamente decorado con los colores de gryffindor.

- Bienvenido señor potter – un hombre de edad avanzada, los esperaba a la puerta - ¿Cómo se encuentra?

- Bien gracias ¿Esta todo preparado?

- Si, todo listo la señora weasley paso ayer por aquí y parecio conforme con casi todo, se han cambiado unas pequeñas cosas, pero todo esta listo.

- Estupendo. Esta es la señorita hermione granger, por favor acompañara a su habitación.

- Un placer – le dijo el hombre – si me sigue le enseñare su habitación – hermione subio detrás del hombre hasta un pasillo – esta es su habitación señorita granger, la que tiene a su derecha pertence al señor weasley y la de la izquierada al señor potter, si necesita algo no dude en pedírmelo.

- Gracias – le contesto mientras el le habria la puerta, hermione miro su habitación, era muy bonita, tenia una gran cama con dorseles, un escritorio y una estantería llena de libros.

- Espero que sea de su agrado.

- Es preciosa. Me encanta.

- El señor potter y el señor weasleys la decoraron especialmente para usted. Trajeron muchos libros, pensando que a usted le gustaria. Yo me retiro si me necesita avíseme.

- Lo hare gracias – se sento sobre la cama, era muy comoda y grande, nunca habia estado en un sitio asi.

A la hora de la cena, la señora weasley, los volvia a todos locos preguntando mil veces si lo tenian todo listo, si no se les habia olivadado nada, le repetia a su hija que no se pusiera nerviosa.

- Mas bien es ella la que me pone nerviosa – le susrro a hermione – vamos a dar un paseo fuera por favor.

- De acuerdo – las dos chicas salieron, mientras Ron le repetia por enésima vez a su madre que se habia acordado de coger la tunica y el señor weasley la intentaba tranquilizar.

Caminaban cerca de la piscina, cuando oyeron pasos rapidos detrás de ellas, no les dio tiempo darse la vuelta cuando ya estaban en el agua.

- Guerra – gritaba Fred – chiscando a las chicas que le chiscaban a el y a su hermano.

- No vale – protesto ginny – no estamos en igualdad de condiciones.

- Es cierto – añadio George – debemos hacer una buena guerra – se sumergio en el agua y volvio a emerger con su hermana en sus hombros – venga ginny a por ellos – fred hizo lo mismo con hermione,  y las dos chicas intentaban tirar a la otra.

- Pero que creeis que estais haciendo – el grito hizo que los cuatros calleran.

- Mama ¿por qué gritas? – interrogo george saliendo de la piscina.

- Porque grito, si teneis a vuestra hermana que se casa mañana en la piscina de noche, sal de ahí – le grito señalando a ginny – vas a coger una pulmonía. Con vosotros no se puede, sois increíbles, cuando vais a madurar.

- Pero mama – protesto ginny – solo nos divertiamos, no va a pasar nada.

- Tu jovencita, ya te estas llendo a dormir. Si no a ver que cara tienes mañana.

- Mama – la llamo George siguiéndolas a las dos– estas sacando las cosas de quicio, no le va a pasar nada.

- Anda que no exagera – dijo fred.

- Tu madre siempre se a preocupado mucho por todo – añadio Hermione con una sonrisa.

- Mi madre llega a los extremos de todo – le contesto dándole la mano para ayudarla a salir de la piscina – es una exagerada.

- ¿Qué le habeis echo esta vez a mama? – pregunto Ron – va por toda la casa pegando gritos - ¿os habeis bañado?

- Algo asi – le contesto fred – me voy a cambiar antes de que pille una pulmonía – dijo imitando la voz de su madre.

- Tu hermnano esta como una cabra.

- A mi me lo cuentas.

- Oye le oi decir a tu padre que billy y charlie vendran mañana.

- Si, tienen mucho trabajo y no pueden venir antes – Hermione se quedo callada antes de hacer su siguiente pregunta.

- ¿Y que pasa con Percy? – Ron se quedo en silencio, luego miro a su alrededor antes de contestar.

- Mama no quiere ni hablar oir de el. Ginny fue a su casa a contárselo y le cerro la puerta en las narices, le mando un regalo y una nota que decia que lo sentia mucho pero que no podia acudir, es un idiota.

- Yo pense que las cosas volverían a la normalidad con el, cuando Voldemort cayo.

- Yo tambien – suspiro Ron – pero supongo que el no, dice que cuando nos necestio no estuvimos con el que nunca le apoyamos en sus decisiones y que ahora ya no quiere nada de nosotros, se caso con su novia Penélope y nos enteramos por el profeta.

- Lo siento Ron.

- Yo no, si es asi como lo quiere no podemos hacer nada por cambiarlo. ¿Te gusto la habitación?

- Si, me encanto. Crei que pensabais que no iba a volver.

- Y asi era, pero igualmente harry quiso que tuvieras aquí una habitación, por si cambiabas de idea.

- Si se nota que le importa mucho, hoy ha vuelto a dejarme de hablarme de nuevo.

- Se asusto mucho ayer hermione, si le contaras lo que sueñas en tus pesadillas tal vez...

- No se lo puedo contar Ron, no sabria como decírselo.

- Lo necesita saber, debes decirle que no sueñas con tus padres, que no crees que el es el responsable de sus muertes.

- Pero que tonterías estas diciendo Ron, claro que el no es el responsable de sus muertes.

- Yo lo sé, el es el que piensa que lo culpas.

- Pero no es verdad, como le voy a culpar a el, si no hubiese sido por el, voldemort todavía estaria vivo y muchas personas mas hubieran muerto.

- Porque no se lo cuentas, dire lo que sientes, lo que ves en tus sueños.

- Claro, es muy facil, me siento y le digo oye harry perdona veras, Ron cree que debo decirte que tuve que irme porque estar cerca de ti, hace  que sueñe contigo muerto una y otra vez, pero no te preocupes por...

- ¿Me vez muerto? – se dio la vuelta y se encontro con harry.

- Sabias que  estaba ahí – le dijo a Ron dándole un codazo.

- Auh y que si hubieseis hablado hace años, ahora no estariamos como idiotas vosotros sin hablaros y yo de interlocutor entre los dos. Y para colmo escuharos siempre dándome lecciones, Ron eres igual que un niño, Ron no piensas lo que haces. Claro porque los dos inteligentes entienden mucho de meter la pata – siguió refunfuñando mientras se iba, los otros dos lo miraban entrar dentro de la casa.

- ¿Crees que la locura puede ser hereditaria? – pregunto hermione.

- Espero que no, porque si no me da miedo pensar como pueden salir sus hijos y su sobrinos para que decir.

- Pues ya somos dos. Me voy a cambiar.

- ¿No crees que deberíamos hablar?

- No lo sé, creo que ayer por la noche ya dijimos bastantes cosas, si no recuerdo mal, tu fuiestes quien dijo que no le importaba nada de lo que dijera e hiciera.

- Estaba enfadado hermione entiéndeme.

- Y lo hago harry, pero me hicistes daño, entiéndeme tu a mi.

- Supongo que ninguno hizo lo que debia. Pero tal vez podamos intentarlo de nuevo, desde el principio.

- Tal vez, pero no esta noche. Yo necesito pensar y tu tambien – le termino diciendo mientras se iba, el se quedo alli parado mirando como entraba en la casa.