CAPITULO 4
Hermione miraba exasperada a Gerard (Draco). Una vez mas tenia que explicarle que cuando un niño de 10 años hacía magia en su casa no significaba que tuviera que hacerlo flotar como globo.
- No se como se hagan las cosas en Francia, pero aquí son diferentes!!!.- Exclamo.
- ¿Tanto lió solo porque lo convertí en un globo?.- Dijo despreocupado Draco.
- Una vez mas te lo diré Gerard.,, o dejas de comportarte como un tonto o...
- ¿O que?.- Draco se acerco a ella y la miro amenazadoramente.
Los ojos de Hermione parecían lanzar rayos por todos lados. Por mas que intentaba las cosas con Gerard eran inútiles, siempre terminaban discutiendo.
Había pasado un mes desde que Gerard Calestagne había llegado al departamento de Regularización de magia pero en realidad Hermione no aguantaba un día mas con él.
Draco por su parte se sentía molesto e irritado. Ya llevaba un mes trabajando a lado de Hermione y aun lo lograba algún tipo de acercamiento con ella. Simplemente no estaba en su naturaleza ser indulgente, siempre trataba de llevarle la contraria. A veces ni siquiera se lo proponía, solo florecía de si mismo.
De pronto Hermione salió de la oficina dando un portazo haciendo que Draco sonriera burlonamente. Volvió a concentrarse en la redacción de sus informes, después de visitar a los infractores tenia que escribir sobre como habían suscitado los hechos y que medidas se habían aplicado. El Director del departamento, el Sr. Benedick, un hombre bajito y bonachón, le tenia cierta simpatía y lo disculpaba por la manera en que se comportaba algunas veces haciendo que Hermione diera patadas.
La puerta se abrió de golpe haciendo que Draco alzara su vista para observar a la persona que entraba a la oficina.
- Hola!.- saludo un chico alto, pelirrojo y con suaves pecas en la cara.
Draco lo miro unos segundos... se trataba nada menos que de Weasley, el amigo pobretón de Potter. Draco fingió una sonrisa.
- Tú debes ser Gerard. Yo soy Ron Weasley.- le tendió la mano.
Draco apretó un poco lo dientes, no tenia ni la mas mínima intención de darle la mano pero no hacerlo lo haría parecer sospechoso por lo que con todo el asco del mundo se la ofreció.
- Que tal.- saludo Draco. - ¿buscas a Hermione?.
- Si... ¿sabes donde esta?.- Pregunto Ron mientras se paseaba por el lugar de su amiga.
- No lo se. Salió tan repentinamente...- dijo encogiéndose de hombros.
- Hermione me contó que vienes de Francia. ¿Trabajaste con Magia Negra?.- pregunto interesado.
- Si. – contesto sin interés.
- ¿Fuiste auror o algo así?.- Los ojos azules de Ron lo miraban fijamente.
Draco sonrió.- ¿Por qué me lo preguntas?. ¿Acaso tengo cara de auror?.
- Hermione me ha comentado que tienes mucho conocimiento sobre artes oscuras. Un poco raro en alguien que solo trabaja en un departamento de regularización de magia.
- En Francia hay muchos magos dedicados a las artes oscuras, mi función no era espiarlos o perseguirlos como lo haría un auror. Yo solo aplicaba la corrección para que el mago no volviera a hacer lo que hizo.- Los ojos de Draco brillaron con malicia.- Mi función exacta era castigarlos por sus culpas.
- Eso explica tu afición por castigar a los transgresores.- dijo con una sonrisa.
- Creo que Hermione es demasiado apegada a las reglas.-contesto.- Si pudiera me golpearía.
Ron comenzó a reírse.- Ya se lo que es estar en esa posición.
- ¿Tú a que te dedicas?.- Le pregunto con interés. Desde que había llegado al Ministerio no había visto ni a Weasley ni a Potter rondar por los pasillos.
- Trabajo como auror.- Poniéndose serio.- Junto con un amigo, Harry Potter.
- ¿Potter?.- Draco entrecerró un poco los ojos.- ¿El que venció a Lord Voldemort?
- Si.- Ron lo miro con suspicacia.- El también anda por aquí, pero debe de estar ocupado hablando con alguien .
- Debe ser muy interesante tu trabajo.- dijo Draco aburrido.
- Lo es.- dijo con una media sonrisa.
La puerta volvió abrirse nuevamente, esta vez era Hermione.
-Ron.!!.- Hermione se abalanzo hacia su amigo y lo abrazo sin importarle la presencia de Draco.
- Hola!- Ron la abrazo fuertemente.
- ¿Cuándo llegaron?.- pregunto emocionada.
- Hace unos momentos. Estaba platicando con Gerard mientras tú regresabas nuevamente.
- Vayamos a buscar a Harry.- dijo ignorando a Draco.
- Hasta luego, Gerard.- se despidió Ron.
- Adiós.- dijo entre dientes.
Al cerrar la puerta Hermione dio un resoplido.
- ¿Un mal día?.- pregunto Ron.
- No tienes idea de todo lo que he pasado por culpa de ese chico.- dijo enojada.
- A mi me cayo bien, es un poco extraño pero me pareció simpático.
- ¿No estarás bromeando?.
- ¿Por qué?. El tipo tiene un aire medio demente, ¿pero acaso Harry y yo no parecemos dementes también?.- comenzó a reírse.
- No te compares Ron... no lo se, pero Gerard me da escalofríos. Su mirada es tan intensa... me recuerda a las miradas de Malfoy.
Ron comenzó a toser.- ¿Malfoy..?.. ¿Cómo diablos se te ocurre pensar en él?.
- No es que piense en él Ron. Es solo que la manera que mira Gerard es parecida, es todo. Solo que con esos oscuros ojos negros...
- Es una suerte que no hayamos vuelto a saber de él... espero se haya muerto.- dijo con un brillo en los ojos.
- Ron, no es bueno desearle la muerte a nadie!!.- exclamo.
- Solo hagamos una excepción esta vez.- Sonrió.
Hermione hizo una mueca. Llegaron a un pasillo ancho y largo, Harry salía por una puerta.
- Harry!!.- exclamo Hermione.
- Hermione!!.- Harry se acerco rápido y abrió los brazos para abrazar a su amiga.
- Les extrañe tanto!!.- dijo mientras lo abrazaba.
- Nosotros también!!..- dijo Harry mientras sonreía.
- ¿Terminaron el caso de Leslie Wincher?.- Pregunto interesada.
- Al fin!. Y no sabes las que pasamos.- contesto Ron.
- Lo importante es que ya estamos en casa. Es una pena que no nos hayamos visto en estos meses, Hermione. Pero era necesario no hacer apariciones ni nada por el estilo.- Dijo Harry serio.
- Esta bien, entiendo.
- Ahora tenemos que irnos, pero no hagas planes mañana a las 8 de la noche. Mama hará un rico estofado y espera a que llegues a cenar.- dijo Ron.
- Por supuesto que iré. Encantada.- exclamo.
- Entonces nos vemos mañana.- dijo Harry.- Hay mucho que contar.
- Ahí estaré..- Hermione se despidió con un beso en la mejilla de Harry y Ron. Sus dos amigos caminaron hacia el otro lado con paso rápido.
Hermione se sentía feliz, al fin habían llegado Harry y Ron. Eran y seguían siendo sus únicos amigos verdaderos. Salía algunas veces con algunas chicas de la oficina pero ninguna era tan especial como ellos dos.
Se volvió hacia la oficina y respiro profundamente para obtener paciencia cuando viera a Gerard nuevamente. Al llegar Claire tenia una apariencia asustada y pálida.
- Hermione, que bueno que te encuentro. Necesito que vayas urgentemente a la Biblioteca Municipal de Londres. Hay un mago esquizofrénico y tiene encerrados a unos muggles dentro del mismo.
- ¿Dónde esta Gerard?.- Pregunto alertada Hermione.
- No lo se. Mariza me dijo que lo vio salir con el Sr. Benedick y el Sr. Parker.
- Me tendré que ir sin él. – Hermione se dio la vuelta y se dirigió al elevador con rapidez. Piso 2, 3,4, 5,.... Al llegar al exterior Hermione desapareció rápidamente para aparecer en la entrada principal de la biblioteca. No se veían muggles afuera del lugar por lo que dedujo que el asunto no había sobrepasado las paredes.
Para Hermione era mejor no tener que lidiar con mas muggles, a veces era muy difícil tener que explicar su presencia en ciertos actos criminales de magos. Ella era lo que se podría decir una Corregidora del Ministerio. Se encargaba de ir a los lugares donde se transgredía el uso de la magia, ya sea porque un niño deseaba convertir su tableta de chocolate en una pieza de 20 kilos o porque un mago aplicaba magia ilegal en zona muggle. De alguna manera ella tenia que evitar que los policías muggles se enteraran de los disturbios o, en su defecto, "corregir" la situación de tal manera que los muggles no sospecharan nada.
Su compañero, Gerard, efectuaba el mismo cargo que ella y podía decirse que eran una especie de equipo. Según las leyes mágicas, un Corregidor no puede aplicar castigos, para eso existe el juicio pero a Gerard eso no le importaba, muchas veces hacia una que otra cosa para asustar a los transgresores mientras Hermione estallaba en ira.
Caminaba lentamente por el ancho pasillo, el lugar estaba desierto lo que confirmaba que el mago los había encerrado en algún sitio. Su mano sostenía firmemente su varita y se mantenía alerta a cualquier tipo de ataque.
No se oía ningún ruido, solo caminaba por entre las mesas y sillas de la biblioteca. Algo estaba mal, no podía ser posible tanto silencio. Camino un poco mas y escucho unos quejidos, eran voces.. varias voces. Probablemente se trataban de los muggles que estaban retenidos.
Quiso caminar a toda prisa hacia aquel cuarto cuando una presencia salió de entre los anaqueles de libros.
- Buenas Noches señorita. – Hermione estaba frente a un hombre bajo y regordete vestido de ropas muggles. Por lo que suponía que se trataba de un extorsionador en el mundo muggle. Talvez secuestraba a personas para cobrar dinero muggle, no era un trabajo muy honrado que digamos.
- ¿Qué hace una chica como tú caminando por aquí a estas horas?. Ya hemos cerrado.- continuo hablando el hombre.
- Vine a detenerte...- Apretó su varita con mas seguridad.
- ¿Detenerme?. ¿Ahora mandan a colegialas a detener a los supuestos malhechores?.- El hombre rió. Le apuntaba la varita directamente a la cara de Hermione.
- Yo no soy ninguna colegiala y por las buenas baja tu varita..- Las mejillas de Hermione se ponían ligeramente rojas.
El hombre comenzó a reír mas fuerte.-
- Huricane!!.- grito el tipo y lanzo sobre Hermione varias mesas y sillas.
- Freezy!!.- exclamo rápidamente Hermione parando algunas mientras otras volaban por encima de su cabeza.
- STUPEFY!!!.- grito una voz detrás de Hermione.
Hermione cayo al suelo sin sentido. La persona que la había dejado inconsciente camino hacia ella y tomo su varita.
- Niña estúpida.- dijo el hombre.
- Que ingenioso Hebert. Brillante!!.- exclamó el otro hombre.
Los dos hombres sonreían abiertamente ante su triunfo. Eran totalmente parecidos: Gemelos. Por eso el informe decía sobre un mago, podían ver a la misma persona caminando por la biblioteca y no sospechar que eran dos personas diferentes.
- Lo siento niñita.- dijo el hombre llamado Hebert y apunto a Hermione con su varita.
- No muevas ni un músculo mas.- Dijo una voz molesta.
Draco estaba parado frente a ellos y apuntaba en la cabeza al hermano de Hebert, su mirada era terriblemente furiosa.
- ¿No creerás que voy a hacerlo?.- dijo Hebert.
- Si no lo haces, le volare la cabeza a tu hermano.- dijo entre dientes.
El gemelo de Hebert comenzó a empuñar sudorosamente su varita y le hacia señas con los ojos a su hermano.
- Philiphormus Enare!!!.- grito Hebert hacia Draco.
- Esferusfini!!.- dijo Draco. Y una luz dorada salió de su varita desviando el hechizo de Hebert y cayendo sobre su hermano gemelo.
El hombre grito de dolor.
- Charles!!!.- exclamo Hebert.
- Invadium Enentare!!!.- Grito Draco y nuevamente una luz salió de su varita dejando a Hebert completamente rígido.
Hermione abrió los ojos confundida. El cuerpo de Hebert yacía como muerto a un lado de ella. Se incorporo rápidamente mientras tomaba su varita que estaba a unos centímetros.
Draco tenia puesto un pie sobre el gemelo Charles quien chillaba de dolor por la metamorfosis dolorosa que estaba padeciendo. Sus manos parecían dos pedazos de madera seca.
- Gerard!!!.- Exclamo Hermione.
- ¿Estas bien?.- Draco camino hacia ella sin importarle pasar por encima del pie de Charles.
- ¿Qué paso?.- pregunto confundida.
- Solo digamos que el asunto ya esta controlado.- dijo con una media sonrisa.
Hermione lo miro por unos segundos a los ojos.
- Estas sangrando.- Dijo él mientras con su mano movía hacia atrás el cabello que cubría su frente.
Hermione se quiso llevar una mano hacia la herida pero Draco la detuvo.
- Es mejor que no la toques.- dijo serio.
Hermione parpadeo, era la primera vez que Gerard le tomaba la mano. Era áspera y fría pero a pesar de eso se sentía confortante. Iba a decir algo pero varias voces provenientes de un cuarto la interrumpió.
Para ocultar un poco su nerviosismo Hermione fue quien camino hacia la puerta y con su varita la abrió dando paso a cinco muggles atemorizados que la veían confundidos. Ella sonrió para tratar de darles confianza y tomo del brazo a una señora de mayor edad.
- ¿Están bien?.- pregunto.
- ¿Qué ha pasado?. ¿Quiénes son ellos?.- Pregunto un hombre de tez morena y grueso bigote que estaba visiblemente asustado,
- Todo esta bien. No se preocupen por ellos.- dijo Hermione.
Charles yacía en el suelo llorando por la transformación de sus manos y pies. Hebert parecía congelado en el piso y lo único que podía mover eran sus ojos.
- ¿Qué le han hecho?.- pregunto asustada una señora de anteojos gruesos.
- Solo un pequeño castigo.- dijo Draco con malicia.
- Es mejor que nos vayamos.- dijo Hermione a Draco.
Draco se paro frente a ellos y los miro con diversión.
- Obliviate!!!!.- exclamo.
Los cinco muggles se quedaron mirándolo como fuera de si. Uno de ellos parpadeo varias veces.
- Buenas noches, Señor. Siento decirle que ya cerramos la biblioteca.- dijo amablemente.
- Gracias, nos retiraremos entonces.- Dijo Hermione con una sonrisa.
- Santo cielo!!.- grito la señora de anteojos. Veía horrorizada el cuerpo de Hebert que yacía rígidamente en el piso.
- Accio Gemelo!!.- exclamo Hermione. Charles salió volando de su lugar hasta donde estaba su hermano.
Hermione se paro frente a ellos y los envolvió con una luz un poco encegadora y ambos quedaron enlazados. Posteriormente se paro frente a las mesas y sillas desacomodadas y nuevamente una luz broto de la punta dejando todo lo que estuviera en la sala ordenadamente.
Los muggles estaban sorprendidos por el acto que acababa de hacer la chica.
Draco se acerco a Hermione y saco de entre sus bolsillos una argolla. Hermione amarro el lazo en una parte de la argolla mientras ellos la tomaban con la mano.
- Obliviate!!!!.- exclamo Draco hacia los muggles.
Y los cuatro desaparecieron.
Aparecieron en una celda de piedra y un tanto calurosa. Dejaron a los gemelos dentro de ella y salieron de ahí.
Los dos caminaban lentamente hacia la salida de lo que parecía ser una pequeña cárcel y fue Hermione quien se detuvo.
- Gerad...- murmuro.
Draco se detuvo quedando a unos centímetros de ella, los ojos negros del cuerpo en que él estaba transformado la miraron fijamente.
- Gracias...- Hermione sonrió.
Por un momento Draco sintió un estremecimiento en todo el cuerpo por la manera en que Hermione lo miraba. Tomo un respiro y continuo caminando sin decir una sola palabra.
- Ahh!!!.. Aquí están ustedes dos!!.- Un hombre canoso y de sombrero largo y verde con pintas azules apareció frente a ellos.
- Hermione, nos tenias preocupados. Nos informaron luego que eran los Gemelos Mollton los que habían atacado a esos muggles. Si no hubiera sido por Gerard....- dijo otro hombre largo y vestimenta anaranjada.
- Es cierto..- dijo ella mirando a Gerard agradecida.
Draco se frotaba nerviosamente las manos.
- Gerard... genial.. Estuviste genial!!.- dijo el hombre de sombrero verde.
- Gracias Sr. Benedick.- Draco intento sonreír.
- Hermione necesitas ir a la enfermería a que te veas esa cortada.- dijo el hombre vestido de naranja.
- Oh!. Si..- Hermione se movió un poco.- ahora mismo iré Sr. Parker.
Hermione camino dejando a los tres hombres detrás de ella, antes de doblar a la esquina miro a Gerard nuevamente y desapareció.
***********************
Capitulo 4!!!. Me he atrasado un poco porque la verdad me quede avanzando mi otro fic. Espero que les haya gustado este capitulo. En lo personal a mi me gusto un poco. No estoy muy segura de haberlo redactado bien porque esta vez no le hice muchas correcciones.
No olviden el siguiente capitulo... Me he quedado intrigada... ¿Hermione mirando a Gerard?. Bueno mas bien a Draco.. pero ella lo conoce como Gerard.
paola: A mi tambien me encantan los vampiros, se me hacen unas criaturas diabolicamente fascinantes. A ver que tanto puedo aprovechar para este fic.
Kore: Efectivamente.. esas serian las palabras claves de este Draco.. atractivo y peligroso.. solo que el cuerpo que ahora usa Draco no es muy atractivo que digamos.
dana_felton: claro que he visto buffy!.. es una de mis series favoritas y Spike me encanta. Me recuerda mucho a Draco ciertamente.
Les agradesco todos sus reviews!!.. Y tambien a todas las demas chicas que me han escrito directamente a mi correo.
Bueno, no olviden dejar sus reviews!!!
y cualquier cosa escriban a kasaes@hotmail.com
J@ina
Hermione miraba exasperada a Gerard (Draco). Una vez mas tenia que explicarle que cuando un niño de 10 años hacía magia en su casa no significaba que tuviera que hacerlo flotar como globo.
- No se como se hagan las cosas en Francia, pero aquí son diferentes!!!.- Exclamo.
- ¿Tanto lió solo porque lo convertí en un globo?.- Dijo despreocupado Draco.
- Una vez mas te lo diré Gerard.,, o dejas de comportarte como un tonto o...
- ¿O que?.- Draco se acerco a ella y la miro amenazadoramente.
Los ojos de Hermione parecían lanzar rayos por todos lados. Por mas que intentaba las cosas con Gerard eran inútiles, siempre terminaban discutiendo.
Había pasado un mes desde que Gerard Calestagne había llegado al departamento de Regularización de magia pero en realidad Hermione no aguantaba un día mas con él.
Draco por su parte se sentía molesto e irritado. Ya llevaba un mes trabajando a lado de Hermione y aun lo lograba algún tipo de acercamiento con ella. Simplemente no estaba en su naturaleza ser indulgente, siempre trataba de llevarle la contraria. A veces ni siquiera se lo proponía, solo florecía de si mismo.
De pronto Hermione salió de la oficina dando un portazo haciendo que Draco sonriera burlonamente. Volvió a concentrarse en la redacción de sus informes, después de visitar a los infractores tenia que escribir sobre como habían suscitado los hechos y que medidas se habían aplicado. El Director del departamento, el Sr. Benedick, un hombre bajito y bonachón, le tenia cierta simpatía y lo disculpaba por la manera en que se comportaba algunas veces haciendo que Hermione diera patadas.
La puerta se abrió de golpe haciendo que Draco alzara su vista para observar a la persona que entraba a la oficina.
- Hola!.- saludo un chico alto, pelirrojo y con suaves pecas en la cara.
Draco lo miro unos segundos... se trataba nada menos que de Weasley, el amigo pobretón de Potter. Draco fingió una sonrisa.
- Tú debes ser Gerard. Yo soy Ron Weasley.- le tendió la mano.
Draco apretó un poco lo dientes, no tenia ni la mas mínima intención de darle la mano pero no hacerlo lo haría parecer sospechoso por lo que con todo el asco del mundo se la ofreció.
- Que tal.- saludo Draco. - ¿buscas a Hermione?.
- Si... ¿sabes donde esta?.- Pregunto Ron mientras se paseaba por el lugar de su amiga.
- No lo se. Salió tan repentinamente...- dijo encogiéndose de hombros.
- Hermione me contó que vienes de Francia. ¿Trabajaste con Magia Negra?.- pregunto interesado.
- Si. – contesto sin interés.
- ¿Fuiste auror o algo así?.- Los ojos azules de Ron lo miraban fijamente.
Draco sonrió.- ¿Por qué me lo preguntas?. ¿Acaso tengo cara de auror?.
- Hermione me ha comentado que tienes mucho conocimiento sobre artes oscuras. Un poco raro en alguien que solo trabaja en un departamento de regularización de magia.
- En Francia hay muchos magos dedicados a las artes oscuras, mi función no era espiarlos o perseguirlos como lo haría un auror. Yo solo aplicaba la corrección para que el mago no volviera a hacer lo que hizo.- Los ojos de Draco brillaron con malicia.- Mi función exacta era castigarlos por sus culpas.
- Eso explica tu afición por castigar a los transgresores.- dijo con una sonrisa.
- Creo que Hermione es demasiado apegada a las reglas.-contesto.- Si pudiera me golpearía.
Ron comenzó a reírse.- Ya se lo que es estar en esa posición.
- ¿Tú a que te dedicas?.- Le pregunto con interés. Desde que había llegado al Ministerio no había visto ni a Weasley ni a Potter rondar por los pasillos.
- Trabajo como auror.- Poniéndose serio.- Junto con un amigo, Harry Potter.
- ¿Potter?.- Draco entrecerró un poco los ojos.- ¿El que venció a Lord Voldemort?
- Si.- Ron lo miro con suspicacia.- El también anda por aquí, pero debe de estar ocupado hablando con alguien .
- Debe ser muy interesante tu trabajo.- dijo Draco aburrido.
- Lo es.- dijo con una media sonrisa.
La puerta volvió abrirse nuevamente, esta vez era Hermione.
-Ron.!!.- Hermione se abalanzo hacia su amigo y lo abrazo sin importarle la presencia de Draco.
- Hola!- Ron la abrazo fuertemente.
- ¿Cuándo llegaron?.- pregunto emocionada.
- Hace unos momentos. Estaba platicando con Gerard mientras tú regresabas nuevamente.
- Vayamos a buscar a Harry.- dijo ignorando a Draco.
- Hasta luego, Gerard.- se despidió Ron.
- Adiós.- dijo entre dientes.
Al cerrar la puerta Hermione dio un resoplido.
- ¿Un mal día?.- pregunto Ron.
- No tienes idea de todo lo que he pasado por culpa de ese chico.- dijo enojada.
- A mi me cayo bien, es un poco extraño pero me pareció simpático.
- ¿No estarás bromeando?.
- ¿Por qué?. El tipo tiene un aire medio demente, ¿pero acaso Harry y yo no parecemos dementes también?.- comenzó a reírse.
- No te compares Ron... no lo se, pero Gerard me da escalofríos. Su mirada es tan intensa... me recuerda a las miradas de Malfoy.
Ron comenzó a toser.- ¿Malfoy..?.. ¿Cómo diablos se te ocurre pensar en él?.
- No es que piense en él Ron. Es solo que la manera que mira Gerard es parecida, es todo. Solo que con esos oscuros ojos negros...
- Es una suerte que no hayamos vuelto a saber de él... espero se haya muerto.- dijo con un brillo en los ojos.
- Ron, no es bueno desearle la muerte a nadie!!.- exclamo.
- Solo hagamos una excepción esta vez.- Sonrió.
Hermione hizo una mueca. Llegaron a un pasillo ancho y largo, Harry salía por una puerta.
- Harry!!.- exclamo Hermione.
- Hermione!!.- Harry se acerco rápido y abrió los brazos para abrazar a su amiga.
- Les extrañe tanto!!.- dijo mientras lo abrazaba.
- Nosotros también!!..- dijo Harry mientras sonreía.
- ¿Terminaron el caso de Leslie Wincher?.- Pregunto interesada.
- Al fin!. Y no sabes las que pasamos.- contesto Ron.
- Lo importante es que ya estamos en casa. Es una pena que no nos hayamos visto en estos meses, Hermione. Pero era necesario no hacer apariciones ni nada por el estilo.- Dijo Harry serio.
- Esta bien, entiendo.
- Ahora tenemos que irnos, pero no hagas planes mañana a las 8 de la noche. Mama hará un rico estofado y espera a que llegues a cenar.- dijo Ron.
- Por supuesto que iré. Encantada.- exclamo.
- Entonces nos vemos mañana.- dijo Harry.- Hay mucho que contar.
- Ahí estaré..- Hermione se despidió con un beso en la mejilla de Harry y Ron. Sus dos amigos caminaron hacia el otro lado con paso rápido.
Hermione se sentía feliz, al fin habían llegado Harry y Ron. Eran y seguían siendo sus únicos amigos verdaderos. Salía algunas veces con algunas chicas de la oficina pero ninguna era tan especial como ellos dos.
Se volvió hacia la oficina y respiro profundamente para obtener paciencia cuando viera a Gerard nuevamente. Al llegar Claire tenia una apariencia asustada y pálida.
- Hermione, que bueno que te encuentro. Necesito que vayas urgentemente a la Biblioteca Municipal de Londres. Hay un mago esquizofrénico y tiene encerrados a unos muggles dentro del mismo.
- ¿Dónde esta Gerard?.- Pregunto alertada Hermione.
- No lo se. Mariza me dijo que lo vio salir con el Sr. Benedick y el Sr. Parker.
- Me tendré que ir sin él. – Hermione se dio la vuelta y se dirigió al elevador con rapidez. Piso 2, 3,4, 5,.... Al llegar al exterior Hermione desapareció rápidamente para aparecer en la entrada principal de la biblioteca. No se veían muggles afuera del lugar por lo que dedujo que el asunto no había sobrepasado las paredes.
Para Hermione era mejor no tener que lidiar con mas muggles, a veces era muy difícil tener que explicar su presencia en ciertos actos criminales de magos. Ella era lo que se podría decir una Corregidora del Ministerio. Se encargaba de ir a los lugares donde se transgredía el uso de la magia, ya sea porque un niño deseaba convertir su tableta de chocolate en una pieza de 20 kilos o porque un mago aplicaba magia ilegal en zona muggle. De alguna manera ella tenia que evitar que los policías muggles se enteraran de los disturbios o, en su defecto, "corregir" la situación de tal manera que los muggles no sospecharan nada.
Su compañero, Gerard, efectuaba el mismo cargo que ella y podía decirse que eran una especie de equipo. Según las leyes mágicas, un Corregidor no puede aplicar castigos, para eso existe el juicio pero a Gerard eso no le importaba, muchas veces hacia una que otra cosa para asustar a los transgresores mientras Hermione estallaba en ira.
Caminaba lentamente por el ancho pasillo, el lugar estaba desierto lo que confirmaba que el mago los había encerrado en algún sitio. Su mano sostenía firmemente su varita y se mantenía alerta a cualquier tipo de ataque.
No se oía ningún ruido, solo caminaba por entre las mesas y sillas de la biblioteca. Algo estaba mal, no podía ser posible tanto silencio. Camino un poco mas y escucho unos quejidos, eran voces.. varias voces. Probablemente se trataban de los muggles que estaban retenidos.
Quiso caminar a toda prisa hacia aquel cuarto cuando una presencia salió de entre los anaqueles de libros.
- Buenas Noches señorita. – Hermione estaba frente a un hombre bajo y regordete vestido de ropas muggles. Por lo que suponía que se trataba de un extorsionador en el mundo muggle. Talvez secuestraba a personas para cobrar dinero muggle, no era un trabajo muy honrado que digamos.
- ¿Qué hace una chica como tú caminando por aquí a estas horas?. Ya hemos cerrado.- continuo hablando el hombre.
- Vine a detenerte...- Apretó su varita con mas seguridad.
- ¿Detenerme?. ¿Ahora mandan a colegialas a detener a los supuestos malhechores?.- El hombre rió. Le apuntaba la varita directamente a la cara de Hermione.
- Yo no soy ninguna colegiala y por las buenas baja tu varita..- Las mejillas de Hermione se ponían ligeramente rojas.
El hombre comenzó a reír mas fuerte.-
- Huricane!!.- grito el tipo y lanzo sobre Hermione varias mesas y sillas.
- Freezy!!.- exclamo rápidamente Hermione parando algunas mientras otras volaban por encima de su cabeza.
- STUPEFY!!!.- grito una voz detrás de Hermione.
Hermione cayo al suelo sin sentido. La persona que la había dejado inconsciente camino hacia ella y tomo su varita.
- Niña estúpida.- dijo el hombre.
- Que ingenioso Hebert. Brillante!!.- exclamó el otro hombre.
Los dos hombres sonreían abiertamente ante su triunfo. Eran totalmente parecidos: Gemelos. Por eso el informe decía sobre un mago, podían ver a la misma persona caminando por la biblioteca y no sospechar que eran dos personas diferentes.
- Lo siento niñita.- dijo el hombre llamado Hebert y apunto a Hermione con su varita.
- No muevas ni un músculo mas.- Dijo una voz molesta.
Draco estaba parado frente a ellos y apuntaba en la cabeza al hermano de Hebert, su mirada era terriblemente furiosa.
- ¿No creerás que voy a hacerlo?.- dijo Hebert.
- Si no lo haces, le volare la cabeza a tu hermano.- dijo entre dientes.
El gemelo de Hebert comenzó a empuñar sudorosamente su varita y le hacia señas con los ojos a su hermano.
- Philiphormus Enare!!!.- grito Hebert hacia Draco.
- Esferusfini!!.- dijo Draco. Y una luz dorada salió de su varita desviando el hechizo de Hebert y cayendo sobre su hermano gemelo.
El hombre grito de dolor.
- Charles!!!.- exclamo Hebert.
- Invadium Enentare!!!.- Grito Draco y nuevamente una luz salió de su varita dejando a Hebert completamente rígido.
Hermione abrió los ojos confundida. El cuerpo de Hebert yacía como muerto a un lado de ella. Se incorporo rápidamente mientras tomaba su varita que estaba a unos centímetros.
Draco tenia puesto un pie sobre el gemelo Charles quien chillaba de dolor por la metamorfosis dolorosa que estaba padeciendo. Sus manos parecían dos pedazos de madera seca.
- Gerard!!!.- Exclamo Hermione.
- ¿Estas bien?.- Draco camino hacia ella sin importarle pasar por encima del pie de Charles.
- ¿Qué paso?.- pregunto confundida.
- Solo digamos que el asunto ya esta controlado.- dijo con una media sonrisa.
Hermione lo miro por unos segundos a los ojos.
- Estas sangrando.- Dijo él mientras con su mano movía hacia atrás el cabello que cubría su frente.
Hermione se quiso llevar una mano hacia la herida pero Draco la detuvo.
- Es mejor que no la toques.- dijo serio.
Hermione parpadeo, era la primera vez que Gerard le tomaba la mano. Era áspera y fría pero a pesar de eso se sentía confortante. Iba a decir algo pero varias voces provenientes de un cuarto la interrumpió.
Para ocultar un poco su nerviosismo Hermione fue quien camino hacia la puerta y con su varita la abrió dando paso a cinco muggles atemorizados que la veían confundidos. Ella sonrió para tratar de darles confianza y tomo del brazo a una señora de mayor edad.
- ¿Están bien?.- pregunto.
- ¿Qué ha pasado?. ¿Quiénes son ellos?.- Pregunto un hombre de tez morena y grueso bigote que estaba visiblemente asustado,
- Todo esta bien. No se preocupen por ellos.- dijo Hermione.
Charles yacía en el suelo llorando por la transformación de sus manos y pies. Hebert parecía congelado en el piso y lo único que podía mover eran sus ojos.
- ¿Qué le han hecho?.- pregunto asustada una señora de anteojos gruesos.
- Solo un pequeño castigo.- dijo Draco con malicia.
- Es mejor que nos vayamos.- dijo Hermione a Draco.
Draco se paro frente a ellos y los miro con diversión.
- Obliviate!!!!.- exclamo.
Los cinco muggles se quedaron mirándolo como fuera de si. Uno de ellos parpadeo varias veces.
- Buenas noches, Señor. Siento decirle que ya cerramos la biblioteca.- dijo amablemente.
- Gracias, nos retiraremos entonces.- Dijo Hermione con una sonrisa.
- Santo cielo!!.- grito la señora de anteojos. Veía horrorizada el cuerpo de Hebert que yacía rígidamente en el piso.
- Accio Gemelo!!.- exclamo Hermione. Charles salió volando de su lugar hasta donde estaba su hermano.
Hermione se paro frente a ellos y los envolvió con una luz un poco encegadora y ambos quedaron enlazados. Posteriormente se paro frente a las mesas y sillas desacomodadas y nuevamente una luz broto de la punta dejando todo lo que estuviera en la sala ordenadamente.
Los muggles estaban sorprendidos por el acto que acababa de hacer la chica.
Draco se acerco a Hermione y saco de entre sus bolsillos una argolla. Hermione amarro el lazo en una parte de la argolla mientras ellos la tomaban con la mano.
- Obliviate!!!!.- exclamo Draco hacia los muggles.
Y los cuatro desaparecieron.
Aparecieron en una celda de piedra y un tanto calurosa. Dejaron a los gemelos dentro de ella y salieron de ahí.
Los dos caminaban lentamente hacia la salida de lo que parecía ser una pequeña cárcel y fue Hermione quien se detuvo.
- Gerad...- murmuro.
Draco se detuvo quedando a unos centímetros de ella, los ojos negros del cuerpo en que él estaba transformado la miraron fijamente.
- Gracias...- Hermione sonrió.
Por un momento Draco sintió un estremecimiento en todo el cuerpo por la manera en que Hermione lo miraba. Tomo un respiro y continuo caminando sin decir una sola palabra.
- Ahh!!!.. Aquí están ustedes dos!!.- Un hombre canoso y de sombrero largo y verde con pintas azules apareció frente a ellos.
- Hermione, nos tenias preocupados. Nos informaron luego que eran los Gemelos Mollton los que habían atacado a esos muggles. Si no hubiera sido por Gerard....- dijo otro hombre largo y vestimenta anaranjada.
- Es cierto..- dijo ella mirando a Gerard agradecida.
Draco se frotaba nerviosamente las manos.
- Gerard... genial.. Estuviste genial!!.- dijo el hombre de sombrero verde.
- Gracias Sr. Benedick.- Draco intento sonreír.
- Hermione necesitas ir a la enfermería a que te veas esa cortada.- dijo el hombre vestido de naranja.
- Oh!. Si..- Hermione se movió un poco.- ahora mismo iré Sr. Parker.
Hermione camino dejando a los tres hombres detrás de ella, antes de doblar a la esquina miro a Gerard nuevamente y desapareció.
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Capitulo 4!!!. Me he atrasado un poco porque la verdad me quede avanzando mi otro fic. Espero que les haya gustado este capitulo. En lo personal a mi me gusto un poco. No estoy muy segura de haberlo redactado bien porque esta vez no le hice muchas correcciones.
No olviden el siguiente capitulo... Me he quedado intrigada... ¿Hermione mirando a Gerard?. Bueno mas bien a Draco.. pero ella lo conoce como Gerard.
paola: A mi tambien me encantan los vampiros, se me hacen unas criaturas diabolicamente fascinantes. A ver que tanto puedo aprovechar para este fic.
Kore: Efectivamente.. esas serian las palabras claves de este Draco.. atractivo y peligroso.. solo que el cuerpo que ahora usa Draco no es muy atractivo que digamos.
dana_felton: claro que he visto buffy!.. es una de mis series favoritas y Spike me encanta. Me recuerda mucho a Draco ciertamente.
Les agradesco todos sus reviews!!.. Y tambien a todas las demas chicas que me han escrito directamente a mi correo.
Bueno, no olviden dejar sus reviews!!!
y cualquier cosa escriban a kasaes@hotmail.com
J@ina
