CAPÍTULO 2

-Claro Sirius- dijo Hermione- Nos las apañaremos perfectamente, yo sé cocinar y Harry sabe... -Se pensó la respuesta y preguntó riendo-¿Comer?

-Si te dice que va a calentar agua, no le hagas caso... -dijo Sirius-la última vez casi quema la casa.

-Bueno... eso no es cierto-dijo Harry- y lo sabéis los dos.

El gesto y la voz con que dijo esto, provocaron las carcajadas de Hermione y Sirius, ya que parecía un niño pequeño más que otra cosa, Harry, se unió al coro de carcajadas al oír la contagiosa risa de Hermione. Cuando Sirius se fue, ya no había risas, solo nervios y un silencio incomodo.

-¿Te apetece ir al cine?-preguntó Harry para romper la incomodidad-Dan una película de Julia Roberts. Es tu actriz favorita ¿No? Me lo dijiste el año pasado.

[¿Qué me pasa? Es Hermione, ¿Por qué no puedo hablar con normalidad?]

-Si que lo es-dijo Hermione- además me apetecía ver esa película.

[Hermione, reacciona, habla con normalidad, ¿Donde está todo tu autocontrol?]

Los dos se lo pasaron muy bien en el cine, poco a poco se les fue pasando la vergüenza y recuperaron la relación de antaño. Después del cine fueron a dar un paseo, estaban tan entretenidos que cuando se dieron cuenta ya era de noche por lo que decidieron volver a casa de Harry.

-¿Sabes?-dijo Hermione cuando entraron en la casa-Creí que no te acordarías de cual es mi actriz favorita, Ron nunca se acuerda de...

-Ron no sabe valorar los tesoros que la vida nos ofrece-la interrumpió Harry con resentimiento en la voz.

-Harry... -dijo Hermione en un tono de voz apenas audible.

-Vamos a cenar ¿Vale?-dijo Harry para cambiar de tema.

-De acuerdo-dijo Hermione-aunque ya sé que cocinas bien, tú serás mi pinche, puesto que yo lo hago mejor. Cocinaron los dos juntos entre risas y alegría, ya que Harry no paraba de hacer tonterías como ponerse el laurel en las orejas y decir que era Julio cesar o simular su propia muerte por estrangulamiento con un spaghetti. En opinión de Harry, la sonrisa de Hermione era la más blanca, perfecta, preciosa y sincera que había en la faz de la tierra.

-Harry... -dijo Hermione cuando se iban a la cama-¿Por qué no dormimos fuera viendo las estrellas? Con mantas, sacos o lo que sea.

-Muy buena idea Hermione-dijo Harry, mientras subía por las escaleras añadió-Espera mientras cojo dos sacos.

Cuando bajó, los dos salieron al jardín de atrás.

Cuando Harry iba a meterse en su saco Hermione lo detuvo y dijo:

-Espera un segundo, déjame tu saco.

Harry extrañado e interesado le paso su saco, Hermione juntó las cremalleras de los dos sacos para formar uno el doble de grande.

-Ya está-dijo la chica-De esta forma, los dos tendremos más espacio.

Los dos amigos se metieron en el "súper-saco", Harry estaba un poco cohibido, se notaba que Hermione había madurado en el tiempo que no se habían visto.

-Esto me recuerda al 3º curso en Hogwarts-dijo Hermione-¿Recuerdas? Cuando Sirius entró en el colegio y...

-Nos pusieron a dormir en sacos en el Gran Comedor-dijeron los dos a la vez.

-Si que lo recuerdo si... -dijo Harry-fue la única noche que dormimos juntos en Hogwarts, me gustó dormir de aquella forma. Pones una cara muy bonita cuando duermes, pareces un ángel...

-Gracias... -dijo Hermione un poco colorada-Tú también estas muy mono.

-¿Mono solo?-pregunto Harry riendo.

-Hermione... -dijo Harry cuando se dejaron de reír- hay algo que te quería preguntar y no sé si es el mejor momento, pero lleva carcomiéndome por dentro desde que nos separamos.

-Pregunta-dijo Hermione con una sonrisa-Si no es el mejor momento ya encontraremos otro.

-¿Qué... qué fue lo que... te hizo... Voldemort?-preguntó Harry-¿Por qué te llevó a ti?

-Harry... -dijo Hermione-Tenías razón, no es el mejor momento, más adelante ¿Vale? Aún no estoy lista para hablar de ello...

-Como quieras... -dijo Harry-Pero respóndeme a una sola pregunta.

-¿Cuál?-preguntó Hermione levantando una ceja.

-¿Lamentas haberme conocido?-preguntó el chico temeroso por al respuesta.

-¡No!-dijo Hermione con cara de espanto-¿Por qué preguntas eso?

-Pues... porque has estado en peligro muchas veces-dijo apesumbrado el chico- y porque has tenido que salvarnos a mí y a Ron también varias veces.

-¿En peligro?-dijo Hermione con tono de burla-¿Te refieres a cuando en 1º casi me mata un trol, casi nos devora un perro de tres cabezas, casi nos estrangula un lazo del diablo, casi nos aplasta un ajedrez, y casi morimos envenenados por pociones? ¿O a 2º cuando me convertí en la increíble mujer gato y me petrificó un basilisco? ¿O 3º cuando nos peleamos con Sirius, casi nos matamos en un hipogrifo y nos rodearon un montón de dementores? ¿O... ?

-Ya lo entendí... -dijo Harry agachando la cabeza-Es un peligro ser conocida mía... Has podido morir alguna de esas veces...

-Pero no lo hice-dijo Hermione mirándolo-No morí porque tú me salvaste siempre, nunca dejaste de luchar para salvarme, ni siquiera cuando Voldemort me llevó, tú me seguiste.

-Te seguiría hasta el fin del mundo-dijo Harry-Eres lo más importante en mi vida... Hermione abrió mucho los ojos y Harry se dio cuenta de lo que acababa de decir.

-¡Junto con Ron!-añadió para disimular-Tú y Ron sois lo más importante para mí.

[Hermione eres tonta]pensaba la chica con desilusión[Él solo te ve como a la chapona de los dientes grandes...]

Los dos amigos siguieron hablando de temas diversos entre los que se encontraban cuando Draco Malfoy salvó a Ginny Weasley de unos mortífagos. Cuando Hermione no pudo más y se quedó dormida, Harry seguía despierto, ella en sueños rodó hasta acabar con la cabeza en el pecho de Harry, él por su parte la estrechó contra sí, ya pensaría lo que le diría a Hermione por la mañana por la situación, eso no importaba, solo importaba que su Hermione estuviese bien.

[¿Mi Hermione?] pensaba Harry [¿Mi Hermione]

Aspiró el aroma a frutas de su pelo, desprendía limpieza, pureza e... ¿inteligencia? Harry no lo sabía, solo tenía algo claro.

-Definitivamente te quiero, Hermione Granger-le dijo a la chica al oído.

Hermione aunque estuviera dormida sintió como esas palabras entraban por su oído y llegaban hasta su cerebro formando en su rostro una sonrisa.

A la mañana siguiente, los primeros rayos del alba se posaron en el precioso rostro de Hermione haciendo que la chica se despertase. Sintió que estaba abrazada a algo, pero no se molestó en mirar que era.

[Que bien he dormido...]pensaba la chica [No he tenido ninguna pesadilla y me he pasado la noche soñando con...]

-HARRY- gritó despertándolo -lo... lo siento... que situación más embarazosa...

-No té preocupes-dijo Harry con una sonrisa- Ya me di cuenta de noche cuando me desperté yo, pero dormías tan placidamente que me dio pena despertarte, como me dijiste que siempre tenías pesadillas y estabas tan tranquila, pues...

-Gracias... -dijo Hermione.

Esa mañana Hermione tenía que regresar a su casa y Harry la acompañó.

-¿Nos veremos en el callejón Diagón?-dijo Harry mientras se despedía- Podemos ir un día antes y quedarnos a dormir en el caldero chorreante.

-Claro-dijo la chica con una sonrisa y justo antes de que Harry echase los polvos flu le dijo-Dos cosas más... la primera es que te despidas de Sirius de mi parte y la segunda es... -Hermione se acercó a Harry y le dio un beso en la mejilla- Gracias...

-Harry Potter a su servicio-dijo él con una enorme sonrisa en el rostro al tiempo que las llamas lo engullían. Hermione se quedó un buen rato mirando la chimenea vacía hasta que finalmente dijo :

-Cada día que pasa te quiero más Harry Potter.

El tiempo que faltaba para ir al Callejón Diagón fue una desesperación para Harry y Hermione, se enviaban lechuzas continuamente, pero querían verse, necesitaban verse. Ese día no parecía llegar nunca, pero el día que finalmente llegó...

-¡Harry!-dijo Hermione corriendo y abrazando a al chico-Te eché de menos...

-¿Por qué a mi no me abrazaste cuando me viste?-preguntó Ron con el entrecejo fruncido.

-Por que a ti te vi ayer...-dijo Hermione con impaciencia- ¿Qué te pasa? Estas muy raro...

-No me pasa nada-dijo Ron rápidamente.

-Hola Harry-dijo Ginny apareciendo por detrás- ¿Qué tal estas?

-Muy bien -dijo Harry- Aunque no tan bien como tú, estás muy guapa.

Esas palabras produjeron que Hermione entornara levemente los ojos y que una pequeña arruguita se formase entre sus cejas.

-La verdad es que Potter tiene razón -dijo una voz fría- Weasley, este año estás muy bien- Ese comentario provocó una reacción en cadena: Ginny enrojeció, Malfoy sonrío, Ron encolerizó, Harry agarró a Ron y Hermione intentó poner paz.

-Vaya, vaya... -dijo Draco acercándose a Hermione- Creo que no tengo el placer de conocer a tan bella señorita.

Cuando pasaba por al lado de Ginny le metió en el bolsillo una carta, la cual la pelirroja cogió con sorpresa.

-Mmmmm, se me ha olvidado una cosa-dijo Ginny- Ahora vuelvo...

Dejó a sus amigos y a un sorprendido Draco y echó a correr hacía su habitación en el caldero chorreante. Cuando subió se dispuso a abrir la carta, pero un temor inundó su mente haciendo que se parase en seco:

[¿Y si es una maldición o algo así...? ¡Despierta Ginny! Seguro que simplemente es alguna burla]

Tras 5 minutos de debate interno decidió abrir el sobre, dentro de él había una carta que decía así:

Ginny:

Me gustaría hablar contigo sobre un tema que nunca me atreví

a comentarte en Hogwarts. Por favor, tras ½ hora de viaje

reúnete conmigo en el último vagón del tren.

Te espera

Draco Malfoy

Ginny releyó la carta 5 veces más, se preguntó de que querría hablarle Draco y decidió que el tema le daba igual, ya que de los labios de Draco incluso la reproducción de las coles era el tema más interesante del mundo. Draco por su parte se había quedado muy impresionado por el cambio de Hermione, pero como Ginny, como su pequeña Ginny Weasley no había nadie. Cuando volvió a junto de sus amigos, para no variar Ron y Hermione estaban discutiendo y Harry los miraba con cara de resignación.

-¿Por qué discuten ahora?-pregunto Ginny

-Por el tiempo, el color de las baldosas, el día que es hoy... yo creo que ni ellos mismos saben porque discuten la mitad de las veces, yo creo que lo hacen porque les gusta -dijo Harry encogiéndose de hombros.

-Estos no van a cambiar nunca -dijo Ginny.

Pasaron el día los cuatro juntos, a la mañana siguiente se dirigieron también juntos a la estación para coger el tren que los llevaría a Hogwarts. La primera ½ hora de viaje resultó muy incomoda, Ron miraba a Hermione como embobado, lo cual provocaba el malestar de la chica y la molestia de Harry. Mientras tanto Ginny Weasley miraba desesperada el reloj cada 10 segundos exactos. A la hora acordad fue a ver a Malfoy, echó una mirada al último compartimento y lo vio, tomó aire, entró y cerró la puerta detrás de ella haciendo que Draco se girase.

- Has venido...-dijo el chico con alegría en la voz - temía que no lo hicieras.

-Si lo que quieres es decirme algun nuevo insulto que no se te haya ocurrido durante nuestra estancia en hogwarts-dijo Ginny- pues puedes...

-No -interrumpió Draco- No es eso, es que me gustaría decirte una cosa que es importante. Al menos para mí, lo és.

-¿Y que es eso tan importante ?-preguntó Ginny con aparentada frialdad en su voz.

-Mi padre quiere convertirme en mortífago-dijo Draco-y yo... no quiero...

Ginny notó como le daba un vuelco el corazón, pero siguió aparentando frialdad.

-¿Y que tengo que ver yo en todo esto ?-preguntó Ginny- ¿Por qué me lo cuentas ?

-Tú eres la razón de que no quiera ser mortífago- dijo Draco totalmente serio- Al principio he de reconocer que mi padre inculcó en mi el odio hacía tu familia, Potter y Granger... pero... lentamente ese odio fue desapareciendo, descubrí que sois buenas personas y muy amables, dignas de admiración y por eso, ahora hay algo que quiero de tí...

-¿Qué es lo que quieres de mí ?-preguntó Ginny-¿mi amistad ?

-No... lo que quiero es tu amor...-dijo Draco a una sorprendida Ginny- Virginia Weasley, yo... te quiero con todo mi ser.

A Ginny se le encogió el estómago y el corazón pareció brincarle en el pecho cuando preguntaba :

-Pero... ¿Desde cuando ? ¿Porqué ? ¿Cómo ?

-No lo sé... fue poco a poco -dijo Draco- esa fue la razón por la que te salvé, sin darme cuenta, me fui enamorando de tí, sin poder evitarlo... Te quiero... y con tu amistad me daré por satisfecho, no merezco más después de como te he tratado todos estos años. Prefiero tenerte mil veces como amiga a no tenerte en mi vida.

Ginny miró a Draco a los ojos y vió en sus ojos algo que no había visto antes... Amor. En ese momento pasaron por un tunel y Ginny dijo :

-Tú te das por satisfecho, pero yo no.

Y ante la sorpresa de Draco, se acercó a tientas a él, le puso la mano detrás de la nuca, le bajó la cabeza y en medio de la oscuridad lo besó. Cuando se recuperó de la sorpresa, los labios de Draco besaron los de Ginny. Ella se atrevió un poco más y con recorrió los labios de Draco con su lengua. Los labios de Draco se separaron un poco para sentir a Ginny al máximo, de los labios de los dos parecían salir todas aquellos sentimientos de amor que no se habían dicho nunca. Una vez se hubieron separado, los ojos azules (en la película, ya que en el libro son castaños) de Ginny, miraron a los grises de Draco.

-Te quiero -dijeron los dos aún abrazados.

-Tengo que volver- dijo Ginny con pena en la voz- seguro que Ron se está preguntando que donde estoy... se supone que estoy en el servicio.

-No...-dijo Draco dándole pequeños besos por la cara - Diles que había mucha cola o algo así... por favor, quédate un poco más.

-Lo siento -dijo Ginny sacando las fuerzas de algún lugar desconocido- ya encontraremos tiempo en Hogwarts.

Ginny con gran pena volvío a junto de su hermano y sus amigos, los cuales no estaban en una posición lo que se dice demasiado cómoda, nadie se dio cuenta de lo que había pasado, nadie se dio cuenta de que Ginny Weasley traía una sonrisa permanente en su rostro, nadie se dio cuenta de que la antaño "pequeña" Ginny, ya no era tal, si no una chica enamorada dispuesta a darlo todo por Draco Malfoy.

Cuando bajaron del tren, Colín y Luna Lovegood vinieron a buscar a Ginny, la cual se fue con ellos, al tiempo que Hermione se dirigía a un carruaje acompañada de Ron y Harry.

En el Gran Comedor, Hermione estaba sentada en medio de Harry y Ron, la cual levantaba pasiones entre el alumnado femenino. Eran constantes los comentarios del tipo :

-¡Mira Hermione Granger !¡Menudo cambio !

-¡Eh ! ¿Y ese bombón ?¿No es Granger ?

Esos comentarios molestaban en gran medida a Hermione, pero también a Harry, el cual se mostraba receloso de que algún chico se acercara a hablar con Hermione. Dumbledore dio su típico discurso de bienvenida para los nuevos estudiantes y anunció que en navidad habría un baile.

Draco le hizo un gesto a Ginny que venía a significar "nosotros vamos juntos" mientras que Hermione se convirtió en el objetivo de medio de colegio, varios chicos ya se habían levantado para ir a pedirselo, pero ella se les adelantó.

-Harry... -dijo mirando al chico directamente a los ojos- ¿Quieres venir conmigo al baile?

Todos los chicos que lo oyeron incluido un muy sorprendido a Ron, miraban esperanzados de que Harry dijese que no, pero sus esperanzas se vieron truncadas.

-Cla... claro que quiero ir -dijo Harry - pero... ¿Por qué yo ?

-Pues porque eres uno de mis mejores amigos y no quiero ir con alguien a quien le interese solo mi físico -dijo Hermione con una sonrisa.

-¿Y yo no? -preguntó Ron-¿Yo no hago eso ? ¿Yo no me preocupo por tí ?

-No como él-dijo Hermione- tu fuiste más superficial, solo te importó como me había hecho el cambio de imagen.

El resto de la cena, Ron no les dirigió la palabra a ninguno de los dos. Cuando Hermione fue a pedirle la contraseña a la profesora McGonagall, volvió con una cara que a Harry no le gustó nada.

-¿Qué te ocurre ?-preguntó Harry al tiempo que una chispa de preocupación se reflejaba en sus ojos color verde esmeralda.

-Me ha dicho la profesora McGonagall que este curso, los prefectos tienen cuartos individuales al pie de la escalera de las habitaciones para controlar que ninguna chica vaya al cuarto de los chicos-dijo Hermione con angustia en la voz.

-¡Que bien ! ¿No ?-dijo Ron.

-No Ron, eso no es bueno... -dijo Harry.

Ron se quedó con cara de no entender nada.

-¿Qué piensas hacer ?-le preguntó Harry a Hermione ignorando a Ron.

-Pues aguantarme-dijo Hermione- ¿donde se ha visto una prefecta que tenga ese problema ?

-¿Qué problema ?-preguntó Ron el cual no se enteraba de nada- ¿me lo explicais ?

-Ya te lo conté el día antes de ir al Callejón Diagón-dijo Hermione visiblemente irritada-Si no me haces caso cuando hablo es tu problema.

La cara de Ron reflejaba la más clara estupefacción. Hermione aprovechó ese momento para conducir a los de primero a la torre Gryffindor. Una vez le hubo explicado a los recién llegados todo, se sentó en uno de los sofás delante del fuego. Ron subió directamente a los dormitorios mientras que harry se sentó a su lado y le preguntó :

-¿Te apetece jugar una partida al ajedrez mágico ?

-No Harry gracias-dijo Hermione- pero no rechazaría ir a dar un paseo por el lago.

-Pero Hermione -dijo Harry- eso nos está prohibido, es de noche.

-¿Desde cuando eso ha sido un impedimento para nosotros ?-dijo la chica con una extraña sonrisa en el rostro- además, hay algo que deseo decirte.

CONTINUARÁ...

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Lo primero es que lamento mucho el retraso, estuve castigada tres semanas sin ordenador, porque me puse toda borde cuando me dijeron que tenía que ir a clase particular durante el mes de Agosto(pleno verano), habiendo aprobado, eso es de gente sin sentido. Y luego que cuando ya tenia 5 capis de cada historia, me formatearon el ordenador mandándolo todo a la piiiiiiii.... ¡lo siento mucho !

Espero que os esté gustando este fic y que también leáis mis otros fics:

Los sentimientos de Hermione (Terminado), Draco Hermione y los celos de

Crookshanks, Hermione y Ginny, sentimientos vedados, y mi pequeña

gryffindor (pequeña y pastelosa paranoia que me entró una tarde de

mayo).

Por favor firmadme el librito de visitas o dejad reviews (como lo

llaméis). Agregadme al messenguer, me llamareis pesada, pero hacedlo,

me encanta conocer gente nueva. Besos a tos.

Amidala_^ ;

Por cierto, ¿alguien se ha fijado en el libro, Ginny tiene los ojos marrones y en la película los tiene azul mar ?Jeje, no sé que color de ojos escoger para ella, me quedo con el claro JIJIJI

Jeje, también quería disculparme porque me han dicho que allí en los países latinos, el verbo coger , que para mí significa agarrar algo o tener entre las manos, para otra quiere decir el acto sexual... lo siento, pero no puedo evitar usar esa palabra está en mi vocabulario, por favor no seáis mal pensados, disculpas a todos.