N/A:
Parece que esta vez si me tardé un poquito para actualizar... Bueno, en realidad ya tenía hecho el capítulo, pero a la mera hora no me gustó como había quedado y lo volví a escribir; además de que tuve que hacer uno de esos latosos trabajos en equipo en los que uno casi no se pone de acuerdo. Pero bueno... Aquí está la continuación del fic, espero que les guste tanto como me gustó a mí escribirlo... También quiero dar muchas gracias a los reviws que me mandan, en verdad que me motivan mucho a seguir escribiendo. Muchas gracias.
Aviso: Harry Potter no es mío y todo eso.
Capítulo 4: Dragon Tears
La clase de Herbología era la última del día, después de ella estaban prácticamente libres para hacer lo que quisieran.
Mientras tanto él y sus amigos se encontraban recogiendo algunas de sus cosas al tiempo que le ayudaban a la profesora Sprout, de manera que salieron mucho más tarde que los demás alumnos, todo por Hermione, quien deseaba siempre dar una buena impresión a los maestros.
--Ay Mione, de verdad que no le veo el caso a quedarnos más tarde en las clases... Me refiero, tú siempre tienes la máxima calificación, ni que las décimas extras de trabajo te ayuden de mucho... --Le reprochó Ron, quien ya estaba más que harto por quedarse una hora más tarde de lo que cualquier estudiante debiera salir.
--Bueno... ¿Y ustedes?
--No, pues sí... Pero me da flojera --Dijo esta vez Harry, quien fue correspondido por un asentimiento rápido de su amigo.
--Par de flojos... Pero estoy segura que algún día se van a arrepentir de lo que acaban de decir y me van a implorar que volvamos a hacerlo para que puedan sacar sus décimas extras y así poder pasar las asignaturas que reprueban! --A lo que los dos muchachos se quedaron viendo fijamente.
--Pero yo no he reprobado asignaturas... --Habló esta vez el chico pelirrojo.
--Ajá... --Le dijo con sarcasmo para después -como recordando algo- apresuradamente decir: --Bueno, como sea, debo ir a la biblioteca porque voy a... ¿cómo se dice?... a sí; Voy a hacer mi tarea, los veo al rato --Y luego de esto se echó a correr a la susodicha biblioteca.
--Ehh... ¿Harry, no te has dado cuenta de que últimamente Hermione anda muy rara? --Le comentó su amigo después de ese extraño comportamiento por parte de su amiga. Aunque, ¿Cómo podría? todo el tiempo se la pasó pensando en una sola persona, quien aunque extraña pareciera, se trataba de nada menos que Malfoy.
--... No... --Contestó Harry.
--Hermione no es la única que se ha comportado extraño, Harry --Le dijo su amigo echándole una mirada acusatoria.
--Ehhhhhh... ¿A qué te refieres, Ron? --Preguntó Harry nerviosamente... Pudo Ron, después de todo, haber notado alguna cosa.
--Ay, no te hagas Harry... Si actúas como enamorado, ¡se te nota al instante!
--¡¿Enamorado?! --No podía creer que realmente se le mirara de esa manera, su amigo debía estar muy equivocado.
--Claro que sí, Harry; Mira, primero te quedas pensativo, luego bueno también estabas pensativo, tan pero tan pensativo que, bueno, ni siquiera le diste importancia al hecho de que Malfoy haya sido tu pareja en Pociones, claro, antes de que la caldera de Neville explotara, digo... Y para variar, sigues así... Es la misma cara que pones cuando vez a Cho Chang, si me permites decirlo... --Le explicó brevemente su amigo.
--Pero yo no... Ella ya no me...
--Ya Harry, yo que tú no tendría porque avergonzarme de pensar en Cho, ¡lo haría si empezase a pensar en Malfoy! --Ese definitivamente fue un gran consuelo de parte de su amigo, y una gran ironía de igual modo.
--Sí... Tienes razón --Le dijo muy incomodó.
--Bueno, sabes Harry, si no nos apresuramos no veremos ni una décima de la comida que han servido... Vamonos al comedor, Harry. ¡Corre! --Le gritaba su amigo jalándolo por el brazo con intención que siguiese su ritmo, sin fijarse siquiera en su camino. Y para su sorpresa sintió como chocaban con alguien, haciendo caer a esa persona al suelo.
--Lo siento, no nos fijamos --Dijo el pelirrojo hacia la persona que seguía en el helado piso del pasillo sin notar de quien se trataba.
--Me doy cuenta que no... Especialmente tú, Weasley. No sueles ver más allá de tu nariz. --La persona con quien habían chocado era una de las últimas con quien desearía toparse en ese momento. Draco Malfoy dijo eso último todavía tirado en el suelo, mientras se levantaba y sacudía su túnica lentamente.
--Bueno, pues como te das cuenta, ni Harry, ni yo deseamos ver cosas podridas antes de la comida --Habló su amigo mirándolo con furia contenida.
--¿Comida?
--Sí, ¿Te haces a un lado? --Le dijo Ron bruscamente, dando un paso hacia adelante con el propósito de intimidar al chico que se encontraba frente a él, cosa que por la situación, no sucedería --Tengo prisa.
--Para como van las cosas, tú serías quien debería hacerse a un lado --Le comentó Malfoy, Harry pudo observar claramente como el otro permanecía tranquilo, su rostro no reflejaba mucho, Harry comprendió como estaba siendo -en cierto punto- accesible, a diferencia de su amigo del cual sus ojos despedían centellas de enojo.
--Te lo advierto, Malfoy... Hazte a un lado, no lo pienso repetir --Habló el pelirrojo mostrando su puño muy cerca de la cara del otro, a lo que su enemigo simplemente lanzó un suspiro divertido, sin darle la menor importancia a su amenaza.
--Debí imaginarlo... Tienes una capacidad cerebral tan grande como un chimpancé... ¿No será de familia?
--¡¡Cállate!! ¡¡Con mi familia no te metas!! --Ron empezaba a desesperar.
--Oh. Pero no te preocupes, Weasley. Si tienes suerte, tal vez puedas ser un mediocre como tu padre... --Este último comentario provocó una notoria reacción en su amigo, pues, sí no lo hubiese detenido, habría saltado sobre Malfoy.
--¡¡Suéltame, Harry!! Se lo advertí, ¡¡¡le voy a dar lo que se merece!!!! --Gritaba su amigo pelirrojo mientras intentaba soltarse de su agarre, Harry sabía muy bien cuan impulsivo podía llegar a ser Ron.
--Como sea... Antes de irme...: La hora de la comida ya ha acabado... Pero supongo que comerán de todas formas... --Les dijo esto último mientras se alejaba hacia donde iba a un principio.
A Harry le costó mucho poder calmar a su amigo de nuevo, seguía verdaderamente molesto por lo que acababa de acontecer, especialmente porque al llegar al comedor encontraron que la comida ya había desaparecido.
Aún así decidieron comer en las cocinas, de ahí, todavía cargados con una buena munición de panecillos, decidieron alcanzar a Hermione quien se encontraba en la biblioteca.
Al llegar allá tardaron un poco en encontrarla pues se había sentado en una de las mesas más alejadas de la puerta de la biblioteca, aunque fue sencillo ubicar su enmarañado cabello marrón. Ella se encontraba, tal como lo suponían, leyendo un libro bastante grueso, aunque, cuando quisieron acercarse ella pareció ponerse nerviosa, pues cerró el libro apresuradamente.
--¿Chi... Chicos? ¿Qué hacen aquí... eh? --Preguntó su amiga un poco nerviosa, cosa de la cual pudieron percatarse.
--¿Qué pasa, Mione? ¿Qué? ¿No querías que viniéramos a hacerte compañía? --Para esos momentos su amiga parecía estar mucho más tranquila.
--Sí... Nada más que se me hizo raro... --Harry se perdió en un momento de la conversación al notar que del otro lado de la biblioteca, en una mesa solitaria, se encontraba Blaise Zabini leyendo algo.
--Oye... ¿Harry? ¿Por qué estás viendo al amigo de Malfoy? --Preguntó Hermione curiosamente, mientras se podía observar a simple vista como la expresión en el rostro de Ron cambiaba a repulsión.
--No, por nada, es solo que... Bueno, me estaba acordando de lo que pasó esta vez...
--¿Qué pasó? --Preguntó su amiga con una mueca preocupada, aunque pudo observar que ninguno de los tenía ánimos de relatar su encuentro con su enemigo.
--Es verdad... Ese estúpido de Malfoy... Lo detesto... Me encantaría estar aunque sea un momento a solas con él... Un momento y podría cobrarme todas las que nos ha hecho... --Habló su amigo lleno de enojo contenido mientras Hermione intentaba calmarlo y él sin poder evitarlo, estaba de acuerdo con él.
--Pero Ron, tú sabes perfectamente que hay nada que puedas hacer...
--En eso te equivocas... --Dijo Ron oscuramente, haciendo que la atención de sus amigos se centrara en él. Se le escuchaba como cuando tenía un buen plan.
--¿Qué quieres decir, amigo? --Esta vez fue Harry quien preguntó, sin darle importancia al hecho de que se estaba ahogando con el pan.
--He estado pensando... Que... Bueno, ¿sí o no sería maravilloso poder cobrárselas todas a Malfoy?
--Creo que sé por donde vas y quiero decirte que...
--No Mione, a diferencia de lo que piensas no es nada malo --La cortó Ron --Es más... Creo que es lo mejor que se me ha ocurrido...
--¡Ya escúpelo!
--Se me ocurrió un plan para vengarnos de Malfoy... Sin lastimar a nadie claro está --Dijo esto ultimo viendo a Hermione, a lo que ambos hicieron un gesto a señal de que continuara --Bueno, pero acérquense más --Y cuando los tuvo lo suficientemente cerca empezó. --Muy bien... Este es el plan; verán, desde hacia tiempo me he dado cuenta que un poco después de salir de clases, Malfoy pasa siempre por ese pasillo --Dijo señalando uno que tenía columnas --Va a la oficina de Snape... Había pensado en alguna clase de trampa colocada por allí... Algo divertido...
--¿Qué clase de trampa? --Esta vez fue Hermione quien habló, estaba intrigada.
--¿Qué les parecería dejar a Malfoy colgado con su ropa interior de fuera a la vista de todos...?
--Quizás simplemente dejarlo colgado... --Aceptó Hermione dejando sorprendido a Harry, en condiciones normales ella habría sido la primera en oponerse.
--Muy bien... jejeje... ¿Qué dices tú Harry? --Harry estaba nervioso, no sabía que contestar, aunque Malfoy era un pequeño bastardo últimamente había pensado cosas extrañas al topárselo, aunque definitivamente ese último encuentro le dejo un muy mal sabor de boca.
--... De... acuerdo... ¿Cuándo lo hacemos? --Preguntó finalmente Harry.
--Cuando sea el momento preciso... --Todavía no se sentía seguro acerca de eso, era como si alguna voz interna intentase decirle que algo estaba equivocado, que no debía hacerlo... ¿Pero como decir que no a sus amigos? ¿Cómo negarles la oportunidad de cobrarse los insultos y humillaciones que habían recibido?... Tendría que apoyarlos........
...
La noche había llegado más pronto de lo habitual, una noche invernal; el frío se sentía presente ahora en la torre de Gryffindor y se podía ver claramente desde la ventana como había comenzado a nevar, sin embargo, ni siquiera el hermoso paisaje invernal podría hacerlo dejar de pensar en todo lo que había sucedido ese día; desde lo de Malfoy y Zabini hasta lo que su amigo les había propuesto... Todo eso era tan confuso para él...
Se volteó de lado en un intento por encontrar una posición más cómoda, que le pudiese hacer terminar con su insomnio, sin embargo el resultado fue el mismo. Su cabeza estaba demasiado cargada con información que no podía procesar, su mente estaba conciente que debía descansar, sin embargo todos esos recuerdos y situaciones seguían rodando en su mente, una y otra vez.
Decidió que no podría dormir, así que podría dar un paseo por los corredores, como últimamente se había vuelto su costumbre, un paseo nocturno para despejar un poco su contrariada mente no le haría nada mal.
De manera que quitando los pesados edredones de su cuerpo, Harry se incorporó para salir de la habitación, pensó que, ya que sería un paseo rápido, no habría necesidad de llevar la capa de invisibilidad. Con ese pensamiento salió de Gryffindor. Le fue sencillo pasar por el retrato, ya que la obesa dama dormitaba apaciblemente.
Una vez en los pasillos empezó a meditar acerca de los hechos que habían acontecido el ya anterior día. Lo primero que llegó a su mente fue el sentimiento que tuvo al ver que Blaise Zabini se encontraba ahora en amistad con Malfoy, quien por cierto seguía siendo su enemigo.
Podía conocer algo, y eso era que Malfoy siempre le prestaría un poco de su atención, ya sea molestando, intentado humillarlo o en algunos casos insultándolo. Aunque no quisiera aceptarlo, todas sus especulaciones siempre llegaban hacia el mismo punto: Le interesaba mucho que Malfoy pusiera su atención en él, le agradaba tener aunque sea un 10% de la atención de su enemigo... Y eso no era algo que pudiese calificar como algo dignamente correcto, al menos no para él.
Y aunque no muy satisfecho con el primer resultado, decidió pasar hacia su otro pensamiento que ocupaba mucho espacio... La venganza de Ron.
Sin embargo no pudo continuar con su meditación pues se topó con un hecho que lo sorprendió de sobremanera. Él había estado pasando por los ventanales que cubrían las paredes de ese pasillo, nunca se habría esperado encontrar a una persona sobre el marco de una de ellas. Decidió acercarse más a la persona, con sumo cuidado de no ser descubierto, hasta cierto punto que pudo ver de quien se trataba.
La figura era inconfundible; Piel extremadamente blanca, cabello rubio platinado, cubierto por una sabana del verde de Slytherin, se trataba de nada menos que Draco Malfoy. A simple vista se podría decir que no existía nada de especial en la escena. Harry lo observó más detalladamente.
Esa persona que se encontraba en el alfeizar de la ventana no era el mismo Malfoy con quien había estado esa tarde. Al notarlo mejor, pudo observar como los hombros del muchacho se movían un poco, y su cabello, que normalmente se encontraba meticulosamente peinado hacia atrás, ahora caía de una manera desalineada por su rostro.
Se acercó un poco más para contemplarlo mejor, y, no pudo evitar percatarse de que Malfoy intentaba bruscamente quitar sus lágrimas de su rostro, pudo comprender que en ese momento se encontraba llorando, algo debía estar muy mal con él. No podía evitar mirarlo sin sentir pena por él, no podía dejar de mirarle intentar luchar contra las lágrimas que parecían salir en contra de su voluntad, frente a sus ojos se encontraba aquel chico frío, hijo de Lucius Malfoy, un mortifago importante, y por más que intentase ser indiferente a esta situación, no podía abstenerse de preguntarse qué motivo tendría tal efecto en él. Era tal su concentración que no se dio cuenta que se le había quedado mirando mucho. El otro chico ahora se encontraba quieto abrazando sus piernas contra su pecho, sin hacer algún movimiento, hasta que su cabeza giró en dirección a Harry, y fue cuando sus miradas se cruzaron.
Malfoy parecía sobresaltado, Harry también se encontraba sorprendido, pues aunque sonase ilógico, no esperaba que Malfoy volteara hacia él.
Malfoy pareció querer buscar la frase adecuada para esa situación, sin encontrarla, Harry simplemente seguía mirándolo. El otro logró bajarse de la ventana y respirando profundamente pudo estrechar sus ojos de una manera fría.
--¿Qué estás haciendo aquí, Potter? --Si no hubiese visto lo anterior, podría haber jurado que era el mismo Draco Malfoy de siempre.
--Daba un paseo --Por alguna razón, sintió la necesidad de contestar con la verdad.
--¿Cuánto tiempo llevabas allí? --Le dirigió otra pregunta directa, mientras caminaba en dirección a él, deteniéndose cuando se encontró aproximadamente a un paso de él.
--Lo suficiente --Ante esta respuesta el otro estrechó sus ojos peligrosamente, y tenía que reconocer que, aún habiendo visto la fase anterior esa mirada podía seguir inquietándolo.
--Supongo que mañana tendré el "gusto" de escuchar este encuentro por los corredores a temprana hora... ¿No Potter? --Se le escuchaba molesto, pero no pudo impedir escuchar que su voz sonaba un poco ¿herida?
--No pienso decírselo a nadie, si a eso te refieres --Sintió como la mirada de parte del otro se volvía más penetrante, haciéndolo bajar un poco la suya propia.
--... ¿Por qué?
--¿Cómo que "por qué"? --Preguntó Harry confuso --Si te refieres a por qué no le voy a decir a nadie es porque pienso que no tengo el derecho a revelar esto si tu no quieres... Sólo por eso.
Malfoy no dijo nada, simplemente bajó su cabeza provocando que su cabello cayera sobre su rostro, cubriéndolo.
Después de un rato, estaba por preguntarle si se encontraba bien, sin embargo, pudo observar claramente como las lágrimas se deslizaban de las mejillas de su enemigo.
--¿Malfoy? ¿Qué te pasa? --Preguntó Harry tomándolo por los hombros, sintiendo como temblaba. Así que aprovechando la oportunidad, lo guió hacia la ventana donde el otro había estado y le hizo sentarse.
Y aunque ya no había más lágrimas en su rostro seguía estremeciéndose; nunca pensó estar en una situación así, ciertamente había visto llorar a su amigo Ron, a Hermione, podría ver cientos de veces a Neville, podría ver a Seamus, pero nunca a Draco Malfoy, era algo que no estaba en sus expectativas para esa noche, era un suceso completamente imprevisto.
--Malfoy, ¿Por qué lloras? --Preguntó Harry de pronto, cuando éste ya se hubo calmado y seguía con su cabeza baja. Aunque esta pregunta al parecer hizo salir a aquel chico del letargo en el que se encontraba pues rápidamente se levanto del marco de la ventana.
--Es algo que no te incumbe, Potter --Le dijo con un tono de voz extraño, después de unos instantes comprendió que intentaba crear el mismo tono indiferente de siempre sin un buen resultado.
--Escucha... Quiero ayudarte...
--¿Por qué?
--Porque aunque no lo creas no me gusta ver llorar a las personas --Le contestó el pelinegro.
--Tal vez Potter, si seas lo que pareces ser...
--¿Qué? ¿A qué te refieres? --Estaba confundido, que quería decir con eso, ¿lo consideraba un hipócrita o algo?
--Supongo que puedo confiar en ti... Pero si llegases a decírselo a alguien... --Le amenazó, para después caminar en sentido contrario.
Esta ocasión, Harry, sin dudarlo dos segundos, le alcanzó tomándolo nuevamente por el brazo, no se iba a quedar así, toda esa situación era muy extraña como para quedar sin una solución.
--No... ¡No te irás! --Le dijo sin siquiera pensarlo, Harry, actuando como un verdadero Gryffindor en el proceso.
--¿De qué estás hablando, Potter? --Le respondió Malfoy, en su rostro podía observarse un dejo de confusión claro.
--No te irás hasta que me digas que te sucedió... --Le dijo seguramente.
--Mira, Potter, no tengo ninguna obligación de explicarte nada... ¿Me oyes? Somos enemigos, e-n-e-m-i-g-o-s... --Le dijo el otro de una manera bastante agresiva.
--Pues entonces me gustaría cambiar eso... --No meditó sus palabras, simplemente las dijo, así, como si nada. Como si todos esos años de insultos y humillaciones nunca hubieran pasado.
--¿Qué? ¿Estás conciente de lo que dices? --Le preguntó el otro.
--Sí, bueno, sé que suena raro pero es cierto... Tal vez sería mejor no estar enemistados, ¿no crees? --Le respondió Harry mirando su rostro.
--Lo que tratas de decir es que... ¿quieres ser mi amigo? --Preguntó el otro con mucha más desconfianza todavía.
--... sí... eso creo...
--No... Esto está mal... ¿Estás burlándote de mí?
--¡No!.... Lo prometo --No sabía como convencerlo de que lo que decía era la verdad.
--Bien... En ese caso... ¿Amigos? --Le dijo extendiendo su mano lentamente, quizá temía sufrir algún otro desaire de su parte. Harry miró durante un momento su mano extendida y la tomó... Supo entonces que había aceptado una amistad con Malfoy, y no sólo la aceptó, sino que ¡él mismo la propuso! Llegó a pensar que era un sueño, un sueño bastante extraño para ser real, aunque una oleada de frío en su espalda que le hizo estremecerse le obligó a comprender que no era así.
--Eres un estúpido, Potter. --Le dijo el otro, lo que le llegó a sorprender pero le hizo cambiar de expresión al notar que el muchacho se quitaba la sábana de encima para colocársela a él mismo. --Hasta mañana... --Le dijo de una forma fría mientras se alejaba.
--¡¡Malfoy!! ¡Aún no me has dicho lo que te sucede!
--Hablaremos mañana y tú me devolverás eso -- su voz se escuchó de igual manera que de costumbre, perdiéndose entre la oscuridad de los pasillos dejándole allí, en medio de la luz blanquecina de la ventana y envuelto en una sábana de Slytherin......
Se preguntaba como repercutirían sus acciones de esa noche para futuro... Ahora era "amigo" de Malfoy...
De nuevo quiero dar muchas gracias a las personas que me mandandaron reviws, de verdad que se los agradezco...
respuesta a REVIEWS...:
Shinigami: Holas, me encanta tu nick! .... La verdad es que yo también he intentado por todos los medios conseguir algún lugar en el que haya blaise/draco y no encuentro en español, pero si hay varios buenos en inglés. Siento que en este capítulo no haya salido casi Blaise pero prometo que en el siguiente SI saldrá, y tal vez esta historia de un giro... Me encantaría ser tu amiga y mi correo es: maya_malfoy@hotmail.com si quieres ponerte en contacto conmigo. ^--^
Paola: Muchas gracias por tu comentario, estoy feliz de que les este gustando este fan fic, que es mi primer de HP. Y bueno, sí, definitivamente lo de Draco le pegó duro a Harry, a ver que más pasa...
Amaly Malfoy: Sí, hay muchas cosas de la escuela, pero eso no significa que no vaya a escribir mis cosillas. Creo que este capítulo va decicado a las chicas a quienes les gusta el Harry/Draco... Pronto veré quien se queda con quien, pero por lo pronto aquí está el otro.
GaBrIeLa2: Bueno, por el momento no hay alguna clase de romance en ninguna de las dos parejas, aunque ya vimos como se puso Blaise con esa mínima provocación de Harry, aunque por otro lado ha sucedido esto... Bueno, muchísimas gracias por los Reviws que me has mandado, realmente los aprecio mucho.
Hasta el proximo capítulo
Maya Malfoy (Hitokiri Aoi)
Parece que esta vez si me tardé un poquito para actualizar... Bueno, en realidad ya tenía hecho el capítulo, pero a la mera hora no me gustó como había quedado y lo volví a escribir; además de que tuve que hacer uno de esos latosos trabajos en equipo en los que uno casi no se pone de acuerdo. Pero bueno... Aquí está la continuación del fic, espero que les guste tanto como me gustó a mí escribirlo... También quiero dar muchas gracias a los reviws que me mandan, en verdad que me motivan mucho a seguir escribiendo. Muchas gracias.
Aviso: Harry Potter no es mío y todo eso.
Capítulo 4: Dragon Tears
La clase de Herbología era la última del día, después de ella estaban prácticamente libres para hacer lo que quisieran.
Mientras tanto él y sus amigos se encontraban recogiendo algunas de sus cosas al tiempo que le ayudaban a la profesora Sprout, de manera que salieron mucho más tarde que los demás alumnos, todo por Hermione, quien deseaba siempre dar una buena impresión a los maestros.
--Ay Mione, de verdad que no le veo el caso a quedarnos más tarde en las clases... Me refiero, tú siempre tienes la máxima calificación, ni que las décimas extras de trabajo te ayuden de mucho... --Le reprochó Ron, quien ya estaba más que harto por quedarse una hora más tarde de lo que cualquier estudiante debiera salir.
--Bueno... ¿Y ustedes?
--No, pues sí... Pero me da flojera --Dijo esta vez Harry, quien fue correspondido por un asentimiento rápido de su amigo.
--Par de flojos... Pero estoy segura que algún día se van a arrepentir de lo que acaban de decir y me van a implorar que volvamos a hacerlo para que puedan sacar sus décimas extras y así poder pasar las asignaturas que reprueban! --A lo que los dos muchachos se quedaron viendo fijamente.
--Pero yo no he reprobado asignaturas... --Habló esta vez el chico pelirrojo.
--Ajá... --Le dijo con sarcasmo para después -como recordando algo- apresuradamente decir: --Bueno, como sea, debo ir a la biblioteca porque voy a... ¿cómo se dice?... a sí; Voy a hacer mi tarea, los veo al rato --Y luego de esto se echó a correr a la susodicha biblioteca.
--Ehh... ¿Harry, no te has dado cuenta de que últimamente Hermione anda muy rara? --Le comentó su amigo después de ese extraño comportamiento por parte de su amiga. Aunque, ¿Cómo podría? todo el tiempo se la pasó pensando en una sola persona, quien aunque extraña pareciera, se trataba de nada menos que Malfoy.
--... No... --Contestó Harry.
--Hermione no es la única que se ha comportado extraño, Harry --Le dijo su amigo echándole una mirada acusatoria.
--Ehhhhhh... ¿A qué te refieres, Ron? --Preguntó Harry nerviosamente... Pudo Ron, después de todo, haber notado alguna cosa.
--Ay, no te hagas Harry... Si actúas como enamorado, ¡se te nota al instante!
--¡¿Enamorado?! --No podía creer que realmente se le mirara de esa manera, su amigo debía estar muy equivocado.
--Claro que sí, Harry; Mira, primero te quedas pensativo, luego bueno también estabas pensativo, tan pero tan pensativo que, bueno, ni siquiera le diste importancia al hecho de que Malfoy haya sido tu pareja en Pociones, claro, antes de que la caldera de Neville explotara, digo... Y para variar, sigues así... Es la misma cara que pones cuando vez a Cho Chang, si me permites decirlo... --Le explicó brevemente su amigo.
--Pero yo no... Ella ya no me...
--Ya Harry, yo que tú no tendría porque avergonzarme de pensar en Cho, ¡lo haría si empezase a pensar en Malfoy! --Ese definitivamente fue un gran consuelo de parte de su amigo, y una gran ironía de igual modo.
--Sí... Tienes razón --Le dijo muy incomodó.
--Bueno, sabes Harry, si no nos apresuramos no veremos ni una décima de la comida que han servido... Vamonos al comedor, Harry. ¡Corre! --Le gritaba su amigo jalándolo por el brazo con intención que siguiese su ritmo, sin fijarse siquiera en su camino. Y para su sorpresa sintió como chocaban con alguien, haciendo caer a esa persona al suelo.
--Lo siento, no nos fijamos --Dijo el pelirrojo hacia la persona que seguía en el helado piso del pasillo sin notar de quien se trataba.
--Me doy cuenta que no... Especialmente tú, Weasley. No sueles ver más allá de tu nariz. --La persona con quien habían chocado era una de las últimas con quien desearía toparse en ese momento. Draco Malfoy dijo eso último todavía tirado en el suelo, mientras se levantaba y sacudía su túnica lentamente.
--Bueno, pues como te das cuenta, ni Harry, ni yo deseamos ver cosas podridas antes de la comida --Habló su amigo mirándolo con furia contenida.
--¿Comida?
--Sí, ¿Te haces a un lado? --Le dijo Ron bruscamente, dando un paso hacia adelante con el propósito de intimidar al chico que se encontraba frente a él, cosa que por la situación, no sucedería --Tengo prisa.
--Para como van las cosas, tú serías quien debería hacerse a un lado --Le comentó Malfoy, Harry pudo observar claramente como el otro permanecía tranquilo, su rostro no reflejaba mucho, Harry comprendió como estaba siendo -en cierto punto- accesible, a diferencia de su amigo del cual sus ojos despedían centellas de enojo.
--Te lo advierto, Malfoy... Hazte a un lado, no lo pienso repetir --Habló el pelirrojo mostrando su puño muy cerca de la cara del otro, a lo que su enemigo simplemente lanzó un suspiro divertido, sin darle la menor importancia a su amenaza.
--Debí imaginarlo... Tienes una capacidad cerebral tan grande como un chimpancé... ¿No será de familia?
--¡¡Cállate!! ¡¡Con mi familia no te metas!! --Ron empezaba a desesperar.
--Oh. Pero no te preocupes, Weasley. Si tienes suerte, tal vez puedas ser un mediocre como tu padre... --Este último comentario provocó una notoria reacción en su amigo, pues, sí no lo hubiese detenido, habría saltado sobre Malfoy.
--¡¡Suéltame, Harry!! Se lo advertí, ¡¡¡le voy a dar lo que se merece!!!! --Gritaba su amigo pelirrojo mientras intentaba soltarse de su agarre, Harry sabía muy bien cuan impulsivo podía llegar a ser Ron.
--Como sea... Antes de irme...: La hora de la comida ya ha acabado... Pero supongo que comerán de todas formas... --Les dijo esto último mientras se alejaba hacia donde iba a un principio.
A Harry le costó mucho poder calmar a su amigo de nuevo, seguía verdaderamente molesto por lo que acababa de acontecer, especialmente porque al llegar al comedor encontraron que la comida ya había desaparecido.
Aún así decidieron comer en las cocinas, de ahí, todavía cargados con una buena munición de panecillos, decidieron alcanzar a Hermione quien se encontraba en la biblioteca.
Al llegar allá tardaron un poco en encontrarla pues se había sentado en una de las mesas más alejadas de la puerta de la biblioteca, aunque fue sencillo ubicar su enmarañado cabello marrón. Ella se encontraba, tal como lo suponían, leyendo un libro bastante grueso, aunque, cuando quisieron acercarse ella pareció ponerse nerviosa, pues cerró el libro apresuradamente.
--¿Chi... Chicos? ¿Qué hacen aquí... eh? --Preguntó su amiga un poco nerviosa, cosa de la cual pudieron percatarse.
--¿Qué pasa, Mione? ¿Qué? ¿No querías que viniéramos a hacerte compañía? --Para esos momentos su amiga parecía estar mucho más tranquila.
--Sí... Nada más que se me hizo raro... --Harry se perdió en un momento de la conversación al notar que del otro lado de la biblioteca, en una mesa solitaria, se encontraba Blaise Zabini leyendo algo.
--Oye... ¿Harry? ¿Por qué estás viendo al amigo de Malfoy? --Preguntó Hermione curiosamente, mientras se podía observar a simple vista como la expresión en el rostro de Ron cambiaba a repulsión.
--No, por nada, es solo que... Bueno, me estaba acordando de lo que pasó esta vez...
--¿Qué pasó? --Preguntó su amiga con una mueca preocupada, aunque pudo observar que ninguno de los tenía ánimos de relatar su encuentro con su enemigo.
--Es verdad... Ese estúpido de Malfoy... Lo detesto... Me encantaría estar aunque sea un momento a solas con él... Un momento y podría cobrarme todas las que nos ha hecho... --Habló su amigo lleno de enojo contenido mientras Hermione intentaba calmarlo y él sin poder evitarlo, estaba de acuerdo con él.
--Pero Ron, tú sabes perfectamente que hay nada que puedas hacer...
--En eso te equivocas... --Dijo Ron oscuramente, haciendo que la atención de sus amigos se centrara en él. Se le escuchaba como cuando tenía un buen plan.
--¿Qué quieres decir, amigo? --Esta vez fue Harry quien preguntó, sin darle importancia al hecho de que se estaba ahogando con el pan.
--He estado pensando... Que... Bueno, ¿sí o no sería maravilloso poder cobrárselas todas a Malfoy?
--Creo que sé por donde vas y quiero decirte que...
--No Mione, a diferencia de lo que piensas no es nada malo --La cortó Ron --Es más... Creo que es lo mejor que se me ha ocurrido...
--¡Ya escúpelo!
--Se me ocurrió un plan para vengarnos de Malfoy... Sin lastimar a nadie claro está --Dijo esto ultimo viendo a Hermione, a lo que ambos hicieron un gesto a señal de que continuara --Bueno, pero acérquense más --Y cuando los tuvo lo suficientemente cerca empezó. --Muy bien... Este es el plan; verán, desde hacia tiempo me he dado cuenta que un poco después de salir de clases, Malfoy pasa siempre por ese pasillo --Dijo señalando uno que tenía columnas --Va a la oficina de Snape... Había pensado en alguna clase de trampa colocada por allí... Algo divertido...
--¿Qué clase de trampa? --Esta vez fue Hermione quien habló, estaba intrigada.
--¿Qué les parecería dejar a Malfoy colgado con su ropa interior de fuera a la vista de todos...?
--Quizás simplemente dejarlo colgado... --Aceptó Hermione dejando sorprendido a Harry, en condiciones normales ella habría sido la primera en oponerse.
--Muy bien... jejeje... ¿Qué dices tú Harry? --Harry estaba nervioso, no sabía que contestar, aunque Malfoy era un pequeño bastardo últimamente había pensado cosas extrañas al topárselo, aunque definitivamente ese último encuentro le dejo un muy mal sabor de boca.
--... De... acuerdo... ¿Cuándo lo hacemos? --Preguntó finalmente Harry.
--Cuando sea el momento preciso... --Todavía no se sentía seguro acerca de eso, era como si alguna voz interna intentase decirle que algo estaba equivocado, que no debía hacerlo... ¿Pero como decir que no a sus amigos? ¿Cómo negarles la oportunidad de cobrarse los insultos y humillaciones que habían recibido?... Tendría que apoyarlos........
...
La noche había llegado más pronto de lo habitual, una noche invernal; el frío se sentía presente ahora en la torre de Gryffindor y se podía ver claramente desde la ventana como había comenzado a nevar, sin embargo, ni siquiera el hermoso paisaje invernal podría hacerlo dejar de pensar en todo lo que había sucedido ese día; desde lo de Malfoy y Zabini hasta lo que su amigo les había propuesto... Todo eso era tan confuso para él...
Se volteó de lado en un intento por encontrar una posición más cómoda, que le pudiese hacer terminar con su insomnio, sin embargo el resultado fue el mismo. Su cabeza estaba demasiado cargada con información que no podía procesar, su mente estaba conciente que debía descansar, sin embargo todos esos recuerdos y situaciones seguían rodando en su mente, una y otra vez.
Decidió que no podría dormir, así que podría dar un paseo por los corredores, como últimamente se había vuelto su costumbre, un paseo nocturno para despejar un poco su contrariada mente no le haría nada mal.
De manera que quitando los pesados edredones de su cuerpo, Harry se incorporó para salir de la habitación, pensó que, ya que sería un paseo rápido, no habría necesidad de llevar la capa de invisibilidad. Con ese pensamiento salió de Gryffindor. Le fue sencillo pasar por el retrato, ya que la obesa dama dormitaba apaciblemente.
Una vez en los pasillos empezó a meditar acerca de los hechos que habían acontecido el ya anterior día. Lo primero que llegó a su mente fue el sentimiento que tuvo al ver que Blaise Zabini se encontraba ahora en amistad con Malfoy, quien por cierto seguía siendo su enemigo.
Podía conocer algo, y eso era que Malfoy siempre le prestaría un poco de su atención, ya sea molestando, intentado humillarlo o en algunos casos insultándolo. Aunque no quisiera aceptarlo, todas sus especulaciones siempre llegaban hacia el mismo punto: Le interesaba mucho que Malfoy pusiera su atención en él, le agradaba tener aunque sea un 10% de la atención de su enemigo... Y eso no era algo que pudiese calificar como algo dignamente correcto, al menos no para él.
Y aunque no muy satisfecho con el primer resultado, decidió pasar hacia su otro pensamiento que ocupaba mucho espacio... La venganza de Ron.
Sin embargo no pudo continuar con su meditación pues se topó con un hecho que lo sorprendió de sobremanera. Él había estado pasando por los ventanales que cubrían las paredes de ese pasillo, nunca se habría esperado encontrar a una persona sobre el marco de una de ellas. Decidió acercarse más a la persona, con sumo cuidado de no ser descubierto, hasta cierto punto que pudo ver de quien se trataba.
La figura era inconfundible; Piel extremadamente blanca, cabello rubio platinado, cubierto por una sabana del verde de Slytherin, se trataba de nada menos que Draco Malfoy. A simple vista se podría decir que no existía nada de especial en la escena. Harry lo observó más detalladamente.
Esa persona que se encontraba en el alfeizar de la ventana no era el mismo Malfoy con quien había estado esa tarde. Al notarlo mejor, pudo observar como los hombros del muchacho se movían un poco, y su cabello, que normalmente se encontraba meticulosamente peinado hacia atrás, ahora caía de una manera desalineada por su rostro.
Se acercó un poco más para contemplarlo mejor, y, no pudo evitar percatarse de que Malfoy intentaba bruscamente quitar sus lágrimas de su rostro, pudo comprender que en ese momento se encontraba llorando, algo debía estar muy mal con él. No podía evitar mirarlo sin sentir pena por él, no podía dejar de mirarle intentar luchar contra las lágrimas que parecían salir en contra de su voluntad, frente a sus ojos se encontraba aquel chico frío, hijo de Lucius Malfoy, un mortifago importante, y por más que intentase ser indiferente a esta situación, no podía abstenerse de preguntarse qué motivo tendría tal efecto en él. Era tal su concentración que no se dio cuenta que se le había quedado mirando mucho. El otro chico ahora se encontraba quieto abrazando sus piernas contra su pecho, sin hacer algún movimiento, hasta que su cabeza giró en dirección a Harry, y fue cuando sus miradas se cruzaron.
Malfoy parecía sobresaltado, Harry también se encontraba sorprendido, pues aunque sonase ilógico, no esperaba que Malfoy volteara hacia él.
Malfoy pareció querer buscar la frase adecuada para esa situación, sin encontrarla, Harry simplemente seguía mirándolo. El otro logró bajarse de la ventana y respirando profundamente pudo estrechar sus ojos de una manera fría.
--¿Qué estás haciendo aquí, Potter? --Si no hubiese visto lo anterior, podría haber jurado que era el mismo Draco Malfoy de siempre.
--Daba un paseo --Por alguna razón, sintió la necesidad de contestar con la verdad.
--¿Cuánto tiempo llevabas allí? --Le dirigió otra pregunta directa, mientras caminaba en dirección a él, deteniéndose cuando se encontró aproximadamente a un paso de él.
--Lo suficiente --Ante esta respuesta el otro estrechó sus ojos peligrosamente, y tenía que reconocer que, aún habiendo visto la fase anterior esa mirada podía seguir inquietándolo.
--Supongo que mañana tendré el "gusto" de escuchar este encuentro por los corredores a temprana hora... ¿No Potter? --Se le escuchaba molesto, pero no pudo impedir escuchar que su voz sonaba un poco ¿herida?
--No pienso decírselo a nadie, si a eso te refieres --Sintió como la mirada de parte del otro se volvía más penetrante, haciéndolo bajar un poco la suya propia.
--... ¿Por qué?
--¿Cómo que "por qué"? --Preguntó Harry confuso --Si te refieres a por qué no le voy a decir a nadie es porque pienso que no tengo el derecho a revelar esto si tu no quieres... Sólo por eso.
Malfoy no dijo nada, simplemente bajó su cabeza provocando que su cabello cayera sobre su rostro, cubriéndolo.
Después de un rato, estaba por preguntarle si se encontraba bien, sin embargo, pudo observar claramente como las lágrimas se deslizaban de las mejillas de su enemigo.
--¿Malfoy? ¿Qué te pasa? --Preguntó Harry tomándolo por los hombros, sintiendo como temblaba. Así que aprovechando la oportunidad, lo guió hacia la ventana donde el otro había estado y le hizo sentarse.
Y aunque ya no había más lágrimas en su rostro seguía estremeciéndose; nunca pensó estar en una situación así, ciertamente había visto llorar a su amigo Ron, a Hermione, podría ver cientos de veces a Neville, podría ver a Seamus, pero nunca a Draco Malfoy, era algo que no estaba en sus expectativas para esa noche, era un suceso completamente imprevisto.
--Malfoy, ¿Por qué lloras? --Preguntó Harry de pronto, cuando éste ya se hubo calmado y seguía con su cabeza baja. Aunque esta pregunta al parecer hizo salir a aquel chico del letargo en el que se encontraba pues rápidamente se levanto del marco de la ventana.
--Es algo que no te incumbe, Potter --Le dijo con un tono de voz extraño, después de unos instantes comprendió que intentaba crear el mismo tono indiferente de siempre sin un buen resultado.
--Escucha... Quiero ayudarte...
--¿Por qué?
--Porque aunque no lo creas no me gusta ver llorar a las personas --Le contestó el pelinegro.
--Tal vez Potter, si seas lo que pareces ser...
--¿Qué? ¿A qué te refieres? --Estaba confundido, que quería decir con eso, ¿lo consideraba un hipócrita o algo?
--Supongo que puedo confiar en ti... Pero si llegases a decírselo a alguien... --Le amenazó, para después caminar en sentido contrario.
Esta ocasión, Harry, sin dudarlo dos segundos, le alcanzó tomándolo nuevamente por el brazo, no se iba a quedar así, toda esa situación era muy extraña como para quedar sin una solución.
--No... ¡No te irás! --Le dijo sin siquiera pensarlo, Harry, actuando como un verdadero Gryffindor en el proceso.
--¿De qué estás hablando, Potter? --Le respondió Malfoy, en su rostro podía observarse un dejo de confusión claro.
--No te irás hasta que me digas que te sucedió... --Le dijo seguramente.
--Mira, Potter, no tengo ninguna obligación de explicarte nada... ¿Me oyes? Somos enemigos, e-n-e-m-i-g-o-s... --Le dijo el otro de una manera bastante agresiva.
--Pues entonces me gustaría cambiar eso... --No meditó sus palabras, simplemente las dijo, así, como si nada. Como si todos esos años de insultos y humillaciones nunca hubieran pasado.
--¿Qué? ¿Estás conciente de lo que dices? --Le preguntó el otro.
--Sí, bueno, sé que suena raro pero es cierto... Tal vez sería mejor no estar enemistados, ¿no crees? --Le respondió Harry mirando su rostro.
--Lo que tratas de decir es que... ¿quieres ser mi amigo? --Preguntó el otro con mucha más desconfianza todavía.
--... sí... eso creo...
--No... Esto está mal... ¿Estás burlándote de mí?
--¡No!.... Lo prometo --No sabía como convencerlo de que lo que decía era la verdad.
--Bien... En ese caso... ¿Amigos? --Le dijo extendiendo su mano lentamente, quizá temía sufrir algún otro desaire de su parte. Harry miró durante un momento su mano extendida y la tomó... Supo entonces que había aceptado una amistad con Malfoy, y no sólo la aceptó, sino que ¡él mismo la propuso! Llegó a pensar que era un sueño, un sueño bastante extraño para ser real, aunque una oleada de frío en su espalda que le hizo estremecerse le obligó a comprender que no era así.
--Eres un estúpido, Potter. --Le dijo el otro, lo que le llegó a sorprender pero le hizo cambiar de expresión al notar que el muchacho se quitaba la sábana de encima para colocársela a él mismo. --Hasta mañana... --Le dijo de una forma fría mientras se alejaba.
--¡¡Malfoy!! ¡Aún no me has dicho lo que te sucede!
--Hablaremos mañana y tú me devolverás eso -- su voz se escuchó de igual manera que de costumbre, perdiéndose entre la oscuridad de los pasillos dejándole allí, en medio de la luz blanquecina de la ventana y envuelto en una sábana de Slytherin......
Se preguntaba como repercutirían sus acciones de esa noche para futuro... Ahora era "amigo" de Malfoy...
De nuevo quiero dar muchas gracias a las personas que me mandandaron reviws, de verdad que se los agradezco...
respuesta a REVIEWS...:
Shinigami: Holas, me encanta tu nick! .... La verdad es que yo también he intentado por todos los medios conseguir algún lugar en el que haya blaise/draco y no encuentro en español, pero si hay varios buenos en inglés. Siento que en este capítulo no haya salido casi Blaise pero prometo que en el siguiente SI saldrá, y tal vez esta historia de un giro... Me encantaría ser tu amiga y mi correo es: maya_malfoy@hotmail.com si quieres ponerte en contacto conmigo. ^--^
Paola: Muchas gracias por tu comentario, estoy feliz de que les este gustando este fan fic, que es mi primer de HP. Y bueno, sí, definitivamente lo de Draco le pegó duro a Harry, a ver que más pasa...
Amaly Malfoy: Sí, hay muchas cosas de la escuela, pero eso no significa que no vaya a escribir mis cosillas. Creo que este capítulo va decicado a las chicas a quienes les gusta el Harry/Draco... Pronto veré quien se queda con quien, pero por lo pronto aquí está el otro.
GaBrIeLa2: Bueno, por el momento no hay alguna clase de romance en ninguna de las dos parejas, aunque ya vimos como se puso Blaise con esa mínima provocación de Harry, aunque por otro lado ha sucedido esto... Bueno, muchísimas gracias por los Reviws que me has mandado, realmente los aprecio mucho.
Hasta el proximo capítulo
Maya Malfoy (Hitokiri Aoi)
