Hola!!! Aquí va por fin el tercer capitulo de esta historia jejejjee perdón ahora si que ya no se ni donde esconder la cara, si que ha esta un poco tarde la continuación, la verdad es que tuve muchas cosas que hacer y la inspiración nomás no se hacia presente, pero por fin ya hoy les traigo el siguiente capi jejeje, y espero que les guste! Si no, háganmelo saber, que así es como mejoran las historias!

Aquí va:

Lo que ya quedó atrás.
Snake

Capítulo 3

Tan frio como el Hielo, pero tan dèbil a tu Calor.

El frío de la noche se intensifica a medida que pasan las horas. La lluvia ha cesado pero la acera aún resiente un poco de aquella, y yo también. Las familias seguramente duermen placidamente en sus casas a estas horas, mientras yo..... yo vago por las calles sin rumbo desde hace ya mucho tiempo. Aún después de tanto tiempo de no tenerla, de no sentirla junto a mi, aún la añoro, la extraño más que nunca. Su partida dejó un gran vacío en mi vida que nunca nadie podrá llenar......

Hermione se había quedado prendida a mis pensamientos desde aquella noche; me inquietaba la sola idea de que la volvería a ver, que iba a tenerla cerca de nuevo. Me provocaba una debilidad muy grande su cuerpo, su sensualidad y me intrigaba su persona; eso no me lo podía permitir de ninguna manera y no habría un punto y seguido. Por otro lado, no pude evitar pensar que la chica no había sido tan casta y conservadora como yo creía que lo sería, a fin de cuentas, había pasado la noche conmigo; sin mencionar que tampoco fui el primer hombre en su vida.....¿acaso ese Krum......?, ¡¿pero en que estaba pensando?!, ¿qué creía, que se iba a quedar pura y casta para toda la vida?, ¿porque me enfurecía tanto el hecho de pensar que ya había sido de otro, que otro la habían tocado y disfrutado como yo antes?. Precisamente me volvió a la mente aquella pregunta que me hizo Hermione camino a su casa, ¿qué había significado aquello para mi, solo una aventura pasajera, o tal vez algo más de lo que yo no me había percatado?, no lo sabía, o mas bien no lo quería saber, lo único en lo que quería pensar era en la llegada del sábado que ya tan próxima estaba.

Mi padre me notó distraído aquella tarde de jueves, me hablaba de tantas cosas acerca de sus negocios ilícitos y de esto y de aquello, que yo no pude evitar hacer a un lado nuestra conversación y continuar con mis peleas internas.

-¿Draco?, ¿me estás escuchando?- la voz reprímente e impetuosa de mi padre
me hizo dirigirme a él bruscamente- ¿En que diablos estás pensando?. -Lo...lo siento padre, estaba distraído, ¿qué me decías?- no acostumbraba
pedirle disculpas a nadie pero frente a mi padre era distinto.
-Me molesta tu actitud inmadura hijo, ¿cuándo vas a tomar las cosas
enserio?. -Padre, padre, pero si yo tomo las cosas en serio- contesté yo con el tono más monótono que encontré- lo que sucede es que tú le das mucha importancia
a las cosas que no la necesitan, ¿porque no sales, te diviertes con mi madre y dejas un rato tu oficina y los papeles?, hay que pasarla bien, de vez en cuando- claro, esto lo decía yo, que acostumbraba "pasármela bien"
siempre, hasta llegar a convertirlo en un estilo de vida. -Nada de eso, crees que porque tu estas todo el tiempo en la calle ...- a
esto le siguió una gran reprimenda sobre
mi manera de vivir que sinceramente a mi ya me tenía cansado escuchar.

Es un placer ver que algunas cosas nunca cambian, mi padre siempre diciendo que es lo que tengo que hacer con mi vida y yo como siempre continuando evadiendo las responsabilidades que implicaba ser un Malfoy.

Se suponía que los negocios de la familia tenía que llevarlos yo en algún futuro no muy lejano. Aunque eso era algo que a mi no me atraía del todo, era mi destino, y yo lo aceptaba resignado ya que después de todo no tenía una mejor inversión que ser un Malfoy. Me ocupaba de varios negocios de mi padre ya, pero seguía teniendo una vida"liberal" por asignarle algùn nombre, y mi padre siendo una persona a la que le gusta guardar las apariencias ante la gente, quería que sentara cabeza y escogiera de una vez por todas a una esposa, lo cual como estarán suponiendo yo no estaba de acuerdo a consentirle.

Los días pasaron como si hubieran sido años para mi, espere el sábado con una ansiedad que no había sentido desde aquella vez en que me presente ante el señor tenebroso por primera vez. Aquel suceso fue algo que marco mi vida al igual que mi destinol, mi padre me había estado preparando para aquello casi desde que tenía uso de razón y era algo que había asimilado, algo de lo que estaba convencido. La manera de pensar de Voldemort me parecía demasiado ideal, lógica y la adopté con facilidad. Después de ella todo fue diferente, le dio un cambio radical a mi vida.

Aquella mañana de sábado me levante alrededor del medio día, con una compañera a mi lado. Era una chica de tez banca, cabello obscuro y lacio. La habìa conocido hace dos noches en una cena que organizò mi padre en la mansiòn Malfoy. Aquella noche yo continuaba contrariado por el hecho de haber tenido que ver con la antigua Gryffindor, pero el hecho de descubrirme pensando en aquel proximo encuentro de nuevo, me produjo una reacciòn repulsiva hacia mis pensamientos involuntarios. Justamente en ese momento me sacò de mi ensimismamiento una voz dulce preguntando por un lugar libre a mi lado.

-Espero que no te moleste.

En ese momento yo no estaba con animos de tener una aventura con nadie, aunque se tratase de una joven y bella chica. Pero una vez màs me encontre RECHAZANDO a una buena noche deplacer POR OTRA MUJER.......

-Por supuesto que no me molesta la precensia de una linda joven como tu,
adelante.

Y se sentò a mi lado muy cerca de mi.

Una cosa llevò a la otra, y antes de que terminara la noche ya estaba con ella en una de las habitaciones. Otra tipica relaciòn que no me dejò nada màs que aquel inmenso vacìo que ya desde antes sentìa en mi vida.

Pues bien, con la intenciòn de olvidar mis problemas existenciales, seguì frecuentando a Dafne despues de aquel dìa. La invitè a mi casa la noche del viernes y ella como es de imaginar aceptò encantada, sorprendida de que yo la hubiera llamado de nuevo despues de que se me hubo entregado la noche anterior. La pasamos bien, tengo que aceptar que fue una buena compañera de cama, pero el recuerdo de aquella noche de pasiòn con Granger no me dejaba soltarme completamente y a pesar de todo, no me pude despegar de aquellos pensamientos. Cuando la vi ahi, dormida en mi cama, me di cuenta de que no lo habìa logrado. A pasar de haberlo intentado, no podìa borrar de mi cabeza que precisamente ese mismo dìa, la verìa de nuevo. ¿Cómo reaccionarìa?, ciertamente llegue a la concusiòn de que la manera en que actuo Hermione, habìa sido solo producto del momento. Tal vez se habìa dejado llevar por el hecho de que yo le confesase que no me sentìa satisfecho con la vida que llevaba, que me sentìa vaciò, o quizas fue que se sintiò identificada con nuestra situaciòn de falsedad ante la sociedad. No lo sè, pero definitivamente no creìa que ella fuera a ser la misma, y no sabìa porque. ¿Y si ya se habìa arrepentido de verme?, ¿Y si........UN MOMENTO pero si YO soy el que las deja a ellas, ELLAS son las que deben de estar angustiadas por si me voy a percetar en su precensia, si las quiero seguir tratando, no yo. ¿Entonces porque sentia esa angustia que no me dejaba en paz?. Tenìa que dejar de pensar en aquello, yo no era de esa forma, no me iba a dejar dominar por una mujer y eso lo tenìa muy presente, un Malfoy debe de ser como debe de ser, y tiene que mantener su apellido en alto cueste lo que cueste, asì que me dispuse a despertar a Dafne.

-¿Qué sucede Draco?- replicò la chica en tono adormilado mientras la
agitaba para que despertase.
-Tienes que irte.
-¿Pero porque?, todavìa podemos pasarla muy bien juntos, ¿oes que acaso
tienes algo importante que hacer?, yo lo entenderìa.
-He dicho que te vayas, quiero estar solo.

Mi mirò desconsertada por un momento, pero no lo pensò dos veces despues de ver mi rostro firme, para vestirse, tomar sus cosas e irse de ahí. Sin embargo antes de cruzar la puerta de entrada se dirigiò a mi con unas ùltimas palabras.

-Si me necesitas, tu ya sabes donde encontrarme- y saliò de ahì.

Estaba decidido, iba a ir a esa cita y la enfrentarìa con todo el caractèr Malfoy que poseìa. La tratarìa como otra chica màs del montòn, que si me ponìa a pensar mas seriamente, ella no era nada diferente a las otras que habìa tenido en mi cama.

La tarde era càlida, la brisa suave revolvìa mi cabello plateado y me daba un aspecto rebelde que mi rostro serio y firme desmentìan por completo. Parado frente a la entrada del Callejon Diangon, me percate de que habìa llegado a lo sumo con una hora de anticipaciòn del tiempo acordado. Mirè a mi alrededor y me dispuse a dar un paseo por este mientras esperaba. No me perturbè por este factor, el hecho de que hubiera llegado temprano, no era señal de ansiedad, sino todo lo contrariò. Querìa tener la ventaja de estudiar la situaciòn, de pensar con la cabeza frìa y asì porder dominar a esta.

Caminè por el ampliò pasillo y me tope con la tienda "Artìculos de Calidad para el juego del Quidditch" y decidì darle un vistazo, ya que el cumpleaños de uno de mis mejores amigos del colegio, Blaise Zabini estaba pròximo, y pensaba obsequiarle un juego de pelotas para jugar al Quidditch. Entrè al local y me dirigì al estante de libros; acostumbraba leer mucho acerca del Quidditch, era mi deporte favorito desde que era un niño y siempre que tenìa oportunidad, aprendìa una nueva estratègia de juego mediante los libros que hablaban sobre este. Tenìa en mis manos uno de estos libros, cuando de pronto creí escuchar una voz familiar que entraba por la puerta del local. Me girè y encontre ni màs ni menos que a la persona que menos me esperaba ese mismo día precisamente.

Harry Potter.

Lo acompañaba, como era de esperarse, su inseparable amigo Ron Weasley. Caminaban hacia el estante donde yo me encontraba, charlando de muchas cosas a la vez. No es que me importase mucho lo que el pobretón Weasley dijera, pero lo escuché pronunciar cierto nombre, aquel que había estado en mis pensamientos desde varios días atrás.

-....Hermione esta con Ginny, fueron a una tienda de túnicas de gala que
acaban de abrir no hace mucho, ¿por?

Harry se mostró pensativo antes de contestar a la pregunta que le hacía a su amigo, y yo aproveché para esconderme detrás del estante más cercano que encontré, de modo que no pudieran verme.

-No lo sé Ron, ha estado un poco rara ¿no crees?, como distante todo el
tiempo, ¿Qué le sucederá?

Yo comencé a intrigarme ante aquel asunto relacionado con la Gryffindor, ¿Qué sería lo que la tenía tan distraída? No pude evitar pensar que tal vez era debido al encuentro que habíamos tenido hace algunos días, y una sonrisa maliciosa asomó por mi rostro. ¿Entonces no era solo yo quien había estado pensado en aquello? Súbitamente me asalto la idea de que la chica le hubiese contado a alguien lo que había sucedido entre nosotros. Es cierto que había sido ella misma la que había propuesto que no comentáramos nada de esta situación, pero y si lo había hecho?, tal vez se lo había contado a la hermana de Weasley, en el colegio siempre que no andaba con sus dos amigos, se le veía con Ginny Weasley. ¿Acaso se lo había dicho a la pelirroja? La idea de pensar que muy probablemente estuvieron burlándose de mi por lo que yo le había comentado a Hermione me hirvió la sangre. Nunca debí de haber sido tan franco con ella acerca de mis sentimientos, y de la forma en que me sentía con respecto a mi forma de ser; nunca debí haberme mostrado vulnerable ante aquella chica que solo tuve una noche a mi lado. Eso nunca me había sucedido, mucho menos con, como yo las llamaba "mis conquistas nocturnas".

-Tal vez tengas razón, hoy no la he escuchado reprenderme como acostumbre-
el chico se sobresalto- ¡Harry!, ¡entonces si debe ser algo muy grave!

Harry esbozo una sonrisa ante el comentario de su amigo, y a esta le siguió otra mía. Así que no había cambiando mucho que digamos en todos estos años de no verla, seguía siendo la misma niña correcta de siempre, bueno no lo fue precisamente conmigo.

Ya había escuchado suficiente, así que salí de mi escondite de la forma más natural del mundo, como si buscara un libro en aquel estante. Potter y Weasley se dirigieron hacia mi en cuanto me vieron salir. Yo los miré a la cara con mi superioridad Malfoy siempre presente.

-Pero que tenemos aquí, Potter y Weasley. Nos volvemos a encontrar ¿eh?-
dije sin reparar en lo audible que era mi voz.

Ambos me dirigieron una mirada inquisitiva, y se pusieron a la defensiva.

-Malfoy-dijo Potter.
-¡Que quieres?, ¿vienes a molestar?- dijo bruscamente Weasley. -Que yo sepa, el callejón Diagon es libre Weasley.- conteste yo- ¿pero aun
así, tu que haces aquí Weasley? No creo que el dinero te alcance para
comprar algo de esta tienda ¿o si?.

Weasley se iba a lanzar hacía a mi, pero yo era más rápido y yo ya estaba varita en mano, pero Potter lo detuvo.

-Tranquilo Ron, no vale la pena.
-Suéltame Harry, lo voy a......

Pero no pudo completar la frase porque detrás de él se escuchó la campana que anunciaba la entrada de personas en la tienda junto a una cabeza pelirroja, seguidamente mi nombre.....

-Malfoy......¿Qué diablos esta sucediendo aquí?.

N/A: espero que les haya gustado este capi ya que me tarde mucho en pensarlo, la verdad espero que no haya quedado tan mal y mil disculpas por lo corto que esta pero la verdad es que quería que terminara ahí. Nos vemos ahora si en el próximo capitulo que espero que no tarde mucho!!! Inspiración no me abandones!!! Si les gusto déjenme un review, o también con sus criticas y comentarios, o si lo prefieren mandenme un mail a pesesita_27@hotmail.com , sale y adiós ahora si!!!

SnAkE