Contestando Reviews:
Diore: Muchas gracias por tus comentarios. *___* Estoy motivada¡ jajaja, claro que es Sly, a decir verdad, no soy fan de las parejas Sly/Gry. Creo que no quedan. Sigue leyendo y ojala que te guste cada vez más. Gracias¡
Luly: La verdad, jajaja, yo también amo a Draco¡ Y yo tampoco quiero que se muera pero.. gracias por tus comentarios¡ Y si, es de Sly.
Cuaron: Algún día aprenderé ese lenguaje y te agradeceré¡
La_Peye_Malfoy: Gracias¡ Que bueno que te guste mi manera de escribir. Trato de ponerle sentimiento a todo lo que hago¡ Y creo que lo consigo¡ Gracias¡ Claro que lo seguiré¡
Loquita x Malfoy: Gracias por decir que escribo profundo¡ Me encantas¡ jajajaja, no¡ no va a ser wera¡ jajaja. Más adelante la describiré mejor, gracias por tus comentarios¡
Mish1: Gracias¡ Lo de que si Draco mata a Lavander, averigualo tu misma, ñakañakañ¡ (.)_(.) jajaja, claro que sabran todititita la historia de la chica¡ Y gracias por leer mi fic¡ Oye¡ a proposito¡ Leí tu fan fic el de Descubriendo¡ está genial¡ Y visite tu pagina¡ La adoro¡ Todos metanse a
=)
Ahora, a leer =)
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Capítulo 3: Iniciando la operación
Caminé de un lado a otro durante casi una hora. Luego me decidí. Tendré que hacerlo. No tengo opción. Estoy entre la espada y la pared. Entre Voldemort y el ser buena persona. Tal vez no buena persona, pero matar a alguien ya es caer muy, pero muy bajo. Digo, el mayor daño que he hecho creo que es golpear a Potter y a Weasley, y a unos cuantos idiotas más, pero, esto.
- Draco, el desayuno ya va a comenzar - dijo una voz familiar desde la puerta de mi cuarto.
- Kin, te he dicho miles de veces que no entres a mi cuarto sin tocar - dije algo enojado.
-No es para tanto, y apúrate, que después tenemos Pociones.
- Si, si Pansy, ya voy.
Parkinson cerró la puerta de mi cuarto. Tomé mi libro de Pociones, mi pluma de águila, y la tinta, y salí de mi habitación. Bajé las escaleras del dormitorio y al salir alguien iba entrando y sin querer la derribe.
- Fíjate por dond..
-Hay ya, deja de hacerte el malo y recoge mis libros, no estoy de tan buen humor.
-¿Y eso?
-¡Parkinson!, ya no la soporto.
-¿No que era una santa y que no se qué?
-Si, si lo que sea.
-Cálmate Kath.
-Ya estoy bien, da igual.
-Toma - le dije a Katherine, entregándole los libros que había tirado.
-Gracias - me dijo ella, con sus hermosos ojos verdes que me miraban desesperadamente.
-Tú tienes algo más..
-Ya sabes lo que pasa Draco.
-¿Sigues con eso? - le pregunté - ya deja ese tema en paz.
-¿Sabes qué? -me dijo Kath, apartando un mechón de su cabello rizado, y poniéndolo detrás de su oreja - Olvídalo ¿si?, se nota lo mucho que te importa.
-¿Qué quieres decir con eso? ¿Piensas que me encanta ser el maniquí de Voldemort? Daría lo que fuera por no estar en la situación en la que me encuentro, lo que fuera por no haber ido nunca a ese lugar, lo que fuera por no tener que matarla - dije eso casi sin pensar, no planeaba decirle a ella nada sobre mis planes, pero al final, lo revelé.
-¿Matarla?
-Nunca entenderás.
-¿Entender qué Draco? ¿Qué vas a convertirte en un vil asesino?
-Baja la voz.
Se podía ver una mezcla de sentimientos en sus ojos. Angustia, decepción, tristeza, enfado. Sólo se limitó a mirarme de la manera más fría, se volteó y se fue. Ni una palabra. Nada.
Tal vez esperaba que me regañara, o que me hiciera reflexionar. Algo. Pero realmente, ni siquiera se que espero de ella. Lo único que quiero es volver a oír su voz. Volver a oler su perfume.
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-¡Son 10 gramos de Lentecoras Sr. Weasley, no 11!
-Pero yo le puse die...
-La poción debe de quedar plateada Sr. Weasley..y creo que la de usted es morada, si no me equivoco..
-Profesor Snape, yo...
-Haga el favor de callarse por primera vez en su vida Srita. Granger - dijo el Profesor Snape, con su habitual desprecio hacia los Gryffindor.
Snape caminó hasta su escritorio, saco un pedazo de pergamino del primer cajón y leyó:
"Tarea, página 45 de su libro de Pociones, Ejercicios 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, y 10, para mañana"
Los Gryffindor salieron de la clase maldiciendo y diciendo cosas como "Maldito sea" "Estúpido Snape" y "¿Viste toda la tarea que dejó?, creo que hoy no podré entrenar".
Me dirigí hacia el Gran Comedor para comer. Entré, y me senté en una de las orillas de mi mesa. Allí estaba. Lavander Brown. La observé detenidamente, encontrando algo que me hiciera más fácil el conocerla, hablar con ella. La verdad, la sola idea de pensar en hablarle a una Gryffindor me es asquerosa, pero ¿Qué más puedo hacer?
Lavander estaba platicando con Parvati Patil, ¿mejores amigas? Eso me pareció a mi. Platicaban con otro chico. Mmm. Creo que se llama Dean Thomas, o Dan Thomas, o como sea. Me da igual. Platicaban alegremente. ¿Asqueroso? Así es.
Todo el resto del día y del día siguiente me la pasé todo mi tiempo libre encerrado en mi habitación. Pensando. Ideé muchos planes. Ninguno parecía lo suficientemente bueno como para que funcionara. Hasta que algo más simple se me ocurrió. Algo normal. Que no levantara sospechas. Una muerte extraña. A mi no me gusto la idea. Pero... Mi cerebro se había atrofiado, y ya no daba para ningún plan más. Este es el plan. No me echaré para atrás.
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-Lavander, nos vemos en la biblioteca, ¿verdad?
-Ahí te veo Parvati.
Vi como Lavander caminaba hacia las afueras del castillo. Se dirigía hacia la cabaña de Hagrid. Caminaba lentamente. Como si nada le importara. Quien fuera ella. En algún momento, mi corazón se atrevió a sentir lastima por ella. Por su último día de vida. Más bien, por su vida, hecha pedazos, tirada por la borda. Me reprimí a mi mismo, y seguí con mis ojos todo su camino, hasta que llegó a la cabaña y se sentó al lado de Shelter.
Espere hasta el final de la clase. Ella se quedó hasta el último ayudándole al gigante ese a meter a unos animaluchos en unas jaulas. Vi como Hagrid le agradeció y se dirigió hacia el castillo. Brown se disponía a hacer lo mismo. Mi única oportunidad. Aquí vamos. No hay segunda oportunidad, todo para perder, nada para ganar.
Caminé hacia ella con un pañuelo en la mano. Por detrás. Como un vil cobarde. Por la espalda. Caminé un poco más rápido. Me cercioré de que nadie anduviera por ahí y lentamente pase mis brazos por su cintura.
-¡Quítate Malfoy!
-Vamos Brown, se que no te molesta.
-¿Qué no me molesta?, No tienes derecho.- dijo ella y cuando iba a quitar con sus manos mis brazos quité uno de ellos, saqué el pañuelo de mi túnica y le tapé la nariz, parte de la boca. Ella se resistía mucho, pataleaba y me golpeaba. Otra vez ese sentimiento me invadió. Lástima, ¿o compasión? No puede ser. No puede ser que haya llegado hasta aquí. Primero Mortífago, y ahora. asesino.
Lavander se quedó medio dormida. La arrastre hasta las orillas del lago. La medio senté con los pies dentro del agua. Si alguien pasaba o se asomaba, sólo estaríamos platicando. Sentí como su respiración se hacía más fuerte. Tenía los ojos cerrados. Se veía tan.. débil, tan.. indefensa. Seguía sintiendo esto en mi interior. Remordimiento, culpa, no lo sé. Pero yo sabía que eso ya era mucho decir. Podría ser mortífago, pero eso no implicaba ser asesino a tan corta edad. Dieciséis años. Dieciséis años tirados a la basura. Dieciséis años de dudas, humillaciones, maltratos, obligaciones. Dieciséis malditos años de fingir. Pero claro esta, fingir en la forma en la que un Malfoy debe fingir. Fingir de una forma cínica, pretenciosa. Fingir de una forma fría, humillante. ¿Por qué no puedo simplemente ser Draco? ¿Por qué tengo que ser un Malfoy? Este destino gris, siempre me ha hecho preguntarme muchas y variadas cosas. Me preguntó por que hay gente que esta marcada desde antes de nacer. Me pregunto por que hay gente que tienen que pasar por muchas cosas a tan temprana edad, y todo por su marca interna. Me preguntó por que demostrar afecto y cariño no se hizo para gente como yo. Gente como yo. Por eso a veces me pongo a pensar y aunque pienso mucho tiempo, nunca encuentro respuestas. Respuestas que están tan cerca de mí. Pero que no puedo ver. Y que, más que nada, no he querido ver.
Tarde, estaba abriendo sus ojos. No podía ser, el efecto es como de tres horas. ¿Conté mal? No lo sé, pero tengo que evitar que grite. Ella abrió sus ojos y me miró. Sus ojos me recordaban a alguien, me miraban con desconfianza y miedo, mucho miedo. Nodijo nada, sólo susurró un ligero: "Por favor"
Por favor, una palabra tan alejada de mi vocabulario hiriente. Una palabra que nunca aprendí. Y que no pienso aprender ahora. 'Se fuerte Malfoy' me repetía incontables veces, 'se fuerte'
Plan B, todo ha cambiado. Despertó, y todo va marcha atrás. Plan B. ¿Por qué tenía que despertar?
Tomé a Brown de los brazos mientras ella se movía desesperadamente, quería gritar, abrió su boca pero un 'Silenciate' salió de mi varita y todo fue silencio. Silencio callado. Silencio infernal. Ella sólo me miraba con temor y lágrimas comenzaron a caer de sus ojos. Lágrimas que en cualquier otra circunstancia me hubiera encantado verlas. Ahora no. Las lágrimas sólo aumentan la culpa. Las lágrimas sólo lo empeoran todo. Las lágrimas son sólo señal de debilidad. Ahora o nunca. La tome por los brazos mientras ella pataleaba y movía su cabeza diciendo que no. Me metí con ella al lago. El frío llegaba más en esa parte. Frío. Ya estoy acostumbrado. Puse una mano en su cabeza y rápidamente la sumergí sin piedad. 'No es tiempo para dudar Draco, termina lo que empezaste' me dije a mi mismo. Sólo sentía su cuerpo temblando. Su cara parecía que iba a explotar, intentó contener la respiración pero su tiempo se terminó.
-Lo ves Brown, el tiempo de todos algún día terminara.
Ella luchaba por salir, me pateaba y movía sus manos de manera furiosa. Yo resistía. Al final, las patadas y manotazos fueron bajando de nivel. Lento, más lento. Terminó. Todo esta hecho. No hay vuelta de página. Nunca más. Observé como el cuerpo de Lavander se hundía lentamente, y flotaba otra vez, queriendo salir. Me salí rápido del lago, y me fui corriendo al castillo. Ya era tarde, me fui casi a escondidas para que nadie me viera mojado. Me hechice para no dejar rastro del agua que goteaba de mí. Llegue a Slytherin. Con más frío. Con mucho más odio. Lo raro era que sentía odio conmigo mismo. No con los demás, como era casi siempre. Ahora era conmigo. Coraje. Toda clase de sentimientos que usualmente eran dirigidos a los demás, ahora eran dirigidos hacia mí. Como caí tan bajo. Tal vez sólo me estoy hundiendo en mi propia oscuridad. Para toda la eternidad.
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Hola amiguis¡ jajaja, gracias por sus r/r, son geniales, seguire escribiendo, pero ahora me voy a una fiesta asi ke ai se ven¡ gracias por su apoyo¡
At: Lorena
Miembro de la Orden Siriusiana y Draconiana
Diore: Muchas gracias por tus comentarios. *___* Estoy motivada¡ jajaja, claro que es Sly, a decir verdad, no soy fan de las parejas Sly/Gry. Creo que no quedan. Sigue leyendo y ojala que te guste cada vez más. Gracias¡
Luly: La verdad, jajaja, yo también amo a Draco¡ Y yo tampoco quiero que se muera pero.. gracias por tus comentarios¡ Y si, es de Sly.
Cuaron: Algún día aprenderé ese lenguaje y te agradeceré¡
La_Peye_Malfoy: Gracias¡ Que bueno que te guste mi manera de escribir. Trato de ponerle sentimiento a todo lo que hago¡ Y creo que lo consigo¡ Gracias¡ Claro que lo seguiré¡
Loquita x Malfoy: Gracias por decir que escribo profundo¡ Me encantas¡ jajajaja, no¡ no va a ser wera¡ jajaja. Más adelante la describiré mejor, gracias por tus comentarios¡
Mish1: Gracias¡ Lo de que si Draco mata a Lavander, averigualo tu misma, ñakañakañ¡ (.)_(.) jajaja, claro que sabran todititita la historia de la chica¡ Y gracias por leer mi fic¡ Oye¡ a proposito¡ Leí tu fan fic el de Descubriendo¡ está genial¡ Y visite tu pagina¡ La adoro¡ Todos metanse a
=)
Ahora, a leer =)
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Capítulo 3: Iniciando la operación
Caminé de un lado a otro durante casi una hora. Luego me decidí. Tendré que hacerlo. No tengo opción. Estoy entre la espada y la pared. Entre Voldemort y el ser buena persona. Tal vez no buena persona, pero matar a alguien ya es caer muy, pero muy bajo. Digo, el mayor daño que he hecho creo que es golpear a Potter y a Weasley, y a unos cuantos idiotas más, pero, esto.
- Draco, el desayuno ya va a comenzar - dijo una voz familiar desde la puerta de mi cuarto.
- Kin, te he dicho miles de veces que no entres a mi cuarto sin tocar - dije algo enojado.
-No es para tanto, y apúrate, que después tenemos Pociones.
- Si, si Pansy, ya voy.
Parkinson cerró la puerta de mi cuarto. Tomé mi libro de Pociones, mi pluma de águila, y la tinta, y salí de mi habitación. Bajé las escaleras del dormitorio y al salir alguien iba entrando y sin querer la derribe.
- Fíjate por dond..
-Hay ya, deja de hacerte el malo y recoge mis libros, no estoy de tan buen humor.
-¿Y eso?
-¡Parkinson!, ya no la soporto.
-¿No que era una santa y que no se qué?
-Si, si lo que sea.
-Cálmate Kath.
-Ya estoy bien, da igual.
-Toma - le dije a Katherine, entregándole los libros que había tirado.
-Gracias - me dijo ella, con sus hermosos ojos verdes que me miraban desesperadamente.
-Tú tienes algo más..
-Ya sabes lo que pasa Draco.
-¿Sigues con eso? - le pregunté - ya deja ese tema en paz.
-¿Sabes qué? -me dijo Kath, apartando un mechón de su cabello rizado, y poniéndolo detrás de su oreja - Olvídalo ¿si?, se nota lo mucho que te importa.
-¿Qué quieres decir con eso? ¿Piensas que me encanta ser el maniquí de Voldemort? Daría lo que fuera por no estar en la situación en la que me encuentro, lo que fuera por no haber ido nunca a ese lugar, lo que fuera por no tener que matarla - dije eso casi sin pensar, no planeaba decirle a ella nada sobre mis planes, pero al final, lo revelé.
-¿Matarla?
-Nunca entenderás.
-¿Entender qué Draco? ¿Qué vas a convertirte en un vil asesino?
-Baja la voz.
Se podía ver una mezcla de sentimientos en sus ojos. Angustia, decepción, tristeza, enfado. Sólo se limitó a mirarme de la manera más fría, se volteó y se fue. Ni una palabra. Nada.
Tal vez esperaba que me regañara, o que me hiciera reflexionar. Algo. Pero realmente, ni siquiera se que espero de ella. Lo único que quiero es volver a oír su voz. Volver a oler su perfume.
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-¡Son 10 gramos de Lentecoras Sr. Weasley, no 11!
-Pero yo le puse die...
-La poción debe de quedar plateada Sr. Weasley..y creo que la de usted es morada, si no me equivoco..
-Profesor Snape, yo...
-Haga el favor de callarse por primera vez en su vida Srita. Granger - dijo el Profesor Snape, con su habitual desprecio hacia los Gryffindor.
Snape caminó hasta su escritorio, saco un pedazo de pergamino del primer cajón y leyó:
"Tarea, página 45 de su libro de Pociones, Ejercicios 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, y 10, para mañana"
Los Gryffindor salieron de la clase maldiciendo y diciendo cosas como "Maldito sea" "Estúpido Snape" y "¿Viste toda la tarea que dejó?, creo que hoy no podré entrenar".
Me dirigí hacia el Gran Comedor para comer. Entré, y me senté en una de las orillas de mi mesa. Allí estaba. Lavander Brown. La observé detenidamente, encontrando algo que me hiciera más fácil el conocerla, hablar con ella. La verdad, la sola idea de pensar en hablarle a una Gryffindor me es asquerosa, pero ¿Qué más puedo hacer?
Lavander estaba platicando con Parvati Patil, ¿mejores amigas? Eso me pareció a mi. Platicaban con otro chico. Mmm. Creo que se llama Dean Thomas, o Dan Thomas, o como sea. Me da igual. Platicaban alegremente. ¿Asqueroso? Así es.
Todo el resto del día y del día siguiente me la pasé todo mi tiempo libre encerrado en mi habitación. Pensando. Ideé muchos planes. Ninguno parecía lo suficientemente bueno como para que funcionara. Hasta que algo más simple se me ocurrió. Algo normal. Que no levantara sospechas. Una muerte extraña. A mi no me gusto la idea. Pero... Mi cerebro se había atrofiado, y ya no daba para ningún plan más. Este es el plan. No me echaré para atrás.
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-Lavander, nos vemos en la biblioteca, ¿verdad?
-Ahí te veo Parvati.
Vi como Lavander caminaba hacia las afueras del castillo. Se dirigía hacia la cabaña de Hagrid. Caminaba lentamente. Como si nada le importara. Quien fuera ella. En algún momento, mi corazón se atrevió a sentir lastima por ella. Por su último día de vida. Más bien, por su vida, hecha pedazos, tirada por la borda. Me reprimí a mi mismo, y seguí con mis ojos todo su camino, hasta que llegó a la cabaña y se sentó al lado de Shelter.
Espere hasta el final de la clase. Ella se quedó hasta el último ayudándole al gigante ese a meter a unos animaluchos en unas jaulas. Vi como Hagrid le agradeció y se dirigió hacia el castillo. Brown se disponía a hacer lo mismo. Mi única oportunidad. Aquí vamos. No hay segunda oportunidad, todo para perder, nada para ganar.
Caminé hacia ella con un pañuelo en la mano. Por detrás. Como un vil cobarde. Por la espalda. Caminé un poco más rápido. Me cercioré de que nadie anduviera por ahí y lentamente pase mis brazos por su cintura.
-¡Quítate Malfoy!
-Vamos Brown, se que no te molesta.
-¿Qué no me molesta?, No tienes derecho.- dijo ella y cuando iba a quitar con sus manos mis brazos quité uno de ellos, saqué el pañuelo de mi túnica y le tapé la nariz, parte de la boca. Ella se resistía mucho, pataleaba y me golpeaba. Otra vez ese sentimiento me invadió. Lástima, ¿o compasión? No puede ser. No puede ser que haya llegado hasta aquí. Primero Mortífago, y ahora. asesino.
Lavander se quedó medio dormida. La arrastre hasta las orillas del lago. La medio senté con los pies dentro del agua. Si alguien pasaba o se asomaba, sólo estaríamos platicando. Sentí como su respiración se hacía más fuerte. Tenía los ojos cerrados. Se veía tan.. débil, tan.. indefensa. Seguía sintiendo esto en mi interior. Remordimiento, culpa, no lo sé. Pero yo sabía que eso ya era mucho decir. Podría ser mortífago, pero eso no implicaba ser asesino a tan corta edad. Dieciséis años. Dieciséis años tirados a la basura. Dieciséis años de dudas, humillaciones, maltratos, obligaciones. Dieciséis malditos años de fingir. Pero claro esta, fingir en la forma en la que un Malfoy debe fingir. Fingir de una forma cínica, pretenciosa. Fingir de una forma fría, humillante. ¿Por qué no puedo simplemente ser Draco? ¿Por qué tengo que ser un Malfoy? Este destino gris, siempre me ha hecho preguntarme muchas y variadas cosas. Me preguntó por que hay gente que esta marcada desde antes de nacer. Me pregunto por que hay gente que tienen que pasar por muchas cosas a tan temprana edad, y todo por su marca interna. Me preguntó por que demostrar afecto y cariño no se hizo para gente como yo. Gente como yo. Por eso a veces me pongo a pensar y aunque pienso mucho tiempo, nunca encuentro respuestas. Respuestas que están tan cerca de mí. Pero que no puedo ver. Y que, más que nada, no he querido ver.
Tarde, estaba abriendo sus ojos. No podía ser, el efecto es como de tres horas. ¿Conté mal? No lo sé, pero tengo que evitar que grite. Ella abrió sus ojos y me miró. Sus ojos me recordaban a alguien, me miraban con desconfianza y miedo, mucho miedo. Nodijo nada, sólo susurró un ligero: "Por favor"
Por favor, una palabra tan alejada de mi vocabulario hiriente. Una palabra que nunca aprendí. Y que no pienso aprender ahora. 'Se fuerte Malfoy' me repetía incontables veces, 'se fuerte'
Plan B, todo ha cambiado. Despertó, y todo va marcha atrás. Plan B. ¿Por qué tenía que despertar?
Tomé a Brown de los brazos mientras ella se movía desesperadamente, quería gritar, abrió su boca pero un 'Silenciate' salió de mi varita y todo fue silencio. Silencio callado. Silencio infernal. Ella sólo me miraba con temor y lágrimas comenzaron a caer de sus ojos. Lágrimas que en cualquier otra circunstancia me hubiera encantado verlas. Ahora no. Las lágrimas sólo aumentan la culpa. Las lágrimas sólo lo empeoran todo. Las lágrimas son sólo señal de debilidad. Ahora o nunca. La tome por los brazos mientras ella pataleaba y movía su cabeza diciendo que no. Me metí con ella al lago. El frío llegaba más en esa parte. Frío. Ya estoy acostumbrado. Puse una mano en su cabeza y rápidamente la sumergí sin piedad. 'No es tiempo para dudar Draco, termina lo que empezaste' me dije a mi mismo. Sólo sentía su cuerpo temblando. Su cara parecía que iba a explotar, intentó contener la respiración pero su tiempo se terminó.
-Lo ves Brown, el tiempo de todos algún día terminara.
Ella luchaba por salir, me pateaba y movía sus manos de manera furiosa. Yo resistía. Al final, las patadas y manotazos fueron bajando de nivel. Lento, más lento. Terminó. Todo esta hecho. No hay vuelta de página. Nunca más. Observé como el cuerpo de Lavander se hundía lentamente, y flotaba otra vez, queriendo salir. Me salí rápido del lago, y me fui corriendo al castillo. Ya era tarde, me fui casi a escondidas para que nadie me viera mojado. Me hechice para no dejar rastro del agua que goteaba de mí. Llegue a Slytherin. Con más frío. Con mucho más odio. Lo raro era que sentía odio conmigo mismo. No con los demás, como era casi siempre. Ahora era conmigo. Coraje. Toda clase de sentimientos que usualmente eran dirigidos a los demás, ahora eran dirigidos hacia mí. Como caí tan bajo. Tal vez sólo me estoy hundiendo en mi propia oscuridad. Para toda la eternidad.
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Hola amiguis¡ jajaja, gracias por sus r/r, son geniales, seguire escribiendo, pero ahora me voy a una fiesta asi ke ai se ven¡ gracias por su apoyo¡
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