Bakura despertó lentamente, con dolor en su espalda. Se sentó, y recorrió el lugar con la vista, para darse a entender que estaba en su casa. Suspiró pesadamente, y se levantó, tambaleante.

Encontró a Ryo dormido sobre un libro, con sus brazos cruzados, en la mesa de la cocina. Le besó la frente sutilmente, despertándolo.

-Buenos días...-le acarició suavemente su melena blanca.

-¿Cómo te encuentras?-dijo sentándose en la silla y estirándose un poco.

-Un poco mejor. Mi espalda ya no me duele tanto pero me molesta un poco.

-De acuerdo. ¿Quieres té?-preguntó levantándose de la silla.

-Muy bien. De hierbas.-se sentó en el mueble en el cual Ryo estaba sentado hace unos momentos.-¿El Alquimista? Nunca he tenido la oportunidad de leer este libro.

-Ya lo leí varias veces. Si quieres puedes empezar a leerlo. No hay problema.-dijo esperando hasta que el agua se calentara.-¿Quines eran esos hombres?

-Cazadores.-respondió ojeando algunas páginas del libro.

-¿QUIÉN era?-Bakura suspiró.

-Fue antes de conocerte, cuando eras niño. O sea, hace más de 10 años. Me encontré en un bar a una mujer, muy hermosa. Cabellos azules radiantes, ojos grises aperlados, una tímida y feliz sonrisa. La mujer ideal, para el hombre ideal, por decirlo de algún modo. Emuri...Es un bello nombre. Así, se llamaba mi hermana, hace 5.000 años atrás, en Egipto. Comenzamos a salir, y terminamos siendo amantes.-Ryo le entregó la taza con el té y un poco de azúcar, para sentarse a su lado.-Me confesó que era una cazadora, y yo que era vampiro. Pero seguíamos firmes a nuestro amor. Tenía un hermano. Klotski. Ruso, lo sé.-dijo al ver la cara de su amado.-Pero Emuri prefería llamarle, Klot, para acortar. Era más fácil. A él le gustó y se cambió de nombre. Ahora es Klot. Nos descubrió, en la plaza, besándonos. Ese día cumplíamos un mes estando juntos. Se enteró que era vampiro. Así comenzó nuestra persecución. En realidad me quería a mí, y no a ella...-hizo reír un poco a Ryo, quien lo besó en la mejilla, abrazándolo.-Ambos estábamos huyendo del escondite. Yo me encontraba herido de gravedad, al igual que ella, y no nos podíamos defender incluso nosotros mismos. Llegamos a la azotea, dónde había varios crucifijos. Yo caí al suelo, ante el poder que tenían sobre mí, doloroso. Llegaron los demás, y ella me defendió. Me eligió a mi, y no a su hermano. Lograron separarnos, pero al momento que dispararon las flechas, ella se interpuso...-Bakura apretó la taza en sus manos.-No pude hacer nada. Estaba tan agotado y con múltiples heridas, que prácticamente no podía moverme, sino, la hubiera salvado. Ella murió, sobre mí, mientras yo lloraba su perdida. Me susurró, las palabras que a mi tanto me agradaba oír. "Te amo, Kura...."

-¿Quién te salvó? Estabas herido.

-Marik. Se enteró, no sé cómo, y logró sacarme de allí junto con el cuerpo de Emuri. La enterramos en un lugar especial del cementerio, dónde está cubierto de flores. Un lugar que le fascinaba. Voy a dejarle flores, cada día en que cumpliríamos nuestro aniversario....

-La amabas mucho, ¿Verdad?

-Tanto cómo lo hago ahora contigo, Ryo...

*

Los padres de Ryo entraron en la casa, y vieron una nota sobre la mesa de la cocina.

"Fui a la casa de Bakura, a hacerle un poco de compañía. Estaré pronto en casa. Besos, Ryo"

-Al menos nos dejó una nota para saber por dónde anda ese chico...-regañó Yatén.

-Querido, tiene edad para hacer lo que quiera. Ya no tiene seis años...

-Pero los tuvo...

-Los tuvo. Ya no los tiene.-replicó Sakura, mientras llevaba su maleta a su habitación.

Yaté miró una vez más la nota, y fue a ayudar a su esposa.

*

Malik veía desde las sombras de una esquina, cómo su hermana leía el libro de "Erotismo Sangriento" de Daylan Jones. (N/A: Hum...No me acuerdo perfectamente el nombre del autor...)

-Marik, ¿podría, por favor? La he extrañado tanto...

-Si, pero ella piensa que estás muerto. Recuerda que eso fue hace más de 10 años. ¿Qué pensaría una mujer de 31 años, cuando viera a su pequeño hermano de 16 años parado frente a ella?

-Le explicaré la verdad.

-Si lo haces, pondrás en peligro su vida, y no quieres eso, ¿Verdad?

Malik sollozó en silencio mientras veía a su hermana contemplar una foto de ella y su hermano, sonriendo, en un hermoso día soleado de verano. Se levantó, y tomó el portarretrato, observándolo detalladamente, mientras dejaba escapar sus lágrimas.

-Malik, ¿Por qué te fuiste?-lloró más fuerte, haciendo que Malik llorara igual que ella.-Te extraño tanto...Odio estar sola en esta gran casa...Shadi no ayuda mucho. Te necesito hermanito...

En ese instante, Malik dejó de llorar, de sollozar, de todo, y analizó detalladamente la frase que dijo Isis. "Shadi no ayuda mucho..."

Antes de que Marik pudiera predecir que iría a hacer su amado, este ya estaba gritando furioso.

-¡¡¡¿¿¿SHADI!!!??? ¡¡¡ODIO CON TODA MI ALMA A ESE HOMBRE!!!-a Marik se le cayó la quijada al suelo, al ver que fue lo que hizo su compañero.-¡¡¡TODOS PERO MENOS SHADI!!!-luego de haber gritado, Malik se percató de lo que hizo.-Perdón....

-¿¡MALIK?!-gritó Isis, estupefacta.

Frente a ella, se encontraba su hermano fallecido, pero ¿vivo? Eso era imposible. Estaba muerto, y eso fue hace más de 10 años...

Se llevó las manos a la boca, llorando aún más fuerte.

-Malik...-susurró dolorosamente, mientras que el chico lloraba fuertemente, con su rostro bajo.

El moreno miró a su vampiro, y este le asintió, esperando que su hermana pudiera comprenderlo todo.

-Hermana...-pero fue callado por el cálido y dulce abraso de ella, atrayéndolo lo más que pudo a su cuerpo.

-Malik, Malik...No llores, cariño, todo esta bien, tu hermana está aquí, contigo. Ssshhh....No llores mi pequeño hermanito, no llores....

-Y esa es la verdad...-terminó Malik, apretando fuertemente la mano de su amado, que se encontraba detrás de él, con sus manos en sus hombros.

-Sola tantos años...¿Sólo por esto?-dijo enojada y dolida a la vez la mujer.

-Sé que estás enojada conmigo, pero si te lo hubiera dicho de una, tu vida correría peligro, y no quería que te mataran. Tuve que esperar mucho tiempo para poder venir y decirte esto. Lo lamento....-dijo haciendo que lagrimas rodaran nuevamente por su rostro.

-Malik, ¿Dónde has estado todo este tiempo? Era lo que me preguntaba, cuando saliste a bailar. Ya eran las 4 de la madrugada, y no habías regresado. No sabes lo preocupada que estaba....

-Perdóname...-pensó unos segundos y dijo.-Pero que digo. No podrás perdonarme por lo que hice, ¿Verdad? Fui un egoísta. No pensar en lo que sentirías...Soy un chico malo...-se dijo a si mismo sollozando.

-No lo eres Malik, sólo a veces un poco torpe, pero no un chico malo.- respondió ella sonriéndole cálidamente.-Ahora, ¿Shadi podrá saberlo?

-Sólo si es de mente abierta, cómo tú.-advirtió Marik.

-Bien. Entonces esperemos.

-¿Por qué demonios estás con él?-preguntó Malik con una venita en la cabeza.

-Me gusta Shadi. Al igual que a ti te gusta...ehh...-dijo señalando a Marik.

-Marik...

-Si, eso.-regañó la chica.

*

-Ya llegué...-dijo Ryo al entrar en su casa.

-¡¡Hola hijo!!-dijo alegremente su madre.-¿Cómo has estado, Ryo?

-La pasé bien. ¿Se divirtieron ustedes?

-Si, sólo que tu padre vomitó al estar en la punta de la torre Eifel.

-¿A papá le da vértigo?-exclamó Ryo con puntitos en sus ojos.

-Al parecer, si.

-¿Cómo "Al parecer"?

-No sabía que tu padre tenía vértigo.-Ryo quedó en silencio un rato, y luego exclamó gritando.

-¡¡¿¿QUE NO LO SABÍAS??!! ¡¡ESTANDO CASADO CON ÉL Y NO LO SABÍAS MAMA!!

-Pues perdóname. Tu padre también tiene la culpa de no haber dicho absolutamente nada al respecto.

Mientras el chico y su madre peleaban, Yatén permanecía escondido detrás de la pared de la cocina escuchando, pero sin salir de su escondite.

-Mejor no me meto. No quiero salir herido...U_U