"Pudo ser..."
Por: JkRowling6.
Disclaimer: Harry Potter y los personajes relacionados son propiedad de J.K.Rowling y Warner Bros.
Summary: Un año después de Hogwarts, Harry y Hermione terminan un largo noviazgo. Los dos deben comenzar una luchar en contra del orgullo... ahora sus decisiones son definitivas. El destino interpone un obstáculo en el camino, y no hay muchas posibilidades de ganar.
N/A: Para los que ya lo leyeron, he editado este fic completamente y he añadido algunas cositas. Recuerden que lo escribí hace un año ya! =P (Fue uno de los primeros, tengan consideración ^.^)
Capítulo 1: "Tristes noticias"
No era la primera vez que Harry Potter cuestionaba su mala suerte. Y tampoco era la primera vez que quería morir y olvidarse de todo. Pero aún así, estaba seguro de que ésta era la primera vez que amaba tanto a una mujer, y de hecho, la primera vez que amaba verdaderamente.
Las cosas no habían sido fáciles desde su noviazgo con Hermione, al finalizar sus estudios mágicos en Hogwarts, porque el tiempo que antes ocupaban para estar juntos, era consumido por las las clases en el Instituto de Capacitación Para Futuros Aurores.
Ya habían pasado tres largas semanas desde el fín de su noviazgo. Tres semanas desde que no se hablaban o no se sonreían, tres semanas desde que no se abrazaban ni se besaban, y a pesar de la desesperación de ambos, ninguno cedía en su orgullo.
El orgullo que había terminado con un noviazgo de tres años.
Ahora Harry apenas se levantaba de la cama, no tenía ánimo de ir al Instituto, pues evitaba minuciosamente cada encuentro con Hermione.
Era doloroso, pero más el obligarse a verla como una desconocida.
Hermione, por su parte, se resistía a comer, y reemplazaba ese tiempo leyendo y estudiando por largas horas, pues para ella esa era la única forma de no pensar en Harry.
Pero se equivocaba.
Se confundía al pensar que leyendo iban a desaparecer aquellos tristes sentimientos, pues su cerebro no alcanzaba a captar las palabras que leía, estas pasaban frente a sus ojos, sin conectarse unas con las otras, resbalaban... eran atraídas por un sólo pensamiento sensato...
Del brillante cerebro de Hermione Granger únicamente se podían rescatar las palabras: Harry Potter...
Harry Potter y lo feliz que pudo seguir siendo con él.
Harry recordaba esa discusión cada día.
*****
Esa noche, Harry había invitado a comer a Hermione. Pero la chica se había disculpado porque su deber era estudiar para un examen al día siguiente.
-¡Siempre te han importado más tus calificaciones que yo!-Exclamó Harry, furioso, cuando Hermione le avisó que no podría ir-. ¡Tú y estudios! Y yo que me vaya al diablo.
-Harry no puedes ser tan egoísta-Le reprochó ella, sentida-. Yo tenía que estudiar, tú no tienes tantas asignaturas como yo...
-Pues quédate con tus estudios y asignaturas-Dijo Harry, finalmente, aunque no muy decidido a lo que iba a hacer-. Y nosotros terminamos, adiós.
Y entonces se marchó dejando a Hermione sumida en el llanto.
*****
-¡Harry! ¡Harry!-Exclamó un chico pelirrojo, pegándole con el codo-. Te estoy hablando.
-Lo siento, me quedé pensando... -Se disculpó, avergonzado-.
Se encontraba en el Callejón Diagon Alley, luego de haber aceptado la invitación de su preocupado amiga pelirrojo, en un intento desesperado por hacerlo sentir mejor.
-Eso es evidente-Aseguró Ron, moviendo la cabeza-. Y hasta te podría decir en qué pensabas, o más bien dicho en quién.
Harry lo miró, sus ojos intentaban parecer curiosos.
-En Hermione-Respondió Ron, acertadamente.
-Ron, yo no pensaba en ella, yo...
-Te conozco desde hace ocho años-Interrumpió Ron-. Y sé que estás sufriendo por ella, y sé que Hermione también sufre mucho por ti. Ayer hablé con ella y... Thomas Jhonson, ya sabes, el hijo del director del Instituto, le pidió que fuera su... su novia.
Harry levantó fugazmente la vista.
-¿Qué?-Preguntó sin atreverse a creerlo.
-Sí, le dijo que llevaba meses enamorado de ella, y que no se atrevía a decírselo por que estaba de novia contigo-Informó Ron.
-¿Y ella qué le dijo?
-Y ella... ella, bueno...
-Ron, dilo-Pidió Harry, adivinando de inmediato la respuesta-. Ella le dijo que sí.
Ron agachó la vista y asintió débilmente.
-Pues que sea muy feliz, algo que no dudo, considerando que está de novia con un mago de mucho dinero.
-Harry, tú sabes que Hermione no lo hace por eso-Espetó Ron, con los ojos excesivamente abiertos, impresionado por la reacción de su amigo-. Ella lo hace porque cree que es el método más fácil para olvidarse de ti.
-Ella a mí no me interesa, Ron-Mintió Harry, parándose de su mesa-. No me importa en lo más mínimo. ¡Señor, la cuenta, por favor!-Exclamó dirigiéndose al mesero, un brujo viejo, de aspecto hosco.
Por: JkRowling6.
Disclaimer: Harry Potter y los personajes relacionados son propiedad de J.K.Rowling y Warner Bros.
Summary: Un año después de Hogwarts, Harry y Hermione terminan un largo noviazgo. Los dos deben comenzar una luchar en contra del orgullo... ahora sus decisiones son definitivas. El destino interpone un obstáculo en el camino, y no hay muchas posibilidades de ganar.
N/A: Para los que ya lo leyeron, he editado este fic completamente y he añadido algunas cositas. Recuerden que lo escribí hace un año ya! =P (Fue uno de los primeros, tengan consideración ^.^)
Capítulo 1: "Tristes noticias"
No era la primera vez que Harry Potter cuestionaba su mala suerte. Y tampoco era la primera vez que quería morir y olvidarse de todo. Pero aún así, estaba seguro de que ésta era la primera vez que amaba tanto a una mujer, y de hecho, la primera vez que amaba verdaderamente.
Las cosas no habían sido fáciles desde su noviazgo con Hermione, al finalizar sus estudios mágicos en Hogwarts, porque el tiempo que antes ocupaban para estar juntos, era consumido por las las clases en el Instituto de Capacitación Para Futuros Aurores.
Ya habían pasado tres largas semanas desde el fín de su noviazgo. Tres semanas desde que no se hablaban o no se sonreían, tres semanas desde que no se abrazaban ni se besaban, y a pesar de la desesperación de ambos, ninguno cedía en su orgullo.
El orgullo que había terminado con un noviazgo de tres años.
Ahora Harry apenas se levantaba de la cama, no tenía ánimo de ir al Instituto, pues evitaba minuciosamente cada encuentro con Hermione.
Era doloroso, pero más el obligarse a verla como una desconocida.
Hermione, por su parte, se resistía a comer, y reemplazaba ese tiempo leyendo y estudiando por largas horas, pues para ella esa era la única forma de no pensar en Harry.
Pero se equivocaba.
Se confundía al pensar que leyendo iban a desaparecer aquellos tristes sentimientos, pues su cerebro no alcanzaba a captar las palabras que leía, estas pasaban frente a sus ojos, sin conectarse unas con las otras, resbalaban... eran atraídas por un sólo pensamiento sensato...
Del brillante cerebro de Hermione Granger únicamente se podían rescatar las palabras: Harry Potter...
Harry Potter y lo feliz que pudo seguir siendo con él.
Harry recordaba esa discusión cada día.
*****
Esa noche, Harry había invitado a comer a Hermione. Pero la chica se había disculpado porque su deber era estudiar para un examen al día siguiente.
-¡Siempre te han importado más tus calificaciones que yo!-Exclamó Harry, furioso, cuando Hermione le avisó que no podría ir-. ¡Tú y estudios! Y yo que me vaya al diablo.
-Harry no puedes ser tan egoísta-Le reprochó ella, sentida-. Yo tenía que estudiar, tú no tienes tantas asignaturas como yo...
-Pues quédate con tus estudios y asignaturas-Dijo Harry, finalmente, aunque no muy decidido a lo que iba a hacer-. Y nosotros terminamos, adiós.
Y entonces se marchó dejando a Hermione sumida en el llanto.
*****
-¡Harry! ¡Harry!-Exclamó un chico pelirrojo, pegándole con el codo-. Te estoy hablando.
-Lo siento, me quedé pensando... -Se disculpó, avergonzado-.
Se encontraba en el Callejón Diagon Alley, luego de haber aceptado la invitación de su preocupado amiga pelirrojo, en un intento desesperado por hacerlo sentir mejor.
-Eso es evidente-Aseguró Ron, moviendo la cabeza-. Y hasta te podría decir en qué pensabas, o más bien dicho en quién.
Harry lo miró, sus ojos intentaban parecer curiosos.
-En Hermione-Respondió Ron, acertadamente.
-Ron, yo no pensaba en ella, yo...
-Te conozco desde hace ocho años-Interrumpió Ron-. Y sé que estás sufriendo por ella, y sé que Hermione también sufre mucho por ti. Ayer hablé con ella y... Thomas Jhonson, ya sabes, el hijo del director del Instituto, le pidió que fuera su... su novia.
Harry levantó fugazmente la vista.
-¿Qué?-Preguntó sin atreverse a creerlo.
-Sí, le dijo que llevaba meses enamorado de ella, y que no se atrevía a decírselo por que estaba de novia contigo-Informó Ron.
-¿Y ella qué le dijo?
-Y ella... ella, bueno...
-Ron, dilo-Pidió Harry, adivinando de inmediato la respuesta-. Ella le dijo que sí.
Ron agachó la vista y asintió débilmente.
-Pues que sea muy feliz, algo que no dudo, considerando que está de novia con un mago de mucho dinero.
-Harry, tú sabes que Hermione no lo hace por eso-Espetó Ron, con los ojos excesivamente abiertos, impresionado por la reacción de su amigo-. Ella lo hace porque cree que es el método más fácil para olvidarse de ti.
-Ella a mí no me interesa, Ron-Mintió Harry, parándose de su mesa-. No me importa en lo más mínimo. ¡Señor, la cuenta, por favor!-Exclamó dirigiéndose al mesero, un brujo viejo, de aspecto hosco.
