Ya estoy aquí de nuevo, espero que os guste este capítulo, casi íntegramente del pasado.
Espero que os guste y ya sabéis un review nunca viene mal.
Y ahora responder los reviews
Zapping: Muchas gracias, me parece que ahora tienen demasiadas cosas de las que preocuparse con la salida de la prisión de Fobos Snape. Pero bueno, lago supongo que habrá, jejejeje.
Malu Snape: Muchas gracias. Jejejejeje. A mi también me ha gustado que pasará algo, pero no os preocupéis que la vecina aún da para rato, jejejeje. Pobre ninfomanía. De cardad que quiero actualizar más seguido pero siempre me pasan cosas....
Shashira: Lo siento de verdad. Pero me tardo mucho en actualizar es mi naturaleza, jejejje. A ver que puedo hacer para hacerlo más rápido, jejeje. Muchas gracias por tu apoyo pero me parece que no hara falta que me secuestre, jejejejeje (risa nerviosa)
Lucía: Que review más largo, pero me encanta. Muchísimas gracias por tus halagos y lo siento si te mantuve despierta hasta las tantas a mi a veces me pasa... A mi Ethel también me gusta cambia tanto de personalidad sobretodo cuando hablamos de Sev. Es que Remus es como el chocolate dulce y suave, jejejeje y a mi me encanta el chocolate, jejeje. Y Sev es un Slytherin, no lo veo diciendo sin tapujos que ama a alguien, al menos ahora, pero puede que poco a poco vaya cambiando su prespectiva.
Muchas gracias a todos por vuestra amabilidad.
Y SIN MÁS PREÁMBULOS:
34. EL PASADO
-Hemos venido a acabar el trabajo que empezamos. No queremos dejar cabos sueltos, se rió el hombre enmascarado. -Por cierto, el Amo, nos ha dado permiso para divertirnos un rato.- Ethel vio los ojos el mortífago y quedó helada.
-Cabrón, tu mataste a mi padre- Ethel pisó fuertemente al hombre que la tenía cogida y sacó la varita.- Expelliarum.- Por mala suerte ella solo pudo hacerlo retroceder unos pasos.
-Niña estúpida. ESTO es un expelliarum. Expelliarum- Gritó el mortífago. Ethel salió disparada y chocó contra la pared- Expelliarum- volvió a decir apuntando a un jarrón que estalló delante de Ethel, provocándole diversos cortes.
-No toque a mi hermana- le gritó dándole un golpe en las costillas a su opresor, que cayó en el suelo.
-Niñas corred- les dijo su madre mientras sacaba su varita. Andraia ayudó a levantarse a su hermana y la llevó a la salida de su casa. Corrieron todo lo que pudieron, se dejaron caer en un césped que había en el camino, fue donde Andraia se dio cuenta que su hermana tenía un brazo roto y que la cabeza le sangraba por el golpe contra la pared y los cortes producidos por el jarrón.
Ethel se tumbó y cerró los ojos, cuando los volvió a abrir estaba en una sala blanca.
-¿Dónde estoy?- Se dijo a si misma.
-En San Mugo- Ethel se giró y allí estaba su hermana.
-¿Qué pasó?
-Te desmayaste…
-¿Y mamá?
-Esta bien, cinco minutos después de irnos se desapareció- Ethel suspiró aliviada.
-Por cierto mañana es lunes, Dumbledore dice que es mejor que nos quedemos en Hogwarts. Pero a ti todavía te quedan unos días, aquí.
-Vaya…pero si estoy bien, solo me duelo un poco la cabeza.
-Ethel, me diste un susto de muerte. Suerte que vino mamá- Andraia abrazó a su hermana menor.
-Tranquila… ya estoy bien.
-Bueno nos vemos dentro de un par de días. Dumbledore me obliga a irme ya – la besó en la mejilla.- te quiero- dijo mientras se iba.
-Yo también. Por cierto saluda a Remus de mi parte- Andraia se sonrojó mientras Ethel se reía- estas roja…
-Adiós Ethel,- le respondió con una sonrisa aún sonrojada.
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-Draia- Remus corrió hacia ella y la abrazó- estaba muy preocupado, leímos que habían atacado tu casa…
-Tranquilo, Remus…
-No sé que habría echo si te hubiera pasado algo- Andraia se sonrojó aún abrazada a él. Remus miró a un lado y a otro- ¿Y tu hermana?- Andraia se entristeció.
-Esta en San Mugo.
-¿Qué?- dijo Remus asustado.
-Quiso afrontar a los mortífagos y salió malherida. Gracias a eso conseguimos escapar. Pero no te preocupes ya esta bien.
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Andraia iba junto a Remus a la última clase del lunes donde habían quedado con encontrarse con sus amigos. Antes de llegar se cruzaron con un Snape malhumorado. La Gryffindor al verlo no pudo evitar reírse, todavía tenía la E tatuada en la frente.
-Muy graciosa Flammeus- le dijo con furia Snape.
-lo siento es que…- y volvió a reírse secundada por Remus- Pareces enfadado.
-Tengo motivos. Tu hermana no ha aparecido- Los Gryffindors pararon de reírse.
-No sabía que te importaba tanto.- dijo sorprendida.
-Me importa cuando tengo una perfecta venganza planeada.
-Ya me extrañaba.
-¿Dónde se ha metido?
-Esta en San Mugo- en eso que el timbre de inició de la clase sonó.-Bueno me voy a clase. Vamos Remus.
Severus se quedó helado ¿En St. Mugo? Notó que se empezaba a preocupar "¿Con quien me pelearé?"
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Remus y Andraia llegaron a clase y se sentaron en sus sillas habituales. Snape llegó, unos segundos después con el rostro muy serio.
-Te digo Remus que a Snape le gusta mi hermana...
-Pero que tonterías dices, cariño.- dijo riendo Remus.
-Creo que a mi hermana también le gusta...
-¿Te lo ha dicho ella?- le preguntó extrañado.
-No. Pero se pasa el día hablando de él...
-Pero Draia eso es porque lo odia.- intentó convencer a su novia.
-Yo me paso el día hablando de ti y no te odio- dijo con una sonrisa a lo que Remus se puso completamente rojo.- Me apuesto un Galeón a que acaban juntos.
-Trato hecho- Remus y Andraia cerraron el trato con un beso. En ese momento entró el profesor.
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Un par de días después, Ethel, regresó a Hogwarts. Entró en su sala común con todas las miradas fijas en ella, pues llevaba toda la cara llena de rasguño y el brazo vendado.
La chica les miró seriamente y los Slytherins continuaron con lo que estaban haciendo.
Severus sonrió, no sabía lo que le tenía preparado. Ethel miró su frente y ser rió. Subió a su habitación y abrió la cortina de su cama. Oyó una especie de soplido, seguido por una especie de tabla que le dio en medio dela frente.
-¡AY!- gritó Ethel. Toda la sala común lo oyó y a continuación un gritó que los dejó helados- ¡SNAPE!
Mientras tanto Snape estaba intentando aguantarse la risa. Bajó por las escaleras una Ethel furiosa, los demás Slytherins estaban presintiendo lo que vendría, mientras Malfoy estaba sonriendo.
-¿QUE COÑO HAS HECHO?- le preguntó furiosa Ethel, en la frente tenia escrita con tinta una rebuscada letra S.
-¿Sabes lo mejor?- se rió Severus- que esta tinta no se va hasta un mes después- Severus empezó a reírse a carcajadas. Mientras tanto unos Slytherins intentaban aguantarse la risa y otros estaban en silencio temiendo lo peor.
-Eres un estúpido, engreído y sabelotodo.
-Mira quien ha ido a hablar, niñata- Severus le señalaba la frente- te queda muy bien tu nuevo tatuaje.
-¡VETE AL CARAJO!- hacia rato que estaban gritando, toda la sala común estaba, ahora, en completo silencio, por lo que los gritos retumbaban entre las cuatro paredes. La puerta de la sala común se abrió precipitadamente.
-SANPE QUITAME ESTO O SI NO…-Esthel se quedó callada.
-O SI NO QUE?- le gritó Snape.
-SEÑOR SNAPE, SEÑORITA FLAMMEUS- dijo una voz grave detrás de Snape- ¿Se puede saber que hacen?- esperó unos segundos- eso mejor no contesten. 15 puntos menos para Slytherin para cada uno y una detención.
Ethel y Snape bajaron la cabeza, tendrían que esforzarse mucho para recuperar 30 puntos. El profesor se giró para irse, pero volvió a girarse hacia ellos.
-Estoy harto de sus peleas. Cumplirán la detención JUNTOS, o sea que espero que se comporten. Dentro de media hora en mi despacho- sin decir nada más se fue.
Ethel le dedicó a Snape una mirada de odio a la que él respondió, y subió a su habitación para ducharse e intentar sacarse esa estúpida letra de la frente. Pero lo único consiguió fue una S envuelta en una marca roja.
La chica bajó las escaleras enfurecida, por lo que todo Slytherin se apartaba a su paso. Era la norma número dos de un buen Slytherin "Nunca te pongas en el camino de un Slytherin verdaderamente enfadado". La uno era "Mantén a tus amigos cerca y a tus enemigos más cerca aún".
-Con lo tranquilos que hemos estado estos días sin vuestras peleas...
-Cállate Malfoy- le dijo Ethel al rubio.
-Estáis hechos el uno para el otro- se burló Lucuius- y con la inicial del otro en la frente, que romántico. –Lucius empezó a reírse. Ethel, simplemente, se dirigió hacia la puerta donde encontró a Snape. En todo el camino no dijeron nada.
-No se porque me molesto en castigarles, si no les importa y se siguen peleando- dijo resignado el profesor- No se que os haré hacer porque entre los dos habéis limpiado todo Hogwarts.
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La mente de Ethel volvió al presente y se dio cuenta de que había estado sosteniendo el manojo de cartas todo el rato. Dejó la carta que ya había leído sobre la mesa y siguió leyendo las demás.
-Vaya- susurró Ethel- esto va a ser muy difícil. ¡SNAPE!- llamó al profesor de pociones con la voz más angelical que tenía. Severus bajó las escaleras con una mirada desconfiada y alzando una ceja.
-¿Qué quieres?- le preguntó de mala gana.
-Me preguntaba si no te importaría que hiciera algo- continuo con su voz angelical, ahora adornada con una sonrisa. Severus la miró a los ojos y deducía que si le pedía permiso (pues era exactamente lo que Ethel estaba haciendo) para hacer algo era que ese algo no le iba a gustar en lo más minimo.
-No- dijo rotundamente.
-Pero si todavía no te he dicho de que se trata- dijo un tanto molesta por verse negada a una oportunidad.
-Solo se que no me va a gustar y con eso tengo suficiente- le dijo mirándola fijamente.
-Pues verás, el jucio de Sirius es este fin de semana y Albus no ha pedido si- a Severus empezaba a interesarle lo que Albus les había pedido, pero cada vez estaba más convencido de que no le gustaría. Ethel por su parte tragó saliva y en un susurró inaudible agregó- podrían quedarse Eileen y Harry.
-Habla más alto- le ordenó Snape. Ahora sabía del cierto que no le gustaría la proposición.
-Que si pueden venir Harry y Eileen- Snape abrió los ojos.
-NO. Potter no pisará mi casa nunca- dijo secamente.
-Vamos, Snape- dijo sonriéndole seductoramente y acercándose a él peligrosamente.
-Ni lo sueñes- dijo alejándose de ella, yendo hacia la cocina.
-Pasaremos al plan B- se dijo a si misma- SNAPE- gritó con voz enfurecida. Severus asomó la cabeza por la cocina- Tu harás lo que yo diha y no hay más que hablar.
-No Flammeus. No dejaré que tus sobrinos me vean fuera de Hogwarts y menos escondido... contigo.- dijo despectivamente.
-Pues te escondes.
-¡NO!
-Plan C- Volvió a susurrar para si Ethel- De acuerdo si dejas que vengan- dijo resignada- te deberé un gran favor.
-¿Cómo de grande?- preguntó repentinamente interesado.
-Enorme- dijo sonriendo. Estaba consiguiendo el efecto deseado. Snape sonrió ante esa idea- solo será el fin de semana.
-De acuerdo. Pero me debes un gran favor.
-Que si Snape...- después de arreglar ese asunto su mente volvió al pasado.
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-Ethel ¿que te ha pasado?- le preguntó su hermana, señalándole la frente.
-Snape se ha vengado por lo del baúl- Andraia no pudo aguantarse la risa.
-No te preocupes Ethel, nos vengaremos de ese apestoso Slytherin- dijo Sirius mientras le rodeaba el hombro y señalaba al infinito con un brazo.
-Sirius, gracias por tu ofrecimiento, pero me parece que esta vez me ocuparé yo- dijo sonriéndole sinceramente al Gryffindor.
-Siempre lo he dicho- le dijo Sirius a Andraia- Tienes una hermana que puede defenderse muy bien ella sola.
-¿Cuándo pensáis dejar de pelearos?- le preguntó su hermana aún con una sonrisa en sus labios.
-Cuando Snape madure…
-Lo dudo- susurró Sirius.
N/A: Solo os quiero decir que ya no queda mucho, oooooooooooooh! NO se cuanto porque aún no lo he dividido en capítulos pero no más de 5 puedo equivocarme. Me he dado cuanta de que ya llevo un año con esta historia, jejejeje. Como pasa el tiempo.
Nos vemos y Sed felices