Notas de la autora: ¡Hola a tod@s! Mi nombre es Lanthir, y me encanta escribir fanfics, aunque esta es la primera historia de HP que escribo. Es un fanfic slash/yaoi, o sea, relación chico-chico. No quisiera herir susceptibilidades, así que si no te gustan este tipo de relatos, baja el menú que esta arriba y ve al rating correcto a tus necesidades. Si te gusta lo que lees, déjame un review, por favor :)
Ah! Y todos los personajes son de J. K. Rowling, yo solo soy una imitación barata de ella, je, je. No gano nada por escribir esto, mas que sacar el exceso de imaginación de mi loca cabeza y (espero) entretenerlos a ustedes. ¡Disfruten y gracias por leer esto! :)
Lanthir
PD. Por allí alguien me había mencionado que por que Lucius estaría enojado con Draco si mataba a Harry; aquí trato de aclarar este punto, que sinceramente, se me paso ponerlo en el episodio pasado, je, je :P ¡Mil gracias por ayudarme a mejorar este fanfic con ayuda de sus reviews! :)
Un Giro Insospechado
Capitulo 6: Abre los ojos
Draco veía a su padre frente a él, esa alta y amenazante presencia rubia, apuntándole con su varita.
-¡Imbecil! ¡Matar a Potter en los mismísimos terrenos del colegio! ¿Acaso no te he enseñado a no dejar ninguna prueba de tu culpabilidad? Ahora Dumbledore te expulsará, y el apellido Malfoy quedara manchado; todos enfrentaremos la investigación del Ministerio. ¡Eres una vergüenza para la familia! Crucio-
Su propio grito retumbó en su cabeza a un volumen atronador. Abrió los ojos, con el corazón latiéndole aceleradamente, y vio a Harry sentado junto a él, mirándolo alarmado. Estaban en la enfermería.
-Malfoy, ¿qué te sucede?- dijo Harry. Apenas habían pasado un par de minutos desde que Hermione había salido de la habitación, y el Gryffindor se había perdido observando la respiración oscilante del rubio, pensando en Ron y en la extraña sensación de sobrecogimiento que le invadía. De repente, Draco se empezó a agitar en sueños, musitando algo así como "No lo hagas, por favor", y un terrible grito surgió de sus labios cuando abrió los ojos.
-Potter- susurró Draco, frenético y recordando lo que pasó- Wesley... él me lanzó un cruciatus, y me hizo perder el sentido, y mi padre me tenía atrapado, no me dejaba volver...- las lagrimas salían sin control por sus ojos grises, mientras pequeños sollozos espasmódicos sacudían sus hombros. Se tapó la cara con las manos, terriblemente adolorido y tratando de saber que era real y que no. Su cabeza era un caos.
Harry no sabía que hacer. ¿Ron había usado una Maldición Imperdonable en Malfoy? Eso representaba no solo ser expulsado de Hogwarts, sino cadena perpetua en Azkaban. Los padres de Neville habían perdido la razón a causa de los cruciatus, y ahora Draco parecía estar teniendo alucinaciones, ¿y si le sucedía lo mismo que a los Longbottom? ¿Pero por que le pasaba esto? Harry había experimentado varios cruciatus cuando iba en cuarto y Lord Voldemort había vuelto a la vida; y cuando se enfrentó de nuevo a él, un año después, varios mortífagos lo atacaron de nuevo con la maldición. Pero Voldemort había desaparecido finalmente, y a pesar de que muchos de sus seguidores escaparon (incluyendo a Lucius, que se las arregló para seguir pareciendo inocente a pesar de las acusaciones), Harry se pudo recuperar del todo de estos ataques. Nunca tuvo las secuelas que Draco presentaba en estos momentos. Temió que lo que le pasaba fuera irreversible.
Tomó por los hombros a Draco, sacudiéndolo.
-¡Malfoy! Escúchame...- pero el rubio se debatía tratando de soltarse.
-¡No! Suéltame padre, no lo hagas de nuevo, por favor...-
Harry sabía que en cualquier momento llegaría Dumbledore o la Señora Pomfrey, y que sabrían lo que hizo Ron. Tenía que hacer que Draco volviera a la realidad, hablar con él y convencerlo de que no dijera nada... o convencerlo de que nada había pasado en realidad. Lo soltó y se recostó junto a él, abrazándolo. El chico rubio se hizo un ovillo, volviendo a taparse la cara con las manos. Temblaba sin control, y seguía murmurando incoherencias.
-Draco- dijo Harry. Era la primera vez que lo llamaba por su nombre y que lo tocaba sin propósito de darle una golpiza. Le acarició los cabellos tranquilizadoramente, mientras lo seguía abrazando. Era tan cálido y suave, tan perfumado...- Cálmate y escúchame. Nadie te lanzó un cruciatus... solo estas confundido por el golpe. Ron pensó que me habías atacado, y seguro te lanzó un hechizo aturdidor, por eso te sientes mal.-
Draco no dijo nada, pero después de unos minutos parecía que se estaba calmando. Se quitó las manos de la cara, y vio a Harry con los ojos humedecidos. El Gryffindor se sintió extraño; nunca había estado así de cerca de Malfoy, tan cerca de esos ojos como tormentas, de esa pálida piel que parecía de porcelana, esos rasgos afilados y potencialmente perfectos. En verdad era atractivo, nunca había estado tan cerca de alguien tan hermoso. Era como una aparición de carne y hueso, con una expresión que rompía el corazón. Su mano pareció moverse por si sola cuando pasó de acariciar el platinado cabello ha rozar los suaves labios entreabiertos del Slytherin. Una parte de él se maldijo a si mismo por estar pensando esas cosas en un momento tan inoportuno, cuando tanto estaba en juego, pero no podía evitarlo.
Draco cerró los ojos, y dio un suspiro. Las ideas estaban tomando forma de nuevo en su adolorida cabeza, estaba empezando a centrarse. Nunca nadie lo había tocado de esa forma, tan protectora y tranquilizadoramente. Narcisa, Lucius... ni siquiera recordó cuando fue la última vez que lo abrazaron. Que importaba que fuera su eterno enemigo el que hacía eso. Estaba demasiado cansado para resistirse. Solo quería seguir sintiendo esas suaves manos alrededor de él. Potter... si, él le gustaba. Recordó que hacía solo un rato lo había descubierto. ¿Qué mas había pasado? Ah, si. Se habían peleado por una estupidez, y luego el hechizo que hirió a Harry, y luego...
De repente, sonaron unos pasos acercándose. Harry, sobresaltado, se apresuró a volver a su cama, y vio a Dumbledore y a la Señora Pomfrey entrar, seguidos de Ron y Hermione. Ron lo vio y corrió hacia él.
-¡Harry! ¡Estas bien!- le dijo, abrazándolo.
-Me alegro que estés despierto- dijo Dumbledore, mirando al chico con sus gafas de media luna. La Señora Pomfrey se apresuró a revisar a Harry.- Me gustaría que nos aclararas algunas cosas Harry, una vez que hayamos hablado con el señor Malfoy-
Ron y Hermione miraron a Harry con expresión angustiada. El pelirrojo palideció, y se dejó caer en la cama de su amigo, esperando lo peor. Dumbledore se acercó a Draco, que seguía con los ojos cerrados.
-Señor Malfoy... señor Malfoy- dijo el mago, posando su mano gentilmente en la frente de Draco. El rubio abrió los ojos, y vio al anciano como si no lo conociera. Parpadeó un par de veces, como para aclararse la vista, y dijo con voz débil:
-Me duele la cabeza-
-Lo se, Draco- dijo Dumbledore bondadosamente, ayudando al chico a sentarse- Pero necesita decirnos que fue lo que pasó, para que Poppy lo pueda atender correctamente-
Harry vio como Ron apretaba las mantas bajo su mano, con la vista fija en Malfoy. Nunca lo había visto así de asustado.
-Yo...- empezó a decir Malfoy. Aún estaba muy desorientado, y parecía tratar de recordar con exactitud lo que había pasado. Estaba terriblemente pálido, y un brillo como de fiebre había perlado su blanca frente. Entonces volvió la mirada hacia Ron, y un rayo de furia cruzó su rostro afilado. Estaba a punto de hablar, cuando vio a Harry, sentado detrás del pelirrojo, con expresión implorante. Sus labios decían "Por favor, no" sin sonido alguno, cuidando que Dumbledore no lo viera. El Slytherin dudó un momento, y dijo:
-Yo... no podía dormir, así que salí a caminar un poco... pasé cerca del Sauce Boxeador, y vi que Potter se arrastraba tratando de alejarse... cuando llegué ya estaba herido, y se desmayó antes de decirme que pasó. Así que lo traje al castillo, cuando apareció Wesley- Draco hizo una pausa, viendo a Ron con tanta furia que sus mejillas se pusieron sonrosadas- Antes de que pudiera hacer algo, el me lanzó... un expelliarmo, y creo que me desmayé, por que no recuerdo nada mas.-
Ron parecía petrificado. Dumbledore y la Señora Pomfrey miraron a Malfoy con igual expresión de escepticismo; Hermione tenía la boca abierta, y Harry no podía creer que Draco hubiera mentido por ellos. Rápidamente le dijo a Dumbledore:
-Es verdad. Quería comprar unas cosas en Hogsmeade, así que traté de salir por la Casa de los Gritos- Draco volteó a ver a Harry desconcertado; no sabía de lo que hablaba- Todo esta muy derruido, tuve un tonto accidente con una ventana y me herí yo mismo. Volví hacia la entrada del Sauce, y lo último que vi fue a Malfoy. Lo siento mucho, profesor Dumbledore. Todo fue mi culpa-
Estaba hecho. Era preferible un castigo a que se supiera la verdad. Solo esperaba que la versión de Ron concordara, y no le hubiera confesado a Dumbledore lo que realmente hizo. Pasaron unos minutos de tenso silencio, solo interrumpidos por las preguntas en voz baja de la Señora Pomfrey sobre si a Harry y a Draco les dolía algo, mientras los examinaba cuidadosamente.
Finalmente, el director les preguntó:
-¿No hay nada mas que quieran agregar?- sus penetrantes ojos azules miraban alternativamente a los tres chicos. No hubo respuesta. -Esta bien. Es una falta muy grave tratar de salir sin consentimiento y a escondidas del colegio, pero lo es aún más usar cualquier hechizo contra un compañero, señor Wesley- Dumbledore miró duramente a Ron- No importa lo que creyó ver, ahora ya sabe que no estaba justificado. Y aunque así fuera, siempre deben de pedir la ayuda de un profesor antes de tratar de tomar justicia por su propia mano. Llamaré a la profesora McGonagall para que decida sus castigos. Y en cuanto a usted, Malfoy, no debía de estar fuera de su habitación a semejantes horas. Pero como compensación por haber traído prontamente a Potter a la enfermería, no se le va a castigar, y le voy a otorgar 10 puntos a Slytherin. Ahora, descansen, por que mañana tienen clase temprano. Señor Wesley, señorita Granger, regresen a sus dormitorios por favor-
Dumbledore se puso de pie y despidiéndose de la enfermera, salió de la habitación. La señora Pomfrey les permitió a Ron y Hermione quedarse cinco minutos para despedirse de su amigo, y se dirigió a su despacho.
-No puedo creerlo- dijo Ron en voz baja a Harry- ¡La vi cerca! Creí que Dumbledore me iba a expulsar...-
-¿Cómo pudiste hacerle eso a Malfoy?- susurró Harry, enfadado -¿Estas loco?-
-¿Hacer que?- preguntó Hermione, quien por lo visto aún no había hablado con Ron.
-Le lanzó un cruciatus, por poco lo mata- dijo Harry, señalando a Draco. El rubio se había recostado dándoles la espalda, obviamente fingiendo que no los escuchaba.
-Yo no...- comenzó a decir Ron, ante la cara de espanto de Hermione.
-¡Claro que lo hiciste! Me lo dijo antes de que entraran ustedes. No se por que mintió, pero tienes que agradecerle que te salvó el pellejo esta vez-
-¡¿Para empezar tu que hacías tratando de ir a Hogsmeade, en mitad de la noche y a través del Sauce Boxeador?!- murmuró Ron, enojado- Yo no sabía que te estaba tratando de ayudar, pensé que el idiota por fin había enloquecido y te había matado... Perdí la proporción de las cosas y antes de darme cuenta lo tenía retorciéndose a mis pies... nunca lo había hecho, se los juro. No se como lo logré, es un tipo de magia negra muy avanzada, solo se que en verdad quería matarlo en ese momento...-
-Debes de estar aliviado de que no se te ocurrió echarle el Avada Kedavra- dijo Hermione con sarcasmo- ¡Eres un estúpido! No se como Dumbledore se creyó todo esto. ¿Qué cosa le dijiste, Ron?-
-Lo que pasó, solo que omití la parte del crucio...-
-Bueno- dijo Harry- En verdad tuvimos suerte, aunque sospecho que Dumbledore no nos creyó en realidad. Tenemos que andar con cuidado, y no oponernos a lo que nos diga McGonagall...-
-Solo eso me faltaba- dijo Ron- Trato de ayudarte y ahora termino castigado. Aún no me has dicho que idiotez fue esa de estar cerca del Sauce...-
-Él no estaba en el Sauce Boxeador, él estaba en...- empezó a decir Hermione, pero una patada por debajo de las mantas de parte de Harry la hizo callar.
-¿Qué?- dijo Ron. Por la cara de sus amigos se dio cuenta de que algo le ocultaban- ¿En donde estabas entonces? ¿Qué sucedió?-
Justo en ese momento llegó la señora Pomfrey, y Ron y Hermione tuvieron que irse. Harry le hizo una seña a la chica para que no le dijera nada al pelirrojo. Ya tenía suficiente con todo lo que había pasado como para complicar mas las cosas.
Se recostó y se cubrió con las mantas. La enfermera apagó las luces, y el Gryffindor se quedó viendo la espalda de Malfoy con la tenue luz de la luna reflejada en el largo cabello rubio.
Bien, ahora estaban a mano. Él le salvó la vida en el risco, y Draco lo había llevado al castillo antes de que se desangrara. Gracias. Aunque, en realidad, el mismo Malfoy lo había herido. Imbecil. Pero por alguna razón, los había ayudado, a él y a Ron. Confuso. Y encima de todo, esos molestos y raros pensamientos que estaba teniendo sobre el Slytherin. Demonios. Tenía que hablar con él... sin ninguna varita que pudiera usar en su contra como la última vez que "hablaron".
¡Hola a tod@s! :D Muchísimas gracias por los reviews que me han dejado, estoy muy contenta de que les esté agradando la historia! :) ¿Qué pasaba por la cabeza de Draco cuando encubrió a Harry y a Ron? ¿Qué va a pasar con el castigo que les van a poner? Je, je, esas y muchas otras cosas mas en los siguientes capítulos!
Ah! Y no odien a Ron! Ja, ja, ja, él solo estaba protegiendo a Harry, con el susto que se llevó ya tuvo! Je, je :P
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