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Capitulo 1: A un paso del reencuentro

En la fría Inglaterra, en una casa grande de piedra rodeada de enredaderas cubiertas de nieve, una joven de cabellos ondulados y espesos, estaba recostada en su cama, con la mirada perdida en la inmensidad del techo. Estaba recordando, cuanto hacía que había terminado su séptimo año en la escuela Hogwarts de Magia y Hechicería, donde había pasado los mejores años de su vida, los mas divertidos, los más interesantes y los mas arriesgados también. Pero eso ya había quedado atrás, hace ya 6 años, que había vuelto a su casa, a su mundo muggle, donde todos los días eran iguales, y donde no existía la magia, ni nadie que su supiera de su existencia.

En Hogwarts había conocido a gente maravillosa. Profesores, magos, fantasmas, al grandioso director Dumbledore, y lo más importante a sus mejores amigos, Harry y Ron... Ron, hace tanto que no sabía de él...

- Con Harry hablé la semana pasada -pensó.- pero de Ron hace más de un año que no sé nada, y no me atrevo a preguntarle a Harry..

Con Ron se habían hecho amigos, pero no como con Harry, ya que con Ron pasaban casi todo el tiempo peleándose, aunque ella no podía negar que sentía algo por él, pero no estaba muy segura de que fuera. Lo que daría por volver a verlo, por encontrarse con él y decirle lo que nunca se había animado a decirle: lo mucho que lo quería. Y ahora no tenía esperanza de confesarle sus sentimientos. Cada noche se preguntaba que sería de Ron, y los ojos se le llenaban de lágrimas al imaginar a Ron de novio con otra chica, siempre lo había negado, pero lo que sentía por Ron era algo más que amistad: era amor.

En ese momento, tocaron la puerta de la habitación y la madre de Hermione entro silenciosamente.

- Hermione, tienes una llamada, es Harry.- le dijo. Hermione le agradeció y su madre abandonó el cuarto.

- ¿Hola?- dijo Hermione, al tomar el tubo del teléfono.

- Hola, Hermione, ¿cómo estas?- le preguntó Harry, del otro lado.

- Bien, ¿y tu Harry?

- También bien. Escucha, Hermione te llamaba para decirte si quieres salir a tomar algo.

- ¿Quiénes van?

- Ya sabes, los mismos de siempre, Parvati, Lavender, Seamus, Dean, Neville y yo, ¿quieres venir?

- No tengo ánimos, Harry...

- Pero, Hermione todos los días estas encerrada en tu habitación, tienes que despejarte, ¿sabes?

- Lo siento Harry, pero ya te dije que no estoy de humor... además no tengo tiempo para salir, debo estudiar.

- Hermione, estudias todos los días, no puedes seguir así...

- ¿Por qué no? Nunca me gusto salir y tú lo sabes...

- Si lo sé, pero creo que te haría bien.

- No, Harry, perdona, pero no lo haré.

- Como quieras. Te quería comentar algo, hoy hablé con Ron.

- ¿Qué?- exclamó Hermione, sentándose en la cama.

- Si, y estuvimos hablando por un buen tiempo.

- ¿Y que te dijo?

- Me contó que viajaron todos a Rumania a visitar a Charles y que allí conoció a una chica y se puso de novio con ella.

- ¿A sí? Que bien... –susurró Hermione, volviéndose a acostar.

- Pero no funcionó. Me dijo que era demasiado pesada y cortaron. Quedamos en hablarnos esta semana para que nos veamos... pensé que querrías ir.

- Creo que no es una buena idea, Harry. Ron y yo nos distanciamos mucho desde que terminamos Hogwarts.

- Ya sé pero, si cambias de opinión, llámame.

- Esta bien, hasta luego Harry

- Adiós Hermione.

Luego de colgar el teléfono, Hermione no pudo evitar sentir ganas de ir a esa cita, y ver a Ron, pero en realidad no quería revivir el pasado, ni hacerse ilusiones.

En otro punto del mapa en la misma Inglaterra, un joven de cabellos colorados y ojos azules, estaba sentado a una mesa con su hermana, jugando un partido de ajedrez mágico.

- Jaque mate!!!- gritó y sacó del juego la última pieza.

- Ron!!! Siempre ganas! Haces trampa!- se quejaba su hermana, colorada igual que él.

- Lo lamento Ginny, pero es así, soy un campeón.

La puerta de entrada de abrió, y por ella entro un mago medio calvo, con una gran caja en las manos.

- Hola papá, como te fue en tu trabajo hoy?- preguntó Ron

- Muy bien, sobre todo porque me encomendaron esta joyita muggle

- ¿Qué es? - Preguntó Ginny

- Una computadora, hija, una maquina del mundo muggle, que tiene muchisimos usos- explicó el Señor Weasley.

- ¿Cómo cual?- Ron fruncía el entrecejo.

- Como poder conectarse con otras personas, a través de los que se llaman chats.

- Guau, y nosotros podremos hacerlo?- preguntó Ginny entusiasmada.

- Claro!!!, En cuanto la conecte, estará lista para usarla- respondió el Señor Weasley, mientras sacaba cables y un teclado de la caja grande que había traído.

El señor Weasley y Ron sacaron todo lo que había dentro de la caja y siguiendo las instrucciones del manual lograron conectarla.

- Listo, ya esta. ¡Valla me siento tan superado!- exclamó el señor Weasley mirando a la máquina orgulloso.

- ¿Ya podemos usarla papá?- preguntó Ginny entrando al cuarto de Ron.

- Si, cuando quieran. Miren aquí les dejo algunas direcciones de internet para que visiten. Disfrútenla.- dijo el señor Weasley abandonando la habitación.

- Bien, vete Ginny.- dijo Ron, sentándose frente a la computadora.

- ¿Por qué? Yo también quiero usarla.- respondió Ginny, frunciendo el ceño.

- Si, pero yo la usaré primero, otro día la usas, ¿sí?- dijo Ron. Ginny salió de la habitación murmurando por lo bajo.

- Niña pesada.- murmuró Ron tomando el papel que su padre le había dado y leyendo las direcciones.

Hermione estaba sentada frente al escritorio de su habitación donde se hallaba una computadora. Estaba buscando material para su estudio. Cuando lo encontró se disponía a continuar estudiando pero decidió que por esa noche iba a cambiar de planes. Entró a la pagina www.brujosdehoy.com y se dirigió directamente a la sala de chat.

Ron estaba medio mareado, pues no entendía bien, pero en el manual que le dio su padre, encontró la dirección www.brujosdehoy.com y decidió impeccionar por allí. Encontró lo que dijo su papá, "chat" y decidió ver de qué se trataba. Le pedían que ingresara un NICK, y al lado había un ejemplo de un sobrenombre, así que tras pensar unos minutos decidió ponerse "Poseidón".

No sabía bien porqué, pero le gustó. Así que entró. Inmediatamente le apareció un cartel que decía "usted ha ingresado al canal de magos y hechiceras".

Hermione, tenía varias páginas abiertas, pero como estaba aburrida decidió entrar a un chat que le había recomendado Parvati un día que la encontró en Florean Fortescue.

Debía ingresar un NICK, y al momento se le ocurrió uno que le pareció muy misterioso y divertido. Escribió "Atenea", y un cartel le indicó: "Usted ha ingresado al canal de magos y hechiceras".

Ron buscó entre la lista de conectados algún nick que le pareciera bueno, y se detuvo en uno.

Hermione miró la lista de las personas que estaban en el canal, y se fijo en uno.

Ron, tildó sin saber bien porqué, el nick "Atenea"

Hermione, casi sin poder evitarlo, seleccionó al nick "Poseidon".

Ambos sintieron algo dentro de sí, como que del otro lado estaba lo que siempre buscaron, pero lo que ellos no sabían era que sus vidas ya nunca volverían a ser iguales.