Capítulo 7: El Camino para el Angel
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El Demonio de la Mirada de Fuego le colocaba un poco de aceite a la lámpara, para tratar de mandar una carta. El sacerdote Zerg había partido hacia Basram, en busca de la fuente de poder que podría mandar a toda Gaea al caos, pero ellos la utilizarían para otra ocasión. Antes de partir de Zaibach, el Demonio de la Mirada de Fuego había mandado un par de espías a Basram, pero mando al sacerdote para corroborar los últimos mensajes de los espías sobre esa fuente de energía, al parecer la estaban desmantelando poco a poco, sin que el gobierno de Basram se diera cuenta.
- Cuando Basram se de cuenta, será demasiado tarde - pensó - para cuando se den cuenta de lo sucedido, el descendiente de Atlantis ya habrá sido sacrificado, y el poder de Basram ya estará en nuestras manos para entonces, al igual que el "desaparecido" poder de Zora…
Tocaron a su puerta, pero él no contestó. Simplemente le dejaron un mensaje por debajo de la puerta, pero no traía remitente. Tomo el sobre, pero no lo abrió, se lo metió dentro del chaleco que traía puesto y salió hacia la calle, de la cual no regreso a la pequeña posada en toda la noche.
- Tengo que empezar a festejar, los astorianos no tienen idea de lo que vendrá después…
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Amenfis entró en la biblioteca con un mensaje de Freid. El rey Van corroboro entonces las palabras que le había dicho su esposa acerca de la huída de su hija. Folken se encontraba allí cuando su padre leyó la carta en voz alta.
- "Estimado rey de Fanelia. Me complace informarle que su hija se encuentra en Freid, completamente sana y salva. Cambiando drásticamente de tema, ¿No cree que ya es tiempo de que sepa la verdad? Creo que eso le haría bien, ya que tiene el autoestima demasiado baja. Atentamente, Chid Zar Freid, soberano de Freid"
- ¿Que piensas hacer papá? - preguntó Folken.
- Dejaré que pase un tiempo, luego averiguaré que es lo que pasa en realidad con Stella, y si algo sucede antes de su muerte, te juro que pararé en seco todo, y le daré primordialidad a la felicidad de mi hija…
Folken salió de la biblioteca muy satisfecho con lo que le dijo su padre, inclusive ahora entrenaba con mas entusiasmo, mientras Kaoru se limitaba a verlo a lo lejos. Si no había querido regresar era porque su razón para no volver estaba frente a ella en esos momentos, y quien sabe si él ya se había dado cuenta de los sentimientos que tenía ella hacia él, que era lo mas seguro ya que él podía tener esos presentimientos extraños que también tenía la reina Hitomi. Folken se dio cuenta de la presencia de la chica, la cual al verse descubierta mejor se retiró de allí. El heredero de Fanelia sonrió al ver el reflejo de Kaoru, y aunque no habían entablado conversación últimamente, él si trataba de negar lo que estaba sintiendo en esos momentos, pero que en un futuro, podría ponerlo entre la espada y la pared.
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Aska se había levantado temprano esa mañana, ya que tenían que llegar lo mas pronto posible a Fanelia. Levantó a Chris, el cual nada mas dio un bostezo largo y luego siguió la marcha tras Aska. Atravesaron rápidamente las montañas, hasta llegar a un claro lleno de verde pasto y naturaleza; al final se levantaban dos umbrales y varias murallas, indicando la llegada a la ciudad.
- Vamos - dijo Aska - no te quedes atrás, ya llegamos.
- Si.
Aska caminaba demasiado rápido, pero era porque tenía prisa de llegar y preguntar por Kaede, mientras que Chris solo tenía prisa de poder encontrarse con sus padres. Su hermana lo vio algo nervioso, aparentemente porque sería su primera vez de encontrarse personalmente con sus padres, ya que su madre hablaba con él en sueños, pero físicamente, era la primera vez. Cuando él estaba en su presentación allá en una discoteca de la Tierra, supo que era su hermana la que lo buscaba porque sintió su presencia, luego cuando terminó solo siguió su presencia hasta dar con ella, pero nunca se fijo bien como era. Se preguntó como serían sus otros hermanos, si serían algo parecidos a él o tendrían grandes diferencias, pero definitivamente estaba nervioso.
- ¿Pasa algo malo? - pregunto Aska, comenzando a caminar un poco mas lento.
- No, digo, si. Es que la verdad… no se como voy a reaccionar… luego como sabré quienes son mis otros hermanos… la verdad no se…
- Si quieres yo te puedo decir mas o menos como son - le respondió, comenzando ya a caminar a un paso firme para tener mas tiempo de hablar - pero no se si quieras…
- Te lo agradecería…
- Bueno, yo diré todo desde mi punto de vista, pero quien sabe como sea todo esto en realidad, ya que ellos casi nunca me confían algo… - empezó a caminar adelante de él, pero contando lo que ella sabía - mira, Folken a veces podrá parecer muy frío, pero en el fondo se preocupa mucho por las personas, inclusive creo que esta enamorado de la hija de la amiga de mamá…
- ¿Se parece a papá o a mamá?
- Bueno, por fuera puede parecerse mas a papá, pero su carácter definitivamente es como mamá… después de Folken está Stella… ella es todo lo contrario de Folken: carácter de papá y parecido a mamá, es demasiado abierta diría yo, pero eso es lo que le acarrea los problemas…
- ¿A qué te refieres con eso?
- Bueno, no puede pasar una semana sin escaparse a otro país, luego cuando regresa se arma un lío… espero que puedas llegar a conocerla porque no se si mamá te haya dicho la tradición… y viéndolo bien, se parece un poco a ti…
- Bueno, mamá me dijo algo sobre un sacrificio en un sueño, ¿Pero que se parezca a mi? - Chris se sorprendió de escuchar eso, ya que no creía que hubiera alguien con parecido a él entre sus hermanos - ¿Y en qué se parece?
- Bueno, pues tienen el mismo color de cabello con los mismos reflejos, nada mas que Stella tiene un problemita: no sabe expresar sus verdaderos sentimientos, pero si se sabe cuando le pasa algo porque ella no aparenta como Folken, el si que no se sabe cuando le pasa algo…
- ¿Y tu? - le pregunto Chris, ya que tenía curiosidad de conocer mas a su familia - ¿Que me puedes decir de ti?
- Solo puedo decirte que estoy comprometida con el príncipe de Astoria. Yo no sabría describirme a mi misma, tendrías que conocerme para poder decirlo.
- Pero ya tendremos tiempo para eso, llegando a Fanelia.
- Si, es cierto.
Siguieron platicando y caminando por el bosque de las montañas Floresta, hasta llegar a una vereda que los conduciría directamente a Fanelia. Cuando llegaron a las puertas, Aska miró a Zutton de guardia y le gritó. Una vez que Zutton pudo ver a la segunda princesa de Fanelia mando llamar a los reyes, que inmediatamente fueron a la puerta, pero en cuanto la reina Hitomi vio a Chris al lado de Aska, se le lanzó inmediatamente en un abrazo, un abrazo que contenía mezcla de efusividad y cariño a la vez.
- Mamá… - respondió Chris - no tienes que ser tan efusiva…
- Estoy feliz… - le mencionó ella - solo me falta una hija para ser completamente feliz.
Los cuatro se dirigieron a palacio, donde Folken los estaría esperando. Chris estaba fascinado con la ciudad, con la gente, con todo lo que veía a su alrededor, solo que tenía un extraño presentimiento; no supo si era porque no tendría tiempo de conocer a su otra hermana, o si era por estar en un lugar nuevo para él, pero era un presentimiento del cual no podría escapar fácilmente.
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Stella se había quedado dormida en una habitación, estaba algo confundida, y era natural debido a la situación en la cual se encontraba. Aunque todo Freid estaba enojado por las razones dichas anteriormente, el rey se mostraba de lo mas tranquilo, siguiendo con su vida normal de reinado, pero preocupándose por Stella. Tres largas semanas pasaron, durante las cuales Stella intentaba alejarse de Chid cada vez que lo miraba, debido a la proximidad de la fecha fijada por su padre el rey de Fanelia para su sacrificio. En una de las oportunidades que no pudo escapar, Chid mencionó frente a ella y a la corte de Freid una noticia que podría cambiar el rumbo de su país.
- He tomado una decisión, y no quiero que me cuestionen. He decidido casarme.
Toda la corte, y también Stella se quedaron pasmados, solo Kaja, el consejero del rey seguía tranquilo ante la decisión de su pupilo.
- Ya encontré a la mujer, Kaja me ayudo a seleccionarla y a fijar la fecha de la boda, con ayuda de los plaktu.
- ¿Y Cuándo será la boda, si se puede saber, Su Alteza? - preguntó un consejero.
- El día décimo noveno de la luna amarilla, lo consulté con los plaktu, los cuales avalaron que es el día propicio para que Freid…
- Pero es el día de la ceremonia del sacrificio de Fanelia… ¿No puede cambiarla de fecha?
Stella salió corriendo de allí con los ojos llenos de lágrimas, dejando a la corte y al rey discutiendo el asunto muy fuertemente, aunque lo único que lograron fue que el rey no cambiara su decisión, sino que siguiera de obstinado. La salida de la princesa Fanel había tenido sus consecuencias, pero a ella no le importo que la corte hablara de ella.
- Sabías que no debías de hacerte ilusiones - se repetía a si misma, mientras que su rostro se cubría de lágrimas - en una semana estaré bajo tierra, y en una semana el estará unido a otra mujer… eres una tonta, tonta, tonta…
El rey la vio salir algo desesperada, pero no hizo nada por alcanzarla. Llamo a Kaja y le hizo una seña con la mano; entonces el consejero salió por la puerta a hacer el mandado que ordenaba el rey. Los demás miembros de la corte no se dieron cuenta de eso y seguían discutiendo con el rey sobre el asunto de la boda.
- "Ojalá que todo salga conforme a lo que planee - pensaba para si mismo el rey - si todo sale bien, podré…"
En esos momentos sus pensamientos fueron interrumpidos por uno de los mayores de la corte, que le indicó que como veían que no podían cambiar sus decisiones, entonces se acatarían a sus ordenes. Chid se alegró al saberlo, ahora solo su plan tenía que salir como lo había previsto Kaja y todo terminaría bien para Gaea.
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Notas de la autora: Introducción al nuevo personaje, descendiente del clan dragon, pero no adelantare mas de la historia. Escríbanme! darkangelorochi@hotmail.com. Atte. Dark Angel.
