Capitulo 22 Energía, Energía, y más Energía
Corrieron lo más rápido que pudieron, y cuando llegaron vieron como tres dementores se acercaban cada vez más y más a Hermione, Persefone, Roxana, Melinda y Ron, quienes estaban agazapados contra un árbol, incapaces de moverse.
'Expecto Patronum!' Gritaron Harry y Draco dirigiendo su varita hacia los dementores. De la varita de Harry salió un ciervo plateado, mientras que de la de Draco salió un halcón. Ambos, envistieron contra los dementores y los hicieron retroceder varios metros.
'¿Están bien?' Preguntó Draco acercándose al grupo y ayudándolos a levantar a todos, menos a Ron, quien rechazó su ayuda. Sin embargo, Harry no se les acercó, por el contrario, se alejo internándose más en el bosque.
'¿Y Harry?' Preguntó Hermione preocupada al ver que el no se encontraba allí.
'Haciéndose el héroe.' Respondió Draco sin dejar de mirar a Persefone. 'Se puede saber porque no se defendieron de los dementores.'
'No....no....' Titubeó Roxana pero calló al ver volver a Harry.
'Salgan de aquí cuanto antes. Tu también Draco, acompáñalos hasta el castillo y luego vayan en buscad de Dumbledore.' Dijo este con una mirada muy seria.
'¿Qué ocurre? Yo quiero ayudar, ya no soy un niño indefenso.' Protestó Ron al instante.
'Cállate y vete con los demás, no voy a permitir que ninguno muera.' Le dijo Harry intentando no gritar.
'¿Pero que...' Comenzó Melinda acercándose a Harry.
'Vamos. Dejemos a Potter aquí, si nos quedamos solo estorbaríamos.' Le dijo Draco cogiéndola del brazo y comenzando a arrastrarla hasta donde se encontraban los demás para luego irse con todos.
'Yo no me voy a ir dejando a Harry aquí solo.' Protestó Hermione separándose de Draco.
'Vete, Hermione, vete.' Le gritó Harry haciendo que esta se paralizara y comenzara a correr hacia el castillo al igual que los demás.
'Siempre haciéndote el héroe Potter, lastima que ya sea tarde para salvarlos.' Dijo alguien apareciendo a unos metros de Harry.
'Lestrange' Murmuró Harry mientras la ira comenzaba a llenar su cuerpo.
'Veo que me reconoces. ¿Cómo ha estado tu padrino? Ah, lo olvide, esta muerto.' Dijo Bellatrix y tras esto comenzó a reírse.
'Ellos no tienen nada que ver, déjalos ir, esto es entre tu y yo.' Le dijo Harry mientras levantaba su varita listo para atacar.
'De acuerdo.' Contestó Bellatrix sin dejar de sonreír. 'Vallan detrás de ellos.' Ordenó. De la nada aparecieron tres Mortífagos más que se dirigieron hacia donde se encontraban los demás.
'Corran' Les gritó Harry. Pero ya era tarde, los Mortífagos estaban delante de ellos impidiéndoles el paso y apuntándoles con sus varitas directamente a la cara.
'Sigues siendo tan cobarde como de costumbre al igual que tu señor. ¿Por qué no ha venido el? Por lo que se, piensa que es muy arriesgado que el entre a Hogwarts, supongo que le tiene miedo a Dumbledore, o acaso me tiene miedo a mi.' Dijo Harry y empezó a reír. Este hecho sorprendió a su adversaria, ya que nunca se habría esperado que estuviera tan confiado.
'Cállate Potter, no digas estupideces. Como mi señor va a temerte a ti o al amante de los muggles ese.' Le gritó Bellatrix enojada, se notaba que estaba perdiendo el control.
'Pues no se, ¿Por una profecía tal vez?' Respondió Harry sonriendo más que antes. Bellatrix palideció. '¿Miedo?' Agregó tras ver la expresión de esta. Y al instante levantó su varita y conjuró una gran ave de fuego, que se dirigió hacia Bellatrix y le dio de lleno en el pecho haciéndola retorcer varios metros.
'¿Aun no saben lo que decía la profecía verdad?' Preguntó Harry mostrando una sonrisa que no era la suya mientras se acercaba a Bellatrix, quien intentaba ponerse en pie sin mucho éxito.
'Cállate Potter o seguirás los pasos de mi primo.' Le contestó Bellatrix levantándose rápidamente y lanzando una poderosa maldición a Harry, tomándolo por sorpresa, por lo que no pudo esquivarla. Sin embargo, se levanto del suelo como si nada le hubiera pasado ante los ojos de los Mortífagos.
'Pues yo te la diré, para que se la puedas decir a Voldemort.' Agrego levantando su varita y proyectando unas letras en el aire.
El señor oscuro marcará como un igual,
a un joven nacido de padres que lo burlaron 3 veces,
cuando el mes de julio este muriendo.
Pero el tendrá un poder que el señor oscuro no posee.
Uno debe morir a manos del otro,
pues ninguno puede vivir mientras el otro sobreviva.
'Ya ves Lestrange, si Voldemort no me hubiera ataco cuando era bebe, no habría sido despojado de su cuerpo y poderes, tu no hubieras ido a Azkaban, su reinado del terror hubiera seguido por siempre. Mira lo tonto que ha sido tu querido señor.' Comentó Harry riendo tras ver la mirada de Bellatrix y los demás Mortífagos luego de decirles la profecía.
'Así que mejor no pelees conmigo, después de todo, según la profecía, el único que podrá matarme es Voldemort.' Agrego sonriendo al mismo tiempo que levantaba la varita y lanzaba un rayo plateado hacia Bellatrix haciéndola volar por los aires.
Bellatrix se levanto al instante, pero se notaba que el ataque le había producido un gran dolor. Dirigió una mirada de odio a Harry y luego a los demás Mortífagos. Quienes parecieron comprender algo, y al instante, levantaron sus varitas y apuntaron hacia sus amigos mientras gritaban un maleficio que Harry no alcanzo a oír debido a los gritos de terror de sus amigas. Cuando los maleficios impactaron contra sus cuerpos, sus gritos aumentaron considerablemente, tanto, que hicieron que Harry cayera al suelo debido a los remordimientos que se producían en su interior, ya que, después de todo, el único motivo por el cual las estuvieran atacando, era porque eran personas cercanas a e él.
'¡¡¡DETENTE!!!!' Grito por encima de los gritos de sus amigas al mismo tiempo que se elevaba en el aire envuelto en una especie de fuego negro. Los Mortífagos, al notarlo pararon al instante de torturarlas, a la vez que miraban con terror como los antes brillantes ojos de Harry se volvían de un verde opaco, casi negro, mientras que de su rostro se borraba toda expresión de felicidad que antes había existido, dejando paso a un rostro muy pálido, en el que se dibujaba una extraña sonrisa de demencia.
'¡¡¡Bellatrix!!!' Gritó Harry. 'Pagaras muy caro esto y lo que hiciste hace unos meses' Agrego levantando la varita y murmurando un hechizo incomprensible.
En ese mismo momento, Hermione se levanto del suelo a duras penas, pero alcanzando a ver el estado en el que se encontraba Harry y comenzando a sollozar. No había duda, Harry se había transformado completamente.
'¡¡¡Harry!!! No lo hagas' Gritó reuniendo toda la fuerza que le quedaba, pero ya era tarde, Harry ya había lanzado el hechizo. De la nada, apareció una gigantesca esfera de energía que impactó en el suelo desatando el caos.
Semejante explosión se escucho en Hogwarts, haciendo que todo el mundo quedara totalmente paralizado y muy preocupado por lo que había ocurrido o por lo que ocurriría.
'Prefectos, Premios Anuales, quedan a cargo de los estudiantes. Profesores, acompáñenme a averiguar que fue eso.' Rugió Dumbledore ante la anonadada multitud. Todos los alumnos obedecieron sin quejarse ni nada observando como los profesores salían del Gran Salón con las varitas en alto.
'Vino del bosque prohibido. Vamos a separarnos para buscar más rápido. Si encuentran la causa de la explosión llamen a los demás.' Dijo el director mientras corrían por los terrenos de Hogwarts y se introducían en el bosque prohibido tomando caminos separados.
'¡¡Aquí!!' Gritó la profesora McGonagall al encontrar la causa de la explosión. Los demás profesores se le acercaron inmediatamente, y, al igual que ella, quedaron totalmente perplejos ante la situación que veían.
Parecía que algo había arrasado con todo lo que se había topado en su camino. En el medio del bosque prohibido, donde generalmente no se podía ver nada debido a la gran cantidad de arboles que se encontraban allí, se hallaba el claro mas horrible que hubiesen visto jamás. Toda el suelo, los arboles, los animales que se encontraban ahí antes, habían sido desaparecido completamente. Todo lo verde de antes ya no existía, solo había una especie de cráter en el medio del bosque. En la parte mas profunda del cráter, pudieron notar algo, había algo que sobresalía de el fondo. Se acercaron rápidamente, y pudieron notar, aliviados, que se trataban de cinco cuerpos. Los cuerpos de sus alumnos, Ron Weasley, Draco Malfoy, Hermione Granger, y las tres sobrinas de Dumbledore, Persefone, Melinda y Roxana. Todos con graves heridas en el cuerpo y con la túnica casi completamente destruida, pero vivos.
Dumbledore se acercó a Hermione, y murmuró un hechizo. Al instante ella miró a su alrededor una y otra vez, como si estuviera buscando algo o a alguien mientras era observada con preocupación por sus profesores.
'¿Dónde está Harry?' Preguntó de repente. Al notar que no entendían a lo que se refería agregó. 'Aparecieron Dementores, Harry y Draco los vencieron, luego Mortífagos, que nos atacaron a nosotros. Nos desmayamos a causa del dolor. Cuando pude levantarme solo pude ver a Harry transformado completamente haciendo aparecer una gigantesca bola de energía que hizo desintegrar totalmente a los Mortífagos. Y ahí volví a desmayarme.'
Los profesores la miraron completamente sorprendidos, habían entrado Dementores y Mortífagos a Hogwarts sin que nadie lo notara. Todos se quedaron intentando poder comprender lo que había sucedido, generando así, un horrible silencio.
'Aparentemente, el también se desintegró junto con los Mortífagos y este pedazo de bosque.' Dijo Dumbledore diciendo lo que todos pensaban pero que nadie podía o no quería creer.
Corrieron lo más rápido que pudieron, y cuando llegaron vieron como tres dementores se acercaban cada vez más y más a Hermione, Persefone, Roxana, Melinda y Ron, quienes estaban agazapados contra un árbol, incapaces de moverse.
'Expecto Patronum!' Gritaron Harry y Draco dirigiendo su varita hacia los dementores. De la varita de Harry salió un ciervo plateado, mientras que de la de Draco salió un halcón. Ambos, envistieron contra los dementores y los hicieron retroceder varios metros.
'¿Están bien?' Preguntó Draco acercándose al grupo y ayudándolos a levantar a todos, menos a Ron, quien rechazó su ayuda. Sin embargo, Harry no se les acercó, por el contrario, se alejo internándose más en el bosque.
'¿Y Harry?' Preguntó Hermione preocupada al ver que el no se encontraba allí.
'Haciéndose el héroe.' Respondió Draco sin dejar de mirar a Persefone. 'Se puede saber porque no se defendieron de los dementores.'
'No....no....' Titubeó Roxana pero calló al ver volver a Harry.
'Salgan de aquí cuanto antes. Tu también Draco, acompáñalos hasta el castillo y luego vayan en buscad de Dumbledore.' Dijo este con una mirada muy seria.
'¿Qué ocurre? Yo quiero ayudar, ya no soy un niño indefenso.' Protestó Ron al instante.
'Cállate y vete con los demás, no voy a permitir que ninguno muera.' Le dijo Harry intentando no gritar.
'¿Pero que...' Comenzó Melinda acercándose a Harry.
'Vamos. Dejemos a Potter aquí, si nos quedamos solo estorbaríamos.' Le dijo Draco cogiéndola del brazo y comenzando a arrastrarla hasta donde se encontraban los demás para luego irse con todos.
'Yo no me voy a ir dejando a Harry aquí solo.' Protestó Hermione separándose de Draco.
'Vete, Hermione, vete.' Le gritó Harry haciendo que esta se paralizara y comenzara a correr hacia el castillo al igual que los demás.
'Siempre haciéndote el héroe Potter, lastima que ya sea tarde para salvarlos.' Dijo alguien apareciendo a unos metros de Harry.
'Lestrange' Murmuró Harry mientras la ira comenzaba a llenar su cuerpo.
'Veo que me reconoces. ¿Cómo ha estado tu padrino? Ah, lo olvide, esta muerto.' Dijo Bellatrix y tras esto comenzó a reírse.
'Ellos no tienen nada que ver, déjalos ir, esto es entre tu y yo.' Le dijo Harry mientras levantaba su varita listo para atacar.
'De acuerdo.' Contestó Bellatrix sin dejar de sonreír. 'Vallan detrás de ellos.' Ordenó. De la nada aparecieron tres Mortífagos más que se dirigieron hacia donde se encontraban los demás.
'Corran' Les gritó Harry. Pero ya era tarde, los Mortífagos estaban delante de ellos impidiéndoles el paso y apuntándoles con sus varitas directamente a la cara.
'Sigues siendo tan cobarde como de costumbre al igual que tu señor. ¿Por qué no ha venido el? Por lo que se, piensa que es muy arriesgado que el entre a Hogwarts, supongo que le tiene miedo a Dumbledore, o acaso me tiene miedo a mi.' Dijo Harry y empezó a reír. Este hecho sorprendió a su adversaria, ya que nunca se habría esperado que estuviera tan confiado.
'Cállate Potter, no digas estupideces. Como mi señor va a temerte a ti o al amante de los muggles ese.' Le gritó Bellatrix enojada, se notaba que estaba perdiendo el control.
'Pues no se, ¿Por una profecía tal vez?' Respondió Harry sonriendo más que antes. Bellatrix palideció. '¿Miedo?' Agregó tras ver la expresión de esta. Y al instante levantó su varita y conjuró una gran ave de fuego, que se dirigió hacia Bellatrix y le dio de lleno en el pecho haciéndola retorcer varios metros.
'¿Aun no saben lo que decía la profecía verdad?' Preguntó Harry mostrando una sonrisa que no era la suya mientras se acercaba a Bellatrix, quien intentaba ponerse en pie sin mucho éxito.
'Cállate Potter o seguirás los pasos de mi primo.' Le contestó Bellatrix levantándose rápidamente y lanzando una poderosa maldición a Harry, tomándolo por sorpresa, por lo que no pudo esquivarla. Sin embargo, se levanto del suelo como si nada le hubiera pasado ante los ojos de los Mortífagos.
'Pues yo te la diré, para que se la puedas decir a Voldemort.' Agrego levantando su varita y proyectando unas letras en el aire.
El señor oscuro marcará como un igual,
a un joven nacido de padres que lo burlaron 3 veces,
cuando el mes de julio este muriendo.
Pero el tendrá un poder que el señor oscuro no posee.
Uno debe morir a manos del otro,
pues ninguno puede vivir mientras el otro sobreviva.
'Ya ves Lestrange, si Voldemort no me hubiera ataco cuando era bebe, no habría sido despojado de su cuerpo y poderes, tu no hubieras ido a Azkaban, su reinado del terror hubiera seguido por siempre. Mira lo tonto que ha sido tu querido señor.' Comentó Harry riendo tras ver la mirada de Bellatrix y los demás Mortífagos luego de decirles la profecía.
'Así que mejor no pelees conmigo, después de todo, según la profecía, el único que podrá matarme es Voldemort.' Agrego sonriendo al mismo tiempo que levantaba la varita y lanzaba un rayo plateado hacia Bellatrix haciéndola volar por los aires.
Bellatrix se levanto al instante, pero se notaba que el ataque le había producido un gran dolor. Dirigió una mirada de odio a Harry y luego a los demás Mortífagos. Quienes parecieron comprender algo, y al instante, levantaron sus varitas y apuntaron hacia sus amigos mientras gritaban un maleficio que Harry no alcanzo a oír debido a los gritos de terror de sus amigas. Cuando los maleficios impactaron contra sus cuerpos, sus gritos aumentaron considerablemente, tanto, que hicieron que Harry cayera al suelo debido a los remordimientos que se producían en su interior, ya que, después de todo, el único motivo por el cual las estuvieran atacando, era porque eran personas cercanas a e él.
'¡¡¡DETENTE!!!!' Grito por encima de los gritos de sus amigas al mismo tiempo que se elevaba en el aire envuelto en una especie de fuego negro. Los Mortífagos, al notarlo pararon al instante de torturarlas, a la vez que miraban con terror como los antes brillantes ojos de Harry se volvían de un verde opaco, casi negro, mientras que de su rostro se borraba toda expresión de felicidad que antes había existido, dejando paso a un rostro muy pálido, en el que se dibujaba una extraña sonrisa de demencia.
'¡¡¡Bellatrix!!!' Gritó Harry. 'Pagaras muy caro esto y lo que hiciste hace unos meses' Agrego levantando la varita y murmurando un hechizo incomprensible.
En ese mismo momento, Hermione se levanto del suelo a duras penas, pero alcanzando a ver el estado en el que se encontraba Harry y comenzando a sollozar. No había duda, Harry se había transformado completamente.
'¡¡¡Harry!!! No lo hagas' Gritó reuniendo toda la fuerza que le quedaba, pero ya era tarde, Harry ya había lanzado el hechizo. De la nada, apareció una gigantesca esfera de energía que impactó en el suelo desatando el caos.
Semejante explosión se escucho en Hogwarts, haciendo que todo el mundo quedara totalmente paralizado y muy preocupado por lo que había ocurrido o por lo que ocurriría.
'Prefectos, Premios Anuales, quedan a cargo de los estudiantes. Profesores, acompáñenme a averiguar que fue eso.' Rugió Dumbledore ante la anonadada multitud. Todos los alumnos obedecieron sin quejarse ni nada observando como los profesores salían del Gran Salón con las varitas en alto.
'Vino del bosque prohibido. Vamos a separarnos para buscar más rápido. Si encuentran la causa de la explosión llamen a los demás.' Dijo el director mientras corrían por los terrenos de Hogwarts y se introducían en el bosque prohibido tomando caminos separados.
'¡¡Aquí!!' Gritó la profesora McGonagall al encontrar la causa de la explosión. Los demás profesores se le acercaron inmediatamente, y, al igual que ella, quedaron totalmente perplejos ante la situación que veían.
Parecía que algo había arrasado con todo lo que se había topado en su camino. En el medio del bosque prohibido, donde generalmente no se podía ver nada debido a la gran cantidad de arboles que se encontraban allí, se hallaba el claro mas horrible que hubiesen visto jamás. Toda el suelo, los arboles, los animales que se encontraban ahí antes, habían sido desaparecido completamente. Todo lo verde de antes ya no existía, solo había una especie de cráter en el medio del bosque. En la parte mas profunda del cráter, pudieron notar algo, había algo que sobresalía de el fondo. Se acercaron rápidamente, y pudieron notar, aliviados, que se trataban de cinco cuerpos. Los cuerpos de sus alumnos, Ron Weasley, Draco Malfoy, Hermione Granger, y las tres sobrinas de Dumbledore, Persefone, Melinda y Roxana. Todos con graves heridas en el cuerpo y con la túnica casi completamente destruida, pero vivos.
Dumbledore se acercó a Hermione, y murmuró un hechizo. Al instante ella miró a su alrededor una y otra vez, como si estuviera buscando algo o a alguien mientras era observada con preocupación por sus profesores.
'¿Dónde está Harry?' Preguntó de repente. Al notar que no entendían a lo que se refería agregó. 'Aparecieron Dementores, Harry y Draco los vencieron, luego Mortífagos, que nos atacaron a nosotros. Nos desmayamos a causa del dolor. Cuando pude levantarme solo pude ver a Harry transformado completamente haciendo aparecer una gigantesca bola de energía que hizo desintegrar totalmente a los Mortífagos. Y ahí volví a desmayarme.'
Los profesores la miraron completamente sorprendidos, habían entrado Dementores y Mortífagos a Hogwarts sin que nadie lo notara. Todos se quedaron intentando poder comprender lo que había sucedido, generando así, un horrible silencio.
'Aparentemente, el también se desintegró junto con los Mortífagos y este pedazo de bosque.' Dijo Dumbledore diciendo lo que todos pensaban pero que nadie podía o no quería creer.
