Décimo noveno Capítulo.

Un final no muy feliz.

De uno en uno fueron aterrizando los guerreros z en la casa de Gokú, ninguno de ellos se atrevía a entrar. En ese momento Bulma salió de la casa y se abrazó a Vegeta.

-¡Gokú está muerto! -le dijo con la cara escondida en el pecho del príncipe.

-Shh, lo sabemos -Vegeta le respondió muy suavemente y le acarició el cabello.

-¿Por qué él? -parecía que a Bulma nos e le podía contentar con nada.

-El destino así, es -mientras Vegeta seguía consolando a Bula, el resto de los guerreros entró en la casa.

-Vamos arriba -Píkoro les pidió que subieran ala recámara donde supuestamente podría encontrarse Gokú.

Al llegar vieron la puerta cerrara y el namek toco suavemente la puerta.

-Adelante -oyeron la voz de Totepo y no se oía muy alegre que digamos.

-Seripa -Bardack intentaba que su esposa se separara del cuerpo inerte y ya sin vida de su hijo menor.

-¡Déjame Bardack, quiero estar con él, sentirlo en mis brazos! -Taurus vio a su madre como nunca la había visto y le dolía.

-Debes de entender que Kakarotto se ha ido para siempre -Seripa no quería escucharlo.

-Parece que no y te importa el que se haya muerto -le desprecio.

-Pero por supuesto que me importa, pero no creo que a Kakarotto donde quiera que se encuentra, le gustaría verte en este estado. Y créeme que si se está dando cuenta, sólo lo lastimas más con esta actitud -Taurus también se acercó lentamente a la cama.

-Cierto mamá -Taurus abrazó a su madre y separándola con cuidado del cuerpo de su hermano, la estrecho con fuerza, mientras el veía con rabia el cuerpo de su hermano -"Es una maldita" -dijo para sí y con los dientes apretados.

-Mi pobre Gokú -hasta en ese momento los guerreros z repararon en Milk quien lloraba desconsolada en un rincón.

-Tenemos que hacer algo para que te distraigas -Gohan se bajó con ella a la cocina.

-Feliz navidad a todos -dijo Vegeta con ironía al subir con Bulma.

-Felices para ti también -le contesto Kokoro de la misma manera.

-Será mejor que bajemos -el maestro Roshi quien llegó en ese momento se acercó a Gokú y lo cubrió completamente con la sábana.

-Tiene razón -todos los siguieron a la planta baja.

En la cocina el olor del pavo era exquisito y la mesa lucia esplendida con todo el banquete y adornos navideños.

-Creo que primero enterraremos a Gokú y después celebraremos al navidad, no creo muy justo que su cuerpo este aquí en casa y nosotros celebrando "muy alegres" -todos le dieron la razón a Yamcha.

-Vamos -Píkoro de nuevo subió a la habitación y después s ele vio bajan con Gokú totalmente cubierto entre sus brazos.

-Iré a la funeraria a conseguir una caja -Gohan salió por la puerta -no tardaré más de 15 minutos -alzó el vuelo.

-Vamos a esperarlo -Píkoro se sentó en uno de los sillones de la sala con Gokú entre los brazos y le destapó un poco al cabeza.

-Parece que duerme tranquilamente -dijo Kokoro al verlo.

-Y creo que se lo merecía, siempre tuvo que sufrir por este mundo y por nosotros que somos tan ingratos -Y hablando de ingratitudes Mr Satan apareció en ese momento cargado de regalos.

-¡Felices fiestas! -anunció alegremente, pero la sonrisa se le borró del rostro al ver la cara de entierro que tenían todos.

-¿Pasó algo? -Videl avanzó hacia ellos.

-Sí, solamente que Kakarotto acaba de fallecer, nada mas eso -dijo Vegeta con una sonrisa bastante falsa.

-¿Cómo? -parecía que mr Satan no podía creerlo.

-Así fue -Satan, Mr Boo y Videl se sentaron mientras los escuchaban hablar.

-Y no podemos creerlo. Gohan fue por la caja funeraria en este momento -Yamcha se puso las manos en los bolsillos y se dirigió a la ventana.

-Ya veo -mientras Mr Satan pensaba en el asunto. Mr Boo acomodaba los regalos bajo el árbol de navidad que Gohan, Gothen y su padre habían decorado hace unos días.

-¿Cuántos de esos regalos quedarán si n abrir? -Ten shin han se hincó a un lado de este.

-Más de la mitad -Bulma le echó un vistazo al árbol.

-Eso creo -Taurus se acercó al árbol y comenzó a quitar los regalos de Gokú con la ayuda de Trunks y Gothen.

-Eh llegado -Gohan entro en ese momento y traía con él: la caja funeraria.

-De acuerdo - Píkoro le pidió que la pusiera en el piso de la sala donde había recorrido todos los muebles para dejar un espacio bastante grande -Veamos -Píkoro abrió la caja y después acomodó a Gokú suavemente dentro de esta.

-Duerme en paz pequeño -dijo Taurus antes de que Píkoro cerrara la caja por completo (antes los demás se despidieron también de Gokú).

-Vamos afuera -Entre Yamcha, Gohan, Ten Shin Han, Taurus y Píkoro cargaron la caja y fueron con ella (seguidos por los demás) hasta el lugar más bello del bosque.

-Muy bien -Vegeta levantó la mano y con un poder hizo un agujero muy profundo en la tierra.

-Gracias -los guerreros que traían el féretro en sus hombros lo bajaron poco a poco y lo depositaron en el agujero.

-.Será mejor comenzó a arrojar la tierra -de eso se encargarían Bardack, Seripa y Taurus.

-Listo -Taurus se sacudió las manos.

-Vámonos -todos se alejaron cabizbajos con una gran tristeza oprimiéndoles el pecho.

-Kakarotto -voltearon a ver la tumba y vieron que Vegeta había caído de rodillas en el suelo y también apoyaba las manos en la tumba y tenía lágrimas en los ojos.

-Después de todo si lo querías -Kokoro sentó a su lado y los demás guerreros se dieron cuenta de que era inútil hacerse los fuertes cuando realmente no podías serlo.

-¿Díganme que haremos sin él? -las lágrimas recorrían las mejillas de Krilin.

-Los que deberíamos de haber muerto deberíamos haber sido nosotros, Gokú era verdaderamente un ángel -Yamcha golpeó un tronco de un árbol con furia.

-A regresado de por donde vino -Ten Shin Han alzó la vista al cielo y todos dieron la espalda a la tumba.

-No vale que derramen sus lágrimas por mi -atónitos voltearon a la tumba y vieron que el espíritu de Gokú estaba recargado en la lápida y les sonreía de una manera muy dulce y en su espalda tenía un preciso par de alas blancas bastante grandes y una aureola de estrellas.

-Kakarotto -Taurus creía que las piernas le temblaban y que no podía avanzar a su hermano, al igual que los demás, por lo que Gokú se acercó a ellos.

-Gracias -fue lo que les dijo a todos, gracias por los bellos momentos que compartí con ustedes y aunque se que es bastante seguro que ya no nos volvamos a ver si no hasta que ustedes mueran, créanme que los llevaré aquí -se señaló el pecho y yo viviré en el corazón de ustedes mientras no me olviden.

-¿Cómo puedes pensar que te vamos a olvidar? -Bulma parecía a punto de llorar.

-No es necesario que llores si yo ya me llore -todos se rieron del comentario de Gokú y sabían que lo hacia para que fueran felices, eh incluso sabían que había ido para que su pena se calmara.

-Mi pequeño Kakarotto -Bardack lo abrazó y su madre hizo lo mismo -Créeme que si no fueras un hombrecito ya te hubiera dado un beso -al oírlo Gokú sonrió pícaramente.

-¡Eso no te lo aguantes, dámelo!. Mi abuelito lo hacia cada vez que me iba a a dormir o cuando estaba triste -le sonrió a su padre.-

-De acuerdo -Bardack deposito suavemente los labios una vez en la frente de su hijo y otra vez en una de sus mejillas.

-Cuídate mucho -Taurus lo abrazó después y se separó de él, de repente Gokú lo vio fijamente.

-¿Tú no piensas darme ningún beso? -frunció el entrecejo.

-Claro -Taurus el beso la otra mejilla.

-Así está mejor -por último Gokú beso las frentes de sus hijos y los labios de su esposa ¡Ok! -gritó e hizo brincar a todos -Nos vemos en el otro mundo cuando mueran -alzo el vuelo y desapareció tras un destello y sorpresivamente en la mano de cada un de sus amigos cayó una pluma Balzac de sus alas.

-Bueno, después de todo Gokú no se ha ido -Krilin vio la pluma y Taurus la apretó contra su pecho.

-Y nunca se irá, ya que siempre permanecerá en nuestros corazones -El maestro Roshi alzo la vista el cielo y sonrió, mientras el resto de los guerreros se alejaba con dirección a casa de Gokú y Mr Boo aparecía unas flores en la tumba y un ángel se alejaba rumbo al cielo.

¡FIN!

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¿Qué les pareció?

Chafa ¿verdad?

¿Quieren segunda parte? (Kokoro dice: Síiiiiii).

Perdón que haya matado a Gokú, pero ya tenía ganas de hacerlo.

Pero si hay segunda parte veré si lo revivo o aparece como ángel. (Eso se los dejo a su decisión).