Descubrimientos tras un suceso

Por alguna extraña razón a Kagome no le importaba el hecho de estar en
esa situación, mas le preocupaban otras cosas, sobre todo tener que
regresar al Sengoku, era su deber regresar, pero.... ¿Cómo haría para
ocultarlo?... el pequeño Shippo, Sango, Miroku... Inuyasha... esos
pensamientos le habían dolido, causándole una mirada mas afligida,
saliendo del trance en que se mantuvo mientras el medico hablaba, solo
para darse cuanta que su madre salía con ella de la consulta.

No dijo nada de vuelta, solo pensaba, silenciosamente, al día siguiente
iría nuevamente al medico, esta vez sola, debía haber algo que la
ayudase, aunque fuese solo momentáneamente... no importaban efectos
secundarios, con tal de poder ocultar los mas notorios, y así poder
permanecer el tiempo que le quedase junto a sus amigos, ayudándoles de la
manera que pudiese, pero sin que estos se enterasen de nada, eso lo tenía
claro... ninguno de sus amigos del Sengoku debía saber la verdad.

Capitulo cuatro: Buscando; Ocultando

Aquella noche Kagome no podía conciliar el sueño, su cuerpo estaba
cansado, exhausta, y con una estaña sensación de vértigo la inundaba...
los síntomas se presentaron en una tos incesable, sintió deseos de
vomitar, pero solo logrando botar sangre a través de sus labios. Regreso
a su cuarto (pues fue al baño al sentir deseos de vomitar, tambaleándose,
pero llego), al llegar a este agradeció no haber estado en la época
antigua, se acostó ya mas calma, pero aun así no concilió el sueño,
estaba nerviosa, asustada, lo había decidido, no regresaría a la época
antigua a no ser que hubiese algún método que le ayudase a ocultar esa
horrible realidad que se le venía encima.

El medico le hablo de lo único que podría calmarle el dolor, luego de las
suplicas de la joven, el medicamento le calmaría, pero no lo suprimiría
los síntomas o la enfermedad, es decir, desaparecería los síntomas casi
siempre(momentáneamente), pero al mismo tiempo al estar solo
aguantándolos habría momentos en que se vendrían con mayor magnitud... y
sobre todo, le crearían una dependencia, que haría que la joven
obligadamente tuviera que consumirlos, para así evitarlos, pues los haría
poco a poco mas frecuentes (es decir, lo evitaría, pero contribuiría en
cierto modo a su muerte, pues ocultaría síntomas y los haría mas fuertes,
no se si se entiende la idea).

1. estas segura?.- pregunto el joven medico. Sin aun entregarle los
medicamentos esperando que su conversación acerca de estos la hiciese
dudar.

-Me evitará casi siempre los síntomas?- dijo la joven, el medico asintió
algo resignado, se veía la determinación en el rostro de la chica. Le
entrego los medicamentos dándole las últimas indicaciones.

-Recuerda Kagome, siempre que sientas que viene uno de los síntomas debes
tomarlas, por ahora solo serán una por semana a lo más... pero mas
adelante, serán mas y mas... y cuando llegues a cierto número....

Kagome regreso esa misma tarde al Sengoku, sin avisar a nadie, pues sabía
que no se lo permitirían en su estado actual... pero ahora el "tiempo" no
sobraba... pero daría todo por en ese "tiempo" hacer todo lo que
estuviese su alcance.

Al llegar se encontró con Shippo, este salto de alegría al verle, la
abrazo con gran felicidad y la tomo de las manos, para llevarla junto al
resto del grupo.

Inuyasha le sintió llegar, su corazón pareció detenerse, frió, una
sensación fría en la espalda... no deseaba verle aun... sabía que desde
ese momento las cosas tendrían que cambiar y el le causaría un enorme
daño a Kagome con esos cambios.

-Que te ocurrió, por que te ausentaste tanto tiempo?:- pregunto Sango,
abrazando efusivamente a su amiga. Kagome le correspondió, pero sintiendo
algo de tristeza.

-Señorita Kagome... esta usted bien?:- pregunto Miroku, al notar la
angustia de las facciones de Kagome, y también la palidez que esta tenía
(producto de que esta enferma).

1. O si Miroku!!:- Dijo esta esbozando una falsa sonrisa- no es nada. - Vio
lentamente a su alrededor- Y... y Inuyasha? - pregunto extrañada esta de
no ver al hanyou... aun cuando las cosas estaban no muy bien, el jamás no
le había recibido.

1. Aquí estoy- respondió este tras de ella. Esta sonrió, pero en su
interior deseaba llorar, lo miro a los ojos, algo apesadumbrada al ver la
mirada que este le brindaba ciertamente distinta.

Todos salieron menos Kagome, quien se detuvo para ver a la anciana Kaede,
ella le observaba desde que volvió sin decirle palabra, pero con una
mirada triste.

Kagome le sonrió, Kaede camino hacía ella, le miro fijamente y le abrazo,
sorprendiendo a Kagome.

1. Cuenta conmigo...- le dijo esta abrazándole de manera maternal, sin
saber ni entender lo que ocurría, pero descubriendo que no era nada
bueno.

1. Lo haré... gracias:- murmuro la joven Miko, con los ojos algo llorosos,
saliendo luego tras de sus amigos.

La noche llegó, y Kagome estaba algo asustada, tenía miedo de sentirse
mal frente a ellos, ya cuando todos parecían dormidos sintió la fatiga
que llegaba antes de un nuevo "ataque", de los que sufría, solo Shippo le
veía cuando esta se precipito a su bolso, sacando un tarrito donde tenía
sus medicamentos, para echarse uno a la boca, aquel frasquito ahora era
como un tesoro para ella.

-Que tomas Kagome?:- dijo Shippo algo curioso e intranquilo, pues vio
palidecer a Kagome.

-Nada... solo... algo para el resfriado:- mintió sonriendo de manera
tierna. El pequeño Shippo se mostró mas aliviado y no tardo en dormirse
junto a la joven Miko, y esta hizo lo mismo... Pero también Inuyasha
había visto esto sin darle importancia, sumido en sus pensamientos de
cómo... destruir el sentimiento de Kagome por el ( aun cuando
inconscientemente, el no quisiera)

Aun cuando había pensado no poner estos capítulos, les puse, espero sean de su agrado, pero no quise omitirles.

Por ahora me despido besos y cuídense, Se despide Dark_Night

(para mi cap estos eran de relleno..el V tb :P).

Besos dark

REVIEW PORFISSSSSSSS