Hola otra vez, ésta es la segunda parte de este lindo y romántico fic YohxAnna escrito por Apple-chan, quien (vuelvo a repetir) me ha dado permiso para traucirlo. Falta el último y tercer capítulo¡estará listo ya muy pronto!

GOODBYE

por Apple-chan

(Traducida por Amaltea-Sibila)

Parte Dos: Yoh

"Espérame"

La miré de reojo mientras cepillaba mis dientes.

Menos de dos días. Estarás partiendo en menos de dos días, Asakura Yoh.

Pasado mañana, estaré en un avión, en mi camino a América con mis amigos Shamanes. Las segundas preeliminares tomarían lugar en una aldea conocida como Apache, en algún lugar en ese país llamado Norteamérica.

Norteaméria.

Me pregunto ¿cuan lejos exactamente estaba de Japón?

Me pregunto ¿cuan lejos exactamente la Aldea Apache está de Funbarigaoka?

Suspiré y continué cepillando mis dientes. Probablemente más de la paciencia que tendría para contar. No puedo siquiera distinguir el norte del sur en un mapa.

Me pregunto que tanto le tomaría al avión ir de aquí a Norteamérica...

Me pregunto que tanto necesitaremos antes de encontrar la Aldea Apache. Es decir, los organizadores nos dieron tres meses para encontrarla. Solo que¿cuan difícil es encontrar una aldea?

No lo sé. Como dije, ni siquiera puedo leer un mapa correctamente. Ren y los chicos saben como leer un mapa, creo. Por lo menos, espero que sepan.

Bueno... eso es, algo así. Creo.

Alcé mi mirada al reloj. Dos minutos más antes de enjuagar mi boca. Cepillar los dientes realmente toma tiempo. Un mínimo de cinco minutos por sesión, y tres sesiones de cepillado al día. Esos son quince minutos de tiempo gastado solo en cepillar los dientes. Pero el cepillado de los dientes es vital para la salud de la dentadura, y en general, para la salud del cuerpo. Y por esa razón, nunca deben ser tomados a la ligera. O eso dice Anna.

Anna.

Casi la olvido.

No... No "casi la olvido". Siempre ha estado ahí, detrás de mí... corazón. Solo estaba... temeroso de pensar en ella.

No porque le tenga miedo. Esta bien, quizás eso sea parte de la razón. Correcto, correcto, quizás sea la mitad de la razón por la cual no pienso en ella, y mantengo los pensamientos que la implican detrás de mi corazón, era porque estaba realmente temeroso de ella.

Tenía miedo que si le mostraba alguna emoción concerniente a ella, podría... podría matarme. Bueno, no matarme realmente, pero sabes, lastimarme tanto que desearía morir si intentaba cualquier cosa... tratando de mostrar eso... bueno... que iba a extrañarla.

La otra mitad del porqué trataba de no pensar en ella, y en dejarla, es porque... eso..duele. Mucho.

¿Cuántos meses, exactamente me iría después de todo¿Tres¿Cinco¿Medio año? Quizás... un año entero?

Solo pensar en no tenerla cerca, digamos, un par de días, me hacía sentir... incompleto. De alguna manera.

Y solo pensar en dejarla... bueno¿ya lo dije no? Eso duele. Pensar en levantarme en la mañana y no verla, me duele. Pensar en dormir por la noche sin la seguridad de que estará en la otra habitación duele.

Y el pensamiento de... de que hay una posibilidad de que, en menos de dos días, cuando le diga adiós, podría ser la última vez que la vea...eso duele.

Es tan bello pensar positivamente. Que regresaré. Que todo estará bien, de alguna manera.

De que cuando regrese, ella estará aquí, esperándome.

Y que regresaré.

Pero podría no hacerlo.

Eso es por lo cual trato de no pensar en ella. En dejarla. Porque pensar en dejarla me provoca dolor, y pensar en ese dolor, me hace recordar que hay una posibilidad del cincuenta por ciento de que no regrese. Con ella.

Era difícil, como esto. La mitad de mí quería sonreír y decirle que "ganaré y regresaré", mientras que la otra mitad quiere solo... no lo sé. Hacer algo. Cualquier cosa. Cualquier cosa que me haga recordarla. Cualquier cosa que me haga seguir cuando ella no esté físicamente conmigo. Cualquier cosa.

La miré de reojo otra vez cuando terminé de cepillar mis dientes. Enjuague mi boca. Entonces miré el reloj.

Exactamente cinco minutos. Grandioso.

Menos de dos días antes de irme a América.

Menos de dos días, y aún no he podido decir adiós. A ella.

Es decir, es mi prometida, y con todo el entrenamiento y todo lo que me ha dado, le debo al menos eso, antes de irme.

Y le debo eso a mí mismo, también.

Necesito algo para recordarla. Me iré, pero voy a regresar. Y necesito tener un recuerdo de aquello por lo cual voy a volver.

Por -quien- iba a regresar.

Tomando la última parte de mi valentía, hablé. "Anna..."

"¿Qué?" Me miró de mala gana. Hice una mueca. Demasiado para eso. ¿Por qué estaba tan enojada...?

Es porque... ¿no le he dicho adiós aún...?

"Ah...ano...tú... quieres ir a dar un paseo con...migo...?" Pregunté con titubeo. Por favor di si, di que sí, di sí...

"¿Un paseo?" Repitió.

Asentí. Y cuando examiné su rostro, tuve un sentimiento de alivio. Ya no estaba enojada. Bien, Omedetto, Asakura Yoh, pensé, consolándome mentalmente.

"¿Con este clima?" Oh no. Eso es un titubeo¿escuché un titubeo en su voz...? Espero Dios que no. Quiero decir, hacía frío, pero no tanto...

¿O si...?

Oh, no importa. "Uh-huh" Sonreí. Fue la única cosa que pude hacer para no verme como un idiota. Pero quizás ya parecía un idiota incluso antes de empezar a hablar. Ah, bueno. ¿Por qué importaría de todos modos? Anna ya piensa que ERES un idiota, entonces es un tema irrelevante para meditar...

Un número de emociones confusas pasaron por su lindo rostro. Dios, es linda. Hermosa, de hecho... tan bella que yo...

Espera, espera un segundo...

Emociones confusas en su rostro...?

Eso... eso... la Kyouyama Anna que conozco tiene una cara que es muy difícil cambiar, entonces porqué...

¿Le pasa algo malo...?

"¿Anna?" Intenté. La llamé.

Pareció volver en sí. Su duro rostro se volvió a encender de repente. Pero estaba aún perdida en sus pensamientos, podía decirse.

No por mucho, pensé. "Esta bien". Dijo. Su cara aún era fría.

Espera... ¿dijo que sí¿Está de acuerdo?

Omedetto gozaimasu, Asakura Yoh. Gran trabajo. "¡Grandioso!" Podía sentir que mi emoción estaba probablemente escrita en toda mi cara. Y cuando me dirigí a mi habitación para ponerme algo de ropa, podría jurar que vi un rastro de expresión en su rostro.

Una sonrisa... eso la hacía tan bella...

Ahora entiendo porque nunca me sonrió demasiado últimamente. Si, en cualquier momento antes de que me fuera, ella me sonríe directamente, no creo estar listo para dejarla del todo.

No creo que incluso quiera irme. ¿Podría? Ver su sonrisa fue probablemente mejor que ser el Shaman King.

Tan calmado, este lago. Y tan bello, de noche. Incluso con este frío tiempo.

Y ella.

No la miré, en vez de eso, me incliné a través de la reja y miré directamente al lago, y al cielo. Y en la periferia de mis ojos la vi, y supe que estaba parada justo a mi lado.

No creo que nada más podría ser más perfecto que esto...

"¿Tres meses, no es así?" Su suave, pequeña voz interrumpió mi delirio.

El viaje a la Aldea Apache. Eso era de lo que estaba hablando. Me enfoqué en ella, y con un cabeceo, dije "Tres meses para llegar a la Aldea Apache..." Murmuré el último par de sílabas al lago. No la pude mirar más, no cuando ella me estaba mirado así.

No cuando ella me estaba mirando como si fuese a pasar mucho tiempo antes de me volviera a ver otra vez.

No cuando ella me estaba mirando como si todo eso le importara.

Como si yo --y mi pronta ausencia en su vida-- le importara.

Siguió un largo silencio.

Menos de dos días, Asakura Yoh.

Es aún tiempo suficiente. Tiempo suficiente para decir adiós.

Pero... ¿cómo decir adiós... cuando ni siquiera me quiero ir...?

Si lo analizas más...negativamente, eran solo un día y varias horas antes de irme. Para ser más preciso, un día y una hora con quince minutos y cinco segundos.

Esta bien, -- un día, una hora, y quince minutos ahora.

Necesitas decir adiós ahora. Ahora. ¿Por qué entonces le pediste salir a caminar?

Tengo derecho a eso. Puedo llevarla a caminar antes y ahora¿No puedo a caso? Me casaré con ella algún día, a fin de cuentas. Ella -es- mi prometida, después de todo.

Pero no había razón para que le pidieras salir en una caminata nocturna en este momento.

No, no hay razón. Solo sentí que quería salir a pasear con ella.

No, no es cierto. Si este fuera un día ordinario, estarías demasiado asustado para hacer algo como esto.

Admítelo ya. Quieres decirle adiós.

Sí, si quiero. Quiero decirle adiós.

Bien. Entonces¿qué estás esperando¡Hazlo ya!

Esta bien, esta bien.

Pero no quiero irme.

Y no quiero decir adiós.

Pero tengo que hacerlo.

¿Cómo dices adiós?

"Yoh." Anna. Anna está hablando. Me está hablando.

"¿Sí?" La miré curioso. No quería verla, pero lo hice de todas formas.

Y no pude dejar de verla después de eso. Solo continué observándola, examiné su perfil, sus ojos, su rostro, sus movimientos...

"Yo..." Pareció estar luchando contra alguna confusión interior. "Yo..." Su cuerpo tembló.

"¿Tienes frío?" Pregunté.

Ella asintió.

Vamos a ver. Sé que hay una de esas máquinas cerca de aquí en algún lado... ahí está. Fui hasta ella, saqué un par de yens de la bolsa de mi chaqueta y compré té..

Le ofrecí una de las latas a ella. Se había sentado en una de las bancas. Permanecí de pie, viéndola. Miró el té, entonces a mí. Entonces colocó la lata contra su mejilla suavemente. "Está caliente..." murmuró suavemente.

Bien... ¿hay algo más perfecto que verla así?

Ahora REALMENTE no quiero irme.

Pero probablemente me mataría si se le digo eso. "¿Estabas diciendo?"

Me miró, sorprendida. Ya no más su duro rostro. Sentí como si estuviera viendo a una totalmente nueva Anna-- una Anna que muestra sus emociones.

Me gusta. "Yo... Yoh, yo..." Estaba luchando con las palabras a decirme. Estas es la primera vez que la he visto incapaz de hablar. Y CONMIGO, además.

Quizás es por TI.

Bueno, eso es tranquilizante. Le asentí, animándola a seguir, a continuar con lo que estaba diciendo.

Me vio. Y quiero decir me observó, directamente a los ojos.

Esta bien, puedo morir ahora mismo...

"Si pierdes, nunca te perdonaré."

Estaba asombrado por eso. No exactamente lo que estaba esperando. Pero hey, es Anna. Tomaré lo que pueda obtener. "Lo sé. No perderé". Dije con una mueca.

"Bien." Sonrió y supe que había dicho lo correcto.

Comenzó a ponerse de pie, y en ese momento, supe que nuestro paseo --y nuestra charla--había terminado.

"Deberíamos volver a casa. Es tarde". Se paró completamente, limpió algo de su falda, y giró en dirección a la casa.

Espera... un momento. ¡Espera!

¡No he dicho adiós aún!

Estúpido, estúpido, idiota, idiota Asakura Yoh. Esperando hasta el último minuto. No sabes siquiera como decirle adiós¿sabes cómo?

Eso no importa, contradije a la voz que continuaba interfiriendo con mis pensamientos. Ya no más. No tengo más tiempo de sobra. Tengo que hacer algo... decir adiós, de cualquier modo posible. Decir adiós de cualquier manera que me haga recordarla... de un modo que me haría recordarla... de alguna manera que nos haga recordarnos.

Algo. Cualquier cosa.

Di un paso con dirección a su marcha. Es ahora o nunca. Di un paso más cerca.

Y más cerca...

Y más cerca... hasta que estaba parado directamente tras ella, mi cara 1 solo a un insignificante milímetro de su espalda.

Un reflejo, o instinto, no lo sé. Pero al siguiente segundo, mis brazos estaban a su alrededor en un cálido, posesivo, --casi frenético-- abrazo.

Y sentí su cuerpo descansando contra el mío.

Minutos pasaron como segundos. Segundos desaparecidos en la nada.

El tiempo detenido aún. O eso pareció, para mí. Para ambos.

Y pude sentir mi corazón latiendo. O era... ¿su corazón?

Estaba latiendo frenéticamente, casi... casi... como si estuviera llorando.

Como si ella estuviera llorando.

Estaba llorando. Estaba realmente llorando.

Yoh. Di algo. Di algo, rápido. Cualquier cosa...

No tenía duda. "Puedes golpearme ahora si quieres," dije suave, casi con reverencia. "no me importa. Pero esta es la única vez que haré esto. Necesito hacer esto antes de irme. Quiero recordarte. Quiero recordar por qué voy a volver."

Por -quien- voy a volver, pensé.

Pero no lo dije en alto.

No respondió, pero no la sentí luchando tampoco. Dios, espero que no se niegue a mi abrazo.

No lo hizo.

"¿Estás enojada conmigo?" Tuve que preguntar. Me sorprendería si lo estaba.

Negó con su cabeza. Di un suspiro de alivio. "Bien." Más que bien, pensé. Maravilloso. Puse mis brazos a su alrededor aún más fuertemente, saboreando el sentimiento de ella contra mí.

ESTO era el cielo.

¿Cómo puedo dejarla después de esto? Me pregunté.

"Yoh..." Tocó mis brazos... y mis manos. Pero no me hizo aún lado. Tocó mis brazos y mis manos como si quisiera que estuvieran ahí, alrededor de ella.

Como si quisiera que la abrazara.

Y nunca marcharme.

"¿Anna?" Me pregunto que quiso decir.

"Yo..." Una respiración profunda. "Yo..." Estaba peleando con las palabras otra vez. Y nunca pensé que ANNA podría alguna vez titubear en palabras para hablar CONMIGO.

"¿Qué es Anna?" Miré a su rostro desde donde estaba. Mi cara estaba tan cerca a la suya...

Movió su cabeza. Las lágrimas... estaban cayendo de su rostro..."Solo...solo...regresa conmigo¿esta bien?" Su voz se rompió por un pequeño instante mientras decía esto.

Dijo eso... como si quisiera que regresara.

Lo que significa, que está aceptando que me voy a ir. Y estaba lista para eso.

Y al oír eso--quizás yo también.

Estoy listo para irme. Sé que estará esperando por mí. Esperando mi regreso.

Y sonreí. "Lo haré" La abrasé incluso más fuerte. "Claro que regresaré".

Y sería mejor si estás aquí cuando regrese.

Sería mejor si me esperas.

"Yoh."

"¿Sí?"

"Yo..." Hizo una pausa. Muy breve. "Te extrañaré".

Pienso que eso es lo que había estado tratando de decirme todo este tiempo. Eso era por lo cual estaba luchando tanto. No quería decirme que iba a extrañarme.

Mostré una pequeña sonrisa. "Yo también te extrañaré."

Podría jurar que escuche una leve risa de ella. No creo que incluso ella misma lo notara.

Parados aquí, por un momento, yo sosteniéndola, y ella apoyada en mi.

El sonido de su corazón latiendo contra el mío fue extrañamente reconfortante. Estaba latiendo de la misma manera, como si estuviera... sintiendo lo mismo que mi corazón estaba sintiendo.

Y ella no necesitó decirlo. Lo supe. Lo sentí.

Solo regresa conmigo... un tenue susurro, viniendo de su corazón.

Espérame, respondió mi corazón.

Espérame.

Notas de la Traducción:

1 "My front", se refiere a la parte delantera de su cuerpo, pero "frente" o "delantero" se oye extraño.