17. …hay esperanza de luz.
Qué???- dijeron espantados muchos.Draco, giró su mirada en busca de un racionamiento mejor por parte de Dumbledore.
Está delirando, verdad?- dijo él esperanzado. Me temo que no..- dijo cerrando un instante los ojos-… su dolor es tan intenso que no puede aguantarlo. Pero ella no está herida!!!- dijo sin pensar. Draco…- el director intentó hablarle tranquilamente- ella es consciente de lo que ha hecho, no podía controlar sus movimientos, pero puede que en su interior era lo que deseaba hacer…tener una fuerza que nunca pudo mostrar, y al estar ahora en la situación que se encuentra, pues…es una debilidad que no cuesta de aprovechar… Eso quiere decir, que la esencia de Voldemort se ha aprovechado de la debilidad de Hermione al igual que hizo conmigo, verdad?Dumbledore asintió, y Draco volvió a observar a Hermione.
No quiero perderla- dijo con un tono angustioso en su voz- no ahora…Ron se acercó, y apretando los puños dijo:
No hay ninguna forma de sacar de…de…- señaló la piedra – sin que haya que tener que poner un sustituto o algo? Ella hizo un juramento- dijo Draco- al hacer el hechizo…hizo como una firma de contrato cualquiera que fuese la consecuencia… se arriesgó por…No pudo decir la última palabra…sus ojos empezaban a nublarse, pero no se rendiría…no…
Ginny se adelantó disimuladamente hacia Draco:
Pu-Puede que si la besas… Qué?- contestó Ron Qué pasa? En los cuentos siempre pasa igual, al besar a la chica, el maleficio se rompe, no?Todo el mundo hizo caso omiso de la proposición de la joven.
Snape se adelantó y miró a Hermione como examinándola.
Señor- se dirigió a Dumbledore- creo conocer la posible solución, pero no del todo satisfactoria.Un silencio reinó, Harry no aguantaba aquella tensión que tanto le gustaba mantener a Severus Snape.
Y bien?- insistió Harry. Hay un medio de separar las dos esencias…pero puede que la de Granger deba…permanecer en el interior de la piedra.Draco, instintivamente ojeó la piedra. Depender de algo tan frágil para conservar la vida de aquella muchacha? Pero a su vez, era la única solución…la recuperaría…la tendría de nuevo a su lado….
Hágalo, por favor…Snape, se marchó deprisa al interior de la casa…los demás se sentaron a esperar.
Draco se sentó en el suelo, y cogió a Hermione y la sentó con él. Ella no se resistía, era la imagen de una muñeca.
Menudos quebraderos de cabeza- le decía a Hermione irónicamente- quien me iba a decir que iba a acabar así…no podía complicarme menos la vida?- el silencio no era una virtud en momentos tensos, y Draco lo sabía perfectamente, o no habría estado hablando de ese modo, y con alguien que parecía que no podía escucharle.Comenzó a acariciarle los mechones de pelo como queriéndolos desmarañar. Que tacto más suave le parecía…
No quiero perderte…no pienso hacerlo…soy demasiado testarudo para ver como tú quedas como la valiente, la que nos salva…y yo solo el que se queda sin chica, eh?Antes de darse cuenta, Snape ya volvía con una bolsita de tela.
A duras penas, consiguieron entre Snape y Lupin coger a Hermione sin que Draco se negara a separarse de ella. Pero al fin, él se colocó al lado de Ron.
En pocos instantes, Dumbledore cogió la piedra, y Snape depositó los polvos, con ayuda de las varitas y frases indescifrables, un humo les envolvió, el mismo que había envuelto momentos antes el cuerpo de Hermione.
Draco fijó la vista a la figura de Hermione, pero no podía verle el rostro. Un estruendo hizo que se taparan los oídos, y acto seguido el humo se disipó.
Lo primero que se observó, fue el cuerpo de Hermione cayendo de rodillas y llevándose las manos a los ojos.
Draco no sabía como reaccionar, así que antes observó a Snape, y el gesto que adquirió, poniendo los ojos en blanco…eso era una buena señal…era una gran señal…
Hermione!!- Draco corrió hacia donde ella estaba, y cuando se acercó escuchó sus sollozos.Hermione lloraba desconsoladamente, incluso parecía ahogarse entre sollozo y sollozo. Draco la abrazó protectora mente, y ella pegó un respingo al notar la presencia de él.
Oh Draco…dios, pero que he hecho? Dios….Draco…- ella se aferró a él, llegando a clavarle las uñas- como pude…como? SShh, ya pasó…tranquila…- él no pudo controlar que los ojos se enrojecieran de la angustia retenida, ella había vuelto. Soy como ellos….soy como ÉL, yo no…yo no puedo…Draco le acariciaba el pelo pero no lograba tranquilizarla, ahora él miraba con impotencia hacia el lado de Harry y los demás.
Luna se acercó, y sacando la varita, señaló a Hermione, y susurrando unas palabras, ella cayó dormida en los brazos de Draco.
El descanso la tranquilizará.- dijo Harry. Gracias…- contestó sin apartar los ojos del gesto, ahora tranquilo, del rostro de Hermione- gracias...*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*
Escuchaba unos sonidos a la lejanía, gente que dialogaba, pero no podía diferenciar de quien eran las voces.
Todo estaba oscuro, su mente había vuelto a la consciencia, pero se negaba a abrir los ojos, todavía no, no estaba lista.
Notaba que su mano izquierda estaba protegida por un cálido contacto, a pesar de ello, quería estar refugiada en la tranquilidad del sueño.
Mientras tanto, en la estancia continua, varias personas conversaban:
Me habría encantado acabar con él con mis propias manos... ese Colagusano... Bueno Lupin, puedes sentirte orgulloso de que lo halla echo una de tus más preciadas alumnas- contestó sonriente Harry. Pero aun así...el precio ha sido demasiado alto...ella no se merecía cargar con esos actos- dijo Ron sentado en el rincón más alejado.De vez en cuando, el pelirrojo miraba de reojo la puerta cerrada de la habitación donde se encontraba durmiendo Hermione.
Luna se dio cuenta de esto, y se acercó a Ron:
Quieres hablar? Creo que no hace falta- dijo haciendo una mueca torcida- yo ansiaba la felicidad de Hermione...y ...aunque me pese...creo que la ha encontrado junto a...ese.Luna ahogó una pequeña risa, Ron la miró ceñudo.
Nunca cambies, Ron Weasley, estoy completamente segura, que ese encanto que irradias cautivara a esa persona especial para ti. Una vez creí encontrarla... Nunca se encuentra a la primera...he ahí lo divertido.Ron le sonrió en forma de respuesta y Luna se alejó para colocarse al lado de Harry, no sin antes apretarle un poco su mano para que él se voltease a encontrarse con aquellos ojos profundos que nunca se cansaría de mirar.
Dumbledore entró en el salón, y todos callaron. La profesora Mcgonagall y varios miembros de la Orden del Fénix, entraron tras él.
Todos los que capturamos están camino a ser juzgados por el Ministerio. Este asunto ya no depende de nosotros directamente- dijo tranquilamente el viejo director- no obstante me pregunto como está nuestra joven Granger.Harry se adelantó para colocarse frente a él:
Todavía esta durmiendo, señor, pero no hay síntomas de que esté en peligro. Ya veo que el joven Malfoy no se aparta de ella. Necesitaríamos múltiples hechizos aturdidores para poder apartarle de aquella habitación- dijo con sorna Ron.A esto, no pudieron más que romper en sonoras carcajadas. Pero un muchacho que se encontraba al otro lado de la pared, no parecía estar muy cómodo con el comportamiento de aquellos.
Se puede saber que es tan divertido?- dijo para sí mismo Draco.Estaba sentado junto a la cama donde reposaba Hermione. Él no apartaba la vista de ella, y de vez en cuando envolvía la mano de la chica, con la suya propia. Intentado comprobar, innecesariamente, que la chica no estaba fría ni que iba a desaparecer.
Draco la miraba con cada vez menos paciencia, no aguantaba estar allí sentado viendo pasar las horas, y que ella no mostrara ningún indicio de despertarse.
Despierta de una puñetera vez, Granger!! Si no lo haces haré que abras esos ojos a la fuerza, y puede ser que no te guste...- dijo con voz severa. Esa...es...forma...de...tratar a una...enferma...Malfoy?La voz débil de Hermione hizo que reaccionara Draco, y poco a poco vio que los ojos de ella empezaban a abrirse.
Por todos los rayos, estabas despierta?- dijo todavía desconcertado. Si digo que sí ..que harás?No le dio tiempo a incorporarse de la cama, pues Draco se echo encima suya a abrazarla.
Eres una tramposa, sangre-sucia. Y tú un aprovechado, condenado hurón engreído.Cuando Draco iba a contestarle, se sorprendió al ver que Hermione lo aferraba por el cuello y lo atraía a ella, envolviéndolo en un cálido beso.
Él, al reaccionar, la abrazó, y pudo sentir el calor que ella desprendía, podía notar cada curva de su piel, bajo aquellas ropas. La deseaba, cuanto la deseaba....
La empujó contra la cama, pero la mala suerte quiso que cayeran en mala posición y rodaran hasta el suelo.
Augh!- dijo Draco tocándose la cabeza, intentando que Hermione no se diera contra el suelo, giró como pudo, y él recibió el golpe del frío suelo, pero en compensación, recibió a Hermione encima suyo, y no se veía nada mal, pero a pesar de ello- por qué siempre me pasa lo mismo???Hermione si no lo conociera bien, pensaría que estaba a punto de llorar de indignación. No pudo más que empezar a reírse.
-No le veo la condenada gracia, Hermione.
Antes de que pudiera hacer nada más, la puerta de la habitación se abrió rápidamente, y las caras de asombro de unos cuantos, que llevaban las varitas preparadas para cualquier peligro no anunciado, se tornaron rojas de la vergüenza o una ligera diversión reflejada en el rostro. Pues no se veía todos los días, a Hermione encima de Draco en el suelo.
No pudieron más que reírse al unísolo.
La cara de Draco no reflejaba ninguna diversión.
No entiendo este extraño sentido del humor....*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*
En el salón todos cogieron asiento, y Harry comenzó a contarle a Hermione todo lo sucedido, hasta que Dumbledore había llegado en donde se encontraban en la batalla.
Hermione escuchaba silenciosamente, sin decir que ella había estado consciente todo aquel tiempo, pero que no podía controlar sus movimientos.
A su espalda, se encontraba Draco con los brazos cruzados contra el pecho y escuchando atentamente.
Dumbledore, le contó lo que había ocurrido con la piedra-alma, y lo que ahora representaba para ella.
Lo entiendes, Hermione.Ella asintió con la cabeza.
Mi esencia, mi alma, o lo que sea lo que me mantiene viva, se encuentra en el interior de esa piedra - dijo señalando el trozo de roca color ámbar que habían colocado en el centro de la mesa- y no hay forma de sacarla y volverla a meter en mi cuerpo, no?El silencia lo confirmó.
Hasta que se encuentre un remedio- cortó Draco- para todo hay un remedio, y este no debe ser una excepción. Hay muchas respuestas que la magia convencional no puede encontrar...hay otros medios.Su voz se tornó siniestra, todos sabían perfectamente a que se refería...magia antigua, o incluso magia negra.
Ya que el señor Malfoy se muestra tan enterado de estos campos...- Draco alzó una ceja curiosa al escuchar las palabras de Dumbledore- esta será su tarea, investigará y encontrará una cura para la señorita Granger. Puede que de ahí encuentre una afinidad para dedicarse a un empleo en un departamento del Ministerio. Me está sugiriendo que trabaje en el Ministerio, señor?El viejo director le sonrió afablemente.
No pensará que necesita seguir en la sombra, verdad? Y no es una sugerencia. Cuando todo esté listo se incorporará a nuestras filas en el Ministerio, necesitamos de sus conocimientos.Draco torció su gesto en una mueca divertida, le encantaba que la gente dependiera de él de esa forma.
Al ver esto, Ron puso los ojos en blanco resignado, no se lo podría quitar de en frente ni en el trabajo.
Harry miró de nuevo la piedra y señalándola dijo:
Quién se encargará de guardar la piedra? No es algo que haya que dejar a la ligera.Todos la miraron, todavía sujeta a la cadena en donde la llevaba Bellatrix Lestrange.
Draco se adelantó y cuidadosamente cogió de la cadena y la alzó. Ron se levantó rápidamente.
No, no y no...esto si que no lo aguanto, tú no vas a...Antes de poder terminar, Draco deslizó el colgante por el cuello de Hermione, y esta la miró sorprendida, al igual que algunos de los allí presentes.
Draco al ver sus caras, dijo con fastidio.
No pensaba quedármela- dijo alzando los hombros- no creo que sea lo adecuado que ninguno, a parte de Hermione, se encargue de esa piedra. Al fin y al cabo, su vida depende de ella, Hermione es la que debe cuidar de si misma.Hermione se levantó y abrazó enérgicamente a Draco. Esas palabras...esas eran las que siempre había querido escuchar de boca de sus más allegados, el poder de poder protegerse ella misma, esa libertad, el no depender del esfuerzo de los demás, y por fin alguien...no...Draco lo había entendido.
Es mi responsabilidad- dijo a todos- yo soy la única capaz de protegerme de mí misma, por lo tanto puedo proteger mi vida.Draco la observaba irradiando felicidad.
Creo que por aquí hemos terminado- dijo la profesora Mcgonagall- Albus? Si, todo bien...todo está muy bien.Draco miró a Ron de reojo y luego a Hermione. Acercándose a ella le dijo al oido.
Cámbiate.Hermione lo miró y sonriéndole se marchó a su habitación sin preguntar la razón.
Draco, a disgusto se acercó a Ron.
Eh Weasley.Ron se puso instintivamente a la defensiva, pero Draco hizo un chasquido con la lengua a disgusto.
Tranquilo que no muerdo...a veces- Ron lo miró enfadado pero no contestó- necesito pedirte un favor... Mal rayo me para y me queme vivo!!!!! Tú!!!!!!! Draco Malfoy pidiéndome un favor???? Esto es el fin de nuestro mundo!!!- dijo melodramáticamente y con los ojos muy abiertos. Por todos los dioses Weasley, eres el ser más ridículo al que he tenido la desgracia de topar...quieres tranquilizarte?Ron le sonrió complacido, pero escuchó a desgana la sugerencia de Draco.
Verás...El gesto de Ron empezó a cambiar del desconcierto al asombro.
Vaya, si que has cambiado? Cállate! Lo harás? Lo iba a hacer de todas maneras...Draco le sonrió a disgusto y Ron le contestó de la misma manera.
De inmediato se escucharon los ruidos del bajar por las escaleras. Hermione apareció ya con la capa oscura por encima de sus hombros.
Draco se acercó y le pasó un brazo por encima del hombro. Se dirigió a los allí presentes.
Os la robo un rato- y ambos desaparecieron dejando a los demás con una cara divertida. Como cambian las cosas- dijo Harry. Eso es lo divertido- adjuntó Luna.Y todo estuvo bien.
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Delante de ellos, el familiar paisaje de los bastos campos repletos de flores y profundos bosques. En un rincón no muy alejado, las pequeñas tumbas solitarias.
A sus espaldas, la envejecida y lujosa mansión de los Malfoy.
Hermione había ido de inmediato a llevar unos ramilletes de flores al matrimonio Malfoy. Con una mano apartó las hojas secas que se habían amontonado en la superficie fría y aspera. Luego depositó las flores, blancas, llenas de pureza.
Draco la observaba un poco alejado, tras ello, paseo su mirada por todo aquel panorama que lo había acompañado durante la mayor parte de su vida. Sus días felices, las sonrisas de los suyos, el orgullo de ser una familia respetable entre su mundo. La compañía... la calidez...todo eso se había quedado en el pasado....esos tiempo ya nunca volverían.
Y frente a él, se encontraba la única persona que había logrado alejarlo de aquella soledad tan sublime que casi había sido su perdición.
Como al haber escuchado sus pensamientos, Hermione se incorporó y caminó hasta él.
Que vas a hacer?- dijo observando la mansión. Primero de todo, no vivir aquí.- dijo firmemente. Por qué?- dijo desconcertada. Piénsalo Hermione, esta casa está vacía, demasiado tiempo abandonada, demasiados recuerdos, delante mío se encuentra la tumba de mis padres, que acabaron sus vidas sin poder llenar con recuerdos felices el interior de mi casa. Y toda la culpa, se encuentra bajo ella. Decenas de túneles que solo esconden otro recuerdo, el recuerdo de una época oscura, de conspiración, de dolor...no...no puedo volver a vivir aquí sin que se me pase por la cabeza todo lo que se percibe en el aire. No podría, sería demasiado difícil.Hermione le apretó un brazo percibiendo el temblor que invadía a Draco.
Es más que lógico Draco- el muchacho la miró de reojo percibiendo que los ojos de ella observaban algo a la lejanía- tienes miedo, miedo al volver a una vida que te condene a una soledad que no estas permitido a soportar ahora. Has conocido otra vía, la has vivido, por poco tiempo, pero al probarla te niegas a que ese temor te arrastre. Draco comprendo perfectamente como te sientes, no quieres estar solo, porque has conocido a gente que te necesita y tú los necesitas a ellos.- Hermione sabía que también hablaba por ella, y eso hacía que se le nublara la vista – Si tu no lo hubieras decidido, yo te habría obligado. No puedes volver a vivir aquí. Vivirás con nosotros. Qué??- dijo apartándose de ella prudencialmente- Her-Hermione no crees que vas demasiado deprisa??? Qué tiene de malo que te instales con todos nosotros en la gran casa de Mcgonagall?- le miró con aire divertido. Ah Oh...bueno nada, supongo...- por una milésima de segundo él había entendido otra cosa, y Hermione lo había percibido inmediatamente.- Aunque tendré que tener cuidado, puede que Weasley intente ahogarme por las noches.Los dos estallaron en carcajadas, de inmediato Draco se giró a Hermione y la abrazó por la cintura. Se acercó a ella hasta quedar a unos centímetros de distancia.
No es justo, conoces mis debilidades y todo lo que se me pasa por la cabeza... Bueno...ese es mi trabajo, no? Saberlo todo... Eres la rata de biblioteca más encantadora que he conocido....y demonios que te lo demostraré. Ah si? Y como lo harás, Malfoy?- dijo ella tímidamente. Diablos Granger, pues diciéndote todos los días lo mucho que me fastidias!!! Qué???- Hermione lo empujó hacia atrás molesta.Draco rió y la atrapó por detrás, inmovilizándole los brazos, y tiernamente le besó la punta de la oreja y le dijo:
...lo mucho que te quiero...Hermione se giró y sonriéndole le beso, ella se iba a separar ya, pero él la cogió del cuello y la apretó más a él, sintiendo en su pecho la piedra que Hermione llevaba en el cuello, profundizando aquel beso que tanto le gustaba a él. Y por todos los dioses que todos los días lo probaría!!!
Al recordar algo Draco se separó:
Se me olvidaba, volvamos a...casa... Por qué?- dijo sin pensar en que Draco ya se había referido a su casa. Creo que Weasley quería enseñarte algo.Y besándola en la frente, ambos volvieron a desaparecer.
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Aparecieron en el recibidor del hogar, ya todos se había ido a resolver los asuntos que requerían la presencia de los más mayores para llevar a juicio a todos los participantes de aquel ataque.
Se escuchaban los típicos sonidos hogareños. Vieron salir del salón a Ron. Draco lo miró de reojo, y este simplemente asintió disimuladamente. Se dirigió directamente a Hermione.
Ven Hermione...creo que te gustará esto...acéptalo como un regalo de un viejo amigo. De el mejor de los amigos- y Hermione lo abrazó, hacia tanto tiempo que quería volver a escuchar palabras sinceras y amables de Ron. Draco los observaba con una sonrisa. Bueno...bueno...ya basta de tanto sentimentalismo, entra- dijo empujándola con la mano.Hermione le hizo una mueca de fastidio, y lentamente se dirigió al salón. Al entrar su corazón dio un vuelco vertiginoso y sus piernas comenzaron a temblar de forma incontrolada.
Se llevó ambas manos a la boca, y las lágrimas comenzaron a brotar sin poder pararlas.
Dificultosamente pudo formular aquellas palabras que hacia tanto tiempo que se había visto obligada a rehusar:
Ma-mamá....pa-papá!!!!!- Hermione llorando como hacia tanto tiempo que no lo hacía corrió a refugiarse en los brazos de sus padres, que no podían sino llorar por aquella hija que pensaban que habían perdido hacia tres años.Desde el pasillo Draco y Ron podían escuchar los llantos de alegría de aquella familia que se había vuelto a unir después de tantos momentos oscuros, tantos días sin consuelo...
Ve Malfoy...ve a ver lo que has ayudado a conseguir- Draco salió de su concentración observándolo desconcertado, Ron siguió- tú has conseguido que ella estuviese ahí, tú la salvaste aquella vez. Puede...pero ella fue la que me salvó también a mi.Sin dejarle oportunidad a contestar, Draco caminó hasta quedarse a un distancia prudencial para observar aquella acogedora imagen.
Hermione....su Hermione...llorando en el regazo de su madre como un niña pequeña.
Era feliz...y él también, porque ambos sabían que a partir de ahora ya no habría soledad, esos tiempos habían terminado, no mirarían atrás. Y sabía que ella, ya nunca más sentiría aquella tristeza que la inundaba hace poco tiempo....al contemplar la llegada del Anochecer.
FIN DEL ANOCHECER
