CAPÍTULO 8: EN EL GRAN COMEDOR
Harry se fijo que en la mesa de profesores faltaban 5 ocupantes, por lo que parecía mucho mas vacía de lo normal. Una era claro que era la de Hagrid, que debía estar pasando el lago con los de primero, otro, era sin duda el de la profesora McGonagall, que debía haber ido a esperar los nuevos alumnos. Otro era el del profesor Snape, ya que su nariz ganchuda, no se asomaba por ningún sitio. También era claro que el profesor de DCAO era uno de los que faltaban, pero, y la quinta silla? Parecía que los pocos profesores que estaban en la mesa, estaban también bastante sorprendidos, aunque el profesor Dumbledore, no le daba tanta importancia. Luego se fijó en el gran comedor, estaba un poco vacío, parecía que había menos alumnos de lo normal.
Pronto los alumnos que debían ser seleccionados, entraron por la gran puerta doble que daba al comedor. La profesora McGonagall iba al frente. Cuando llegaron delante de la mesa de profesores, les dijo que se quedaran allí. Mientras ella fue a buscar el sombrero seleccionador. Hagrid entró a hurtadillas en ese momento, aunque con su gran cuerpo, todos lo vieron. La profesora McGonagall, atrajo de nuevo la atención hacia ella, ya que entraba llevando el taburete con el sombrero. Se apartó un poco, y del sombrero, para susto de los nuevos, se abrió una raja que empezó a cantar. Cuando terminó, una gran ovación se dejó escuchar por todo el gran comedor. De nuevo la voz de la profesora McGonagall se dejaba escuchar en la sala.
-Cuando os vaya llamando, vendréis aquí, os colocareis el sombrero –dijo señalándolo- y él os elegirá… empecemos
La selección fue muy corta. Había muy pocos estudiantes nuevos. Solo cinco fueron a Gryffindor, seis a Hufflepuff, cuatro a Ravenclaw y cinco a Slytherin.
El profesor Dumbledore se puso de pie, sin duda para pronunciar el discurso de bienvenida, cuando un aleteo veloz, los sorprendió a todos. Un pájaro de plumas azules y pico metalizado, era el que sobrevolaba las mesas de los curiosos estudiantes, hasta la de los profesores.
Se posó delante del profesor Dumbledore, y le entregó la carta que tenía en el pico. Cuando la hubo leído, el pájaro de nuevo levantó su pequeño cuerpo y dio una pequeña vuelta al comedor. Sobrevoló dos veces la mesa de Griffindor. Ante todo el silencio, una voz preguntó.
-Náyade? –era Harry, aunque estaba susurrando
El pájaro azul, como atraído por la voz, dejó escapar una dulce nota, y se posó en el hombro del chico de ojos verdes.
-Que haces aquí Náyade? –ésta ululó con satisfacción
Los murmuros entre los estudiantes empezaron a crecer.
-Conoces a éste pájaro Harry? –preguntó Ron
-Claro que si!! Es el Rivorum de Remus!!
-Rivorum? Remus? –Ron parecía muy sorprendido
-El Rivorum es un tipo de pájaro muy extraño, solo se conoce un ejemplar –lo miró con curiosidad- y Remus… te refieres al profesor Lupin, verdad? –Harry solo asintió ante las explicaciones de su amiga
-Pues… creo que Remus debe estar cerca, sino Náyade –dijo acariciándola- no estaría aquí
Los murmuros y gritos habían aumentado tanto que el profesor Dumbledore, tuvo que hacer aparecer una bandada de murciélagos que atravesaron el comedor, para que le hicieran caso.
-Parece que algunos de nuestros profesores han tenido un pequeño percance, y llegaran un poco tarde –de nuevo los murmuros llenaron el comedor- Pero –llamó la atención el director- eso no quiere decir que nosotros no podamos disfrutar de nuestro banquete!!! –exclamó feliz
Los platos se llenaron de las deliciosas comidas que los elfos de la comida habían preparado con esmero. Todos los estudiantes comieron con gula, mientras seguían comentando la falta de los profesores.
Cuando estaban a punto de empezar con los postres, unos gritos mas fuertes que los que habían en el mismo comedor, los hicieron callar.
-QUIERES HACER EL FAVOR DE ATAR ESTE ASQUEROSO PERRO!!! –era sin lugar a dudas la voz del profesor Severus Snape
Se oyó una especie de forcejeo entre un hombre y un perro, y las risas de una mujer. Cuando las puertas del comedor se abrieron, los alumnos y profesores de la sala, pudieron observar una escena de lo mas curiosa.
Un hombre, sin duda el profesor Lupin, cogía como podía, el collar de un enorme y lanudo perro negro, que gruñía enseñando los colmillos y con el lomo erizado, dándole un aspecto aun mayor, a un asqueado profesor Snape, que miraba al susodicho perro, con aversión curvando su fea cara, en una mueca horrible y además, estaba gruñendo, casi de igual forma que el perro!!. También había una mujer muy bella que se lo miraba todo con una risita, intentando ocultarla sin éxito.
Harry, Ron y Hermione, los miraban sorprendidos, agradablemente sorprendidos. Los adultos, junto con el perro que gruñía sin cesar, entraron poco a poco en el gran comedor, sin prestar atención a los estudiantes sorprendidos.
Harry fue ampliando su sonrisa, hasta convertirla en una carcajada, ante la visión de la cara del profesor Snape refunfuñando, con su padrino en forma perruna, gruñéndole. Ron y Hermione, comprendiendo, lo siguieron en carcajadas. Los alumnos de Gryffindor, se los miraron como si hubieran perdido la cabeza.
-Que os hace tanta gracia? –preguntó Fred que estaba al lado de Ron
Ron intentó hablar como pudo, aguantándose el estomago con las manos, le dijo a su hermano entre susurros que mirara la cara de Snape y la parecida forma en que gruñía, casi igual que el perro. Fred, siguiendo la indicación de su hermano, vio a que se refería, y lo anunció a todo el comedor, que pocos momentos después estallaron en carcajadas. Los profesores sentados en la mesa principal, también dejaron escapar sonrisas divertidas.
El profesor Snape oyó las risas de Harry primero, y después las del resto del comedor. Se giró para pasar la mirada de asco del perro, a Harry, que se quitaba las gafas, para limpiarse las lágrimas.
Éste se dio cuenta que su profesor lo estaba mirando con desprecio, algo ya común. Intentó ponerse serio, por lo que su cara era una mueca entre la sonrisa descontrolada, las lágrimas y el intento de seriedad. Se fue poniendo rojo, hasta que no aguantó más, y aun se rió con más fuerza que antes.
Severus Snape, se puso muy furioso, además de un vivo color escarlata, y como un rayo, se dirigió a la mesa de profesores, mientras dejaba al perro con el profesor Lupin y la mujer.
Ante el asombro de todos, cuando el perro vio a Harry, dejó de gruñir, y con la cola meneándose de un lado al otro de forma que casi daba a los ocupantes de las mesas colindantes, se escapó de las manos del hombre-lobo que lo intentaba sostener, y con un pequeño bote, puso las dos piernas delanteras encima del regazo de Harry, de forma que sus caras estaban a la altura de los ojos.
El perro sin previo aviso, empezó a lamer, mejor dicho, a babear, la cara y la túnica negra del chico de ojos verdes.
-Para!! Para Hocicos!! Por favor!! –decía él como podía, apartando la cara de los lametazos cariñosos del perro- Por favor Remus!!! Quítamelo de encima!! –gritaba debajo del peso del enorme can, que lo había hecho caer de espaldas
El profesor Lupin, con su fuerza superior, agarró a Hocicos por el collar que llevaba, y lo sacó de encima del chico. El resto del comedor se había quedado callado, ya que el perro era realmente enorme!! Pero parecía que a Harry eso no le importaba!!
Cuando el can, ya estaba tranquilo, aunque moviendo la cola peligrosamente, Harry se levantó, sacudiéndose un poco la túnica, y después de sentarse, le acarició el cuello al perro. Ron lo hizo poco después.
-Gracias Remus –lo dijo en un susurro, pero como todo el comedor estaba en silencio, lo oyeron todos
-De nada Harry –contestó el aludido con una sonrisa
Antes que el chico pudiera saludar a la mujer, la voz de Albus Dumbledore, se hizo sentir en el comedor.
-Bueno… ahora que parece que los nuevos profesores han llegado, ya os los puedo presentar –hizo un gesto para que Remus y la mujer fueran hacia él, aunque el perro se quedó al lado de Harry y Ron- Vuestra profesora de Defensa contra las Artes Oscuras (a partir de ahora DCAO), será ella, la señora Arabella Figg
Se oyeron aplausos por todo el comedor, aunque los que mas fuerte aplaudían, eran sin duda, Harry, Hermione, y todos los hermanos Weasley, que ya la conocían.
-Y él –dijo señalando a Remus- algunos ya lo conoceréis, ya que también había impartido clases de DCAO, es Remus Lupin –se oyeron muchos murmuros sobre el hecho que el profesor Lupin fuera un hombre-lobo- Y –dijo el profesor Dumbledore silenciando de nuevo el comedor- hará de sustituto de las materias que por causas de fuerza mayor, no puedan impartir sus respectivos profesores… como sabéis, Remus Lupin es un licántropo, pero gracias a una poción que el profesor Snape preparará, no estaréis en ningún peligro –dijo sonriendo al profesor de ojos de color ambarino
Se oyeron de nuevo aplausos, algunos lo miraban con miedo, otros con admiración por el mejor profesor de DCAO que habían tenido nunca, y algunos se preguntaban, porque necesitaban un profesor sustituto. Luego se fijaron en el profesor Snape, tenía una expresión irreconocible en la cara. Aunque seguía mirando desafiadoramente al enorme perro negro.
-Y el perro? –Se oyó la voz de uno de los estudiantes del comedor que preguntaba
-Va con el profesor Lupin, esta extremadamente bien educado –dijo sonriendo viendo como el susodicho perro alzaba la cabeza de forma orgullosa- Ven aquí Hocicos –dijo con un brillo de burla en los ojos
El perro obedeció al instante, acercándose con paso decidido hacia la mesa de profesores, y parándose delante del profesor Dumbledore. Lo miró durante un momento, y luego se giró al comedor para que todos lo pudieran ver. Era casi tan alto como el profesor Lupin, de un oscuro color azabache y de pelos bastante largos, estaba algo flacucho, pero en su larga cabeza, se podían divisar dos preciosos y luminosos ojos azules.
Algunos alumnos dejaron escapar gritos y gemidos, aunque los que mas fuerte se oyeron eran los de Parvati Patil y Lavender Brown.
-Es un Grim!! –anunció Lavender a todo el comedor mientras se cogía con Parvati y ambas se tapaban la boca con las manos- Y lamió a Harry!! Nos vamos a morir!!
-No es un grim!! –dijo Harry mirándolas de forma desafiante- Es solo un perro muy grande
-Como bien dice el señor Potter –de nuevo el profesor Dumbledore hablaba- no es un Grim… es solo un perro de tamaño descomunal –dijo riéndose- Y su nombre es Hocicos
-Hocicos? Ese nombre no le pega para nada –dijo Fred Weasley riéndose
-Es como llamarlo Patitas –George Weasley empezó a reír descontroladamente
Hocicos se estaba enfadando, empezaba a gruñir de forma bastante evidente y todo el comedor calló al instante, por miedo a que les hiciera algo y además con una de las enormes zarpas, se intentaba sacar el collar. El profesor Lupin, lo acarició un poco, y además le quitó la atadura del cuello. Cuando lo hubo hecho, Hocicos se calmó y volvió con Harry. De nuevo en el comedor, se oyeron gemidos de miedo, al ver pasar el gigantesco perro por su lado.
-Por lo que parece, le ha cogido cariño al señor Potter –la voz del profesor Dumbledore se volvía a oír- Que os parece si comemos los postres y luego vamos a la cama? Ha sido una noche muy larga –sonrió, mientras con una palmada hacía desaparecer la comida que aun había en los platos, y aparecían los deliciosos postres- Y mañana debéis estar frescos para empezar las clases… ya que supongo que vuestras lindas cabecitas, están de nuevo vacías
Harry pudo coger algunos muslitos de pollo antes de que desaparecieran, y se las dio a su padrino de forma perruna, que se los comió con muchas ganas.
A una palabra del profesor Dumbledore, todos los alumnos se dirigieron a sus respectivos dormitorios. Hermione guió a los de primero por los pasadizos, hasta el retrato de la dama gorda, donde con la contraseña (mors serpens!!), se abrió para dejar paso a la circular sala de Gryffindor. Allí ya se encontraban Harry, Ron y los gemelos Weasley. Cuando Hermione envió a los nuevos escaleras arriba, la mayoría se quedaban viendo a Harry, mejor dicho a su cicatriz, mientras comentaban excitados sus diferentes proezas que aun lo habían hecho mas famoso, como que siendo un alumno de primer año, había entrado en el equipo de quidditch, como buscador, o la escena en el comedor con el enorme perro.
Ron y Harry también subieron poco después a su habitación, emocionados, por empezar las clases de DCAO, que Bella les impartiría.
**Fin Capítulo 8**
Jajajaja!! Aun me río de la escena en la que entran Sevy y Sirius gruñendo.
XDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
De nuevo dar gracias a mi Beta (Khari, que haría yo sin ti ^_~), para llegar a deformar tanto la idea que tenía en mente. Os cuento…
Íbamos nosotras tan felices por Bcn, yendo a comprar algunos mangas, cuando le cuento lo que pensaba hacer en este capítulo (ya que estaba atascada en el anterior -_-U). Nos tendríais que haber visto, riéndonos y llorando como tontas por la calle!! Y como podréis suponer, la gente nos miraba, pero nosotras no paramos ni un momento. Deformamos la escena, hasta que ya ni parecía mi idea al principio!!! XDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD Estamos locaaaaaas!!
Weno… ,^_^ ke nos lo pasamos genial!! Espero que riáis con este capítulo!!
Kiss, Silver
P.D.1. Perdonad que tarde tanto con los capítulos… me gusta tener 3 o 4 capítulos avanzados antes de publicar, por si tengo que cambiar alguna cosa… y bueno… ahora estoy escribiendo el 12 (que por cierto me está costando un poco… y no es por lo que se cuenta… pero weno…)
P.D. Dejad Reviews pleaseeee!! Solo tenéis que tocar este botoncito de la izquierda!!! El que dice GO!!!
