Entre lunas y estrellas

Por: Andyiory & Ayesha

Miembros de la Orden Siriusana

Título = Entre lunas y estrellas (4/?)

Autor = Andyiory & Ayesha

 
E-mail = andyiory@hotmail.com, lg_100309@hotmail.com

Clasificación = Este capitulo es PG-13, los próximos serán R y NC-17

Parejas = Sirius/Remus

 
Disclaimer =Los personajes de esta historia son propiedad de J.K. Rowling y la Warner Bros. Esto es puro entretenimiento y no me reporta beneficio económico alguno.
 
A/N = Este fic es el inicio de "El anillo y la Orden del Fénix", donde se explica la historia de los Merodeadores, contada por Andyiory y por mí.

***

Capítulo 4: Misterios por descubrir

"You're dangerous 'cause you're honest
You're dangerous, you don't know what you want
Well you left my heart empty as a vacant lot
For any spirit to haunt"

Who's Gonna Ride Your Wild Horses – U2

El verano transcurrió rapidísimo para Sirius, Peter y James, pero no para Remus. Pasó dos meses completos en el Instituto Versalles, en París, donde le hicieron una serie de exámenes destinados a buscar una cura o al menos un paliativo para su enfermedad, pero sin éxito.

El comunicador de bolsillo que les había dado Sirius los mantuvo en contacto, pero no siempre, porque Remus se quedaba en el hospital del instituto por días enteros y no le permitían llevar más que su ropa.

Apesadumbrado, volvió con sus padres a Londres, con el tiempo justo para ir de compras al Callejón Diagon, ya que se había puesto de acuerdo con sus amigos para encontrarse allí.

Peter estaba con sus padres y los de James, pero no había señales de James y Sirius. Los padres de Remus se quedaron en Flourish & Blotts comprando los libros, mientras los chicos salían a buscar a sus amigos.

La tienda de escobas tenía su público juvenil acostumbrado, pues se exhibía el nuevo modelo de escoba, una  Comet 78, modelo aerodinámico ideal para jugar al Quidditch. Dos chicos salían de la tienda, con sus escobas empacadas.

- "¡Sirius! ¡James!"

Ellos agitaron las manos y corrieron al encuentro de Remus y Peter, a quien habían saludado más temprano.

- "Hola Moony, luces terrible", dijo Sirius alborotándole el cabello.

- "Eh, deja", protestó el aludido, arreglándose como pudo el rizo castaño que cayó sobre su frente.

- "Vamos a comer algo y les mostraremos nuestras escobas", dijo James, acercándose un poco para susurrar "y también les contaremos lo que descubrimos"

Se dirigieron a Florean Fortescue a tomar helados: de vainilla y pistacho para Sirius; café y manjar para James; menta para Peter; y, por supuesto chocolate con baño de chocolate para Remus. Mientras comían y admiraban las escobas, Remus les contó sobre su viaje.

- "Ni siquiera pude conocer París, sólo estuve en ese odioso instituto. Me sacaron muestras de todo ¿y para qué? Para que les digan a mis padres que mi enfermedad era interesante, pero no tenía cura", exclamó tristemente.

- "¿Y no había nada interesante allí? ¿te tenían encerrado?", preguntó Peter, que había estado en poco contacto con Remus ese verano.

- "Nada. Ahh, ahora que lo dices, ¿A que no saben a quien vi en el instituto?", los otros lo miraron interrogantes, "...pues, ¡A White!"

- "¿White? ¿Qué hacía ese allí?", preguntó James

- "Quizás tiene una enfermedad incurable y le queda poco tiempo de vida", dijo esperanzado Sirius.

- "Pues no lo sé. Pero iba todo embozado, como si no quisiera que lo reconozcan. Sólo que al pasar cerca de mi habitación, se le cayó la capucha y pude verlo, aunque él no me vio"

- "Pues eso no es nada comparado a lo que Sirius y yo tenemos que contarles", dijo James, captando la atención de todos.

- "Tiene sus ventajas que mis padres no se ocupen mucho de mí. Sobre el tema de los animagos, hice que mi hermano menor, Regulus, le contara a papá que un amigo suyo se transformaría, y entonces mi padre me dio un torrente de información sin siquiera pensarlo", Sirius sonrió satisfecho ante la reacción de Remus y Peter, y continuó, "Primero: no se conoce de ningún mago menor de 25 que lo haya intentado con éxito, pues se necesita magia avanzada y es arriesgado. Segundo: mi bisabuelo investigó sobre el tema pero no hizo ningún avance que mereciera ser publicado, y su obra está en la Biblioteca de mi mansión."

- "Sirius y yo la registramos completa. Es una suerte que su padre no haya tocado nada y que todo esté catalogado. Hallamos cosas interesantes..."

Sirius mostró algo escondido en los pliegues de su túnica. Era un libro muy antiguo, empastado en cuero negro y con borrosas letras doradas. "Manuscritos pteptolíticos"

- "Este no es el original, por supuesto. Parece una recopilación que alguien copió de unos murales, pero está escrito en runas sumerias. Mi bisabuelo lo estaba traduciendo y solo tenemos el índice y un par de páginas, pero lo suficiente para saber que los pteptolitos esos podían transformarse en animales usando una poción catalizadora, acá sale la receta que necesitamos"

- "¿Y cómo haremos para entenderla?", preguntó Peter.

- "Ya lo pensamos", respondió James, "en tercer año hay un curso de Runas Antiguas y Lenguas Muertas. Lo llevaremos"

- "¿En tercer año?", casi gritó Remus

- "Pero convenceremos a Mc Gonagall de que nos deje llevarlo ahora", aclaró James, "Sirius y yo somos sus preferidos"

- "¿Y nosotros?", exclamó Peter

- "Nos ayudarán con las tareas"

- "¡Sirius Black! ¡Ustedes no tienen remedio!", dijo Remus, pero no pudo evitar sonreír. Sabía que lo hacían por él y eso lo emocionaba mucho.

**

En el Expreso de Hogwarts ocuparon el mismo compartimiento, charlando y riendo alegremente, hasta que entró Arthur Weasley, con su flamante insignia de prefecto, llevando a un chico nuevo.

- "Este es David Balfour y no tiene dónde sentarse. ¿Pueden acomodarlo?"

Remus le hizo un espacio en su asiento y el chico se sentó, saludando tímidamente. Era un poco bajo y delgado, con la piel muy blanca y los ojos azul acero, que dependiendo de la luz, parecían plateados. Su cabello era negro y lo usaba a la altura del hombro. Traía una túnica escocesa con los colores verde, granate, amarillo tenue y blanco.

- "¿Vienes de Escocia?", preguntó sorprendido Remus.

- "De Edimburgo", respondió David.

- "¡Que interesante!", exclamó Peter, "nuestro profesor de Pociones, Nigel Campbell,

es escocés también". David se puso serio de pronto, "¿dije algo malo?"

- "Los Campbell y los Balfour son enemigos desde hace años. Hubo un conflicto en 1455 llamado la 'Guerra de las dos rosas', por York y Lancaster. Mi familia apoyó la causa de York y los Campbell apoyaron a los Lancaster. Nunca seré amigo de un Campbell", declaró David firmemente.

- "Pues tendrás que serlo en Hogwarts, chico. O al menos simularlo, porque Campbell será tu profesor por siete años, y no es alguien que uno desee tener de enemigo", dijo Sirius.

David apretó obstinadamente los labios sin decir nada, y James intentó suavizar la situación con su hechizo de burbujas. Tuvo tanto éxito que Arthur tuvo que regresar a poner orden.

Llovía al llegar al castillo y los chicos de primero tuvieron que hacer su recorrido en barcas, respetando la tradición, mientras que los otros iban en carruajes. Una vez en el Gran Salón, notaron la presencia de un nuevo profesor, no tan anciano como Dumbledore, sentado a la izquierda de éste. También notaron que White había adelgazado mucho ese verano.

- "Mira Potter", susurró Sirius señalando el pecho de Lily Evans, "¿ya viste lo que tiene Lily? Parece que ha crecido..."

James le dio una patada por debajo de la mesa.

La ceremonia de selección estaba por empezar.

- "David Balfour"

El chico avanzó tímidamente al estrado y Remus notó la mirada feral de Campbell. No le gustaría estar en el pellejo de David cuando tuviera clase de Pociones.

- "¡Gryffindor!"

La mesa de Gryffindor ovacionó a David mientras se sentaba. La mirada de Campbell se hizo más fiera.

Luego desfilaron varios estudiantes más, mientras el sombrero nombraba las casas de su elección.

- "Kevin Rockford"

Un chico delgado, de luminososo ojos castaños, se dirigió al estrado, pero su nerviosismo era tal que tropezó y cayó al piso. El siguiente chico de la fila se acercó y lo ayudó a levantarse, hasta que llegó al banco y se puso el sombrero.

- "¡Slytherin!"

- "Daniel Wallace"

Kevin dirigió una cálida sonrisa al chico que lo había ayudado y que ahora avanzaba con aplomo por el estrado.

- "¡Slytherin!"

Los dos se dirigieron juntos a la mesa de Slytherin.

Dumbledore se levantó y todos guardaron silencio.

- "Muy buenas noches. Les doy la bienvenida a los estudiantes de primer año y les recuerdo que los terrenos del bosque están prohibidos. Asimismo, nuestro Celador, el Señor Filch me ha pedido que les comunique que la lista de objetos prohibidos se ha incrementado este nuevamente año y está pegada en la puerta de su oficina. Se prohiben muy especialmente todo tipo de bombas fétidas", dijo esto mirando seriamente a Sirius y James.

- "Debo informarles también que este año nos acompaña el doctor Adalbertus Stoker, Orden de Merín, Segunda Clase, famoso lingüista y especialista en runas antiguas de la Universidad de Miskatonic, en Arkham, Kansas. Es un orgullo tenerlo entre nosotros. Eso es todo"

El director le estrechó la mano al nuevo profesor mientras los estudiantes aplaudían. Remus notó que White era el único sin aplaudir en la mesa de los profesores.

**

Contra todos los pronósticos de Remus, la profesora Mc Gonagall aceptó que Sirius y James llevaran el curso de Runas Antiguas y Lenguas Muertas. El curso lo llevaban algunos alumnos de otros años, pues la fama de Stoker era tal que pocos quisieron perdérselo. En total había treinta estudiantes.

- "El estudio de las Runas Antiguas es una disciplina fascinante, que requiere tiempo y esfuerzo. Sin embargo, no tiene ningún sentido si no es reforzada con el conocimiento de Lenguas Muertas, pues muchas veces el simbolismo mostrado en las runas tiene su equivalente en palabras de lenguas tales como el árabe antiguo, sumerio e incluso griego. Existen también algunas culturas del continente americano, como la inca, azteca y maya, que…- dígame, señor.."

Sirius habia levantado la mano. Narcissa Black dio un codazo a su amiga Laetitia Gordon, que se había matriculado en ese curso sólo para ver a Sirius, pues ella estaba en cuarto año.

- "Black. Sirius Black", dijo él, "profesor, quisiera saber cuándo estudiaremos runas sumerias"

Stoker alzó las cejas.

- "Señor Black, como podrá ver en la sumilla del curso", agitó la varita y todos tuvieron un pergamino con la sumilla, "NO ESTUDIAREMOS Runas Sumerias en este curso. Sólo hablaremos de jeroglíficos egipcios y de la simbología propia de las culturas americanas"

- "Pero, profesor, creo que las Runas Sumerias son importantes", protestó Sirius. James tiró de él para que se callara, pero fue inútil.

- "Señor Black, ni usted, ni ningún otro estudiante va a decirme qué es importante y qué no lo es cuando se trata de MI curso. No bajaré puntos a Gryffindor en esta ocasión, pero deseo verlo después de clase"

La clase continuó y James tomaba apuntes con entusiasmo, pero para Sirius había perdido todo su encanto. Al finalizar, se quedó parado respetuosamente junto al pupitre, donde Stoker ordenaba sus pergaminos con toques de su varita. Cuando terminó, lo miró a los ojos.

- "Dígame, señor Black, ¿a qué se debe que un estudiante de segundo año entre en este curso y desee aprender Runas Sumerias?"

- "He leído sobre ellas…me parecieron interesantes", trató de explicar Sirius, sonando poco convincente.

- "Los sumerios y las civilizaciones más antiguas a ellos, como los pteptolitos, tenían la costumbre de invocar poderosos demonios y de preparar pociones de efectos muchas veces mortales. Es por eso que el Ministerio de Magia ha prohibido la enseñanza de Runas Sumerias en Gran Bretaña, y es algo con lo que, particularmente, no concuerdo. Si ese interés suyo se mantiene, señor Black, creo que puedo ayudarlo. Pero necesitará trabajo y estudio extras. Le prestaré libros y le enseñaré Runas Sumerias, y quizás luego usted acceda a mostrarme el texto que desea leer", dijo Stoker.

- "Quiero aprender", declaró Sirius firmemente, "y también mi amigo James Potter"

***

- "¿QUÉ? ¿Dijiste que yo también?", gritó James un rato más tarde en el dormitorio, "¿no es suficiente con el trabajo que ya tenemos y quieres pedirle más?"

- "Es por Moony, ¿recuerdas? Dijiste que lo haríamos", pidió Sirius.

- "Dije que estudiaría Runas Antiguas, no que haría clases extras de Runas Sumerias", Sirius lo miró suplicante, "¡está bien! Pero nos tomará años traducir esa condenada poción"

- "Lo valdrá"

- "Lo sé", dijo resignado James. "Vamos al campo de Quidditch, mañana eligirán a los nuevos miembros del equipo y quiero practicar un rato"

Se dirigieron al campo, donde los aguardaban Remus y Peter, junto con Audra Finnigan, que había acudido allí sólo para ver a Sirius.

James abrió su maletín de Quidditch, el obsequio de cumpleaños del que estaba más orgulloso. Dejó salir una bludger y Sirius partió volando tras ella. Luego, James dejó salir la snitch y voló tras ella. La bludger trataba de golpearlo, pero Sirius la desviaba hábilmente, hasta que James divisó la snitch y voló en picada, atrapándola después de una difícil persecusión.

Audra aplaudía encantada.

- "Ambos estuvieron geniales. ¡No he visto mejores jugadores, salvo en los mundiales! De seguro entrarán en el equipo"

Y entraron.

Durante la prueba, James fue el único postulante que logró atrapar la snitch, y Sirius se distinguió por su técnica para desviar las bludger. Todo Gryffindor se quedó hasta muy tarde celebrando su ingreso al equipo, hasta que se fueron retirando. Cuando llegaron al dormitorio, Remus notó que había olvidado unos librosy volvió a la Sala Común, desierta ya.

Caminó hacia la mesa, en silencio, cuando oyó un sollozo débil. Se acercó a uno de los sofás frente a la chimenea y encontró a David sentado allí, con el abrigo y la bufanda aún puestos, y los ojos llenos de lágrimas.

- "David, ¿Qué pasó?", dijo preocupado arrodillándose junto a él.

- "Campbell", dijo David con voz ronca.

- "¿Te castigó?"

David le enseñó la palma de la mano, hinchada y enrojecida.

- "No puede golpear a un estudiante. Debes decirle a Mc Gonagall", exclamó indignado.

- "No lo haré", dijo obstinadamente David, "Eso es lo que él quiere. Me puso una detención por gusto, mi poción estaba bien hecha, pero él dijo que yo era el peor estudiante de Pociones que había tenido y me citó para esta noche en su despacho. Me hizo copiar la receta de la poción de hoy cien veces en unos pergaminos, y luego me hizo extender la mano y me golpeó con su varita. Dijo 'tu palma está roja ahora, como la rosa de Lancaster' y se rió. Pero no lo delataré, los escoceses resolvemos solos nuestros problemas"

- "David, él no puede golpearte"

- "No lo digas a nadie, Remus. Sería una vergüenza para mi clan..por favor"

Remus no se podía negar, pero conjuró unas vendas y el ungüento que le echaban luego de las transformaciones.

- "No lo diré, pero si vuelve a pasar, avísame"

***

Peter se había rezagado en el Gran Salón, luego del almuerzo. Sus compañeros se habían dirigido al aula de Transformaciones, pero él había olvidado su libro y volvió a la Torre de Gryffindor.

Antes de entrar, alguien puso la mano en su hombro. Se volvió, asustado.

Lucius Malfoy.

- "Oh, el niñito anda solo, ¿qué pasó? ¿te despidieron tus amiguitos? Ya notarían lo nauseabundo que eres, bola de grasa"

- "¿Q-qué quieres, M-malfoy?", tartamudeó Peter intentando parecer seguro.

- "Sé que tú y tus amigos me siguieron esa noche. Diles que NUNCA se les ocurra volver a seguirme, o lo pagarán muy caro", colocó su varita debajo del abultado mentón de Peter, que empezaba a sudar frío. "Diles que no jueguen con cosas que no conocen. Puedo ser muy peligroso, ¿sabes?  Y una rata como tú, que mete la nariz en todo, debería saberlo"

Luego lo arrojó contra la pared y se alegó, ondulando la capa mientras caminaba, con la altivez de un príncipe.

Peter se quedó encogido en la pared. Luego se acercó tembloroso al retrato de la Dama Gorda y dijo la contraseña. Recordaría en lo sucesivo no andar solo jamás. Malfoy tenía muy mala fama.

Llegó tarde a la clase de Transformaciones, y Mc Gonagall estaba explicándoles cómo transformar objetos simples en flores.

- "El secreto está en imaginar a qué flor debería parecerse el objeto. Por ejemplo, si tienen una fuente de cristal, quizás la flor podría ser un nenúfar. Si tienen una copa de vino, podría ser un tulipán. Mientras más precisa sea la imagen mental que formarán de la flor, mejor saldrá la transformacion"

Sirius logró transformar una pluma en un junco, mientras Remus transformaba unos botones blancos en un ramo de crisantemos.

- "¡Es hermoso!", exclamó Lily Evans, y Remus le obsequió el ramo.

- "Eh, James, Moony te hace la competencia con sus halagos", susurró Sirius.

- "¿Qué dijo, señor Black?", preguntó la profesora.

Sirius pensó rápidamente.

- "Pregunté cómo se transforma uno en animago"

La profesora sonrió.

- "Verá", dijo.

En un instante, la profesora Mc Gonagall pareció encogerse y en su lugar apareció un gato atigrado. La clase lanzó una exclamación de admiración. Luego, el gato pareció agrandarse y la profesora apareció de nuevo, sin siquiera haberse despeinado.

- "¿Cómo?", preguntó asombrado James.

- "No es sencillo, señor Potter. De hecho, me tomó cinco años de entrenamiento bajo la supervisión de un funcionario del Ministerio de Magia. La primera transformación es muy arriesgada, porque si algo sale mal, uno puede quedar convertido en un mago deforme y ser trasladado al pabellón de incurables, en St. Mungo. Pero si uno tiene éxito, las siguientes será cada vez más fáciles"

- "¿Qué clase de entrenamiento?", preguntó Sirius.

- "Ejercicios de concentración, para meterse en la piel del animal que deseamos ser. Se empieza seleccionado el animal, y luego se debe aprender todo sobre él. Como siempre me fascinaron los gatos, decidí convertirme en uno de ellos"

- "¿No hay ninguna poción que ayude?", preguntó Remus.

- "No, señor Lupin. Y me extraña que lo pregunte. De hecho, existían algunas pociones, para la primera vez que uno se transformaba, pero su uso requería una férrea fuerza de voluntad por parte del mago, y muchos enloquecieron al beberlas. El Ministerio las prohibió. Ahora, continuen con sus transformaciones"

Cuando finalizó la clase, los chicos estaba más que ansiosos por comentar lo dicho por Mc Gonagall.

- "Sirius, es peligroso", protestó Remus, "tú la oíste"

- "Moony, ella dijo que si se tenía una voluntad férrea no había problema. Yo la tengo", afirmó categóricamente Sirius.

- "Además, ni siquiera podemos leer esas condenadas runas. ¡Una semana de clases con Stoker y sólo he conseguido saber el significado de dos runas! ¡nos tomará el año entero!", exclamó James.

- "¿Por qué no elegimos a los animales y empezamos a familiarizarnos con ellos?", pidió Peter. Los demás lo secundaron.

- "Yo seré el animal que simboliza mi nombre", dijo Sirius, "el Can Mayor. Pero no será un perro ordinario…"

- "No será un perro de tres cabezas", dijo Remus con decisión.

- "Está bien. Sólo una cabeza. Será un perro negro, y enorme"

- "Yo quiero ser un ciervo, siempre quise ser ágil como ellos", dijo soñadoramente James.

- "¿Y tú, Peter?"

Peter pensaba aún en las palabras de Malfoy. "Y una rata como tú, que mete la nariz en todo, debería saberlo". ¡Una rata! Por repulsivo que pareciera, tenía enormes ventajas ser un animal pequeño. Podía meterse por lugares insospechados y descubrir secretos. Saber los secretos de otros daba poder.

- "Una rata"

- "¿UNA QUE? ¡ASQUEROSO!"

- "Son pequeñas, y escurridizas,  y pueden encontrar pasajes secretos", dijo Peter, con los ojos brillándole.

Sirius, James y Remus lo consideraron unos momentos. Luego decidieron que tenía razón.

***

Los estudios de Runas Sumerias seguían sin avanzar mucho, pues Stoker había empezado con fragmentos de leyendas antiguas y la simbología allí usada no les servía de mucho. Un par de excursiones nocturnas a la Sección Prohibida, usando la capa de invisibilidad, les facilitó el trabajo, pues consiguieron una "Guía para el desciframiento de códigos y runas antiguas".

James estaba en la Sala Común revisando sus apuntes de Runas Antiguas, acompañado por Peter, que repasaba Pociones. Esperaban a Sirius.

Remus convalecía de su última transformación, hacía apenas una noche. Sirius le estaba preparando un chocolate caliente, en el mechero que les habían permitido tener en el dormitorio, para calentar las pociones. Esto era una suerte, pues lo usaban muchas veces para preparar té o chocolate, sobre todo cuando hacía frío.

Sirius avanzó con la taza caliente en la mano, y se sentó en la cama, donde Remus lo esperaba. Lo ayudó a incorporarse, colocando un almohadón en su espalda.

- "¿Cómo estás?"

- "Mejor, luego de que me aplicaras el ungüento. No te preocupes por mí, ve a traducir la poción", dijo Remus mientras tomaba la taza y bebía lentamente su contenido.

- "Estamos cerca, Moony. Pronto lo lograremos"

Los ojos dorados de Remus brillaron tras la taza, mientras bebía. Apuró el contenido y sonrió.

- "Si hasta has olvidado a Snape, con esto de las runas y el quidditch"

- "Tienes razón, el pobre de Snivellus debe extrañarme. Visitaré su casillero", respondió alegremente Sirius, quitándole la taza vacía de las manos.

- "¡Sirius, no!", exclamó Remus. Luego bostezó.

Sirius lo ayudó a acomodarse en la cama, y lo arropó bien. Luego acomodó los utensilios que había ensuciado, usando un antes un hechizo de limpieza. Para cuando terminó, Remus se había quedado profundamente dormido. Corrió suavemente las cortinas de su cama y se deslizó silenciosamente fuera del dormitorio. No notó la figura embozada que lo observaba detrás de una armadura.

Al poco rato, una sombra se deslizó hacia la puerta de la habitación y susurró – "Alohomora", empujándola suavemente cuando se abrió.

El visitante tenía prisa por comprobar lo que venía sospechando desde hacía varias semanas. Abrió cautelosamente la cortina de la cama de Remus y lo miró intensamente. Con cuidado, destapó su cuerpo y sus dedos ágiles abrieron la parte superior del pijama, dejando a la vista el blanco pecho del joven, donde aún había huellas de arañazos.

Recorrió con la yema de los dedos las marcas, y una sonrisa apareció en su rostro. Luego volvió a abotonar el pijama y lo arropó tal como estaba.

- "Un pequeño licántropo", murmuró complacido, "aún es joven. Esperaré"

TBC

¡Gracias por sus reviews!

Nessimelle

Espero que este capitulo te guste. No sale mucho de Lucius, pero ya lo pondré…por ahora quiero que los nenitos crezcan para hacerles cosas malvaditas.

Maryam

Siento que en este capitulo no salga Seve, pero saldrá en el próximo.

En este capitulo empiezo a relacionar el fic con el "Anillo y la orden del fénix"

Jun/Vania

Les tomó tres años llegar a ser animagos, según Rowling. Aquí describo las complicaciones, obviamente inventadas por mi.

Ruth

Les dará su merecido.  Por lo pronto le ha dado a Peter un susto de muerte.

A alguien si le importa que Remus sea un licántropo, muejeje!!

Stefi

Bellatrix no sale aún aquí. En el proximo saldrá, haciendo cositas malvadas de esas que te gustan. Y para las antenitas, pues a partir de ahora, todo está relacionado con "El anillo y la Orden del fenix"