Capítulo 8: Desde el momento en que desperté
"¿Q-Qué?" Kurama dijo en pregunta, mirándome preocupado.
"... Youko..." Repetí para mi sorpresa.
Detuvimos toda acción y tan sólo me quedé allí en sus brazos, ambos mirándonos intentando entender lo que exactamente quise decir.
"Hiei... ¿preferirías estar haciendo esto con mi otro lado?" Preguntó Kurama, apartando la vista.
"No... te quiero* a ti." Le dije dulcemente poniendo mi mano en su mejilla.
"... Recuerda, si vamos a hacer algo... tiene que ser querido por ambos lados. Tú y yo... por favor Hiei, tienes que estar seguro." Me dijo apartándome con cuidado de encima de él, levantándose y empezando a vestirse.
Me quedé allí, estirado de lado, medio tapado por su sábana, tan sólo mirándole. Tal vez era lo mejor... ¡¡pero dolía tanto que no pudiese ser!!"
¡¿Qué es lo que quería de mí?!
"Kurama, ¿qué es exactamente lo que quieres que haga? ¡¡¿Cómo puedo demostrarte que sí que te quiero?!!" Grité, sentándome.
Se detuvo a medio camino, ya vestido. Una mirada extraña apareció en su cara y se giró ligeramente para mirarme, una tierna sonrisa en sus labios.
"Eso es todo, Hiei..." Dijo suavemente, dando unos pasos hacia delante y sentándose a mi lado.
"¿El qué, es todo?" Suspiré con tristeza, dirigiéndole una mirada confusa y triste.
"Hiei... no quiero favores de ti o sexo... quiero tu amor... y quiero que estés ahí para mí para quererte. No es demasiado, quiero que me quieras, Hiei... quiero que estés ahí... para mí para *quererte*." Kurama dijo, una lágrima cayó de su ojo.
"No empieces a llorar otra vez, Kurama. ¿qué te hace pensar que alguna vez te dejaré?" Le pregunté poniendo mi brazo alrededor de su hombro.
"Hiei... tú me dejarás... o mejor dicho, lo haré yo... cuando me convierta en Youko yo ya no existiré más... y por eso no puedo amarte." Me dijo acercando su cabeza a mi pecho. Sentí sus cálidas lágrimas caer por mi pecho y luego rápidamente se alejó. "Y... ¡¡cada vez que veo esa cicatriz me lo recuerda!!"
"Kurama... está bien. No importa como existas. No había pensado en eso antes... pero ahora sé que es verdad." Empecé cogiendo a Kurama y estirándolo en mi regazo, donde empecé a acariciar su cara. "Tú eres tú, tu propia persona. Youko y tú sólo compartís la mayor parte de la misma alma... tú eres diferente ahora. Pequeñas cosas... pero esas pequeñas cosas son las que te hacen quien eres. Y yo te quiero como eres."
Tal vez Youko se había equivocado sobre que eran el mismo... pero sabía una cosa: las amaba a ambas...
"Hiei... ¿pero qué pasa con mi otro yo?" Kurama preguntó mirándome con lágrimas en los ojos.
"No te mentiré... le quiero. Pero tienes que saber que también te quiero a ti, Kurama... cuando no estás aquí estás dentro de él... y cuando él no está, está dentro de ti. No te preocupes Kurama... incluso cuando él está conmigo... tú siempre estás ahí, tú siempre existirás." Le aseguré a Kurama, inclinándome hacia él y acariciando su cuello suavemente con mi nariz.
"Hiei... sé por qué le gustas tanto... y sería egoísta de mi parte manteneros separados lo sé..." Suspiró, alargando su mano hacia arriba y alrededor de mi nuca.
Cambié de posición, empecé a lentamente lamer su cuello y él se puso cómodo en mi regazo, jugando dulcemente con los cabellos de mi nuca.
Me detuve, puse mis brazos a su alrededor y tiré de él conmigo hacia la pared. Lentamente lo incorporé y lo bajé para que estuviese estirado a mi lado.
Su espalda contra mi pecho, mi pierna envolviendo la suya, mi cabeza apoyada ligeramente en su hombro... y así es como pasamos la noche.
^*^*^
Me desperté para encontrar que estaba solo contra la pared, desnudo debajo de la sábana.
"¿Kurama?" Le llamé suavemente.
"Oh bien Hiei, estás despierto... en realidad deberíamos empezar ese caso. Se suponía que debíamos empezarlo ayer." Dijo Kurama de espaldas.
Estoy seguro que escuché un rápido 'sniff', así que le regañé rápidamente, "¿Ahora por qué lloras?"
"No estoy llorando, Hiei... es sólo mi madre... he estado fuera toda la noche."
Resistí las ganas de reírme, así que en vez de eso le dije algo que una persona amable y cariñosa diría, no yo.
"¿Por qué no la llamas antes de que envíe a la policía?" Le dije con una media sonrisa, mientras me levantaba y empezaba a vestirme.
Retrasó la respuesta y me miró un segundo. Mi pequeño zorro pervertido...
"Buena idea, Hiei." Me dijo saliendo de la habitación para llamar a su madre, observándome todo el rato.
Acabé de vestirme, decidiendo dejar mi camisa un poco desabrochada para él.
Me senté en esa manta y esperé a que mi zorro volviera a mí.
Zorro... uh huh.
"¡¿YOUKO?!" Grité, dando un ligero brinco hacia atrás, mientras caminaba hacia mí y se sentaba.
"Hiei... es la mañana... pasaste la noche con él, me imagino. ¿Así qué, cómo estuvo?" Preguntó Youko levantando una ceja y poniendo su mano en mi muslo.
"¿Qué, ni un 'hola'?" Le gruñí fríamente.
"Perdón, sólo curioso."
Kurama debía haberse transformado después de llamar a su madre.
"Realmente eso ES sólo en lo que piensas, ¿no?" Dije, sacudiendo la cabeza.
"Cuando estás cerca y sé que tienes ganas..." Respondió con una diabólica sonrisa, moviendo su mano más arriba y la otra en mi hombro.
"¡Dios, nunca podría vivir contigo!" Le grité con una risa.
"¿Qué, demasiado sexy?" Preguntó sarcásticamente, besando mi pecho donde mi camisa estaba desabrochada.
"¡No, demasiado pervertido... los dos! Pero supongo que lo soportaría... ¡¡AH SÍ!!" Recordé levantándome deprisa, seguido por él.
"¿Qué?" Preguntó rápidamente.
"Venga, tenemos un trabajo, ¿recuerdas?" Le dije cogiendo una mochila preparada y dirigiéndome hacia la puerta.
"De acuerdo, pero tienes que prometer que acabaremos luego." Dijo mirándome con una sonrisa seductora.
"Si no nos matan, seguro."
**********************************************************************
Uffff, por fin he podido publicarlo! Siento haber tardado tanto, pero las cosas se me empiezan a complicar. Intentaré acabar lo antes que pueda de traducir el fic, antes de que se líe más...
Chiaky-chan, escribí a la autora, ahora a esperar a que conteste ^^
Ieiran, ánimo y no te preocupes por el fic, primero los exámenes (qué miedo da esta palabra...) Pues... a mí me gustan los dos, las escenas en las que sale Youko son geniales ^^ y en las que sale Kurama muy dulces.
A ver si con suerte este fin de semana puedo adelantar un poco los otros capítulos.
Muchas gracias por los reviews!!
Mata ne! ;)
"¿Q-Qué?" Kurama dijo en pregunta, mirándome preocupado.
"... Youko..." Repetí para mi sorpresa.
Detuvimos toda acción y tan sólo me quedé allí en sus brazos, ambos mirándonos intentando entender lo que exactamente quise decir.
"Hiei... ¿preferirías estar haciendo esto con mi otro lado?" Preguntó Kurama, apartando la vista.
"No... te quiero* a ti." Le dije dulcemente poniendo mi mano en su mejilla.
"... Recuerda, si vamos a hacer algo... tiene que ser querido por ambos lados. Tú y yo... por favor Hiei, tienes que estar seguro." Me dijo apartándome con cuidado de encima de él, levantándose y empezando a vestirse.
Me quedé allí, estirado de lado, medio tapado por su sábana, tan sólo mirándole. Tal vez era lo mejor... ¡¡pero dolía tanto que no pudiese ser!!"
¡¿Qué es lo que quería de mí?!
"Kurama, ¿qué es exactamente lo que quieres que haga? ¡¡¿Cómo puedo demostrarte que sí que te quiero?!!" Grité, sentándome.
Se detuvo a medio camino, ya vestido. Una mirada extraña apareció en su cara y se giró ligeramente para mirarme, una tierna sonrisa en sus labios.
"Eso es todo, Hiei..." Dijo suavemente, dando unos pasos hacia delante y sentándose a mi lado.
"¿El qué, es todo?" Suspiré con tristeza, dirigiéndole una mirada confusa y triste.
"Hiei... no quiero favores de ti o sexo... quiero tu amor... y quiero que estés ahí para mí para quererte. No es demasiado, quiero que me quieras, Hiei... quiero que estés ahí... para mí para *quererte*." Kurama dijo, una lágrima cayó de su ojo.
"No empieces a llorar otra vez, Kurama. ¿qué te hace pensar que alguna vez te dejaré?" Le pregunté poniendo mi brazo alrededor de su hombro.
"Hiei... tú me dejarás... o mejor dicho, lo haré yo... cuando me convierta en Youko yo ya no existiré más... y por eso no puedo amarte." Me dijo acercando su cabeza a mi pecho. Sentí sus cálidas lágrimas caer por mi pecho y luego rápidamente se alejó. "Y... ¡¡cada vez que veo esa cicatriz me lo recuerda!!"
"Kurama... está bien. No importa como existas. No había pensado en eso antes... pero ahora sé que es verdad." Empecé cogiendo a Kurama y estirándolo en mi regazo, donde empecé a acariciar su cara. "Tú eres tú, tu propia persona. Youko y tú sólo compartís la mayor parte de la misma alma... tú eres diferente ahora. Pequeñas cosas... pero esas pequeñas cosas son las que te hacen quien eres. Y yo te quiero como eres."
Tal vez Youko se había equivocado sobre que eran el mismo... pero sabía una cosa: las amaba a ambas...
"Hiei... ¿pero qué pasa con mi otro yo?" Kurama preguntó mirándome con lágrimas en los ojos.
"No te mentiré... le quiero. Pero tienes que saber que también te quiero a ti, Kurama... cuando no estás aquí estás dentro de él... y cuando él no está, está dentro de ti. No te preocupes Kurama... incluso cuando él está conmigo... tú siempre estás ahí, tú siempre existirás." Le aseguré a Kurama, inclinándome hacia él y acariciando su cuello suavemente con mi nariz.
"Hiei... sé por qué le gustas tanto... y sería egoísta de mi parte manteneros separados lo sé..." Suspiró, alargando su mano hacia arriba y alrededor de mi nuca.
Cambié de posición, empecé a lentamente lamer su cuello y él se puso cómodo en mi regazo, jugando dulcemente con los cabellos de mi nuca.
Me detuve, puse mis brazos a su alrededor y tiré de él conmigo hacia la pared. Lentamente lo incorporé y lo bajé para que estuviese estirado a mi lado.
Su espalda contra mi pecho, mi pierna envolviendo la suya, mi cabeza apoyada ligeramente en su hombro... y así es como pasamos la noche.
^*^*^
Me desperté para encontrar que estaba solo contra la pared, desnudo debajo de la sábana.
"¿Kurama?" Le llamé suavemente.
"Oh bien Hiei, estás despierto... en realidad deberíamos empezar ese caso. Se suponía que debíamos empezarlo ayer." Dijo Kurama de espaldas.
Estoy seguro que escuché un rápido 'sniff', así que le regañé rápidamente, "¿Ahora por qué lloras?"
"No estoy llorando, Hiei... es sólo mi madre... he estado fuera toda la noche."
Resistí las ganas de reírme, así que en vez de eso le dije algo que una persona amable y cariñosa diría, no yo.
"¿Por qué no la llamas antes de que envíe a la policía?" Le dije con una media sonrisa, mientras me levantaba y empezaba a vestirme.
Retrasó la respuesta y me miró un segundo. Mi pequeño zorro pervertido...
"Buena idea, Hiei." Me dijo saliendo de la habitación para llamar a su madre, observándome todo el rato.
Acabé de vestirme, decidiendo dejar mi camisa un poco desabrochada para él.
Me senté en esa manta y esperé a que mi zorro volviera a mí.
Zorro... uh huh.
"¡¿YOUKO?!" Grité, dando un ligero brinco hacia atrás, mientras caminaba hacia mí y se sentaba.
"Hiei... es la mañana... pasaste la noche con él, me imagino. ¿Así qué, cómo estuvo?" Preguntó Youko levantando una ceja y poniendo su mano en mi muslo.
"¿Qué, ni un 'hola'?" Le gruñí fríamente.
"Perdón, sólo curioso."
Kurama debía haberse transformado después de llamar a su madre.
"Realmente eso ES sólo en lo que piensas, ¿no?" Dije, sacudiendo la cabeza.
"Cuando estás cerca y sé que tienes ganas..." Respondió con una diabólica sonrisa, moviendo su mano más arriba y la otra en mi hombro.
"¡Dios, nunca podría vivir contigo!" Le grité con una risa.
"¿Qué, demasiado sexy?" Preguntó sarcásticamente, besando mi pecho donde mi camisa estaba desabrochada.
"¡No, demasiado pervertido... los dos! Pero supongo que lo soportaría... ¡¡AH SÍ!!" Recordé levantándome deprisa, seguido por él.
"¿Qué?" Preguntó rápidamente.
"Venga, tenemos un trabajo, ¿recuerdas?" Le dije cogiendo una mochila preparada y dirigiéndome hacia la puerta.
"De acuerdo, pero tienes que prometer que acabaremos luego." Dijo mirándome con una sonrisa seductora.
"Si no nos matan, seguro."
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Uffff, por fin he podido publicarlo! Siento haber tardado tanto, pero las cosas se me empiezan a complicar. Intentaré acabar lo antes que pueda de traducir el fic, antes de que se líe más...
Chiaky-chan, escribí a la autora, ahora a esperar a que conteste ^^
Ieiran, ánimo y no te preocupes por el fic, primero los exámenes (qué miedo da esta palabra...) Pues... a mí me gustan los dos, las escenas en las que sale Youko son geniales ^^ y en las que sale Kurama muy dulces.
A ver si con suerte este fin de semana puedo adelantar un poco los otros capítulos.
Muchas gracias por los reviews!!
Mata ne! ;)