CAPITULO 20
FINAL
Hermione Granger yacía frágil entre los brazos de Draco Malfoy. En la mente del rubio se desarrollaban toda una serie de alternativas para salvarle la vida pero la joven estaba demasiado débil para poder sobrevivir un viaje.
Todo resultaba un choque a sus sentidos. Leonard Malfoy, su tátara tatarabuelo había desaparecido junto con el demonio que era el cuidador del poder del Medallón de Hildegarde. Eso sacudía a Draco con una fuerte impotencia y rabia hacia todo.
Por vez primera había sentido un acercamiento amistoso con alguien de su misma sangre, aunque fuera un vampiro. Todo había sucedido tan rápido... ¿cómo había llegado hasta ese punto?. ¿cómo había permitido que Hermione pagara por todas las consecuencias?. ¿por qué ella y no el era quien estaba muriendo?.
Tres de los vampiros sobrevivientes, Tom Beckerman, Jak Sutter y Alexander Astor se acercaron a los magos. Sirius levanto su rostro y los miro con recelo.
- Puedo sentir que ella esta muriendo...- dijo Tom. El vampiro de cabello largo y negro toco a Hermione en la mejilla.
- Pero hay una manera de hacer que viva....- susurro Jak Sutter. Un vampiro de ojos azules y cabello gris.
- Con la sangre del inmortal..- dijo Alexander con un brillo rojo en los ojos.
- ¿A que se refieren?...- Pregunto Ron desconcertado.
- No voy a permitir que Hermione se convierta en...- Draco apretó los labios en una mueca mientras miraba a Hermione con el rostro gris.
- Quieren que ella beba de su sangre...- dijo Harry a Ron.
- Convirtiéndose en un ser de la oscuridad.- agrego Sirius.
- Ella podría vivir...- dijo Tom.
- Eso no es vivir...- dijo Draco con un brillo de enojo en los ojos.- es vivir en un cuerpo sin alma.... morir en vida.
Harry miro a Hermione y la tomo de una mano. La chica tenia las manos heladas, su pulso cada vez era menor y el chico de gryffindor sabia que tenia pocas posibilidades de vivir.
- Hermione no puede morir...- dijo Ron tomándose de los cabellos en un acto de desesperación.
Sirius miro atentamente a los vampiros que permanecían alrededor. Los pálidos rostros de las criaturas lucían relajadas ante la próxima muerte de una persona.... sangre de vampiro... la única manera de salvar a Hermione era hacerla probar unas gotas... ¿pero era justo para ella hacerla vivir en la oscuridad?, ¿ella querría un destino asi?. El mago de cabellos negros se alejo del resto internándose en sus propios pensamientos.
Draco veía con rabia como la vida de Hermione se escapa mientras la sostenía en brazos, Harry buscaba en su mente una rápida manera de devolverle un poco de vitalidad por lo menos suficiente para que ella pudiera ir a un hospital mágico y Ron lloraba interiormente por la suerte que estaba corriendo su amiga... ¿qué podía hacer por ella?.
El Slytherin miraba cada tramo de Hermione, su cabello enmarañado y sucio, su rostro pálido y gris con algunos moretones, su cuerpo delgado y frío,... sus labios... pero no podía ver sus ojos... no podía ver el color miel de aquellos ojos que le habían cautivado desde el primer día que la vio en el Ministerio de Magia.
Por primera vez no veía a mas nadie a su alrededor... no le importaba si Potter y Weasley le veían débil... lo único que deseaba era tenerla, que abriera los ojos y le sonriera como le hizo la ultima vez que la vio...
Ni siquiera la había besado... solo un patético beso robado el día que salió del laberinto... ¿a que sabrían aquellos dulces labios?....
- Malfoy...- dijo Sirius dándose la vuelta y acercándose nuevamente a ellos.
Draco levanto la mirada hacia Sirius.
- Hermione necesita una poción que la haga rehabilitarse en poco tiempo, ella no soportara un viaje, sea por transportador, por escoba o por aparición.
- ¿Puedes decirme algo que no sepa Black?.- pregunto Draco con el ceño fruncido.
- ¿En que has pensado?...-dijo Harry sin entender hasta donde quería llegar Sirius.
- Eres pariente de Leonard Malfoy... tienes sangre de vampiro pero eres mortal...
Los ojos de Harry se abrieron y Draco soltó el aire como si hubiera estado aguantando las ganas de respirar.
- ¿Crees que la sangre de Malfoy es la solución?.- pregunto Ron,-.
- Pienso que su sangre tiene las propiedades de un vampiro. Ustedes pueden comprobarlo...- El mago rodeo a Draco.- No tiene una sola herida grave a pesar de los hechizos que le lanzo Karnsten..
- La teoría de este mago no es descabellada...-dijo Tom, un vampiro.- No podrá darle inmortalidad a esta pequeña pero podrá curarle. Su sangre de vampiro lo puede hacer...
Sirius miro fijamente a Draco.
- Vamos a intentarlo...-dijo el rubio.
Los tres vampiros sonrieron entre si pero entre Harry y Ron hubieron miradas de desconcierto.
- ¿Qué efectos secundarios va a tener Hermione si ella bebe de tu sangre?.- dijo Harry siguiendo a Draco cuando el intentaba dejarla sobre una pila de piedras a manera de ceremonia.
Draco se volteo.
- No lo se Potter... talvez se vuelva como yo.-dijo con una media sonrisa.
- Eso ni pensarlo...-dijo Ron entre dientes.- Suficiente tenemos con tu existencia.
- Lo que podría suceder es que ella herede algunas cualidades vampiricas como la afinación de sus sentidos, ver en la oscuridad, volar.... – dijo Jak, otro vampiro.- pero seguirá conservando su alma y mortalidad.
Draco no se detuvo mas. Apresuradamente se deshizo de las mangas de su camisa y con la punta de una lanza se corto suavemente su muñeca. Harry ayudo en abrir la boca de la chica y con total desagrado Ron vio como las gotas rojas caían sobre los labios y lengua de Hermione. Sirius aguantaba la respiración deseando en el fondo de su corazón que resultara...
Después de unas cuantas gotas, Draco retiro su muñeca. Los magos miraban a Hermione esperando alguna reacción positiva... pero nada sucedía.
Draco sentía que el suelo temblaba bajo sus pies pero en realidad era el quien estaba temblando. Harry cerro los ojos implorando que su amiga despertara, Ron le dio la espalda mientras reprimía algunas lagrimas.
Pero algo sucedió...
El color de Hermione cambio de pálido a rosa y la herida en su abdomen fue poco a poco desapareciendo bajo la mirada atónita de Draco y Sirius. Este ultimo sacudió a Harry para que pudiese ver lo que le estaba sucediendo a la chica.
Los vampiros sonrieron, podían oír los latidos de corazón de Hermione y el suave ritmo de su respiración. Pronto, la temperatura corporal fue entibiándose mientras que su sangre fluía con velocidad por todo su cuerpo.
Los ojos color miel de la chica se abrieron posándose sobre los ojos grises de Draco.
El rubio la ayudo a sentarse y la abrazo tiernamente, acelerando los latidos del corazón de Hermione. Los brazos de ella se enredaron alrededor del cuello de Draco mientras el le acariciaba su rostro con la nariz.
Hermione coloco una mano en una mejilla del rubio acariciándole. Harry se acerco a la pareja como si no creyese lo que estaba viendo. Hermione lo volteo a mirar y sus ojos chispearon con una eufórica alegría. Ron camino apresuradamente a ella y se quedo observándola como si aquello fuera un sueño. Draco se aparto de Hermione y los dos gryffindor se abalanzaron sobre Hermione abrazándola.
Sirius volteo a mirar a Draco y ese le sostuvo la mirada mientras en sus labios se dibujaba una sonrisa. El rubio fue bajando la mirada hasta toparse con el medallón de Hildegarde sujetado por una mano de Black.
El mago levanto el medallón y los vampiros se acercaron a ellos.
- Habrá que destruirle.- dijo Sirius.
- ¿Para que destruirle?. Es una poderosa arma en contra de los enemigos...-dijo Tom.
- ¿Acaso no fue suficiente con lo que viste esta noche?.- Reclamo Sirius.
- Los vampiros carecemo del sentimentalismo humano...- contesto el vampiro.
- ¡No seas estupido Tom!. ¿Qué va a pasar si es TU enemigo quien consigue el medallón?.- dijo Draco entre dientes.- ¿Quieres que lo pongamos en tu lánguido cuerpo?. Puedo abrirte el estomago lentamente y esconderlo ahí...
Harry y Ron se voltearon al escuchar el tono colérico de Malfoy mientras ayudaban a Hermione a ponerse de pie.
- Pero imagínate esto... humano.- Tom se acerco amenazadoramente a Draco.- Tienes el poder de manipular a los vampiros que quieras, ser el amo de la muerte,... tu decidirás quien vive o muere...
El rubio mantuvo fija la mirada en el vampiro mientras Hermione lo miraba con angustia. En rostro de Draco fue tomando una expresión extraña, sus ojos brillaban de una manera turbia y que a Hermione le asusto. ¿no era lo que al principio quería Draco, el Poder?, ¿Acaso no se había entrenado con Arianrod para ser el mejor de los magos y obtener la gloria?.
Draco sonrió irónicamente y con un movimiento de la varita le arrebato el Medallón a Sirius. El chico desapareció y apareció en otro punto de la derrumbada habitación.
Harry y Ron sacaron sus varitas y apuntaron a Draco. Sirius por un momento lo miro perplejo pero también saco su varita.
- Draco... no...- murmuro Hermione.
El rubio se lamió los labios suavemente mientras recorría la mirada en cada uno de los vampiros quienes lo veían como alguna especie de próximo líder... el personaje que ocuparía el lugar de Leonard Malfoy.
El rubio inmediatamente levanto con ambas manos el medallón mientras murmuraba unas palabras. Harry entendió rápidamente que se trataba de magia antigua y lanzo un hechizo que se desvaneció al llegar a Draco.
El chico estaba sumergido en una burbuja de colores, parecida a la que tenia atrapada a Hermione cuando le estaban sacando el medallón. Sirius intento enviar otro hechizo pero nada sucedía....
Hermione se hinco desesperada, impotente de no poder detener a Draco... ¿qué había pasado con aquel abrazo?. ¿por qué era tan importante para Draco ser poderoso y no ser amado por ella?. Recordó el momento en que el le sonrió cuando ella abrió los ojos...
- Draco...- murmuro Hermione mientras cerraba fuertemente los ojos.
- ¡Hay que detenerlo!.- exclamo Ron pero los tres vampiros tomaron de las ropas a cada mago haciéndolos volar en los aires.
- ¡No!.- grito Hermione.- ¡Ron!. ¡Harry!.
Ron comenzó a luchar con el vampiro pero este había tomado táctica para sujetarlo fuertemente. En el empujón Harry había dejado caer su varita y Sirius se encontraba luchando con el otro vampiro estrellándose entre los muros.
El lugar tembló y Hermione miro horrorizada a Draco envuelto en luces de colores, con los ojos cerrados y apretando con sus manos el Medallón.
El medallón comenzó a iluminarse mientras Draco no dejaba de pronunciar palabras en un idioma extraño. Una grieta se formo frente al chico como si fuese un pasadizo dimensional. Los magos miraban asustados el efecto de la magia del Slytherin sin poder hacer nada para evitarlo puesto que los vampiros les impedían el paso.
Dentro de la grieta surgía una figura abominable, un demonio de altos cuernos negros y piel verde grisáceo y que tenia en sus manos un bastón hecho de fuego. Draco abrió los ojos y se encaro ante la criatura quien lo miro de forma burlona.
La voz de Draco ya no era la misma, ahora era ronca, extraña y se escuchaba como si fuese un eco, hablando en un idioma extraño. El demonio respondió a las frases del rubio bajo la mirada llorosa de Hermione.
Un hueso humano apareció a unos centímetros de Draco y este soltó el medallón para tomarlo. Una ráfaga de viento gélido invadió la habitación. Hermione gritaba el nombre del Slytherin, Harry, Ron y Sirius estaban petrificados ante la maquiavélica escena.
El demonio alzo su bastón y el medallón brillo con mas fuerza. Draco acaricio el diabólico objeto con el hueso y de este broto una luz negra que envolvió toda la habitación dejándola en oscuridad.
No se escucho mas nada... solo un silencio sepulcral se adueñaba de la atmósfera. Por alguna extraña razón nadie podía hablar, los ojos de los vampiros eran los únicos que brillaban en la oscuridad y no había restos de Draco y del demonio...
Luego de varios minutos, una pequeña luz fue apareciendo en medio de la sala iluminando poco a poco. Hermione se restregó los ojos con una mano y para su sorpresa vio que Draco yacía hincado con las palmas de las manos en las lozas frías de piedra.
Hermione se levanto y corrió hacia él, dejándose caer a un lado. La cabeza de Draco se alzo lentamente y la miro con los ojos empequeñecidos.
- Todo ha terminado...- dijo Draco en voz baja.
Hermione alzo una mano para tocarlo pero se detuvo.
- El Medallón ya no existe en este mundo... lo devolví...-dijo en tono cansado.
- ¿Qué hiciste?.- pregunto asustada la chica.
- Invoque al Guardia de los Infiernos y se lo entregue... no hubo necesidad de mas nada... solo lo envié a donde pertenecía...- Draco se sentó y abrazo a Hermione.
- P-pero yo creí...- Los ojos de Hermione se llenaron de lagrimas.
Draco no le permitió decir mas nada. Sus labios acariciaron lentamente a los de Hermione mientras ella aguantaba la respiración. El rubio la beso suavemente como si tuviera el tiempo suficiente para disfrutar de aquellos labios. Hermione cerro los ojos y abrazo con mas fuerza a Draco, permaneciendo sentados en el suelo y bajo la mirada atónita de los magos.
Los tres vampiros se alejaron de Harry, Ron y Sirius.
- ¿Qué sucede aquí?.- pregunto Harry con los ojos muy abiertos.
- El Medallón esta a salvo en su verdadero sitio...- Contesto Tom.- El lo ha devuelto al infierno.
- ¿Q-que...?- dijo atónito Ron.
- ¿Se les olvida que Malfoy tiene cualidades de vampiro?.- dijo Alexander.- Pudimos hablar mentalmente sin que ustedes se percataran.
- Malfoy sugirió que era mejor obligarles, por la fuerza, a no intervenir porque cabía la posibilidad de que el no regresara...-dijo Tom.- Por eso fingimos que les atacábamos, para distraerlos.
Harry miro a Draco pero este aun besaba a Hermione mientras le acariciaba su enmarañado cabello.
Ron se dio la vuelta y suspiro resignado. Sirius se acerco a Harry y le paso un brazo por los hombros.
- Nunca pensé que Malfoy tuviera muchos conocimientos de magia antigua... lo que hizo fue prácticamente un pacto con el Infierno.-dijo Sirius.- Pudo haber sido peligroso.
- El sabia que si nos decía el plan lo íbamos a impedir y mas que nada Hermione le hubiera suplicado que no lo hiciera, después de todo ella le... – el chico ojiverde trago saliva.- ama.
- Y Malfoy a ella....- dijo Sirius mirando a los dos chicos.
- Vamos Harry, Sirius...- dijo Ron.- Es hora de irnos a casa.
*-*-*-*-*-*-*-*
El tiempo había transcurrido... las hojas de los árboles caían en el frío otoño tapizando el suelo con una alfombra naranja y crujiente. El viento se llevaba unas cuantas a un destino sin retorno y los árboles eran testigos mudos de lo que acontecía alrededor.
Hermione caminaba encima de la improvisada alfombra, vestida con una túnica verde oscuro y el cabello recogido con un moño del mismo color. Los ojos miel de la chica observaban cautelosamente por entre los árboles pero no lograba ver nada sospechoso ni una sola huella de que alguien estuviera ahí.
La chica respiro profundamente y camino hacia un árbol donde su instinto le indicaba que algo había detrás de el... intentaba no hacer ruido con las hojas pero era casi imposible.
Su corazón latía rápidamente en un desesperado intento por contener los nervios pero sabia que en cualquier momento la tomarían sin aviso alguno.
- ¡Te tengo!.- se escucho una voz mientras unas manos la tomaban por detrás de la cintura haciéndola girar.
La chica dio un grito debido al susto.
- ¡Que facil eres de engañar!.- exclamo Draco entre risas y colocando su cabeza en un hombro de ella.- Estaba justo detrás de ti.
- Draco...- dijo la chica soltando el aire y tocándose el corazón.- Me has dado un buen susto....
El rubio siguió riéndose libremente y la beso en una mejilla sin soltarla de la cintura.
- ¿Sabias que esa inocencia tuya es la que me robo el corazón?.-dijo el chico dándole la vuelta para que quedaran frente a frente.
Hermione sonrió.
- Y yo me enamore de ti cuando me salvaste aquella vez en la biblioteca... algo en 'Gerard Calestagne' me hacia recordar a ti.
Draco la tomo suavemente de una mejilla y la acerco a su rostro. El chico deslizo sus labios por todo la cara de ella hasta que se topo con los labios de ella.
- Te amo...- Susurro Draco.
- Yo también Te Amo...- dijo Hermione abrazándolo del cuello.
Draco unió sus labios con los de ella en un beso de entrega y pasión. El Slytherin deslizaba sus pálidas manos por toda la cintura de Hermione haciendo estremecer a la chica con una euforia indescriptible.
- Que desagradable escena....- dijo una voz a unos metros de ellos.
Hermione y Draco se separaron volteando a mirar quien era el dueño de aquella voz..
- ¡Ron!.- exclamo Hermione. La gryffindor echo a correr hacia el pelirrojo y lo abrazo fuertemente.- ¿Cuándo llegaste?.
- Esta misma mañana y dispuse a venir a verte.- dijo el chico mirando de reojo a Draco. El rubio sonrió de lado y camino hacia ellos.
- ¡Vaya, vaya Weasley!.- dijo.- ¿Dónde has dejado a Potter?.
- Harry esta aun en América.- contesto Ron mirando a Hermione.- Ginny tuvo un partido de Quidditch contra el equipo de Los Ángeles... fue a darle ánimos.
- ¿Ánimos?.- dijo Draco al frente del pelirrojo.- Debes estar ciego para no darte cuenta que tu mejor amigo esta conquistando a tu hermana.
Ron hizo una mueca.
- ¿Por qué siempre me estas molestando?.-dijo.
- Draco no te molesta, Ron..- dijo Hermione con una sonrisa.
- ¿Y tu porque siempre estas de su lado?.- Ron la miro con el ceño fruncido.
- Weasley, es que eres un blanco fácil para todos mis comentarios.- Draco sonrió abiertamente y tomo a Hermione de una mano.- Pero eso no quiere decir que me de gusto que estés en mi casa.
- También es casa de Hermione...-dijo Ron con un gesto irónico.- Aunque aun sigo sin comprender porque aceptaste a venir a vivir aqui...- el pelirrojo miro fijamente a Hermione.
- El deber de una esposa es estar a lado de su esposo.-dijo la chica abrazando a Draco.
- Igual..- Ron se alzo de hombros.- Habiendo tantos pretendientes y tener que escoger al hurón.
Draco alzo una ceja.- Cuidado Weasley... puedo poner una trampa especial en la entrada de la casa cada vez que nos visites...
- A ti no te visito...- dijo Ron con los ojos empequeñecidos mientras sonreía burlonamente.- Es a ella a quien vengo a ver.
Draco echo a reír y se alzo de hombros.
- ¿Por qué cada vez que se ven tienen que discutir?.- dijo Hermione dándole un ligero golpe con la mano en los hombros de los chicos.
- El es quien me provoca.- dijo Ron con una media sonrisa.
- Claro, Weasley...- Draco alzo su mirada al cielo.
- En fin... aprovecho en esta ocasión para despedirme nuevamente.-dijo Ron.
- ¿A dónde vas esta vez?.- pregunto Hermione.
- Nuevo caso en la India. – dijo con la cabeza un poco baja.- El ministerio pide mi total apoyo en un mago que esta provocando alucinaciones en los muggles haciéndoles creer que es un Dios.
- Suena interesante...- dijo Hermione.
- Lo es... pero estaré ausente otra vez por dos meses aproximadamente.
- ¡Eso suena aun mas interesante!.- exclamo el rubio.- ¡No te veremos en mucho tiempo!.
Hermione le dio un ligero codazo a Draco y este soltó una risita.
- Me va a dar mucha tristeza que te vayas cuando apenas acabas de llegar a Inglaterra pero prometo escribirte muy seguido.
- Eso espero.-Ron se ajusto su capa.- Tengo una reunión en el Ministerio dentro de 30 minutos, apenas tengo tiempo para llegar asi que me tengo que ir.
Hermione abrazo fuertemente al pelirrojo.
- Mucha suerte y cuídate.
- Gracias, Hermione...- Ron le dio un beso en la mejilla.- Ten cuidado con el hurón, es traicionero.
Draco se cruzo de brazo y alzo una ceja a lo que Ron sonrió burlonamente.
- Nos vemos pronto..- dijo el chico mientras caminaba hacia atrás y agitando la mano.
Hermione agito la mano y Draco la tomo de la cintura por detrás.
- Ese Weasley...- gruño.- ¿Por qué siempre le dejas que venga a la casa?.
Hermione echo a reír.- Ustedes dos nunca cambiaran.
- Desde que supo que me iba a casar contigo no hace otra cosa que acosarme con sus tontos comentarios.- dijo Draco fingiendo ser mártir.
La chica lo tomo de una mejilla y le beso la nariz.
- Vamos a la casa Draco Malfoy porque ya es hora de la merienda.- La chica se aparto de Draco y corrió rumbo al interior de la casa.
Al entrar al lugar, Hermione sintió una suave calidez por todo el cuerpo.
Se respiraba un ambiente armonioso en aquella casa, la antigua potestad de los Malfoy había sido borrado en cuanto Draco regreso a su antiguo hogar deshaciéndose de todo lo que consideraba oscuro y diabólico. En la casa se abrieron la ventanas y la luz fue libre por primera vez, corriendo por todas las habitaciones de la casa. Las criaturas malignas fueron desaparecidas junto con todos los vestigios de magia negra que los Malfoy tenían guardado durante siglos como parte de la herencia familiar.
El Ministerio de Magia se hizo cargo de todos los pormenores de la espantosa experiencia con el Medallón de Hildegarde y Draco pudo recuperar su empleo en el departamento de Regularización de Magia, esta vez como quien era.
Harry Potter fue enviado a los Estados Unidos como entrenador de un programa de capacitación para alumnos americanos que deseaban ser aurores. Ron había sido enviado por dos meses a Japón donde conoció a una jugadora de quidditch del equipo nacional del Sol Naciente.
Sirius Black acepto trabajar como maestro de Defensa contra las Artes Oscuras en Hogwarts mientras Remus Lupin enseñaba Aritmancia.
Los vampiros Assamites regresaron a su natural habitat en aquel oscuro callejo de Londres, viendo pasar los días sin que hubiera un futuro para ellos... era solo vivir.
- ¿Qué merendaremos?.- dijo Draco interrumpiendo los recuerdos de Hermione y frotándose las manos mientras entraba a la sala de estar. Hermione se dio la vuelta y lo miro seria.
La chica se había parado justo frente al retrato de un hombre rubio y ojos azules vestido a la época, quien sonreía.
- Leonard...- susurro Hermione.- ¿por qué?.
- ¿No crees que fue mejor así?.- dijo Draco tomándola de los hombros.- Ahora él es libre....
- ¿Por qué tuvo que sacrificarse?.- Hermione bajo la mirada.
- Lo hizo por nosotros...- Draco la hizo girar quedando frente a frente.- Lo que él era no lo había deseado, solo fue una maldición en su vida, en el amor... en la familia.
- Vivir en la oscuridad...- murmuro.
- Cuando me enfrente al Demonio que guardaba la entrada al Infierno hice un pacto con él. Entregaría al medallón a cambio de que Leonard fuera libre...
- Y el demonio te dijo que eso no podía ser posible...
- Leonard no estaba muerto cuando se lo llevo el demonio que vigilaba los Poderes del medallón solo seria un esclavo... devolverlo con nosotros era imposible entonces no tuve mas remedio que pedirle que lo dejara morir...
- Eso no te lo reprocho él Draco...- Hermione se abrazo a Draco hundiendo su rostro en el pecho de el.- Estuvo de acuerdo...
- Leonard decía que gozaba su vida como vampiro pero en realidad el deseaba descansar, quería estar a lado de mi tátara tatarabuela Jacqueline, la mujer que le arrebataron cuando lo convirtieron en vampiro.
- Una vez me dijo que me parecía mucho a ella.- dijo la chica con los ojos nublados.
- Y era cierto... – Draco levanto el rostro de Hermione con una mano.- por lo menos en esos bellos ojos que adornan la candidez de tu rostro.
Hermione se sonrojo y bajo la mirada. Draco sonrió y la abrazo fuertemente.
- Es increíble que ya haya transcurrido dos años de todo lo sucedido...- dijo Hermione.
- Un año desde que te pedí matrimonio.- El chico respiro profundamente.- A veces pienso que si Karnsten nunca me hubiera mandado a vigilarte jamás habría aprendido a amarte.- dijo Draco serio.
Hermione lo miro fijo.
- Eres todo lo que tengo Hermione...- Draco acaricio suavemente sus labios con los de ella.
- En realidad ya no seré lo único que vas a tener, Draco.-dijo la chica entre besos.
- ¿A que te refieres?.-dijo sin dejar de besarla.
- A que pronto vamos a ser padres...- contesto.
Draco se detuvo en seco y contemplo atónito a Hermione. La chica se mantuvo seria unos segundos y sonrió abiertamente.
- ¿Es eso cierto?.- dijo el chico con los ojos muy abiertos.
- Si... – contesto sonrojada.- Y es un varón...
- ¡Un varón!.- exclamo.
Draco levanto a Hermione por la cintura y la alzo. La chica soltó a reírse.
- Mi primer heredero...- Draco hizo que Hermione se resbalara por entre sus brazos hasta que ella quedo a la altura de el.- Eres grandiosa...
Hermione se sujeto en el cuello de el mientras el la balanceaba en el aire.
- ¿Cómo vamos a llamarle?.- pregunto ella.
- Quisiera....- Draco la dejo suavemente en el suelo.- no se que prefieras pero me niego a que lo llames como Potter o Weasley.
- ¿Estas de acuerdo que se llame Leonard?.- dijo la chica con una tímida sonrisa.
Draco respiro profundamente y la abrazo.
- Estoy de acuerdo... se lo debemos...
Hermione y Draco se hundieron en un tierno beso mientras la mano de él acariciaba el abdomen de su esposa...
Aquel ser pequeño que iba creciendo poco a poco en ella era el símbolo de un sentimiento fuerte y sincero entre una serpiente y un león.
Con la llegada del pequeño Leonard se dibujaba un futuro lleno de esperanzas y de amor que rompería definitivamente con las cadenas de odio y represión que los Malfoy habían sufrido de generación en generación.
FIN.
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Notas de la Autora:
Capitulo 20 y doy por finalizado este fanfic. Ojala que a muchas de ustedes les haya agradado el final, espero que no haya sido muy rudo o muy cursi.
Sin embargo espero sus comentarios, ya sea por medio de reviews o a mi correo kasaes@hotmail.com o jaina@jaina.com.mx .
Quiero agradecer en especial a mi amiga Lumen1 quien particularmente me ha apoyado con sus comentarios y recomendaciones durante largas sesiones en el mesenger. Aunque claro tambien tengo que agradecer a todas las lectoras que con sus reviews me animaron a continuar escribiendo pues para un escritor es muy importante sentir que su obra esta sirviendo de algo y en este caso ha servido para entretenerles.
Para cerrar con este fic recomiendo que escuchen la cancion de Evanescense "My Inmortal". Aunque aprovecho para recomendarles todo el CD, a mi me fascina (yo lo compre).
Si algunas de ustedes se ha quedado con alguna duda en particular por favor manden un correo y prometo que en un epilogo les resuelvo todas sus dudas (una vez que haya reunido suficientes, claro).
Muchas gracias por todo su apoyo chicas y recuerden que aun tengo en desarrollo el fic de "Draconis", una historia de romance entre Draco y Hermione.
http://www.fanfiction.net/read.php?storyid=1534415
Tambien quiero comentarles que tengo en proyecto un nuevo fic que tambien sera una historia entre Draco y Hermione. No se porque siento una fascinacion por esta pareja y es que ademas se me hace muchisimo mas facil escribir de ellos que de cualquier otra pareja, aunque ya algunos mas me han recomendado escribir fics de Lily y James Potter. No se, veamos que pasa en los siguientes meses.
Todavia no tengo fecha para lanzar mi nuevo fic, estaba esperando a que terminara el del Medallon para que lo pudiera publicar pero como he tenido algunos pendientes decidi esperar un poco para actualizarme con Draconis.
Bien, pues entonces despedimos un fic mas. Les agradesco nuevamente todo los reviews, con sus criticas, comentarios, pensamientos... cada una de ustedes entrego una parte de su tiempo y se los agradesco.
Saludos y Feliz Año nuevo!!.
Atte
J@ina
Terminado:
02/Enero/2004
FINAL
Hermione Granger yacía frágil entre los brazos de Draco Malfoy. En la mente del rubio se desarrollaban toda una serie de alternativas para salvarle la vida pero la joven estaba demasiado débil para poder sobrevivir un viaje.
Todo resultaba un choque a sus sentidos. Leonard Malfoy, su tátara tatarabuelo había desaparecido junto con el demonio que era el cuidador del poder del Medallón de Hildegarde. Eso sacudía a Draco con una fuerte impotencia y rabia hacia todo.
Por vez primera había sentido un acercamiento amistoso con alguien de su misma sangre, aunque fuera un vampiro. Todo había sucedido tan rápido... ¿cómo había llegado hasta ese punto?. ¿cómo había permitido que Hermione pagara por todas las consecuencias?. ¿por qué ella y no el era quien estaba muriendo?.
Tres de los vampiros sobrevivientes, Tom Beckerman, Jak Sutter y Alexander Astor se acercaron a los magos. Sirius levanto su rostro y los miro con recelo.
- Puedo sentir que ella esta muriendo...- dijo Tom. El vampiro de cabello largo y negro toco a Hermione en la mejilla.
- Pero hay una manera de hacer que viva....- susurro Jak Sutter. Un vampiro de ojos azules y cabello gris.
- Con la sangre del inmortal..- dijo Alexander con un brillo rojo en los ojos.
- ¿A que se refieren?...- Pregunto Ron desconcertado.
- No voy a permitir que Hermione se convierta en...- Draco apretó los labios en una mueca mientras miraba a Hermione con el rostro gris.
- Quieren que ella beba de su sangre...- dijo Harry a Ron.
- Convirtiéndose en un ser de la oscuridad.- agrego Sirius.
- Ella podría vivir...- dijo Tom.
- Eso no es vivir...- dijo Draco con un brillo de enojo en los ojos.- es vivir en un cuerpo sin alma.... morir en vida.
Harry miro a Hermione y la tomo de una mano. La chica tenia las manos heladas, su pulso cada vez era menor y el chico de gryffindor sabia que tenia pocas posibilidades de vivir.
- Hermione no puede morir...- dijo Ron tomándose de los cabellos en un acto de desesperación.
Sirius miro atentamente a los vampiros que permanecían alrededor. Los pálidos rostros de las criaturas lucían relajadas ante la próxima muerte de una persona.... sangre de vampiro... la única manera de salvar a Hermione era hacerla probar unas gotas... ¿pero era justo para ella hacerla vivir en la oscuridad?, ¿ella querría un destino asi?. El mago de cabellos negros se alejo del resto internándose en sus propios pensamientos.
Draco veía con rabia como la vida de Hermione se escapa mientras la sostenía en brazos, Harry buscaba en su mente una rápida manera de devolverle un poco de vitalidad por lo menos suficiente para que ella pudiera ir a un hospital mágico y Ron lloraba interiormente por la suerte que estaba corriendo su amiga... ¿qué podía hacer por ella?.
El Slytherin miraba cada tramo de Hermione, su cabello enmarañado y sucio, su rostro pálido y gris con algunos moretones, su cuerpo delgado y frío,... sus labios... pero no podía ver sus ojos... no podía ver el color miel de aquellos ojos que le habían cautivado desde el primer día que la vio en el Ministerio de Magia.
Por primera vez no veía a mas nadie a su alrededor... no le importaba si Potter y Weasley le veían débil... lo único que deseaba era tenerla, que abriera los ojos y le sonriera como le hizo la ultima vez que la vio...
Ni siquiera la había besado... solo un patético beso robado el día que salió del laberinto... ¿a que sabrían aquellos dulces labios?....
- Malfoy...- dijo Sirius dándose la vuelta y acercándose nuevamente a ellos.
Draco levanto la mirada hacia Sirius.
- Hermione necesita una poción que la haga rehabilitarse en poco tiempo, ella no soportara un viaje, sea por transportador, por escoba o por aparición.
- ¿Puedes decirme algo que no sepa Black?.- pregunto Draco con el ceño fruncido.
- ¿En que has pensado?...-dijo Harry sin entender hasta donde quería llegar Sirius.
- Eres pariente de Leonard Malfoy... tienes sangre de vampiro pero eres mortal...
Los ojos de Harry se abrieron y Draco soltó el aire como si hubiera estado aguantando las ganas de respirar.
- ¿Crees que la sangre de Malfoy es la solución?.- pregunto Ron,-.
- Pienso que su sangre tiene las propiedades de un vampiro. Ustedes pueden comprobarlo...- El mago rodeo a Draco.- No tiene una sola herida grave a pesar de los hechizos que le lanzo Karnsten..
- La teoría de este mago no es descabellada...-dijo Tom, un vampiro.- No podrá darle inmortalidad a esta pequeña pero podrá curarle. Su sangre de vampiro lo puede hacer...
Sirius miro fijamente a Draco.
- Vamos a intentarlo...-dijo el rubio.
Los tres vampiros sonrieron entre si pero entre Harry y Ron hubieron miradas de desconcierto.
- ¿Qué efectos secundarios va a tener Hermione si ella bebe de tu sangre?.- dijo Harry siguiendo a Draco cuando el intentaba dejarla sobre una pila de piedras a manera de ceremonia.
Draco se volteo.
- No lo se Potter... talvez se vuelva como yo.-dijo con una media sonrisa.
- Eso ni pensarlo...-dijo Ron entre dientes.- Suficiente tenemos con tu existencia.
- Lo que podría suceder es que ella herede algunas cualidades vampiricas como la afinación de sus sentidos, ver en la oscuridad, volar.... – dijo Jak, otro vampiro.- pero seguirá conservando su alma y mortalidad.
Draco no se detuvo mas. Apresuradamente se deshizo de las mangas de su camisa y con la punta de una lanza se corto suavemente su muñeca. Harry ayudo en abrir la boca de la chica y con total desagrado Ron vio como las gotas rojas caían sobre los labios y lengua de Hermione. Sirius aguantaba la respiración deseando en el fondo de su corazón que resultara...
Después de unas cuantas gotas, Draco retiro su muñeca. Los magos miraban a Hermione esperando alguna reacción positiva... pero nada sucedía.
Draco sentía que el suelo temblaba bajo sus pies pero en realidad era el quien estaba temblando. Harry cerro los ojos implorando que su amiga despertara, Ron le dio la espalda mientras reprimía algunas lagrimas.
Pero algo sucedió...
El color de Hermione cambio de pálido a rosa y la herida en su abdomen fue poco a poco desapareciendo bajo la mirada atónita de Draco y Sirius. Este ultimo sacudió a Harry para que pudiese ver lo que le estaba sucediendo a la chica.
Los vampiros sonrieron, podían oír los latidos de corazón de Hermione y el suave ritmo de su respiración. Pronto, la temperatura corporal fue entibiándose mientras que su sangre fluía con velocidad por todo su cuerpo.
Los ojos color miel de la chica se abrieron posándose sobre los ojos grises de Draco.
El rubio la ayudo a sentarse y la abrazo tiernamente, acelerando los latidos del corazón de Hermione. Los brazos de ella se enredaron alrededor del cuello de Draco mientras el le acariciaba su rostro con la nariz.
Hermione coloco una mano en una mejilla del rubio acariciándole. Harry se acerco a la pareja como si no creyese lo que estaba viendo. Hermione lo volteo a mirar y sus ojos chispearon con una eufórica alegría. Ron camino apresuradamente a ella y se quedo observándola como si aquello fuera un sueño. Draco se aparto de Hermione y los dos gryffindor se abalanzaron sobre Hermione abrazándola.
Sirius volteo a mirar a Draco y ese le sostuvo la mirada mientras en sus labios se dibujaba una sonrisa. El rubio fue bajando la mirada hasta toparse con el medallón de Hildegarde sujetado por una mano de Black.
El mago levanto el medallón y los vampiros se acercaron a ellos.
- Habrá que destruirle.- dijo Sirius.
- ¿Para que destruirle?. Es una poderosa arma en contra de los enemigos...-dijo Tom.
- ¿Acaso no fue suficiente con lo que viste esta noche?.- Reclamo Sirius.
- Los vampiros carecemo del sentimentalismo humano...- contesto el vampiro.
- ¡No seas estupido Tom!. ¿Qué va a pasar si es TU enemigo quien consigue el medallón?.- dijo Draco entre dientes.- ¿Quieres que lo pongamos en tu lánguido cuerpo?. Puedo abrirte el estomago lentamente y esconderlo ahí...
Harry y Ron se voltearon al escuchar el tono colérico de Malfoy mientras ayudaban a Hermione a ponerse de pie.
- Pero imagínate esto... humano.- Tom se acerco amenazadoramente a Draco.- Tienes el poder de manipular a los vampiros que quieras, ser el amo de la muerte,... tu decidirás quien vive o muere...
El rubio mantuvo fija la mirada en el vampiro mientras Hermione lo miraba con angustia. En rostro de Draco fue tomando una expresión extraña, sus ojos brillaban de una manera turbia y que a Hermione le asusto. ¿no era lo que al principio quería Draco, el Poder?, ¿Acaso no se había entrenado con Arianrod para ser el mejor de los magos y obtener la gloria?.
Draco sonrió irónicamente y con un movimiento de la varita le arrebato el Medallón a Sirius. El chico desapareció y apareció en otro punto de la derrumbada habitación.
Harry y Ron sacaron sus varitas y apuntaron a Draco. Sirius por un momento lo miro perplejo pero también saco su varita.
- Draco... no...- murmuro Hermione.
El rubio se lamió los labios suavemente mientras recorría la mirada en cada uno de los vampiros quienes lo veían como alguna especie de próximo líder... el personaje que ocuparía el lugar de Leonard Malfoy.
El rubio inmediatamente levanto con ambas manos el medallón mientras murmuraba unas palabras. Harry entendió rápidamente que se trataba de magia antigua y lanzo un hechizo que se desvaneció al llegar a Draco.
El chico estaba sumergido en una burbuja de colores, parecida a la que tenia atrapada a Hermione cuando le estaban sacando el medallón. Sirius intento enviar otro hechizo pero nada sucedía....
Hermione se hinco desesperada, impotente de no poder detener a Draco... ¿qué había pasado con aquel abrazo?. ¿por qué era tan importante para Draco ser poderoso y no ser amado por ella?. Recordó el momento en que el le sonrió cuando ella abrió los ojos...
- Draco...- murmuro Hermione mientras cerraba fuertemente los ojos.
- ¡Hay que detenerlo!.- exclamo Ron pero los tres vampiros tomaron de las ropas a cada mago haciéndolos volar en los aires.
- ¡No!.- grito Hermione.- ¡Ron!. ¡Harry!.
Ron comenzó a luchar con el vampiro pero este había tomado táctica para sujetarlo fuertemente. En el empujón Harry había dejado caer su varita y Sirius se encontraba luchando con el otro vampiro estrellándose entre los muros.
El lugar tembló y Hermione miro horrorizada a Draco envuelto en luces de colores, con los ojos cerrados y apretando con sus manos el Medallón.
El medallón comenzó a iluminarse mientras Draco no dejaba de pronunciar palabras en un idioma extraño. Una grieta se formo frente al chico como si fuese un pasadizo dimensional. Los magos miraban asustados el efecto de la magia del Slytherin sin poder hacer nada para evitarlo puesto que los vampiros les impedían el paso.
Dentro de la grieta surgía una figura abominable, un demonio de altos cuernos negros y piel verde grisáceo y que tenia en sus manos un bastón hecho de fuego. Draco abrió los ojos y se encaro ante la criatura quien lo miro de forma burlona.
La voz de Draco ya no era la misma, ahora era ronca, extraña y se escuchaba como si fuese un eco, hablando en un idioma extraño. El demonio respondió a las frases del rubio bajo la mirada llorosa de Hermione.
Un hueso humano apareció a unos centímetros de Draco y este soltó el medallón para tomarlo. Una ráfaga de viento gélido invadió la habitación. Hermione gritaba el nombre del Slytherin, Harry, Ron y Sirius estaban petrificados ante la maquiavélica escena.
El demonio alzo su bastón y el medallón brillo con mas fuerza. Draco acaricio el diabólico objeto con el hueso y de este broto una luz negra que envolvió toda la habitación dejándola en oscuridad.
No se escucho mas nada... solo un silencio sepulcral se adueñaba de la atmósfera. Por alguna extraña razón nadie podía hablar, los ojos de los vampiros eran los únicos que brillaban en la oscuridad y no había restos de Draco y del demonio...
Luego de varios minutos, una pequeña luz fue apareciendo en medio de la sala iluminando poco a poco. Hermione se restregó los ojos con una mano y para su sorpresa vio que Draco yacía hincado con las palmas de las manos en las lozas frías de piedra.
Hermione se levanto y corrió hacia él, dejándose caer a un lado. La cabeza de Draco se alzo lentamente y la miro con los ojos empequeñecidos.
- Todo ha terminado...- dijo Draco en voz baja.
Hermione alzo una mano para tocarlo pero se detuvo.
- El Medallón ya no existe en este mundo... lo devolví...-dijo en tono cansado.
- ¿Qué hiciste?.- pregunto asustada la chica.
- Invoque al Guardia de los Infiernos y se lo entregue... no hubo necesidad de mas nada... solo lo envié a donde pertenecía...- Draco se sentó y abrazo a Hermione.
- P-pero yo creí...- Los ojos de Hermione se llenaron de lagrimas.
Draco no le permitió decir mas nada. Sus labios acariciaron lentamente a los de Hermione mientras ella aguantaba la respiración. El rubio la beso suavemente como si tuviera el tiempo suficiente para disfrutar de aquellos labios. Hermione cerro los ojos y abrazo con mas fuerza a Draco, permaneciendo sentados en el suelo y bajo la mirada atónita de los magos.
Los tres vampiros se alejaron de Harry, Ron y Sirius.
- ¿Qué sucede aquí?.- pregunto Harry con los ojos muy abiertos.
- El Medallón esta a salvo en su verdadero sitio...- Contesto Tom.- El lo ha devuelto al infierno.
- ¿Q-que...?- dijo atónito Ron.
- ¿Se les olvida que Malfoy tiene cualidades de vampiro?.- dijo Alexander.- Pudimos hablar mentalmente sin que ustedes se percataran.
- Malfoy sugirió que era mejor obligarles, por la fuerza, a no intervenir porque cabía la posibilidad de que el no regresara...-dijo Tom.- Por eso fingimos que les atacábamos, para distraerlos.
Harry miro a Draco pero este aun besaba a Hermione mientras le acariciaba su enmarañado cabello.
Ron se dio la vuelta y suspiro resignado. Sirius se acerco a Harry y le paso un brazo por los hombros.
- Nunca pensé que Malfoy tuviera muchos conocimientos de magia antigua... lo que hizo fue prácticamente un pacto con el Infierno.-dijo Sirius.- Pudo haber sido peligroso.
- El sabia que si nos decía el plan lo íbamos a impedir y mas que nada Hermione le hubiera suplicado que no lo hiciera, después de todo ella le... – el chico ojiverde trago saliva.- ama.
- Y Malfoy a ella....- dijo Sirius mirando a los dos chicos.
- Vamos Harry, Sirius...- dijo Ron.- Es hora de irnos a casa.
*-*-*-*-*-*-*-*
El tiempo había transcurrido... las hojas de los árboles caían en el frío otoño tapizando el suelo con una alfombra naranja y crujiente. El viento se llevaba unas cuantas a un destino sin retorno y los árboles eran testigos mudos de lo que acontecía alrededor.
Hermione caminaba encima de la improvisada alfombra, vestida con una túnica verde oscuro y el cabello recogido con un moño del mismo color. Los ojos miel de la chica observaban cautelosamente por entre los árboles pero no lograba ver nada sospechoso ni una sola huella de que alguien estuviera ahí.
La chica respiro profundamente y camino hacia un árbol donde su instinto le indicaba que algo había detrás de el... intentaba no hacer ruido con las hojas pero era casi imposible.
Su corazón latía rápidamente en un desesperado intento por contener los nervios pero sabia que en cualquier momento la tomarían sin aviso alguno.
- ¡Te tengo!.- se escucho una voz mientras unas manos la tomaban por detrás de la cintura haciéndola girar.
La chica dio un grito debido al susto.
- ¡Que facil eres de engañar!.- exclamo Draco entre risas y colocando su cabeza en un hombro de ella.- Estaba justo detrás de ti.
- Draco...- dijo la chica soltando el aire y tocándose el corazón.- Me has dado un buen susto....
El rubio siguió riéndose libremente y la beso en una mejilla sin soltarla de la cintura.
- ¿Sabias que esa inocencia tuya es la que me robo el corazón?.-dijo el chico dándole la vuelta para que quedaran frente a frente.
Hermione sonrió.
- Y yo me enamore de ti cuando me salvaste aquella vez en la biblioteca... algo en 'Gerard Calestagne' me hacia recordar a ti.
Draco la tomo suavemente de una mejilla y la acerco a su rostro. El chico deslizo sus labios por todo la cara de ella hasta que se topo con los labios de ella.
- Te amo...- Susurro Draco.
- Yo también Te Amo...- dijo Hermione abrazándolo del cuello.
Draco unió sus labios con los de ella en un beso de entrega y pasión. El Slytherin deslizaba sus pálidas manos por toda la cintura de Hermione haciendo estremecer a la chica con una euforia indescriptible.
- Que desagradable escena....- dijo una voz a unos metros de ellos.
Hermione y Draco se separaron volteando a mirar quien era el dueño de aquella voz..
- ¡Ron!.- exclamo Hermione. La gryffindor echo a correr hacia el pelirrojo y lo abrazo fuertemente.- ¿Cuándo llegaste?.
- Esta misma mañana y dispuse a venir a verte.- dijo el chico mirando de reojo a Draco. El rubio sonrió de lado y camino hacia ellos.
- ¡Vaya, vaya Weasley!.- dijo.- ¿Dónde has dejado a Potter?.
- Harry esta aun en América.- contesto Ron mirando a Hermione.- Ginny tuvo un partido de Quidditch contra el equipo de Los Ángeles... fue a darle ánimos.
- ¿Ánimos?.- dijo Draco al frente del pelirrojo.- Debes estar ciego para no darte cuenta que tu mejor amigo esta conquistando a tu hermana.
Ron hizo una mueca.
- ¿Por qué siempre me estas molestando?.-dijo.
- Draco no te molesta, Ron..- dijo Hermione con una sonrisa.
- ¿Y tu porque siempre estas de su lado?.- Ron la miro con el ceño fruncido.
- Weasley, es que eres un blanco fácil para todos mis comentarios.- Draco sonrió abiertamente y tomo a Hermione de una mano.- Pero eso no quiere decir que me de gusto que estés en mi casa.
- También es casa de Hermione...-dijo Ron con un gesto irónico.- Aunque aun sigo sin comprender porque aceptaste a venir a vivir aqui...- el pelirrojo miro fijamente a Hermione.
- El deber de una esposa es estar a lado de su esposo.-dijo la chica abrazando a Draco.
- Igual..- Ron se alzo de hombros.- Habiendo tantos pretendientes y tener que escoger al hurón.
Draco alzo una ceja.- Cuidado Weasley... puedo poner una trampa especial en la entrada de la casa cada vez que nos visites...
- A ti no te visito...- dijo Ron con los ojos empequeñecidos mientras sonreía burlonamente.- Es a ella a quien vengo a ver.
Draco echo a reír y se alzo de hombros.
- ¿Por qué cada vez que se ven tienen que discutir?.- dijo Hermione dándole un ligero golpe con la mano en los hombros de los chicos.
- El es quien me provoca.- dijo Ron con una media sonrisa.
- Claro, Weasley...- Draco alzo su mirada al cielo.
- En fin... aprovecho en esta ocasión para despedirme nuevamente.-dijo Ron.
- ¿A dónde vas esta vez?.- pregunto Hermione.
- Nuevo caso en la India. – dijo con la cabeza un poco baja.- El ministerio pide mi total apoyo en un mago que esta provocando alucinaciones en los muggles haciéndoles creer que es un Dios.
- Suena interesante...- dijo Hermione.
- Lo es... pero estaré ausente otra vez por dos meses aproximadamente.
- ¡Eso suena aun mas interesante!.- exclamo el rubio.- ¡No te veremos en mucho tiempo!.
Hermione le dio un ligero codazo a Draco y este soltó una risita.
- Me va a dar mucha tristeza que te vayas cuando apenas acabas de llegar a Inglaterra pero prometo escribirte muy seguido.
- Eso espero.-Ron se ajusto su capa.- Tengo una reunión en el Ministerio dentro de 30 minutos, apenas tengo tiempo para llegar asi que me tengo que ir.
Hermione abrazo fuertemente al pelirrojo.
- Mucha suerte y cuídate.
- Gracias, Hermione...- Ron le dio un beso en la mejilla.- Ten cuidado con el hurón, es traicionero.
Draco se cruzo de brazo y alzo una ceja a lo que Ron sonrió burlonamente.
- Nos vemos pronto..- dijo el chico mientras caminaba hacia atrás y agitando la mano.
Hermione agito la mano y Draco la tomo de la cintura por detrás.
- Ese Weasley...- gruño.- ¿Por qué siempre le dejas que venga a la casa?.
Hermione echo a reír.- Ustedes dos nunca cambiaran.
- Desde que supo que me iba a casar contigo no hace otra cosa que acosarme con sus tontos comentarios.- dijo Draco fingiendo ser mártir.
La chica lo tomo de una mejilla y le beso la nariz.
- Vamos a la casa Draco Malfoy porque ya es hora de la merienda.- La chica se aparto de Draco y corrió rumbo al interior de la casa.
Al entrar al lugar, Hermione sintió una suave calidez por todo el cuerpo.
Se respiraba un ambiente armonioso en aquella casa, la antigua potestad de los Malfoy había sido borrado en cuanto Draco regreso a su antiguo hogar deshaciéndose de todo lo que consideraba oscuro y diabólico. En la casa se abrieron la ventanas y la luz fue libre por primera vez, corriendo por todas las habitaciones de la casa. Las criaturas malignas fueron desaparecidas junto con todos los vestigios de magia negra que los Malfoy tenían guardado durante siglos como parte de la herencia familiar.
El Ministerio de Magia se hizo cargo de todos los pormenores de la espantosa experiencia con el Medallón de Hildegarde y Draco pudo recuperar su empleo en el departamento de Regularización de Magia, esta vez como quien era.
Harry Potter fue enviado a los Estados Unidos como entrenador de un programa de capacitación para alumnos americanos que deseaban ser aurores. Ron había sido enviado por dos meses a Japón donde conoció a una jugadora de quidditch del equipo nacional del Sol Naciente.
Sirius Black acepto trabajar como maestro de Defensa contra las Artes Oscuras en Hogwarts mientras Remus Lupin enseñaba Aritmancia.
Los vampiros Assamites regresaron a su natural habitat en aquel oscuro callejo de Londres, viendo pasar los días sin que hubiera un futuro para ellos... era solo vivir.
- ¿Qué merendaremos?.- dijo Draco interrumpiendo los recuerdos de Hermione y frotándose las manos mientras entraba a la sala de estar. Hermione se dio la vuelta y lo miro seria.
La chica se había parado justo frente al retrato de un hombre rubio y ojos azules vestido a la época, quien sonreía.
- Leonard...- susurro Hermione.- ¿por qué?.
- ¿No crees que fue mejor así?.- dijo Draco tomándola de los hombros.- Ahora él es libre....
- ¿Por qué tuvo que sacrificarse?.- Hermione bajo la mirada.
- Lo hizo por nosotros...- Draco la hizo girar quedando frente a frente.- Lo que él era no lo había deseado, solo fue una maldición en su vida, en el amor... en la familia.
- Vivir en la oscuridad...- murmuro.
- Cuando me enfrente al Demonio que guardaba la entrada al Infierno hice un pacto con él. Entregaría al medallón a cambio de que Leonard fuera libre...
- Y el demonio te dijo que eso no podía ser posible...
- Leonard no estaba muerto cuando se lo llevo el demonio que vigilaba los Poderes del medallón solo seria un esclavo... devolverlo con nosotros era imposible entonces no tuve mas remedio que pedirle que lo dejara morir...
- Eso no te lo reprocho él Draco...- Hermione se abrazo a Draco hundiendo su rostro en el pecho de el.- Estuvo de acuerdo...
- Leonard decía que gozaba su vida como vampiro pero en realidad el deseaba descansar, quería estar a lado de mi tátara tatarabuela Jacqueline, la mujer que le arrebataron cuando lo convirtieron en vampiro.
- Una vez me dijo que me parecía mucho a ella.- dijo la chica con los ojos nublados.
- Y era cierto... – Draco levanto el rostro de Hermione con una mano.- por lo menos en esos bellos ojos que adornan la candidez de tu rostro.
Hermione se sonrojo y bajo la mirada. Draco sonrió y la abrazo fuertemente.
- Es increíble que ya haya transcurrido dos años de todo lo sucedido...- dijo Hermione.
- Un año desde que te pedí matrimonio.- El chico respiro profundamente.- A veces pienso que si Karnsten nunca me hubiera mandado a vigilarte jamás habría aprendido a amarte.- dijo Draco serio.
Hermione lo miro fijo.
- Eres todo lo que tengo Hermione...- Draco acaricio suavemente sus labios con los de ella.
- En realidad ya no seré lo único que vas a tener, Draco.-dijo la chica entre besos.
- ¿A que te refieres?.-dijo sin dejar de besarla.
- A que pronto vamos a ser padres...- contesto.
Draco se detuvo en seco y contemplo atónito a Hermione. La chica se mantuvo seria unos segundos y sonrió abiertamente.
- ¿Es eso cierto?.- dijo el chico con los ojos muy abiertos.
- Si... – contesto sonrojada.- Y es un varón...
- ¡Un varón!.- exclamo.
Draco levanto a Hermione por la cintura y la alzo. La chica soltó a reírse.
- Mi primer heredero...- Draco hizo que Hermione se resbalara por entre sus brazos hasta que ella quedo a la altura de el.- Eres grandiosa...
Hermione se sujeto en el cuello de el mientras el la balanceaba en el aire.
- ¿Cómo vamos a llamarle?.- pregunto ella.
- Quisiera....- Draco la dejo suavemente en el suelo.- no se que prefieras pero me niego a que lo llames como Potter o Weasley.
- ¿Estas de acuerdo que se llame Leonard?.- dijo la chica con una tímida sonrisa.
Draco respiro profundamente y la abrazo.
- Estoy de acuerdo... se lo debemos...
Hermione y Draco se hundieron en un tierno beso mientras la mano de él acariciaba el abdomen de su esposa...
Aquel ser pequeño que iba creciendo poco a poco en ella era el símbolo de un sentimiento fuerte y sincero entre una serpiente y un león.
Con la llegada del pequeño Leonard se dibujaba un futuro lleno de esperanzas y de amor que rompería definitivamente con las cadenas de odio y represión que los Malfoy habían sufrido de generación en generación.
FIN.
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Notas de la Autora:
Capitulo 20 y doy por finalizado este fanfic. Ojala que a muchas de ustedes les haya agradado el final, espero que no haya sido muy rudo o muy cursi.
Sin embargo espero sus comentarios, ya sea por medio de reviews o a mi correo kasaes@hotmail.com o jaina@jaina.com.mx .
Quiero agradecer en especial a mi amiga Lumen1 quien particularmente me ha apoyado con sus comentarios y recomendaciones durante largas sesiones en el mesenger. Aunque claro tambien tengo que agradecer a todas las lectoras que con sus reviews me animaron a continuar escribiendo pues para un escritor es muy importante sentir que su obra esta sirviendo de algo y en este caso ha servido para entretenerles.
Para cerrar con este fic recomiendo que escuchen la cancion de Evanescense "My Inmortal". Aunque aprovecho para recomendarles todo el CD, a mi me fascina (yo lo compre).
Si algunas de ustedes se ha quedado con alguna duda en particular por favor manden un correo y prometo que en un epilogo les resuelvo todas sus dudas (una vez que haya reunido suficientes, claro).
Muchas gracias por todo su apoyo chicas y recuerden que aun tengo en desarrollo el fic de "Draconis", una historia de romance entre Draco y Hermione.
http://www.fanfiction.net/read.php?storyid=1534415
Tambien quiero comentarles que tengo en proyecto un nuevo fic que tambien sera una historia entre Draco y Hermione. No se porque siento una fascinacion por esta pareja y es que ademas se me hace muchisimo mas facil escribir de ellos que de cualquier otra pareja, aunque ya algunos mas me han recomendado escribir fics de Lily y James Potter. No se, veamos que pasa en los siguientes meses.
Todavia no tengo fecha para lanzar mi nuevo fic, estaba esperando a que terminara el del Medallon para que lo pudiera publicar pero como he tenido algunos pendientes decidi esperar un poco para actualizarme con Draconis.
Bien, pues entonces despedimos un fic mas. Les agradesco nuevamente todo los reviews, con sus criticas, comentarios, pensamientos... cada una de ustedes entrego una parte de su tiempo y se los agradesco.
Saludos y Feliz Año nuevo!!.
Atte
J@ina
Terminado:
02/Enero/2004