"CURA MILAGROSA"

Capítulo 3

El inicio de un nuevo viaje



Amelia. – ¿Dónde estoy?

Zel. – ¿Amelia?

Amelia. – Señor Zelgadiss, ¿dónde está?

Zel. – Aquí.

Amelia se volteó de inmediato.

Amelia. – Señor Zelgadiss, ¿es usted?

Zel. – Si Amelia, soy yo pero, no me llames señor.

Amelia estaba sorprendida, tocó la cara de Zel y se sorprendió aun más, era él pero sus ojos eran más alegres, su cabello castaño se veía tan suave que no resistió tocarlo, su cara, tan cálida y del mismo tono que la suya propia . . .

Amelia. – Zel, te has curado.

Zel. – Si Amelia, parece ser un milagro.

Amelia. – Me siento tan feliz por ti.

Amelia se lanzó a los brazos de Zelgadiss y sin darse cuenta, sus labios se encontraron en un dulce beso, ambos estaban abrazados, la felicidad que inundaba a Amelia era tan grande que no lo podía creer, era como un sueño hecho realidad, de pronto se vieron a los ojos, los mismos ojos que la habían fascinado tanto tiempo atrás.

Zel. – Quiero que esto dure para siempre.

Amelia. – También yo lo deseo Zelgadiss, te amo.

Zel. – Y yo a ti.



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Lina. – Despierta Amelia, es hora de desayunar.

Amelia. – . . . ¿QUÉ? ¿No me digas que fue un sueño?

Lina. – ¿Un sueño?

Amelia. – Si Lina, es que él y yo . . . y luego él . . . y entonces nosotros . . . y pues

. . .

Lina. – ¿? . . . Ya cállate que tengo hambre.

Amelia. – Esta bien, baja, ya te alcanzo.

Lina. – OK.

Amelia se vistió, se sentó en su cama y tomó un cepillo que se pasó por el cabello hasta peinarse. Guardó sus cosas y cuando iba a guardar el cepillo que usó cuando lo miró fijamente, el mango, el material, la estrella, ahora recordaba sus sueño, en un momento se asimilaba demasiado al mango del cepillo que Tirsa le había dado.

Amelia. – ¿Acaso soñé lo mismo?

En otra habitación . . .

Tirsa. – No puedo creer que te no te hayas levantado temprano.

Zel. – Bueno, es que el último sueño que tuve fue el mismo de ayer.

Tirsa. – ¿El que usé?

Zel. – ¡Ssssshhhhu! Ese mismo.

Tirsa. – Me alegra, es un sueño muy hermoso, ¿dónde te quedaste esta vez?

Zel. – Le decía que yo también la amaba.

Tirsa. – Cielos, menos mal que te quedaste ahí.

Zel. – ¿Porqué lo dices?

Tirsa. – Porque lo que sigue es realmente atrevido hermano.

Zel. – No te incumbe y mejor deja de espiar mis sueños.

Tirsa. – No puedo evitarlo Zel, sé lo que es estar enamorada pero no sé lo que

es ser correspondida, con tus sueños lo comprendo más.

Zel. – Deja de decir tonterías y vamos a desayunar, tengo la impresión de que

el hambre te está afectando.

Amelia. – Buenos día Zelgadiss San, buenos días Tirsa.

Z y T. – Buenos días Amelia.

Tirsa. – ¿Tú también te levantaste tarde?

Amelia. – Si, creo que se me pegaron las sábanas.

Zel. – Ya veo, será mejor apresurarnos o Lina y Gourry acabarán con todo.

Tirsa. – No pueden ser tan glotones.

Z y A. – ¿Quieres apostar? -_-U

Finalmente llegaron al comedor, Lina y Gourry ya habían acabado con su primera ronda del menú y les faltaba media más (Un desayuno ligero ¿no? ^^U), todos los comensales y las meseras estaban con el ojo cuadrado, Tirsa apenas y creía lo que veían sus ojos, los demás estaban como si nada, después de todo no era la primera vez que los veían así.

El resto de la tarde estuvieron buscando en la biblioteca, o al menos eso intentaba Zelgadiss ya que Xelloss lo interrumpía a cada instante con sus comentarios y bromas; Amelia se paseaba por la biblioteca viendo títulos de libros; Filia había ido con Gourry al centro comercial a ver porcelana negra mientras Gourry seguía comiendo y Tirsa hablaba con Lina afuera de la biblioteca.

Tirsa. – ¿Entonces si eres hermana de Luna Inverse?

Lina. – Si, ¿para que querías saber?

Tirsa. – Es que ella podría saber algo sobre la cura de Zelgadiss, no estoy

segura.

Lina. – ¿Porqué lo piensas?

Tirsa. – El hechizo que le hicieron a Zelgadiss lo inventó Claire para identificar

ladrones y maleantes y usarlos en ocasiones como marionetas para

defender a la gente o hacer servicios públicos manejándolos como si

fueran marionetas, así la gente estaba más alerta.

Lina. – Y me imagino que el hechizo se divulgó por ahí y ocurrían casos como el

de Zel.

Tirsa. – Es por eso mismo que debo verla, Claire le dio a cuidar al caballero de

Ceiphid la única copia del hechizo.

Lina. – Comprendo, te llevaría pero, mmh, estem, estoy buscando un arma

mágica para Gourry, si eso, tenemos que encontrarle un arma nueva.

Tirsa. – En ese caso, necesito un mapa para llegar hasta la casa de tu hermana.

Lina. – Si, no hay problema.

Filia. – ¡Miren chicas! ¿no son hermosas estas piezas?, ya había oído hablar de

la cerámica de Leto aunque no creí que fuera tan hermosa.

Lina. – ¿Qué es eso?

Tirsa. – Déjame ver, un jarrón negro, 2 platos grises artesanales, una estatua

de cerámica blanca, mmh, puedo hacer algo mejor con el marla.

L y F. – ¿Tienes marla?

Tirsa. – Me sobró un poco, ¿quieren que les haga una estatuilla?

L y F. – ¡SI!

Tirsa. – Bien, vengan, necesito ver algo.

Xelloss. – ¿Buscas esto?

Tirsa. – Maestro Xelloss, ¿qué haces con el atrapa-sueños?

Xelloss. – Creí que lo necesitabas.

Tirsa. – Si, así es, gracias, por cierto, ¿podrías ayudarme?

Xelloss. – Si, seguro.

Filia. – Un momento, si ese namagomi se me acerca no quiero nada.

Xelloss. – Vamos Filia Chan, Tirsa es una buena artesana.

Lina. – Pues yo si quiero una estatuilla de marla, son muy caras y bonitas $_$.

Tirsa. – Vamos Filia, Xelloss solo sostendrá el atrapa-sueños.

Filia. – Esta bien, pero si me hace algo no respondo .

Tirsa y Xelloss se guiñaron los ojos, se les había ocurrido una broma. Pues bien, fueron a un lugar con pasto donde sentarse; Xelloss colocó el atrapa – sueños sobre Lina, este comenzó a brillar mientras Tirsa se concentraba, tomó un trozo pequeño de marla que tenía la forma de una esfera, lentamente la hizo flotar hasta la altura de su cara y comenzó a cambiar de forma, en menos de 11 minutos se formó la estatuilla de un hombre cargando a una mujer dulcemente, la tomó entre sus manos, la pulió un poco y se la ofreció a Lina, dado el material, la estatuilla refulgía a la luz como si estuviera nacarada.

Lina. – Esta pieza ahora debe valer una fortuna, déjame examinarla.

Tirsa. – Si, esta bien.

Xelloss. – Te va a encantar ^_~.

Ambos sonrieron maliciosamente cuando . . .

Lina. – ¿QUÉ DEMONIOS? ¿de donde sacaste esta imagen? .

Tirsa. – De tus sueños.

Lina. – No es verdad.

Xelloss. – Claro que si, estaba en lo MÁS profundo de tu memoria.

Lina. – o_O Pero . . .

Tirsa. – Nada, Filia, ¿qué opinas?

Filia. – Cielos, es bellísima, ¿en verdad sueñas esto?

Lina. – (Sonrojada y nerviosa) Pues, estem, yo . . .n NO, PERO ¿CÓMO SE TE

OCURRE?

Para los que se preguntan y los que ya adivinaron, sí, efectivamente el hombre es Gourry sosteniendo a Lina en brazos ^_~.

Tirsa. – Bien, te toca Filia ^o^.

Filia. – Muy bien, estoy lista.

Xelloss colocó el atrapa – sueños cobre Filia como había hecho con Lina, Tirsa tomó la otra esfera de marla y comenzó a concentrarse, esta vez tardó más, pues por lo que le había contado Zelgadiss, buscaba un recuerdo en especial que resultó aparecer en uno de sus sueños, hizo lo mismo que la vez anterior y la figura empezó a tomar forma hasta quedar terminada, la pulió y se la entregó a Filia mientras ella y Xelloss aguantaban la risa esperando la reacción de la mujer dragón.

Filia. – ¡Qué hermosa se ve! . . .Hum . . . ¿qué es esto? . . . . . . ¿DE DONDE

RAYOS SACAS QUE YO SUEÑO CON ESTO?

Tirsa. – Es lo que vi, es lo que hice.

Xelloss. – ¡Filia chan, me halaga mucho ese sueño tuyo! ^_~.

Filia. – ¡Lárgate de aquí NAMAGOMI!

Lina. – Déjame ver.

Filia. – ¿Eh? o_O (Lina le quita la estatuilla) NO, DÁMELA LINA.

Lina. – Pero, si son tú y Xelloss . . . JAJAJAJAJAJAJA ¿quién pensaría que

sueñas con Xelloss? Con razón lo tratas tan mal, JAJAJAJAJAJA.

Filia. – (Sarcástica) Entonces tú adoras a Gourry ¿NO?

Lina. – Pero que . . .

Tirsa. – Calma, calma, si no quieren que los demás las vean, guárdenlas, después

de todo son algo pequeñas ^^.

Xelloss se aproximó a Filia por la espalda abrasándola por la cintura.

Xelloss. – Si Filia chan y ¿quién sabe?, tal vez podamos enriquecer ese sueño

tuyo ^_~.

Filia. – ¡YA ME TIENES HARTA!

¡PLOP!

Con un rápido movimiento de manos, Filia sacó su mazo y golpeo a Xelloss con tanta fuerza que le fue fácil zafarse de su abrazó.

Filia. – Vámonos Lina, odio juntarme con esa basura Namagomi.

Lina. – Por mí no hay problema.

Y se alejaron del lugar.

Tirsa. – No cabe duda que eres sadomasoquista.

Xelloss. – No puedo evitarlo, es muy divertido ^o^.

Tirsa. – Y además eres cínico.

Xelloss. – No me digas eso porque tú eres parecida con tu familia.

Tirsa. – ¿Te refieres a que soy . . .

Xelloss. – Cínica, sinvergüenza . . .

Tirsa. – Pero sincera ^_~.

Xelloss. – Cambiando de tema, ¿ya decidieron a donde irán?

Tirsa. – Si, iremos al pueblo de Lina en busca de su hermana, ¿piensas

acompañarnos?

Xelloss. – Si, estas vacaciones serán más divertidas si me ayudas a hacer

bromas ^_~.

Tirsa. – Y especialmente si molestas a Zel ¿no?

Xelloss. – ¡Exacto! ¿verdad que puedo ir?

Tirsa. – Si, pero que no se te pase la mano con mi hermano, ¿lo prometes?

Xelloss. – Tienes mi palabra de demonio.

Todo quedó decidido esa noche y a la mañana siguiente, Xelloss, Tirsa y Zelgadiss partieron al pueblo de Lina. ¿Tendrá Luna la solución al problema de Zelgadiss? ¿Zelgadiss soportará a Xelloss?





Notas de la autora:



Nihao a todos los lectores, ¿pues que les parecen estos 2? No creo que Zelgadiss los aguante, ¿y ustedes?, como sea, este capítulo está dedicado a mi queridísima tía Belly que en realidad es una muy buena amiga mía a quien le digo así de cariño (es parte de mi cyber-familia ^_~) ¡Espero que te guste Belly!

Por otro lado y como siempre digo, amenazas de muerte, cartas bombas, virus hambrientos, matones y todo eso pueden enviarlos a las oficinas de quejas, uno situado en la casa de la familia Son, única casa de la montaña Paos o si lo prefieren pueden enviarlos al Templo de Urania Baba donde mi maestra y tutora los recibirá (no muy gustosa ^_^ U) si en cambio son comentarios, felicitaciones, ramos de flores, dulces o dinero perdido pueden escribir a: luin_chan@hotmail.com tengan por seguro que les responderé gustosa.



SARABA