Catorceavo Capítulo

FERy J: Lo sé, cuera yo!! Ese capítulo estuvo bien cute!!. Jjajajajaja, que bueno que te haya gustado y que estés orgullosa de mua. J

Mirime Sketch: Jajajajaja, no fuiste la única que lloró, yo misma me hice llorar!!!, muchas gracias por tu review!!!

Kalid: ya ni me digas, si me pusiera en el lugar de Josie me daría un tiro u_u". Pero, don't worry, be happy. Tú, yo y todos los que leyeron el libro sabemos que Frodo no ha muerto, así que Josie no sufrirá más!!!

Afrodita: Gracias por tu review. ¬¬ ¿qué me dedicas tus escenas con Frodo de tu fic?....mmm..no sé si eso es bueno o malo. Jjajajajaja, no te creas!

Luthien: No te preocupes por Sam, él tendrá a su Rosita pero cuando llegue la hora. Que bueno que el capi te haya parecido lindo, gracias por tu review!!!

Ok, aquí está el super-duper capi 14.

Capítulo 14.- El Reencuentro

Sam y Josie caminaron penosamente hacia el túnel que estaba frente a ellos. Constantemente volteaban hacia atrás para ver a Frodo.

-Crees...-preguntó Josie-..¿crees que lo volvamos a ver?-Sam la miró y miró después a Frodo.

-Eso espero-susurró, pero fue más como si pidiera un deseo. Sam estaba muy nervioso, no sabía si lo que hacía era lo correcto y dudaba de sí mismo. Entonces, ambos escucharon algo que los dejó helados. Gritos y voces provenían del final del túnel, y se acercaban a ellos. Sam palideció.-¿Y ahora qué?-preguntó en voz baja. Josie lo miró asustada.

-El anillo-dijo en un hilo de voz.-¡Úsalo!

-Pero...¡no debo!-exclamó Sam mirando el anillo-Aparte...¿qué va a pasar contigo?

-¡Sólo hazlo!-le respondió Josie. Sam tomó el anillo y se lo puso en el dedo. Justo a tiempo. Lo orcos pasaron junto a los medianos que se agazapaban contra la pared para pasar inadvertidos, pese a que eran invisibles. Entonces algo llamó su atención, un orco venía gritando palabras que les congelaron el corazón.

-En el medio del camino-dijo-¡Hay algo allí! ¡Un espía! ¡Un espía!

Sam y Josie dieron un salto. No lo pensaron dos veces y se lanzaron corriendo hasta donde estaba Frodo. Pero sabían que no tenían esperanza, eran demasiados orcos y ellos dos medianos que apenas y sabían utilizar la espada. Sin embargo sabían que ese era su lugar, estar junto a Frodo hasta el final.

Los orcos alzaron el cuerpo de Frodo y se lo llevaron felices. Los dos medianos de pronto cayeron en la conclusión de que sus piernas no les darían para más y cada vez avanzaban más lento. Pero aún así de débiles siguieron a los orcos al túnel, dispuestos a salvar a Frodo. Entonces los perdieron de vista. Ellos habían doblado una esquina y Sam y Josie los siguieron, pero se encontraron con una pared de roca que se interponía en el paso. Intentaban atravesarla mientras escuchaban la conversación de dos orcos que parecían los líderes de esa horda.

-¡Pedazo de imbécil!-dijo uno de los orcos-Ignoras demasiadas cosas. Ella-Laraña no mata a sus presas, a ella no le gusta la carne muerta ni la sangre fría. ¡Ese espía que llevan no está muerto!

A Josie le temblaron las rodillas. ¿Era verdad? ¿Frodo estaba vivo?. Miró a Sam, que también se sujetaba incrédulo a la pared. Josie sintió su corazón latir de nuevo y todas sus esperanzas renacer. ¡Frodo vivía!. Lanzó un suspiro de felicidad y en sus labios apareció una sonrisa que le nació del corazón. Los orcos se alejaron y sus voces se perdieron.

-¡Lo sabía!-exclamó Sam-¡Jamás debí separarme de el Sr. Frodo!. Ésa será mi norma de ahora en adelante: Nunca, nunca abandones a tu amo.

-¡Está vivo, Sam!-gritó Josie abrazándolo. Sentía una alegría tan inmensa que no cabía en su cuerpo.

-Sí que lo está-le dijo Sam-Pero quién sabe si lo seguirá estando si no nos damos prisa.-desenvainó su espada y ambos pudieron ver a su alrededor. La pared que les obstruía el paso tenía una agujero arriba que probablemente había sido construido para que Ella-Laraña no pudiera pasar. Sam cargó a Josie para que cruzara, luego ella le extendió su mano para que él también pasara. La noticia de que Frodo seguía con vida les llenó de energía y rápidamente escucharon las voces de los orcos de nuevo, se estaban acercando.

-Lo llevaré a la torre más alta-dijo uno de los orcos

-¿¡Qué!?-contestó el otro-¡Llevémoslo a las mazmorras!

-¡NO!-le dijo el primero-¡Debe permanecer a salvo! ¡Si lo dejo en las mazmorras uno de tus hombres, o tú mismo le hará algo!. En la torre lo dejaré, allí estará seguro.-fue en ese momento que Josie y Sam divisaron a los orcos. Pero fue muy tarde, frente a sus narices se cerraron dos grandes puertas de bronce que los golpearon y dejaron sin sentido en el suelo.

Josie se levantó trabajosamente, su cabeza le palpitaba con dolor. Miró a su alrededor tratando de saber donde estaba, frente a ella dos puertas de bronce se alzaban como grandes murallas. Entonces lo recordó todo. Miró a Sam a su lado y le movió.

-Sam-susurró moviéndolo frenéticamente-¡Sam despierta!-pero Sam no respondía.-¡SAM!-dijo completamente desesperada y dándole una patada.

-Arggghh-se quejó Sam levantándose-¿Qué pasó?

-Debemos salvar a Frodo-le dijo Josie-Los orcos lo tienen, ¿recuerdas?

-¿Frodo? ¿orcos?-repitió Sam sobándose la cabeza. Parecía que no recordaba nada de lo que había pasado. Miró a Josie-¡Oh, el Sr. Frodo!-exclamó triunfante. Josie le sonrió.-Muy bien, Srita. Orcos. Si usted va al bolsón cerrado encontrará al Sr. Frodo....probablemente esté en su cuarto durmiendo, porque veo que es de noche aún....

-....S...a....m...-lo llamó Josie apretando el puño-¡REACCIONA!-estalló propinándole un golpe en la cabeza a Sam.

-¡Hoeeeeeeeeeee!-exclamó Sam aparentemente entrando en razón.-¡Dama Joselyn, eso fue completamente innecesario!

-Yo no estaría tan segura-murmuró Josie-Pero ahora vamos por Frodo.

-Bueno-dijo Sam apoyando su oreja contra la puerta-No creo que podamos entrar por aquí, tendríamos que esperar días antes de que estas puertas se abran de nuevo.

-Entonces regresemos nuestros pasos-sugirió Josie-Frodo no puede esperar tanto tiempo, ni la misión podrá tampoco.

Ambos caminaron fuera del túnel y llegaron al exterior. Un luz tenue iluminaba el tétrico lugar. Josie alzó su mirada en busca de la torre donde Frodo estaría y halló una con luces rojas moviéndose en ella.

-¿Qué son?-le preguntó Sam.

-Orcos-respondió Josie.-Debemos apresurarnos.

-¿Orcos?-repitió Sam temeroso mientras caminaban presurosos.

-Hay una pelea allá dentro-le dijo Josie-Creo que son los orcos de aquél que quería torturar a Frodo contra los del que quería mantenerlo a salvo.

-¿Y quién crees que gane?-susurró Sam

-No lo sé-le contestó Josie con un nudo en la garganta.-Pero debes quitarte el anillo, estamos en los límites de Mordor-Sam hizo lo que se le pedía y ambos se hicieron visibles de nuevo. Recorrieron el horrible camino en silencio, hasta que Sam lo rompió.

-¿Por qué tú también eras invisible?

-Simple-contestó Josie-Entre el portador y el heredero hay una conexión, cada vez que el portador usa el anillo el heredero se ve también afectado. O sea, cada vez que alguien usa el anillo yo también desaparezco.

-Vaya-murmuró Sam. Y miró hacia delante, frente a ellos se alzaba una puerta guardada por centinelas. Sam se detuvo teniendo un mal presentimiento, pero Josie siguió su camino dispuesta a encontrar a su amado Frodo. Sin embargo al tratar de cruzar la puerta hubo una especie de fuerza que se lo impidió.

-¿Qué rayos?-exclamó.

-Saben que somos enemigos-dijo Sam-Saben que tú eres una elfa y que yo soy de otra raza enemiga de Sauron.

-Al diablo con Sauron-susurró Josie-Saca la luz de Galadriel-le pidió a Sam. Y en cuanto éste la sacó, la luz brilló y fue como si los centinelas flaquearan y ellos pudieron pasar. Pero en cuanto cruzaron la puerta sintieron como la vigilancia se reforzaba tras ellos. Josie suspiró mirando atrás.-¿Será ese un reto a que intentemos salir?

-No lo sé-le respondió Sam-Pero yo no me voy a ningún lado sin mi Sr. Frodo.

-Te apoyo-afirmó Josie. Caminaron a grandes pasos entre cadáveres de orcos, tenían diferentes uniformes, lo que Josie dijo sobre la pelea era más que una suposición.  Al otro lado del patio vieron una puerta grande, entreabierta, y se apuraron a entrar por ella. Había un enorme túnel lleno de puertas y cadáveres de orcos en todas partes. Su única pista era que Frodo debía estar en la torre más alta....si es que los orcos "buenos" habían ganado.

Se acercaron a una escalera y se dispusieron a subirla cuando escucharon un horrible grito provenir de ella, alguien venía bajando. Pero no hubo tiempo para huir, un orco se precipitó hacia ellos y no tardó en descubrirlos. El orco se detuvo, despavorido. Por que lo que vio no fueron dos pequeños "niños" tratando de sujetar una espada y con piernas temblorosas: vio un guerrero envuelto en una capa gris que esgrimía un amenazante espada y una elfa, tan hermosa como terrible que lo miraba con unos ojos llenos de determinación y que sujetaba otra espada con firmeza.

El orco lanzó un alarido y huyó por donde había venido. Sam y Josie se miraron y miraron hacia las escaleras.

-Yo sé que por las mañanas no soy la elfa más bella del mundo...-empezó Josie-...¿Tan mal me veo?-Sam rió. Josie le de volvió la sonrisa-Vamos, Sam. Creo que tenemos ventaja.-y  ambos se lanzaron escaleras arriba. Subieron y subieron en una horrible oscuridad que se iluminaba de vez en cuando por una antorcha. Finalmente, cuando sintieron que el aliento se les iba y que las piernas no les daban para más la escalera terminó.

-¡Qué oportuno!-exclamó Josie sin aliento-¡Estas escaleras siempre se acaban cuando no puedo más!

-¡Shhhh!-la calló Sam-¡Las voces!-a lo lejos se escuchaba a alguien hablar.

-¡Hey!-murmuró Josie-Yo no las escuché

-Lo harías si no ocuparas tu cabeza en esos pensamientos tan absurdos-susurró Sam. Josie abrió la boca para insultarlo y levantó el puño para golpearlo cuando un orco salió disparado por la puerta de la torre. Detrás de él apareció uno de los orcos que ellos habían perseguido en el túnel de Ella-Laraña. Persiguió al primer orco hasta que lo perdió, entonces se asomó por una ventana y empezó a gritar. Desde su escondite Sam y Josie pudieron ver como uno de los "cadáveres" se arrastró hasta el orco y cuando estaba a punto de matarlo con una lanza, aquél lo percibió y le enterró un cuchillo en su garganta.

Josie lanzó un gemido de asco y se llevó la mano al cuello. El orco, llamado Shagrat, empezó a caminar hacia una puerta, dispuesto a atrapar a su pequeña presa. Sam salió a su encuentro con Dardo en su mano. Al verlo, Shagrat palideció y salió corriendo.

-Bueno-dijo Josie saliendo tras Sam-tal vez no era yo la que los asustaba después de todo...

-¡Subamos!-dijo Sam sonriente. Y ambos continuaron el ascenso, pero se encontraron con un callejón sin salida.-¡Imposible!-exclamó Sam al darse casi de bruces con una pared.-¡¿Qué clase de broma enferma es esta?!-empezó a golpear el muro como si quisiera derrumbarlo. Cansado y vencido se sentó en un escalón y hundió su cabeza entre sus manos. Empezó a gimotear.

-No pierdas la esperanza Sam-le dijo Josie-Estoy segura de que Frodo sigue vivo, mi corazón me lo dice.

-Entonces...¿¡dónde está!?

-No lo sé-dijo Josie suspirando.-Mira, creo haber visto una puerta allá abajo. Iré hacia allá a ver que encuentro.

-No lo hagas-la reprendió Sam-Aún puede haber orcos vivos.

-No me importa-gritó Josie bajando veloz-¡Encontraré a Frodo! ¡Si ves que las cosas se ponen malas sólo sal de aquí y olvídate de mí!

-¡Dama Joselyn!-la llamó Sam. Pero Josie ya estaba decidida.-...¿Y ahora qué?-sin saber que hacer, se sentó y se puso a cantar una vieja tonada que una vez escuchó en la comarca. Jamás se había sentido tan solo.

+++

Josie bajaba las escaleras deprisa hasta que llegó a la puerta que había visto. Giró desesperada la perilla y entró corriendo. La puerta se cerró tras ella con un fuerte portazo. El silencio rodeó a Josie, la habitación estaba totalmente oscura.

-Quizás...-dijo Josie-...ésta no fue la mejor idea.

-No podría estar más de acuerdo-dijo una horrible voz tras ella. A Josie se le paralizó el corazón.-Vaya, vaya, vaya. ¿Qué tenemos aquí?-una mano giró el cuerpo de Josie y ella se topó de bruces con el dueño de la voz.

-Puaj...-exclamó Josie al sentir el apestoso aliento de tan horrible criatura. Una antorcha iluminó su rostro y Josie vio a su agresor. Un horripilante orco.

-¡Pero qué preciosidad!-exclamó el orco-¡No he visto semejante belleza en tanto tiempo!-Josie empezó a temblar, el miedo se apoderó de ella. Ahora estaba indefensa, en un cuarto oscuro con un orco.

-...Suéltame...-murmuró Josie.

-¿Qué fue eso? ¿Qué te suelte?-dijo el orco llevándose una mano a su oreja.-¡Debe ser una broma!-miró a Josie malignamente-Tengo mejores planes.-le susurró al oído. Josie cerró los ojos traumada. Debía salir de ahí. El orco empezó a jugar con los cabellos de Josie.-Me pregunto...¿qué haremos primero?-a Josie se le ocurrió una idea.

-¿Sangrar?-le preguntó. El orco la miró confundido y ella aprovechó ese momento. Le enterró su espada en el vientre. Lo que el orco dijo fue algo como: #@¡$%?"/, por lo que se puede suponer no fue nada lindo.-Después-continuó Josie ya con un poco de valor-Haremos algo más divertido-se acercó al orco hincado en el suelo que trataba de vencer al dolor-Jugaremos un juego llamado "Ponle la cabeza al orco"-y juntando todas sus fuerzas, decapitó al orco. La sangre manchó su vestido blanco y su cara. Un olor nauseabundo llenó el cuarto. Y la cabeza del orco rodó a los pies de Josie. Ella miró los ojos sin vida del orco. -Eso....-dijo-....no fue divertido.-Antes de soltar la espada miró a su alrededor para asegurarse de que no hubiera más atacantes sorpresa. Pero ya estaba sola. Tomó la antorcha que el orco dejó caer y se aproximó hacia al puerta. Giró de la perilla pero no consiguió abrirla. Lo intentó una vez más. Y otra. Pero la puerta no cedió.-Excelente-murmuró Josie mirando el cadáver que le hacía de compañía.

Se sentó al pie de la puerta para recuperar energías. Estaba exhausta. Escuchó atentamente tratando de localizar a Sam. ¿Debería de gritar?. Probablemente no, solo atraería más orcos. Escuchó pasos bajar y se puso alerta, pero las pisadas pasaron de largo. Josie suspiró, "Mejor exploro este lugar" pensó. Se levantó y empezó a rodear el cuarto en busca de una salida. Pero no la había. Solo había cuatro paredes mohosas, un cadáver y ella. Josie se acercó al cadáver, tal vez tuviera la llave para salir de ahí. Se disponía a examinarlo cuando recapacitó: no había cerrojo en la puerta. Por lo tanto no había llave. Y era la única salida. Ella estaba atrapada.

Asustada se paró contra un muro y se dejó caer. Todas sus esperanzas se fueron. Probablemente esas pisadas habían sido de Sam que había huido de ahí. Empezó a desesperarse y a llorar desconsolada. "No quiero quedarme aquí, debo ver a Frodo una vez más" pensó mientras sus lágrimas la ahogaban. Frodo. ¿Seguiría vivo? ¿Sam lo había encontrado y por eso había salido corriendo de ahí?. Jamás lo sabría. Cerró sus ojos y relajó su cuerpo, ya no había nada que hacer, excepto esperar. Y sin saber muy bien cómo, se quedó dormida.

+++

-¡¿Dónde está Josie?!-preguntó Frodo por milésima vez a Sam.

-Ya se lo dije, amo-le contestó Sam ayudándolo a vestirse.-Bajó a buscarlo y no he sabido de ella.

-¡¿En qué pensaste al dejarla ir?!-exclamó Frodo echándose la capa al cuello.-¡Esto es Mordor!

-¡Lo sé!-se disculpó Sam-¡Pero ella no me escuchó! ¡Estaba desesperada por encontrarlo!

-Pues vayamos en su búsqueda-dijo Frodo saliendo de la torre. Los hobbits bajaron las escaleras presurosos hasta que llegaron a la puerta que Josie había señalado.-¿Aquí?-preguntó Frodo. Sam asintió.-Muy bien. Yo voy primero, tú quédate aquí haciendo de guardia. Veré si está allá a dentro.-Frodo abrió la puerta y entró a la habitación, tras él la puerta se cerró con un gran portazo.-¿Josie?-llamó Frodo. No lo había notado, pero se había puesto muy nervioso. Divisó una antorcha tirada en el suelo, la tomó y alumbró a su alrededor. Dio un brinco al toparse con el cuerpo sin vida de un orco, y a pocos metros de él su cabeza.-Esto no puede ser bueno-murmuró. Se disponía a salir cuando una voz lo llamó desde la oscuridad.

-¿Quién eres?

-¿Huh?-Frodo se giró buscando el emisor de aquella voz. Una voz que reconocería aquí y en todas partes.-¿Josie? ¿Josie eres tú?-por respuesta solo hubo un grito ahogado. Después escuchó pisadas y ante él apareció Josie, con el cabello desmarañado y toda sucia y cubierta de sangre. Él jamás pensó haberla visto más bella.

-...¿Frodo?...-susurró ella. Frodo asintió con alegría y se le acercó.-Pensé que...

-Sé lo que pensaste-la calló Frodo. La miró a los ojos y le sonrió.-No te librarás tan fácil de mí.

-¡Oh, Frodo!-exclamó Josie sonriendo y  tirándose a sus brazos.-¡Te extrañé tanto! ¡Creí que te había perdido!-Frodo la abrazó un poco atarantado por tan efusivo saludo.-¿Qué es ese olor?-preguntó Josie. Frodo la miró y olió sus ropas. Sonrió avergonzado.

-Es que los orcos me quitaron todas mis posesiones. Hasta la ropa, Sam me halló completamente desnudo y tuvo que quitarle ropa a los cadáveres para vestirme.-Josie arrugó su nariz y se hizo para atrás.-¿Qué?-le cuestionó Frodo-¿Te da asco mi ropa?. ¿Te has visto?, estas toda cubierta de sangre. ¿Qué te pasó?

-Sólo jugaba con mi amigo-dijo Josie señalando al orco muerto. Frodo la miró sorprendido.

-Eso de la niña dulce e inocente es sólo una máscara, ¿eh?

-Él se lo buscó-se defendió Josie. Frodo le sonrió.-Me alegra que estés vivo-dijo Josie abrazándolo de nuevo. Frodo recordó entonces algo. Miró en su mano izquierda el anillo plateado.

-¿Josie?-la llamó.

-¿Sí?-respondió la aludida.

-Debo preguntarte algo sobre cierto anillo...

-Si hablas del único, ¡Sam lo tiene!-dijo Josie.

-No hablo de ese-dijo Frodo tomándola de los brazos para mirarla al rostro.-Hablo de éste-y levantó su mano izquierda-El anillo plateado centelleó ante la luz de la antorcha que yacía en el suelo.

-Pues....-empezó Josie nerviosa.-Eso....verás...

-¡Sr. Frodo!-llamaron desde afuera-¿Está usted bien?-Frodo se giró hacia la puerta con cara de fastidio.

-¡Sí, Sam!-contestó-¡Saldré en un minuto!

-La puerta solo se abre por afuera-le dijo Josie rápidamente. Frodo la miró fijamente.

-Tenemos una conversación pendiente-le dijo y la tomó de la mano llevándola hacia la salida.-¡Sam, abre la puerta!-y en un dos por tres ya se encontraban bajando a toda prisa de la torre. Se encontraron frente a los centinelas de nuevo. Y como era de esperarse, no pudieron pasar.

-Tenemos un reto por ganar-dijo Josie. Los hobbits la miraron.-Sam, dame la luz de Galadriel.-Sam le entregó el frasco.

-¿Qué vas a hacer?-le preguntó. Josie sonrió.

-Artefacto élfico + elfa = a mucho poder.-les dijo sonriendo. Se enfrentó a los centinelas y levantó el frasco.-Gilthonel, A Elbereth!-gritó Josie con una voz realmente potente.

-Aiya elenion ancalina!-gritaron Frodo y Sam tras ella. No tenían idea de por qué lo hicieron, pero funcionó pues la voluntad de los Centinelas se quebró y los medianos se echaron a correr. En cuanto cruzaron la puerta, ésta se derrumbó y cayó en ruinas.

Apenas se creyeron a salvo, un grito espeluznante cruzó el cielo. Un nazgúl los perseguía.

-¿Es qué esas cosas nunca se cansan?-gritó Josie mientras salían de ese lugar y se dirigían a la encrucijada. Estaba por llegar al puente cuando escucharon las metálicas pisadas tras ellos.

-¡Pronto!-dijo Frodo-¡Salten!-y los medianos hicieron como se les dijo. Mientras caían escucharon las pesadas pisadas cruzar el puente. Lo habían logrado. Ahora solo faltaba el aterrizaje.

Cayeron con un golpe seco sobre unos arbustos llenos de espinas. Y para cuando lograron salir de esos matorrales, todas sus ropas estaban rasgadas y su piel sangrando. Lenta y penosamente bajaron gateando entre las sombras, a tientas, tropezándose, arrastrándose entre peñascos y matorrales y ramas secas, bajando y bajando hasta que ya no pudieron continuar.

Se detuvieron al fin y se sentaron los tres juntos, recostándose sobre una roca, empapados de sudor.

-Aceptaría un vaso de agua hasta del mismísimo Sauron-dijo Sam. Frodo lo reprendió con la mirada, estaba muy cansado para hablar. A Josie no le importó, ella también quería agua.

-Yo tengo un poco-dijo sacando su cantimplora. Le ofreció a Sam.

-Mejor que Sauron-le agradeció sonriendo y dio un largo trago.-Sr. Frodo-le dijo dándole la cantimplora.

-Las damas primero-dijo Frodo dándole el agua a Josie. Ella, agradecida tomó otro trago y se la dio a Frodo. Ahora todos estaban un poco mejor. Sam se recostó contra la pared y cerró los ojos, como de costumbre, a los pocos minutos ya roncaba. Josie se curaba las heridas que los arbustos le habían hecho, y Frodo, la miraba en silencio mientras recuperaba energía.

-¿Podrías...?-le dijo a Josie después de unos momentos de meditación.-Me duele mucho-le enseñó una herida que se había hecho en su mejilla.

-Claro-le dijo Josie, y cortó un pedazo de tela de su otra falda. Lo mojó con un líquido que llevaba y tomó a Frodo de la barbilla.-No te muevas...te arderá un poco-aplicó la tela a la herida.

-¡Ahhhhh!-Frodo lanzó un gemido de dolor.-¡Ardeeeeee!

-¡Quieto!-le dijo Josie tratando de que no moviera su rostro, y en medio de esa batalla sus miradas se cruzaron. Frodo le sonrió.

-Lo siento-se disculpó. Josie bajó los ojos.

-Ya casi termino-le dijo volviendo a aplicar la tela. Esta vez Frodo no se movió, miraba fijamente a Josie.-Listo. ¿Te duele?-Frodo negó con la cabeza.

-Ya no me duele-contestó tomando las manos de Josie. Ella vaciló, sabía lo que venía. Frodo la miró como Romeo miraba a Julieta, con esos ojos llenos de amor.-Este anillo...-empezó-...los orcos no me lo pudieron quitar. Decían que los quemaba. Y cada vez que se disponían a lastimarme, esta cosa emitía una especie de barrera invisible que evitaba que me lastimaran.

-¡Qué útil!-dijo Josie.-¿No te parece?

-Yo no llevaba este anillo antes de que ese bicho me hiciera daño-continuó Frodo haciendo caso omiso de el comentario de Josie-Alguien me lo dio.-Josie miró al suelo, estaba más que nerviosa.

-Yo...no quería que te hicieran daño-murmuró.

-Lo sé-dijo Frodo sonriendo-Lo dice todo aquí-se quitó el anillo y se lo mostró a Josie. Ella lo tomó y lo miró de cerca. Tenía pequeños grabados y a Josie casi se le cae de las manos al leer lo que decía. Miró a Frodo asustada.

- Un amor que no morirá y seguirá a tu espíritu a donde vaya. Nadie jamás podrá hacerte ningún daño pues yo te cuido ahora-repitió Frodo suavemente. Josie abrió su boca, pero no dijo nada.-¿Qué te parece?-dijo Frodo jugando con los cabellos de Josie.-Después de todo....tú sí me amas...-y lentamente acercó el rostro de Josie hacia el suyo.-¿O me equivoco?-preguntó pícaramente. Josie lo miraba fijamente a los ojos. De nuevo se sintió hipnotizada por ellos. Entonces todos sus temores se fueron, y sin decir nada más, cerró los ojos y ofreció sus labios a Frodo, quien los besó con dulzura.

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The first kiss!!!! Ahhhhhhhhhh que bellooooooooooooo!!! *ü* que lindo y hermoso!!.

Finalmente, después de 14 capítulos, los protagonistas se besan. ¿No es genial?. Jajajajaja, estoy orgullosa de mí. Ahora solo falta la declaración de amor, esperen el próximo capi!!

PD. Dejen reviews!!!