Lágrimas –Sombras –

*AMBER MIST

            Brock se asomó desde la puerta de la cocina esperando que su amiga le explicara algo de lo sucedido , pero la furiosa chica lo empujó a un lado para pasar sin molestarse en contestar sus preguntas. La vio tomar su mochila del suelo y colgarla en su hombro determinada a marcharse…

-Misty ¿Qué haces? –

-Me voy de aquí –

-¿Porqué? –

Trató de no dirigir su ira al amigo equivocado, algo de conciencia dentro de sus furiosos actos le recordaba que Brock no tenía absolutamente nada que ver con lo que Ash  hizo.

-Ash quiere estar solo. Ya entendí eso. – Remarcó señalando la marca que Desaparecía en su brazo.

-No puedes irte ahora. Tendrás que esperar. –

-¿Porqué no? –

            Calmado caminó hacia la ventana y corriendo la cortina le dejó ver la tormenta que se había formado…

-Oh… - Dejó caer la mochila en el suelo y se sentó en el sillón cruzando sus piernas y tomando su adolorida cabeza. Él se sentó en frente de ella mirándola con una seria expresión…

-Ahora que no estás por irte, puedes contarme que sucedió… -

***

            Después de caminar si rumbo toda la tarde bajo la lluvia, Ash regresó a la pequeña casa. Tenía un nudo en la garganta y estómago con solo pensar en las consecuencias de su hostil impulso con Misty. Su larga caminata no le sirvió –como él esperaba – para pensar en algo que decir para justificarse, por lo tanto su único plan fue aceptar todo lo que ella tenga para decir y así esperar que se le pase…

-Después de todo no fue para tanto… -

            Al abrir la puerta notó que todas las luces estaban apagadas, excepto la de la cocina. Buscó encender la luz , pero antes que su mano llegara la gruesa voz de Brock resonó en la habitación…

-Ya era hora, Ash… -

-¿Por qué estás a oscuras? –

-Para ambientar. –

            Encontró la figura de su amigo en uno de los sillones. Su idea de ambientación se completaba con el tono seco con el que hablaba, la cual indicó que no sería  Misty la única que le reprocharía algo.

-¿Tiene que ser tan sombría tu ambientación? –

-Sí. Las cosas que han pasado en esta casa la merecen. –

            Omitiendo el tema, Ash se miró sus piernas y brazos viendo como las gotas de lluvia caían en el suelo de madera, decidió cambiarse y secarse antes de arruinar más el piso…

-Siéntate. – Le ordenó el criador cuando pasaba junto a uno de los sillones de un cuerpo.

-Debo cambiarme –

-No me importa. Te sientas ahora. – Ash lo miró ofendido, pero su expresión fue cubierta por la oscuridad. Brock se había puesto de pie y entre las sombras se veía su figura señalar el sillón cerca de Ash.

-Si me siento allí, lo mojaré. – El criador no respondió ni se movió de donde estaba y su joven amigo accedió a su autoridad refunfuñando por lo bajo. Brock volvió a su lugar al verlo sentarse adivinando la oposición que chico mostraría a responder o escuchar.

-No voy a darte sermones sobre tus actitudes. Creo que tú puedes saber que está bien y que no. Aún así quiero que tengas en cuenta las consecuencias. –

-Ya lo sé, Brock. Estuve toda la tarde pensándolas. –

-No creo que hayas pensado en Esta decisión que Misty tomó. –

-La conozco lo suficiente: me gritará o golpeará o ambas cosas, sea cual sea la merezco y… -

-Es posible que haga todas esas cosas, pero sin saberlo ella escogió el peor castigo. –

-Estoy seguro que no va a sorprenderme. – Brock adivinó la postura desafiante de la sombra en frente suyo, al ser perceptible la figura cruzarse de brazos.

-¿Porqué crees que eres el único que sufre aquí? –

-Porque así es. Ustedes no hacen más que atosigarme. –

            Brock lo escuchaba reprobando sus palabras y re-evaluando la ayuda que le brindaba a su joven amigo, el cual parecía no apreciar los intentos…

-No tendrás que preocuparte más por eso. Misty decidió dejarte solo, ya que eso es lo que querías. – Sonrió el criador notando en el silencio la sorpresa del entrenador.

-¿Qué significa eso? –

-Que se va. –

-¿QUÉ? Y TÚ ME TIENES SENTADO MIENTRAS ELLA… -Gritó levantándose de un salto.

-… Duerme en la habitación. –

-Pero si me dijiste… -

-La lluvia no la hubiera dejado ir lejos, ni tampoco el dolor de cabeza. –

            Aliviado volvió a sentarse, sosteniéndose la cabeza con ambas manos y bajándola hasta sus rodillas. Brock se levantó de su lugar y se acercó al chico sonriéndole con simpatía. Entre las sombras de la habitación distinguió a su amigo aproximarse y levantó su cabeza…

-¿Crees que querrá escucharme? –

-Nunca la ví así, Ash… -

-¿Estaba muy enojada? –

-Sí, pero…. No era el único problema. Ella parecía asustada. –

-¿De mí? –

-Me dijo que sospechaba que de alguna manera tú la culpabas de lo que pasó. –

-Y tiene razón… -

***

            Despertó al oír voces del otro lado de la puerta. El dolor de cabeza había desaparecido, pero el haber sido despertada de su merecido descanso la puso de un irritable humor. Encendió la luz para buscar el resto de sus cosas, las cuales había olvidado en su apuro por marcharse. Al terminar de recogerlas, estaba lista para irse, pero algo llamó su atención en el escritorio. La pequeña caja negra en el centro del mueble parecía llamarla desde allí y guiándose por la curiosidad la tomó adivinando que contenía. Sus ojos brillaban ilusionada al pensar que había adentro mientras la abría lentamente aumentando su propia ansia…

-Esto debe ser de Ash… - La cerró sin saber que tenía y la dejó en donde la encontró –Tengo suficientes problemas para sumar uno más… -

***

-… Entonces le  daría la caja y después ella me abrazaría dándome las gracias por el regalo. Me diría que no tenía que molestarme, y claro, yo le respondería que no fue molestia, que debía hacerlo porque la amo… -

-¿Y no puedes hacer eso sin haber ganado la competencia? –

            La mirada de ilusión que Ash mantenía durante su relato cambió al terminar de escuchar la pregunta, miró a su amigo indignado como si la referencia fuera una locura…

-Claro que No! –

-¿Porqué no? La respuesta sería la misma. –

-Ya lo sé, pero es distinto. –

-¿Tu crees que por ser ganador Misty te querría más? –

-Ella no es así. Yo solo quería… no sé… darle lo mejor, supongo, y… ¿Qué puede ofrecer un perdedor, un fracasado? –

-Tú no eres un fracasado, Ash. la desventaja en el último combate fue… -

-No importa el contexto, el hecho es el mismo. –

-La terquedad no te llevará a ningún lado. Tienes mucho que ofrecer sin la necesidad de haber ganado. – Ash parecía estar sordo, o simplemente no le importaba lo que su compañero decía. Con la mirada ausente y la voz distante respondió en tono monótono…

-Hasta hoy mi decisión había sido abandonar todo. Escapar y olvidarme de sueños imposibles, pero voy a intentarlo otra vez. – Con determinación se levantó de su lugar y una sonrisa cruzó su rostro –La próxima la ganaré y pensaré en algo mucho mejor para Misty. Por fin seremos todos felices. –

-Así se habla, Ash. Pero… ¿Esperarás tanto? –

-Llevo esperando más de 7 años ¿Qué daño puede hacer uno más? –

-No puedes saberlo –

-Será mucho mejor, después de todo no puedo dejar de quererla- Ya lo he intentado… -

            Entre la oscuridad la luz de la habitación acabó con la ambientación de Brock cuando Misty abrió la puerta. No se molestó en mirar a Ash, solo caminó hasta su mochila en donde guardó sus cosas. Brock sintió el enfado de la chica al verla salir e instintivamente miró a su compañero, quien parecía estar todavía en su mundo de fantasía sonriendo como si se hubieran vuelto realidad…

-Misty tengo que hablar contigo. –

            Levantó la mochila y se acercó al entrenador reprochándole  por dentro que creyera que se hablarían cuando él quisiera. Lo miró con rabia aumentándola por la sonrisa de Ash, quien no se esperaba la fuerte Bofetada que recibió. Sorprendido y sosteniéndose la mejilla golpeada miró a Misty…

-Te la debía. – Pasó junto a él y se detuvo antes de abrir la puerta –Adiós, brock. Saluda a Pikachu de mi parte. –

            Y se marchó. Ash levantó la mirada al criador esperando que hiciera algo para detenerla, pero él solo se encogió de hombros viéndose tan sorprendido como el entrenador…

Continuará.

AM