-Pues si, me parece que fuiste muy dura con él – Hermione hablaba con Ginny en un salón vacío – Realmente te quiere... lo sabes! Él no lo hizo apropósito, ponte en su lugar...

-Como siempre, tienes razón... Pero... no sé que siento... por un lado me pongo en su lugar, y tienes razón!... pero por otro... – Ginny levantó su vista a Hermione – dime porqué me duele tanto? Yo no... no acostumbro a...

-Demostrar que te sientes herida... Siempre has sido el alma alegre de tu casa, quizás la más terrible... – Ginny sonrió a la idea - claro después de los gemelos... y sentirte así te extraña un poco... – Ginny miró a Hermione sorprendida - Al menos, eso me parece – Hermione se sentó a su lado – Y creo que eso es lo que es. Conozco más esa cabecita de lo que tú crees – Hermione puso su índice en la sien de su amiga y sonrió. Ginny sonrió en respuesta – Entre Ron y Harry todo está bien, el único problema aquí son Harry y tu, debes hablar con él.

-Sabes, no sé que haría sin una amiga como tú. Demonios! Me conoces tan bien!... a propósito cómo van las cosas entre tú y Ron? La noche anterior los vi muy acurrucados frente a la chimenea. Claro, pasé de largo, esperando que Ron no se haya dado cuenta, se veía muy entretenido...- Ginny sonreía al ver que el rostro de Hermione se sonrojaba

-Em... pues... no me quejo, Ron tiene un lado muy tierno que empiezo a descubrir, y te digo, minuto a minuto me sorprende más!... Imagina que hoy en la biblioteca al abrir mi libro de runas encontré una rosa con una nota que decía: "Entre todas las rosas, la mía es la más hermosa"... y frente a mis compañeros de clase!

-En serio?! ...Qué lindo! – Ginny abrió los ojos - Espera... estás segura que fue Ron?

-Lindo?!... No sabía dónde poner la cara! Se suponía que mis amigos y yo íbamos a traducir unas runas, no hablar de romances!... pero sí, después de todo me pareció lindo. La verdad yo también dudé si fuera Ron o no durante unos momentos – ambas rieron – es que es tan extraño cuando se porta así... ya casi echo de menos su rudeza... pero pensándolo bien, puedo acostumbrarme. Ya es tarde, ya acabó mi ronda de prefecta por aquí, así que deberíamos ir a la sala común. Tienes algunos asuntos pendientes...

-Mmmf... – Ginny se resistía un poco – No, aún no quiero ver a Harry...

-Pero... qué?!... De qué hablas?!

-Me he portado de una manera... no correcta. Primero salí de una forma inapropiada, luego dejé plantado a Harry en la biblioteca, como si fuera poco le dije que quería estar sola, no comí con ustedes en el comedor... sino que fui a las cocinas a robar un poco de comida... y para rematarla! me encontraste haciendo añicos esta pobre carpeta que no tiene la culpa de nada... – Hermione trataba inútilmente de no reírse.

-Si creo que lo último fue bastante insensato – ambas rieron

-Es que estaba tan molesta conmigo misma!... que me desquité con lo primero que encontré... pero la has dejado como nueva, gracias Hermy – Ginny siguió riendo

-Entiendo que no tengas cara para ver a Harry y afrontar que fuiste inmadura...

-Yo no dije eso...

-Pero eso es! O me equivoco? – Ginny no respondió – Así que, quieras o no, amiga mía, vas a hablar con él

-Hey! Desde cuando usas ese tono?... Sabes, andar con mi hermano puede serte de mala influencia... honestamente... – unas últimas risas se escucharon en el salón.

***

El retrato se abrió y entraron dos chicas. La primera, prefecta, caminó de largo hacia la mesa del fondo donde estaban otro prefecto y un chico con gafas redondas. La segunda, pelirroja, seguía el mismo camino, sólo que con paso lento.

Harry no dejaba de verla desde que había aparecido por el retrato, ambos cruzaron sus miradas. Se sintió relajado al ver que en esos ojos castaños no había rastro alguno del "temperamento Weasley", incluso esbozó una sonrisa y como si todo el tiempo hubiera sabido qué hacer, se puso de pié y caminó hacia ella. Era como el 'imperius', se sentía en un vacío, flotante, una orden en su cabeza le decía que avanzara hacia ella. Se encontraron casi en el medio de la sala. Sus miradas seguían perdidas en las del otro. En su cabeza no había otra cosa. El día había llegado.

-Gin... – se aclaró la garganta - Ginny... de verdad... lo siento...

-No, soy yo quien lo siente, creo que te prejuzgué y... – ella bajó el rostro - y no debí...

-Ginny – él puso ambas manos en el rostro de Ginny y levantó su mirada hacia él – Quiero que sepas que me importas mucho, y perdóname si en algún momento te hice sentir lo contrario... y también quiero – se volvió a aclarar la garganta – sé que no es necesario, pero quiero hacerlo de todas maneras... Ginny, aceptas ser mi novia?

Ginny se ruborizó, no ante la pregunta, sino ante el hecho que se lo haya preguntado frente a todo Gryffindor, por su parte, Harry parece no haberse dado cuenta de aquello.

-Harry... no era necesario una declaración tan formal... Pero si es tan importante para ti.... – Ginny dejó escapar aire – Si, Harry, acepto ser tu novia

Unos ojos verdes esmeraldas brillaban de alegría frente a ella.

-Ginny... ¿qué te hizo pensar que era importante para mí? – Harry trató de molestarla, pero en vez de eso, ella sonrió maliciosamente.

-De otro modo, no lo hubieras hecho tan público – ella miró alrededor y él la siguió con la mirada.

Fue como caer repentinamente de un hermoso sueño a una pesadilla. Varios ojos se dirigían hacia ellos, luego empezó a escucharse risitas tontas y comentarios. Pronto todo un bullicio se armó alrededor de ellos.

-Ron creo que ya debemos hacer algo, míralo, pobre...

-Arrg... tanto que estaba disfrutando este momento! – De la esquina donde estaban, Ron y Hermione se dirigieron al centro y empezaron a poner orden. Fue muy difícil.

Harry, completamente rojo, se dirigió a la mesa donde estaban antes. Ginny iba detrás de él, riendo como descosida. Luego que los prefectos pudieron restablecer la bulla habitual de la sala, se unieron a la 'nueva' pareja.

-Harry... te has tomado muy en serio eso de 'bienvenido a la familia' ¡mírate! Ni un legítimo Weasley se ha sonrojado nunca como tú – Ron lo miraba divertido.

-Oh cállate! – dijo Harry quien no sabía si estaba contento o molesto. Ginny lo cogió de la mano y le dio un beso en la mejilla.

-Sabes, esto es lo más romántico que has hecho por mí – Ginny pestañeó varias veces, para hacerlo sentir aun peor, lo logró, porque volvió a sonrojarse.

Harry dio un vistazo a la sala, todos lo miraban. Volteó lentamente su cabeza. ¡Perfecto! Otra vez el gran Harry Potter era el centro de atención, ¿y cual fue su gran hazaña? Declarar sus sentimientos frente a toda la sala común, sólo por el hecho de haber olvidado todo a su alrededor. Pero si creyó que eso era lo peor, estaba equivocado: Volteó su rostro al sentir unas cálidas manos sobre sus mejillas, luego vio unas pecas acercarse a él. Toda la sala común vitoreó. Hermione trataba de restablecer el orden en la sala, mientras el rostro de Ron decía claramente que eso era lo más desagradable que había visto.

La bulla no dejaba de escucharse hasta que Harry y Ginny se hayan separado, incluso, después de eso, seguían los cuchicheos. Harry se interesó mucho en un pergamino que no tenía nada más que los apuntes de Ron, los cuales llegarían a una línea, pero todo intento era inútil, sabía que era el centro de atención.

-¿Siempre estarán mirando? – Harry trataba de sonar molesto, e incluso contorsionaba su rostro, pero desistía en su intento de lucir furioso a cada beso que cierta pelirroja le daba en su rostro.

-Oye, deja de hacer eso! – le dijo Ron a su hermana, quien tenía los labios pegados al mentón de Harry, ambos lo miraron sorprendidos - ¡¿Qué?!

-¡Ron!... ¿no me dirás que estás celoso, no? – Hermione le interrogó, aunque la forma como lo miraba parecía decir: "Di que NO y deja en paz a tu hermana"

-¿Celoso, yo?... Claro que no!... Pero tampoco deben ir andando por ahí, haciendo exhibiciones públicas – Hermione rodó los ojos.

–¿Y al hablar también estás pensando por tí? - Ron se sonrojó y miró el mismo pergamino que Harry estaba mirando.

-Bien, bien... sí... digo no!... no estoy celoso... pero... debo acostumbrarme, eso es todo – Ron se relajó pues había soltado lo que quería decir. Tanto Ginny como Harry lo miraban.

-Pero, hasta que te acostumbres, hermanito, no vamos a estar como dos estatuas – Ginny se puso de pié, cogió una mano de Harry e hizo que la siguiera. Salieron por el retrato.

Había pasado tan rápido que Ron apenas tuvo tiempo de pararse también y decir "¡Esperen!", pero Hermione también lo había sujetado por una mano.

-Déjalos – le dijo en medio del bullicio que había nacido nuevamente en la sala común – Total... fue tu idea el que estén juntos, creo que les enviabas demasiadas indirectas – Hermione le guiñó un ojo y otra vez fue a detener el alboroto.

-Pero nunca les dije que me hicieran caso!... Eso fue por iniciativa de ellos! – Ron fue tras de Hermione dándole estas explicaciones – Oye tu, deja esas bengalas! – le gritó a uno de tercero – Y ahora se han ido a... a... no sé donde...

-Ron, no empieces con escenitas de celos del hermano mayor – ella seguía caminando por entre los alumnos, mitigando la bulla.

-Yo no...

-Pero si tanto te molesta, después podemos ir a buscarlos – Hermione le dio una mirada significativa. Una sonrisa picaresca se extendió en el rostro del pelirrojo.

-Bien... buscarlos... ¿te parece en la torre de astronomía?

-Ron, tenemos varios niños alrededor nuestro, por favor, no des malos ejemplos – le dijo entre dientes, se dio la vuelta y siguió caminando, mandándolos a dormir.

Pronto la sala común se vio despejada, solo algunos se quedaron, terminando su quehaceres.

-Bien, vayamos a buscar a mi hermana – Hermione y Ron intercambiaron miradas, ella arqueó una ceja – Las damas primero – Ron dejó que ella pase por el retrato.

-Claro, y con un poco de suerte los encontramos – Ron sólo atinó a reírse y se ruborizó un poco – No, aún no te sonrojes, que no sabes lo que te espera... hacer méritos como lo de la rosa... Ronald Weasley... y en frente de mis amigos, en plena tarea!... No, cariño, no sabes lo que te espera!

-Sabes... a veces eres... de temer... – Hermione sonrió

-¿Decías en la torre de astronomía? ... mmm... No, creo que no... Me parece que los buscaremos en otro lugar – Ron pudo ver una sonrisa algo maliciosa en el rostro de Hermione antes de sentir una mano contra la suya para ser guiado a quién sabe dónde, al igual que Harry.

***

-Hasta mañana – Ginny se despidió con un beso y subió al dormitorio de las chicas. No había nadie más que ellos en la sala común, sólo se oía el crepitar del fuego de la chimenea.

Harry también subió por las escaleras, entre tanto pensaba qué decirle a Ron, pero ni una sola idea se le vino a la cabeza. Entró al cuarto confiado en que su agudo sentido de la improvisación le daría algo preciso en el momento.

-Ron, sé que podrías estar... – pero en la cama de Ron no había nadie, el silencio era interrumpido por los ronquidos de Neville, también notó que Seamos tampoco estaba en cama.

Cogió sus pijamas y empezó a cambiarse. Sonrió al pensar que Hermione, también estaría ausente en su dormitorio, pero luego dejó de sonreír. Empezaba a comprender a Ron, él también necesitaría tiempo para acostumbrarse a los nuevos tratos de sus dos mejores amigos. Recién empezaba a pensar en eso. La puerta se abrió.

-¡Al fin te encuentro! – Ron había pasado por la puerta y se acercaba lentamente a Harry. Éste le dio una mirada de arriba abajo.

-Si, claro, supongo que estuviste buscándome – Harry señaló un lugar en el pecho de Ron, y éste enrojeció.

-El botón de esta camisa ha estado flojo últimamente

-Ajá...

Ron también empezó a cambiarse, se dio la vuelta cuando notó que Harry lo miraba cerca al cuello. Pronto, Harry también empezó a tocarse el cuello, algo preocupado, hubiera querido tener un espejo, pero por si las dudas, también se dio la vuelta y terminó de cambiarse, antes que Ron pudiera verlo.

No habían vuelto a cruzar palabra hasta después de estar en sus camas. Ron fue el primero en hablar.

-Bien... puedes decirme que demonios estuvieron haciendo

-Em... nosotros...

-No, creo que no quiero saberlo... ¿dónde fueron?

-Em...

-No... creo que tampoco quiero saberlo... ¿qué le hiciste a mi hermana?!

-Ron... creo que la pregunta aquí es... ¿qué me hizo ella a mí?

Ron abrió la boca para decir algo, pero ningún ruido salió. Se abrió la puerta nuevamente, y entró Seamus.

-Lo mismo que Lavender a mí, supongo... lo mismo que todas las chicas nos hacen a nosotros! ¿Acaso creen que nos tienen dominados?

Nadie pudo responder esta pregunta. Reinó el silencio unos segundos, luego vieron que su amigo entraba en su cama y cerraba las cortinas.

-Bien, Harry... sólo te digo una cosa: no estoy celoso. Como ya te dije, simpatizas bastante en mi familia, y nadie tendrá algún inconveniente en tu relación con mi hermana. Pero no debes pasarte de listo, en eso te estaré vigilando, y no por celos, como ya hemos acordado.

-Uh-hum... – Harry estaba por dormirse

-Pero en caso que esté equivocado y quizás sí sean celos, lo cual no es probable, ya me desquitaré de ti, y empezaré por adelantado, por si las dudas... Disfrutaré mucho el ver tu rostro cuando por el pasillo mencionen tu nombre... o aún mejor... cuando Colin revele las fotos...

Harry abrió los ojos rápidamente "¿Fotos?" volteó a ver a Ron, y tratar de ver en sus ojos si estaba bromeando. El pelirrojo tenía una sonrisa, que por desgracia a Harry le resultaba tremendamente familiar, cuando a los gemelos se les ocurría una de las suyas. Supo en seguida que no estaba bromeando. ¿Y si sobornaba a Colin con echarle alguna maldición antes que revele las fotos? ¿O mejor aún, si se la echaba sin previo aviso? Sin duda aquella noche no podría pegar los ojos, Harry tenía mucho en qué pensar. Días difíciles estaban por llegar... "Bueno, quizás enfrentarme contra Voldemort no sea tan malo después de esto... ¿En qué lío me he metido?.... ¡Ginny!".

***

FINITE INCANTATEM

***

N/A: HOLAS!!!.... mmm... creo que demoré más de lo planeado... en fin... tuve una recaída ^^U ...

Bueno, sólo quería decirles: GRACIAS!!!! han sido resuperlindos, gracias por leer este fic, por los reviews, por su amistad más que nada (aunque hace tiempo que no me encuentro con alguno por msn ¬¬)... Oh well... no me gusta este final, pero qué le hacemos, tendría que hacerlos esperar más y, también, me da flojeritis escribirlo otra vez (además que no se me ocurre otra cosa ¡_¡ - me estoy secandooo!!!)

También otra cosilla... no era mi intención mostrar a Hermione como 'scarlet woman' n_n ... simplemente se me ocurrió darle ese toque 'seductor' (ajá mi mente puede ser un poco loca, a veces) mientras Ron poseía un lado romántico – recuerdan la rosa? (Ron Románticoooo???? w.t.f?) ... y pues creo que un poco de snogging no le hace daño a nadie ;P ..... en cuanto a los chicos... no, ellos no están dominados, claro que no.... están sometidos!!! (carga mi mochila, apúrate, esclavo – oops, esa era de Ivonne ;D)

Cuídenseeeee!!!! Los quiero un montón, estudien (al menos hagan la finta), pórtense bien, vayan a misa ... me ausentaré un tiempo pero no crean que se librarán de mí! Hierba mala nunca, NUNCA, muere! XD