La vida Ofrece una 2da. Oportunidad
Por Loly Sayol
Capitulo V
Noticias buenas y Malas
Mamá, Mamá,- entraba Eliza gritando al salón y se dirigía a su Madre.
¿Qué te pasa hija?.
Mira, lee lo que dice la columna de sociales del periódico.
"Con una espléndida fiesta el Sr. Adriano Sthepanos Creto, propietario de la naviera "Olympus", anuncio anoche el compromiso de su hija Samantha Sthepano Anderson con el soltero más cotizado de la sociedad de Chicago el Sr. Williams Albert Andrew, cabeza de una de las familias más distinguidas y acaudaladas de América".
Es el anuncio del compromiso de Albert, ¿Cuál es el problema Eliza?.
Sigue leyendo Mamá.
"..... Aunque las familias no lo han confirmado, también se rumora que la hija del Sr. Andrew, la Srta. Candice White Andrew esta saliendo con el hijo del Sr. Sthepanos, el Sr. Adrián Sthepano Anderson, ya que estuvieron juntos toda la velada.¿ Será que están planeando una boda doble?."
¿Te fijas Mamá? Esa pordiosera lo esta haciendo de nuevo, ahora me quiere robar a Adrián.
Cálmate Eliza,
¡CÓMO QUIERES QUE ME CALME!,- Grito Eliza.
Escucha bien Eliza, sabes que siempre de he apoyado.
¿Qué vamos hacer?. ¿Vas a hablar con la Tía Elroy, para que le prohíba a Candy verse con Adrián?.
No, no haremos nada.
¡¿QUÉ?!
Entiende Eliza, Candy ya no es una huérfana, que no tiene quien la proteja, ahora tiene a Albert y si esto no es suficiente, a la Tía Elroy también y te aseguro que la primera persona que vería con buenos ojos un matrimonio de Candy con Adrián, seria ella.
PERO MAMA, TIENES QUE AYUDARME.
Lo siento Eliza, no nos conviene enemistarnos con Albert y la Tía Elroy, así que olvídate de ese muchacho.
NEAL, ¿ESTAS OYENDO?, ¿VAS A DEJAR QUE CANDY SE SALGA CON LA SUYA?.
Ya te dije Eliza que me dejaras en paz, Candy no quiere nada conmigo y si ella esta enamorada de Adrián, espero que sean felices, adiós Mamá voy a salir,- dijo besando a su Madre en la mejilla.
Es hora que madures Eliza,- le dijo Neal al pasar a su lado.
Eliza no podía creerlo, por primera vez estaba sola, ni su Madre, ni su hermano querían ayudarla.
"ESTO NO SE VA A QUEDAR ASI, NO LO VOY A PERMITIR, SI ADRIAN NO PUEDE SER MIO NO SERA DE CANDY." - Grito Eliza, miro enojada a su Madre, dio un portazo y salió hacia la calle.
Eliza hija, por favor no hagas ninguna locura,- exclamó la Sra. Leegan intentando alcanzarla, pero ya era muy tarde cuando llego a la puerta de la mansión, vio como Eliza se alejaba en su auto.
En Nueva York otra persona estaba leyendo también la noticia del periódico.
¿Que té pasa amor? De repente te pusiste pálido.- Decía preocupada Susan.
Nada Susan estoy bien, - dejando el periódico sobre la mesa- Vamos a montar una nueva obra y estoy un poco preocupado, es algo diferente a lo que estoy acostumbrado.
¿De que trata la obra?, Terry
Vamos a montar "Cyrano de Bergerac" de Edmundo Rostand, yo haré el papel de Cyrano.
¿De Cyrano?, Pero no es la historia de un hombre con la cara desfigurada.
No, sólo tiene la nariz más grande de lo normal, es la historia de un hombre que esta tan enamorado que hará cualquier sacrificio, con tal de ver a su amada feliz, aunque signifique entregársela a otro hombre.
Si ya me acuerdo, comento Susana, pero el final es muy triste. ¿Tú crees que deberías hacer ese personaje, Terry?
Si, lo considero un gran reto.
Estoy segura que lo harás bien, eres un gran actor.
Gracias Susana, pero aun debo trabajar en el personaje. Bueno me voy, hoy empiezan los ensayos.
¿Vendrás a almorzar?, Terry.
No lo creo Robert Hathaway esta muy nervioso, lo más seguro es que nos tendrá hasta tarde ensayando, no me esperes despierta.- La beso en la frente y salió.
Ya en la calle...
- "No puede ser que me hallas olvidado Candy,"- suspiraba melancólico Terry.
Terry no había podido olvidar a Candy, cada vez que veía a Susana recordaba que por su culpa ellos no podían estar juntos, no es que la odiara, pero ese pensamiento no le permitía quererla, estaba a su lado por gratitud y lastima más que todo
A veces deseaba que ella no lo hubiera salvado, era preferible estar muerto a vivir sin Candy.
Susana desde la ventana lo vio alejarse de la casa, camino hacia la mesa cogió el periódico y leyó él articulo que tanto había impresionado a Terry.
¡Es sobre Candy!, exclamo.-¡OH¡, Terry a pesar de todo lo que he hecho para hacerte feliz, tú aun no has podido olvidarla.
Susana se había sometido a varias operaciones y después de innumerables horas de terapia había logrado caminar gracias a una pierna ortopédica, tenia una ligera cojera, pero no se notaba mucho. Ella creía que así Terry dejaría de verla con lastima y empezaría a quererla.
No podía quejarse, Terry la trataba con mucha dulzura y cariño, pero a pesar del tiempo que llevaban casados, no pasaba más allá de un beso en la frente o una caricia. Dormían en cuartos separados.
De vuelta en Chicago en el Hospital Sta. Juana.
Candy estaba terminando su turno en el hospital cuando una enfermera se le acerco para decirle que un muchacho quería verla. Resultó ser Neal que había ido a hablar con Candy.
¿Que quieres Neal?,- Pregunto molesta Candy.
Solo quiero hablar un momento contigo.
Me parece que las cosas ya quedaron bien claras, decía Candy irritada.
Por favor Candy, solo 10 minutos, te prometo que no te molestare más.
Esta bien, 10 minutos, más nada, salgamos al patio.
Una vez en el patio del hospital, Neal le pidió a Candy que se sentaran en un banco.
Bueno Neal empieza, ¿Qué quieres?.
Candy, vine solo para pedirte que me perdones y a despedirme.
¿Despedirte, a donde vas?.
Me voy para Boston, a trabajar en las oficinas que tiene la familia allá.
Pero, ¿porque te vas?
Por la misma razón que quiero pedirte disculpas, me he dado cuenta, que tanto Eliza como yo te hemos hecho mucho daño y tu no te lo merecías. Por favor Candy perdóname, mientras hablaba, Neal se arrodillaba ante Candy y la tomaba de la mano.
Por favor perdóname, con lagrimas en los ojos.
Neal.... yo no sé que decir....
Solo di que me perdonas.
Es que pasaron tantas cosas....... Neal, me hicieron mucho daño.
Esta bien Candy, lo entiendo, yo mismo no puedo perdonarme, será mejor que me vaya.
Ya se disponía a irse cuando Candy lo llamo.
Espera Neal, te perdono.....
¿Qué?, En serio Candy, no bromeas.
Si Neal, te perdono.
Gracias Candy,- tomándole nuevamente la mano y besándosela.
Ahora ya me puedo ir tranquilo.
Pero Neal, no me has respondido, ¿Por qué te vas a Boston?
Quiero rehacer mi vida, lo mas lejos posible de Eliza, sé que muchas cosas que hice, fueron idea de ella, pero no tenia la fuerza para enfrentármele, pero el amor que siento por ti me ha dado esa fuerza.
Neal, no sé que decir.
No digas nada Candy, solo quiero pedirte si podemos ser amigos.
¿Amigos? Neal, tu y yo......
En el futuro, quizás podamos serlo, ¿no crees Candy?.
Quien sabe Neal, con el tiempo, tal vez.
Gracias Candy, otra cosa, quiero prevenirte.
¿Por qué, qué pasa?
Ten cuidado de Eliza, ella no esta bien, temo que intente algo contra ti y Adrián Sthepanos.
Pero ¿por qué?
Ya te dije, ella no esta bien y se le ha metido en la cabeza casarse con ese hombre y cree que tú eres un obstáculo para sus planes.
En el pasado me ha hecho daño, pero ya no soy una niña y no permitiré que lo vuelva hacer, además Adrián y yo solo somos amigos.
Tú no entiendes Candy, Eliza no es solo la niña malcriada y caprichosa que todos piensan, ella no esta nada bien y temo que pueda atentar contra tu vida o la de alguien más.
Pero, por que no se lo dices a tus Padres.
No me creen, piensan que es solo un capricho más de Eliza, ellos no la conocen como yo, por eso me alejo de ella, no quiero verme involucrado en más problemas por su culpa.
Esta bien Neal, hablare con Albert, tal vez él pueda hacer algo.
Bien yo me voy, mi tren parte esta noche.
Que te vaya bien Neal, cuídate.
Gracias de nuevo Candy, te escribiere, tu no tienes que contestar mis cartas, sino quieres.
No te prometo nada Neal. Pero lo pensare.
Adiós Candy.
Adiós Neal.
En Nueva York ...
Susana se había quedado todo el día en la casa, leyó varias veces él articulo y pensaba en Terry. Al final del día se fue a su cuarto y se acostó, no podía dormir, estaba preocupada, era tarde y Terry aun no había llegado. En eso se oyó un portazo, había llegado, pero algo no estaba bien, Susana se levanto y se dirigió hacia la escalera, Terry estaba subiendo, caminaba con pasos vacilantes, estaba borracho.
Susana se acercó a él y lo ayudó a llegar a su cuarto, hizo que se acostara en la cama, le quito los zapatos y cuando lo ayudaba a quitarse la camisa, Terry tomo su cara entre sus manos y la beso. Susana había deseado ese beso por dos años y le respondió ansiosa, coloco sus manos por detrás del cuello de Terry y lo abrazo.
Terry empezó a besarla en el cuello, Susana estaba feliz, al fin iban a estar juntos, de repente Terry dijo:
"Candy cuanto te deseo". - Susana se paralizo
"¿Candy?... ¡Cree que esta con Candy!. - Lo empujo con fuerza.- ¡NO SOY CANDY!,- grito furiosa.- ¡SOY SUSANA!
¿Susana?,- Terry abrió los ojos y se quedo viendo a Susana asombrado, no sabia que estaba pasando, él había soñado (como todas las noches), con Candy.
Terry mírame, soy Susana.
¿Susana?, ¿Qué hacia ella en su cama?
Dime la verdad ¿todavía la quieres?.
A Terry se le estaban pasando los efectos del alcohol, se dio cuenta de lo que pudo haber pasado.
Lo siento Susana, yo no debí......
Responde: ¿Aun la quieres?.
Sí. No puedo mentirte, la quiero más que a mi vida.
Susana se lo quedo mirando, salió corriendo y entro a su cuarto. Terry salió tras de ella, pero no pudo alcanzarla, todavía estaba un poco mareado por el alcohol, la puerta estaba cerrada con llave.
Susana por favor, perdóname, no sé lo que me paso...
Terry déjame sola...
Terry se apoyo en la puerta del cuarto de Susana.
Susana, no quería hacerte daño.
Estoy bien Terry, no te preocupes.
Susana, perdóname..........
Es tarde Terry, mejor vete a dormir. Buenas noches.
Buenas noches Susana.
Terry se dirigió a su cuarto, se acostó en la cama, no podía dormir, solo pensaba en que Candy se casaría con un hombre que no era él.
"Candy te necesito",- exclamo llorando.
Mientras en su cuarto Susana pensaba.
"Terry, ¿Cuánto daño te he hecho por mi egoísmo?. Sé que no has logrado amarme, yo aun te sigo amando y quiero que seas feliz, aunque no sea a mi lado".
Susana paso toda la noche en vela pensando, al fin tomó una decisión que no solo cambiaría su vida, sino también la de Candy y Terry. Abrazo la almohada y comenzó a llorar.
Por Loly Sayol
Capitulo V
Noticias buenas y Malas
Mamá, Mamá,- entraba Eliza gritando al salón y se dirigía a su Madre.
¿Qué te pasa hija?.
Mira, lee lo que dice la columna de sociales del periódico.
"Con una espléndida fiesta el Sr. Adriano Sthepanos Creto, propietario de la naviera "Olympus", anuncio anoche el compromiso de su hija Samantha Sthepano Anderson con el soltero más cotizado de la sociedad de Chicago el Sr. Williams Albert Andrew, cabeza de una de las familias más distinguidas y acaudaladas de América".
Es el anuncio del compromiso de Albert, ¿Cuál es el problema Eliza?.
Sigue leyendo Mamá.
"..... Aunque las familias no lo han confirmado, también se rumora que la hija del Sr. Andrew, la Srta. Candice White Andrew esta saliendo con el hijo del Sr. Sthepanos, el Sr. Adrián Sthepano Anderson, ya que estuvieron juntos toda la velada.¿ Será que están planeando una boda doble?."
¿Te fijas Mamá? Esa pordiosera lo esta haciendo de nuevo, ahora me quiere robar a Adrián.
Cálmate Eliza,
¡CÓMO QUIERES QUE ME CALME!,- Grito Eliza.
Escucha bien Eliza, sabes que siempre de he apoyado.
¿Qué vamos hacer?. ¿Vas a hablar con la Tía Elroy, para que le prohíba a Candy verse con Adrián?.
No, no haremos nada.
¡¿QUÉ?!
Entiende Eliza, Candy ya no es una huérfana, que no tiene quien la proteja, ahora tiene a Albert y si esto no es suficiente, a la Tía Elroy también y te aseguro que la primera persona que vería con buenos ojos un matrimonio de Candy con Adrián, seria ella.
PERO MAMA, TIENES QUE AYUDARME.
Lo siento Eliza, no nos conviene enemistarnos con Albert y la Tía Elroy, así que olvídate de ese muchacho.
NEAL, ¿ESTAS OYENDO?, ¿VAS A DEJAR QUE CANDY SE SALGA CON LA SUYA?.
Ya te dije Eliza que me dejaras en paz, Candy no quiere nada conmigo y si ella esta enamorada de Adrián, espero que sean felices, adiós Mamá voy a salir,- dijo besando a su Madre en la mejilla.
Es hora que madures Eliza,- le dijo Neal al pasar a su lado.
Eliza no podía creerlo, por primera vez estaba sola, ni su Madre, ni su hermano querían ayudarla.
"ESTO NO SE VA A QUEDAR ASI, NO LO VOY A PERMITIR, SI ADRIAN NO PUEDE SER MIO NO SERA DE CANDY." - Grito Eliza, miro enojada a su Madre, dio un portazo y salió hacia la calle.
Eliza hija, por favor no hagas ninguna locura,- exclamó la Sra. Leegan intentando alcanzarla, pero ya era muy tarde cuando llego a la puerta de la mansión, vio como Eliza se alejaba en su auto.
En Nueva York otra persona estaba leyendo también la noticia del periódico.
¿Que té pasa amor? De repente te pusiste pálido.- Decía preocupada Susan.
Nada Susan estoy bien, - dejando el periódico sobre la mesa- Vamos a montar una nueva obra y estoy un poco preocupado, es algo diferente a lo que estoy acostumbrado.
¿De que trata la obra?, Terry
Vamos a montar "Cyrano de Bergerac" de Edmundo Rostand, yo haré el papel de Cyrano.
¿De Cyrano?, Pero no es la historia de un hombre con la cara desfigurada.
No, sólo tiene la nariz más grande de lo normal, es la historia de un hombre que esta tan enamorado que hará cualquier sacrificio, con tal de ver a su amada feliz, aunque signifique entregársela a otro hombre.
Si ya me acuerdo, comento Susana, pero el final es muy triste. ¿Tú crees que deberías hacer ese personaje, Terry?
Si, lo considero un gran reto.
Estoy segura que lo harás bien, eres un gran actor.
Gracias Susana, pero aun debo trabajar en el personaje. Bueno me voy, hoy empiezan los ensayos.
¿Vendrás a almorzar?, Terry.
No lo creo Robert Hathaway esta muy nervioso, lo más seguro es que nos tendrá hasta tarde ensayando, no me esperes despierta.- La beso en la frente y salió.
Ya en la calle...
- "No puede ser que me hallas olvidado Candy,"- suspiraba melancólico Terry.
Terry no había podido olvidar a Candy, cada vez que veía a Susana recordaba que por su culpa ellos no podían estar juntos, no es que la odiara, pero ese pensamiento no le permitía quererla, estaba a su lado por gratitud y lastima más que todo
A veces deseaba que ella no lo hubiera salvado, era preferible estar muerto a vivir sin Candy.
Susana desde la ventana lo vio alejarse de la casa, camino hacia la mesa cogió el periódico y leyó él articulo que tanto había impresionado a Terry.
¡Es sobre Candy!, exclamo.-¡OH¡, Terry a pesar de todo lo que he hecho para hacerte feliz, tú aun no has podido olvidarla.
Susana se había sometido a varias operaciones y después de innumerables horas de terapia había logrado caminar gracias a una pierna ortopédica, tenia una ligera cojera, pero no se notaba mucho. Ella creía que así Terry dejaría de verla con lastima y empezaría a quererla.
No podía quejarse, Terry la trataba con mucha dulzura y cariño, pero a pesar del tiempo que llevaban casados, no pasaba más allá de un beso en la frente o una caricia. Dormían en cuartos separados.
De vuelta en Chicago en el Hospital Sta. Juana.
Candy estaba terminando su turno en el hospital cuando una enfermera se le acerco para decirle que un muchacho quería verla. Resultó ser Neal que había ido a hablar con Candy.
¿Que quieres Neal?,- Pregunto molesta Candy.
Solo quiero hablar un momento contigo.
Me parece que las cosas ya quedaron bien claras, decía Candy irritada.
Por favor Candy, solo 10 minutos, te prometo que no te molestare más.
Esta bien, 10 minutos, más nada, salgamos al patio.
Una vez en el patio del hospital, Neal le pidió a Candy que se sentaran en un banco.
Bueno Neal empieza, ¿Qué quieres?.
Candy, vine solo para pedirte que me perdones y a despedirme.
¿Despedirte, a donde vas?.
Me voy para Boston, a trabajar en las oficinas que tiene la familia allá.
Pero, ¿porque te vas?
Por la misma razón que quiero pedirte disculpas, me he dado cuenta, que tanto Eliza como yo te hemos hecho mucho daño y tu no te lo merecías. Por favor Candy perdóname, mientras hablaba, Neal se arrodillaba ante Candy y la tomaba de la mano.
Por favor perdóname, con lagrimas en los ojos.
Neal.... yo no sé que decir....
Solo di que me perdonas.
Es que pasaron tantas cosas....... Neal, me hicieron mucho daño.
Esta bien Candy, lo entiendo, yo mismo no puedo perdonarme, será mejor que me vaya.
Ya se disponía a irse cuando Candy lo llamo.
Espera Neal, te perdono.....
¿Qué?, En serio Candy, no bromeas.
Si Neal, te perdono.
Gracias Candy,- tomándole nuevamente la mano y besándosela.
Ahora ya me puedo ir tranquilo.
Pero Neal, no me has respondido, ¿Por qué te vas a Boston?
Quiero rehacer mi vida, lo mas lejos posible de Eliza, sé que muchas cosas que hice, fueron idea de ella, pero no tenia la fuerza para enfrentármele, pero el amor que siento por ti me ha dado esa fuerza.
Neal, no sé que decir.
No digas nada Candy, solo quiero pedirte si podemos ser amigos.
¿Amigos? Neal, tu y yo......
En el futuro, quizás podamos serlo, ¿no crees Candy?.
Quien sabe Neal, con el tiempo, tal vez.
Gracias Candy, otra cosa, quiero prevenirte.
¿Por qué, qué pasa?
Ten cuidado de Eliza, ella no esta bien, temo que intente algo contra ti y Adrián Sthepanos.
Pero ¿por qué?
Ya te dije, ella no esta bien y se le ha metido en la cabeza casarse con ese hombre y cree que tú eres un obstáculo para sus planes.
En el pasado me ha hecho daño, pero ya no soy una niña y no permitiré que lo vuelva hacer, además Adrián y yo solo somos amigos.
Tú no entiendes Candy, Eliza no es solo la niña malcriada y caprichosa que todos piensan, ella no esta nada bien y temo que pueda atentar contra tu vida o la de alguien más.
Pero, por que no se lo dices a tus Padres.
No me creen, piensan que es solo un capricho más de Eliza, ellos no la conocen como yo, por eso me alejo de ella, no quiero verme involucrado en más problemas por su culpa.
Esta bien Neal, hablare con Albert, tal vez él pueda hacer algo.
Bien yo me voy, mi tren parte esta noche.
Que te vaya bien Neal, cuídate.
Gracias de nuevo Candy, te escribiere, tu no tienes que contestar mis cartas, sino quieres.
No te prometo nada Neal. Pero lo pensare.
Adiós Candy.
Adiós Neal.
En Nueva York ...
Susana se había quedado todo el día en la casa, leyó varias veces él articulo y pensaba en Terry. Al final del día se fue a su cuarto y se acostó, no podía dormir, estaba preocupada, era tarde y Terry aun no había llegado. En eso se oyó un portazo, había llegado, pero algo no estaba bien, Susana se levanto y se dirigió hacia la escalera, Terry estaba subiendo, caminaba con pasos vacilantes, estaba borracho.
Susana se acercó a él y lo ayudó a llegar a su cuarto, hizo que se acostara en la cama, le quito los zapatos y cuando lo ayudaba a quitarse la camisa, Terry tomo su cara entre sus manos y la beso. Susana había deseado ese beso por dos años y le respondió ansiosa, coloco sus manos por detrás del cuello de Terry y lo abrazo.
Terry empezó a besarla en el cuello, Susana estaba feliz, al fin iban a estar juntos, de repente Terry dijo:
"Candy cuanto te deseo". - Susana se paralizo
"¿Candy?... ¡Cree que esta con Candy!. - Lo empujo con fuerza.- ¡NO SOY CANDY!,- grito furiosa.- ¡SOY SUSANA!
¿Susana?,- Terry abrió los ojos y se quedo viendo a Susana asombrado, no sabia que estaba pasando, él había soñado (como todas las noches), con Candy.
Terry mírame, soy Susana.
¿Susana?, ¿Qué hacia ella en su cama?
Dime la verdad ¿todavía la quieres?.
A Terry se le estaban pasando los efectos del alcohol, se dio cuenta de lo que pudo haber pasado.
Lo siento Susana, yo no debí......
Responde: ¿Aun la quieres?.
Sí. No puedo mentirte, la quiero más que a mi vida.
Susana se lo quedo mirando, salió corriendo y entro a su cuarto. Terry salió tras de ella, pero no pudo alcanzarla, todavía estaba un poco mareado por el alcohol, la puerta estaba cerrada con llave.
Susana por favor, perdóname, no sé lo que me paso...
Terry déjame sola...
Terry se apoyo en la puerta del cuarto de Susana.
Susana, no quería hacerte daño.
Estoy bien Terry, no te preocupes.
Susana, perdóname..........
Es tarde Terry, mejor vete a dormir. Buenas noches.
Buenas noches Susana.
Terry se dirigió a su cuarto, se acostó en la cama, no podía dormir, solo pensaba en que Candy se casaría con un hombre que no era él.
"Candy te necesito",- exclamo llorando.
Mientras en su cuarto Susana pensaba.
"Terry, ¿Cuánto daño te he hecho por mi egoísmo?. Sé que no has logrado amarme, yo aun te sigo amando y quiero que seas feliz, aunque no sea a mi lado".
Susana paso toda la noche en vela pensando, al fin tomó una decisión que no solo cambiaría su vida, sino también la de Candy y Terry. Abrazo la almohada y comenzó a llorar.
