Chloe detuvo su lectura. Altena no estaba a la vista. Cerrando el libro, la niña se puso en pie y se asomó a la ventana para contemplar el lejano horizonte, el eterno firmamento. Un fugaz y suave soplo de viento golpeó grácilmente su cara como dejando ir un suspiro en el lugar de la chica. Volvía a estar sola. Dejó que su mente la consolara con memorias, recuerdos de sus días con la compañera de ojos pardos. Altena había prometido que un día se reunirían de nuevo para ser las verdaderas Noir. Chloe miraba hacia al futuro, al día en que volverían a encontrarse. No sabía como sería, solo deseaba volver a tener una amiga, su ídolo. Su mente la hizo viajar al pasado.

***

"Noir" susurró Chloe. La aludida volteó para encarar a su interlocutora, su cara sin emoción. Esto era la despedida, la mano negra se iba de su lado y Chloe se encontró sin palabras con que decir adiós, o hasta la vista. Los días nunca le parecieron tan cortos desde que Altena les comunicase la marcha de Noir. Ahora, estando ahí de pie, en frente del camino, todo parecía tan irreal. Altena estaba a su lado y una pareja de Soldats vestidos de paisano junto a Noir. Se la llevaban, lejos, lejos de su alcance, pero no de su corazón.

"..." Chloe quedo muda, ambas se limitaron a mirarse. En ese corto periodo de tiempo en que Noir había sido parte de la familia, las dos habían llegado a ser un gran equipo. Cuando el silencio se alargó, todo había sido dicho, Noir dio media vuelta y siguió a la pareja a un coche. Esa fue la última imagen que Chloe tuvo, Noir dándole la espalda y desapareciendo dentro del auto. En momentos, el coche arrancó y empezó a marcharse. Altena apoyo sus manos en los hombros de Chloe con tal de confortar a la pequeña que no perdía de vista el vehículo. De repente Chloe se deshizo de Altena y empezó a correr tras él. "Noir" gritaba, el coche no aminoró, ignoró a la figura que corría detrás con todo su ser. "Noir" volvió a gritar. Sin embargo vio impotente como el coche se hacía más y más pequeño, se detuvo en su carrera mirando como se desvanecía en la distancia. Ya está, se ha ido. La realidad golpeó a Chloe más fuerte que cualquier otra cosa. Una sensación de angustia y de perdida le oprimía el pecho. Los ojos le ardían y sin darse cuenta lágrimas empezaron a asomar de esos grises orbes. Lágrimas de rabia, rabia por haber sido abandonada de nuevo, lágrimas de tristeza, de soledad, simplemente lágrimas. En ese momento Chloe se percató que no tenía nada aparte de su memoria para recordar a su amiga. Ni Noir tenía nada para poder acordarse de ella. Ninguna poseía ningún objeto. Nada con que poder recordar buenos momentos. Chloe se prometió que la próxima vez no pasaría.

Secó sus lágrimas con su antebrazo y se sintió avergonzada por ellas. Miro durante un tiempo más la colina por donde se había esfumado el coche con Noir. Dio media vuelta y volvió a the Manor. Su expresión decidida. Altena la estaba esperando pacientemente, al verla Chloe echo a correr hacia ella. Altena sonrió y abrió sus brazos para recibir a la pequeña en su maternal  abrazo.

***

...con todo mi cariño

Altena

Chloe sonrió mientras acababa de leer la carta de Altena. Miró por la ventana las verdes praderas irlandesas. Había pasado casi un año desde que Chloe viera a Noir por última vez. La pequeña había crecido unos metros, pero su estatura seguía siendo infantil. Su primera misión. Chloe estaba orgullosa que Altena por fin le confiara una ejecución. Hasta entonces sus misiones habían sido mera rutina, de mensajero. Chloe recogió sus armas y salió de la habitación.

"Ah.. Chloe" la llamó un hombre en la recepción del hotel. Él era la tapadera de la jovencita, su "padre", que la había traído con él en un viaje de negocios. A Chloe no le gustaba, pero tenía que ir con él para no levantar sospechas. La pequeña se dirigió hasta él sin mediar palabra.

Al llegar a la pequeña mansión del objetivo, Chloe estudió el exterior. El  hombre sacó de su chaqueta una pistola y la cargó. Chloe se giró a él y lo observó con su inexpresiva cara. "Voy sola" comentó simplemente. "Pero ahí dentro hay asesinos entrenados, no sabemos cuantos... Sé las ordenes de Altena, pero no puedo dejarte ir sola y quedarme aquí esperando a que te maten" Aquel adulto no confiaba en las posibilidades de Chloe, sus motivaciones eran nobles, pero seguía viendo a la niña, no la asesina. "Te acompaño" dijo testarudo el hombre. "No" dijo amenazante la chica. El hombre la miró atónito "pero..." quiso excusarse. "Si no cumples las ordenes de Altena..." habló Chloe "...Te mataré" acabó. Pero fue la mirada de Chloe que hizo retroceder al hombre con temor y guardar su arma. Jamás había visto, y menos en los ojos de un ser tan joven, el veneno y la frialdad que desprendía esos grises y afilados ojos. Sin más conversación, Chloe dio media vuelta y se adentró en el caserón.

El mercenario escuchó algunos disparos, algún grito, masculino y gutural. Y silencio. Por un momento temió que la niña estuviese muerta. Iba a entrar en busca de respuestas, aunque le estaba prohibido, cuando de la nada vio aparecer a la niña. Estaba intacta y salía de la casa con la misma ecuánime expresión con la que había entrado. Realmente era estremecedor ver la profesionalidad de la pequeña. El nombre de Noir infundía respeto, pero después de esto, debía ser temido. Chloe pasó junto a él sin dignarse a mirarlo. Él observó que ni siquiera tenía un rasguño. Sin pretenderlo, no pudo evitar ojear levemente por una ventana antes de seguir a Chloe. Dos cuerpos se veían tendidos en el suelo y colgando de una mesa. El que colgaba de la mesa tenía una agónica expresión, sangre goteaba hasta el suelo bajo él. El del suelo parecía más sereno, como si la muerte le hubiese pillado por sorpresa y le hubiese sesgado la vida de cuajo. Un brillante y fino cuchillo podía distinguirse en su frente. Los ojos del hombre se abrieron como platos  y al acompañar de vuelta a Chloe, no se atrevió a andar a menos de dos pasos de distancia.

Una vez en el avión, Chloe tenía unas ganas locas de ver a Altena y explicarle todo. Chloe pensó que desde aquel día estaba más cerca de Noir. Sonrió.

Otro capi más ^o^ . He intentado entender la obsesión de Chloe con el dichoso tenedor. Espero que me haya salido bien. Lo que más me ha gustado en poner a Chloe por fin en acción, me ha encantado describir los cadáveres ( y eso que sólo lo he hecho con do XDDD ja ja (risa macabra)) Bueno... este fic empieza a dar sus últimos coletazos. ( Mi Chloee TT__TT ) Pero confío en que seguiréis conmigo hasta el final ¿neh? Cuando acabe ya haré otro con Kirika y Mirelle de nuevo ^__^

Mish1: Bueno, aki tienes más momentos tranquilos XDD. Tiendes a pensar que escribiré todo de cosas trágicas (el asesinato de la familia de Mirelle, la despedida Chloe-Kirika) tsk tsk. El drama es cosa tuya, creo  ·__.  Espero tu opinión sobre este cap. Neh?

Teisa : ^///^ Gracias. Este capítulo vuelve a centrarse un poco en Chloe, ya me dirás qué te ha parecido. Hasta pronto ^__^