Capítulo 2.
Una agradable sensación de cosquillas nacía en su cara para viajar por todo su cuerpo. Era... como una caricia deliciosa... un roce accidental... Kai se movió un poco, pensando que las sábanas podían estar jugándole una mala pasada, pero el cosquilleo continuaba. Entonces, decidió despertar, para ver que causaba ese delicioso placer... Y mientras se levantaba, pudo ver como esa mano que había mantenido prisionera durante tanto tiempo se movía... ¡los dedos se movían!... entonces... la sensación... Sin soltarlo, Hiwatari sintió arder sus mejillas. Un roce tan mínimo lo había acunado de tal forma.... Pero la mano se movía... y aferraba débilmente la suya... Una sonrisa nació en sus labios, y una lágrima emergió de sus ojos marrones....
-¿Kai?
Rápidamente soltó la mano y se levantó con ojos sorprendidos.
-¿Rei? -...¿Porqué lloras?
Una segunda lágrima cayó sin que el otro se diera cuenta.
-E-estás despierto....
Por un momento se sintió tremendamente estúpido. ¡Si la mano se movía era obvio que su dueño reaccionaba!. Rápidamente se secó las lágrimas que caían y salió de la habitación, chocando con Max en el camino. La manera en que salió fue tan intempestiva, que el muchacho rubio se imaginó lo peor con su compañero enfermo.
-¡Rei! -pero el corazón le dio un brinco al verlo despierto... aunque tenía una expresión tan triste, que la alegría no le duró nada-Rei...
-¿Porqué Kai se fue así Max?... ¿qué pasó?
-...Nada Rei... -dijo con un suspiro-
-¿Y... el duelo?
-Takao venció a Tala.
Una enorme sonrisa afloró en los labios delgados del chino, sacando también una sonrisa de su compañero.
-Iré por un médico Rei. No tardo.
A la mañana siguiente, los equipos de blade luchadores iban a recibir a Rei en la entada del hospital... pero este de inmediato notó la ausencia de uno de ellos.
***
-¿Te duele algo Rei?
La suave voz de Mariah lo sacó bruscamente de sus pensamientos.
-E-eh.. no, para nada.
-¿En qué pensabas?... pareciera que te preocupa mucho.
-No es nada Mariah, en serio...
-¿Seguro?
-Seguro...
Rei continuó mirando la nada, sin notar que su amiga lo miraba insistentemente.
-A mi no me engañas Rei, ¿qué pasó?
-Nada Mariah, en serio...
Cada vez la negación salía menos segura. Parecía que a cada "nada Mariah, nada" la voz se le quebraba un poco y titubeaba. Pero, ¿sería bueno contarlo?, ¿no sería agrandar demasiado un pequeño..."incidente"?, aunque no negaba que su silencio era producido por la preocupación que Kai le dejó cuando despertó....
-Cuando desperté... Kai estaba conmigo... -dijo sin darse cuenta, pero se detuvo de inmediato, mirándola con ojos un tanto culpables. Ella olió su duda y cerró la puerta de la habitación del hotel, asegurándose que nadie escuchara-
-¿Pero...?
-Mariah... no se...
-Ya empezaste... -él suspiró y bajó la cabeza-
-... Él... el estaba llorando... y salió corriendo cuando le pregunté...
-¿Kai llorando?, ¿Kai Hiwatari? -él asintió con algo de vergüenza- ¿Pero eso no es todo verdad?
-Cuando desperté... el dormía junto a la cama, apoyado en ella...
-¿Y?... -de pronto ella se tapó la boca y se espantó- ¡¿No me digas que te hizo algo?!
-¡No!... mi... mi mano estaba atrapada bajo su cara... -Mariah miró que un tenue carmesí tiñó la piel morena de su amigo- Y bueno... Kai... la tenía atrapada....
-¿Quieres decir que Kai te estaba tomando la mano? -él asintió rápidamente- ¿Y.. qué hiciste tú?
-... Yo... le acaricie la cara...
-Pero Rei... tú... -ella se quedó sin palabras- ¿Qué más pasó?
-Kai despertó pero no notó que yo lo había hecho... siguió mirando mi mano y la estrechó con más fuerza... entonces comenzaron a caer sus lágrimas... y yo le hablé... y me soltó... y se fue....
-Rei... -una pregunta se agolpaba en su garganta, pero se negaba a salir.- Rei... tú... ¿sientes algo por....?
-¡Hasta que los encuentro! -Takao entró en la habitación bruscamente, sin notar la mirada asesina de Mariah-
-¡Estamos conversando Takao! -gritó ella intentando sacarlo de la pieza para poder terminar-
-Pueden conversar después, no saben el trabajo que me costó traerlo...
-¿De qué hablas?
El muchacho salió de la pieza y volvió empujando a quien menos quería ver Mariah en esos momentos...
-Te digo que fui el primero en verlo...
-Pero no fuiste a verlo cuando fue dado de alta y eso es muy feo amigo...
Kai entra empujado por Takao, pero no mira a Rei.
-No lo empujes Takao -dijo él- Ya nos habíamos visto antes...
-Lo mejor será que dejemos que Rei descanse -interrumpió ella tomando del brazo a Takao para sacarlo, puesto que se notaba que Kai estaba más que ansioso por salir de aquél lugar- Vamos.
-Eh, ¡Kai! -la voz del chico paralizó su cuerpo. Mariah miró hacia atrás un momento y dudó si cerrar la puerta o no, pero creyó que lo mejor era que aclararan algunas cosas... aunque le doliera el alma hacerlo.- No contestaste mi pregunta el otro día.... ¿Porqué...?
-Eso no tiene importancia. -gruñó-
-Tu no llorarías por algo sin importancia Kai.
-Ya pasó y no importa.
-¿Y qué importa entonces?
-Que estás bien.
La mirada dorada y la marrón se fundieron en la sorpresa. Uno por lo que había oído, y el otro por lo que había dicho. El silencio reinó entre ambos después de eso. Sus mejillas estaban algo coloradas y no se miraban.
-Kai, ¿puedo hacerte una pregunta?
-....-de reojo miró a su compañero y rogó que no fuera una pregunta comprometedora-
-¿Tú... tu conoces a alguien que use ese tipo de marcas en la cara? Como las tuyas.
-Em... no... no que yo recuerde... -dijo sorprendido por la interrogante-
-Oh, ya veo...
-¿Porqué lo preguntas?
-Nada... solo...
-¿Solo?
-No lo se... solo quise preguntar.
Lentamente, Rei se levantó y caminó con pasos un tanto inseguros hasta la ventana. Kai lo seguía sin pestañear.
-Ahora yo quiero preguntarte algo...
-... Lo que digas...
-¿Porqué no despertabas?... tus heridas no eran graves...
Rei abrió la boca para contestar, pero de sus labios salió una frase muy distinta a la que se formaba en su mente.
... No podía... no podía despertar por mucho que quisiera... mis ojos no se abrían... y aunque escuchaba tu llanto, algo me impedía salir de ahí.. -¿Porqué piensas que no quería despertar?.
-... Por nada...
Apoyado en la ventana, Rei sentía el viento jugar en su cara y su cabello. Cerró los ojos por un momento para disfrutar de la sensación, pero al hacerlo, una sensación de caída llenó su mente, logrando que sus piernas se doblaran y cayera.
-¡Rei!
-E-estoy bien.... solo fue un mareo...
Con mucho cuidado Hiwatari ayudó a Kon a levantarse. El muchacho chino se apoyó en el hombro de su líder y en la ventana, y por unos instantes, sus ojos dorados quedaron hechizados por la altura que había entre el suelo y su posición.
-Mejor vuelve a la cama Rei, aún no estás bien.
-...Supongo que si...
A los minutos, Kon estaba profundamente dormido y Kai aprovechó para salir y desaparecer por unas cuantas horas...
***
El cielo oscuro cubría la ciudad que luchaba contra las sombras con sus detestables luces artificiales. Pequeños destellos amarillos y blancos en una ciudad oscura, tratando de guiar a las personas de alma negra....
Kai observó el cielo nocturno y deseó un apagón general con todo su ser. Nada anhelaba más en ese momento como la oscuridad absoluta y abrigadora. Las dudas llenaban su alma y la atormentaban lenta y cruelmente.
¿Qué le pasaba cuando Rei estaba cerca?. ¿Porqué sentir esa... "obligación" con él, ahora que estaba casi sano?... ¿acaso ese era el sentimiento de culpa?... ¿Acaso... solo era culpa lo que lo ataba desde el día que Rei cayó inconsciente en la batalla frente a Bryan?
El sol apareció sin que Hiwatari notara su salida ni ascenso.
EL muchacho movió su cabeza de lado a lado intentando vanamente despejar las dudas. No entendía del todo lo que sentía ni lo que hacía, y la única explicación a "tan irracionales actos"... era sencillamente inaceptable... ¿o no?... O sea... ¿tan malo podía ser?... ¿acaso no se repetía día tras día que su frialdad era solo una actitud pasajera?, ¿no pensaba acaso enamorarse un día y vivir como un chico normal?, pero...
-¿Porqué demonios no puedo ser como todos?
-Es tu gracia Kai, ser diferente...
La voz a sus espaldas lo asustó mucho, pero al voltear solo vio a Takao...
-¿Qué haces aquí?...
-Me preocupó verte salir de esa forma y no volver.
-¿De qué forma?
-Como si hubieras visto a un muerto.
-...
-¿Porqué quieres ser como los demás Kai? -preguntó tendiéndose en el pasto- Sobresales por no ser como todos.
-...Hay cosas en que es bueno ser como todos.
-¿Cómo cuales?
-... Muchas cosas.
Durante algunos momentos ambos se mantuvieron en silencio, mirando el cielo. La mente de Kai no dejaba de ser un revoltijo, mientras la de Takao pensaba rápidamente en preguntas que le permitieran saber que pasaba con su amigo.
-¿Hablaste con Rei?
-¿Eh?
-Mariah dijo que seguramente hablarían algo y que no debía escuchar tras la puerta...
-¡¿Estabas escuchando?!
-No... -dijo rascando su pelo y riendo- Ella me sacó de una oreja... de hecho... aún me duele.
-Eso te pasa por entrometido -regañó entre divertido y serio-
-Si, supongo que si, ¿pero de qué hablaron?
-...De nada en especial... Además, se sintió mal, así que preferí dejarlo solo.
-Eso lo notamos... generalmente nadie se da cuenta cuando desapareces, pero hoy todos vimos que saliste.
-...
-¿Estás seguro que no pasó nada mientras conversaban?
-...Nada.
-No es bueno que te culpes por lo que pasó Kai, lo importante es que está bien.
-El que ahora esté bien no significa que lo de antes deba ser olvidado.
-Tan serio como siempre Kai. Enfermarás si sigues así. Comes poco y duermes menos de lo que comes...
-Siempre ha sido así.
-Anímate Kai. -dijo guiñándole el ojo- Ya verás como pronto está subiendo tejados y comiendo ratones y pescado.
-Como buen gato -suspiró con una sonrisa-
-Como buen gato.
Continuará...
Notas: ... nada que decir en realidad. ediciones_ryochan@hotmail.com
Una agradable sensación de cosquillas nacía en su cara para viajar por todo su cuerpo. Era... como una caricia deliciosa... un roce accidental... Kai se movió un poco, pensando que las sábanas podían estar jugándole una mala pasada, pero el cosquilleo continuaba. Entonces, decidió despertar, para ver que causaba ese delicioso placer... Y mientras se levantaba, pudo ver como esa mano que había mantenido prisionera durante tanto tiempo se movía... ¡los dedos se movían!... entonces... la sensación... Sin soltarlo, Hiwatari sintió arder sus mejillas. Un roce tan mínimo lo había acunado de tal forma.... Pero la mano se movía... y aferraba débilmente la suya... Una sonrisa nació en sus labios, y una lágrima emergió de sus ojos marrones....
-¿Kai?
Rápidamente soltó la mano y se levantó con ojos sorprendidos.
-¿Rei? -...¿Porqué lloras?
Una segunda lágrima cayó sin que el otro se diera cuenta.
-E-estás despierto....
Por un momento se sintió tremendamente estúpido. ¡Si la mano se movía era obvio que su dueño reaccionaba!. Rápidamente se secó las lágrimas que caían y salió de la habitación, chocando con Max en el camino. La manera en que salió fue tan intempestiva, que el muchacho rubio se imaginó lo peor con su compañero enfermo.
-¡Rei! -pero el corazón le dio un brinco al verlo despierto... aunque tenía una expresión tan triste, que la alegría no le duró nada-Rei...
-¿Porqué Kai se fue así Max?... ¿qué pasó?
-...Nada Rei... -dijo con un suspiro-
-¿Y... el duelo?
-Takao venció a Tala.
Una enorme sonrisa afloró en los labios delgados del chino, sacando también una sonrisa de su compañero.
-Iré por un médico Rei. No tardo.
A la mañana siguiente, los equipos de blade luchadores iban a recibir a Rei en la entada del hospital... pero este de inmediato notó la ausencia de uno de ellos.
***
-¿Te duele algo Rei?
La suave voz de Mariah lo sacó bruscamente de sus pensamientos.
-E-eh.. no, para nada.
-¿En qué pensabas?... pareciera que te preocupa mucho.
-No es nada Mariah, en serio...
-¿Seguro?
-Seguro...
Rei continuó mirando la nada, sin notar que su amiga lo miraba insistentemente.
-A mi no me engañas Rei, ¿qué pasó?
-Nada Mariah, en serio...
Cada vez la negación salía menos segura. Parecía que a cada "nada Mariah, nada" la voz se le quebraba un poco y titubeaba. Pero, ¿sería bueno contarlo?, ¿no sería agrandar demasiado un pequeño..."incidente"?, aunque no negaba que su silencio era producido por la preocupación que Kai le dejó cuando despertó....
-Cuando desperté... Kai estaba conmigo... -dijo sin darse cuenta, pero se detuvo de inmediato, mirándola con ojos un tanto culpables. Ella olió su duda y cerró la puerta de la habitación del hotel, asegurándose que nadie escuchara-
-¿Pero...?
-Mariah... no se...
-Ya empezaste... -él suspiró y bajó la cabeza-
-... Él... el estaba llorando... y salió corriendo cuando le pregunté...
-¿Kai llorando?, ¿Kai Hiwatari? -él asintió con algo de vergüenza- ¿Pero eso no es todo verdad?
-Cuando desperté... el dormía junto a la cama, apoyado en ella...
-¿Y?... -de pronto ella se tapó la boca y se espantó- ¡¿No me digas que te hizo algo?!
-¡No!... mi... mi mano estaba atrapada bajo su cara... -Mariah miró que un tenue carmesí tiñó la piel morena de su amigo- Y bueno... Kai... la tenía atrapada....
-¿Quieres decir que Kai te estaba tomando la mano? -él asintió rápidamente- ¿Y.. qué hiciste tú?
-... Yo... le acaricie la cara...
-Pero Rei... tú... -ella se quedó sin palabras- ¿Qué más pasó?
-Kai despertó pero no notó que yo lo había hecho... siguió mirando mi mano y la estrechó con más fuerza... entonces comenzaron a caer sus lágrimas... y yo le hablé... y me soltó... y se fue....
-Rei... -una pregunta se agolpaba en su garganta, pero se negaba a salir.- Rei... tú... ¿sientes algo por....?
-¡Hasta que los encuentro! -Takao entró en la habitación bruscamente, sin notar la mirada asesina de Mariah-
-¡Estamos conversando Takao! -gritó ella intentando sacarlo de la pieza para poder terminar-
-Pueden conversar después, no saben el trabajo que me costó traerlo...
-¿De qué hablas?
El muchacho salió de la pieza y volvió empujando a quien menos quería ver Mariah en esos momentos...
-Te digo que fui el primero en verlo...
-Pero no fuiste a verlo cuando fue dado de alta y eso es muy feo amigo...
Kai entra empujado por Takao, pero no mira a Rei.
-No lo empujes Takao -dijo él- Ya nos habíamos visto antes...
-Lo mejor será que dejemos que Rei descanse -interrumpió ella tomando del brazo a Takao para sacarlo, puesto que se notaba que Kai estaba más que ansioso por salir de aquél lugar- Vamos.
-Eh, ¡Kai! -la voz del chico paralizó su cuerpo. Mariah miró hacia atrás un momento y dudó si cerrar la puerta o no, pero creyó que lo mejor era que aclararan algunas cosas... aunque le doliera el alma hacerlo.- No contestaste mi pregunta el otro día.... ¿Porqué...?
-Eso no tiene importancia. -gruñó-
-Tu no llorarías por algo sin importancia Kai.
-Ya pasó y no importa.
-¿Y qué importa entonces?
-Que estás bien.
La mirada dorada y la marrón se fundieron en la sorpresa. Uno por lo que había oído, y el otro por lo que había dicho. El silencio reinó entre ambos después de eso. Sus mejillas estaban algo coloradas y no se miraban.
-Kai, ¿puedo hacerte una pregunta?
-....-de reojo miró a su compañero y rogó que no fuera una pregunta comprometedora-
-¿Tú... tu conoces a alguien que use ese tipo de marcas en la cara? Como las tuyas.
-Em... no... no que yo recuerde... -dijo sorprendido por la interrogante-
-Oh, ya veo...
-¿Porqué lo preguntas?
-Nada... solo...
-¿Solo?
-No lo se... solo quise preguntar.
Lentamente, Rei se levantó y caminó con pasos un tanto inseguros hasta la ventana. Kai lo seguía sin pestañear.
-Ahora yo quiero preguntarte algo...
-... Lo que digas...
-¿Porqué no despertabas?... tus heridas no eran graves...
Rei abrió la boca para contestar, pero de sus labios salió una frase muy distinta a la que se formaba en su mente.
... No podía... no podía despertar por mucho que quisiera... mis ojos no se abrían... y aunque escuchaba tu llanto, algo me impedía salir de ahí.. -¿Porqué piensas que no quería despertar?.
-... Por nada...
Apoyado en la ventana, Rei sentía el viento jugar en su cara y su cabello. Cerró los ojos por un momento para disfrutar de la sensación, pero al hacerlo, una sensación de caída llenó su mente, logrando que sus piernas se doblaran y cayera.
-¡Rei!
-E-estoy bien.... solo fue un mareo...
Con mucho cuidado Hiwatari ayudó a Kon a levantarse. El muchacho chino se apoyó en el hombro de su líder y en la ventana, y por unos instantes, sus ojos dorados quedaron hechizados por la altura que había entre el suelo y su posición.
-Mejor vuelve a la cama Rei, aún no estás bien.
-...Supongo que si...
A los minutos, Kon estaba profundamente dormido y Kai aprovechó para salir y desaparecer por unas cuantas horas...
***
El cielo oscuro cubría la ciudad que luchaba contra las sombras con sus detestables luces artificiales. Pequeños destellos amarillos y blancos en una ciudad oscura, tratando de guiar a las personas de alma negra....
Kai observó el cielo nocturno y deseó un apagón general con todo su ser. Nada anhelaba más en ese momento como la oscuridad absoluta y abrigadora. Las dudas llenaban su alma y la atormentaban lenta y cruelmente.
¿Qué le pasaba cuando Rei estaba cerca?. ¿Porqué sentir esa... "obligación" con él, ahora que estaba casi sano?... ¿acaso ese era el sentimiento de culpa?... ¿Acaso... solo era culpa lo que lo ataba desde el día que Rei cayó inconsciente en la batalla frente a Bryan?
El sol apareció sin que Hiwatari notara su salida ni ascenso.
EL muchacho movió su cabeza de lado a lado intentando vanamente despejar las dudas. No entendía del todo lo que sentía ni lo que hacía, y la única explicación a "tan irracionales actos"... era sencillamente inaceptable... ¿o no?... O sea... ¿tan malo podía ser?... ¿acaso no se repetía día tras día que su frialdad era solo una actitud pasajera?, ¿no pensaba acaso enamorarse un día y vivir como un chico normal?, pero...
-¿Porqué demonios no puedo ser como todos?
-Es tu gracia Kai, ser diferente...
La voz a sus espaldas lo asustó mucho, pero al voltear solo vio a Takao...
-¿Qué haces aquí?...
-Me preocupó verte salir de esa forma y no volver.
-¿De qué forma?
-Como si hubieras visto a un muerto.
-...
-¿Porqué quieres ser como los demás Kai? -preguntó tendiéndose en el pasto- Sobresales por no ser como todos.
-...Hay cosas en que es bueno ser como todos.
-¿Cómo cuales?
-... Muchas cosas.
Durante algunos momentos ambos se mantuvieron en silencio, mirando el cielo. La mente de Kai no dejaba de ser un revoltijo, mientras la de Takao pensaba rápidamente en preguntas que le permitieran saber que pasaba con su amigo.
-¿Hablaste con Rei?
-¿Eh?
-Mariah dijo que seguramente hablarían algo y que no debía escuchar tras la puerta...
-¡¿Estabas escuchando?!
-No... -dijo rascando su pelo y riendo- Ella me sacó de una oreja... de hecho... aún me duele.
-Eso te pasa por entrometido -regañó entre divertido y serio-
-Si, supongo que si, ¿pero de qué hablaron?
-...De nada en especial... Además, se sintió mal, así que preferí dejarlo solo.
-Eso lo notamos... generalmente nadie se da cuenta cuando desapareces, pero hoy todos vimos que saliste.
-...
-¿Estás seguro que no pasó nada mientras conversaban?
-...Nada.
-No es bueno que te culpes por lo que pasó Kai, lo importante es que está bien.
-El que ahora esté bien no significa que lo de antes deba ser olvidado.
-Tan serio como siempre Kai. Enfermarás si sigues así. Comes poco y duermes menos de lo que comes...
-Siempre ha sido así.
-Anímate Kai. -dijo guiñándole el ojo- Ya verás como pronto está subiendo tejados y comiendo ratones y pescado.
-Como buen gato -suspiró con una sonrisa-
-Como buen gato.
Continuará...
Notas: ... nada que decir en realidad. ediciones_ryochan@hotmail.com
