Aylen estudio la habitación en la que se encontraba, le habían sujetado las manos con una grilletes a la pared, pero alguna manera tenia que tener para escapar y ella la encontraría, Sirius siempre le decía que debía mirarlo todo muy a fondo intentando encontrar la mejo vía de escape, pero en esos momentos, no veía mucha vía cuando estaba encadenada a una pared y un enano con una mano de hierro la miraba mientras caminaba de un lado a otro.
- Sabes yo hace años que conozco a tu madre – ella le miro pero no dijo nada – una gran mujer, sirvió a Lord Voldemort hasta el final de sus días y aun lo hace.
- Cuando Sirius te coja, más vale que ya estés muerto, porque la que te va a dar vas a desear estarlo.
- Orgullosa como todos los Black, primero el orgullo y luego el cerebro.
- Ya me dirás que tienes tu primero – el se acerco rápidamente a ella la sujeto por el mentón fuertemente haciéndola mirarle.
- Te tengo a ti – susurro en su oído – te imaginas la cara de mi querido amigo Sirius cuando lo sepa, el gran Sirius, al que todas las chicas quieren, el mejor amigo de James y Remus, el ídolo de los niños menores que él al que admiramos y veneramos.
- ¿Envidia? Todo lo que has ocasionado a sido solo por envidia hacia Sirius.
- No, claro que no, no pienses que tu tío es tan importante niña, esto es solo una pequeña venganza hacia él, lo conozco se como le va a doler.
- Me cansa tanta charla – grito la chica – haz lo que quieres hacer y déjame en paz.
- ¿No tienes miedo?
- No, solo es un cuerpo lo que obtengas, mi mente te puedo asegurar que estará muy lejos, o eso espero, pensó para ella.
- Tranquila, el cuerpo, la mente y tu no hace falta que os separéis, no va a pasar nada de lo que estas pensando, solo quiero que el lo crea, te encontrara muerta así vestida y no dejara mucho a la imaginación, estoy seguro que pensara exactamente lo que yo quiero, guerra psicológica.
- Prefiero la física, lo mental nunca me ha ido mucho, eso es mas bien cosa de Remus – Peter no necesito darse la vuelta para saber quien había dicho esas palabras.
- La verdad tengo que decir que no te esperaba, al final Beatrix no es tan buena como yo pensaba – finalizo dando se la vuelta y mirando al otro – mira pero si se ha traído a un amiguito este no lo conozco, Sirius ¿Has venido sin Remus? Eso no es propio de un merodeador – añadió negando con la cabeza – no me dirás que nuestro lobito se ha vuelto un cobarde.
- Deja a Remus fuera de esto y aléjate de ella – dijo mientras meneaba su varita apuntando al otro Peter despacio fue haciendo lo que le mandaban – Oliver suéltala – el chico se acerco a ella y abrió sin ningún problema los hierros.
- Oliver – susurro ella dejando caer sus brazos – has venido.
- Claro que he venido le contesto él – como si fuera lo mas obvio, miro la ropa que llevaba puesta - ¿Esta mal que esto me excite? – le susurro al oído para que los otros no lo oyeran.
- Hombre, mal, lo que se dice mal no, lo que ocurre, es que este no es un buen momento – contesto con una sonrisa.
- Lo siento – dijo mirándola a los ojos – te juro que no pretendía… yo nunca te obligaría a hacer nada que tu no quisieras.
- Lo se Oliver –contesto mientras le acariciaba la mejilla – lo sé.
- Pero bueno os vais a quedar ahí todo el tiempo cuchicheando y en plan pasteloso o vais a venir aquí de una vez – se acercaron a el animago que no apartaba la vista del que un día fuera uno de sus mejores amigos - ¿Estas bien? – ella asintió y le brindo una sonrisa – bueno Peter, supongo que esto queda entre tu y yo.
- No querido primo, yo estoy primero – Beatrix hacia en ese momento acto de aparición.
- Tenia ya ganas de verte, para que lo vamos a negar. Prima ya no eres lo que eras ¿Dónde quedo ese porte elegante que siempre llevabas? Tu pelo esta echo un asco, para que lo vamos a negar – Sirius se dio cuenta de que Peter había aprovechado ese momento para escapar.
- Tan estupido como siempre, nunca entenderé como ella se puede parecer tanto a ti, si hubiese sido como su padre… tu hermano siempre tuvo un carácter tan llevadero, era tan fácil manipularlo.
- Y mira a lo que le llevaron tus manipulaciones, ahora esta muerto y eso es gracias a ti.
- No – grito la mujer – eso es gracias a vosotros. Nosotros éramos felices nos queríamos y todo iba también, pero me tuve que quedar embarazada de esa … de esa … - la señalaba mientras que la mujer cada vez estaba mas nerviosa y elevaba mas el tono de voz –ella lo estropeo todo, el muy idiota, quería que lo dejáramos todo para llevar una vida normal, traicionar al señor oscuro, decía que tu nos ayudarías, que sabia que el siempre podría contar contigo, vosotros lo manipulasteis y eso fue lo que le mato – se acerco tan rápidamente a Aylen que casi no se dieron cuenta hasta que la tenia encima – por tu culpa murió, tienes idea de lo mucho que me dolió lanzarle el Avada Kedavra yo le amaba pero el muy tonto te quería a ti – los tres se habían quedado sin palabras al escuchar lo confesión de la mujer – quería formar una familia, menuda estupidez. Me case con Lenstrange y le olvide, pero tu – miro amenazadoramente a Aylen y Sirius la resguardo a su espalda – tu tenias que venir a recordarme día a día lo que había perdido, a la única persona que ame.
- Beatrix – susurro Sirius que notaba como Aylen recargaba su cabeza contra su espalda – siempre pensé que eras cruel y atroz, me confundí … lo que ocurre es que esta como un cencerro, deberás tantas ganas tenias de servir a tu Lord que te llevaste todo por delante
- Nunca lo entenderías – susurro ella – jamás.
- Yo quiero entenderlo madre – dijo la chica – necesito entender porque Voldemort era mas importante que mi padre y que yo, quiero saber que fue lo que te hice para que vengaras en mi todo tu odio. Madre ¿de verdad me merecía lo que me hiciste, merezco tu desprecio?
- Eres una ingrata – grito – deberías darme las gracias, por compasión seguí adelante con el embarazo.
- Madre me has hecho la vida imposible, has planeado de todo para herirme, no me tuviste por compasión, si no para vengar en mi tu frustración – Aylen levantaba también la voz, ya no estaba escondida detrás de su tío, si no que enfrentaba a su madre cara a cara – dices que amabas a mi padre, pero no es cierto – la chica cada vez estaba mas alterada, empezó a empujar a su madre mientras gritaba mas todavía – solo eres una loca, la limpieza de la sangre, acabar con todos los muggles, eso es un exterminio y una necedad.
- Aquí la única necia eres tú, crees que los muggles deben vivir cuando eso no es verdad, ellos son seres de categoría inferior a nosotros.
- No madre las personas como tu que solo son simples asesinos son quienes son inferiores solo sois engendros, aberraciones que no tienen sentimientos. Ni siquiera se porque me moleste en que me quisieras, no vales la pena – se volvió y regreso junto a Sirius y Oliver, momento que su madre aprovecho para lanzarle una maldición. Aylen se quedo inmóvil, vio como Oliver corría hacia ella, todo paso en cuestión de segundos, el la agarro haciéndola girar y colocándose entre ella y el hechizo que su madre le había enviado, abrazándola y aprisionándola contra su cuerpo. El cerró los ojos esperando el dolor y apretándola a ella más aun.
- Protector – escucho – stupefy – seguidamente oyó como un cuerpo caía al suelo, abrió los ojos para ver la cara de Sirius, que le miraba como si se hubiese vuelto loco – pero tú eres tonto.
- Ya, no si haber lanzado el hechizo para protegerla, hubiese sido mas inteligente, no si razón tienes – el pudo sentir como el cuerpo de ella temblaba entre sus brazos - ¿Estas bien? – le pregunto mientras la separaba para poder mirarla a los ojos – te estas riendo.
- No es cierto Oliver- dijo ella rompiendo en carcajadas – perdona.
- No, no, riele. Yo me lanzo para salvarte la vida y tu te partes de risa, no si esta muy bien.
- No te enfades Oliver, si fue increíble. Ha sido muy romántico Sirius ¿A que ha sido romántico?
- Prefiero no contestar – dijo mientras lanzaba unas cuerdas sobre el cuerpo de la mujer para inmovilizarla.
- ¿Qué va a ocurrir con ella? – pregunto la chica.
- Supongo que Dumbledore lo decidirá. A no ser que tú quieras hacer algo.
- ¿Algo como que?
- Seria lógico que quisieras hacerla pagar por todo lo que te ha hecho – indico su tío – yo no te lo echaría en cara.
- Si hiciera eso seria como ella y no quiero eso, solo necesito que todo termine y llevar una vida normal.
- Entonces será Dumbledore quien lo decida.
- Sirius – le llamo ella – si ahí una cosa que quiero.
- ¿Dime que quieres?
- Quiero llevar el apellido Black, mi apellido.
