2º Capítulo: Nuevo Camino

De esos hechos habían pasado ya un año y Harry se encontraba en un bosque perdido de algún lugar de Albania seguramente el mismo bosque donde se ocultó Voldemort cuando se encontraba débil. Ahí, el corazón del muchacho se volvió oscuro, duro y frío como una piedra rumiendo sus desgracias y rencor hacia los que había considerado sus mejores amigos. Harry tenía un plan para que sus desgracias acabasen y era transformándose en el ser más poderoso de todos los tiempos y si para ello empleaba magia negra le importaba ya bien poco.

Había encontrado en el bosque una pequeña cueva que con un par de toques mágicos había quedado más o menos decente para vivir pero tenía el problema de la chimenea que no funcionaba bien. Antes de arreglar ese defecto, decidió conseguir los libros que necesitaría para lograr sus fines. Para ello empleó todos sus conocimientos y el hechizo Imperius para dominar a un mago albanés para conseguir libros oscuros y demás cosas necesarias. Nadie se dio cuenta de los robos hasta que los echaban en falta o en algunos casos ni eso pero nunca se hicieron públicos por miedo a un nuevo temor de un Señor Oscuro y ninguno lo investigó.

Harry estaba colocando los libros en las estanterías de su pequeño hogar (si se lo puede llamar así a la cueva) para organizar el lugar para luego arreglar la chimenea. Estaba metiendo los últimos libros en los estantes cuando oyó una voz detrás de él.

-Hola, guapetón, ¿qué haces?- dice una sensual voz de mujer.

Harry se da la vuelta con la varita en la mano listo para atacar creyendo que lo habían descubierto cuando mira a su alrededor y no ve a nadie hasta que al final echa un vistazo al suelo localizando a una enorme serpiente. Al verla echa un suspiro de alivió al preocuparse demasiado.

-Hola, amiga. ¿Qué te trae por aquí?- pregunta Harry sonriendo.

-Curiosidad y el calor. Unos amigos me habían dicho que un humano que sabe hablar nuestra lengua habitaba por aquí; y el calor porque me gustas- dice la serpiente muy directa.

-Gracias. Mi nombre es Harry Potter y estás invitada cuando quieras a mi hogar y ¿tu eres?-dice Harry.

Encantada de conocerte, Harry. Mi nombre es Liz- dice la serpiente.

-Si te interesa conversar conmigo tendrás que esperar un rato, ya que ahora me tengo que poner a realizar un trabajo manual – dice Harry transformando su varita en un instrumento para arreglar la chimenea.

-Soy paciente- dice Liz y piensa cuando Harry se quita la túnica y la capa que tenía un cuerpo buenísimo.

Harry se puso manos a la obra y en menos de un cuarto de hora ya había acabado de arreglar la chimenea y había creado un buen fuego para calentar la cueva. Se dio una rápida ducha y se sentó en un sofá cerca del fuego para poder hablar cómodamente con Liz. Estuvieron hablando de sus vidas durante horas hasta que se quedaron dormidos con una sonrisa en la cara.

-Liz, me gustaría que te quedases aquí, me falta compañía- dice Harry al día siguiente cuando ambos están despiertos.

-Lo dices en serio- dice ella sin dar crédito a las palabras que le habían dicho.

-De verdad- dice Harry sonriendo de verdad desde hace mucho tiempo- Eres la primera que me ha hecho sentir bien desde hace mucho tiempo.

-Pues entonces, si no te opones me quedaré a tu lado- dice Liz seriamente.

Y desde entonces los dos se hicieron inseparables afrontando un sin fin de peligros (lucha con Dragones, Quintaped, Manticoras, Acromantulas,....). Todo ello para que Harry consiguiera poderes y poder. Entre ellos durante ese tiempo empezó a surgir el amor sin que se diesen cuenta de ello aunque uno fuese un humano y el otro una serpiente.

En una de las últimos peligros Liz se vio muy implicada y su vida estaba en peligro por lanzarse sin ningún reparo contra un Nundu. Harry al verla en peligro de muerte se transforma en un ser realmente terrorífico, por primera vez, para potenciar al máximo sus poderes. El aspecto de éste era temible, era alto, delgado, con la piel grisacia, unos orificios como nariz, grandes rojos ojos, de la túnica le salían unos pinchos que se situaban en la columna y a la altura de los omoplatos unas alas de murciélago. Harry con un par de hechizos inutilizó a la bestia y ayudando a su amada Liz (ya se había dado cuenta de que la quería) a recuperarse. Después recuperó su forma original de humano, algo que en ningún momento lo consiguió Voldemort.

Una vez en el pequeño hogar del bosque (la cueva), Harry se mueve de un lado a otro pensando como realizar sus planes para que todo saliese bien.

-Harry, deja de moverte, que me pones nerviosa- dice Liz enrollada en la alfombra de la chimenea.

-Bien.- se sienta en el sofá y decide hablar- Liz te gustaría ser un humano de verdad con poderes mágicos como yo.

-Claro, amor. Ese ha sido mi sueño desde que te conocí- contesta Liz contenta por volverse un ser humano de verdad. Espero que os haya gustado estos capítulos porque en los siguientes habrá sexo, boda, llegada de alguien especial y vuelta a Hogwarts entre otras cosas. Si alguien quiere darme alguna idea me la puede enviar a merlín_jose@hotmail.com donde en asuntos poner Fanficsion.