Disclaimer: Yo no poseo a los personajes de Yugi OH! Todos son propiedad de su autor Kazuki Takahashi. Yo solo los tomo prestados para este fic sin fines lucrativos ni nada por el estilo ˆoˆ
Advertencia NC-17: Este capitulo contiene lemon es decir sexo explícito si se puede decir así. Por lo tanto si no gustan de este tipo de cosas les pido de por favor que no lo lean, muchas gracias y pues para los que si gustan de esto aquí esta el cuarto capítulo y espero que lo disfruten es un poquito mas largo que los otros tres pero es que sino no me alcanzaba.
Dedico este fic a mi amiga del alma Vera espero haber aprendido bien de tus enseñanzas y este fic va por todos los fics que escribimos juntas y también a mi"onechan" Miyuki esta vez en tu honor xD ahí está el lemon así que por favor estate tranquilita xD
Atentamente. ALI – CHAN n_n
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CAPÍTULO 4
UNA RAZÓN PARA TODO
Kaiba separó los labios permitiéndole a su lengua recorrer todo el interior de la boca de Joey la verdad era que el rubio sabía bastante bien, el beso fue haciéndose cada vez mas profundo, mas exquisito y lo mejor era que el rubio no estaba poniendo resistencia alguna.
Pero que estaba pasando Seto Kaiba lo estaba besando y lo peor de todo era que se sentía bastante bien, tener a Kaiba tan cerca lo estaba excitando y empezaba a sentir que algo ardía dentro de él pero no sabía por qué, su olor era realmente embriagante una mezcla de salvaje y cítrico, por un momento estuvo a punto de perder la cabeza y empezó a subir los brazos para colocarlos alrededor del cuello de Kaiba pero una voz dentro de sí le hizo detenerse. Que diablos estaba haciendo, era Kaiba y además era un hombre por Dios tenía que salir de ahí inmediatamente. De un empujón apartó a Kaiba y los dos quedaron ahí respirando agitadamente.
- Pe... pero que demonios estabas haciendo Kaiba, te das cuenta de lo que acabas de hacer- exclamó Joey con una ligera muestra de indignación porque la verdad era que el tono con el que dijo las palabras demostraban mas que nada temor.
Que, que estaba haciendo, como responder a esa pregunta si ni el mismo sabía porque demonios había besado al rubio. Había sido un fuerte impulso solamente o al menos era eso lo que él creía, sino que otra cosa pudo haber sido acaso el rubio le gustaba? No eso no podía ser Wheeler era la persona mas molesta en este mundo o quizás él había querido proyectares esa imagen después de todo era él quien siempre lo provocaba, por qué lo hacía? Tampoco lo sabía quizás solo para divertirse un poco a sus anchas o tal vez era para atraer su atención. Pero que cosas estaba pensando esa situación lo había confundido totalmente, si tan solo no hubiera aceptado ir con él a ese odioso parque nada de esto hubiera pasado y no estaría preguntándose todo esto y obteniendo ninguna respuesta para ello.
- Simplemente me provocó- atinó a decir.
- Te provocó? Que te pasa estás completamente loco, tierra llamando a Kaiba, te das cuenta de lo que estás diciendo.
La verdad que no, pensó Kaiba no sabía porque se le había ocurrido eso pero que mas podía decirle.
- Pues eso mismo Wheeler, por qué mas crees que lo haría entonces – dijo con tono y mirada sarcástica.
- No lo sé, tal vez... pero que estoy diciendo, Kaiba tu no puedes hacer una cosa así – de cuando acá era él, el de cabeza fría se preguntó- yo soy un hombre además se supone que me odias cierto- por una vez en su vida hubiera preferido mil veces que Kaiba lo llamara perro a que hiciera lo que hizo.
Genial eso le ayudó a Kaiba a pensar de nuevo fríamente, ya sabía exactamente lo que tenía que hacer para que esa situación no se le saliera de las manos y salir bien parado de ella.
- Pues eso es totalmente cierto y si quieres saber la verdadera razón es por eso que lo hice – respondió Kaiba bastante sereno.
- A que te refieres? – preguntó el rubio bastante sorprendido.
- Pues es un modo de venganza por haberme obligado a ir a ese estúpido parque de diversiones eso es todo Wheeler, digamos que después de esto ya estamos a mano así que no vayas a hacerte ilusiones conmigo – respondió Kaiba satisfactoriamente, aunque por dentro sintió una opresión en el pecho.
- Ya entiendo- dijo Joey con la cabeza abaja- entonces eso era, sabes por un momento pensé ahí en el parque de diversiones cuando me regalaste el oso de peluche para Serenity que después de todo si tenías corazón y hasta podías llegar a ser amable con las personas, pero ya veo que no es así para ti todo se trata de venganzas y de mantener un orgullo en alto sin importar a quien tengas que humillar para lograrlo – concluyó.
- Bravo – dijo Kaiba aplaudiendo- veo que al fin lo has comprendido de hecho te tardaste mas de lo que pensé pero que se puede esperar de gente con un cerebro tan pequeño como el tuyo, y ahora porque no te largas de aquí y me evitas tener que llamar a seguridad para echarte de aquí.
- Pues eso no será necesario me voy de aquí inmediatamente y puedes quedarte con esto- dijo tirando el oso de peluche al suelo – no quiero que mi hermana tenga algo que consiguió una persona tan fría y calculadora como tu y si tal ves tengas razón tal vez si tenga un cerebro pequeño que no quiso entender que gente como tu nunca cambian y nunca serán buenas personas.
- Ay Wheeler tus palabras si que me conmueven, me han llegado al fondo del corazón y ahora hazme el favor de irte de aquí inmediatamente – exclamó Kaiba
- Eso no tienes por qué repetírmelo.
Y diciendo eso dio media vuelta y diciendo eso salió corriendo de ahí.
- Vamos corre mas rápido Wheeler – le gritó Kaiba- corre como un perro con el rabo entre las piernas Ajaja.
Y se quedó ahí parado de nuevo completamente solo, lo cierto era que algo le dolía mucho en el pecho y es que en realidad no había querido decir nada de eso hasta le hubiera gustado que Joey se quedara un poco mas para que le hiciera compañía en la mansión. Lo cierto es que si la había pasado muy bien en el parque de diversiones y ahora que también lo pensaba fríamente no había besado al rubio porque le provocó sino porque realmente lo quiso. Ahora lo entendía todo el tiempo desde que lo conoció Joey siempre le había gustado solo que prefirió insultarlo como una manera de protegerse de empezar a sentir alguna cosa por él además que hubiera pasado si lo rechazaba pero pensándolo bien cuando lo había besado Joey no había puesto resistencia y hasta estaba seguro que por un momento estuvo a punto de corresponder el beso, pero ahora ya nada de eso lo había importado nuevamente el mantener una imagen dura y ese orgullo que no le permitía mostrar sus sentimientos a los demás le habían ganado y había terminado de humillar a Joey de la peor manera. Después de todo el siempre hacía lo mismo con todos menos con su hermano, entonces porque no podía tratar a Joey de la misma manera que trataba a Mokuba con mucha amabilidad y gran cariño, demonios lo mejor sería no seguir pensando en eso y volver a ocupar su mente en las cosas de la compañía.
- Bueno será mejor volver a trabajar como siempre – suspiró y dio media vuelta.
Sin embargo tropezó con un objeto suave en suelo, bajó la vista y pudo ver el oso que le había dado a Joey tirado en suelo pensó en dejarlo ahí tarde o temprano alguien pasaría por ahí y se lo llevaría, sin embargo algo dentro de si lo hizo recogerlo, al hacerlo se dio cuenta que no era lo único que estaba ahí tirado también había un objeto negro rectangular que bien podría ser una billetera, la abrió y vio algunas fotos de Joey con su hermana y sus amigo y algo de dinero, tal vez sería una buena oportunidad para volver a ver a Joey sin embargo este la había dejado muy en claro que ya no quería el oso pero bueno no perdía nada intentarlo, además no solo tenía eso ahora sino también la billetera y estaba seguro que eso si el rubio no lo pasaría por alto.
- Y bueno no todo salió tan mal después de todo – dijo finalmente y mostrando una sonrisa añadió- ya me haré cargo que se quede con este oso también y será por las buenas o si lo prefiere de nuevo por las malas.
Y diciendo abrió la reja que marcaba la entrada hacia la mansión y empezó la larga caminata hacia la puerta de esta.
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Era la segunda vez en el día en que corría tanto, algo lo había hecho no detenerse hasta que las fuerzas lo abandonaron y lo obligaron a detenerse, sin darse cuenta había llegado hasta la puerta de su casa pero la verdad es que no tenía ganas de entrar ahí. Demonios si tan solo le hubiera puesto mas atención a Yugi el día anterior nada de esto hubiera pasado y la estaría pasando muy bien con sus amigos, pero ellos no estarían de regreso hasta el martes por la mañana y el se encontraba ahí solo hasta entonces y con un tremendo nudo en la garganta.
- Estúpido Kaiba – dijo golpeando el tronco de un árbol con el puño.
Por qué había tenido que hacer eso, demonios hubiera bastado con que le hubiera dicho que no quería volver a verlo porque la había pasado muy mal en el parque o en serio no le hubiera importado que lo llamara perro faldero o algo de eso total ya empezaba acostumbrarse a ello. Pero porque había tenido que besarlo, por qué, lo único que había logrado con eso había sido confundirlo ya no sabía si sentir rabia por Kaiba por la razón que había dado para hacerlo o tristeza por el hecho que no hubiera dicho que después de todo si sentía algo por él. Maldición ahí está de nuevo por qué estoy pensando en esas cosas pero lo cierto es que el beso se había sentido muy bien, muy cálido...
- Ya basta, maldita cabeza ya deja pensar esas cosas – exclamó.
Pero ya no podía negarlo, era cierto lo había disfrutado pero después de todo para Kaiba no había significado nada mas que una venganza. Pensó que quizás alguna vez había querido caerle bien a Kaiba porque lo cierto era que esos ojos azul profundo lo habían impresionado desde un principio pero este había empezado insultándolo con todo su repertorio de apelativos caninos y alguno que otro duelista de cuarta. Entonces si ya lo tenía muy claro como pudo pensar siquiera un momento que este sintiera alguna cosa por él.
- La verdad es que eres un caso Joey Wheeler – se dijo así mismo- mira siquiera ocurrirte pensar esas cosas- añadió tristemente y entró a su casa.
Fue a ver a su padre al cuarto, no estaba ahí, era de esperarse seguro había vuelto a salir a tomar, no se preocupó mucho por eso porque tendría que aceptarlo pero ya se había convertido en una rutina. Se dirigió a su cuarto cogió su toalla y entró al baño a tomar una ducha caliente cosa que logró reconfortarlo y hacerlo olvidar lo sucedido, la verdad es que estaba bastante cansado por todo lo sucedido durante el día así que ni bien salió del baño se puso el pijama y se quedó profundamente dormido.
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Se levantó temprano en la mañana con el toque de la puerta era su padre que ya sabemos de donde regresaba así que se dispuso a salir a comprar la comida para ese día. Se puso un polo ya que hacía bastante calor y fue a buscar su saco para sacar de ahí la billetera pero no pudo encontrarla.
- Maldición donde la pude haber puesto- pensó- lo que me faltaría sería que se me haya caído en el camino, Diablos ahí tenía todo el dinero del mes, tendré que salir a buscarla sino estamos fritos.
- Joey! – escuchó la voz de su padre que lo llamaba- necesito que hagas un trabajo por mi, debes ir a entregar este paquete a esta dirección que te estoy dando.
- Está bien – respondió Joey tomando el papel con la dirección y mirándola- pe... pero esto está muy lejos.
- Pues toma el autobús y ahora me voy a dormir un poco estoy muy cansado.
- Si claro me lo imagino ¬___¬ - dijo Joey en tono sarcástico- está bien ya me voy, y tomando su chaqueta salió de la casa.
Prefirió no comentarle nada de lo de la billetera para evitar una discusión además como no se había acordado ni del desayuno estaba demás decírselo, bueno ahora el asunto era encontrar la billetera pero primero iría a entregar el paquete como no tenía dinero ni para pagar el autobús tuvo que irse caminando salió muy temprano en la mañana y estuvo de regreso en su casa como a las 5 de la tarde.
- Bueno ahora sí antes de regresar a casa debo encontrar la billetera – dijo con determinación- lo mejor será recorrer todo el camino que hice ayer desde la casa de Kaiba- Kaiba ese nombre de nuevo y justo ahora que estaba empezando a olvidarse de lo ayer- y pues ojalá que siga tirada por ahí n_nU.
Y eso fue lo que hizo recorrió paso por paso todo el camino que pensaba había hecho anoche porque la verdad es que tampoco se acordaba muy bien con eso que salió corriendo, pero no encontró nada así que se dispuso a visitar las estaciones de policía para ver si alguien había reportado su billetera perdida. Pero nada no logro ubicarlo en ninguna de por ahí.
- Diablos donde puede estar lo único que me falta es que alguien se la haya quedado, no no no tengo que pensar positivo no puede ser que tenga tan mala suerte primero ayer y ahora hoy también, pero donde mas puede estar – se preguntó.
Entonces se le vino a la cabeza la casa de Kaiba.
- Ay no – se quejó- en todos los lugares menos ahí por favor.
Sin embargo se trataba de todo el dinero del mes así que no le quedó otra opción que encaminarse hacia allá, todo el camino se la pasó pensando en como encararía a Kaiba o quizás por alguno de esos milagros de la divina providencia xD la billetera estaría tirada por ahí en la entrada principal y no tendría que encontrárselo.
- Si por favor que sea así por lo menos en pago al horrible día tuve ayer por favor- dijo juntando las manos y bajando la cabeza en tono de súplica.
Pero como la vida no es tan fácil no encontró la dichosa billetera en la entrada ahora le tocaría entrar y pedírsela a Kaiba y eso si es que este la tenía y si así fuera seguro que se las arreglaría para humillarlo de nuevo, esto le hizo dudar a Joey sobre si en verdad sería buena idea preguntar o no, cuando en eso sintió una voz que lo llamaba.
- Disculpe joven – dijo un hombre algo mayor- pero es usted Joey Wheeler.
- Si – respondió Joey y al momento se sintió algo esperanzado, quizás ese viejito tendría su billetera.
- Soy el portero de la mansión Kaiba o bueno por lo menos de imagen porque aquí todo es manejado por una supercomputadora, pero bueno el señor Kaiba me dijo que le entregara algo que seguro estaría buscando.
A Joey se le iluminó la cara de alegría.
- En serio muchas gracias – respondió pero la sonrisa se le borró de la cara cuando vio que lo que traía el hombre no era mas que el gigantesco oso de peluche .
- Tomé aquí tiene -dijo el hombre extendiéndoselo a Joey.
- Pero que demonios se ha creído ese Kaiba ahora va a ver – dijo tomando el oso- no voy a permitir que se siga burlando de mi dijo entrando por la reja principal.
- E... espere joven no puede entrar así no mas sin el permiso del señor – el hombre trató de detenerlo sin éxito
- Pues me llega lo que diga "el señor" – dijo Joey apresurando el paso hacia la puerta principal.
Jamás hubiera creído que la casa de Kaiba fuera tan grande, le tomó media hora llegar hasta la entrada propiamente dicha de la mansión, miró su reloj y ya eran las 9 de la noche.
- Demonios – exclamó- ahora entiendo porque Kaiba se moviliza a todos lados en auto o helicóptero.
Se detuvo ante la puerta y tocó el timbre del intercomunicador.
- Residencia Kaiba, que se le ofrece- dijo una voz femenina del otro lado.
- Vengo a ver al Sr. Kaiba- dijo Joey fingiendo voz de señor importante.
- Un momento por favor- dijo la voz.
Y las puertas se abrieron y pudo ver a una señora uniformada que parecía ser la ama de llaves o algo así fue lo único que se le ocurrió a Joey y que parecía bastante sorprendida de ver a ese muchacho rubio con tremendo oso de peluche en los brazos.
- Disculpe, pero quien es usted – preguntó algo nerviosa.
- Ah solo un amigo de Kaiba – ja un amigo eso si que daba risa- podría decirme donde está por favor es que necesito hablar urgentemente con él.
- Espere iré a llamarlo de inmediato- respondió la señora.
- No por favor no se preocupe solo dígame donde queda su cuarto que quiero darle una sorpresa.
- Bueno, es la sexta puerta del segundo pasillo en el segundo piso pero al señor no le gusta que lo molesten de improviso así que... oiga joven espere por favor
Pero Joey ya había empezado a subir las escaleras, llegó al segundo piso, segundo pasillo y un , dos, tres, cuatro, cinco, sexta puerta. Ahora si que Kaiba lo iba a escuchar y de una patada abrió la puerta n_nU.
- Así que ya estás aquí- dijo Kaiba bastante calmado, la verdad es que había visto todo por su computadora que estaba conectada a todas las cámaras de seguridad de la casa.
- Si aquí estoy y he venido a decirte un par de verdades que muchos deberían haberte dicho hace mucho tiempo, y toma esto- dijo lanzando el oso de peluche al suelo- que pretendes seguir burlándote de mi, que es lo que... – repentinamente la voz se le fue apagando a Joey.
Kaiba había sacado de uno de los cajones de su escritorio la billetera de Joey y la tenía jugando con las manos.
- E... esa es mi billetera! – exclamó Joey.
- Y que crees eh? Que no me había dado cuenta, quien mas sino tendría tantas fotos estúpidas en ella- dijo Kaiba burlándose.
- Devuélvemela ahora mismo- ordenó Joey.
- Vaya, vaya, vaya, creo que no estás en posición de exigir nada Wheeler después de todo soy yo quien la tiene –añadió Kaiba con una sonrisa de sarcasmo- porque no suplicas un poco por ella.
- Maldito Kaiba- exclamó Joey abalanzándose sobre él.
- Buen intento Wheeler -dijo Kaiba esquivándolo y levantando la billetera a lo alto,- porque no intentas cogerla
Joey empezó a saltar intentando cogerla pero Kaiba era un poco mas alto y le era difícil siquiera tocarla, por otro lado mientras saltaba se desplazaban por todo el cuarto. En uno de esos saltos Joey perdió el equilibrio y cayó encima de Kaiba y ambos sobre la cama. Joey abrió los ojos y se encontró con la sonrisa burlona de Kaiba.
- Devuélvemela – le gritó.
- Solo si me das un beso – respondió Kaiba.
- Pero que estás diciend...
Su frase fue interrumpida por los labios de Kaiba sobre los suyos, otra vez esa lengua empezó a explorar su boca de manera exquisita pero esta vez la suya la buscó para empezar un juego en el que Joey fue el primero en perder el aliento.
- Y ahora porque fue eso – preguntó – acaso una venganza por entrar a tu casa sin permiso.
- No- respondió Kaiba – fue porque quise- y volvió a atrapar la boca de Joey con la suya.
El beso continuó, Kaiba colocó su mano en la nuca de Joey para acercarlo un poco mas a él.
Pero que estaba sucediendo de nuevo Kaiba lo estaba besando y él lo estaba dejando, demonios se sentía tan bien, de pronto sintió la mano de Kaiba por debajo de su polo, quería pedirle que se detuviera pero su cuerpo lo estaba traicionando y no lo dejaba pensar bien, por fin se separaron un momento mientras respiraban agitadamente.
- Yo, Kaiba no se si esto esté bien- dijo Joey- además no se si estás jugando o en realidad quieres algo conmigo o sientes algo por mi.
- Tranquilízate cachorrito – dijo Kaiba con mirada lujuriosa (Off. Ay no se me ocurrió otra cosa)- sino te dejas llevar como vas a saberlo?
- Pero es que... esta es mi primera vez – añadió Joey algo avergonzado- y se supone que debería ser con la persona que amo y se supone también me ama, se que suena cursi pero es así como pienso.
- Pues entonces está bien- y diciendo esto cambió las posiciones y se situó sobre Joey- porque así están las cosas- añadió.
Joey quiso responder pero otro beso se lo impidió, Kaiba lo fue despojando de su ropa poco a poco
- Perfecto- pensó Kaiba- al ver a Joey completamente desnudo, si que el rubio tenía un cuerpo increíble que dejaría sin aire a cualquiera.
Y empezó a besar el cuello del rubio mordiendo suavemente aquí y allá, Joey por su parte solo pudo aferrarse bien a las sábanas, esos besos lo estaban excitando bastante. Kaiba siguió son cu tarea pero fue bajando poco a poco hasta encontrarse con de los pezones de Joey, empezó a succionarlo suavemente haciendo que Joey dejara escapar un gemidito que no hizo mas que excitar mas a Kaiba cuando este estuvo ya bastante duro hizo lo mismo con el otro acompañado de caricias a lo largo de toda la suave piel de Joey.
- Ahhhh Kaiba- Joey dejo escapar un gemido.
- Puedes llamarme por mi nombre si así lo quieres – respondió Kaiba.
Siguió bajando hasta que llegó donde quería y separó un poco las piernas de Joey tomando su ya erección entre sus manos, aquí fue cuando Joey se asustó un poco.
- Espera Kaiba que estás haciendo? – preguntó algo asustado
- No te preocupes, no voy a hacerte daño- respondió Kaiba picaramente- y además ya te dije que puedes llamarme Seto.
Y diciendo esto tomó el miembro de Joey con la boca y empezó a succionarlo suavemente, Joey empezó a gemir exquisitamente y retorcerse debajo de él, eso no hizo mas que excitar a Kaiba de sobremanera haciéndolo aumentar la velocidad.
- Ahhhhhhh K.. Seto ya no puedo mas gimió Joey aferrándose mas de las sábanas.
Y llegando al clímax vertió toda su semilla en la boca de Kaiba que bebió cada gota de ese néctar maravilloso, siguió gimiendo producto de las caricias que Kaiba seguía proporcionándole y no se dio cuenta cuando este metió la mano de bajo de la cama para sacar un frasco de vaselina. Volvió a tomar los labios de Joey si que el rubio sabía bien en verdad esa boca era toda una explosión de sabores para él y la juguetona lengua del rubio si que le encantaba, el beso se hizo cada vez mas profundo hasta que perdiendo el aliento tuvieron que separarse de nuevo Joey que ya estaba completamente invadido por el placer trató inútilmente de desabotonar la camisa de Kaiba.
- No te preocupes – dijo este- esta vez yo lo haré por ti y diciendo eso se despojó rápidamente de toda su ropa.
Así quedando nuevamente encima de Joey permitiendo que sus erecciones chocaran y haciendo que Joey volviera a emitir tremendo gemido que fue música para los oídos de Kaiba, sin embargo no quería que el rubio se volviera a venir antes de tiempo así que tomo un poco de vaselina con los dedos y dirigió su mano hacia la entrada del rubio y comenzó a prepararlo metiendo lentamente un primer dedo.
- Arrgh – esta vez fue un gemido de placer y de dolor el que escapó de Joey y el que lo hizo aferrarse con ambos brazos del cuello de Kaiba.
- No te preocupes, dolerá un poco pero luego todo estará bien dijo mostrándole una sonrisa realmente verdadera cosa que tranquilizo a este un poco.
Siguió con su trabajo e introdujo un segundo y un tercer dedo y empezó a moverlos en el interior de Joey, este volvió a gemir aun mas fuerte
- Ahhhh ya basta ya no puedo, ya no – exclamó el rubio entre quejidos.
- Pídemelo – le dijo Kaiba.
- Te.. te necesito Seto por favor Ahhh ... – pudo decir entre jadeos.
Esta petición lo fue todo para Kaiba, Joey se veía exquisitamente delicioso mejillas sumamente sonrojadas, cuerpo sudoroso ya no pudo mas y retiró sus dedos de la entrada de Joey colocando su erección en ella y penetrándolo suavemente. Se sentía extremadamente cálido esa estrechez lo volvía extremadamente loco. Joey enredó sus piernas instintivamente alrededor de la cintura de este al principio sintió algo de dolor que fue reemplazado por placer cuando a Kaiba empezó a salir y entrar de él.
- Ah!!! Seto si mas sigue por favor...
Esas palabras terminaron de motivar a Kaiba y las embestidas aumentaron de ritmo mas aun cuando Joey logró captar el mismo ritmo que Kaiba moviéndose deliciosamente debajo de él .
- Ya no puedo mas, Oh!!! Seto – gimió Joey.
Llegando nuevamente al clímax y derramándose entre ambos, segundos después Kaiba hacía lo mismo explotando dentro de Joey y cayendo rendido sobre este aun dentro de él. Ya recuperando el aliento se separó de él y lo abrazó acercándolo a él.
- Lo hiciste muy bien cachorrito – dijo pasando la mano por lo cabellos del rubio.
- No me llames así – atinó a decir Joey, pero un beso corto pero dulce le robó las palabras de la boca.- Yo –dijo nuevamente bajando un poco la cabeza- quiero saber que significó para ti todo esto
- Pues significó estar con la persona mas excitante del mundo por unos momentos- dijo riéndose.
- Excitante!!! – exclamó Joey- entonces eso soy para ti- añadió tristemente pero sintió como una mano le levantó a la barbilla para toparse nuevamente con esos ojos azules pero que esta vez no proyectaban la misma frialdad de siempre sino que transmitían bastante calidez.
- Escúchame muy bien porque esto solo lo diré esta vez porque la verdad es que no me gusta hablar de este tipo de cosas- añadió Kaiba bastante serio- lo hice porque es lo que he querido desde hace tiempo no se si desde la primera que te vi pero solo se que lo hice sintiendo algo mas que cariño por ti si quieres llamarlo amor pues llámalo así, si deje lo que dije ayer fue porque tenía miedo a la forma que reaccionaras.
Kaiba diciéndole que tenía miedo, por un momento Joey tuvo la sensación que quizás era uno de esos sueños absurdos que tenía constantemente pero no lo estaba escuchando en vivo y en directo, entonces había sido eso y no que Kaiba, bueno Seto en verdad lo odiara pero por otro lado...
- Entonces estás diciendo que me amas? – preguntó temeroso
- Te dije que no lo iba a repetir otra vez así que si lo entendiste bien y si no que pena – dijo algo fastidiado, haber dicho esas cosas ya le había costado bastante
- Pues si entendí, creo ajaja bueno supongo que no puedo esperar mas de ti además yo también siento lo mismo- dijo acurrucándose contra el pecho de Kaiba a quien se le subieron los colores a las mejillas después de escucharlo.
- Ya duérmete y cállate si – dijo nervioso.
- Está bien- respondió Joey- hasta mañana, que duermas bien Seto – y se quedó profundamente dormido.
Kaiba sin dejar de abrazarlo le dio un beso en la frente y murmuró...
- Buenas noches mi cachorro
Continuará...
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Notas de autora . Bueno ese es el capítulo cuatro =P ya saben que estoy abierta a críticas constructivas, de nuevo Arigato a todos los que leen mi fic y gracias de nuevo a los que dejaron reviews.