Capitulo 6 De nuevo Hogwarts
'¿Qué dice?' Les preguntó Harry.
'Dice que nos van a tomar los TIMOS dentro de una semana. Y que por eso es que aún no han mandado sus calificaciones' Contestó Persefone totalmente impresionada.
'Y no hemos estudiado nada de nada' Agregó Roxana
'Y encima de todo tenemos que ir a Hogwarts mañana para comenzar a prepararnos' Finalizó Melinda
'Tengo una idea' Dijo Harry luego de unos instantes de silencio. 'Pero deben estar dispuestas a estudiar' Las chicas asintieron nerviosamente.
'Ustedes tres y Hermione se irán a Hogwarts para prepararse y se llevarán el cuadro de Hermione para que tengan acceso a la biblioteca y nadie los moleste. Yo iré a la tienda de Fred y George de Hogsmeade a trabajar, y cuando salga a la noche iré a prepararlas para DCAO, Encantamientos y Transformaciones que son las materias que mejor se me dan.' Concluyo Harry.
'Es un plan buenísimo' Opinó Persefone. '¿Verdad que irás a Hogwarts para ayudarnos Hermione?
'Claro' Respondió esta.
'Escribirle a Dumbledore entonces' Dijo Harry yendo a buscar una pluma y un pergamino, los tomó, y se puso a escribir la carta. Cuando la finalizó la leyó en voz alta:
Querido Profesor Dumbledore:
Me pregunto si podríamos ir Hermione y yo a Hogwarts junto con Persefone, Melinda y Roxana para ayudarlas con sus TIMOS. Espero que conteste pronto.
Harry
La carta era muy corta, pero a su vez muy directa y decía todo lo necesario. Dio un silbido, y a los pocos segundos Hedwig entró en la habitación.
'Llévale esto a Dumbledore lo más rápido que puedas, y no vuelvas hasta que no te escriba la contestación, si es necesario, pícalo hasta que conteste' Le dijo Harry mientras le ataba al carta. Hedwig ululó levemente como diciendo que había comprendido el mensaje, y salió volando rápidamente de la habitación.
Se pusieron a preparar todo los libros y cosas que necesitarían para 2 semanas en Hogwarts, cuando habían pasado tan solo 10 minutos desde que Harry había mandado a Hedwig, está volvió a entrar con la respuesta.
'¿Tan rápido?' Preguntó Hermione.
'Es imposible...' Murmuró Harry. 'A menos que...'
'¿A menos que qué?' Preguntó Melinda
'Que estuviera en la casa de la señora Figg' Contestó Harry mientras abría la carta y comenzaba a leerla, era mucho más corta la respuesta que la carta que habían enviado.
Ve a casa de la señora Figg
'¡Tenía razón!' Gritó Harry. Todas lo miraban sin entender a lo que se refería puesto que había leído la carta en voz baja. 'Vamos' Agregó tomando la mano de Hermione y Persefone, Roxana y Melinda los siguieron. Salieron de la casa, cruzaron la calle y se detuvieron delante de la casa que justo se encontraba enfrente a la suya. Se disponían a tocar el timbre cuando la puerta se abrió sola y Dumbledore apareció tras ella. Persefone, Melinda y Roxana se adelantaron y lo abrazaron inmediatamente. Harry sonrió ante este hecho, pero Hermione se quedó perpleja, no era común que unas estudiantes nuevas trataran a Dumbledore con tanta familiaridad. Miró a Harry y este le susurró:
'Luego te explico'
'¿Qué ocurre profesor?' Le preguntó Harry cuando se entraron a la casa
'He decidido prepararte para que puedas estar a la altura de tu destino, tu entrenamiento dará comienzo el día que se les entreguen las notas de los TIMOS y durará hasta que estés listo, podría tomarte meses o incluso años, pero cuanto más sepas más preparado estarás y más posibilidades tendrás de enfrentarte a Voldemort. Hermione, Persefone, Melinda y Roxana recibirán el mismo entrenamiento siempre y cuando, quieran aceptarlo. En el caso de que acepten, Hermione debería dejar el cargo de prefecta, ya que interferiría con sus nuevas obligaciones. Se les sacará de sus habitaciones con alguna excusa, y dormirán todos juntos en otra, donde podrán colgar los cuadros de Harry, y así estudiar y hacer ejercicio sin que nadie se de cuenta. ¿De acuerdo?' Dumbledore habló tan rápido que los chicos se quedaron totalmente pasmados.
'También, formarás parte de la Orden del Fénix Harry. Ahora que has logrado dominar la Oclumencia ya no corremos más riesgos de que Voldemort se entere de lo que planeamos' Agregó Dumbledore
'Pues a mi no me queda otra opción más que aceptar o aceptar, así que mejor voy a ir preparando mis cosas' Dijo Harry saliendo de la casa de la señora Figg, se metió en su habitación, y comenzó a preparar las maletas. Mientras tanto, en casa de la señora Figg, Dumbledore dijo:
'¿Ustedes aceptan?' Las 4 chicas asintieron. Las 4 estaban totalmente decididas en prepararse para estar listas por si les tocaba enfrentar al asesino de sus padres.
'¿No importa perder el cargo de prefecta?' Le preguntó Dumbledore a Hermione.
'Voldemort asesinó a mis padres' Contestó Hermione únicamente y salió diciendo: 'Voy a preparar mis cosas' Las chicas se quedaron para hablar con su tío.
'¿Cómo se lo ha tomado?' Pregunto refiriéndose a Hermione
'Mucho mejor de lo que puedas imaginar. Harry la ha ayudado en todo, le ha enseñado a volar, le ha regalado cosas y muchas cosas más para que lo supere, claro que también tuvo que hacerlo con nosotras para que no se viera sospechoso' Contestó Persefone
'Suponía que Harry haría lo imposible para que Hermione se sintiera mejor' Contestó Dumbledore. '¿Cómo han pasado ustedes todo el verano? El otro día no pudimos ni hablar prácticamente, pero por todo lo que dijeron sobre Harry, se podría decir que muy bien ' Las chicas asintieron.
'Realmente debe ser una de las mejores cosas que nos pasó en la vida el conocerlo. De be ser una de las mejores personas que existe' Contestó Roxana, sus hermanas asintieron
'Me alegro entonces de haberlas traído aquí' Les contestó. Luego de abrazarlas agregó: 'Será mejor que vayan yendo o comenzaran a sospechar. Recuerden estar listos mañana a las 9 en la cocina'
'Harry ya lo sabe, lo descubrió en menos de 5 minutos de charla' Le dijo Persefone a su tío antes de irse.
Salieron de la casa de la señora Figg, que por alguna extraña razón no se encontraba en la casa en ese momento, cruzaron la calle y se metieron dentro de la casa, que estaba siendo totalmente desvalijada por Harry. Éste, con unos cuantos encantamientos reductores, había logrado meter todo su baúl y los 8 cuadros en su bolsillo, y ahora se encontraba haciendo lo mismo con las cosas de Hermione.
'¿Nos ayudas con lo nuestro en cuanto termines Harry?' Le preguntó Melinda entrando a la habitación y comenzando a preparar todas sus cosas.
'Claro. Solo denme unos minutos más y estoy con ustedes' Le respondió. '¿Falta meter alguna otra cosa más en el baúl Hermione? Dijo girando hacia ella, esta negó con la cabeza. Entonces lo encogió y se le pasó a Hermione, la que se lo guardó en su bolsillo.
Luego de guardar todas las cosas de Persefone, Melinda y Roxana en sus respectivos baúles expandidos mágicamente al igual que el de Hermione, Harry los encogió y se los dio a sus respectivas dueñas. Luego hizo aparecer un poco de comida que comieron sin siquiera hablar una sola vez. Roxana dijo:
'¿Cómo haremos con la habitación?'
'¿A que te refieres?' Le preguntó Melinda sin comprender.
'Me refiero a que tenemos que hacer algún hechizo para que, cuando entre algún chico, no pueda ver las cosas de Harry, y si entra alguna chica que no pueda ver las nuestras. Además de que no podemos entrar todos por una misma puerta. Tampoco podremos tener los cuadros al aire libre, y se vería raro si ponemos 8 puertas que no dan a ningún lado' Explicó Roxana
'Supongo que Dumbledore se encargará de todo eso' Contestó Hermione. '¿Sino no lo hubiera propuesto verdad?'
'Tienes razón' Contestó Harry.
'Hablando de Dumbledore' Dijo de repente Hermione. '¿Cómo es que tienen tanta confianza con el? Les preguntó a Persefone, Roxana y Melinda. Que, inmediatamente, se miraron con caras de preocupación.
'Es que el es nuestro tío' Le contestó Persefone. Hermione se enojó en que no hubieran confiado en ella, pero luego recapacitó al darse cuenta de que seguramente, el único que lo sabría sería Harry, y que tendrían un muy buena motivo para no habérselo dicho a ella. Después de todo, eran, prácticamente, hermanas.
'¿Y porque no tienen el mismo apellido? Les volvió a preguntar Hermione ya más tranquila.
'Es que queremos pasar desapercibidas de Voldemort. Y piensa que llegar a Inglaterra, teniendo las 3 el mismo apellido que el director de Hogwarts, no pasaría muy desapercibido que digamos' Explicó Melinda.
'Ah' Dijo Hermione.
'¿Han pensado que hacer con Ron?' Les dijo Roxana a Harry y Hermione
'¿Por qué lo dices?' Preguntaron al mismo tiempo.
'Por que se están distanciando mucho de el. Ninguno de los 2 será prefecto, o sea que el tendrá que ir a las reuniones y demás cosas sin ninguno de los dos. Harry dejará de compartir dormitorio con el. Dentro de poco nos entregarán los TIMOS, y por lo que me ha dicho Harry, a el no le ha ido muy bien que digamos, por lo que no tomaran las mismas materias, durante la noche tendremos las materias especiales, lo que nos dará muy poco tiempo para estar con el' Les explicó Roxana
'Tal ves Dumbledore le pueda dar las mismas clases que a nosotros' Dijo Persefone luego de un rato
'Imposible, su madre no lo va a dejar' Le contestó Hermione.
'Me parece que deberíamos irnos a dormir si queremos levantarnos temprano mañana para hacer los ejercicios y la practica de Quidditch' Opinó Harry
'¿A pesar de todo quieres hacernos hacer ejercicios y practicar Quidditch?' Le preguntó Melinda a Harry como si se tratase de una locura.
'Si quieren llamar la atención de los chicos de Hogwarts y poder entrar en el equipo de Quidditch el único método es trabajando su cuerpo y entrenando' Le contestó Harry con una gran sonrisa. Subió las escaleras, se metió en su habitación, y se recostó en su cama pensando en que mañana tendría un día bastante duro. Luego de unos instantes las chicas subieron las escaleras, se metieron en su habitación, que lo único que contenía era las camas, y se durmieron con el mismo pensamiento que Harry.
'¡¡¡Arriba todas!!!' Les gritaba Harry. Pero ninguna de ellas se despertaba, así que se le ocurrió una gran idea. Tomó la varita, la apuntó al aire, y lanzó un chorro de agua que se dividió en 4 más pequeños y les dio justo en la cara haciendo que las cuatro chicas despertaran con de un sobresalto.
'Pero que...' Gritó Persefone, pero se cayó cuando se encontró con la cara sonriente de un Harry ya levantado y completamente vestido.
'A hacer ejercicio' Les dijo Harry casi gritando de forma de chiste, ya que se habían levantado muy tarde como para entrenar. Pero, al parecer, estas no se fijaron la hora que era porque recibió cuatro golpes con la almohada en la cara.
'¡Eh!' Se quejó Harry. 'Esto es la guerra' Movió la varita y las almohadas le dieron de lleno a sus dueñas en la cara. Estas sin perder tiempo se lo devolvieron tumbándolo y lanzándose sobre él comenzaron a hacerle cosquillas sin parar.
'¿Por qué hacen tanto ruido?' Preguntó Dumbledore abriendo la puerta de par en par. Las chicas pararon de hacerle cosquillas a Harry pero no se movieron de encima de el porque estaban muy sorprendidas por la visita que se les olvidó moverse. Dumbledore miró toda la habitación, no había nada porque habían guardado todo, pero las sabanas y las almohadas estaban tiradas por todo el lugar dando signos de que habían tenido una guerra.
'¿Qué hace aquí tan temprano profesor?' Le preguntó Hermione rompiendo el silencio.
'¿Tan temprano? Pero si son las 8:30 de la mañana y falta solo media hora para la hora fijada' Le respondió Dumbledore
'¿Entonces para que nos dijiste que teníamos que hacer ejercicio?' Le preguntó Persefone a Harry. Este rió sorprendiendo a todos
'Solo era un chiste. Vine a despertarlas a las 6 para ir al gimnasio pero se veían tan bien durmiendo que me pareció un pecado despertarlas tan temprano. Así que me fui yo solo al gimnasio durante 1 hora y luego me bañé y vine a despertarlas, pero me contestaron con 4 almohadonzazos en la cara y ahí empezamos la guerra, pero se me tiraron arriba cuando me caí y empezaron a hacerme cosquillas y ahí llego usted' Explicó Harry a todos. Las chicas se sonrojaron por lo que había dicho Harry sobre ellas mientras que Dumbledore esbozó una gran sonrisa.
'Bueno, en ese caso, señoritas, les aconsejo que se bañen deprisa si quieren estar a tiempo mientras que Harry y yo aclaramos unos puntos' Contestó Dumbledore. Harry y Dumbledore salieron de la habitación mientras las chicas se metían en el baño.
'¿Qué ocurre profesor?' Le preguntó Harry cuando se sentaron en el comedor.
'Te agradezco todo lo que has hecho por Hermione. Desde invitarla a vivir aquí hasta que le hayas enseñado Quidditch' Le contestó el profesor.
'No tiene nada que agradecer profesor, aunque no creo que haya sido para tanto.' Le dijo Harry.
'Sin darte cuenta Harry, puedes levantarle el ánimo a las personas sin hacer nada especial. Estoy seguro de que eso lo heredaste de James, el también era así.' Le comentó Dumbledore. Harry esbozó una gran sonrisa. 'Al igual que esa capacidad para llamar la atención de las señoritas' Ante esto Harry se sonrojó completamente.
'Eso es por que soy famoso. Aún no he terminado de abrir todas las cartas que me llegaron para mi cumpleaños. Y encima hay varias chicas que me mandan todos los días bajo nombres como "Tu enamorada" "tu admiradora" "la que te ama". Y lo peor de todo es que no conozco ni a la mitad de las chicas que ponen sus nombres' Le respondió Harry muy desanimado.
'Estas en lo cierto, pero también estás equivocado. 'Le contestó Dumbledore
'¿Qué quiere decir?' Le preguntó Harry sin comprender
'Que es cierto que muchas personas que te quieren solo porque eres famoso. Pero también hay muchas personas que te quieren por lo que eres' Le explicó Dumbledore, y le iba a seguir diciendo algo pero se cayó porque entraron en el comedor Persefone, Hermione, Roxana y Melinda.
'Que lindas se ven' Les dijo Harry a las chicas. Estas se sonrojaron. Dumbledore rió y pensó "Lo volvió a hacer, y sin darse cuenta"
'Nos vamos' Dijo Dumbledore levantándose de la silla.
'¿En que iremos?'
'Iremos en un auto del ministerio hasta la estación King's Cross y ahí tomaremos el Expreso Hogwarts' Les explicó Dumbledore a los cinco jóvenes
'De acuerdo' Contestaron los cinco al mismo tiempo. Se levantaron, salieron de la casa, el profesor Dumbledore la hechizó para que ningún muggle pudiera entrar y se subieron al auto negro que les había prestado el ministerio de la magia. El profesor Dumbledore se sentó adelante, al lado del chofer y Harry, Hermione, Persefone, Roxana y Melinda en el asiento de atrás, aunque un poco apretados. El viaje hasta la estación King's Cross resultó excesivamente corto, Harry no sabía si era porque se había entretenido hablando con el profesor Dumbledore y las muchachas o por el simple hecho de que el auto iba a una velocidad que superaba los 300km/h y que cada vez que parecía que iba a chocar con algo, esto se movía dejando el camino libre. A Harry le recordó mucho a su viaje en el autobús noctámbulo en el tercer curso y especialmente a Sirius.
Cuando bajaron del coche el profesor Dumbledore le agradeció al chofer por haberlos llevado y luego se encaminaron hacia las plataformas 9 y 10. La atravesaron, y se encontraron con el expreso Hogwarts, pero, para sorpresa de Harry y Hermione, y desilusión por parte de Persefone, Roxana y Melinda, este solo contenía un único vagón. Cuando se metieron en uno de los cuatro compartimientos que había, Harry dijo:
'Profesor, ¿Podemos ir a jugar quidditch?'
'Claro Harry' Le contestó Dumbledore. Este había sacado la varita y estaba por agrandar el cuadro cuando Dumbledore habló de nuevo: 'Pero antes de irte me harías un gran favor si también puedes agrandar el cuadro de Tom, quisiera hablar con el cara a cara sin correr ningún peligro.
'De acuerdo' Dijo Harry. Metió la mano en su bolsillo, y sacó todas sus cosas del tamaño de unas pequeños caramelos muggles. Los acercó a todos a sus ojos para examinarlos mejor, agarró dos y guardó todos los otros de nuevo en el bolsillo de su túnica. Luego realizó el hechizo aumentador dos veces y su cuadro y el de Riddle aparecieron.
'Profesor Dumbledore' Exclamaron el Harry del cuadro y Riddle.
'Un gusto verlos de nuevo Tom, Harry' Les respondió el saludo Dumbledore. 'Harry, deja pasar a estos chicos que necesito hablar contigo y Tom a solas' agregó.
'De acuerdo' Contestó el Harry del cuadro haciéndose a un lado para dejarlos pasar.
'Recuerden que al no tener tantos vagones el tren va mucho más rápido. Dentro de 2 horas más o menos estaremos llegando a Hogwarts' Les dijo Dumbledore. Todos asintieron y entraron por el cuadro, esta vez, no bajaron por unas escaleras, sino directamente por el corredor que daba al gimnasio. Siguieron de largo y fueron directamente al armario de las escobas del campo de Quidditch. Se cambiaron, esta vez todos llevaban puestas las túnicas del equipo de quidditch de Gryffindor. Hermione, como en todas las ocasiones que habían ido, se puso la túnica de Harry.
'¿Por qué usas siempre la de Harry?' Le preguntó Melinda cuando la notó otra vez con esa túnica.
'No se, siento algo raro cuando me la pongo' Le contestó Hermione
'Pues traspiración o suciedad no es. Las lavamos todos los días' Comentó Harry riendo y haciendo reír a las muchachas. Cosa que hizo que las palabras que Dumbledore le dijo en su casa le volvieran a la mente "Sin darte cuenta Harry, puedes levantarle el ánimo a las personas sin hacer nada especial. Estoy seguro de que eso lo heredaste de James, el también era así. Al igual que esa capacidad para llamar la atención de las señoritas" Se sonrojó levemente preguntándose si sería verdad lo que le había dicho Dumbledore, pero rápidamente salió de sus pensamientos cuando alguien lo sacudió.
'¿Qué ocurrió Harry?' Le preguntó Melinda, quien era la que lo había sacudido.
'Nada, solo me quede pensando en lo que me dijo Dumbledore' Contestó Harry. Hermione iba a preguntarle que era lo que le había dicho y este agregó rápidamente: 'Es algo sin importancia. Ahora vayamos a divertirnos al estadio' Todos tomaron una Saeta de Fuego cada uno, incluso Hermione, la que se encontraba muy nerviosa por esto.
'No te preocupes, lo harás bien' Le dijo Persefone palmeándole la espalda y despegando del suelo en dirección a los postes seguida por Melinda y Roxana.
'Tan solo vuela como lo has hecho siempre. No importa la escoba que vueles, si sabes volar, vuelas en cualquier cosa' Le dijo Harry al oído y luego el también despegó. Tras oír las palabras de Harry, Hermione se llenó valor de repente, pateó el suelo, y despegó. Notaba la gran diferencia que había entre las Nimbus 2002, que era el último modelo con el que había montado, y la Saeta de Fuego, pero se acostumbró rápidamente y pudo disfrutar a pleno ese día. Ellos volaron, al igual que el tiempo, y pronto se encontraban parados delante de las puertas de Hogwarts.
'Al fin en Hogwarts' Exclamó Harry
'¿Qué dice?' Les preguntó Harry.
'Dice que nos van a tomar los TIMOS dentro de una semana. Y que por eso es que aún no han mandado sus calificaciones' Contestó Persefone totalmente impresionada.
'Y no hemos estudiado nada de nada' Agregó Roxana
'Y encima de todo tenemos que ir a Hogwarts mañana para comenzar a prepararnos' Finalizó Melinda
'Tengo una idea' Dijo Harry luego de unos instantes de silencio. 'Pero deben estar dispuestas a estudiar' Las chicas asintieron nerviosamente.
'Ustedes tres y Hermione se irán a Hogwarts para prepararse y se llevarán el cuadro de Hermione para que tengan acceso a la biblioteca y nadie los moleste. Yo iré a la tienda de Fred y George de Hogsmeade a trabajar, y cuando salga a la noche iré a prepararlas para DCAO, Encantamientos y Transformaciones que son las materias que mejor se me dan.' Concluyo Harry.
'Es un plan buenísimo' Opinó Persefone. '¿Verdad que irás a Hogwarts para ayudarnos Hermione?
'Claro' Respondió esta.
'Escribirle a Dumbledore entonces' Dijo Harry yendo a buscar una pluma y un pergamino, los tomó, y se puso a escribir la carta. Cuando la finalizó la leyó en voz alta:
Querido Profesor Dumbledore:
Me pregunto si podríamos ir Hermione y yo a Hogwarts junto con Persefone, Melinda y Roxana para ayudarlas con sus TIMOS. Espero que conteste pronto.
Harry
La carta era muy corta, pero a su vez muy directa y decía todo lo necesario. Dio un silbido, y a los pocos segundos Hedwig entró en la habitación.
'Llévale esto a Dumbledore lo más rápido que puedas, y no vuelvas hasta que no te escriba la contestación, si es necesario, pícalo hasta que conteste' Le dijo Harry mientras le ataba al carta. Hedwig ululó levemente como diciendo que había comprendido el mensaje, y salió volando rápidamente de la habitación.
Se pusieron a preparar todo los libros y cosas que necesitarían para 2 semanas en Hogwarts, cuando habían pasado tan solo 10 minutos desde que Harry había mandado a Hedwig, está volvió a entrar con la respuesta.
'¿Tan rápido?' Preguntó Hermione.
'Es imposible...' Murmuró Harry. 'A menos que...'
'¿A menos que qué?' Preguntó Melinda
'Que estuviera en la casa de la señora Figg' Contestó Harry mientras abría la carta y comenzaba a leerla, era mucho más corta la respuesta que la carta que habían enviado.
Ve a casa de la señora Figg
'¡Tenía razón!' Gritó Harry. Todas lo miraban sin entender a lo que se refería puesto que había leído la carta en voz baja. 'Vamos' Agregó tomando la mano de Hermione y Persefone, Roxana y Melinda los siguieron. Salieron de la casa, cruzaron la calle y se detuvieron delante de la casa que justo se encontraba enfrente a la suya. Se disponían a tocar el timbre cuando la puerta se abrió sola y Dumbledore apareció tras ella. Persefone, Melinda y Roxana se adelantaron y lo abrazaron inmediatamente. Harry sonrió ante este hecho, pero Hermione se quedó perpleja, no era común que unas estudiantes nuevas trataran a Dumbledore con tanta familiaridad. Miró a Harry y este le susurró:
'Luego te explico'
'¿Qué ocurre profesor?' Le preguntó Harry cuando se entraron a la casa
'He decidido prepararte para que puedas estar a la altura de tu destino, tu entrenamiento dará comienzo el día que se les entreguen las notas de los TIMOS y durará hasta que estés listo, podría tomarte meses o incluso años, pero cuanto más sepas más preparado estarás y más posibilidades tendrás de enfrentarte a Voldemort. Hermione, Persefone, Melinda y Roxana recibirán el mismo entrenamiento siempre y cuando, quieran aceptarlo. En el caso de que acepten, Hermione debería dejar el cargo de prefecta, ya que interferiría con sus nuevas obligaciones. Se les sacará de sus habitaciones con alguna excusa, y dormirán todos juntos en otra, donde podrán colgar los cuadros de Harry, y así estudiar y hacer ejercicio sin que nadie se de cuenta. ¿De acuerdo?' Dumbledore habló tan rápido que los chicos se quedaron totalmente pasmados.
'También, formarás parte de la Orden del Fénix Harry. Ahora que has logrado dominar la Oclumencia ya no corremos más riesgos de que Voldemort se entere de lo que planeamos' Agregó Dumbledore
'Pues a mi no me queda otra opción más que aceptar o aceptar, así que mejor voy a ir preparando mis cosas' Dijo Harry saliendo de la casa de la señora Figg, se metió en su habitación, y comenzó a preparar las maletas. Mientras tanto, en casa de la señora Figg, Dumbledore dijo:
'¿Ustedes aceptan?' Las 4 chicas asintieron. Las 4 estaban totalmente decididas en prepararse para estar listas por si les tocaba enfrentar al asesino de sus padres.
'¿No importa perder el cargo de prefecta?' Le preguntó Dumbledore a Hermione.
'Voldemort asesinó a mis padres' Contestó Hermione únicamente y salió diciendo: 'Voy a preparar mis cosas' Las chicas se quedaron para hablar con su tío.
'¿Cómo se lo ha tomado?' Pregunto refiriéndose a Hermione
'Mucho mejor de lo que puedas imaginar. Harry la ha ayudado en todo, le ha enseñado a volar, le ha regalado cosas y muchas cosas más para que lo supere, claro que también tuvo que hacerlo con nosotras para que no se viera sospechoso' Contestó Persefone
'Suponía que Harry haría lo imposible para que Hermione se sintiera mejor' Contestó Dumbledore. '¿Cómo han pasado ustedes todo el verano? El otro día no pudimos ni hablar prácticamente, pero por todo lo que dijeron sobre Harry, se podría decir que muy bien ' Las chicas asintieron.
'Realmente debe ser una de las mejores cosas que nos pasó en la vida el conocerlo. De be ser una de las mejores personas que existe' Contestó Roxana, sus hermanas asintieron
'Me alegro entonces de haberlas traído aquí' Les contestó. Luego de abrazarlas agregó: 'Será mejor que vayan yendo o comenzaran a sospechar. Recuerden estar listos mañana a las 9 en la cocina'
'Harry ya lo sabe, lo descubrió en menos de 5 minutos de charla' Le dijo Persefone a su tío antes de irse.
Salieron de la casa de la señora Figg, que por alguna extraña razón no se encontraba en la casa en ese momento, cruzaron la calle y se metieron dentro de la casa, que estaba siendo totalmente desvalijada por Harry. Éste, con unos cuantos encantamientos reductores, había logrado meter todo su baúl y los 8 cuadros en su bolsillo, y ahora se encontraba haciendo lo mismo con las cosas de Hermione.
'¿Nos ayudas con lo nuestro en cuanto termines Harry?' Le preguntó Melinda entrando a la habitación y comenzando a preparar todas sus cosas.
'Claro. Solo denme unos minutos más y estoy con ustedes' Le respondió. '¿Falta meter alguna otra cosa más en el baúl Hermione? Dijo girando hacia ella, esta negó con la cabeza. Entonces lo encogió y se le pasó a Hermione, la que se lo guardó en su bolsillo.
Luego de guardar todas las cosas de Persefone, Melinda y Roxana en sus respectivos baúles expandidos mágicamente al igual que el de Hermione, Harry los encogió y se los dio a sus respectivas dueñas. Luego hizo aparecer un poco de comida que comieron sin siquiera hablar una sola vez. Roxana dijo:
'¿Cómo haremos con la habitación?'
'¿A que te refieres?' Le preguntó Melinda sin comprender.
'Me refiero a que tenemos que hacer algún hechizo para que, cuando entre algún chico, no pueda ver las cosas de Harry, y si entra alguna chica que no pueda ver las nuestras. Además de que no podemos entrar todos por una misma puerta. Tampoco podremos tener los cuadros al aire libre, y se vería raro si ponemos 8 puertas que no dan a ningún lado' Explicó Roxana
'Supongo que Dumbledore se encargará de todo eso' Contestó Hermione. '¿Sino no lo hubiera propuesto verdad?'
'Tienes razón' Contestó Harry.
'Hablando de Dumbledore' Dijo de repente Hermione. '¿Cómo es que tienen tanta confianza con el? Les preguntó a Persefone, Roxana y Melinda. Que, inmediatamente, se miraron con caras de preocupación.
'Es que el es nuestro tío' Le contestó Persefone. Hermione se enojó en que no hubieran confiado en ella, pero luego recapacitó al darse cuenta de que seguramente, el único que lo sabría sería Harry, y que tendrían un muy buena motivo para no habérselo dicho a ella. Después de todo, eran, prácticamente, hermanas.
'¿Y porque no tienen el mismo apellido? Les volvió a preguntar Hermione ya más tranquila.
'Es que queremos pasar desapercibidas de Voldemort. Y piensa que llegar a Inglaterra, teniendo las 3 el mismo apellido que el director de Hogwarts, no pasaría muy desapercibido que digamos' Explicó Melinda.
'Ah' Dijo Hermione.
'¿Han pensado que hacer con Ron?' Les dijo Roxana a Harry y Hermione
'¿Por qué lo dices?' Preguntaron al mismo tiempo.
'Por que se están distanciando mucho de el. Ninguno de los 2 será prefecto, o sea que el tendrá que ir a las reuniones y demás cosas sin ninguno de los dos. Harry dejará de compartir dormitorio con el. Dentro de poco nos entregarán los TIMOS, y por lo que me ha dicho Harry, a el no le ha ido muy bien que digamos, por lo que no tomaran las mismas materias, durante la noche tendremos las materias especiales, lo que nos dará muy poco tiempo para estar con el' Les explicó Roxana
'Tal ves Dumbledore le pueda dar las mismas clases que a nosotros' Dijo Persefone luego de un rato
'Imposible, su madre no lo va a dejar' Le contestó Hermione.
'Me parece que deberíamos irnos a dormir si queremos levantarnos temprano mañana para hacer los ejercicios y la practica de Quidditch' Opinó Harry
'¿A pesar de todo quieres hacernos hacer ejercicios y practicar Quidditch?' Le preguntó Melinda a Harry como si se tratase de una locura.
'Si quieren llamar la atención de los chicos de Hogwarts y poder entrar en el equipo de Quidditch el único método es trabajando su cuerpo y entrenando' Le contestó Harry con una gran sonrisa. Subió las escaleras, se metió en su habitación, y se recostó en su cama pensando en que mañana tendría un día bastante duro. Luego de unos instantes las chicas subieron las escaleras, se metieron en su habitación, que lo único que contenía era las camas, y se durmieron con el mismo pensamiento que Harry.
'¡¡¡Arriba todas!!!' Les gritaba Harry. Pero ninguna de ellas se despertaba, así que se le ocurrió una gran idea. Tomó la varita, la apuntó al aire, y lanzó un chorro de agua que se dividió en 4 más pequeños y les dio justo en la cara haciendo que las cuatro chicas despertaran con de un sobresalto.
'Pero que...' Gritó Persefone, pero se cayó cuando se encontró con la cara sonriente de un Harry ya levantado y completamente vestido.
'A hacer ejercicio' Les dijo Harry casi gritando de forma de chiste, ya que se habían levantado muy tarde como para entrenar. Pero, al parecer, estas no se fijaron la hora que era porque recibió cuatro golpes con la almohada en la cara.
'¡Eh!' Se quejó Harry. 'Esto es la guerra' Movió la varita y las almohadas le dieron de lleno a sus dueñas en la cara. Estas sin perder tiempo se lo devolvieron tumbándolo y lanzándose sobre él comenzaron a hacerle cosquillas sin parar.
'¿Por qué hacen tanto ruido?' Preguntó Dumbledore abriendo la puerta de par en par. Las chicas pararon de hacerle cosquillas a Harry pero no se movieron de encima de el porque estaban muy sorprendidas por la visita que se les olvidó moverse. Dumbledore miró toda la habitación, no había nada porque habían guardado todo, pero las sabanas y las almohadas estaban tiradas por todo el lugar dando signos de que habían tenido una guerra.
'¿Qué hace aquí tan temprano profesor?' Le preguntó Hermione rompiendo el silencio.
'¿Tan temprano? Pero si son las 8:30 de la mañana y falta solo media hora para la hora fijada' Le respondió Dumbledore
'¿Entonces para que nos dijiste que teníamos que hacer ejercicio?' Le preguntó Persefone a Harry. Este rió sorprendiendo a todos
'Solo era un chiste. Vine a despertarlas a las 6 para ir al gimnasio pero se veían tan bien durmiendo que me pareció un pecado despertarlas tan temprano. Así que me fui yo solo al gimnasio durante 1 hora y luego me bañé y vine a despertarlas, pero me contestaron con 4 almohadonzazos en la cara y ahí empezamos la guerra, pero se me tiraron arriba cuando me caí y empezaron a hacerme cosquillas y ahí llego usted' Explicó Harry a todos. Las chicas se sonrojaron por lo que había dicho Harry sobre ellas mientras que Dumbledore esbozó una gran sonrisa.
'Bueno, en ese caso, señoritas, les aconsejo que se bañen deprisa si quieren estar a tiempo mientras que Harry y yo aclaramos unos puntos' Contestó Dumbledore. Harry y Dumbledore salieron de la habitación mientras las chicas se metían en el baño.
'¿Qué ocurre profesor?' Le preguntó Harry cuando se sentaron en el comedor.
'Te agradezco todo lo que has hecho por Hermione. Desde invitarla a vivir aquí hasta que le hayas enseñado Quidditch' Le contestó el profesor.
'No tiene nada que agradecer profesor, aunque no creo que haya sido para tanto.' Le dijo Harry.
'Sin darte cuenta Harry, puedes levantarle el ánimo a las personas sin hacer nada especial. Estoy seguro de que eso lo heredaste de James, el también era así.' Le comentó Dumbledore. Harry esbozó una gran sonrisa. 'Al igual que esa capacidad para llamar la atención de las señoritas' Ante esto Harry se sonrojó completamente.
'Eso es por que soy famoso. Aún no he terminado de abrir todas las cartas que me llegaron para mi cumpleaños. Y encima hay varias chicas que me mandan todos los días bajo nombres como "Tu enamorada" "tu admiradora" "la que te ama". Y lo peor de todo es que no conozco ni a la mitad de las chicas que ponen sus nombres' Le respondió Harry muy desanimado.
'Estas en lo cierto, pero también estás equivocado. 'Le contestó Dumbledore
'¿Qué quiere decir?' Le preguntó Harry sin comprender
'Que es cierto que muchas personas que te quieren solo porque eres famoso. Pero también hay muchas personas que te quieren por lo que eres' Le explicó Dumbledore, y le iba a seguir diciendo algo pero se cayó porque entraron en el comedor Persefone, Hermione, Roxana y Melinda.
'Que lindas se ven' Les dijo Harry a las chicas. Estas se sonrojaron. Dumbledore rió y pensó "Lo volvió a hacer, y sin darse cuenta"
'Nos vamos' Dijo Dumbledore levantándose de la silla.
'¿En que iremos?'
'Iremos en un auto del ministerio hasta la estación King's Cross y ahí tomaremos el Expreso Hogwarts' Les explicó Dumbledore a los cinco jóvenes
'De acuerdo' Contestaron los cinco al mismo tiempo. Se levantaron, salieron de la casa, el profesor Dumbledore la hechizó para que ningún muggle pudiera entrar y se subieron al auto negro que les había prestado el ministerio de la magia. El profesor Dumbledore se sentó adelante, al lado del chofer y Harry, Hermione, Persefone, Roxana y Melinda en el asiento de atrás, aunque un poco apretados. El viaje hasta la estación King's Cross resultó excesivamente corto, Harry no sabía si era porque se había entretenido hablando con el profesor Dumbledore y las muchachas o por el simple hecho de que el auto iba a una velocidad que superaba los 300km/h y que cada vez que parecía que iba a chocar con algo, esto se movía dejando el camino libre. A Harry le recordó mucho a su viaje en el autobús noctámbulo en el tercer curso y especialmente a Sirius.
Cuando bajaron del coche el profesor Dumbledore le agradeció al chofer por haberlos llevado y luego se encaminaron hacia las plataformas 9 y 10. La atravesaron, y se encontraron con el expreso Hogwarts, pero, para sorpresa de Harry y Hermione, y desilusión por parte de Persefone, Roxana y Melinda, este solo contenía un único vagón. Cuando se metieron en uno de los cuatro compartimientos que había, Harry dijo:
'Profesor, ¿Podemos ir a jugar quidditch?'
'Claro Harry' Le contestó Dumbledore. Este había sacado la varita y estaba por agrandar el cuadro cuando Dumbledore habló de nuevo: 'Pero antes de irte me harías un gran favor si también puedes agrandar el cuadro de Tom, quisiera hablar con el cara a cara sin correr ningún peligro.
'De acuerdo' Dijo Harry. Metió la mano en su bolsillo, y sacó todas sus cosas del tamaño de unas pequeños caramelos muggles. Los acercó a todos a sus ojos para examinarlos mejor, agarró dos y guardó todos los otros de nuevo en el bolsillo de su túnica. Luego realizó el hechizo aumentador dos veces y su cuadro y el de Riddle aparecieron.
'Profesor Dumbledore' Exclamaron el Harry del cuadro y Riddle.
'Un gusto verlos de nuevo Tom, Harry' Les respondió el saludo Dumbledore. 'Harry, deja pasar a estos chicos que necesito hablar contigo y Tom a solas' agregó.
'De acuerdo' Contestó el Harry del cuadro haciéndose a un lado para dejarlos pasar.
'Recuerden que al no tener tantos vagones el tren va mucho más rápido. Dentro de 2 horas más o menos estaremos llegando a Hogwarts' Les dijo Dumbledore. Todos asintieron y entraron por el cuadro, esta vez, no bajaron por unas escaleras, sino directamente por el corredor que daba al gimnasio. Siguieron de largo y fueron directamente al armario de las escobas del campo de Quidditch. Se cambiaron, esta vez todos llevaban puestas las túnicas del equipo de quidditch de Gryffindor. Hermione, como en todas las ocasiones que habían ido, se puso la túnica de Harry.
'¿Por qué usas siempre la de Harry?' Le preguntó Melinda cuando la notó otra vez con esa túnica.
'No se, siento algo raro cuando me la pongo' Le contestó Hermione
'Pues traspiración o suciedad no es. Las lavamos todos los días' Comentó Harry riendo y haciendo reír a las muchachas. Cosa que hizo que las palabras que Dumbledore le dijo en su casa le volvieran a la mente "Sin darte cuenta Harry, puedes levantarle el ánimo a las personas sin hacer nada especial. Estoy seguro de que eso lo heredaste de James, el también era así. Al igual que esa capacidad para llamar la atención de las señoritas" Se sonrojó levemente preguntándose si sería verdad lo que le había dicho Dumbledore, pero rápidamente salió de sus pensamientos cuando alguien lo sacudió.
'¿Qué ocurrió Harry?' Le preguntó Melinda, quien era la que lo había sacudido.
'Nada, solo me quede pensando en lo que me dijo Dumbledore' Contestó Harry. Hermione iba a preguntarle que era lo que le había dicho y este agregó rápidamente: 'Es algo sin importancia. Ahora vayamos a divertirnos al estadio' Todos tomaron una Saeta de Fuego cada uno, incluso Hermione, la que se encontraba muy nerviosa por esto.
'No te preocupes, lo harás bien' Le dijo Persefone palmeándole la espalda y despegando del suelo en dirección a los postes seguida por Melinda y Roxana.
'Tan solo vuela como lo has hecho siempre. No importa la escoba que vueles, si sabes volar, vuelas en cualquier cosa' Le dijo Harry al oído y luego el también despegó. Tras oír las palabras de Harry, Hermione se llenó valor de repente, pateó el suelo, y despegó. Notaba la gran diferencia que había entre las Nimbus 2002, que era el último modelo con el que había montado, y la Saeta de Fuego, pero se acostumbró rápidamente y pudo disfrutar a pleno ese día. Ellos volaron, al igual que el tiempo, y pronto se encontraban parados delante de las puertas de Hogwarts.
'Al fin en Hogwarts' Exclamó Harry
